19ª REUNIÓN – 1ª SESIÓN
EXTRAORDINARIA (ESPECIAL REMOTA)
febrero 11 de 2021
Presidencia de los señores
diputados Sergio Tomás Massa y Marcelo Pablo Casaretto
y de la señora diputada Cecilia Moreau
Secretarios: doctor Eduardo Cergnul y
don Rodrigo Martín Rodríguez
Prosecretarios: doña Marta Alicia Luchetta
e ingeniera Florencia Romano
Lista de asistencia
SUMARIO
1. Izamiento de la bandera
nacional. (Pág. .)
2. Himno Nacional Argentino. (Pág. .)
3. Convocatoria a sesión especial. (Pág. .)
4. Consideración
de las renuncias a sus bancas presentadas por la señora diputada Magdalena Sierra y por el señor diputado Pablo
Gerardo González. Se aceptan. (Pág. 6.)
5. Juramento e
incorporación del
señor diputado electo por el distrito de Buenos Aires don Carlos Alberto Ortega
y del señor diputado electo por el distrito de Santa Cruz don Jorge Guillermo
Verón. (Pág. .)
I. A la memoria del exdiputado nacional doctor Raúl Eduardo Baglini. (Pág. .)
II. A la memoria de Regina Pacini de Alvear. (Pág. .)
III. A
la memoria de la exdiputada nacional Ángela
Gerónima Sureda. (Pág. .)
IV. Por el 109 aniversario de la sanción de la Ley Sáenz
Peña. (Pág. .)
7. Manifestaciones formuladas por varios señores diputados.
(Pág. .)
8. Homenajes (continuación):
V.
Por los 100 años de la revuelta de La Forestal. (Pág. .)
9. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Cano.
Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
10. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Wolff.
Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
11. Cuestión de privilegio planteada por la señora diputada Parola. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
12. Cuestión de privilegio planteada por la señora diputada Frade.
Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág. .)
13. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado de
Lamadrid. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
14. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado
Moreau. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
15. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado
Soria. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
16. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado
Iglesias. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
17. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Tailhade. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
18. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Yasky. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
19. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado del
Caño. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
20. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Grande. Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
21. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Arce. Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
22. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Giordano. Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
23. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Schlereth. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
24. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Cornejo. Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
25. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Fernández
Patri. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
26. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Gutiérrez. Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
27. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Contigiani. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
28. Cuestión de privilegio planteada por la señora diputada Moisés. Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
29. Cuestión de privilegio planteada por el señor diputado Zottos. Pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales. (Pág. .)
30. Cuestión de privilegio planteada por la señora diputada Cerruti. Pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales. (Pág.
.)
31. Aclaración formuladas
por el director del Servicio Médico de la Cámara de Diputados, doctor Marcelo
Halac. (Pág. .)
32. Consideración del dictamen de las comisiones
de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas en el proyecto de ley venido en revisión
del Honorable Senado, sobre el fortalecimiento de la sostenibilidad de la deuda
pública (146-S.-2020). Orden del Día N° 356. Se sanciona definitivamente. (Pág. .)
33. Consideración del dictamen de las comisiones de
Presupuesto y Hacienda y de Defensa Nacional en el proyecto de ley del Poder
Ejecutivo, por el que se otorga por única vez un beneficio extraordinario a
los y las familiares del personal militar tripulante del submarino ARA “San
Juan” (13-P.E.-2020). Orden del Día N° 357. Se sanciona con modificaciones.
(Pág. .)
34. Consideración del dictamen de las comisiones de
Vivienda y Ordenamiento Urbano y de Presupuesto y Hacienda en el proyecto de
ley del Poder Ejecutivo, por el que se implementa un régimen de incentivo a la
Construcción Federal Argentina y de Acceso a la Vivienda (8-P.E.-2020). Orden del Día N° 358. Se sanciona. (Pág.
.)
35. Consideración del dictamen de las comisiones de Ciencia, Tecnología e
Innovación Productiva y de Presupuesto y Hacienda en los proyectos de ley del
señor diputado Riccardo y otros/as señores/as
diputados/as y de la señora diputada Bernazza y
otros/as señores/as diputados/as, sobre el financiamiento del Sistema Nacional
de Ciencia, Tecnología e Innovación (3.416-D.-2020 y 3.958-D.-2020). Orden
del Día N° 333. Se sanciona. (Pág. .)
36. Apéndice:
I. Renuncias. (Pág. )
II. Sanciones de la Honorable Cámara. (Pág. )
III. Actas de votaciones nominales números 1 a xx. (Pág. )
IV. Inserciones solicitadas por los señores diputados:
1.
Xxx (Pág. )
2.
Xxx (Pág. )
- En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a los
once días del mes de febrero de 2021, a la hora 12 y 16:
- 1 -
IZAMIENTO DE LA
BANDERA NACIONAL
Sr. Presidente (Massa).- Con la
presencia de 129 señores diputados y señoras diputadas en forma presencial y
remota, queda abierta la sesión especial conforme el requerimiento efectuado
por los diputados y las diputadas en número reglamentario. (Aplausos.)
Invito al señor diputado por el
distrito electoral de la provincia de Formosa don Mario Horacio Arce a izar la
bandera nacional en el mástil del recinto, y a los diputados a ponerse de pie.
- Puestos de pie los señores
diputados y el público presente, el señor diputado Mario Horacio Arce procede a
izar la bandera nacional en el mástil del recinto. (Aplausos.)
- 2 -
Sr. Presidente (Massa).- Invito
a los señores y señoras legisladores y al público presente a entonar las
estrofas del Himno Nacional Argentino, que será interpretado por artistas y
músicos de la provincia de Catamarca, con el auspicio del Ministerio de Cultura
y Turismo de esa provincia, a propuesta de la señora diputada nacional Silvana Ginocchio.
- Puestos de pie, los señores
diputados y el público presente entonan las estrofas del Himno Nacional
Argentino. (Aplausos.)
- 3 -
CONVOCATORIA A
SESIÓN ESPECIAL
Sr. Presidente (Massa).- Por Secretaría se
dará lectura de la resolución dispuesta por esta Presidencia convocando a la
sesión especial del día de la fecha.
Sr. Secretario (Cergnul).-
Dice así:
“Buenos Aires, 8 de
febrero de 2021.
“Visto
la presentación efectuada por el diputado Máximo Carlos Kirchner y otras
diputadas y diputados, por la que se solicita la realización de una sesión
especial para el día 11 de febrero de 2021, a las 12 horas, a fin de considerar
diversos expedientes y considerando los artículos 14, 35 y 36 del Reglamento de
la Honorable Cámara, el Presidente de la Honorable Cámara de Diputados de la
Nación resuelve:
“Artículo
1º: citar a las diputadas y a los diputados para el día 11 de febrero de 2021,
a las 12 horas, a fin de considerar los siguientes expedientes:
“1)
146-S-2020, proyecto de ley en revisión sobre fortalecimiento de la
sostenibilidad de la deuda pública.
“2)
13-P.E.-2020, proyecto de ley a fin de otorgar por única vez un beneficio
extraordinario a los y las familiares de los y las tripulantes del Submarino
A.R.A “San Juan”, importando la renuncia a todo derecho por indemnización de
daños y perjuicios y excluyente de todo
otro beneficio o indemnización por el mismo concepto.
“3)
8-P.E.-2020, proyecto de ley sobre régimen destinado a promover las inversiones
en la construcción de obras privadas nuevas realizadas en el territorio de la
República Argentina.
“4)
Orden del Día 333. Ley de financiamiento
del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (3.416-D.-2020 y
3.598-D.-2020)
“Artículo
2º: De forma.”
- 4 -
Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia informa que
obran en Secretaría las renuncias presentadas por la señora diputada nacional
Magdalena Sierra y por el señor diputado nacional Pablo Gerardo González, a
partir del 10 de febrero del corriente año.
Se
va a votar si se aceptan las renuncias de los señores diputados Magdalena Sierra
y Pablo Gerardo González.
- Resulta afirmativa.
Sr. Presidente (Massa).- Quedan aceptadas a partir
del 10 de febrero las renuncias correspondientes.[1]
- 5 -
Sr.
Presidente (Massa).- La Presidencia informa que, obrando en Secretaría
la documentación correspondiente, se procederá a tomar juramento a los
diputados que corresponde asuman en el cargo en reemplazo de los diputados
renunciantes.
Se encuentran en la antesala el señor diputado electo por
el distrito de Buenos Aires don Carlos Alberto Ortega y el señor diputado
electo por el distrito de Santa Cruz don Jorge Guillermo Verón.
Si hay asentimiento, se los invitará al estrado a prestar
juramento.
- Asentimiento.
Sr.
Presidente (Massa).- Invito al señor diputado electo por el distrito de
Buenos Aires a prestar juramento.
- Puestos de pie
los señores diputados y el público presente, y requerido por el señor
presidente el juramento de acuerdo con las fórmulas del artículo 10 del
reglamento, el señor diputado Ortega jura por la Constitución Nacional, y se
incorpora a la Honorable Cámara.
(Aplausos.)
- Al requerírsele el juramento:
Sr. Ortega.- Por Néstor y
Cristina, juro.
Sr.
Presidente (Massa).- Invito al señor diputado electo por el distrito de
Santa Cruz a prestar juramento.
- Puestos de pie
los señores diputados y el público presente, y requerido por el señor
presidente el juramento de acuerdo con las fórmulas del artículo 10 del
reglamento, el señor diputado Verón jura por Dios, la Patria y los Santos
Evangelios. (Aplausos.)
- Al requerírsele el juramento:
Sr. Verón.- Por la
memoria de mi padre, juro.
Sr.
Presidente (Massa).- Conforme a lo establecido en el acuerdo alcanzado
en la reunión de la Comisión de Labor Parlamentaria, se informa a los señores
diputados y diputadas que, previo a la consideración del temario, los puntos 4
y 5 de dicho acuerdo establecen la realización de homenajes y de veintitrés
cuestiones de privilegio solicitadas, respectivamente.
- 6 -
I
Sr.
Presidente (Massa).- Para rendir un homenaje, tiene la palabra el señor
diputado Negri, por Córdoba.
Sr.
Negri.-
Señor presidente: hoy vengo a rendir homenaje a Raúl
Baglini, quien falleció en Mendoza el pasado 3 de enero.
Su partida produjo y produce una gran tristeza en Mendoza,
así como también en muchos ámbitos del país, más allá de las ideas políticas
que representara. Hablar de él en pasado es necesariamente hablar de estas
bancas, es hablar del Congreso argentino y es hablar de un momento de la
política argentina en el que la convivencia y las diferencias tenían otras
características porque no tenían profundidades inagotables en el medio.
Raúl Baglini fue un
político de raza. Para quienes lo seguíamos, recordar sus discursos, cargados
de sentido, de estudio, de convicción y también, por qué no decirlo, de una
fina ironía que no ofendía, era como asistir a clase, aún para quienes tenían
diferencias con él. Primaba en ellos una de las características de los
recintos: el silencio por escucharse unos a otros.
Raúl, “el querido gordo”, como le decíamos nosotros, no
discriminándolo, sino amándolo, desempeñó con honor todos los cargos para los
que fue electo. Aun cuando perdió la elección a gobernador en Mendoza frente a
otro gran dirigente político, Octavio Bordón, en los primeros debates
televisivos en vez de aumentar las diferencias, lo que aumentaron fueron las
coincidencias después de la derrota.
Fue abogado, se recibió en la Universidad Nacional de
Córdoba, y además de saber mucho de economía tenía una gran capacidad ‑que
yo admiro de cualquier legislador‑: era una esponja para aprender hasta
de leyes, no sólo de economía.
Fue diputado nacional entre 1983 y 1993 y fue senador entre
2001 y 2003, momentos difíciles de la Argentina. En ambas cámaras fue
presidente de nuestro bloque y también vicepresidente de este cuerpo. Fue
presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda en tiempos en los que
cuando ganábamos nosotros, la presidía Baglini, y si ganaba el peronismo, la
presidía Lamberto o algún otro legislador de respeto y prestigio para el cargo.
Se recuerdan muchos debates en los que él participó, y que
yo particularmente sigo. Hasta poco tiempo antes de morir, he continuado
conversando con él a través de videoconferencia.
Siempre se ha tenido presente el debate por la suspensión
de las acciones judiciales, contenida en la circular 1.050, al inicio de la
democracia. Recordamos también el gran debate por la ley de presupuesto de
1985, pero lo que lo catapultó a la consideración y el reconocimiento fue el
famoso debate sobre la deuda en la Comisión Bicameral de Deuda Externa. Nos
encontrábamos en una Argentina en la que estábamos divididos y algunos decían
que querían un presidente como Alan García, pero otros no. Era otro mundo, otro
momento.
Asimismo, tuvo una activa participación en la primera ley
que se consagra sobre régimen de matrimonio civil, o sea, en la Ley de
Divorcio.
Raúl Baglini tuvo otra característica que ojalá pudiera la
política volver a tener, porque nos la debemos entre nosotros; en un tiempo
donde oficialismo y oposición viajaban juntos a los organismos multilaterales,
iban a las asambleas del BID y del Banco Mundial, iban al Fondo Monetario
Internacional para negociar, fuera quien fuera el ministro del momento, fuera
quien fuera opositor, participaban y estaban al tanto de lo que sucedía.
Cuando llegó al Senado pudo concretar uno de sus sueños,
junto con el senador Pichetto y con Lamberto ‑maestro que también era
legislador‑, que fue crear la Comisión de Presupuesto Permanente, vieja
deuda que tenía el Congreso argentino, con la que hoy cuentan los países
desarrollados.
El padre de Baglini fue un importante jurista en la
Justicia de Mendoza. El gordito tenía cuatro hijos, además de nietos. Era
profundamente católico; una persona muy creyente. Radical desde la cuna, presidió el máximo
organismo de nuestro partido: fue presidente de la Convención.
Algunos sostienen que pertenece a él; otros, que lo dijo
otro. Pero, lo cierto es que se lo vincula con el axioma del famoso teorema de Baglini: las propuestas más extremas van transformándose en
racionales a medida que quien las realiza se acerca al poder. Él mismo se
sorprendía y, a veces, cuando iba a mi despacho, me decía: todos repetimos lo
mismo, pero ninguno lo hace. En esto, la política argentina -cualquiera sea el
gobierno- está en deuda. Por supuesto, durante la presidencia de Alfonsín le
tuvo mucho cariño y lo consultaba siempre.
Recibió el premio Konex en 2008. Fue un tipo de bien y
honesto, un intelectual ávido. Si alguien quería comer en un lugar desconocido,
tenía que preguntarle a él; entonces, sin importar en qué lugar del mundo te
encontraras, te mandaba un Whatsapp para decirte dónde tenías que ir, además de
preguntar si querías comer barato o estabas en condiciones de pagar.
Era una persona que se distinguía en la mayor de las
generosidades que tienen los seres humanos: la del conocimiento. Si bien no
venía al Parlamento desde hacía muchos años, seguía las sesiones hora tras hora
en su computadora. Me decía: acordate de esto, meté aquello.
Cuando era legislador, debido a su obesidad y a diversos
problemas de salud, venía con una valija ‑como la que usamos nosotros
cuando viajamos en avión‑ cargada de carpetas. En aquella época no
existían las notebooks. Abría esas carpetas y recorría su contenido con
una gran memoria.
No quiero entretener a los señores diputados con mis recuerdos,
y lo que paso a decir no es en desmedro de ninguno de los colegas que, por su
condición humana, merecen el mejor de los homenajes cuando se van de este
mundo, lo que puede parecer una injusticia por los afectos que cada uno siente.
Baglini marcó su presencia en el Parlamento y ayudó a
elevar su nivel desde el debate. Enseñó a propios y extraños en determinadas
materias; no agravió a nadie y, aunque parecía duro, íntimamente era un tipo
profundo y amigo.
Nunca escondió su conocimiento; por el contrario, lo
desparramó. Lo compartía con quien fuera, en una actitud que debe distinguir a
quienes tienen la virtud del conocimiento.
Concluyo este homenaje diciendo que, aunque ya no fuera
parte del Congreso Nacional, sumamos su nombre al listado de históricos
legisladores de todas las bancadas.
Su paso por el Congreso fue enorme. Tras la muerte de Raúl,
alguien dijo: se fue un político necesario. No es con soberbia, pero, para mí,
se fue un político indispensable. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).-
Invito a la Honorable Cámara a pasar a un breve cuarto intermedio con
permanencia de los señores diputados en sus respectivas bancas, y solicito al
señor diputado Negri que se acerque a la Presidencia.
- Se pasa a cuarto intermedio.
- Luego de unos instantes:
II
Sr.
Presidente (Massa).- Continúa la sesión.
Para otro homenaje, tiene la palabra
el señor diputado Asseff, por Buenos Aires.
Sr.
Asseff.- Señor presidente: tengo el honor de
rendir homenaje a una gran primera dama: la señora Regina Pacini de Alvear.
El 6 de enero se cumplieron ciento
cincuenta años de su nacimiento acaecido en 1871. Hija del barítono italiano
Pietro Andrea Giorgi Pacini y de la española Felicia Quintero, Regina Isabel
Luisa nació en Lisboa durante la regencia de su padre en el Teatro San Carlos,
en la capital lusitana.
Como soprano fue una importante
exponente del bel canto de la época, como La bohéme,
I puritani, Rigoletto, Manon y Rosina,
este último personaje de El barbero de Sevilla.
Estudió en París con Mathilde
Marchesi, y debutó en 1888 como Amina en La sonámbula, de Bellini, en
Lisboa, en el teatro donde siguió cantando con gran éxito hasta 1904.
En 1889 cantó en Milán, en Palermo y
en Londres. En el Teatro Real de Madrid se presentó en 1890, nuevamente con La
sonámbula, ópera que siguió representando en ese lugar hasta 1905.
En 1893 se presenta en el Liceo de
Barcelona, y entre 1894 y 1895 hace apariciones en Varsovia y San Petersburgo.
En 1899 debuta en el Teatro Solís de Montevideo y en el Teatro Politeama de
Buenos Aires, donde conoce al futuro presidente de la República Argentina: el
doctor Marcelo Torcuato de Alvear, quien la sigue por diferentes teatros del
mundo.
En el Covent
Garden de Londres comparte repartos con Enrico Caruso.
Con el nuevo siglo, se presenta en
diferentes teatros italianos de las ciudades de Roma y Florencia, en el San
Carlo de Nápoles y en la Scala de Milán.
En 1907, en la cumbre de su carrera,
se casa con el doctor Alvear y se retira para siempre de los escenarios.
En 1938 funda la Casa del Teatro de
Buenos Aires, un asilo para actores semejante a la Casa Verdi de Milán con
cuarenta y cinco habitaciones, dos pequeños museos y la sede del Teatro Regina,
designado así en su homenaje. Además, construye el Templo de San Marcelo y la
escuela anexa. En su inauguración estuvo presente junto con el expresidente
Marcelo Torcuato de Alvear, acompañados por los actores Florencio Parravicini y
Pierina Dealessi, entre otros.
Fue una destacada primera dama entre
los años 1922 y 1928, y una referente cultural por décadas. Vivió en la época
de la Argentina ilusionada ‑expresión con la que tituló una de sus obras
un escritor, historiador y político radical de gran raigambre nacional: el
santiagueño Luis Alén Lascano‑, esa Argentina presidida por su marido,
uno de los grandes presidentes argentinos de todos los tiempos.
Aún hoy se recuerda que Alvear estuvo
asistido por un elenco ministerial de lujo. Tanto es así que de su seno
surgieron dos presidentes.
Vale que lo manifieste en este
homenaje: Alvear realizó una obra que esta generación pareciera ignorar.
Inauguró la primera fábrica de aviones del hemisferio sur y consolidó YPF,
fundada por el doctor Hipólito Yrigoyen poco antes de que asumiera la
presidencia como su sucesor, ratificando como cabeza de la empresa a uno de los
mejores administradores públicos que se recuerde: el general Enrique Mosconi. Doña
Regina estuvo a la altura, destacándose por su dignidad y su vocación de
benefactora de la cultura, que no es un adorno, sino un alimento esencial del
espíritu de un pueblo.
Años después Regina Pacini, acompañada por el presidente
doctor Arturo Frondizi, asistió a la inauguración de la sala dedicada a su
marido en el Museo de la Casa Rosada. Fue el 16 de octubre de 1958. Vivió en
Villa Regina, su residencia de Mar del Plata y en Villa Elvira, en Don
Torcuato. En 1942 enviudó, y cuando murió, a los 94 años, el 18 de septiembre
de 1965, sobrevivía con una modesta pensión nacional. Nada le quedaba de su
fortuna, repartida en obras de beneficencia.
- Ocupa la
Presidencia la señora presidenta de la Comisión de Legislación General, doña
Cecilia Moreau.
Sr.
Asseff.- Llevan su nombre una ciudad: Villa Regina, la “perla del
Valle”, allá en Río Negro, y calles de diversas localidades argentinas, incluso
en el barrio porteño de Puerto Madero.
Creo interpretar a toda la Cámara en este homenaje por el
sesquicentenario del natalicio de una gran señora que supo honrar su rango de
Primera Dama del país.
III
Sra.
Presidenta (Moreau).- Para otro homenaje, tiene la palabra la señora
diputada Reyes, por Santa Cruz.
Sra.
Reyes.-
Señor presidente: quiero homenajear a la doctora Ángela Gerónima Sureda,
docente y política de la provincia de Santa Cruz.
La doctora Sureda nació el 7 de julio de 1921 en Río
Gallegos, provincia de Santa Cruz, y falleció el 5 de febrero del corriente
año. Ángela, apodada “Billiken” desde chica por su
vocación al estudio, se destacó desde muy joven por su impronta tanto
profesional como política. Fue la primera mujer santacruceña en obtener el
título de abogada y, además, desde lo social fue partícipe de varias
instituciones, como la Asociación de Exalumnos de la Escuela N° 1; integró el
Río Gallegos Tenis Club y fue la primera directora de escuela nacida en Río
Gallegos. Formó parte de la fundación de una asociación para sostener el
colegio secundario, tiempo antes de que se creara el Colegio Nacional en la
ciudad.
Participó en la organización de la Unión Cívica Radical del
pueblo, y fue designada secretaria en 1957. Además, un año más tarde fue
elegida presidenta del Comité Río Gallegos y luego, en el año 63,
vicepresidenta del Comité provincial. Desde su creación en la década del 70,
fue presidenta del Movimiento de la Mujer Radical. Fue la primera mujer
intendenta de la ciudad de Río Gallego; fue la primera mujer en representarnos
como diputada nacional por Santa Cruz desde el año 1989, y trabajó activamente
en la Ley de Cupo Femenino junto con la diputada nacional Florentina Gómez
Miranda. Fue también la primera candidata a gobernadora de Santa Cruz,
disputando dos veces ese espacio.
Ángela Gerónima Sureda se destacó por su vocación de
servicio y su inagotable capacidad de trabajo. Su vocación y su legado nos
enfocan a seguir trabajando por cambiar el rumbo de la historia, tal como lo
intentó ella misma cuando en 1987 fue la primera candidata a gobernadora en la
provincia de Santa Cruz.
- Ocupa la Presidencia el señor
presidente de la Honorable Cámara, doctor Sergio Tomás Massa.
Sra.
Reyes.-
Como mujer, vecina, docente, militante y política santacruceña, la doctora
Ángela Gerónima Sureda se convirtió en una imprescindible referencia para
quienes ejercemos esta actividad con vocación, principios y convicción.
Me voy a permitir hacer referencia a algunas palabras que
escribió un militante y dirigente de la provincia de Santa Cruz, Pablo Strafaccio, con relación a la doctora Sureda. Él dijo: “Nos dejó su ejemplo. Nos dejó su palabra clara. Nos
dejó sus férreas ideas sin condicionamientos. Nos dejó su amor categórico por estas tierras sureñas. Nos dejó su
honestidad sin una sombra de duda. Nos dejó su rectitud sin ambigüedades. Nos dejó su inclaudicable lucha por la libertad
y el bienestar de la ciudadanía. Nos dejó su empeño en señalar el camino
a seguir para consolidar la República. Nos dejó su humildad sin falsos
oropeles. Nos dejó su desapego a los
adulones de turno. Nos dejó ante todo su impronta destructora de mitos,
nos enseñó que las mujeres sin portación de apellido, maridos gobernadores o
cupos obligatorios tienen un lugar importante en la política, nos dejó muy en
claro que no todos los políticos son iguales y que la corrupción es una
decisión individual de los sujetos, no una forma obligada de hacer política.
Nos mostró que la palabra vale y que la vorágine de los tiempos no obliga a
hacer política saltimbanqui cambiando de opinión, postura y lado por
conveniencias electorales, nos iluminó para que comprendamos que el que hace política panqueque es porque
nació panqueque.
“Nos enseñó que temprano pincha lo que tarde es espina. Nos
dejó las revelaciones que nos impiden hacernos los distraídos a la hora de
sufragar. Nos dejó tanto, pero tanto, que
finalmente no nos dejó ni ante el llamado fatal de la impiadosa parca”.
Ha sido para mí un honor recordarla y homenajearla. Vivirá
eternamente en nuestros corazones con el ejemplo y las banderas que mantuvo tan
altas.
IV
Sr.
Presidente (Massa).- Para la realización de otro homenaje, tiene la
palabra la señora diputada Matzen, por Río Negro.
Sra.
Matzen.- Señor presidente: quiero rendir un homenaje al
primer paso decisivo en la consolidación de nuestro sistema democrático. Ayer
se cumplieron 109 años desde la sanción de la ley 8.871, denominada Ley Sáenz
Peña en honor a su impulsor, el presidente, abogado y político argentino Roque
Sáenz Peña, que fue un demócrata convencido de que el sufragio secreto
aseguraría que nadie quedara afuera o impedido de votar.
Vale recordar que dicha ley significó el fin del fraude
electoral y el manejo tramposo de los padrones electorales. Aun con sus límites
ante el impedimento del voto de las mujeres, fue un notable avance hacia la democracia
en la Argentina, la realización de elecciones libres y la posibilidad de
expresión de las fuerzas políticas opositoras, impedidas hasta ese momento de
su participación por los gobiernos conservadores.
Tal fue su impacto que, en el mismo año de su sanción, en
1912, permitió que se incrementara notablemente la cantidad de electores,
pasando de un 5 a casi un 63 por ciento, y que permitiera que los
representantes del socialismo aumentaran sus bancas y, además, la posibilidad
de ganar eventos electorales al radicalismo en provincias como Santa Fe y Entre
Ríos.
En términos políticos, esta ley significó la apertura al
pluralismo, a la representación de las minorías y al llamado al voto de los
ciudadanos, haciendo trascender el concepto de representatividad de quienes nos
gobiernan.
Quizás hoy el homenaje sea más que oportuno, en tiempos
donde estamos discutiendo modificar las reglas de juego en un año electoral, pues
estamos diciendo que se va a anular una instancia, como las PASO, que es una
herramienta transparente y plural para la selección de los candidatos y las
candidatas.
Qué bien le haría a nuestro país estar discutiendo algún
método que perfeccione el sistema electoral que tenemos hoy con proyectos como
el de boleta única de papel o el de ficha limpia, que mejoraría nuestra
representatividad y la calidad de nuestra democracia.
Debemos tomar conciencia de la importancia de debatir estos
proyectos porque necesitamos avanzar y hacerle honor a esa gesta que se dio en
el siglo pasado. Fue una gran gesta
ciudadana de aquel convencido demócrata, Roque Sáenz Peña, que les permitió a
los argentinos votar y elegir libremente. De hecho, el período inaugurado el 10
de diciembre de 1983 es inédito en nuestra historia democrática.
Aquella Ley Sáenz Peña permitió, a través del carácter
secreto del sufragio, que desapareciera la corrupción basada en la compra de
libretas, en la intimidación de las mesas electorales y otro tipo de presiones
propias de épocas anteriores. Hoy sabemos, lamentablemente, que las formas de
corrupción electoral se han ido perfeccionando y buena parte de la política es
partícipe y cómplice de esa situación.
Para finalizar este homenaje, propongo entonces que tomemos
aquella lección de ciudadanía para que todos podamos hacer una reflexión de
nuestro rol como representantes de las genuinas preocupaciones del pueblo y
no de la política.
En esta línea de pensamiento, voy a cerrar este homenaje
con las palabras del presidente Sáenz Peña al momento de la promulgación de la
ley: “Quiera el país escuchar la palabra y el consejo de su primer mandatario.
Quiera el pueblo votar.” (Aplausos.)
- 7 -
Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el señor
diputado Negri, por Córdoba.
Sr. Negri.- Señor presidente: quiero decirles a los colegas,
sin que cunda ningún tipo de pánico, solamente a los efectos de traer
tranquilidad a todos, que un colega nuestro, de nuestro bloque, que tuvo COVID y
que fue dado de alta hace diez días, vino ayer, estuvo con algunos de nosotros
en una reunión a la tarde, es decir, que hemos tenido un contacto, y ahora le
ha dado positivo el test de saliva. El cuerpo médico está encargado de hacerle
otro test. Entonces, mientras esto ocurra, los colegas que estuvieron en la
reunión con él ayer vamos a trasladarnos al despacho por precaución.
Quería comunicar eso. No es ninguna otra cosa de gravedad.
No sé qué otros contactos estrechos pueden haber tenido. Seguramente habló con
el presidente de la Cámara y lo sabrá. Nosotros, en nuestra actividad
parlamentaria, el contacto que tuvimos fue durante 20 minutos ayer a la
tardecita.
Queremos traerles tranquilidad a todos. Los colegas del
interbloque que estuvimos con él ayer iremos a nuestros despachos, por lo menos
hasta tener otra noticia, y seguiremos la sesión desde ahí.
Sr. Presidente (Massa).- Hay una cuestión sanitaria
y una cuestión formal.
La cuestión formal es que, al no estar funcionando la
Comisión de Labor Parlamentaria, porque ya estamos en sesión, el cuerpo debería
autorizar a los diputados y diputadas –a quienes pido que se identifiquen por
Secretaría, para no generar pánico‑ que fueron contacto del diputado para
que se puedan conectar de manera remota.
Por lo tanto, solicito al cuerpo la autorización pertinente
para que los diputados y diputadas que han tenido contacto estrecho con ese
señor diputado, por precaución participen de la sesión de manera remota, a
pesar de que estaban dentro de los incluidos en el listado de participación
presencial.
Necesito autorización del cuerpo para que puedan loguearse.
Se va a votar.
-
Resulta afirmativa.
Sr. Presidente (Massa).- Los señores diputados y
diputadas que por Secretaría notifiquen que fueron contacto del diputado del
bloque de Juntos por el Cambio que tiene un resultado de COVID positivo pueden
participar de la sesión de manera remota.
Tiene la palabra el señor diputado Casas, por La Rioja.
Sr. Casas.- Señor presidente: indudablemente, lamentamos esta
situación que está pasando el diputado Menna.
Yo creo que esto nos tendría que llamar a la reflexión. Son
muchos kilómetros los que hacen los señores diputados y diputadas para venir a
una sesión presencial. En el caso de quien les habla y de los compañeros de la
Rioja nos hacemos el PCR tradicional, por hisopado. En el día de ayer estuvimos
con el diputado Menna. Nos saludamos y ya,
indudablemente, ‑no soy de profesión médico‑ estamos todos en una
situación de riesgo. Cuando volvemos a nuestra provincia tenemos que cargar con
esa responsabilidad.
Sería bueno introducir esta situación para que, hasta tanto
pase, lograr una autorización para que se pueda funcionar de una manera remota
a todos los diputados y diputadas.
Dejo planteada esta situación para que no incurramos en
estas cuestiones que, lamentablemente, pueden tener sus consecuencias. Deseamos
la recuperación del diputado Menna. (Aplausos).
Sr. Presidente (Massa).- Habiendo trascendido el
nombre del diputado que es COVID positivo, les pido a aquellos que tuvieron
contacto con él que se lo notifiquen, por favor, a Marcelo Halac, el director
del departamento médico de la Cámara.
Tiene la palabra el señor diputado Leiva, por Chaco.
Sr. Leiva.- Señor presidente, quiero sumarme a las expresiones
del señor diputado Casas. Es una situación que, fundamentalmente, nos toca a
los que vivimos en el interior del país.
En mi caso particular, me sometí al PCR antes de ayer y
después ayer nuevamente cuando llegué a Ezeiza por el protocolo que existe en
la Capital. Esto tiene que ver muchas veces con las cuestiones de los vuelos
que no nos coinciden con los días y las horas de las sesiones y que nos genera
un enorme inconveniente, con el riesgo que significa.
Entre otras cosas, yo no pude participar ayer de una de las
reuniones de comisión porque estaba viajando. Como tengo edad suficiente para
estar presente no pude participar, ni siquiera, de manera remota y tampoco pude
estar presente porque no me coincidían los vuelos y no tenía forma de viajar.
Son cuestiones que debemos analizar y que debemos tener
presentes, más aún con esto que está sucediendo hoy en el recinto.
Sr. Presidente (Massa).- Por tratarse de una sesión
que tiene, sobre todo, cuatro temas con un enorme nivel de consenso y de
importancia, quisiera pedirles que no polemicemos respecto del mecanismo que
utilizamos para sesionar, sino que resolvamos el problema que tenemos y sigamos
adelante porque me parece que los cuatro temas son más que importantes.
Tiene la palabra el señor diputado Manzi, por Catamarca,
salvo que le conceda una interrupción que está solicitando el señor diputado
Cano.
Sr. Manzi.- Señor presidente: sí, le concedo la interrupción.
Sr. Presidente (Massa).- Para una interrupción
tiene la palabra el señor diputado Cano, por Tucumán.
Sr. Cano.- Señor presidente: hay un equipo médico en la
Cámara, que es el que planteó el protocolo y los pasos que tenemos que dar ante
situaciones como las que se dieron, así que me parece que deberíamos dejar esto
en manos del equipo médico y nosotros abocarnos a continuar con la sesión.
Sr. Presidente (Massa).- Quiero informarle, señor
diputado, y aprovecho para informarles a todos, que cuando le pedí al diputado
Negri que se acercara, fue para comunicarle la situación y para plantearle que
encontráramos un mecanismo con el departamento médico para que les diera
tranquilidad a los diputados y permitir seguir trabajando.
Entonces, tratemos de actuar con responsabilidad y que
aquellos que fueron contacto estrecho por precaución se dirijan a su despacho
para seguir la sesión desde ahí; están autorizados por el cuerpo para
participar de manera remota, notifiquen a la Secretaría Legislativa y seguimos
adelante con nuestra tarea.
Tiene la palabra el señor diputado Manzi, por Catamarca.
Sr. Manzi.- Señor presidente: quiero dar un poco de
tranquilidad. En primer lugar, el diputado COVID positivo está dado de alta y
tiene un PCR positivo porque es un fenómeno que puede ocurrir en la
convalecencia del COVID positivo. O sea, no quiere decir que tenga
contagiosidad. Creo que por prudencia los diputados que han estado en contacto
estrecho, está bien que se retiren. Sin embargo, para que haya tenido contacto estrecho
tuvo que haber estado conversando por lo menos diez minutos sin barbijo y a
menos de un metro y medio de distancia. Por haberse saludado no hay un contacto
estrecho.
Creo que debemos tranquilizarnos. El protocolo es racional.
Como siempre, antes de las sesiones nos reunimos y consideramos estos temas;
incluso también se hizo referencia al funcionamiento de las reuniones de
comisión; aprovecho y menciono esto porque hay diputados que a veces lo
consultan. En las reuniones de comisión no se exige un resultado negativo
previo del test de PCR porque, como se hacen en el recinto o en salas amplias,
solo se requiere mantener la distancia necesaria.
Este evento, desde el punto de vista epidemiológico ‑si
me permiten esta categorización mis colegas‑ sería menor o leve. Creo que
el protocolo es correcto y no tenemos por qué exacerbar nuestros temores, que
son los mismos que tiene cualquier empleado de un supermercado o de las fuerzas
de seguridad. Incluso, diría que nuestros temores debieran ser mucho menores ya
que, en nuestro caso, a través de la Cámara se nos hace el test de PCR dentro
de las 48 horas previas a la sesión.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra el señor diputado Iglesias, por la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires.
Sr. Iglesias.- Señor
presidente: trataré de ser breve.
Estoy cansado de la instrumentalización que se hace de
estos casos. Hubo contagios antes y seguirá habiéndolos. ¿No hubo acaso
contagios entre los camioneros, que están trabajando? ¿No hubo contagios entre
las cajeras de los supermercados?
Somos diputados nacionales. Podemos decir que el primer
congreso de los representantes nacionales fue en Tucumán. En ese entonces, se
cruzaba en carreta, con caballos, como se podía. ¿Se acuerdan de Laprida,
asesinado después? ¿Se acuerdan del “íntimo cuchillo”?
La verdad es que, realmente, me da un poco de vergüenza
escuchar estos razonamientos sobre el avioncito y demás. Sé que soy de la
Capital Federal y estoy en condiciones ventajosas, pero todos tenemos que
enfrentar esta situación. Somos diputados nacionales. Venimos acá y cantamos “o
juremos con gloria morir”, pero después aparece un caso dudoso sin incidencia
alguna y surgen estos planteos.
Miren: si esta cuestión fuera sanitaria, la Cámara de
Senadores sesionaría con distanciamiento en esta Cámara, donde sobra el
espacio. Vayan a preguntarle a la vicepresidenta de la Nación por qué no
convoca a los senadores a esta Cámara.
¡Y dejen de instrumentalizar un tema sanitario! Nosotros no
podemos ser una casta privilegiada. Están laburando los camioneros; van a
trabajar los docentes; están trabajando los cajeros de los supermercados.
Muchachos: organícense, por favor, y dejen de
instrumentalizar esto para volver a las sesiones remotas.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra el señor diputado Heller, por la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires.
Sr. Heller.- Señor
presidente: en primer lugar, le pediría al diputado Iglesias que esa
recomendación de no politizar el tratamiento del tema sea para todos y todas
porque, si no, es un poco injusto. Recién acabo de escuchar una intervención
que a mí me llevaría a responder, pero, respetando su pedido, señor presidente,
no lo haré.
En segundo lugar, pedí la palabra para sugerirle a usted,
como presidente de la Cámara, que inicie las gestiones para que los diputados y
diputadas que integramos este Cuerpo seamos incluidos entre los trabajadores
esenciales y podamos acceder a las vacunas lo antes posible. De ese modo, este
tema podría tener una solución de fondo adecuada ya que, si todos los diputados
y diputadas nos vacunáramos con las dos dosis que corresponden, en un mes y
medio o cuarenta días aproximadamente todos tendríamos el problema resuelto y
la virtualidad dejaría de ser una necesidad ‑como lo es en muchos casos.
Personalmente, yo no puedo ir a la Cámara en estas
condiciones y creo que tengo las razones para hacerlo, y hay muchos colegas que
atraviesan la misma situación. Creo que si para acceder a la vacuna ‑de
forma transparente, no bajo la mesa‑
planteáramos que somos uno de los poderes del Estado que tenemos la necesidad
de funcionar y que se nos presentan estas dificultades, probablemente podríamos
tener en un plazo relativamente breve una solución integral para esta cuestión
que nos preocupa. Solo quería hacer esta propuesta.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra el diputado Wolff, por la provincia de Buenos Aires. Espero
que sea breve para contribuir a que avancemos en el desarrollo de la sesión.
Sr. Wolff.- La discusión
política tiene la finalidad de contribuir, señor presidente.
Yo le presenté una carta al presidente de la Nación. No
estoy de acuerdo con el diputado Heller. Creo que los políticos que no estamos
dentro del grupo de riesgo no debemos tener ventajas. Y, justamente, señor
presidente, el Cuerpo que usted preside ha instrumentado los mecanismos para
que, si alguno no cumple con los requisitos sanitarios o está dentro del grupo
de riesgo, esté en su casa, tal como lo está el diputado Heller.
Manifiesto entonces mi más férrea oposición a que los
políticos tengamos alguna prebenda por encima del resto de la ciudadanía. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra la diputada Moreau, por Santa Fe.
Les pido por favor que seamos breves, ya que, de por sí, la
sesión será larga.
Sra. Moreau.- Señor
presidente: cada uno se vacunará cuando le llegue el turno. En el caso de
nuestra provincia, hay una aplicación donde uno puede anotarse para recibirla.
Pedimos que se difunda la información. Al diputado Heller tal vez le toque
antes por su edad; no sé cómo es el protocolo de la ciudad.
Le pido, señor presidente, continuar con el plan de labor.
- 8 -
V
Sr. Presidente (Massa).- Tiene
la palabra para otro homenaje la diputada Patricia Mounier, por Santa Fe.
Sra. Mounier.- Señor
presidente: el 29 de enero pasado se cumplieron cien años de la histórica revuelta de La Forestal, lo que dejó una
huella en el norte de mi provincia, Santa Fe, y en la historia del movimiento
obrero.
La Forestal fue el nombre de una compañía inglesa instalada
en el territorio del Chaco santafesino que, a finales del siglo XIX y en la
primera mitad del siglo XX, explotó el quebracho colorado sistemáticamente y
llegó a ser la primera productora de tanino a nivel mundial.
Quiero recordar hoy esa gesta obrera, esa huelga promovida
por el hartazgo y la desobediencia, la precariedad de la situación social, la
mala calidad de la vivienda, las delicadas condiciones de salud e higiene y la
pobre alimentación con la que contaban los trabajadores y las trabajadoras. Las
jornadas eran de doce horas en la fábrica, con un calor agobiante, un ruido
ensordecedor y, por supuesto, magros salarios.
Quiero rescatar la figura de Teófilo Lafuente, un
electricista de La Forestal que después fue el primer secretario general del
gremio taninero, fundado en 1919 en el norte de la
provincia de Santa Fe. En la revuelta del 29 de enero de 1921, Lafuente fue
detenido y torturado.
Por supuesto, quiero recordar muy especialmente también a
las mujeres de La Forestal, absolutamente invisibilizadas: empleadas
domésticas; trabajadoras textiles; hacheras; telefonistas; empleadas de
comercio, de almacenes de ramos generales; enfermeras; cocineras y, por
supuesto, maestras. Eran las compañeras de los obreros, las que cocinaban,
criaban a los hijos y realizaban con ellos el desbaste de los troncos ‑pesadísimos,
de varias toneladas, que transportaba el cachapacero‑
sin paga alguna. Eran trabajadoras sin documentos y, en ese momento, incluso,
no podían votar.
Hoy conmemoramos esa lucha tantas veces negada e
invisibilizada. Homenajeamos a esos trabajadores y trabajadoras de los pueblos
forestales del norte de mi provincia, protagonistas de una lucha contra el
abuso empresarial y la violencia contra el medioambiente, una huelga que abrió
un largo camino por el respeto de los derechos laborales y de la vida digna,
una irreverencia que se vuelve presente para recordar que siempre sirve luchar
por los derechos. Nuestro compromiso militante es combatir la desmemoria de
las luchas obreras y seguir construyendo para luchar por más justicia
social. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- Para rendir el último de
los homenajes, tiene la palabra el señor diputado Carnaghi,
por Neuquén.
Sr. Carnaghi.- Señor presidente: ¿me
escucha?
- Se
interrumpe el audio.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado: le
propongo que apague la cámara, así tiene mejor señal.
Sr. Carnaghi.- Gracias, señor presidente.
- Se interrumpe el audio.
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado: tiene muy
mala señal de Internet y, además, su micrófono se mutea
y desmutea. Por ello le solicito que inserte su
discurso.
También pediré a la Dirección de Informática y Sistemas que
se contacte con usted.
- 9 -
Sr. Presidente (Massa).- Para una cuestión de
privilegio, tiene la palabra el señor diputado Cano, por Tucumán.
Sr. Cano.- Señor presidente: oportunamente presenté el
expediente 6.431-D.-2020, por el que se solicita la intervención del Poder
Judicial de Tucumán. Obviamente, un pedido de intervención -en este caso del
Poder Judicial de una provincia- tiene que contener fundamentaciones y
argumentos que lo sustenten. Por ello, en mi rol de diputado nacional, me
siento agraviado de que todavía no haya comenzado el tratamiento de este
proyecto.
Me referiré específicamente, señor presidente, a dos
situaciones que, obviamente, me preocupan y les preocupan a muchos ciudadanos
de mi provincia. No es casualidad lo que está ocurriendo en la provincia; no se
trata de un hecho que se produce por generación espontánea, sino que comenzó en
2003.
Cuando Ramón Ortega
fue gobernador de la provincia de Tucumán, instauró por decreto un mecanismo de
acceso a la Justicia que garantizaba la participación de las distintas
instituciones del Estado. Este sistema era similar al del Consejo de la
Magistratura.
Dicho sistema estuvo vigente hasta que en 2003 el
exgobernador Alperovich derogó ese decreto y, a
partir de entonces, consolidando el concepto del “vamos por todo” que muchas
veces su esposa explicitó y argumentó, prácticamente cooptó la mayoría del
Poder Judicial de Tucumán. Lamentablemente, eso ha tenido continuidad en la
actual gestión.
Me referiré al caso particular de quien fue cuatro veces
vicepresidente de la Cámara, intendente del Municipio de Monteros y presidente
de la Junta de Disciplina del Partido Justicialista de Tucumán. Se trata del
doctor Enrique Pedicone, actual camarista que está a
punto de ser echado impunemente del Poder Judicial de la provincia de Tucumán
por haber ejercido el rol para el cual fue designado en ese cargo: administrar
justicia en el marco de la Constitución y de las leyes.
El doctor Pedicone, en
virtud de reiterados aprietes, grabó a un vocal de la Corte que fue fiscal de
Estado en el gobierno de Manzur, pidiéndole que manejara la intensidad de una
causa que involucra al legislador Bussi, de Fuerza
Republicana, de acuerdo a cómo ese legislador jugaba en el esquema del
oficialismo. Además, le pidió que apretaran y le armaran una causa al doctor
Toledo, quien casualmente fue funcionario de Ortega y es opositor al actual
gobierno.
Esa grabación en la que el doctor Leiva pretende
apretar a un camarista tuvo como fedatario al secretario de la Cámara, el
doctor Valladares, quien después dijo que fue coaccionado para hacerlo. El
doctor Pedicone promovió una denuncia pública, pero
como en Tucumán, obviamente, aparentemente se vive en el mundo del revés, la
Comisión de Juicio Político del Poder Legislativo está por echar al magistrado.
El doctor Pedicone claramente dejó en evidencia lo
que todo el pueblo de Tucumán –o en su mayoría- sabe que ocurre en una parte
importante del Poder Judicial de la provincia.
En Tucumán no existe la independencia del Poder Judicial.
Tanto es así que uno de los denunciantes -el doctor Falú- fue abogado en la
causa de Roxana Teves, una mujer que vivía en concubinato con un hombre con
quien tenía millones de dólares, millones de pesos y plazos fijos. Los abogados
de la exmujer de Severini, el concubino de Roxana Teves, eran los hijos de
quien entonces ocupaba el cargo de ministro de Gobierno y que actualmente ocupa
el de fiscal de Estado del Poder Judicial y es también el arquitecto de la
impunidad en Tucumán.
Llevaron presos a esa mujer y a sus hijos. Los
privaron ilegítimamente de su libertad hasta que el abogado Falú -quien hoy es
funcionario designado por Manzur-, en un audio que grabó esta mujer, le hace
saber que hasta que Albarracín -el otro involucrado en esta causa- no retire la
querella, no la iban a absolver. Señor presidente: este es un hecho
realmente escandaloso.
En el caso puntual del doctor Pedicone,
la acusación se basa en argumentos falsos, sesgados y absolutamente
arbitrarios. No convocaron al secretario Valladares, quien se desdijo de
lo que él mismo había firmado, ni citaron al personal y empleados de la Cámara
para probar de qué manera fue coaccionado.
Es decir, quien denuncia a este vocal de la Corte,
que se caracteriza por apretar a jueces y fiscales –en efecto, esta no es la única causa-, hoy
está a punto de ser echado y decapitado impunemente por la Comisión de Juicio
Político, que mayormente responde al vicegobernador de la provincia, todo por
haber tenido la valentía de ejercer el rol que asumió por concurso en la
Justicia tucumana.
De ninguna manera podemos permitir que se eche a uno de los
pocos integrantes del Poder Judicial que efectivamente se opone al “vamos por
todo” y a este maridaje que existe entre el poder político y el Poder Judicial
de la provincia de Tucumán.
Repito que no me mueve una cuestión
política. Enrique Pedicone fue vicepresidente
del Poder Legislativo en cuatro oportunidades, intendente de una ciudad del
interior de mi provincia y presidente de la Junta de Disciplina del PJ.
Es lamentable, señor presidente, que esto ocurra en la provincia de Tucumán y
que el Congreso no se avoque a discutir y debatir este pedido de intervención
del Poder Judicial, habiendo razones que lo justifican absolutamente.
La contracara de esto es lo que ocurre en la provincia:
tenemos los más altos índices de homicidio y suceden hechos escandalosos de
narcotráfico que involucran a un área del Ministerio de Salud Pública –SIPROSA-
y a personas vinculadas con el poder político.
Entonces, de ninguna manera guardaremos un silencio
cómplice ni permitiremos que en la provincia se siga avanzando y pretendiendo
cercenar las últimas voces independientes que quedan en el Poder Judicial de
Tucumán.
Para terminar, señor presidente, también denunciaron a la
periodista del diario La Gaceta que
cubre lo que sucede en el ámbito del Poder Judicial, pero le
pidieron juicio político a la presidenta de la Corte, quien fue elegida por el
presidente de la Nación para formar parte de la comisión de notables que está
estudiando la reforma del Poder Judicial.
Señor presidente: esto es inadmisible. Como presidente de
la comisión pertinente y como diputado de mi provincia, pido que este cuerpo se
aboque al tratamiento del proyecto que oportunamente presenté. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).-
Quiero recordar a todos, para no tener que volver a poner en funcionamiento el
mecanismo de la campana que suena un minuto antes de que finalicen sus
exposiciones -de la que muchos se quejaron-, que deben respetar los tiempos. De
manera que les pido que sean cuidadosos con eso.
La cuestión de privilegio planteada pasa a la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
- 10 -
Sr. Presidente (Massa).- Para
una cuestión de privilegio, tiene la palabra el señor diputado Wolff, por
Buenos Aires.
Sr. Wolff.- Señor
presidente: la cuestión de privilegio que planteo es en contra del gobierno de
la provincia de Formosa.
Tres diputados de mi interbloque -el vicepresidente 1° de
la Comisión de Derechos Humanos y Garantías, Sebastián Salvador, la diputada
Frade y quien habla- asistimos la semana pasada a la ciudad de Formosa y
recibimos intimidación política y discriminación positiva de casta. Digo que
recibimos intimidación política porque, antes de ir, nos dijeron que no íbamos
a poder entrar a esa provincia.
En Formosa hay otra ley, y como pareciera que el artículo
que consagra el libre tránsito de los ciudadanos argentinos no funciona, desde
el oficialismo nos intimidaron al decirnos que no íbamos a poder hacer uso ni
de la condición del decreto que nos transforma en ciudadanos esenciales a los
diputados, ni de la inmunidad parlamentaria que establece el artículo 69 de la
Constitución Nacional.
No solo nos dijeron que sin una invitación oficial no
íbamos a poder ingresar, sino también que con el hisopado que nos hacíamos cada
uno en su jurisdicción -me refiero a un testeo oficial- tampoco íbamos a poder
entrar.
Cuando llegamos al cruce de Mansilla desde el Chaco para
ingresar a Formosa, nos pidieron que nos hiciéramos otro hisopado. Parecería
aquí que los testeos que nos hacemos los ciudadanos en el resto del país no son
válidos en Formosa, ya que hay una ley paralela. Nosotros, para no hacer un
escándalo e ir detenidos -lo que sería un escándalo internacional-, nos hicimos
otro hisopado siguiendo las leyes de Formosa, que son distintas a las del resto
del país.
Les cuento que después de intimidarnos, cuando llegamos al
hotel, la provincia nos dijo que teníamos el hotel pago, cosa que no aceptamos
y lo dejamos asentado en la ficha que llenamos, porque no queremos prebendas de
una provincia en la que hay una pobreza sistemática, y porque tampoco
correspondía.
Hablo de discriminación de castas, porque al parecer
nosotros sí podemos circular por Formosa una vez que hicimos valer nuestros
derechos. Pero el resto de los ciudadanos argentinos no puede entrar como
nosotros, salvo que sea funcionario, como Pietragalla
-a quien también le deseo un pronto restablecimiento-, el ministro Trotta o los
ministros locales, que salen y entran de la provincia. Los formoseños no pueden
hacerlo con un hisopado negativo, y son recluidos en centros en los que no hay
personal sanitario, y nosotros constatamos esto. Increíblemente, el secretario Pietragalla no pudo constatar esto. Vimos casos de gente
recluida hasta treinta y un días.
Un caso que nos da vergüenza como argentinos es el de
Zunilda Gómez, quien sufrió la pérdida de su embarazo en cautiverio. Dejaron a
sus tres chicos con la policía, se la llevaron a un hospital, y cuando volvió
la tuvieron veintiséis días recluida.
Lo que pasa en Formosa es que parece que estuviera a la
vera de la Argentina, como si la hubieran echado de la Argentina. Como tiene
límite con Paraguay, pusieron a los clorindenses en
una frontera de la Argentina. La frontera la hicieron adentro de Formosa, y a
los clorindenses los echaron a Paraguay. Hoy llevan
165 días recluidos.
Una madre, llorando, nos dejó una carta diciendo que su
hijo tiene autismo, hace seis meses que no lo trata un neurólogo infantil en la
ciudad de Formosa y ya tuvo tres intentos de suicidio.
Así que queremos denunciar la vulneración sistemática a los
derechos humanos y el avasallamiento de las libertades individuales y
colectivas en esa provincia. Además, no puede ingresar ningún tipo de prensa a
Formosa, si no es la formoseña.
El fin de semana pasado dejaron varado a un equipo en el
cruce de Mansilla. Por eso no quieren que vayamos los diputados que no somos de
Formosa, porque nosotros, con una camarita, podemos mostrar lo que allí ocurre.
De manera que quiero manifestar la discriminación positiva
de casta que sufrimos y la intimidación del gobierno de Formosa, e instar a
toda la clase política argentina a que terminemos con esta vergüenza que
significa que Formosa reciba un trato distinto al del resto de los argentinos.
También quiero decir a nuestros hermanos clorindenses, que llorando nos pidieron que volvamos, que
si en una semana no abren Clorinda -que hoy es un sitio medieval-, volveremos a
manifestarnos para que los clorindenses vuelvan a ser
tratados como argentinos y no expulsados hacia el límite con Paraguay. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- La
cuestión de privilegio se gira a la Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 11 -
Sr. Presidente (Massa).- Para
una cuestión de privilegio, tiene la palabra la señora diputada Parola, por
Formosa.
Sra. Parola.- Señor
presidente: la cuestión de privilegio que planteo es en contra de los diputados
y las diputadas del interbloque Juntos por el Cambio, en particular contra tres
de ellos, que hace unos días visitaron la ciudad de Formosa, y los dos
representantes de la oposición formoseña en esta Cámara, siempre funcionales a
los intereses foráneos.
Como formoseña y como diputada, las acciones y ataques
contra el pueblo y gobierno de Formosa por parte de dirigentes de la oposición,
tan cargados de odio, ofensivos discriminatorios y falaces, escudados en su
gran mayoría tras los fueros, y haciendo en muchos casos alarde de una
representatividad que no tienen, sin duda no solo agravian, sino que son una
falta de respeto y una ofensa a todo el pueblo formoseño.
Creo que quienes se
autodenominan paladines de la Justicia, defensores de los derechos y de la
democracia, deberían comenzar por respetar la voluntad popular y no arremeter
contra Formosa con ideas preformadas por lo que escuchan en los medios de
Buenos Aires, por la letra que les dan sus patrones o una visita relámpago,
armada, direccionada y con un claro fin electoralista.
De más está decir que, más allá de sus agraviantes
expresiones, esta visita fue un fracaso. Realmente es insólito que quienes han
sido cómplices del peor gobierno de la historia argentina -me refiero a alguien
que quiso cerrar el Congreso, que tiene cuentas en Panamá o que denuncia al
presidente porque dice que las vacunas contra el COVID-19 nos envenenan, o que
incita a consumir dióxido de cloro- crean que pueden decir lo que uno tiene que
hacer, o juzgar lo que está bien o mal; mucho menos, decir livianamente que los
formoseños y las formoseñas tenemos miedo al gobernador.
En verdad Formosa es
un pueblo esclarecido, tiene mucha historia, sabe de dónde viene, dónde está
parado y hacia dónde quiere ir. Por eso es lamentable que busquen por otros
medios lo que se les viene negando desde hace mucho tiempo en las urnas.
No obstante, porque no me quiero extender, quiero decirles
para futuras visitas y para que no vuelvan a hacer el ridículo con sus
cómplices locales, que Formosa tiene un modelo político peronista,
profundamente humanista y cristiano, y que ha sido contundentemente ratificado
cada vez que fue puesto en consideración. Y, mal que les pese a algunos, está
conducido por Gildo Insfrán.
En Formosa la salud no es solo la ausencia de enfermedad o
una cuestión médica, sino que tenemos la concepción de un Estado de bienestar
bio-psico-espiritual y social de la persona. Por eso esta pandemia nos ha
encontrado con un sistema de salud pública integrado y fortalecido, que nos ha
permitido hacer frente al embate del COVID-19 y lograr que al día de hoy la
provincia tenga, por ejemplo, el mayor promedio de testeos realizados por caso
positivo, con un total de 94.892 al día de hoy, y la menor cantidad de
fallecidos. Lamentablemente, 15 comprovincianos perdieron la lucha contra el
COVID-19.
Tenemos una letalidad del 1,24 por ciento; 1.100 formoseños
recuperados del COVID-19, todos con atención íntegra y gratuita en el sistema
de salud pública provincial, que atiende absolutamente a todos los pacientes
diagnosticados en centros públicos y privados.
Esto se realiza en centros de atención sanitaria y en un
hospital de complejidad integrada monovalente, que ha sido destinado
exclusivamente a la atención de pacientes con COVID-19. Además, se realiza el
seguimiento de aquellos que tienen internación domiciliaria.
Testigos de ello son los más de 25.000 formoseños y
formoseñas que cumplieron las cuarentenas sanitarias en los centros de
alojamiento que tanto critica la oposición y las más de 17.000 personas que
ingresaron de la provincia. Está más que claro que el éxito de las medidas
adoptadas no sería tal si no se contara con el apoyo del pueblo.
Quiero destacar, por supuesto, a los más de 500 voluntarios
y voluntarias que colaboran a diario en la defensa de la salud y la vida.
Todo esto refleja a las claras el éxito rotundo e
incuestionable de las políticas estrictamente sanitarias, aplicadas en
salvaguarda de la salud y de la vida de los 640.000 formoseños. Por supuesto que se trata de medidas excepcionales,
porque una situación de pandemia es excepcional.
No se puede tapar el sol con un dedo, señor presidente.
Fueron a buscar violencia, odio, resentimiento y se encontraron con que ese
modelo, al que tanto criticaron durante varios años, evidentemente funciona.
Todo ello sin olvidar que venimos de una pandemia que azotó a la Argentina
durante cuatro años, me refiero a la pandemia macrista.
Los paladines del contagio que quieren escuchar que
colapsan los sistemas de salud, que la gente se muere y sufre, no lo van a
conseguir. En Formosa hay una comunidad organizada, un concepto que, por
supuesto, para algunos es desconocido, ya que viven del individualismo y del
egoísmo. Pero como usted sabe, señor presidente, una comunidad organizada no
pacta con la adversidad, sino que la vence.
Señor presidente: no es la primera vez que exijo respeto
por parte de la oposición para el pueblo de Formosa. Amamos nuestra tierra, la
defendemos y no estamos dispuestos a tolerar ningún tipo de atropello fundado
en mentiras e intereses que responden a la derecha oligarca y odiadora de la
Argentina.
Alguien dijo alguna vez que la esencia de la extrema
derecha siempre ha sido la mentira, el odio y la muerte; las acciones de la
oposición lo demuestran. Todo lo demás puede variar, pero estos tres puntos son
siempre el centro de su acción política. Ellos seguirán haciendo campaña
electoral en plena pandemia, pero nosotros, como pueblo unido, organizado y
solidario, junto al gobernador, seguiremos trabajando para cuidar la salud y
salvar la vida de los formoseños. (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Massa).- La cuestión de privilegio se gira a la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
- 12 -
Sr.
Presidente (Massa).- Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra
la señora diputada Mónica Frade, por Buenos Aires.
Sra.
Frade.-
Señor presidente: no voy a hablar como “odiadora”. Me hubiera gustado que la
diputada preopinante estuviera hablando acá y no en la casa, porque pareciera
que goza de muy buena salud, pero no importa.
Los diputados que hemos ido a Formosa lo hicimos previo a
una invitación que cursamos a los integrantes de la Comisión de Derechos
Humanos de esta Cámara, presidida por el oficialismo, y de la cual no hemos
obtenido ninguna respuesta. En realidad, no queríamos ir solos, justamente,
porque no era una aventura electoralista ni una expedición “odiadora”.
Por el contrario, quisimos ser responsables y verificar si
lo que se venía diciendo en los medios de comunicación era cierto o no. Eso es
lo que hace un diputado responsable, sobre todo si preside una Comisión de
Derechos Humanos, en un año donde en la provincia de Formosa hubo 8.000
personas durante ocho meses en la ruta, esperando un fallo de la Corte Suprema
para volver a sus casas.
No está en discusión la supresión -no la violación- de
derechos humanos en Formosa porque así lo expresó el senador Mayans, quien dijo: “En pandemia no hay derechos”. No me lo
desacrediten porque es un senador del oficialismo y, efectivamente, en Formosa,
en pandemia no hay derechos.
No voy a discutir con la soberbia de alguien que cree que
Formosa es un país aparte y que Gildo Insfrán es
Napoleón, porque me parece que caería en el ridículo si contestara. Gildo Insfrán tiene un sistema por el cual, de modo sistemático,
no solo ha sometido al empobrecimiento de todos los formoseños, sino que los ha
hecho dependientes; y ahora está sembrando un sistema de terror, donde la gente
cree que el hisopado es sinónimo de detención. Hoy hay un sistema de 1.200
detenidos ilegales en Formosa a los que ellos llaman “aislados”.
Señor presidente: vine a este recinto con dolor en el
cuerpo y en el alma. Voy a hablarles a los jóvenes de esta Cámara, no a los
diputados viejos que ya están corruptos, ya no les importa nada, son
insensibles. Voy a hablarles a los jóvenes porque estoy segura de que dentro
del oficialismo hay muchos jóvenes que hubieran querido venir con nosotros, que
están pensando y quieren sentir el dolor que sentimos nosotros en Formosa, pero
no lo pueden hacer.
Voy a decirles a esos valientes jóvenes, que tienen la
camiseta de los derechos humanos puesta, que no se dejen llevar por una
dirigencia que los está llevando para cualquier lado, porque cuando entregan la
dignidad y el compromiso por los derechos humanos no vuelven de eso. En todos
los sectores políticos de esta Cámara hay valores y yo quiero que despertemos y
acompañemos juntos al pueblo sufriente de Formosa.
Clorinda lleva 160 días aislada. ¿Alguno de ustedes
resistiría eso? ¿Resistirían no poder trabajar, no poder salir o no poder
atenderse en los sistemas de salud o interrumpir tratamientos oncológicos? ¡Hay
mamás de chicos con TEA que han debido suspender por un año los tratamientos!
¿Alguno o alguna de las mamás o papás que están acá aceptarían que hisopen a su
hijo de dos o tres años? Gildo Insfrán los hisopa.
No voy a decir lo que pienso de Gildo Insfrán.
Seguramente va a ganar la próxima elección, pero ello no significa que no sea
un dictador. Es un dictador y viola y suprime los derechos humanos. Este
interbloque va a seguir viajando a Tucumán y a todas las provincias porque
vamos a estar al lado de los que sufren y de todos aquellos a los que les están
privando sus derechos.
Hay un montón de Úrsulas en
Formosa. ¡Chicas, reaccionen! Hay mujeres en Formosa a las que les están
hisopando a sus hijos de dos años. Saquen esos carteles y vengan a Formosa.
Pronto vamos a hacer un viaje; yo las invito para que veamos juntas lo que
estamos viendo; comprométanse.
Señor presidente: el 14 de abril Pietragalla
hizo una presentación como amicus curiae, defendiendo a Boduou
y a Milagro Salas porque decía que el cautiverio de ellos era tortuoso; ahora
va a Formosa y no ve nada. ¿Saben qué? Pietragalla es
un infame encubridor que tiene que renunciar ya. (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Massa).- La cuestión de privilegio se gira a la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
- 13 -
Sr.
Presidente (Massa).- Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra
el diputado Álvaro de Lamadrid, por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr.
de Lamadrid.- Señor presidente: la cuestión de privilegio que vengo a
plantear al cuerpo es contra usted.
Es una cuestión...
- Varios señores diputados hablan a la vez.
Sr.
Presidente (Massa).- Silencio, por favor, que está hablando otro
diputado.
Sr.
de Lamadrid.- La cuestión de privilegio es contra usted, señor
presidente, y tiene que ver con un pedido de informes que realicé, acompañado
de otros colegas diputados, por la grave denuncia pública que le hizo Julio De
Vido.
Se trata de una denuncia pública contra usted, señor
presidente, que, a mi modo de ver, más allá de que la haya pasado por alto,
porque pasan muchas cosas en la Argentina y cada noticia es más tremenda y
trágica que la otra, tiene una gravedad institucional inusitada. Digo esto
porque De Vido no es un condenado cualquiera y porque usted es el presidente de
la Cámara, por lo que considero que la imputación que le hace De Vido no debió
dejarla pasar.
Usted tiene, no la necesidad, sino la obligación de
explicar esta cuestión. Por eso le he pedido que lo haga a través de un pedido
de informes. No lo hice para que se lo explique a este diputado o a los demás
integrantes del cuerpo, sino para que se lo explique a la sociedad argentina.
Usted debería haberse presentado en la Justicia y exigirle
a De Vido que dé sus explicaciones o que se rectifique. No estoy pidiendo ni
siquiera que un fiscal de oficio haga su trabajo, porque sabemos que la
Justicia trabaja muy incómoda en la Argentina.
Señor presidente: De Vido lo acusó de tráfico de
influencias y de coimas; es muy grave el contenido de la denuncia. Las peleas
internas del poder desnudan episodios de corrupción lacerantes que se dan en el
seno del gobierno. Hablo de pingües negocios que se llevan a cabo desde el
poder.
Los argentinos saben que esto ha pasado antes en el tiempo,
como con Antonini Wilson; allí no se trató de una buena empleada, sino de que
alguien quería que se supiera lo que estaba pasando y colaboró desde el poder
en esa guerra sucia de negocios para que se supiera.
Pasó también con La Rosadita, con José Francisco López, con
las incriminaciones que a la vicepresidenta le hicieron los propios, como
Baratta y Manzanares, y con Fabián Gutiérrez, asesinado como consecuencia de
las valijas de Cristina.
De Vido no es una persona cualquiera...
- Varios señores
diputados hablan a la vez.
Sr. de Lamadrid.- Fue ministro de Kirchner….
-
Varios señores diputados hablan a la
vez.
Sr.
Presidente (Massa).- La Presidencia solicita que guarden silencio.
Está haciendo uso de la palabra un diputado.
Continúa
en el uso de la palabra el señor diputado de Lamadrid.
Sr. de
Lamadrid.- Señor presidente: entiendo que no les gusta lo
que planteo, pero es lo que está pasando. No quieran tapar el sol con la mano.
- Varios señores
diputados hablan a la vez.
Sr. Presidente (Massa).- Por
favor, diputada Moreau.
Continúe, señor diputado.
Sr. de Lamadrid.- Les hablo a
los argentinos que escuchan. Esto ocurrió también con la expropiación de YPF,
que tiene el mismo antecedente.
Las acciones de esa compañía fueron transferidas al Grupo
Petersen, luego al fondo Burford, quien inició un
juicio millonario contra la Argentina. Se le pagaron 5.000 millones de dólares
por el 51 por ciento de la empresa y hoy vale 1.927 millones.
¿Cómo puede ser que Mindlin, en Edenor, venda tan barato?
La acción valía 60 dólares y hoy vale 4,15. ¿Cómo puede ser? Pero hay un hecho
de mayor gravedad, señor presidente. Usted hizo modificaciones en el artículo
87 del presupuesto nacional y le permitió a la empresa Edenor que la deuda que
tiene con Cammesa la pague negociándola con el secretario de Energía, que se
pueda licuar y que tenga un tratamiento especial.
Mire, señor presidente, De Vido hace una grave acusación
referida al grupo que compró Edenor, Vila, Manzano y Filiberti,
este último proveedor de cloro de AySA y vinculado a Lingieri,
sindicalista de AySA. Usted tiene que
explicar esto porque es de suma gravedad. Hemos presentado un pedido de
informes junto a ocho colegas diputados y creo que la sociedad argentina merece
que esto se explique.
Señor presidente: se lo ha acusado de una intermediación
indebida para favorecer a un consorcio que pudo comprar una empresa en 100
millones de dólares cuando valía más de 1.200 millones, que ha tenido un
tratamiento especial y a quien se le giraron desde el Tesoro nacional 3.143
millones de pesos días antes de la operatoria.
Son muchos los datos. Hay muchos antecedentes. Es grave la
denuncia, es grave quien la formula y usted ocupa un cargo institucional de
importancia total en el país y, por ello, debe dar esta explicación. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- La
cuestión se gira a la Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 14 -
Sr.
Presidente (Massa).- Para una cuestión de
privilegio tiene la palabra el señor diputado Leopoldo Moreau, por Buenos
Aires.
Sr. Moreau.- Señor
presidente: voy a plantear una cuestión de privilegio sobreviniente al debate,
razón por la cual no estaba planteada de antemano en la Comisión de Labor
Parlamentaria.
La misma tiene que ver con que recién una diputada, al
hacer su presentación, dijo que en esta Cámara de Diputados había legisladores
corruptos. En ese sentido, pido que se relea la versión taquigráfica.
Es una acusación de carácter genérico muy grave, formulada
contra colegas de todos los bloques, porque ni siquiera especificó a quién se
refería. Sinceramente, no recuerdo que en esta Cámara de Diputados se haya
hecho una afirmación de esta naturaleza y gravedad, lo que demuestra una enorme
irresponsabilidad. Sobre todo, cuando proviene de una diputada que es una falsa
denunciante, según quedó demostrado hace pocos días atrás.
Por ello me parece que el bloque oficialista debería
corregir estas conductas. En primer lugar, porque es obvio que así no se puede
mantener ningún nivel de convivencia. No hay ninguna posibilidad de convivir si
se sospecha de los colegas con los cuales se trabaja cotidianamente en la
Cámara de Diputados.
Pero lo peor del caso es que ni siquiera tuvo la valentía
de especificar a quién se refería. Con lo cual, en una actitud claramente antipolítica y de desmedro de la política, ha dejado a todo
el cuerpo sospechado frente a la opinión pública.
Ese es un acto de cobardía personal e intelectual. Si
alguien de esta Cámara de Diputados tiene que formular una acusación a otro
colega debe hacerlo dando la cara y no generalizando.
Así se ha ido degradando el sistema político argentino. Así
han ido perdiendo elecciones. Es el primer gobierno que no ha podido reelegir
presidente, a pesar de que hicieron de esta metodología de la denuncia un chiquero,
algo en lo que no hay memoria en la historia política de la Argentina.
Sin embargo, insisten en esa tarea de demolición que no les
ha servido absolutamente para nada. Simplemente, ha valido para que crezcan
grupos marginales al estilo de lo que sucedió en el Capitolio, porque acá hay
diputados que parecen los locos del Capitolio.
Sin embargo, estamos en una Cámara que debe ser responsable
y respetar las figuras institucionales, como la vicepresidenta de la Nación.
Entonces, vincularla a un episodio de homicidio simple que está siendo
investigado y que prácticamente ya ha sido esclarecido por la Justicia es otra
canallada que no les va a dar rédito político. Por eso, este año, otra vez, el
pueblo argentino, les va a dar la espalda. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- La
cuestión de privilegio pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 15 -
Sr.
Presidente (Massa).- Para una cuestión de
privilegio tiene la palabra el señor diputado Martín Soria, por Río Negro.
Sr. Soria.- Señor
presidente: vengo a plantear una cuestión de privilegio contra algunos
personajes e integrantes del Poder Judicial, haciéndome eco de las
declaraciones que hacía el diputado preopinante en cuanto a la degradación del
sistema político argentino.
Lo hago en los términos del artículo 127, inciso 6, de
nuestro reglamento y en virtud de los hechos que son de público y notorio
conocimiento en las últimas semanas y que han dejado en evidencia los ataques a
la independencia del Poder Judicial durante los cuatro años del gobierno
anterior. Es la falta de independencia por la que aún hoy pagamos sus
consecuencias y sus secuelas.
Esta situación se remonta a diciembre del 2015, cuando de
un plumazo frenaron la implementación del nuevo Código Procesal Penal para
impedir, claramente, la vigencia de principios constitucionales elementales y
así pavimentar el camino a “Comodoro PRO”.
Al mismo tiempo que frenaban la implementación de ese
Código Procesal Penal que habían avalado y aprobado, nombraban a jueces de la
Corte Suprema de Justicia por decreto. También, al mismo tiempo, cómo
olvidarlo, trasladaban jueces de un lugar a otro, sin acuerdo del Senado y
violando la Constitución Nacional.
Pero no alcanzaba con todo eso. También espiaban a los
políticos, a los sindicalistas, al periodismo, a los presos y hasta a sus
propios familiares. También apretaban a los jueces y a los fiscales.
En ese sentido, les quiero decir que ya han declarado más
de cinco jueces en la investigación que iniciamos con nuestros diputados y
diputadas en la Justicia y que se conoce como la Mesa Judicial M.
Nunca, desde el retorno de la democracia en 1983, tantos
magistrados y funcionarios judiciales se presentaron a testificar los aprietes,
el hostigamiento, las visitas que recibían en sus despachos y las operaciones
de prensa a sus familias cuando no dictaban el fallo que querían para poner en
la tapa de los diarios.
Esa era la trituradora de carne que implementaron para
crear esa agenda semanal de noticias judiciales sobre la política para enchastrar a todo el que se opusiera y, al mismo tiempo,
distraer a la opinión pública y todos los argentinos, mientras nos endeudaban
más de lo que lo habían hecho Videla y Martínez de Hoz.
En la causa están los mails del “pibe de oro”, Marquitos Peña,
convocando a las máximas figuras del gobierno anterior a reuniones en la Casa
Rosada cada quince días. Pero, por cierto, nadie dice nada.
Ahí está también la inmaculada
abanderada de la
República y las
instituciones, Lilita Carrió que, en conferencia de prensa por TN, confiesa
cómo funcionaba la Mesa Judicial de Macri y cómo manipulaban a la Justicia.
Pero nadie dice nada.
Ahora salen a la luz los registros de las visitas
a la Casa
Rosada. Se trata de registros públicos donde dejaron pegado los dedos.
Ahí está el escandaloso caso del juez Gustavo Hornos, ahora
presidente de la Cámara Federal de Casación Penal, quien no fue una, dos o tres,
sino más de seis veces al despacho de presidente Macri en la Casa Rosada. Fue
seis veces al despacho presidencial.
Todas las visitas tuvieron una gran particularidad: el juez nunca
cumplió con la obligación de solicitar la audiencia oficial en forma previa, y
en todos los casos, sin excepción, inmediatamente después de que ese magistrado
entró al despacho del presidente, hubo fallos de alto voltaje político.
Obviamente, esos
fallos se convertían rápidamente en las tapas de Clarín y La Nación;
así convirtieron la Casa Rosada en la sede judicial del lawfare
y el despacho del presidente en la agencia del Grupo Clarín y La Nación.
Pero el modus operandi no se limitaba a los jueces.
Ahí está el registro también del fallo del fiscal Stornelli,
y las reuniones con los gerentes de Clarín y La Nación. Inmediatamente después
hubo fallos que salían en las tapas de los diarios para amedrentar, hostigar y
perseguir.
Transformaron la Casa Rosada en la sede oficial del lawfare; pero se equivocaron y pensaron que el
Estado era como sus empresas, que podían hacer cualquier cosa y que no se iban
a ir, pero perdieron y se fueron. Además, claro, nos dejaron un Poder Judicial
totalmente partidizado.
Todo esto sería una triste anécdota si no fuera porque esos
jueces que entraban y salían como panchos por sus casas de la Casa Rosada
siguen hoy en sus cargos. Estos personajes hoy siguen en el Poder Judicial, un
poder rancio, corrompido y sin rastros de independencia e imparcialidad.
Pero que nadie se equivoque o se confunda: el lawfare en la Argentina perdió su sede en la
Casa Rosada, pero sigue más vivo que nunca en algunos despachos del Poder
Judicial, de la Corte Suprema o de “Comodoro PRO”.
Por eso, señor presidente, propongo a mis colegas de este
recinto que, desde nuestro lugar, como legisladores nacionales, trabajemos para
devolver al Poder Judicial la independencia que hoy está perdida por culpa de
algunos irresponsables y de un lawfare al
palo.
- Ocupa la
Presidencia la señora presidenta de la Comisión de Legislación General, doña
Cecilia Moreau.
Sr. Soria.- Hemos
denunciado la mesa judicial en la Justicia, como corresponde, y lo hemos hecho
también ante el Consejo de la Magistratura, pero necesitamos trabajar juntos,
como nos pidió el presidente Alberto Fernández, para que nunca más en la
Argentina haya una Justicia que actúe según los vientos políticos de turno.
No quiero un juez
que dicte un fallo en una causa contra algunos de ustedes y que ese mismo juez
haya estado en el despacho de un presidente, o de nuestro presidente, porque
ahí se afecta la independencia, la imparcialidad y la democracia.
Nunca más el lawfare en la Argentina; es el compromiso que
dejó nuestro presidente el día de su asunción, y es por lo que tenemos que
trabajar.
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión de privilegio pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 16 -
Sra. Presidenta (Moreau).- Para
una cuestión de privilegio, tiene la palabra el señor diputado Iglesias, por la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Iglesias.- Señora
presidenta: es raro que hablen de lawfare los
miembros de un partido que desde 1983 controla el Senado. Porque todos los
jueces que han sido designados pasaron por el filtro del Partido Justicialista,
compañeros. Cuatro de cinco miembros de
la Corte Suprema de Justicia fueron designados por gobiernos peronistas,
compañeros. Diez de doce de los de Comodoro Py los designó el Partido
Justicialista, compañeros. Así que, si quieren hacer limpieza en la Justicia,
nosotros estamos de acuerdo. Empecemos. (Aplausos.)
Es raro que algunos se acuerden de que Macri es el primer
presidente no reelegido. Tiene razón el diputado preopinante. Es también el primero que termina el mandato
desde 1928. ¿Saben cuáles no lo terminaron, señor diputado Moreau? Yrigoyen, Frondizi, Illia, Alfonsín y de la
Rúa, todos de su partido. Usted formó
parte de dos de esos gobiernos; debería acordarse, diputado preopinante.
Hablamos del chiquero de denuncias, y voy a la cuestión de
privilegio. Voy a hacer algo contrario…
Sr. Moreau.- Usted...
- Varios señores
diputados hablan a la vez.
Sr. Iglesias.- Yo estuve en
la Plaza desde 1981 y a vos no te vi. Desde 1981. Están las fotos en la SIDE. ¡Pedíselas a Tailhade!
Hablaron de chiquero de denuncias. Me aconsejaron no hablar
de esto, pero lo voy a hacer: tengo 63 años y es la primera vez que voy a tener
que ir a un Tribunal a defenderme, y eso me llena de pena. Pero me llena de
orgullo hacerlo por un canalla, que es el del chiquero de denuncias, y en
cierta forma estoy contento porque me sentía discriminado, pues ya había
denunciado a casi todo nuestro bloque por cosas insólitas, y ahora viene y me
denuncia a mí.
¿Qué hizo este señor, el diputado Tailhade,
que no lo veo por acá? Estuvo dos semanas dando vueltas por los medios amigos
haciendo un show mediático y diciendo que “son todos iguales, son todos
chorros”.
Como no pueden decir que son inocentes, ahora dice que son
todos ladrones. Miente, miente que algo
queda. Estuvo dos semanas y básicamente habló de un 1.300 por ciento de
incremento de patrimonio y de la propiedad de un fastuoso loft
en un edificio de Barracas, perteneciente a Macri. Después resultó que el loft no estaba en Barracas, sino en La Boca,
que no era propiedad de Macri y que no tenía 300 metros cuadrados. Yo no tengo
ninguna propiedad en ese edificio y lo voy a probar.
Me acaban de decir
que el fiscal Di Lello le manda muchos saludos. Avanza la investigación, me
parece bien, y estoy a disposición y me voy a presentar con todo. Me gustaría
ver la denuncia, ya que avanzan con las imputaciones.
Curiosamente, este fastuoso loft
desapareció de la denuncia. Estuvo en todos lados, en los tuits, en C5N y
en toda la cadena de medios. En la
denuncia no está, ¡qué raro! También
habló de 1.300 por ciento o 1.600 por ciento de incremento del patrimonio.
En la denuncia, de acuerdo con lo que reflejan los medios
K, porque yo todavía no la pude ver, se habla de un incremento de 3.750.000
pesos, que, en 2018, aplicada la inflación de los años 2018 y 2019, se
transforman en 8.516.000 pesos. La diferencia con mi patrimonio neto es de
1.500.000 pesos, es decir, digámoslo bien claro, 10.000 dólares en dos
años. El 1.300 por ciento denunciado en
todos los canales de televisión desapareció, ya no existe más; lo que se me
imputa es un incremento de alrededor de 50.000 pesos por mes, y soy un diputado
que tiene ingresos por alquiler de tres propiedades, que publica en la
Argentina y en todos los medios internacionales y que recibe ingresos por
conferencias. Es ridículo. Este diputado ha publicado uno de los best sellers de
este año y varios otros.
Cuando Tailhade habla de “450.000
pesos que le prestó Majul y que le pagó cuando entró
Macri”, está hablando de derechos de autor, y 450.000 pesos de 2015 ‑que
es lo que dice Tailhade‑, al cambio mentiroso
del gobierno de ustedes de 10 por 1, son 45.000 dólares, y al cambio paralelo,
30.000 dólares. Se me imputa un patrimonio total de alrededor de 10 millones,
que al cambio mentiroso de ahora son alrededor de 80.000 o 90.000 dólares. Es una vergüenza y una ridiculez.
Primero me quiero dirigir a los diputados que no forman parte
del oficialismo, porque vienen por nosotros, pero después van a ir por ustedes.
Así que piensen con quiénes se alían, a quién le dan quórum y con quiénes
votan. A los demás les pregunto: ¿qué les pasó, muchachos? ¿En qué se han
convertido? Porque arrancaron hablando de derechos humanos y ahora bancan al
dictador Gildo Insfrán ‑repito, al dictador
Gildo Insfrán‑ y a las operaciones de los
servicios de la SIDE, disfrazados acá de diputados. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión de privilegio pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 17 -
Sra. Presidenta (Moreau).- Para
una cuestión de privilegio, tiene la palabra el señor diputado Tailhade, por Buenos Aires.
Sr. Tailhade.- Señora
presidenta: planteo una cuestión de privilegio contra el diputado Fernando
Iglesias. No tiene nada que ver con su
enriquecimiento o con la causa penal; esa es una cuestión que tiene que
arreglar con el fiscal que lo imputó.
Tampoco tiene que
ver con que ha trabajado cuarenta y cinco años en el sector privado, como viene
diciendo por los medios de comunicación, cuando resulta que el departamento de
cien metros cuadrados se lo compró en 2019, cuando era diputado nacional del
macrismo, y no con los cuarenta y cinco años de trabajo del sector privado.
Todo eso lo voy a dejar de lado porque la cuestión de
privilegio tiene que ver con algo contra él, que nos involucra a todos los
diputados. El diputado Iglesias ha puesto en crisis la legitimidad del
ejercicio de nuestro cargo, porque ha incurrido en un claro abuso de las
prerrogativas que tenemos como diputados nacionales.
Nos afecta a todos
en un momento en que tenemos que ser ejemplo y referencia para la sociedad
argentina. Durante 2018 y 2019 nuestra ciudad se empobreció rotundamente fruto de
una enorme crisis económica y social generada por el gobierno más inútil de la
historia.
Sin embargo, a los argentinos les iba muy mal y durante
2018 y 2019 el diputado Iglesias viajó por todo el mundo a costa del Estado
argentino. Todos nosotros le pagamos los viajes al señor diputado Iglesias para
que visite distintos lugares en el mundo.
En esos informes de gestión presentados, que son bastante
grotescos, no aparece ninguna consideración respecto de estos viajes. Estos
viajes que estoy cuestionando ponen en duda o en crisis la legitimidad de
nuestro ejercicio.
Concretamente, fueron con motivo de los congresos que
organizaba el Consejo Federalista Mundial -una entidad aparentemente
internacional- cuyo presidente es el diputado Fernando Iglesias desde hace
varios años. Es decir, este señor se autoinvitaba a sus propios congresos.
La entidad que él presidía organizaba congresos que
pagábamos todos los argentinos. Yo no encontré ningún informe, salvo una foto
de Japón. De los otros viajes no encontré ningún elemento que me permita a mí
afirmar que, efectivamente, existieron estos congresos.
Son tres viajes
sobre los que estoy planteando la cuestión de privilegio. Uno es del 22 al 28
de febrero del año 2018 a Nueva York. Los viáticos que le pagó la Cámara de
Diputados fueron por un monto de 1.416 dólares. En el mes de febrero del 2019,
entre los días 21 a 27, también a Nueva York y por cinco días. Se le otorgaron
1.770 dólares y, finalmente, del 20 de mayo al 3 de junio, viajó a Brasilia,
primero, y luego varios días a Japón, y en esa oportunidad se le liquidaron
viáticos por 3.890 dólares.
En estos tres viajes
estamos hablando de un total de 7.076 dólares, es decir, más de un millón de
pesos en concepto de viáticos. Este monto fue destinado a este señor para que
recorriera el mundo vaya a saber para qué.
Por eso pido que,
desde la Presidencia de la Cámara, o a través de las instancias que
correspondan, se investigue en profundidad estos viajes. Estoy absolutamente
seguro de que acá hubo un fraude a la Cámara de Diputados. En su momento, el
presidente de la Cámara, Emilio Monzó, fue engañado pues otorgó habilitación,
autorización y viáticos para viajes que tendrían que haber sido costeados por
la propia entidad que preside Iglesias y no por el Estado argentino.
Esto pone en crisis nuestra representatividad, el ejercicio
de nuestro cargo y nos pone en un dilema frente a la sociedad. Estoy seguro de
que la inmensa mayoría de los diputados no hemos viajado a ningún lado a costa
del Estado argentino. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- Le
pido al señor diputado Iglesias que no grite.
Las cuestiones de privilegio no se discuten. Van a ser giradas a la
Comisión de Asuntos Constitucionales. Igualmente, si usted quiere hablar lo voy
a poner al final de la lista de oradores para poder continuar con el debate.
Tiene la palabra el señor diputado Salvador, por Buenos
Aires.
- Varios señores
diputados hablan a la vez.
Sr. Salvador.- Señora
presidenta: el diputado Iglesias fue aludido, yo le cedo mi lugar y después de
él hablo yo.
Sra. Presidenta (Moreau).- La
lista de oradores fue establecida en la Comisión de Labor Parlamentaria. Las
cuestiones de privilegio no se votan en el recinto ni se discuten. Se giran automáticamente a la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
Como voy a seguir con la lista de oradores, después lo
incluyo al señor diputado Iglesias. No ha sido aludido, sino que se le hizo
concretamente una cuestión de privilegio que debe debatirse en la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
-
Varios señores diputados hablan a la vez.
Sra. Presidenta (Moreau).-
Estaba anotado el bloque del Frente de Todos en ese listado, señor diputado
Cano.
Le voy a dar la palabra al señor diputado Salvador y luego
al señor diputado Iglesias.
Señor diputado Cano: el diputado Iglesias no necesita que
usted lo defienda. Va a tener la palabra cuando le corresponda.
Sr. Salvador.- Señora presidenta: en primer lugar escuché
algunas afirmaciones de…
Sra. Presidenta (Moreau).-
Señor diputado Moreau: está en uso de la palabra el señor diputado Salvador.
- Varios señores
diputados hablan a la vez.
Sra. Presidenta (Moreau).- Le
pido al señor diputado Grande que no sea irrespetuoso. Soy una legisladora
igual que usted, electa por el pueblo. No sea irrespetuoso. Está en uso de la
palabra el señor diputado Salvador y le pido al resto de los diputados que
hagan silencio.
- Varios señores
diputados hablan a la vez.
Sr. Salvador.- Vengo a
plantear una cuestión de privilegio al verme afectado como miembro de la
Comisión de Derechos Humanos.
El 27 de enero hemos presentado una nota en mi condición de
vicepresidente a los efectos de que se constituya esta comisión en Formosa. Así
lo permite el artículo 106 del reglamento. No hemos tenido ninguna respuesta.
En estos momentos de pandemia y en el marco de una cuarentena en la que han
ocurrido muchos hechos de violencia institucional, de abusos y de violaciones
de los derechos humanos nos parece que los miembros del Congreso tienen que
estar despiertos permanentemente, dando una respuesta.
No podemos mirar para otro lado, como se está haciendo.
Esto va de la mano con lo que viene ocurriendo desde el año pasado, cuando
hemos presentado infinidad de pedidos de informes relacionados a los derechos
humanos y de citaciones al secretario Pietragalla,
para que venga a contar lo que está haciendo desde la secretaría.
Realmente, no vemos
que se haya hecho alguna acción, porque se repiten los mismos casos en muchas
provincias de la República Argentina. Como dijimos, en esos lugares hay muertos,
violaciones y abusos. En algunas provincias, como en Formosa, vemos un Estado
policial y, ante la falta de respuesta y aval que le da el gobierno nacional a
todas estas cuestiones que están pasando en Formosa -con las declaraciones del
senador Mayans-, decidimos con dos diputados de la
Comisión de Derechos Humanos y Garantías y de la Comisión de Libertad de
Expresión ir a la ciudad de Formosa y constatar todo lo que estaba pasando.
Fuimos a constatar lo que ya sabíamos porque hay gente que
se animó a hablar y perdió el miedo. Se lo digo a la señora diputada de Formosa
que dice que los formoseños no tienen miedo. Por supuesto que lo están
perdiendo y eso es muy bueno.
Tampoco el voto popular convalida a que se cometan delitos
-como está ocurriendo en Formosa- de violación de derechos humanos. Esto no lo
decimos nosotros. Lo afirmaron organismos internacionales como Amnistía
Internacional y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que también
está pidiendo informes de lo que pasa en Formosa.
Es realmente tremendo lo que se vivió
en Formosa. Es muy fuerte todo lo que se trasladó aquí por parte de periodistas
independientes, por la gente que se animó a hablar, por los diputados de esa
provincia, por todos ellos, que están haciendo un gran esfuerzo para
visibilizar lo que sucede.
Invito a la comisión a constituirse en
Formosa, y si la comisión no quiere ir, que vayan otros diputados para que
sientan en carne propia lo que están viviendo los formoseños.
Para no ser reiterativo y
no extenderme, voy a dividir en cuatro ejes lo que vimos. Por un lado,
está el caso de Clorinda, una ciudad que prácticamente corrieron del mapa de
Formosa. Desde allí la gente no puede ir a la capital de la provincia, que
tiene un sistema de salud más robusto, para atenderse de un reuma o por un
cáncer.
Por otra parte, la
comunidad aborigen –con algunos de cuyos integrantes estuvimos reunidos‑
está permanentemente siendo pisoteada en Formosa.
Asimismo, está el caso de
los varados, que vivieron las situaciones más emblemáticas, como por ejemplo
quien quiso cruzar a nado para encontrarse con su familia y terminó
falleciendo. También estuvimos con una chica que tenía a su marido con
cáncer en el Chaco y quería volver a Formosa, pero jamás pudo regresar a su
provincia para estar con su familia y murió en el Chaco. No solo eso,
sino que ‑algo que parece hasta un chiste de mal gusto‑ le llegó el
permiso de acceso a la provincia para su marido después de cuatro meses de
haber fallecido.
Todas esas cuestiones las vimos
en Formosa, además, por supuesto, de la gente que está dentro de estos ‑entre
comillas‑ centros sanitarios, porque de sanitarios no tienen nada.
Es un régimen carcelario: la gente tiene que pedir permiso por Whatsapp para ir al baño, han mezclado personas a las que
les dio positivo el test de COVID-19 con otras a las que les dio negativo, han
llevado a familias enteras por la noche, como si fueran delincuentes, han
generado trastornos no solo psicológicos, sino también físicos a muchos chicos.
Por eso no podemos convalidar
que el gobierno nacional vaya a hacer una puesta en escena con Pietragalla defendiendo a un compañero de militancia, más
que cumpliendo su rol institucional. Eso no está a la altura de las
circunstancias.
¿Cómo puede ser que el
jefe de Gabinete, desde acá, muy tranquilo, en Buenos Aires, partidice la cuestión de los derechos humanos y diga que
son los pioneros en ese tema? Eso hace a la dignidad de las personas y no
tenía por qué partidizarlo.
En ese sentido, les
contestamos que no solo no son los pioneros de los derechos humanos, sino que
además fueron de ese partido los que acompañaron la autoamnistía en 1983, los
que no integraron la Conadep, los que fueron parte
del indulto en los 90 y los que tuvieron a Milani
hasta último momento en el gobierno kirchnerista.
Entonces, no nos vamos a
quedar callados y convalidar todo lo que hace el gobierno en materia de
derechos humanos. Seguiremos peleando por los formoseños y por la
eliminación de los atropellos que existen en todas las provincias.
Por todo eso, queremos que
funcione esta comisión tan sensible e importante, que es la de Derechos Humanos
y Garantías.
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión de privilegio planteada pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales.
- 18 -
Sra. Presidenta
(Moreau).- Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra el señor diputado Yasky, por Buenos
Aires.
Sr. Yasky.- Señora
presidenta: estamos hablando de Formosa, una provincia que hasta hace muy poco
era inviable para los economistas neoliberales, aquellos que orientan las ideas
de quienes conforman el bloque que representa a los grandes empresarios
argentinos. Me refiero, en primer lugar, a Mauricio Macri, pero también a todos
los que forman parte de esa casta dominante.
Ellos tenían un proyecto ‑que se publicó
en los diarios La Nación y Clarín‑ que pretendía regionalizar
el país y eliminar a varias provincias que no estaban en condiciones de
sostener a sus legislaturas o de tener jueces, en fin, que no estaban en
condición de existir por sí mismas.
Esta es la razón por la
cual respeto lo que hoy significa la provincia de Formosa y la decisión del
pueblo formoseño. Acá, en Buenos Aires, desde una supuesta posición de
supremacía cultural, no me creo con derecho de dictaminar y decir que es un
pueblo ignorante que acepta sumiso las condiciones de un dictador.
Dictador le llamaba también esta derecha a Juan Domingo Perón y a muchos
líderes de América Latina que fueron perseguidos por la CIA y por las embajadas
yanquis, donde muchas veces conviven varios de los que vienen aquí a hacer
denuncias y donde reciben claramente la agenda de las cosas que tienen que
decir.
Cuando enviaron la carta a
la Comisión de Derechos Humanos y Garantías ya estaban en plena campaña por lo
menos con catorce tapas del diario Clarín
y doce tapas del diario La Nación,
que inspiraban el contenido de esa campaña electoral.
Hay que resaltar que
Formosa es la provincia donde esta pandemia ha cobrado el menor número de
víctimas de todo el territorio nacional. Es una provincia pobre, rodeada de
pobreza, que limita con otro país que tiene profundas carencias y que, sin
embargo, ha logrado revertir esta pandemia.
De manera tal que si
queremos discutir en serio la violencia institucional ‑lo digo como
presidente de la Comisión de Derechos Humanos y Garantías- y terminar realmente
con la lacra de las fuerzas de seguridad, que generalmente reprimen a los
jóvenes, a los morochos, a las mujeres y a quienes reclaman en las calles por
los derechos sociales, les ofrecemos acompañar el proyecto de ley contra la
violencia institucional que acabamos de presentar. (Aplausos.)
Queremos ir al fondo de la
cuestión, y no que se tome esto como una chicana política o como parte del lodo
en que pretenden que nos metamos todos los que formamos parte de este
Parlamento. (Aplausos.)
Hay que resolver los
problemas profundos de este país. Nosotros no pedimos ir a la provincia de
Jujuy, donde todavía hay militantes sociales presos desde hace más de cinco
años. (Aplausos.)
No queremos tomar los temas
como chicanas; no queremos un “toma y daca”: te tiro esto y agarro lo otro.
Discutamos en serio de qué forma salimos adelante en este país que dejaron con
hambre y en manos de los fugadores seriales.
¡Campeones mundiales de la fuga de capitales! ¡Campeones mundiales de los
paraísos fiscales! ¡Hambre! ¡Eso es lo que dejaron en la Argentina!
Sin embargo, hablan con
tal soberbia como si realmente representasen los intereses del pueblo
argentino. ¡Representan los intereses de una casta dominante, responsable del lawfare y de ataques coordinados con la CIA,
para hacer creer que los líderes populares como Cristina Kirchner, Evo Morales
y todo el resto de los líderes populares de América Latina son simplemente
delincuentes comunes! ¡No es así!
Destaco la vigencia de los
derechos humanos y de la justicia social, el respeto a la vida y, sobre todo,
que no se mienta. No mentir, como lo hacen quienes dicen que la vacuna es
veneno; no mentir, como cuando dicen que el cuidado de la salud es cautiverio.
No mentir, como lo hacen queriendo confundir a la opinión pública
diciendo que este es un gobierno que no respeta los derechos humanos.
Por eso reivindico a
Horacio Pietragalla y al pueblo de Formosa.
Reivindico a su gobierno y al menor número de víctimas de la pandemia.
Reivindico a la Comisión de Derechos Humanos y Garantías, que este año supera
en cinco veces la cantidad de reuniones que tuvimos durante el gobierno del
macrismo. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión de privilegio planteada pasa a la Comisión de Asuntos
Constitucionales.
- 19 -
Sra. Presidenta
(Moreau).- Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra el señor diputado
del Caño, por Buenos Aires.
Sr. del Caño.‑
Señora presidenta: estos son días de dolor y bronca por el brutal femicidio de
Úrsula, una joven de la localidad de Rojas, en la provincia de Buenos Aires.
Una enorme indignación recorre el país, que acompaña a su familia, sus amigas,
sus amigos y vecinos que se movilizaron, como millones de mujeres que están hartas
de la violencia machista. Creo que en este aberrante hecho queda más que claro
lo que muchas organizaciones de mujeres plantean y denuncian hace tiempo: que
el Estado es responsable.
El Estado es responsable, señora presidenta, porque Úrsula
hizo todo lo que dicen que hay que hacer; hizo múltiples denuncias, pero no
fueron escuchadas. Martínez, el femicida de Úrsula,
tenía muchas denuncias de otras mujeres ‑cerca de cuarenta en total‑
y, sin embargo, en la comisaría de Rojas se lo protegió y encubrió. Por eso el
Estado es responsable. La misma policía encubridora ‑la Bonaerense‑
reprimió a la familia, amigas y amigos de Úrsula que se movilizaron. El Estado es responsable porque la Justicia
también es cómplice.
Ayer veía realmente un escándalo: un acto del gobernador de
la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, junto a Sergio Berni, donde se
entregaron patrulleros y equipamiento para las fuerzas represivas, y allí el
ministro de Seguridad hizo uso de sus arengas militares felicitando a la fuerza,
pero no dijo ni una palabra, no sólo del femicida que
la integra, sino de que esa fuerza había encubierto a Martínez.
Señora presidenta: ayer participé de un acto convocado por
distintas organizaciones de mujeres, donde hablaron compañeras que fueron parte
de la toma de Guernica. Ellas decían: “Nosotras sabemos en carne propia lo que
significa que el Estado es responsable, porque muchas de las personas que
estábamos allí reclamando por tierra y vivienda éramos mujeres víctimas de
violencia machista y estábamos allí reclamando un techo y tierra para nuestras
hijas y para nuestros hijos”. ¿Y cómo respondió el Estado? Pasándole la
topadora en una represión con Berni a la cabeza. Esa es la respuesta del Estado
frente a las mujeres que reclaman y que son víctimas de violencia de género.
Señora presidenta: llevamos la lamentable cifra de 44
femicidios en apenas 42 días de este año. Fíjese que CORREPI publicó un dato
tremendo: no solamente esa cantidad de femicidios, sino que el 20 por ciento ‑uno
de cada cinco‑ son perpetrados por miembros de las distintas policías y
fuerzas de seguridad, que son premiadas y protegidas en muchísimos casos.
Hace poco más de un mes, en Mendoza, fue asesinada una
chica de 14 años, Florencia Romano. Se conoció el audio de una llamada al 911
que alertaba sobre el hecho de violencia, pero fue desestimada. Cuando se
conoció ese audio generó una enorme bronca.
¿Saben qué dijo el jefe de la policía de ese distrito,
donde gobierna Cambiemos, que he visto que ahora muchos salen a hablar? El jefe
de la policía dijo: “En realidad, la forma de que se terminen estos hechos es
que haya más diálogo dentro de la familia”. ¿Y qué dijo Berni frente al
femicidio de Úrsula? “No entiendo por qué se la agarran con la policía, si la
policía no tuvo nada que ver”. Entonces, ¿por qué fueron todas las pibas y los
pibes amigos de Úrsula, que fueron reprimidos por la policía ‑una casi
pierde un ojo‑, a protestar a la comisaría? ¡Pero nos toma el pelo!
Permanentemente tenemos funcionarios que están bancados por
los gobiernos, puestos en esos cargos, que reproducen la violencia machista y
que protegen a los miembros de las fuerzas y las exculpan de toda
responsabilidad.
Para ir finalizando quiero decir que, en el año 2015, con
mi compañera Miriam Bregman presentamos un proyecto
de emergencia para combatir la violencia machista, que plantea medidas mínimas,
urgentes y elementales. Sabemos que no es la solución definitiva, pero son
medidas que podrían combatir la violencia machista y evitar los femicidios. Sin
embargo, nunca se trató, ni con un gobierno ni con otros que fueron pasando.
¿Por qué? Porque se hacen muchos discursos, pero se destina cero recursos. No
quieren poner un centavo. En la provincia de Buenos Aires hay un refugio cada
150.000 mujeres; en otras regiones es aún peor.
Úrsula estaba en una lista de espera para que le dieran un
botón antipánico. Realmente no quieren poner ni un centavo. Entonces, es mucho
discurso, pero a la hora de la realidad no se hacen cargo de poner todos los
recursos necesarios.
Quiero decir también que ha quedado absolutamente claro ‑no
como dijo el presidente Alberto Fernández‑ que no se terminó el
patriarcado, que existe en todos los ámbitos y tiene que ver con un régimen
político de conjunto, no solamente con un gobierno u otro. Se trata de todos
los gobiernos y de un régimen político que sostiene una orientación social de
explotación y opresión de género y de todo tipo.
Por eso, cuando decimos que capitalismo y patriarcado van
de la mano significa eso. Nosotros vamos a acompañar cada una de las
convocatorias a los actos que realicen las víctimas de violencia de género, los
familiares, las organizaciones de mujeres, como lo hemos hecho siempre, para
exigir justicia por Úrsula y por todas las víctimas...
Sra.
Presidenta (Moreau).- Señor diputado: le pido que vaya redondeando su
discurso.
Sr.
del Caño.- ...y que se tomen medidas concretas. Por supuesto, nuestra única
confianza está en los movimientos de lucha de las mujeres, que de manera
independiente tienen que imponer estas medidas para combatir la violencia
machista y que no haya ni una menos.
Sra.
Presidenta (Moreau).- La cuestión de privilegio pasa a la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
Quedan trece pedidos de palabra para plantear cuestiones de
privilegio. Les voy a pedir por favor respeto por el tiempo porque todavía no
entramos en el tratamiento del temario y se encuentran presentes en las
inmediaciones familiares de los tripulantes del ARA “San Juan”, que están
esperando que podamos discutir ese proyecto. De modo que pido que se respete el
tiempo sin necesidad de tener que poner la chicharra y que así podamos avanzar.
- 20 -
Sra.
Presidenta (Moreau).- Para una cuestión de privilegio tiene la palabra
el señor diputado Grande, por Salta.
Sr.
Grande.- Señora presidenta: vengo a plantear una cuestión de
privilegio contra el presidente de esta Cámara, el diputado Sergio Massa, quien
ha decidido, a partir de la pandemia del año 2020, suspender las becas de
educación que teníamos los diputados para entregar en nuestras provincias.
Vengo hablar en nombre de María Cortés, Ana Ramos, Lautaro
Espósito, Mateo Cruz, Elena Costa, María y Gabriela Gareca, Adriana Cuéllar,
Maximiliano Molina, Abril Mamani, Claudia Maita y otros, que se nutrían, para
comenzar sus estudios, de esta pequeña beca que podíamos repartir nosotros.
En el año 2020, so pretexto de que estábamos en pandemia,
se suspendieron las becas de estos chicos, que están en la Fundación Anpuy, en Salta. Para que ustedes sepan, “anpuy” en quechua significa “ayudarnos entre nosotros”,
“ayudarnos a superarnos”.
Me pregunto qué razón hay para suspender becas de estudio;
qué razón existió en la pandemia para suspenderlas. Ya sé que lo más probable
es que este año se entreguen las becas, pero le pido a la administración de
esta Cámara que reponga las becas del año pasado, para que estos chicos, por lo
menos este año, puedan tener un plus para seguir estudiando.
Sra.
Presidenta (Moreau).- La cuestión de privilegio pasa a la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
Le recuerdo, señor diputado, que todas las decisiones que
la Presidencia de la Cámara tomó fueron con acuerdo de los presidentes de
bloque.
- 21 -
Sra.
Presidenta (Moreau).- Para una cuestión de privilegio tiene la palabra
el señor diputado Arce, por Formosa.
Sr.
Arce.-
Señora presidenta: quiero aprovechar la sesión de hoy para plantear una
cuestión de privilegio que tiene como objeto poner en conocimiento de este
cuerpo los hechos graves que están ocurriendo en mi provincia, que está
sufriendo la población formoseña desde el inicio de la pandemia, en razón de
las medidas de índole sanitaria impuestas por las autoridades
provinciales.
En ese sentido, al utilizar el término “desproporcionado”
me parece que soy bastante generoso si tomamos en cuenta lo expresado por la
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que ha señalado justamente que las
medidas impuestas por la provincia de Formosa son desproporcionadas y los
criterios, contrarios a los estándares internacionales en materia de derechos
humanos.
En lo personal, creo que calificar de desproporcionadas a
las medidas es ser demasiado complaciente y no alcanza a describir el sinnúmero
de violaciones a los derechos humanos de las que son víctimas los ciudadanos
formoseños. No lo hablo desde la Cámara como si fuera de otra provincia; soy
formoseño y como tal lo vivo. Conozco a muchas de las víctimas cuyos derechos
humanos fueron violados y estuve mano a mano con ellas.
Se han presentado medidas cautelares ante la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos en nombre de organismos de la sociedad
civil, de referentes políticos ‑como el presidente del bloque Juntos por
el Cambio en la Cámara de Diputados, el diputado Mario Negri, y Luis Naidenoff, que integra nuestro bloque en la Cámara de
Senadores-, se han planteado habeas corpus a favor de los ciudadanos,
denuncias penales en la Justicia Federal ‑en mi caso como diputado contra
el gobernador Gildo Insfrán-, así como también otros
diputados han planteado violación de derechos –como la del artículo 205 del
Código Penal-, desobediencia judicial, privación ilegítima de la libertad, es
decir, un sinnúmero de delitos que se han cometido en mi provincia. Todo esto
se suma a los planteos que se han hecho en este Congreso de la Nación para que
se interpele al secretario de Derechos Humanos a fin de que informe lo que está
ocurriendo en mi provincia.
No es como dijo el secretario de Derechos Humanos en el
sentido de que son simples quejas; se trata de denuncias puntuales ante
organismos internacionales y ante la Justicia federal, que también se han
expedido.
Asimismo, no quiero dejar pasar por alto algunas cuestiones
que ocurrieron, que son graves y que tienen que ver, por ejemplo, con el
sistema de ingreso registrado a mi provincia. Ustedes saben que más de siete
mil formoseños estaban a la espera de ingresar ante una medida irrazonable y
arbitraria por parte de la administración Insfrán.
Formoseños varados que se encontraban en condiciones inhumanas a la intemperie
y sin ningún tipo de respuesta.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación se ha expedido y
ha dicho que la provincia de Formosa ha violado la Constitución Nacional porque
los derechos no pueden ser condicionados de manera permanente ni las libertades
restringidas más allá de lo razonable.
La ciudad de
Clorinda, que como bien se dijo es la segunda en importancia en cantidad de
habitantes, hace más de 160 días que se encuentra bloqueada. Esto significa que
ningún ciudadano puede salir o ingresar de ella. No tiene tomógrafo, no cuenta
con un hospital de alta complejidad y, por lo tanto, se hace necesario que las
personas salgan de su ciudad para poder atenderse y mejorar su salud.
Las comunidades originarias también sufren el accionar del
Estado y no solamente han visto violentados sus derechos en estos centros de
aislamiento, sino que también son discriminadas, se ha violado su principio de
autodeterminación porque no son consultados ni llamados para ser parte de las
decisiones en esta situación de pandemia.
Del relato de las víctimas, de la constatación fácil, lisa
y llanamente, podemos decir que estamos ante una violación de derechos humanos.
Hay casos que corresponde señalar y que no podemos olvidar, como el de Luis
Dávalos, de Clorinda, quien fue perseguido y lesionado por la policía de la
provincia de Formosa, o el de Zunilda Gómez –que ya fue mencionada en esta
sesión-, que perdió su embarazo en ese centro de aislamiento.
También está el caso de Víctor Mallorquín, que estuvo
haciendo tratamiento de radioterapia en Chaco y que nunca tuvo la respuesta por
parte del gobierno de Formosa para poder ingresar; murió en Chaco y no en su
provincia. Son lamentables los hechos que ocurrieron en mi provincia. A la
esposa de Mallorquín le llegó la autorización a su esposo para ingresar cinco
meses después de que él falleciera.
Yo me pregunto cuándo vamos a ocuparnos de Formosa; no nos
hagamos más los distraídos. Si tan efectivas y exitosas son las medidas que
impone el gobierno de Formosa, ¿por qué no se las sugiere el gobierno nacional
a las demás provincias? ¿Por qué otras provincias no imitan o copian esta
medida sanitaria impuesta por el gobierno de Formosa?
Para cerrar mi discurso, señora presidenta, creo que la
pandemia ha mostrado la peor cara de estos gobiernos que se perpetúan en el
poder, descubriendo arbitrariedad e impunidad y, lo que es más grave, la
complicidad del gobierno nacional. Por eso pedimos justicia hasta el final para
todas las víctimas y sus familias y condena para el Estado y sus cómplices que
coartan derechos. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión de privilegio pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 22 -
Sra. Presidenta (Moreau).- Para
una cuestión de privilegio, tiene la palabra el señor diputado Giordano, por
Buenos Aires.
Sr. Giordano.- Señora
presidenta: en nombre de Izquierda Socialista-Frente de Izquierda quiero
plantear esta cuestión de privilegio para elevar nuestra denuncia ‑tema
que no se tocó hasta ahora en esta Cámara‑ sobre la irresponsabilidad
política del gobierno nacional, del ministro Trotta, del gobierno de la ciudad
de Buenos Aires, Larreta, Acuña, Kiciloff y todos los
gobernadores, por la decidida campaña de iniciar las clases ‑la famosa
presencialidad‑ a cualquier costo, con protocolos que los docentes, los
médicos que apoyan y las familias que están haciendo estas denuncias dicen que
son de risa.
Si uno toma lo que dice la Sociedad Argentina de Pediatría,
casi no se podría abrir ninguna escuela. Recién me comuniqué con Jorge Adaro
del gremio de ADEMYS. En la escuela 19 de Soldati no hay barbijos, ya hubo
quince contagios en la ciudad de Buenos Aires y para sesenta docentes llegaron
veinticinco máscaras.
Además, hoy el jefe de Gabinete de la ciudad dice que no
hay un docente de la ciudad de Buenos Aires vacunado. Entonces, volver a la
normalidad es a cualquier costo y por eso el ministro Trotta tuvo que dar una explicación
a los docentes cuando fue a Chubut, pero no fue suficiente. En Chubut
directamente los docentes hace dos meses que no cobran. ¡Claro que le fueron a
pedir explicaciones! Fue a apoyar a Arcioni, quien
encima dice que en esa provincia la megaminería los va a salvar.
Por supuesto que rechazamos la campaña contra los docentes,
como si las denuncias que están haciendo ante la desastrosa situación de la
pandemia y de las escuelas fuera culpa de ellos, cuando en 2020 tuvieron que
poner hasta de su bolsillo para la conectividad.
Hemos escuchado a la ministra Acuña, a quien lo único que
le interesa es descontar los supuestos días de paro. Tuvimos que ver la foto de
Patricia Bullrich dando una clase pública. Recordemos que los funcionarios del
gobierno anterior son los adalides de la educación privada; cómo olvidar a
Macri diciendo: “Ojo con caer a la educación pública”, y demás.
Por supuesto que en el día de ayer se sumó el Episcopado
diciendo: “Hay que volver sí o sí a las escuelas”, cuando los colegios
religiosos, que son subsidiados por el Estado, o sea, por todos nosotros, ya
han dicho que no enseñarán sobre el aborto legal a sus alumnos.
¿Cómo están las escuelas? Muy mal. ¿Cómo están los salarios
docentes a nivel nacional? Un desastre. El sueldo inicial de los docentes es de
27.500 pesos, señora presidenta, cuando la canasta familiar que denuncian los
trabajadores de ATE-INDEC es de 82.000 pesos.
Voy a leer el volante del reclamo mínimo de las docentes y
los docentes en todo el país. La consigna es la siguiente: “Las escuelas se
abren con recursos, no con discursos.” Vaya si los 6.000 millones de dólares
que ya se pagaron de deuda externa hubieran sido destinados a las escuelas.
Miren qué es lo que piden: agua, lavandina, jabón, baños, cargos de auxiliares
y docentes que no se han nombrado, equipos y conectividad, vacunación universal
y transporte para los miles y miles de personas que, empujadas a una
presencialidad, no lo tienen. Ello, a riesgo de contagio, porque nadie denuncia
los contagios que puede haber.
Entonces, paso a leer lo que dicen los dirigentes del
sindicalismo docente combativo. Mariana Scayola,
secretaria general de ADEMYS, dice: “Claro que estamos a favor de las clases
presenciales. Es allí donde los docentes nos sentimos cómodos trabajando,
relacionándonos más directamente con los pibes. Reivindicamos pedagógicamente
la presencialidad.” Incluso, para las compañeras docentes que tienen que hacer
trabajo de presencialidad, trabajo docente, trabajo doméstico y demás. Y
agrega: “Nadie garantiza al día de hoy las condiciones sanitarias ni equipos
para un escenario mixto de presencialidad y de virtualidad.”
Hoy no están dadas las condiciones, y tanto el gobierno
nacional como los provinciales lo saben. Por eso, mañana, 12 de febrero, día en
que se reúne el Consejo Federal de Educación, habrá una jornada de protesta
convocada por los gremios combativos: ADEMYS, SUTEBA Multicolores y la docencia
combativa nacional. Nosotros, desde nuestras bancas, apoyamos todos los
reclamos. Los docentes combativos dicen: “CTERA escucha, queremos un plan de
lucha.”
Hace unos instantes habló el señor diputado Yasky, pero no mencionó a los docentes, sino que defendió a
Insfrán. Entonces, lo que hace falta es declarar la
emergencia educativa y que la plata vaya a las aulas, a los docentes, y no a
los pagos de la deuda externa.
Nuestra cuestión de privilegio es muy sencilla: alertamos,
a días de que los gobiernos empujen a la presencialidad, que los contagios y
todo lo que ocurra en las aulas va a ser responsabilidad política de ellos y no
de los docentes.
Sra.
Presidenta (Moreau).- La cuestión de privilegio pasa a la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
- 23 -
Sra.
Presidenta (Moreau).- Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra
el señor diputado Schlereth, por Neuquén.
Sr.
Schlereth.- Señora presidenta: quiero
plantear esta cuestión de privilegio contra los dichos de la señora de
Bonafini, que se suman a los anteriores dichos de la titular del INADI,
Victoria Donda, en ambos casos discriminatorios hacia la comunidad evangélica
argentina. Demás está decir ‑porque la gran mayoría lo sabemos‑ que,
en la actualidad, a lo largo y ancho del país, dicha comunidad reúne a una
cantidad importante de millones de argentinos.
El 25 de enero pasado, en una entrevista radial, la señora
de Bonafini dijo, y cito textualmente: “Los evangélicos te pudren la cabeza
como los macristas y son muy peligrosos”. Unas semanas antes, en un programa
televisivo de alta audiencia, la titular del INADI dijo también, en referencia
a la comunidad evangélica, y cito textualmente, lo siguiente: “Si dejamos
llevarnos por estos fanáticos religiosos, tenemos un problemón.”
A esto debo sumar también que, en el pasado mes de
diciembre, en la ciudad de Eldorado, Misiones, tres templos evangélicos fueron
violentados y profanados. Asimismo, en las últimas semanas, templos
emblemáticos, como por ejemplo el del Boulevard Guzmán, en la ciudad de
Córdoba, y el de la calle Roca, en la ciudad de Neuquén, fueron violentados.
Podría seguir enumerando situaciones y episodios de los últimos meses.
Cada uno de estos hechos violentos, discriminatorios y
extendidos en todo el país, son gravísimos y repudiables. Llama muchísimo la
atención la inacción de los organismos del Estado, que debieran velar por los
derechos y las libertades consagradas en nuestra Constitución.
El artículo 14 de nuestra Carta Magna consagra el derecho a
la libertad de culto, pero también lo hacen numerosos tratados internacionales
a los cuales hemos adherido y tienen rango constitucional. Me refiero a la
Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Declaración Americana de los
Derechos y Deberes de los Hombres, la Convención Americana sobre los Derechos
Humanos, el Pacto Internacional sobre los Derechos Civiles y Políticos, y a
algunos otros que, si pudiéramos hacer un compilado de los derechos que se
consagran con rango constitucional, diríamos que consagran la libertad de
conciencia, de pensamiento y de ejercer y profesar un culto de manera
individual y colectiva, en lo público y en lo privado.
Diferentes organizaciones representativas de casi el 97 por
ciento de los cristianos evangélicos ‑como ACIERA, la UAD, la
Confederación Bautista y otras‑ han presentado las denuncias
correspondientes a estos organismos, sin ningún tipo de respuesta hasta el día
de hoy. También hemos cursado nuestra preocupación al secretario de Culto de la
Nación por la inacción frente a estos hechos violentos, sin tener hasta el
momento ninguna respuesta concreta.
No vengo a esta altura de la historia del país a explicar a
ustedes ni a los argentinos la presencia concreta, sistemática y cotidiana de
la iglesia evangélica contribuyendo a la solución de los problemas de la
Nación, máxime en situaciones críticas como las que hoy estamos viviendo. Me da
la sensación de que algunos intentan usar esa disposición, pero cuando hay que
ponerse los pantalones no son capaces de salir en defensa, no de un sector de
la población, sino de la ley. En todo caso, esta es una situación que no
estamos viendo en la República Argentina.
Desde esta banca solicito la acción y el pronunciamiento
concreto de los organismos del Estado que tienen como responsabilidad velar por
las libertades individuales y colectivas de nuestra Nación, en particular por
la libertad de conciencia, la libertad de culto, la libertad de pensamiento y
el ejercicio libre de estas libertades.
La iglesia evangélica seguirá con lo que viene haciendo
desde el inicio de la patria hace más de doscientos años. Los evangélicos no
somos un problemón para la Nación, como dijo la titular del INADI; los
evangélicos no le pudrimos la cabeza a nadie ni somos peligrosos. Me llama la
atención tener que decir esto a esta altura, pero lo hago porque ningún
organismo del Estado salió en defensa de la ley.
Somos ciudadanos comprometidos con nuestra Nación y
seguiremos haciendo lo que hemos hecho siempre, no solamente conteniendo a la
población ‑a la que ni siquiera el Estado llega en muchos casos‑,
sino también contribuyendo para transformar y darle dignidad a la gente. No
creemos en el pobrismo ni en el asistencialismo; creemos en la dignidad, en el
esfuerzo y en la responsabilidad de cada ciudadano para salir adelante y sacar
a su familia del estado de postración que muchos tienen.
Seguiremos trabajando para ayudar a los ciudadanos a que
sean mejores padres, empleados, empleadores y funcionarios. Esperamos hacerlo
en un marco de respeto y de pleno ejercicio de las libertades individuales
consagradas por nuestra Constitución. (Aplausos.)
Sra.
Presidenta (Moreau).- La cuestión de privilegio pasa a la Comisión de
Asuntos Constitucionales.
- 24 -
Sra.
Presidenta (Moreau).- Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra
la señora diputada Cornejo, por Salta.
Sra.
Cornejo.- Señora presidenta: en primer lugar, no quiero dejar pasar
una contestación que acabo de escuchar relacionada con el tema becas y todo lo
que implica para una persona recibir una beca para poder estudiar.
Se ha contestado a un diputado de mi provincia que esto ha
sido una decisión de presidentes de bloque. A partir de ahora solicito
firmemente que sea atribución de los diputados y de este cuerpo este tipo de
decisiones que perjudican a quienes más necesitan.
Señora presidenta: conforme a nuestro reglamento, planteo
esta cuestión de privilegio por la falta de tratamiento de diferentes proyectos
que hemos presentado, específicamente relacionados con el funcionamiento del
aeropuerto de El Palomar.
Incluso, hemos presentado
proyectos para pedir la interpelación del señor ministro de Transporte porque
necesitamos explicaciones.
Con sinceridad debo decir que siento muchísima pena al ver
que no conseguimos avanzar en estos temas, ya que sin duda ello da cuenta de
una falta de consideración hacia quienes más necesitan de un sistema de vuelos low
cost.
Hoy nos sentimos honrados como diputados nacionales porque
hemos sido elegidos por muchos argentinos para acompañar este reclamo. Ahora es
el pueblo quien pide la reapertura de El Palomar. Tengo en mis manos una nota,
que ya fue entregada, con más de setenta mil firmas recolectadas en el país
donde consta todo lo que estoy diciendo. Es el pueblo argentino quien reclama
la apertura del mencionado aeropuerto y que tengan consideración hacia los más
de cuatro mil puestos de trabajo en forma directa que han quedado fuera del
mercado laboral.
Al señor presidente de la Nación, don Alberto Fernández, es
su pueblo quien le pide que no cercene sus esperanzas. Es su pueblo quien le
dice: déjennos trabajar. Es su pueblo el que se manifiesta en solicitudes con
una enorme cantidad de firmas ‑muchas de ellas publicadas en diversas
plataformas‑, quien le pide que no destruyan la conectividad del país. En
verdad, me gustaría hacer llegar este material a los señores diputados para que
lean los comentarios que acompañan cada una de las firmas recolectadas.
Hace un rato, algún legislador del oficialismo se quejaba
de la conectividad. Con el cierre de este aeropuerto low cost,
se han cerrado las posibilidades de cientos de personas de escasos recursos.
Acá escuchamos relatos; pero, cuando vamos a las acciones
de este gobierno, advertimos que tales relatos no tienen asidero. No se
preocupan realmente de quienes más necesitan.
Hoy he traído como ejemplo estos más de cuatro mil puestos
de trabajo caídos porque la mala intención y la complicidad en contra de los
avances recibidos por los argentinos son totalmente claras.
Reclamo al señor presidente de la Honorable Cámara, doctor
Sergio Massa, que, como autoridad de este cuerpo, dé curso a los proyectos que
hemos presentado y que convoque a los ministros cuando así lo solicitamos. Esto
es, nada más ni nada menos, que cumplir con el reglamento que nos rige.
Pido especialmente por todas las iniciativas relacionadas
con el aeropuerto de El Palomar. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión de privilegio pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales.
La Presidencia sugiere a la señora diputada que hable con
el titular de la Comisión de Transportes, que pertenece a su bloque, porque es
la cabecera a donde han sido girados los proyectos.
Sra. Cornejo.- Si
la señora presidenta me permite, necesitaría que personal de la Cámara se
encargue de las firmas que han hecho llegar los ciudadanos argentinos a raíz de
esta problemática.
Sra. Presidenta (Moreau).-
La Presidencia solicita a la señora diputada que las entregue en Mesa de
Entradas.
- 25 -
Sra.
Presidenta (Moreau).- Para una cuestión de
privilegio, tiene la palabra el señor diputado Fernández Patri, por Formosa.
Sr.
Fernández Patri.- Señora presidenta: en verdad, como
formoseño estoy sorprendido por cómo han tratado a mi provincia no solo
diputados de otras jurisdicciones, sino también pares formoseños.
Aclaro que planteo esta cuestión de
privilegio en contra del señor diputado Waldo Wolff, y haré una introducción
para que se entienda qué me lleva a hacerla.
Estamos ante una pandemia y el mundo
entero, con aciertos y errores, busca estrategias para afrontarla. Uno se
pregunta por qué tanto ensañamiento hacia Formosa, provincia que históricamente
es quizás una de las menos desarrolladas de nuestra Argentina.
Hasta 1955 fue territorio nacional;
recién ese año, el general Perón decretó su provincialización.
Formosa no tiene deuda pública; desde
hace diecisiete años presenta superávit fiscal. Cuando atacan a su gobernador,
Gildo Insfrán, vemos claramente que hay un hilo
conductor entre quienes le pegan y entendemos de dónde provienen los golpes;
advertimos, en forma manifiesta, que se originan sistemáticamente en la
derecha. Cuando a uno le pegan tanto por la derecha, probablemente es porque se
defiende muy bien por izquierda.
Creo que lo que tiene la gestión de
Gildo Insfrán es que en nuestra provincia se puede
ver un modelo de justicia social. El gobernador, junto con el presidente de
nuestro partido, José Luis Gioja, fue el arquitecto
de esta unidad nacional que nos permitió llegar al gobierno.
Hay dos símbolos que la derecha ataca
permanentemente: Cristina Fernández de Kirchner y Gildo Insfrán.
Así buscan fisurar esta unidad que hoy gobierna a la Argentina.
Ellos son el símbolo de que los más
humildes no han sido olvidados. Nadie contó que, a los aborígenes mencionados
en esta sesión, Gildo Insfrán les entregó trescientas
mil hectáreas en propiedad comunitaria; tampoco se nombró a los más de
doscientos jóvenes aborígenes en la universidad de nuestra provincia que son
protagonistas de su modelo educativo, ya que quinientos maestros pertenecen a
la modalidad MEMA, que es bilingüe.
Al pequeño productor, a ese “paipero” que no llega a ser una unidad de producción, Gildo
Insfrán le otorgó la tenencia de la tierra.
Formosa ha sido una tierra olvidada
sistemáticamente por la Nación porque después de la guerra de la Triple Alianza
se entendió que era un territorio que podíamos perder. Fue recién con la
llegada de Néstor Kirchner que comenzó una reparación histórica que nos
permitió triplicar la cantidad de kilómetros asfaltados y tener un hospital de
alta complejidad donde se practican trasplantes de órganos. Es el primer
hospital público del interior del país en alcanzar ese objetivo.
Teníamos en ejecución un centro de
medicina nuclear, como parte de esa red iniciada por Cristina Fernández de
Kirchner, pero el gobierno de Mauricio Macri lo paralizó. Hay legisladores que
se sorprenden por la situación de algunos pacientes que deben realizar
tratamientos oncológicos, cuando fue su gobierno el que paralizó esa obra que
les hubiera permitido llevarlos adelante en Formosa.
Hablamos de un gobernador que habla a
su pueblo de frente y que desde 1995 no ha perdido una sola elección; con más
del 60 por ciento de los votos, ha ganado sistemáticamente. Maneja su auto sin
vidrios polarizados y habla con su pueblo. Eso es lo que le duele a la derecha
recalcitrante, que en nuestra provincia encuentra dirigentes que, como tienen
su interna, buscan ver quién hace la denuncia más grande.
Intentaron que la Comisión de Derechos
Humanos y Garantías viniese a la provincia de Formosa, una comisión que
prácticamente no registró actividad durante la gestión de Mauricio Macri. En el
último año de su gobierno, solo se reunió una vez para constituirse y jamás lo
hizo fuera de esta Cámara. Ahora, quieren hacerlo en nuestra provincia.
Quiero reiterar, por si no las
escucharon, las declaraciones frente a los medios de prensa de uno de nuestros
pares: el señor diputado Waldo Wolff. Dijo: “Para que el 70 por ciento de los
formoseños cobre su sueldo con un presupuesto que tiene el 90 por ciento de
coparticipación, toda la Argentina tiene que estar trabajando y exponiéndose,
para que el 70 por ciento del pueblo formoseño no trabaje y se quede en sus
casas.”
Señor Waldo Wolff: no solo le tiene que pedir disculpas a
su profesor de impuestos ‑he leído que es licenciado en Administración
como yo, ahí estudiamos la Ley de Coparticipación‑, sino que también debe
pedir disculpas al pueblo formoseño, que tan bien lo recibió. También le
ofrecimos lugar para alojarlo y usted despreció.
Ese pueblo formoseño todos los días se levanta para
trabajar, no desde hoy, sino históricamente. Por ejemplo, para cambiar esa
visión centralista que usted tiene desde el puerto de Buenos Aires, debo decirle
que para tener esta red ferroviaria, muchos de los durmientes salieron de los
montes. Hoy una diputada hizo un homenaje a esos productores, a esos montes
nativos. Formosa también aportó madera para esos durmientes de nuestros
quebrachales.
Formosa hoy produce carne. Hasta la cuota Hilton, nuestra
provincia también ha sido partícipe en…
Sra.
Presidenta (Moreau).- Señor diputado: le pido que vaya redondeando su
discurso.
Sr.
Fernández Patri.- De acuerdo, señora presidenta. Lo que quiero decir es que
este menosprecio que permanentemente tienen contra la provincia de Formosa es
porque hemos desarrollado una política exitosa contra la pandemia. Tenemos la
menor tasa de incidencia: 146 por cada 100.000 habitantes. Junto con Catamarca,
tenemos la menor tasa de fatalidad: solo 15 víctimas fatales. Durante todo
2020, en Formosa hubo un solo fallecido.
A partir de ahí, la Corte Suprema, como bien lo dijo el
diputado Arce, determinó que tenían que entrar 8.500 personas a Formosa. ¿Y
saben qué? Más de la mitad de esas personas no tenían domicilio en nuestra
provincia, y solo 3.000 decidieron entrar.
Entonces, esto es parte de una campaña…
Sra.
Presidenta (Moreau).- Señor diputado: ha finalizado el tiempo del que
disponía.
Sr.
Fernández Patri.- … de políticos con medios de comunicación y también con un
sector de la Justicia.
Por eso pido que el diputado Wolff se retracte y le pida
disculpas al pueblo formoseño por sus dichos.
Sra.
Presidenta (Moreau).- La cuestión de privilegio se gira a la Comisión
de Asuntos Constitucionales.
Corresponde decir que el diputado Wolff comprendió que, si
bien fue nombrado, la cuestión de privilegio no debe ser respondida en el
recinto porque será tratada en la Comisión de Asuntos Constitucionales. Otros
diputados no entienden esto.
- 26 -
Sra. Presidenta
(Moreau).- Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra el señor diputado
Gutiérrez, por Córdoba.
Sr. Gutiérrez.- Señora
presidenta: antes de referirme al motivo central de mi intervención y a cuenta
de los escasos minutos que voy a tener para plantearlo, quiero aclarar que
quien habla siempre es partidario del debate. Demasiados años de oscuridad
tuvimos sin él en este país.
Corresponderá a cada uno de los que han intervenido en
estas largas horas ya de debate reflexionar acerca de si este realmente
contribuye a solucionar los gravísimos problemas que tenemos en materia
económica, de empleo, de pandemia, etcétera.
Me llama la atención que solo algunos escasos diputados ‑y
seguramente quienes seguirán en el orden de la palabra‑ intervengamos
haciendo referencia a temas que entendemos que verdaderamente contribuyen a
resolver ‑repito- los graves problemas que tiene la Argentina.
Esta intervención está dirigida al gobierno nacional, a la
Presidencia de la Nación, toda vez que el presidente de esta Cámara nos ha
manifestado en la Comisión de Labor Parlamentaria que ha insistido, producto
del acuerdo que en dicha comisión obtuvimos allá por el mes de diciembre,
respecto de la necesidad de incorporar en el temario de las sesiones
extraordinarias la prórroga de la ley de biocombustibles.
Estamos hablando de un sector que, como tantos otros,
cuenta con inversiones verdaderamente notables en los últimos años, y que lo
que necesita para seguir adelante es certeza. Certeza es, por ejemplo, la
resolución con que la propia Secretaría de Energía hace no mucho tiempo
contribuyó para poner nuevamente en marcha plantas de producción de bioetanol
que estaban literalmente paradas. No hace falta que mencione la cantidad de
miles de puestos de trabajo que esta actividad involucra.
Hace muy pocas horas, el presidente de la Nación ha tenido
manifestaciones en la hermana provincia de Tucumán que reivindicaban la
actividad de los biocombustibles.
Quiero pensar también que las felices declaraciones del
ministro Kulfas, que mencionó solamente el bioetanol
sobre la base de caña de azúcar, se debieron al sencillo y entendible hecho de
que se encontraba en esa provincia, y allí la producción de biocombustible ‑concretamente,
bioetanol‑ tiene esa base.
De ninguna manera estamos cuestionando la necesidad de
hacer algunas modificaciones en la ley de biocombustibles. Es más, quien habla,
junto con otros diputados, hemos presentado nuestro propio proyecto a este
respecto, y estamos convencidos de que no hay que hacer modificaciones, sino
discutir una nueva ley. Pero hoy necesitamos certezas y en mayo ‑es
decir, aquí a la vuelta de la esquina‑, la ley vence. Y no hay peor
situación de incertidumbre que no contar con la prórroga de esta norma.
Por ello, insto nuevamente al gobierno nacional a que
incorpore esta temática a la mayor brevedad para avanzar en la búsqueda de las
soluciones que este sector también necesita para seguir contribuyendo a la
economía y al progreso nacional. (Aplausos.)
Sra.
Presidenta (Moreau).- La cuestión de privilegio planteada pasa a la
Comisión de Asuntos Constitucionales.
Solicito que por Secretaría se lea la carta remitida por
parte de la Presidencia de la Cámara, por el doctor Sergio Massa, a la Secretaria
Legal y Técnica, por la que solicita lo mismo, tal cual lo dispuesto en el
acuerdo de Labor Parlamentaria.
Sr.
Secretario (Cergnul).- Dice así:
“Buenos
Aires, 13 de enero de 2021.
Señora secretaria Legal y
Técnica de la Presidencia de la Nación, doctora Vilma Lidia Ibarra:
Tengo el agrado de dirigirme a usted en relación al
expediente 113-S.-2020, proyecto de ley por el cual se prorroga hasta el 31 de
diciembre de 2024 la vigencia del régimen de promoción para la producción y uso
sustentable de biocombustibles en el territorio de la Nación Argentina, ley
26.093, para solicitarle tenga a bien disponer su incorporación al temario de
sesiones extraordinarias a los fines de su tratamiento en la Honorable Cámara
de Diputados de la Nación.
Atentamente, doctor Sergio Tomás Massa, presidente de la
Cámara Diputados”.
El correo electrónico se remitió el mismo día 13, y el
acuse de recibo es del día 18.
- 27 -
Sra.
Presidenta (Moreau).- Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra
el señor diputado Contigiani, por Santa Fe.
Sr
Contigiani.- Señora presidenta: en
primer lugar, quiero hacer un reconocimiento a las gestiones que ha
desarrollado el presidente de este cuerpo a pedido de todos los bloques e
interbloques en la penúltima reunión de la Comisión de Labor Parlamentaria.
En esa línea de reconocer lo que hicimos como Cámara de
Diputados de tratar de cumplir el objetivo: lograr debatir la prórroga de la
ley de biocombustibles, también quiero orientar esta cuestión de privilegio
hacia el Poder Ejecutivo nacional por sus contradicciones y sus dudas; por
permitir que se cuelen intereses que atrasan en un debate que es del presente y
del futuro, un debate estratégico para el país, que tendría que ser una
política de Estado y no discutirse en términos de visión estratégica. Sí
claramente podemos discutir marcos legales diferentes.
El gobierno de Néstor Kirchner en el año 2004 sanciona la
ley del software y en el año 2006, la ley de biocombustibles. Hay que tener memoria
‑y se lo digo a los diputados y las diputadas del bloque oficialista‑,
esas dos grandes leyes significaron posicionar a la Argentina en ambos tipos de
economías ‑la del conocimiento, la de la transición verde, la del
agregado de valor, la del desarrollo de las energías limpias‑ de una
manera muy virtuosa.
A partir de aquella ley, que yo discutía y sobre la que
tenía diferencias, inclusive desde otro lugar de acción de mi vida, se facilitó
el nacimiento de una serie de pymes, de inversiones nacionales, locales, de
gringos agropecuarios que se asociaban para agregarle valor al aceite en la
cadena de valor del biodiesel, o del etanol o el alcohol con base en sorgo, y
avanzaron generando puestos de trabajo con un espíritu altamente federal.
Son empresas que están en las provincias de Entre Ríos, de
Buenos Aires, de Córdoba, de Santa Fe, del NOA, y que están haciendo un proceso
de agregado de valor hacia adelante y hacia atrás, tercerizando acciones, pero,
además, cumpliendo las metas del Acuerdo de París, que son muy importantes, y
cumpliendo con esta idea de la transición verde, que los carburantes fósiles
son el pasado. Por eso no entendemos las dudas de la Presidencia de la Nación,
porque claramente yo separo lo que es el debate de la prórroga del debate de una
nueva ley.
Claramente, podemos tener una nueva ley de biocombustibles
y yo tengo cosas para aportar. Son las diferencias que arrastro desde el año
2006, como, por ejemplo, el autoconsumo, la posibilidad de producción de
autoconsumo para el pequeño y mediano productor de biocombustibles, a lo que la
ley del año 2006 le cerró la puerta; pero eso es otro debate.
Tendríamos que prorrogar, darles certidumbre a estas
personas, empresarios y trabajadores, que están en un área estratégica del
país. A partir de esta prórroga y el régimen de los beneficios, podemos
discutir una nueva ley de biocombustible en la Argentina. Podemos segmentar los
beneficios en esta nueva ley. Claramente hay que hacerlo. Lo he hablado con
algunos diputados oficialistas y podríamos segmentar los beneficios, tratando
de reorientar una mayor promoción económica hacia las pymes o que las pymes se
integren mejor en la producción de biocombustible en la Argentina. Lo podemos
hacer.
Lo que no podemos hacer es no darle certidumbre, no
prorrogar, no reconocer estas décadas de producción, de inversiones y de
esfuerzo de un sector privado con mente avanzada en un área tan importante en
todo sentido, tecnológico, medioambiental, humano y laboral para la Argentina.
Vuelvo a poner la esperanza en solucionar esto y en que
convoquemos a una sesión especial entre todos los bloques y prorroguemos lo que
ya hizo el Senado de la Nación de manera muy positiva. El Senado de la Nación
está por delante del Poder Ejecutivo nacional. Entendió mucho mejor. Inclusive
legisladores oficialistas del Frente de Todos de mi provincia están entendiendo
mucho mejor esta problemática que el propio Poder Ejecutivo nacional.
Apelo a que no entren intereses que atrasan, porque tenemos
que lograr la prórroga para decirles que todo lo que hicieron hasta acá es
bueno y lo vamos a reconocer; tienen la prórroga, pero vamos a jugarnos a hacer
una nueva ley, un nuevo marco legal. Pero ese marco legal tiene que profundizar
todo lo bueno que hicimos, no sea cosa que metamos intereses que atrasan, de
petroleras nacionales e internacionales, para que se queden con el negocio de
los biocombustibles en la Argentina. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión de privilegio planteada pasa a la Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 28 -
Sra.
Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra la señora diputada Moisés, por
Jujuy.
Sra.
Moisés.- Señora presidenta: voy a plantear una cuestión de
privilegio contra el bloque de Juntos por el Cambio, por atacar la instituciones
democráticas legítimamente elegidas, generar miedo en la sociedad civil y
manipular la situación sanitaria por conveniencias políticas.
Esto lo vinieron haciendo en estos meses ‑sobre todo
el año pasado‑ algunos dirigentes puntuales que tienen posturas más
extremas, lamentablemente, respecto a cualquier tema. Pero creo que sí hubo un
paso más allá con respecto a la situación de Formosa, teniendo en cuenta que
fue una actitud corporativa de todo el bloque de Juntos por el Cambio y de sus
máximas autoridades, no solamente tratando de instalar una situación que no es
en la provincia de Formosa, sino, además, planteando un rango hasta de golpe
institucional si se quisiera. Se escuchó hablar hasta de un pedido de
intervención federal de la provincia, cuando en realidad de esa manera se
atacan las facultades constitucionalmente establecidas que tienen los
gobernadores en las autonomías provinciales.
Con respecto a la pandemia, muchas decisiones fueron
tomadas desde marzo de 2020, no solamente en la Argentina, sino en el mundo.
Seguramente muchas de ellas fueron difíciles de sostener, muchas acertadas y
otras, quizás hoy, mirado para atrás, erróneas, muchas quizás pensando en lo
mejor para toda la sociedad y en cómo atravesábamos un momento totalmente excepcional
y extraordinario para el que todos debemos adaptarnos y poner lo mejor de
nosotros.
Creo que el mayor esfuerzo debíamos hacerlo quienes tenemos
responsabilidades públicas y quienes tienen a cargo los Poderes Ejecutivos,
tomando las mejores decisiones con la información disponible. Quienes estamos en los Poderes Legislativos,
sobre todo, debemos ser respetuosos de las facultades de quienes toman
decisiones en los Poderes Ejecutivos, pero, fundamentalmente, ser respetuosos
de la situación por la que atraviesa la sociedad argentina, de miedo, de
temores, de incertidumbres, donde la vida se dio vuelta patas para arriba, como
a todos en el mundo.
Señora presidenta: en Jujuy los que somos representantes
del pueblo jujeño no estuvimos de acuerdo en muchas de las decisiones que se
tomaron por parte del gobierno provincial durante el año 2020 y aún ahora que
se está debatiendo el inicio de clases.
En Jujuy se produjeron también algunos excesos. Acá se
habló con una irresponsabilidad tajante con el desacato, no con la libertad de
expresión, y no solamente en este recinto, sino en los medios de comunicación,
de reclusión forzosa, de cautiverio, de restricciones de libertades y derechos,
de intimidaciones y amenazas, de detenidos ilegales, de uso del terror y de
discriminación.
Yo podría haber calificado de la misma forma muchas de las
medidas tomadas por el gobernador Morales en Jujuy. Será mi opinión, pero he
tenido la prudencia de no plantearlo públicamente y mucho menos en esos
términos, justamente por la responsabilidad pública que asume un representante
del pueblo, especialmente en momentos críticos.
En Jujuy, más discriminación que mandar a marcar las casas
de las personas contagiadas, como hizo en el mes de abril el gobernador
públicamente, pidiendo una persecución casi entre ciudadanos, no hay, o el uso
del terror ante el encierro real y efectivo de trabajadores golondrina en un
hospital de campaña, que la oposición en Formosa llama “centro de detención”, y
que no son ni más ni menos que los hospitales de campaña que usaron muchos
gobernantes.
En Jujuy muchos estudiantes jujeños, por orden del
gobernador, no pudieron volver a sus casas, aun declarando sus propios
domicilios. También hubo situaciones críticas con los camioneros; algunos de
ellos pasaron más de 24 horas encerrados, no adentro de una carpa de campaña,
sino dentro de sus propios camiones, porque no los dejaban entrar a Jujuy. O,
lo peor de todo, cuando expulsaron, literalmente y de forma violenta, a todos
los extranjeros que estaban paseando por Jujuy en el momento del cierre y que
los metieron adentro de un colectivo, los mandaron de “prepo” a Buenos Aires y
cuando llegaron acá tampoco los dejaban entrar en la ciudad y ni siquiera
notificaron a sus embajadas. Esa pobre gente también sufrió muchísimo, como
muchos, como todos. Ejemplos, hay miles; resultados, también.
Yo no puedo opinar por lo de Formosa o lo de Jujuy, porque
son situaciones incomparables. Deberíamos comparar lo que pasó en cada una de
las provincias o de los distritos de la provincia de Buenos Aires. Lo que sí le
puedo decir es que en Formosa hay solamente 15 muertos y en Jujuy, 1.500.
También hay cuestión de resultados en los excesos. (Aplausos.)
El compañero presidente del bloque, Máximo Kirchner, cuando
yo le iba planteando durante el año pasado todas estas cosas que pasaban en
Jujuy me dijo muy claramente que no podemos politizar la pandemia y debemos
respetar las decisiones de quienes tienen facultades para tomarlas.
Si nosotros le pedimos a los argentinos y argentinas que
respetan las decisiones legítimamente tomadas por nuestro presidente y las
decisiones que tomamos en esta Cámara respecto de la pandemia, pues debemos
tener la misma vara para respetar las decisiones de quienes llevan adelante los
Poderes Ejecutivos en las provincias. Aclaro: estemos o no de acuerdo. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).-
Tiene la palabra la señora diputada Martínez, por la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires.
Sra. Martínez (D.).- Señora presidenta: solamente
quiero hacer una brevísima aclaración. Me llamó la atención que lamentablemente
se haya puesto en duda la gestión sobre la transparencia de los viajes
oficiales que se realizaron en esta Cámara durante el periodo 2015-2019.
Quiero recordar que esta Cámara sancionó la Ley de Acceso a
la Información Pública y que, tanto esta Cámara como el Senado de la Nación,
durante ese mismo periodo, pusieron por primera vez en funcionamiento la
Oficina de Acceso a la Información Pública. Ese fue un hecho histórico que creo
que todos los diputados y las diputadas de esta casa debemos reconocer y
respetar. Debemos seguir trabajando mucho porque todavía queda trabajo por
hacer.
Si hay diputados que tienen dudas de lo que pasó y de cómo
se gestionó pueden ir a la página ‑al igual que puede hacerlo cualquier
ciudadano‑; allí encontrarán los informes de gestión que se presentaron
todos los años y los pedidos de acceso a la información respondidos. Fuimos
nosotros quienes cambiamos la forma en que se gestionaban en esta Cámara los
viajes oficiales, que antes eran totalmente opacos y desde nuestra gestión
fueron absolutamente transparentes.
Entonces, invito a todos los diputados a seguir trabajando
porque, de hecho, todavía este Poder Legislativo debe cumplir con lo dispuesto
por la Ley de Acceso a la Información Pública y crear la Agencia de Acceso a la
Información Pública del Poder Legislativo. Tenemos mucho trabajo, por lo que no
creo que haya que poner en duda la transparencia de la gestión durante el
periodo 2015-2019 y tampoco durante el periodo actual, ya que se sigue
trabajando y hay una línea que debemos seguir profundizando.
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión de privilegio planteada por la señora diputada Moisés pasa a la
Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 29 -
Sra. Presidenta (Moreau).-
Para una cuestión de privilegio, tiene la palabra el señor diputado Zottos, por la provincia de Salta.
Sr. Zottos.- Señora
presidenta: no me gusta plantear cuestiones de privilegio ‑esta será la
primera‑; no lo iba a hacer, pero no podemos quedarnos callados.
El 30 de noviembre de 2020, el diputado Grande me planteó
una cuestión de privilegio a mí y al procurador general de la provincia de
Salta relativa a las facturas apócrifas de la Municipalidad de Salta. El
diputado pedía la protección de este cuerpo por las presiones que manifestó
recibir, tanto del procurador general de la provincia de Salta, como de quien
les habla.
Señora presidenta: el diputado no dice toda la verdad. No
dice toda la verdad porque a él lo citaron a declarar en esta cuestión por el
vínculo que tiene con el único personaje preso ‑Matías Huergo‑. El
mismo diputado manifestó que tenía conocimiento y tenía información de esta
situación. Tal como le dije en su momento, si el diputado tenía información,
estaba obligado a brindársela a la Justicia; por eso fue citado a declarar; de
lo contario, sería cómplice. Se molestó el diputado por esto que dije ese día.
También podría renunciar a su fuero e ir a declarar con tranquilidad. Si no
tiene nada que ocultar, no sé por qué se preocupa o está nervioso el diputado
Grande; en ese caso, no debe preocuparse ni pedirle protección a este cuerpo.
Según él dice, cuando fue a visitar a la cárcel a su amigo
le dijo que podía salir con la figura del arrepentido, que ya había hablado en
su momento con Peña y que tenía todo armado para que lo acusaran al actual
gobernador de la provincia de Salta, que estaba involucrado en esta cuestión.
Esto lo dice el propio abogado de Huergo, que es Sebastián Espeche ‑tengo
las grabaciones‑.
Le voy a hacer llegar a la comisión toda la documentación
porque sería bueno que se cite a Huergo, al procurador que le hizo una querella
también al diputado Grande y a quienes se considere pertinente. Yo voy a
entregar documentación; tengo las grabaciones donde él reconoce públicamente ‑a
través de un medio‑ que tiene información sobre esto, y también lo que
dice el abogado Espeche.
A esto quiero agregarle, señora presidenta, que no sé cuál
es el apriete que tiene el diputado Grande. Tal vez sea su conciencia, no otra
cosa. No sé por qué está muy preocupado y nervioso.
Además, quiero decirle que tiene una denuncia en la
Fiscalía Federal N° 7 en lo Criminal y Correccional de Buenos Aires; también
tiene otra denuncia que puede ver y comprobar la comisión sobre información que
pasaba a la AFIP como informante.
Quería dejar esto en claro y pedir que la comisión avance,
que no quede como una cuestión de privilegio más, sino que vaya a fondo, porque
tampoco es bueno y nos falta el respeto a todos y a esta institución que venga
acá a pedir protección sin decir toda la verdad.
Sra. Presidenta (Moreau).- La
cuestión planteada pasa la Comisión de Asuntos Constitucionales.
- 30 -
Sra. Presidenta (Moreau).-
Para la última cuestión de privilegio, tiene la palabra la señora diputada
Cerruti, por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sra. Cerruti.- Señora
presidenta: aspiro sinceramente a que en este tema que vengo a presentar
podamos estar todos de acuerdo y salir de la cancha embarrada en que a veces
terminamos convirtiendo estos momentos.
Estamos frente a una situación de una gravedad inusitada
para la libertad de expresión en la Argentina como tal vez no hayamos visto en
los últimos años. Me refiero al pedido, a la exigencia de una jueza, para que
el periodista Santiago O'Donnell ‑que escribió el libro Hermano, publicado en noviembre del año
pasado por la editorial Planeta, en el que uno de los hermanos del expresidente
Mauricio Macri cuenta su versión de la historia familiar‑ entregue las
cintas en las que han quedado registradas diecisiete horas de conversaciones.
Cabe aclarar que no media una causa judicial, sino que es sencillamente una
operación de pesca y de búsqueda de certezas para saber si Mariano Macri podría
iniciar una causa judicial.
Entiendo que todos los que compartimos las preocupaciones
por la libertad de expresión, que es uno de los pactos básicos, fundamentales,
democráticos, constitucionales, de las sociedades de occidente, desde hace
muchísimos años, y de la Argentina en particular, podrán comprender la gravedad
de esto que estamos viviendo.
A nivel nacional, hemos defendido la libertad de prensa y
la libertad de expresión aun cuando muchísimas veces hemos sido llevados a
terrenos de operaciones mafiosas, de servicios de inteligencia, etcétera. En la
Comisión de Libertad de Expresión de esta Cámara hemos recibido a periodistas
que han venido a quejarse porque les hemos dicho que tenían actitudes machistas
o misóginas, pero todavía no hemos tomado ninguna decisión con respecto a este
tema y hoy se vence el plazo judicial para que Santiago O'Donnell entregue esas
cintas.
Espero y deseo que realmente podamos llegar a un acuerdo en
esta Cámara para repudiar esta situación y acompañar a todas las organizaciones
que defienden la libertad de expresión, que ya se han pronunciado en contra de
esta medida, como FOPEA, ADEPA, y una enorme cantidad de periodistas e
intelectuales.
Señora presidenta: conozco hace muchísimos años obviamente
a Santiago O'Donnell y podría hablar mucho de su libro, de su raigambre como
periodista y editorialista.
Si bien tengo el honor de haber compartido con él
redacciones y de haber sido su editora y nos tenemos un respeto y un afecto
mutuo, lo cierto es que creo que no pasa por ver quién es, ya que debiéramos
actuar de la misma forma sea quien sea el que atraviese una situación similar.
Lo que está en juego hoy es tan claro como la preservación
de las pruebas que el mismo periodista puede tener en caso de que lo lleven a
una causa judicial. Esto no se ha visto nunca en el ejercicio de la
libertad de expresión en la Argentina.
- Ocupa la Presidencia el señor presidente
de la Honorable Cámara, doctor Sergio Tomás Massa.
Sra. Cerruti.- Hemos
visto casos en los que se ha tratado de acceder a las fuentes o en los que
hemos tenido que defendernos. Incluso, me ha pasado a mí también en el
ejercicio del periodismo tener que defenderme de diferentes acusaciones en los
tribunales; pero nunca hemos visto que se exigiera mostrar las pruebas antes de
que se iniciara una causa judicial.
Muchos de los que estamos aquí venimos de la Legislatura
porteña, creo que somos diez o doce diputados. Evidentemente la Legislatura
porteña ha sido un semillero, sobre todo para Juntos por el Cambio, el
radicalismo y la Coalición Cívica.
En el año 2013, el entonces jefe de Gobierno de la ciudad
de Buenos Aires envió a la Legislatura porteña e hizo aprobar con el voto de
muchos y muchas que están hoy aquí sentados, una Ley de Libertad de Expresión
que en su artículo 11 prohíbe expresamente que se le exija a los periodistas
exhibir material que no haya sido publicado o que quieran tener como parte de
la información que tienen que llevar adelante.
Me parece importantísimo que nosotros seamos capaces de
denunciar lo que está sucediendo y de acompañar a las diferentes organizaciones
en esta denuncia. Debemos corrernos del pleito que puede haber dentro de esa
familia que nos ha tenido acostumbrados a resolver sus situaciones familiares
de manera poco clara frente a la ley.
Me parece que hoy no es el día para discutir eso, sino para
darle un enorme respaldo al periodista Santiago O’Donnell y para exigirle a la
jueza Susana Gastaldi que dé marcha atrás con una
resolución que daña el sistema democrático argentino. (Aplausos.)
Sr. Iglesias.- Señor presidente: quiero responder
que...
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado: no
corresponde la respuesta a una cuestión de privilegio.
Sr. Iglesias.- ¡Quiero plantear una cuestión de
privilegio respecto a lo que hicieron con el diputado Menna!
Sr. Presidente (Massa).- De acuerdo al artículo 128
no corresponde responder a una cuestión de privilegio.
Ese fue el acuerdo arribado en la Comisión de Labor
Parlamentaria.
- 31 -
Sr. Presidente (Massa).- Antes de poner en tratamiento
el próximo tema, solicito al director médico que informe la situación de los
diputados Negri, Ritondo y otros, atento el resultado negativo
del segundo test del diputado Menna.
Tiene la palabra el director médico, doctor Marcelo Halac.
Sr. Halac.- Señores diputados: a pedido de la Presidencia, les
comentaré cómo fue la secuencia de las evaluaciones en esta última sesión, a
propósito de la aplicación del programa Recinto Protegido.
Se realizaron 364 evaluaciones entre test de saliva y PCR convencionales. Uno de los test de saliva fue positivo por lo que
se gatilló el dispositivo de emergencia que habitualmente tenemos para todos
los trabajadores de la Cámara. Así fue cómo se construyó la historia clínica
del paciente y se empezó a trabajar a fin de conocer sus antecedentes.
Quiero darles la tranquilidad de que la persona que dio
positivo ya tuvo COVID-19, por lo que actualmente ese resultado posiblemente
refleja fragmentos residuales del virus que no implican que esté trasmitiendo
ni contagiando la enfermedad. De esta forma, quiero darles tranquilidad a
quienes hayan estado en contacto con él.
De cualquier modo, me gustaría enfatizar la necesidad de
sostener el distanciamiento en las reuniones que ustedes tengan. No me canso de
repetir ‑discúlpenme, ya sé que lo han escuchado muchas veces- que en
todas las reuniones políticas que ustedes tienen –les puedo decir que la
cantidad de veces es innumerable- es necesario seguir pensando en esto para que
ante un contacto estrecho frente a un caso autóctono o genuinamente positivo
pueda evitarse tener que trabajar sobre el entorno.
Desde la Dirección de Servicios Médicos hemos tomado una
definición y se la hemos transmitido a la Presidencia. Hemos hecho las
consultas pertinentes con las autoridades de la Nación y de la ciudad de Buenos
Aires. Tanto la secretaria de Acceso a la Salud, doctora Carla Vizzotti, como el señor ministro de Salud de la ciudad de
Buenos Aires, el doctor Fernán Quirós, coincidieron con esta postura de
eventualmente retestear a esta persona, pero fundamentalmente
entendiendo que este resultado es una imagen o una fotografía residual de la
enfermedad que ya tuvo y que se agota ahí.
Paralelamente quiero comentarles que a esta persona se le
hizo un test rápido en su domicilio y
que el resultado fue negativo. En esa misma oportunidad también se le tomó una
muestra con un hisopado nasofaríngeo para completar su seguimiento.
Insisto, con respecto al entorno y a quienes se les sugirió
un aislamiento profiláctico, a esta altura y ya teniendo todos estos antecedentes
que hemos logrado reconstruir, creemos que no es necesario sostener ese
aislamiento y así se le hemos transmitido a la Presidencia.
Sr. Presidente (Massa).- Entendiendo que se han
levantado los motivos por los cuales algunos señores diputados y señoras
diputadas se habían aislado de manera voluntaria, los invitamos a que retornen
al recinto. Es decir, aquellos que se habían aislado y que tienen el deseo de
concurrir al recinto pueden hacerlo ya que se han levantado las causales del
aislamiento profiláctico.
Me refiero a los diputados Negri, Ritondo, Lospennato y
otros, quienes ya se encuentran habilitados para participar de la sesión desde
dentro del recinto.
- 32 -
Sr. Presidente (Massa).- Corresponde considerar el
dictamen de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas -Orden del Día N° 356‑ recaído en el
proyecto de ley venido en revisión del Honorable Senado sobre el
fortalecimiento de la sostenibilidad de la deuda pública (expediente
146-S.-2020).
aquí orden del dia nº 356
Sr.
Presidente (Massa).- En consideración en general.
Tiene la palabra el señor diputado Heller, por la Ciudad Autónoma
de Buenos Aires.
Sr.
Heller.- Señor presidente: compartiremos el informe con la diputada
Vallejos, presidenta de la Comisión de Finanzas.
Creo que el proyecto en consideración, que ya cuenta con
media sanción del Senado, marcará un hito en la historia legislativa de nuestro
país en lo que tiene que ver con el endeudamiento público.
Pienso que ya quedó expresado en el debate de las
comisiones del día de ayer que esta iniciativa constituye un gran paso para
consolidar y afianzar la institucionalidad en diversos temas. En este caso se
trata de un tema que tiene mucha trascendencia en un país como la Argentina: la
deuda púbica.
No es el primer proyecto vinculado con este tema. En
efecto, quiero recordar que para afianzar dicha institucionalidad en diciembre
de 2019 se sancionó la ley 27.541 de Solidaridad Social y Reactivación
Productiva en el Marco de la Emergencia Pública, cuando todavía no había
pandemia.
Esa ley declaró la emergencia pública en materia económica,
financiera, fiscal, administrativa, previsional, tarifaria, energética,
sanitaria y social. En su artículo 3º encomendó al Poder Ejecutivo la creación
de las condiciones para recuperar y asegurar la sostenibilidad de la deuda
pública. Entre las bases de delegación que figuran en su artículo 2º, se
establece que la sostenibilidad de la deuda pública deberá ser compatible con la
recuperación de la economía productiva y con la mejora de los indicadores
sociales básicos.
El gobierno comenzó a hacer su trabajo a pesar de aquellos
que intentaban desvalorizarlo, incluso muchos lo siguen haciendo hoy. Los
esfuerzos para alcanzar una negociación posible de la deuda externa que
beneficiara a nuestro país y que cumpliera con las bases de delegación recién
comentadas sirvieron plenamente.
Me parece que esto no se puede olvidar porque, insisto, a
esta altura parece que muchos no recuerdan lo que sucedió y tratan de restarle
importancia. Ese proceso de reestructuración fue altamente exitoso.
La reestructuración contempló un tratamiento equitativo
para la legislación extranjera y la legislación nacional. En comparación con la
deuda instrumentada por medio de títulos públicos en moneda extranjera –algo
que no siempre sucedió en nuestro país-, habitualmente la deuda bajo
legislación nacional terminaba en inferioridad de condiciones respecto a la de
legislación extranjera.
Luego, como lo expresa el mensaje de elevación de este
proyecto del Poder Ejecutivo al Senado -que es donde tuvo sanción-, y en
consonancia con el acuerdo de reestructuración alcanzado con los tenedores de
títulos públicos emitidos bajo legislación extranjera, se diseñó la propuesta
de reestructuración de la deuda pública nacional.
Quiero recordar que esta reestructuración generará un
ahorro en los desembolsos previstos para el período 2020-2024 de 42.000
millones de dólares, que efectivamente ayudan de manera significativa a generar
condiciones de saneamiento para las finanzas públicas, otorgan certidumbre a
los distintos sectores de la economía y brindan una nueva plataforma de
crecimiento con inclusión social, sobre todo una vez que podamos dar por
superados los efectos de la pandemia de COVID-19.
Voy a detenerme un minuto para hacer una observación,
porque ayer en el debate en comisión varios diputados mencionaron que la deuda
emitida a partir de la reciente negociación de los títulos en dólares fue a una
tasa anual del 16 por ciento. Inclusive, algún diputado reflexionó comparándola
con la que se colocó entre 2016 y 2018, y dijo que era carísima. Dijo que
entonces había sido de entre el 7 y el 8 por ciento, y que en este caso era
carísima. Voy a suponer que se trata de un error decir que la deuda fue
colocada al 16 por ciento, porque no quiero hacer interpretaciones.
Ese 16 por ciento del que se han ocupado los medios, es la
tasa interna de retorno que arroja el resultado de los valores actuales de los
títulos sometidos a los procesos de especulación del mercado. Pero el gobierno
pagará las tasas que figuran en los contratos. En cada momento en que se haya
pactado un pago de intereses, ese será el que figura en los contratos, y no lo
que pasa en la especulación y en la compraventa de esos títulos públicos. No
tiene nada que ver la cotización puntual de los títulos en el mercado de
valores. Es una referencia errada decir que el gobierno emite al 16 por ciento.
Señores diputados y señoras diputadas: los datos precisos
son los siguientes. La reestructuración externa redujo el interés que pagan los
títulos a una tasa promedio de 3,07 por ciento, mientras que el perfil de la
deuda heredada comprometía al país en un cupón promedio del orden del 7 por
ciento. Por su parte, también se observó una reducción significativa en el
cupón máximo de los nuevos instrumentos: 5 por ciento versus 8,28 del perfil
heredado. Asimismo, se redujo el monto de capital adeudado en casi el 2 por
ciento.
En el caso de los títulos en moneda extranjera bajo
legislación local, dado el perfil heredado, la reducción en el cupón es aún
mayor, al pasar del 7,6 al 2,4 por ciento promedio en los títulos emitidos.
También quiero decir que se ha reestructurado con un incremento considerable en
la vida promedio del nuevo perfil de la deuda, lo que alivia todo el proceso de
amortizaciones.
Otra de las terribles cuestiones de la deuda heredada es
que está colocada a plazos de vencimiento cortísimos. Estoy hablando de la
deuda pública colocada con privados, y ni hablemos de la del Fondo Monetario
Internacional, sobre lo que haré alguna referencia un poco más adelante.
Siguiendo con las política públicas y lo que a mi juicio
han sido aciertos de dichas políticas, hay que tener en cuenta que para
resolver el problema de la deuda denominada en pesos el Poder Ejecutivo
normalizó el funcionamiento de ese mercado y se lograron avances
importantísimos reduciendo las tasas de interés a niveles compatibles con la
producción, extendiendo plazos y logrando no solo ratios de renovación
elevados, sino también obteniendo financiamiento neto positivo para el Tesoro
nacional. Esto le permitió al gobierno depender menos de los adelantos
transitorios del Banco Central, incluso pudiendo amortizar parte de ellos en el
año 2020.
Luego de haber resuelto la refinanciación de la deuda en
dólares y de ir regularizando la deuda en pesos, se encaró la renegociación con
el Fondo Monetario Internacional de una deuda a la que no podemos adjudicarle
otro adjetivo que el de “impagable”, por las condiciones en que fue contraída.
Les daré rápidamente unos datos extraídos la semana pasada
de la página del Fondo Monetario Internacional.
La deuda heredada con el organismo supera los 45.000
millones y debería comenzar a pagarse en septiembre de 2021. Pero no hay que
perder de vista que, según el acuerdo vigente -que es lo que se está
renegociando- la Argentina debería desembolsar hasta 2023 unos 40.900 millones
de capital y 3.065 millones de intereses. Preguntarnos de dónde podrían salir
esos recursos es algo que creo que no tiene respuesta; es algo imposible para
la Argentina y muestra la manera, como mínimo, desacertada e inconveniente en
que se llevó adelante esa negociación.
De allí que los objetivos principales del gobierno en la
negociación en la que se encuentra son extender el plazo de las cuotas a pagar
y diferir los primeros vencimientos. Según los trascendidos, la idea es que
hasta 2025 no haya que pagarle al Fondo Monetario Internacional, con lo cual la
Argentina tendría despejado su frente externo, tanto con los acreedores
compradores de bonos de deuda privada, como con el Fondo Monetario
Internacional, lo que permitiría que todos esos recursos efectivamente se
volcaran a un programa de recuperación, desarrollo y crecimiento.
En ese marco estamos tratando este proyecto, que yo diría
que tiene tres objetivos. Uno de ellos es establecer que este Congreso sea el
que deba aprobar el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y el plan
plurianual de estabilización macroeconómica, que estará ligado al acuerdo con
el Fondo.
Es decir que el Congreso no solo aprobará un acuerdo con un
organismo internacional, un plan de pago de la elevada deuda que tenemos con
dicho organismo, sino también un plan rector para varios años que dará certezas
y confianza a toda la ciudadanía y a los distintos sectores que tienen que ver
con el aparato productivo.
Por otra parte, el proyecto establece que la Ley de
Presupuesto General de la Administración Nacional de cada ejercicio deberá
prever un porcentaje máximo para la emisión de títulos públicos en moneda
extranjera y bajo legislación y jurisdicción extranjera respecto del monto
total de las emisiones de títulos públicos autorizados para este ejercicio.
Aclaro que no es lo mismo endeudarse en pesos que en moneda
extranjera. La historia de los argentinos y de la deuda externa lo comprueban.
Por eso es esencial colocar un límite máximo para la deuda externa, en este
caso como porcentaje del total.
El tercer objetivo
que tiene el proyecto en consideración es que estas financiaciones en moneda
extranjera emitidas bajo legislación extranjera no sean utilizadas para
financiar gastos primarios corrientes, salvo en el caso de catástrofes, como
epidemias, inundaciones, etcétera, según lo establece el artículo 39 de la ley
24.156, de administración financiera.
Se nos dice que esto ya está comprendido en el artículo 60
de dicha ley. Sin embargo, hago una pregunta. ¿Qué parte de la enorme deuda
neta -ya que algunos economistas han sostenido que hay que tomarla en estos
términos- incurrida entre 2016 y 2018 ha sido dedicada a la inversión? Ha sido
insignificante. Por eso me parece muy adecuado lo que propone el proyecto que
estamos tratando. No podemos endeudarnos en dólares para gastar en pesos o para
gastos que no sean de capital. Eso también hace en gran medida a la
sostenibilidad del endeudamiento público.
Para terminar, y antes de ceder la palabra a la señora
diputada Vallejos, quiero decir que estamos dando un gran paso que se orienta a
fortalecer los mecanismos institucionales que garanticen el mantenimiento de la
sostenibilidad de la deuda pública, así como la ejecución de los planes de
estabilización macroeconómica de plazos que exceden un período de gobierno, de
manera que esto efectivamente sea una política de Estado.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra la señora diputada Vallejos, por Buenos Aires
Sra. Vallejos.- Señor
presidente: estamos aquí considerando este proyecto sobre fortalecimiento de la
sostenibilidad de la deuda, que forma parte de una agenda que para la Argentina
indiscutiblemente resulta central.
El presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, el
señor diputado Heller, ha explicado excelentemente gran parte de los aspectos
centrales de esta iniciativa.
Para completar el informe que ha brindado sobre el
proyecto, me gustaría profundizar un poco en el contexto histórico en el cual
se inscribe, porque a mi criterio de ahí emana en gran medida la importancia
del tema que estamos tratando.
Hay dos elementos en el proyecto que son nodales. El
primero tiene que ver, indiscutiblemente, con que este proyecto retoma la manda
constitucional en el artículo 75 en lo referente a las facultades de este
Congreso en relación con el manejo de la deuda. Además, apunta especialmente a
los títulos públicos en moneda extranjera regidos por ley extranjera. También
refiere al Fondo Monetario Internacional, a los programas de financiamiento, a
la ampliación de créditos ya otorgados por ese organismo y a la necesidad de
que sean aprobados por una ley de este Congreso.
El segundo elemento tiene que ver con el destino de los
fondos que se obtienen a través del endeudamiento, que no van a poder ser
utilizados para gastos primarios corrientes, como bien explicara el diputado
Heller. En mi exposición me voy a referir a estos dos puntos mencionados.
Al día de hoy, nuestro país todavía se encuentra en medio
de un proceso de negociaciones vinculadas al arreglo de la deuda insostenible
que recibió nuestro gobierno cuando le tocó asumir el 10 de diciembre de 2019.
Cabe destacar que después de la crisis del 2001, durante el
ciclo político de 2003-2015 -bajo las presidencias de Néstor Kirchner primero y
de Cristina Fernández después- se había alcanzado una restructuración
exitosísima que saldó el desastre de la anterior crisis de deuda que había
terminado en el default 2001, y
además se había construido un hito histórico, como fue el habernos quitado de
encima el lastre que significaba la tutela del Fondo Monetario y los límites
que esa tutela significan a la posibilidad del desarrollo de políticas
soberanas. Fíjese que bastaron apenas cuatro años para revertir drásticamente
aquel proceso de desendeudamiento, que con tanto esfuerzo habíamos construido
los argentinos y las argentinas.
Entre fines de 2015 y comienzos de 2018, es decir, en
apenas dos años, se les pagó a los fondos buitres, incluso, más de lo que
pedían, inaugurando el tercer ciclo de sobreendeudamiento externo de nuestro
país. Tras pagarles, se avanzó en un proceso vertiginoso de endeudamiento
externo con acreedores privados, que sumó la friolera de 100.000 millones de
dólares.
Tan vertiginoso resultó aquel proceso que el camino hacia
la insolvencia del país se recorrió en apenas dos años, agotando el acceso al
crédito privado. Después de eso, y en el contexto de un programa de política
económica centrado en la especulación financiera y en la fuga de capitales que
se había inaugurado con la total desregulación financiera y cambiaría de la
economía, el anterior gobierno decidió recurrir nuevamente al FMI. Ello fue así
porque, en definitiva, aquel programa de política económica -que culminó con el
mayor proceso de fuga de capitales de nuestra historia- era imposible de
sostenerse sin acceso al endeudamiento externo.
Como ciudadana argentina y como militante política, tengo
que confesar que aquella decisión del expresidente Macri fue uno de los
momentos más amargos que recuerde. Yo tuve el honor de asumir esta banca a
fines de 2017, por lo que llevaba apenas medio año como diputada nacional para
mediados de 2018, cuando se avanzó con el primer Acuerdo Stand-By con el FMI por 51.000 millones
de dólares.
Lamentablemente, aquel acuerdo entre el entonces Ejecutivo
nacional y el organismo multilateral se hizo sin el consentimiento de este
Congreso y omitiendo la manda constitucional. Incluso, se avanzó a pesar de que
desde nuestra bancada solicitamos una sesión especial, apelando a que una
decisión tan trascendente para nuestro país requería la intervención
parlamentaria y no la decisión unilateral del Ejecutivo. Dolorosamente, como
todos sabemos, aquella sesión fracasó y terminamos realizando expresiones en
minoría desde nuestro bloque.
- Ocupa la Presidencia
el señor presidente de la Comisión de Previsión y Seguridad Social, contador
Marcelo Pablo Casaretto.
-
Sra.
Vallejos.- La cuestión es que se avanzó en aquel Acuerdo Stand-By, que en pocos meses fracasó y para agravar
la situación se recurrió a uno nuevo ampliado por 57.000 millones de dólares,
que es el que ahora tenemos que arreglar. De los 57.000 millones de dólares
concedidos por el FMI, el préstamo más grande de la historia de la Argentina y
también del organismo, se terminaron desembolsando 44.000 millones de dólares
que engrosaron la cuenta de la deuda insostenible del país.
¿Por qué traigo todo esto al presente? Porque si en aquel
momento hubiéramos contado con esta herramienta, con este proyecto que
aspiramos a convertir en ley en la sesión de hoy, ese proceso nunca hubiera
ocurrido como ocurrió, y este préstamo con el que se decidió endeudar a nuestro
país mucho más allá de su capacidad de pago hubiera debido atravesar, de cara
al conjunto de la ciudadanía argentina, por el tratamiento parlamentario para
ser aprobado o desechado.
Como mencionaba al comienzo de mi exposición, el otro punto
que considero nodal tiene que ver con el destino de los fondos. Se trata de un
aspecto también muy importante que incorpora este proyecto. Fíjese, señor
presidente, que de aquel proceso de endeudamiento que elevó el peso de la deuda
externa del país de menos del 14 por ciento del PBI en 2015 al 45 por ciento en
2019, a los argentinos y argentinas no nos quedó nada. Se trató de una deuda
que hubiera permitido poner a punto la infraestructura para el desarrollo y
para el fomento de las exportaciones y las inversiones que nuestro país
necesita. En cambio, el Fondo Monetario Internacional contabilizó en su balance
cambiario una formación de activos externos, una fuga de capitales, de más de
88.000 millones de dólares.
Por su parte, el INDEC, en su medición de la fuga a través
del balance de pagos, da cuenta de que los argentinos y argentinas que
mantienen activos externos incrementaron entre 2015 y 2019 sus tenencias en más
de 103.000 millones de dólares.
Es decir que toda esa enorme deuda que pesa sobre el país,
sobre nuestro pueblo, sirvió para alimentar la dolarización y la fuga de
excedentes dolarizados por parte de un pequeño porcentaje privilegiado de
nuestra población, pero no reportó ningún beneficio de inventario para la
Argentina ni se aplicó a ampliar la capacidad de repago del país para hacer
frente a los compromisos externos que se estaban asumiendo.
Así las cosas, terminamos con un nuevo default en la segunda mitad del año 2019 y, finalmente, con un
proceso de reestructuración que al día de hoy está encarando el gobierno
nacional.
Entonces, en ese sentido creo que también es importante el
énfasis que pone este proyecto en cuanto a limitar el destino de los fondos que
se obtienen cuando se endeuda al país. Creo que es muy importante que estemos
empezando a recorrer este camino de fortalecer una nueva institucionalidad
democrática de nuestra economía con una legislación tan necesaria como esta.
Se trata de un resguardo poderoso que podemos darnos, ya
que, por ejemplo, a pesar de que el estatuto del FMI prohíbe el uso de los
fondos prestados a los países para financiar salidas considerables de
capitales, como la que estaba ocurriendo en la Argentina durante el período de
vigencia del Stand-By,
ciertas decisiones políticas -como las que asumió el organismo- pueden pasar
por encima de normas tales como su propio estatuto.
No obstante, es cierto que aquella violación de su propio
estatuto por parte del organismo debería ser, en esta instancia de negociación,
una ventaja para la Argentina, porque deja en claro que los límites formales
establecidos allí son factibles de ser corridos con decisiones políticas.
Es justamente eso lo que muchos y muchas estimamos que
debería ocurrir ahora, ya que los límites no son tan estrictos. Entonces,
frente a la corresponsabilidad que le cabe al organismo al endeudar al país en
un monto varias veces superior al que por su cuota le hubiera correspondido, y
excediendo ampliamente su capacidad de pago, sin dudas, lo menos que
corresponde es que también impere una decisión política que compensa a la
Argentina, como mínimo estipulando un plazo para la devolución de fondos que se
distribuya en varias décadas, permitiendo armonizar la recuperación económica,
el crecimiento de la economía y la capacidad de obtener dólares genuinos para
asumir los compromisos surgidos de la negociación, sin comprometer el bienestar
de nuestro pueblo ni nuestras legítimas aspiraciones de desarrollo nacional.
Finalmente, quiero decir que esperamos el mayor
acompañamiento de todas las fuerzas políticas para este proyecto y que también
anhelamos que esta ley, en el marco del nuevo pacto social en el que debe
basarse la reconstrucción del país, resulte un punto de partida para un
elemento constitutivo clave: el del nunca más a los procesos de fuga y
endeudamiento.
Sr.
Presidente (Casaretto).- Damos inicio a los
oradores de los bloques.
Tiene la palabra el señor diputado Rauschenberger,
por La Pampa.
Sr.
Rauschenberger.- Señor presidente: en
torno al proyecto que hoy nos convoca hay un gran consenso en la necesidad de
que establezcamos un régimen que ampare a las argentinas y los argentinos de
los posibles endeudamientos irresponsables. Esto quedó demostrado en su
tratamiento en el Senado y lo mismo sucedió ayer en la reunión conjunta de
comisiones que mantuvimos. Por eso creo que hay que resaltar el trabajo que
venimos llevando adelante y también agradecer el acompañamiento que estaría
dando la oposición.
Repasando un poco la historia de los últimos años de
nuestro país respecto a deudas, si bien ya tanto el compañero Heller como la
compañera Fernanda Vallejos describieron muy bien la situación, podemos decir
que Néstor Kirchner fue quien inició un proceso de desendeudamiento en nuestro
país, que con mucho esfuerzo lo llevamos adelante, con el esfuerzo de los argentinos
y de las argentinas. Ese proceso hizo que en el año 2005 se le debiera cero
pesos al Fondo Monetario Internacional. Luego Cristina Fernández de Kirchner
continuó con ese proceso y ello nos permitió entregar al gobierno anterior un
país desendeudado.
Ese desendeudamiento fue posible, como decía, gracias al
acompañamiento de todo el pueblo. Lo hicimos en aras de buscar la soberanía
política porque sabíamos que, de esa manera, estábamos consolidando la
independencia económica para lograr el crecimiento con desarrollo y con
inclusión social, apuntando también a la justicia social.
Luego de tamaño esfuerzo del pueblo, a partir de abril de
2016 se desencadenó todo un proceso de endeudamiento producto del acceso al
mercado de créditos internacionales por parte de nuestro país.
Con ese proceso llegamos a una situación que hizo que terminemos
2019 con una enorme deuda en moneda extranjera, que generó una crisis económica
y social. Ante esa situación, nuestro gobierno tomó el toro por las astas y le
dio la participación que le corresponde al Congreso de la Nación. De esa
participación surgieron leyes que también fueron expuestas por quienes me
precedieron en el uso de la palabra.
Hoy estamos tratando un proyecto que apunta al
fortalecimiento de la sostenibilidad de la deuda pública. Anteriormente,
tratamos la restauración de la sostenibilidad, pero hoy estamos hablando del
fortalecimiento de la sostenibilidad de la deuda pública.
Creo que tenemos que poner en valor el proyecto que estamos
tratando y darle la dimensión política y existencial que significa para el
presente y el futuro de los argentinos tener normativas que preserven al país y
a los argentinos de reincidir en actitudes irresponsables de
sobreendeudamiento.
Estamos tratando una iniciativa que significa un salto de
calidad institucional en materia de deuda pública en nuestro país, que se
refleja en la decisión de nuestro gobierno de tomar como política de Estado la
deuda pública. Por ello el ministro de Economía ha planteado esa política de
Estado y lo trasunta en darle al Congreso de la Nación la posibilidad y la
potestad -que nunca debió perder- de tener y ejercer plenamente sus funciones
específicas en cuanto al control de la deuda, como lo fija la Constitución
Nacional. Por otro lado, también fija limitaciones al endeudamiento,
fundamentalmente en moneda y en jurisdicción extranjeras, y lo mismo en cuanto
a los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional.
Con ese concepto de sostenibilidad de la deuda como
política de Estado, venimos a este recinto a decir nunca más al
sobreendeudamiento, nunca más al sobreendeudamiento irresponsable y nunca más
al sobreendeudamiento para fugar divisas. Venimos a decir nunca más al
sobreendeudamiento que hipoteca el desarrollo, que condena a la miseria a millones
de argentinos y que compromete a varias generaciones.
Ese nunca más al endeudamiento irresponsable es un reto y,
al mismo tiempo, un imperativo ético y político que nos impone como
legisladores encontrar un marco legal adecuado para bloquear cualquier intento
de avanzar en el futuro con políticas de sobreendeudamiento que sometan a
nuestro pueblo a la miseria y que sean lesivas a la dignidad nacional.
Por eso es necesario destacar la importancia de este
proyecto, que no se limita a ser una herramienta económica y fiscal, sino que
está dando un paso muy importante en ese nunca más al sobreendeudamiento.
Digo esto porque, con algunas expresiones, parece que se ha
querido relativizar la importancia de este proyecto. Se ha dicho que quizás no
era necesario o que se superponía con la ley de administración financiera. Pero
no es lo mismo endeudarse que desendeudarse. Ya lo vivimos en la
Argentina y sufrimos los efectos. No es lo mismo endeudarse bajo legislación o
jurisdicción extranjera que bajo las normas de nuestro país. Esto lo sufrimos y
lo padecimos doce años y hasta nos embargaron la Fragata Libertad.
No es lo mismo endeudarse para financiar fuga de capitales
y gastos corrientes que endeudarse para desarrollar la capacidad productiva de
nuestro país.
Por eso, justamente, uno de los puntos centrales de esta
iniciativa es poner un límite e imposibilitar que la deuda en moneda extranjera o con
organismos como el Fondo Monetario Internacional sea destinada a gastos corrientes.
Tenemos que desarrollar nuestra capacidad productiva y,
como dijo la diputada Vallejos, si esta norma hubiera estado aprobada en el
gobierno anterior, no hubiéramos recibido una deuda con un stock que implica el
90 por ciento del producto bruto, cuando fue integrada en el 2015 con un 52 por
ciento.
Tampoco es lo mismo que un gobierno entregue su mandato con
un 25 por ciento de deuda en moneda extranjera y que otro gobierno lo deje con
un 44 por ciento de deuda en moneda extranjera. Esas son las diferencias que
tenemos.
Ante esta situación,
este proyecto busca evitar repetir la historia. Hace aproximadamente 30 años el
peronismo ingresó al Congreso de la Nación un proyecto de ley que luego fue
sancionado con el número 24.156, es decir, la ley de Administración Financiera
y de los Sistemas de Control del Sector Público Nacional.
Dicha norma fijó el funcionamiento del Estado en cuanto a presupuesto,
contabilidad, tesorería y crédito público.
Hoy nuevamente el peronismo viene a ofrecer a la sociedad
una propuesta que tiende justamente a perfeccionar esta legislación, a
complementarla y a fortalecerla. Venimos hoy con una propuesta superadora.
También se habló por ahí, y creo que se mencionó en la
comisión de ayer, que había un problema de técnica legislativa. Aquellos que
hoy nos dicen que hay un problema de técnica legislativa tuvieron la
oportunidad de redactar un proyecto, porque en el año 2016 el Senado había
aprobado una iniciativa similar y lo cajonearon. Sin embargo, hoy nos vienen
hablar de que hay un problema de técnica legislativa.
Señor presidente: el desafío que tenemos por delante es
mostrar que somos capaces de romper con el maleficio de la deuda infinita que
significa una Nación y un pueblo endeudados que nos deja indefensos ante
cualquier pandemia.
Este proyecto es un gran avance en este desafío de romper
ese maleficio. Seguramente, la ley por sí sola no alcanza para cumplir con
todos esos objetivos, pero tenemos que hacer todos los esfuerzos políticos y
militantes en la tarea de construir poder constituyente, si así es necesario,
para evitar que se transformen los derechos sociales en deuda.
Sabemos muy bien que la deuda limita el desarrollo de los
países, condiciona y limita el futuro, que no puede estar en manos de los
acreedores. El futuro tiene que estar en manos de nuestro pueblo, en nuestras
manos, en manos de la patria.
Voy a acompañar favorablemente la iniciativa, porque esta
ley significa un avance significativo en el nunca más al sobreendeudamiento. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el señor diputado Hagman, por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Hagman.-
Señor presidente: el diputado Heller, la diputada Vallejos y todos los
diputados que me precedieron en el uso de la palabra han sido muy claros. Estamos considerando un proyecto que es corto
y que puede parecer intrascendente, pero es muy relevante.
Estamos discutiendo esta iniciativa en el marco de una
crisis de deuda que podemos fechar en los primeros meses del año 2018 si
queremos tomar como referencia cuando la Argentina se quedó sin acceso a los
mercados financieros voluntarios o, en el segundo semestre del 2019, si
queremos fecharla cuando se acaban los recursos del Fondo Monetario
Internacional.
Esta crisis de deuda se está intentando resolver, pero está
en curso. Aun con la reestructuración exitosa con acreedores privados que se
logró el año pasado queda la negociación con el Fondo Monetario Internacional,
e incluso con una buena negociación con el Fondo Monetario Internacional, el
proceso de recuperación de la sostenibilidad de la deuda argentina va a llevar
muchos años. Este es
un problema recurrente en la historia argentina de los últimos 45 años. Por lo
tanto, tenemos que reflexionar sobre ello.
Las tres grandes crisis económicas que hemos vivido en este
período están directamente relacionadas con procesos de sobreendeudamiento.
Incluso podríamos decir que las crisis de deuda han sido el detonante de
las grandes crisis económicas argentinas de los últimos 45 años.
No se puede entender la crisis de 1989 y todas las
dificultades que tuvo en la gestión económica el gobierno de Alfonsín sin ver
el sobreendeudamiento llevado adelante por la última dictadura militar.
No se puede entender la mega crisis del 2001 sin el proceso de
sobreendeudamiento que se llevó adelante durante todo el período en que estuvo
vigente la ley de convertibilidad. No se puede entender la crisis actual sin el
proceso de sobreendeudamiento -mucho más concentrado y de los más intensos de
la historia argentina y de la historia global- que se llevó adelante entre 2016
y 2018.
En estas tres grandes crisis económicas hay un patrón en
común, una mecánica muy similar: sobreendeudamiento con acreedores privados,
rescate de algún organismo financiero multilateral y, finalmente, el default.
Es bastante habitual, en cierto discurso, plantear que la
Argentina tiene una tendencia al default permanente, a incumplir los
contratos, como si fuera una suerte de pulsión. Pero, en realidad, el default
no es otra cosa que el último paso que siempre está precedido por un proceso de
sobreendeudamiento y donde, además, como vimos en estos tres casos, hay una
intervención de los organismos multilaterales de crédito. El endeudamiento con acreedores privados, el rescate del FMI
y el default son recurrentes en las tres grandes crisis económicas
argentinas que hemos vivido en los últimos cuarenta y cinco años.
Nos tenemos que hacer cargo de este problema
porque cada de una de estas crisis económicas degradó la economía argentina y,
obviamente, las condiciones de vida de nuestro pueblo. Entonces, enhorabuena que
este Congreso de la Nación comienza a hacerse cargo de este problema. Quizás,
una de las formas de hacerlo es entendiendo que este proceso de
sobreendeudamiento es una de las principales fuentes de los desequilibrios
macroeconómicos de los que tanto nos gusta hablar, de las presiones cambiarias
y de los procesos inflacionarios. Vamos a entender qué pasa con la economía
argentina que siempre parece tan desordenada.
Hay un discurso que diría que es el
dominante en la discusión política, en los medios de comunicación e incluso en
los debates económicos académicos. Hace poco salió un artículo de varios
economistas muy respetados y serios, que se llama La paradoja populista,
que expresa la tesis de que la fuente de los desequilibrios económicos es una
suerte de pulsión de hacer política demagógica, de gastar más de lo que se
puede, de generar una distribución del ingreso incompatible con lo que puede
generar la economía; por lo tanto, tenemos estos desequilibrios. Esta es una
idea dominante: tenemos desequilibrios macroeconómicos porque el gasto es muy
grande, porque el Estado gasta mucho y porque la distribución del ingreso es
mayor que lo que la economía argentina puede brindar.
Si miramos la historia de estas tres
grandes crisis económicas, lo que hay en común no es una determinada
distribución del ingreso ni un porcentaje de déficit fiscal; lo que hay en
común en este ciclo es un proceso de sobreendeudamiento que usualmente, además,
viene acompañado de políticas de liberalización financiera, fuga de capitales y
grandes crisis.
Sr.
Iglesias.- Ya llevan 20.000 millones...
Sr.
Hagman.- Quizás al
diputado no le gusta escuchar algunas cosas, señor presidente.
Tenemos que empezar a asumir que este
proceso recurrente de sobreendeudamiento es la fuente de los desequilibrios
macroeconómicos. Tenemos que hacernos cargo, regularlo y establecer reglas para
evitar que esto ocurra sistemáticamente.
Si cada diez o quince años la Argentina choca con este tipo de crisis,
obviamente no hay posibilidad de estabilidad, crecimiento ni desarrollo. Esto
tiene que ver con que el sobreendeudamiento -lo hemos dicho en otras
oportunidades‑ no es el resultado de una negligencia técnica o de la
política económica, sino que cumple una función determinada en estos ciclos.
Podemos tomar el último caso reciente ‑para no hacerlo más largo‑,
donde se ve claramente cómo el endeudamiento cumple la función de financiar una
rentabilidad absolutamente incompatible con la estabilidad económica
argentina.
¿Cuál fue el costo de que la Argentina
en 2016 y 2017 tuviera una tasa de interés cercana al 40 por ciento y un tipo
de cambio prácticamente planchado? La combinación de tasa de interés alta y
tipo de cambio estable básicamente hizo que los fondos vinieran, se
posicionaran en papeles con una tasa de interés alta en pesos y que cuando se
fueran obtuvieran el mismo tipo de cambio con el que entraron, es decir que
dolarizaron la rentabilidad de esos instrumentos financieros. Una tasa de interés
de casi 40 por ciento en dólares no existe en ningún lugar del mundo. No hay
país viable con ese esquema de rentabilidad financiera, y no hay estabilidad,
crecimiento ni desarrollo posibles. Debemos entender que con este nivel de
voracidad con el que vivimos en la Argentina en esos dos primeros años del
gobierno anterior no hay posibilidad de estabilidad. Ese es el problema que
tenemos que resolver.
Obviamente, si hay una vacuna contra
esto, es la conciencia social de nuestro pueblo para impedir que estas cosas
pasen. Pero las leyes ayudan, y por eso estamos tratando una ley que le pone
límites al Poder Ejecutivo en su capacidad de endeudarse en moneda extranjera y
que ‑más importante todavía‑ obliga al Poder Ejecutivo a pasar por
este Congreso los acuerdos que realiza con el Fondo Monetario
Internacional. Es decir, los acuerdos
que se hacen con los de afuera se tienen que hacer de cara a los de adentro, y
no a espaldas.
Hace pocos días hubo información en el
sentido de que la Oficina de Evaluación Independiente está revisando el acuerdo
que el FMI hizo con la Argentina. El mismo Fondo está investigando el acuerdo
que hizo con la Argentina, por qué le prestaron a la Argentina esa cantidad de
dinero, en el marco del acuerdo más importante de la historia del
organismo. Este Congreso también debe
avanzar en ese proceso de investigación.
El pueblo argentino tiene derecho a saber cuáles son los acuerdos con
organismos que hace el Poder Ejecutivo, y para eso esta ley obliga a debatirlos
en el Congreso.
Pensemos qué distinta hubiera sido la
historia en los últimos años si esta ley que estamos sancionando hubiera estado
vigente. Esta ley sirve, por lo menos, para dificultar el proceso que lleva a
que sistemáticamente tengamos que padecer estos ciclos de sobreendeudamiento,
vinculados además con la fuga de capitales y las grandes crisis
económicas.
Cuando en 2019 el pueblo argentino
votó al Frente de Todos, lo hizo por muchas razones. Una de ellas ‑y la dijo el presidente
acá el año pasado, también la vicepresidenta y el ministro de Economía‑
es construir ese “nunca más” a los ciclos de deuda y fuga. Para construir ese “nunca más” tenemos que
sancionar leyes concretas que den herramientas institucionales al pueblo
argentino a través de este Congreso, para impedir que eso vuelva a pasar.
Esta ley es sencilla y corta, y sería
bueno que nosotros le demos trascendencia como parte de ese proceso para que
después de estos cuarenta y cinco años de grandes crisis económicas realmente
nunca más la Argentina tenga que estar sometida a estos procesos que nos han
hecho tanto daño. (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra el señor diputado Laspina, por Santa
Fe.
Sr.
Laspina.-
Señor presidente: voy a comenzar haciendo algunas observaciones de carácter
técnico respecto de este proyecto.
Primero, aclaro la posición de nuestro bloque, que es obviamente la de
acompañarlo por razones obvias, pues devuelve facultades que son propias del
Congreso de la Nación en materia de arreglo de la deuda pública y, por tanto,
no podemos oponernos a nada que le dé más facultades a este Congreso para
opinar y limitar el accionar del Poder Ejecutivo en materia de endeudamiento.
Pero déjeme decirle, señor presidente,
que quien haya elaborado este proyecto seguramente no se tomó el trabajo de
leer la ley de administración financiera.
Este proyecto básicamente es una reforma de su artículo 60, y no hace
referencia a él, ni lo deroga ni lo modifica, por lo que, después de la aprobación de esta ley,
tendremos dos leyes que entrarán en contradicción, puesto que reglan materias
idénticas con distintas prescripciones.
Tengo aquí el artículo 60 de la ley de
administración financiera, y lo voy a leer. Es tanta la similitud con lo que
estábamos regulando que yo le daba el ejemplo hoy a un compañero de bloque que
es similar a que yo introduzca un artículo en el Código Penal reglamentando la
pena por asesinato de una determinada forma, sin modificar el artículo que la
rige y así tendría dos penas para un mismo delito.
Hoy vamos a tener dos leyes que van a
reglar lo mismo. El artículo 60 de la ley 24.156 dice específicamente: “Las
entidades de la administración nacional no podrán formalizar ninguna operación
de crédito público que no esté contemplada en la ley de presupuesto general del
año respectivo o una ley específica.” Esto es bastante parecido a lo que
tenemos hoy aquí. Luego dice que la ley de presupuesto general debe indicar,
como mínimo, la siguiente característica de las operaciones de crédito público:
tipo de deuda, especificando si se trata de deuda interna o externa ‑muy
similar a lo que estamos tratando hoy‑, monto máximo autorizado por
operación, plazo mínimo, destino del financiamiento, etcétera.
Después dice: “Si las operaciones de
crédito público de la Administración Nacional no estuvieran autorizadas en la
Ley de Presupuesto General del año respectivo, requerirán de una ley que las
autorice expresamente.” Esto es algo bastante parecido a lo que se está
diciendo. Pero agrega una excepción, que es el artículo 60 in fine, que establece: “Se exceptúa del cumplimiento de las
disposiciones establecidas precedentemente en este artículo a las operaciones
de crédito público que formalice el Poder Ejecutivo nacional con los organismos
financieros internacionales, de los que la Nación forme parte.” Es decir, entre
ellos el Fondo Monetario Internacional. El artículo 60 va a seguir diciendo
esto y este proyecto va a establecer que, en el caso de un organismo financiero
en particular, va a tener aprobación previa del Congreso.
Entonces,
evidentemente, aquí hay un problema que tenemos que resolver. En la discusión
en particular vamos a plantear precisamente una propuesta de reforma para que
quede mucho más clara esta cuestión.
Me
parece que el proyecto trae cierta claridad respecto a la potestad del Poder
Ejecutivo de prorrogar jurisdicción en materia de endeudamiento, que hasta
ahora era un debate no saldado: algunos Ejecutivos lo hacían por decreto,
mientras que otros lo hacían por ley, como el caso del ministro Guzmán, por
ejemplo, que pidió autorización al Congreso para la emisión de los bonos. Esto,
de alguna forma salda el debate.
Con
respecto al Fondo Monetario, la redacción de este proyecto es un tanto ambigua.
Evidentemente, lo trae a discusión al Congreso. Lo que no está claro –yo haré
la interpretación de nuestro interbloque‑ es si se refiere a un referendo
respecto al acuerdo en sí. Tal como está redactado en este proyecto, nosotros
interpretamos que se refiere a la autorización para tomar el endeudamiento
específico, pero no necesariamente a refrendar el acuerdo que se firma, porque
esa negociación es prerrogativa del Poder Ejecutivo nacional, de la cual el
Congreso de la Nación no forma parte.
De
modo tal que como Congreso nosotros no podemos avalar o no un determinado programa
con el Fondo Monetario Internacional ‑que incluye de por sí una
estrategia de política económica‑ porque no formamos parte del Poder
Ejecutivo y porque, además, somos la oposición, que tenemos otras ideas en
materia de política económica.
De
modo tal que quiero dejar sentado esto como precedente porque sé que la
intención original de este proyecto fue traer a discusión a este recinto el
eventual acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Nosotros podemos
autorizar o no la toma de deuda y votar a favor de la toma de deuda como
hacemos con otros créditos de la Nación, pero no necesariamente entrar en un
debate de fondo respecto a la cuestión cualitativa del programa que se debata
con el Fondo Monetario, que es una prerrogativa exclusiva del Fondo Monetario
Internacional.
Entonces,
hasta aquí algunas cuestiones técnicas. Yo me referiré al artículo 60 de la Ley
de Administración Financiera y el diputado Pastori
hará lo propio con el artículo 56, que también entra en colisión con el
artículo 3º de este proyecto que estamos tratando.
Se
habló mucho de endeudamiento, obviamente, porque estamos tratando el tema del
endeudamiento externo. Los argentinos tenemos que dejar otra vez de lado los
eufemismos y la mentira. La deuda es hija del déficit. Esa deuda puede ser en
dólares o en pesos ‑como está emitiendo de manera abundante el ministro
Guzmán a lo largo de este año‑, y puede ser bajo legislación local o
extranjera, según le convenga al país en cada momento. Recordemos que los
países de Latinoamérica están emitiendo deuda bajo legislación extranjera, en
moneda extranjera, a tasas del 3 y pico por ciento, que ya quisiera que la
Argentina tuviera. Nadie en su sano juicio podría decir que esa deuda es
ilegítima o insustentable, como sí lo es la emisión de deuda que hizo el
ministro Guzmán –ratifico‑ al 16 por ciento, que es el rendimiento de los
bonos que se están vendiendo en dólares en el mercado.
Entonces,
en primer lugar, basta de eufemismos, porque no se puede entender el proceso “estanflacionario” en el que está la Argentina sin
comprender antes el proceso de vaciamiento del Banco Central de la República
Argentina que hizo el kirchnerismo durante los años que le tocó administrar.
El
gobierno del presidente Macri heredó reservas negativas y una brecha cambiaria
gigante de la que hubo que salir para que no explotara aún más el balance de
ese Banco Central. No es posible entender por qué los jubilados ganan miseria
sin comprender que el kirchnerismo vació el Fondo de Garantía de
Sustentabilidad de los Depósitos, llenándolo de papeles y de bonos, para
financiar el déficit descontrolado que le dejó al presidente Macri.
No
se puede comprender la emisión de deuda de la gestión de Cambiemos sin entender
que el kirchnerismo dejó ocho puntos del PBI de déficit fiscal consolidado, que
hubo que reducir con sangre, sudor y lágrimas y que le costó la reelección al
presidente Macri.
Se
jactan de que es un gobierno que no reeligió. Pero recordemos que todos los
anteriores gobiernos peronistas terminaron a mitad de camino, salieron por la
ventana. El de Macri fue el primer gobierno no peronista, desde Marcelo
Torcuato de Alvear, que terminó su mandato. Para equilibrar las cuentas
públicas sacrificó su propia reelección. Obviamente, pandemia mediante, eso ha
sido rifado durante este año con razones que hasta puedo entender.
No
se puede entender la emisión de deuda del presidente Mauricio Macri si uno no
repasa los muertos en el “placard” que le dejaron
cuando asumió. Hubo que pagar 15.000 millones a los holdouts, que ustedes repudiaron
y que casi se quedan con la Fragata Libertad. No podíamos emitir un bono,
éramos los parias del sistema financiero internacional, como volvimos a serlo
ahora, después de esta renegociación que nos salió carísima, que nos dejó fuera
del mercado de crédito y que pateó la pelota cinco años y tres años para
adelante. Seguramente la tendremos que pagar nosotros y nos van a acusar de que
tomamos deuda nuevamente.
Se
pagó 15.000 millones a los holdouts; se hizo un repago de coparticipación a las provincias
también por 15.000 millones ‑que Néstor Kirchner les había sacado de
manera ilegal‑; se pagó 3.000 millones a las cajas jubilatorias, que
nunca les transfería el kirchnerismo. Aclaro que estoy hablando de dólares.
Cinco mil millones de dólares en deudas por los programas energéticos, el Plan
Gas, el Programa Gas Plus, todo eso que inventó De Vido y que hubo que saldar.
Además,
se pagaron 932 millones de dólares al CIADI. Hubo que poner un billete arriba
del otro, como hizo Axel Kicillof cuando fue a negociar con el Club de París,
pero no hizo ninguna quita. Es lo que vence dentro de unos días, que no sé cómo
van a pagar.
La
deuda con Paraguay y Bolivia fue de 436 millones de dólares. No les pagaron ni
a los vecinos porque no tenían reservas. Son más de 40.000 millones de dólares
de los 76.000 que aumentó la deuda durante el gobierno del presidente Macri,
más el déficit, obviamente. Esta es la contabilidad.
Entonces,
así como hoy intentamos poner un límite al endeudamiento en moneda extranjera y
en jurisdicción extranjera, también propongo que empecemos a discutir el límite
a la emisión del Banco Central para que nos saque de esta inflación creciente de
4 por ciento mensual que tenemos los argentinos.
El
año pasado el Tesoro recibió del Banco Central la friolera de dos billones de
pesos. No billones americanos, sino de los nuestros, o sea millones de
millones, de los cuales el Banco Central retiró con deuda ‑deuda en pesos
o la que les guste a ustedes, la nacional y popular‑ el 80 por ciento.
¿Ustedes creen que eso es gratis? Eso se está pagando ahora con inflación.
Entonces, ¿por qué no incorporamos en un artículo una restricción mucho más
clara que la que hoy rige de manera laxa en la Carta Orgánica del Banco Central
para limitar o, por lo menos, para discutir cuánto le vamos a sacar al Banco
Central? Eso es lo que termina generando la inflación y la estanflación en que
estamos los argentinos desde el año 2011, cuando Cristina Kirchner inauguró el
proceso estanflacionario en el momento en que los
precios internacionales se empezaron a caer y la economía entró en esta
depresión de la cual no podemos salir.
Esta
es nuestra posición: vamos a votar afirmativamente porque creemos que hay que
dar más atribuciones al Congreso; vamos a votar en contra del artículo 1º por
el error tremendo de redacción y de técnica legislativa; vamos a votar
afirmativamente el artículo 2º, que se refiere a la cuestión de la discusión
del Fondo Monetario en el Congreso de la Nación y vamos a votar en contra del
artículo 3º por las razones que ahora va a explicar el diputado Pastori. (Aplausos.)
Sr. Presidente
(Casaretto).- Tiene la palabra el señor diputado Pastori, por Misiones.
Sr. Pastori.- Señor presidente: compartiendo obviamente las expresiones
del señor diputado Laspina, integrante de mi
interbloque, me voy a centrar en el artículo 3° de este proyecto, que tiene
tres artículos de fondo, ya que los otros dos son de forma.
Voy a comenzar refiriéndome a la Ley
de Administración Financiera, 24.156, en lo que respecta a su artículo 56,
incluido en el capítulo que justamente reglamenta el sistema de crédito
público. Se trata del primer artículo de este capítulo y dice expresamente que
“el crédito público se rige por las disposiciones de esta ley, su reglamento y
por las leyes que aprueban las operaciones específicas”. Y aclara que “se
entenderá por crédito público...
Sr. Presidente (Casaretto).- Señor diputado Pastori:
si me disculpa, tiene la cámara apagada. No sé si es una cuestión de voluntad
suya o se le apagó.
Ahora lo vemos. Adelante.
Sr. Pastori.- Gracias, señor presidente, muy amable.
Decía que el mismo artículo 56, en su
segundo párrafo, define qué se entiende por crédito público: la capacidad que
tiene el Estado de endeudarse para captar medios de financiamiento para
realizar inversiones reproductivas -compra de bienes de capital, obra pública-,
para atender casos de evidente necesidad nacional, para reestructurar su
organización o para refinanciar sus pasivos, incluyendo los intereses
respectivos, obviamente. Este último fue el uso más común que ha tenido el
crédito público en la República Argentina: tomar deuda para reestructurar
deuda.
Este artículo 56 termina diciendo: “Se
prohíbe realizar operaciones de crédito público para financiar gastos
operativos”. Es muy terminante, y la doctrina y la práctica de todo este tiempo
en que ha regido esta ley ‑que tiene ya algunos años‑ muestran
claramente que está prohibido tomar deuda pública, hacer uso del endeudamiento,
del crédito público, para financiar gastos operativos, gastos de
funcionamiento, como puede ser por ejemplo endeudarse para pagar sueldos,
insumos, bienes de consumo, servicios y ese tipo de cuestiones.
Esto está prohibido en forma
terminante, tanto para la deuda pública interna como también para la deuda pública
externa. La diferencia está en que la deuda pública interna es aquella que se
toma con acreedores que viven en la Argentina o que el pago se puede exigir en
nuestro país, y puede ser en moneda nacional o en moneda extranjera, pero el
pago se realiza en la República Argentina. La deuda externa es la que por lo
general se toma con organismos multilaterales de crédito, con otros Estados o
con otras personas o empresas residentes en otro país, generalmente en moneda
extranjera.
Entonces, la ley 24.156, en su
artículo 56, último párrafo, prohíbe que, cualquiera sea el crédito público ‑sea
deuda interna o deuda externa‑, se utilice para gastos corrientes.
Vamos ahora al proyecto que estamos
tratando. El artículo 3° en realidad fue agregado en el debate en el Senado de
la Nación, ya que no constaba originalmente en el proyecto enviado por el Poder
Ejecutivo, y lo que pretende, tal vez de buena fe ‑no estoy calificando
la intencionalidad‑, es reforzar aquello de que no se va a poder usar
-como dice la ley- para atender gastos primarios corrientes, pero está hablando
de la deuda en moneda extranjera y bajo legislación y jurisdicción extranjeras
y con el Fondo Monetario.
Señor presidente, señores
legisladores: acá se introduce un problema que puede ser grave y que puede
generar situaciones muy conflictivas para adelante. Primero porque no había
necesidad de este artículo 3°, ya que como bien lo expresé, nuestra Ley de
Administración Financiera prohíbe este uso para gastos primarios corrientes,
por lo tanto, no era necesario reafirmarlo. Pero al hacerlo se refiere
únicamente a la deuda en moneda extranjera, bajo jurisdicción o legislación
extranjeras y a la deuda con el Fondo. Con lo cual, uno puede entender que lo
que está haciendo es permitir que la deuda pública interna ‑aquella que
se emite en pesos, que se puede pagar en el país‑ sí pueda ser destinada
a pagar gastos corrientes, porque esta norma no lo está prohibiendo.
De manera que, en vez de ser un avance
para reafirmar este concepto, significaría en tal inteligencia un claro
retroceso en materia de destino del crédito público, lo cual no podemos
permitirnos.
Del mismo modo que explicaba el señor
diputado Laspina respecto del artículo 1°, que se
contrapone con el artículo 60 de la 24.156, el artículo 3° del proyecto se
contrapone con el artículo 56 de la Ley de Administración Financiera. Vamos a
tener dos leyes referidas al mismo tema, donde una dice una cosa y la otra, algo
distinto. ¿Cuál de las dos se aplicará? ¿Cuál de las dos se va a poner en vigencia,
suponiendo un uso de crédito público en moneda local clasificado como deuda
pública interna? ¿Estará entonces facultado el Poder Ejecutivo para destinar el
producido de ese crédito a pagar gastos corrientes? Va a quedar la gran duda.
Aparentemente, por lo que dice el artículo 3°, sí lo estaría, pero la ley
24.156 dice que no. ¿Cuál de las dos leyes se aplicará? ¿Con cuál de las dos
nos vamos a manejar?
Esto está muy confuso, por lo que,
señor presidente, en nombre de nuestro interbloque solicito que, en el
tratamiento en particular, los cuatro artículos del proyecto se voten en forma
nominal, artículo por artículo. Respecto del artículo 3° en particular, por
considerarlo innecesario, confuso y contrapuesto a las claras prescripciones de
la Ley de Administración Financiera, vamos a pedir directamente que sea
eliminado del proyecto.
Con estas consideraciones en cuanto a
la forma de votación que va a tener nuestro interbloque, señor presidente, y
adhiriendo a las efectuadas por el señor diputado Laspina,
doy por concluida mi participación.
Sr. Presidente (Casaretto).- Desde la Presidencia saludamos a dos colegas
que cumplen años: la diputada Estévez, de Córdoba, y el diputado Ponce, de San
Luis. (Aplausos.) No sé si hay algún
otro colega que esté trabajando en esta sesión en el día de su cumpleaños.
Tiene la palabra el señor diputado Sarghini, por Buenos Aires.
Sr. Sarghini.- Señor presidente: estamos tratando un proyecto de ley que,
si no fuera por nuestra historia, no sería necesario. No sería necesario este
proyecto de ley ni tampoco un proyecto de ley que con un grupo de compañeros de
este interbloque hemos presentado hace ya un año.
Pero nuestra historia indica -y
excluyo el año 2020 que acaba de terminar‑ que, de los treinta y seis
años de vida democrática, en treinta y dos tuvimos déficit fiscal. La historia
indica que, hasta la última renegociación, la Argentina ha tenido cuatro
renegociaciones de deuda con quitas. Y esto a veces hasta minimiza las crisis
de deuda, porque disimula otras formas de default
que existieron en algún momento de nuestra historia, como los canjes forzados,
y diría que hasta los reperfilamientos. Todo aquel
incumplimiento de un pago tal cual ha sido convenido en el contrato es una
forma de default y expresa, en alguna medida, la crisis de deuda tan
crónica a lo largo de nuestra historia.
Yo me hago cargo de esto porque he
tenido responsabilidades políticas en este tiempo, pero no veo que exista la
misma predisposición para hacerse cargo de parte de quienes desde una y otra
punta de la grieta vienen tirándose responsabilidades. Esta es nuestra
historia, y todos y cada uno de nosotros, en la parte que nos toca, deberíamos
hacernos un poco cargo y entender que esta es una ley que mira hacia adelante,
pero apoyada en esa historia de desaciertos que expresan los números objetivos
que acabo de señalar.
Así nos ve el mundo, y por eso
necesitamos esta norma. Yo creo que esta iniciativa llega a tratamiento ahora
por una necesidad coyuntural. No me parece mal que se trate ahora, porque abona
a una mayor fortaleza para la negociación con el Fondo Monetario Internacional;
por supuesto, deseo la mejor negociación para el país.
Pero en realidad lo que motiva la
necesidad de esta norma es esa historia; si no, con haber cumplido la ley de
convertibilidad fiscal de 1999, la ley de responsabilidad fiscal de 2004 y la
propia Ley de Administración Financiera, no sería necesaria esta norma.
Pero así estamos y así nos ven los
mercados. Y porque así nos ven los mercados ‑tal como lo he dicho en la
reunión de comisión, estimado diputado Heller, y me hago cargo de lo que digo‑,
la Argentina ha emitido deuda con un rendimiento del 16 por ciento. Allí está
el rendimiento. El riesgo país de hoy asciende a 1.460. Saque la cuenta, sobre
la tasa de base.
Ese es el rendimiento, y no lo he
dicho acusando al gobierno. Ya demasiado dije sobre esos 1.500 millones que
canjearon en dólares y que eran en pesos. Ya sabe que no estoy de acuerdo con
eso, pero no menosprecie mi interpretación de las cosas. Sé de qué manera se
emitió la deuda, pero ese es el rendimiento: 16 por ciento. ¿Por qué? Porque el
mundo del mercado de capitales desconfía de nosotros.
Esas son las razones por las que
nosotros acompañamos esta iniciativa: porque tiene un objetivo que compartimos
y porque va en el sentido que entendemos ayudará a resolver cuestiones para
cumplir con ese objetivo.
No obstante, tenemos algunas
diferencias. Para nosotros, el artículo 1° se queda a mitad de camino para ser
el hito que usted dice y que ojalá lo sea. ¿Por qué? Porque pone limitaciones
cuantitativas. La limitación cuantitativa que pone el artículo 1° es que el
Congreso aprobará un porcentaje de emisión de deuda extranjera en moneda
extranjera y en legislación extranjera sobre el total de la emisión que
apruebe, que tiene que ver con el cálculo del presupuesto. Es una restricción
cuantitativa que está apoyada en el cálculo del presupuesto, y sabemos que esto
queda sujeto a una suerte de debilidad: si uno analiza las ejecuciones del
presupuesto con lo que cada presupuesto ha establecido, se desvirtúa mucho el
límite que se quiere poner.
Nosotros hemos propuesto un proyecto
de ley, contenido en el expediente 5.785‑D.‑2019, que creemos que
va al fondo de la cuestión. Lo que hace es modificar directamente el artículo
56 de la Ley de Administración Financiera, poner restricciones de orden
cuantitativo y permitir expresamente determinadas razones para la toma de
deuda. Creemos que eso es lo correcto.
Por lo expuesto, votaremos
afirmativamente en general y plantearemos algunas observaciones en particular,
por las razones que el diputado Cassinerio va a
explicar con mucha más claridad que yo. Con respecto al artículo 3°, le digo al
estimado diputado Heller que con lo que dice la Ley de Administración Financiera
alcanza y sobra, porque prohíbe financiar gastos corrientes, en moneda
extranjera y en pesos. (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra el señor diputado Cassinerio, por
Córdoba.
Sr.
Cassinerio.-
Señor presidente: considero que este proyecto de ley que estamos tratando
intenta aportar una herramienta para prevenir los procesos de
sobreendeudamiento de la economía argentina, fortaleciendo el rol asignado
constitucionalmente al Congreso de la Nación para autorizar el endeudamiento público
nacional, lo cual hoy es más que oportuno.
Entiendo que fortalecer ese rol del
Congreso es clave para tener un mayor control del endeudamiento nacional, del
endeudamiento público en moneda extranjera, y que sea consecuente con la
capacidad de la economía nacional, que sea sustentable, que brinde certezas y
que también pueda contribuir a evitar futuras crisis de deuda.
Lógicamente, el hecho de que ante una
propuesta de toma de deuda este Congreso pueda definir los alcances y los
destinos del endeudamiento solicitado no es un tema menor, ya que no es lo
mismo endeudarse para cubrir gastos de déficit primario que para realizar obras
de infraestructura. No es lo mismo tomar deuda para invertirla en
industrialización, en generación de empleo, en reactivación de la economía o en
educación, que tomar deuda para pagar deuda.
Creo que estas son cuestiones que hay
que tener muy en cuenta a la hora de analizar las tomas de deuda que haga el
Estado nacional.
Quiero adelantar el acompañamiento del
bloque Córdoba Federal a este proyecto ya que nos parece esencial poder ordenar
la economía nacional e ir realizando estas acciones de control que permitan una
mejor gestión a la hora de una toma de deuda.
Nos parece esencial que estas
iniciativas se aprueben en el Congreso Nacional. Esto es consecuente con
nuestro pensamiento político y nuestro accionar político en el gobierno de la
provincia de Córdoba, dado que cada vez que nosotros hemos adquirido deuda, lo
hemos hecho a través de los instrumentos legales correspondientes aprobados en
la Legislatura provincial.
Si me permite, señor presidente,
quisiera remarcar lo que ha sido la gestión de la deuda en mi provincia, donde
hace pocos días hemos tenido una muy exitosa refinanciación de la deuda
provincial. El refinanciamiento fue exitoso, y ha sido recientemente avalado
por el Poder Ejecutivo nacional. Respecto de los acuerdos logrados, hemos
alcanzado el 96,3 por ciento de adhesión a ese refinanciamiento de deuda. En el
primer año hemos podido bajar la tasa de interés del 7,125 por ciento al 3 por
ciento; en el segundo año, hemos podido pasar del 7,125 por ciento al 5 por
ciento del pago de intereses; y para el tercer año hemos podido pasar del 7,125
por ciento a poco más del 6 por ciento. Esto nos permitió un ahorro de 200
millones de dólares y nos despejó un horizonte financiero al año 2024 de
aproximadamente 700 millones de dólares, alivio que sin lugar a dudas será
utilizado para seguir gestionando los servicios en nuestra provincia en el
marco de una crisis económica y de una pandemia que nos obligan a seguir
fortaleciendo día a día nuestro sistema de salud, como lo venimos haciendo.
No me quiero olvidar de remarcar que
la provincia de Córdoba jamás ha tomado deuda para gastos corrientes; lo hizo
para inversiones públicas necesarias, obras de infraestructura, obras de agua,
obras viales, gasoconductos, fibra óptica, etcétera.
Hemos tomado deuda para ir capitalizando a nuestra provincia y dotarla de las
obras necesarias para el desarrollo de los cordobeses. Me parece que esto es
muy importante, y es lo que también queremos para nuestro país.
Por eso vamos a acompañar esta
iniciativa, señor presidente, y particularmente deseamos que la gestión que
lleve adelante el Poder Ejecutivo en materia de reformulación de la deuda sea
exitosa. Cuenta con nosotros para ello. (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra el señor diputado Ramón, por Mendoza.
Sr. Ramón.- Señor presidente: gracias por esta oportunidad de poder fijar
nuestra posición política, como bloque y como interbloque.
Cuánta tinta ha corrido en las décadas
de nuestra Argentina para hablar de la deuda externa. Yo creo que hoy es un día
que marca un nuevo camino de la política argentina en tanto tengamos que
resolver la deuda externa de nuestro país.
Me acuerdo del año 2019, cuando
empezamos a transitar este camino y a discutir la reestructuración de la deuda
de los bonistas que tenían sus bonos o tenencias en pesos. La verdad es que a
nosotros nos satisfizo enormemente esa situación y la propuesta del Poder
Ejecutivo de que esa reestructuración de la deuda la hiciéramos en el
Congreso.
Hay un mandato de nuestra Constitución
que dice que el Congreso es quien debe establecer los destinos de la deuda que
contraigamos con los organismos multilaterales, con nuestros deudores
individuales, como sucedió allá por el mes de diciembre del año 2019. Pensar en
esto me hace realizar reconocimientos y marcar algunas falencias que hemos
tenido al momento de establecer cómo se iba a producir este endeudamiento de la
Argentina.
El primer reconocimiento lo quiero
hacer para el bloque oficialista y el Poder Ejecutivo, que gobierna a partir de
mes de diciembre del año pasado, porque tuvo la valentía de enviar estos
proyectos para ser discutidos y tratar de lograr estos consensos que hemos
logrado o que estamos tratando de lograr en el día de hoy para aprobar este
proyecto de ley; esto es positivo.
En ese momento hacía mención a que
cada 4, 6 u 8 años siempre se tiene que volver a rediscutir cómo reconducimos
la deuda externa de la Argentina. La verdad es que eso es fruto de haber
tratado siempre con una delegación expresa del Congreso hacia el Poder
Ejecutivo y los ministros de Economía que se fueron sucediendo, porque siempre
estuvo signado por la grieta. Siempre
estuvo signado por el desequilibrio de aquellos que toman las decisiones, que
lo hacen con el talero que dan los votos, la mayoría y el haber ganado una
elección, pero sistemáticamente cada 4 años había que estar renegociando la
deuda externa, con todo lo que ello significa.
El tema de la deuda externa no es
solamente tener en cuenta las arcas de la Nación. Cuando hablamos de la deuda
externa y el sobreendeudamiento de un país como el nuestro, nos estamos
refiriendo a la manera en que eso repercute en cada uno de los hogares y las
economías de las familias; no es una cuestión menor.
Aquí también quiero referirme a la
falta de acuerdos, porque en la medida en que se siguiera tratando de resolver
la deuda externa de la Argentina sin acuerdos, cada 4 u 8 años, siempre viene
una renegociación tras otra, con ese perjuicio.
Por eso quiero reconocer el trabajo
que ha hecho el Frente de Todos en el sentido de salirse, de despegarse de la
grieta, y traer este proyecto para que lo tratemos acá.
Después voy a hacer otro
reconocimiento hacia Juntos por el Cambio mientras gobernó. Hay una serie de
temas en los que a mí me gustaría marcar una falencia, y sobre todo porque
desde nuestro bloque político hemos presentado proyectos en relación con este
mismo tema que estamos tratando hoy, en donde proponemos que no solamente la
negociación con el Fondo Monetario Internacional sea tratada en el Congreso,
sino que también se discuta aquí el endeudamiento con organismos multilaterales,
como el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo o cualquier otro
ente que someta a la Argentina a condicionamientos que, como decía al
principio, terminan involucrando a cada una de las economías de las familias.
Este tema se tiene que discutir acá.
¿Por qué? Sucede que los verdaderos consensos se logran en el Congreso, es
decir, con la llegada de cada uno de nosotros representando al pueblo en la
Cámara de Diputados y los intereses de las arcas de las provincias en el
Senado, aunque hay veces que muchos diputados representan también las arcas de
la provincia; son los temas de la política y también valen. Tenemos problemas
si no hay consenso y esos consensos se logran en el Congreso, porque cada uno
de nosotros recorre los hogares de las provincias y esto repercute seriamente en
sus economías.
En el Congreso los consensos pueden
ser verdaderos y duraderos. No puede ser que durante cuatro años tengamos que
estar renovando de qué manera se reestructura la deuda externa de la Argentina.
Nosotros presentamos un proyecto y voy
a hacer tres consideraciones técnicas. En el proyecto de ley contenido en el
expediente 5.618-D.-2019 nos referíamos a esta misma iniciativa que tratamos
hoy en el sentido de que alcanzara no solamente al Fondo Monetario
Internacional.
También presentamos otro proyecto para
establecer el régimen legal de los decretos de necesidad y urgencia. Hay una
iniciativa que está dando vueltas y cada bloque creo que ha presentado alguna
al respecto. Nuestro proyecto, el 383-D.-2020, es conteste con esto que estoy
planteando como posición política. Los decretos de necesidad y urgencia,
lamentablemente, no se pueden resolver objetivamente cuando hay una emergencia
o no, debido a cómo la considera el Poder Ejecutivo. Lo que sí se tiene que
hacer es que los decretos de necesidad y urgencia tengan un plazo de duración,
y tengo un ejemplo.
Me acuerdo de que, en el año 2017,
discutíamos en este Congreso el proyecto de presupuesto del año 2018; se puso
en vigencia y al otro día por un decreto de necesidad y urgencia se modificaron
las partidas. Los decretos de necesidad y urgencia deben tener un plazo de
duración.
Otro tema que para nosotros es
importante, y no se habla, es la rendición de cuentas del personal jerárquico
de la Nación, los ministros. Cuando terminan su mandato los ministros tienen
que venir a dar explicaciones de cómo fue que realizaron y ejecutaron las
asignaciones de sus partidas en aquel presupuesto que fue discutido en el
Congreso. Eso permitiría que más de un ministro, que tiene a su cargo la
administración de los bienes de la Nación, tenga responsabilidades fuertes y
que no ocurra eso que venimos padeciendo desde hace muchos años por no existir
esta ley de residencia para que vengan a dar explicaciones, bajo apercibimiento
de cometer un delito que es privar de información al Congreso. El proyecto está
contenido en el expediente 382-D.-2020. La gestión no puede ser oscura, tiene
que haber claridad.
Otro tema es el relacionado con el
Banco Central. Hoy escuchaba a un colega preopinante hablar sobre el Banco Central.
Hace años que el Congreso le delegó facultades al Banco Central para que tome
decisiones aun a contramano de leyes que hemos sancionado en este Congreso; hay
que recuperar esas facultades.
En ese sentido, hemos presentado un
proyecto, el 3.182-D.-2020, en donde se debe revisar y aprobar una comisión
bicameral que vaya haciendo el seguimiento de las acciones del Banco Central de
la República Argentina.
Estos son temas técnicos, se trata de
una consideración, pero yendo al tema político de por qué apoyamos este
proyecto para que se sancione, aun en esas proposiciones que hacemos nosotros
de que no sea solamente el Fondo Monetario Internacional, necesitamos en
concreto que no vuelva ocurrir un hecho desgraciado para todos, sobre todo en
la deuda.
Me refiero a que un día nos levantemos
por la mañana, siendo legisladores, y nos enteremos por los medios de
comunicación que el presidente de la Nación había contraído un empréstito de
50.000 millones de dólares que los argentinos debemos pagar durante muchos años
de nuestra vida. Incluso hoy hay un
litigio en la Corte Suprema de la Nación porque se siguen discutiendo las
graves falencias que tuvo ese ministro de Economía al negociar ese empréstito,
sin tomar en consideración temas técnicos vitales que hacen a la sostenibilidad
de un crédito que nos otorgan. Entonces, espero que con este proyecto podamos
terminar de una vez por todas con este tema.
Quiero decir algo en favor de Juntos
por el Cambio. En el proyecto en consideración el Frente de Todos está
autolimitándose. En el año 2018 ‑ley 27.342- también Juntos por el Cambio
se autolimitó y le puso un coto a la manera en que tenía que distribuir las
partidas del jefe de Gabinete. Eso también está bien porque el jefe de Gabinete
no puede tener las facultades que hace muy poco ‑el año pasado- le hemos
otorgado. Está bien, fue en ocasión de la pandemia, pero se hace larga la
pandemia y el jefe de Gabinete no puede tener esas facultades extraordinarias
de hacer lo que quiera con las partidas sin rendir cuentas en este Congreso.
Esto es importante. Nuestro jefe de Gabinete, que asumió en diciembre de 2019,
creo que ha concurrido una sola vez a la Cámara. Entonces, no es suficiente la
presencia del jefe de Gabinete para el control y seguimiento de las cuentas del
Estado, sino que necesitamos más autocontrol.
De manera tal que, habiendo fijado
nuestra posición política, manifiesto que el interbloque Unidad Federal para el
Desarrollo apoyará y votará a favor de que prontamente tengamos la ley
propiciada en este proyecto.
Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra la señora diputada Sapag, por
Neuquén.
Sra. Sapag.-
Señor presidente: celebro y acompaño el tratamiento de la ley de
fortalecimiento y sostenibilidad de la deuda pública. Estamos reforzando, ni más
ni menos, la división de poderes plasmada en el artículo 75 de nuestra
Constitución Nacional, otorgándole al Poder Legislativo un rol central en los
temas de endeudamiento. Se trata, ni más ni menos, de un incremento en la
calidad de la participación del Poder Legislativo que, sin dudas, producirá un
cambio positivo en el proceso de toma de decisiones respecto del endeudamiento
de nuestro país. Estamos poniendo un coto al “hiperpresidencialismo” que nos
caracterizó. El Congreso Nacional siempre tuvo esta responsabilidad, pero nunca
la había ejercido plenamente en la práctica. No tengo dudas de que estamos a la
altura de las circunstancias.
Quiero destacar especialmente lo
establecido en el artículo 3° del proyecto respecto de que la emisión de deuda
en moneda extranjera no pueda ser destinada a cubrir gastos corrientes. Sin
embargo, me surgen dudas sobre este punto. Me refiero a de qué manera vamos a
financiar el déficit fiscal del Estado nacional: ¿con emisión?, ¿con más
inflación?, ¿con más pobreza?
Este proyecto debería incluir también
el equilibrio fiscal, una de las causas principales que genera la necesidad de
tomar deuda. Tenemos que salir de la trampa de la manta corta y tejer una manta
más grande. Tenemos que generar las condiciones necesarias para dejar de tratar
proyectos de emergencia, de refinanciación o de nuevos empréstitos. Debemos
generar divisas que nos permitan iniciar un proceso de desendeudamiento, de
certidumbre y de reglas claras que permitan un círculo virtuoso de inversión,
producción y empleo, un proceso que mejore tangible y significativamente la
calidad de vida de los argentinos.
Somos el país de las oportunidades y
hasta los más necios saben que lo somos. El campo, la energía, el turismo, las
economías del conocimiento ‑por citar algunos de los tantos sectores‑
están preparados para recibir inversiones y generar rápidamente mejoras
concretas en todos los indicadores sociales y económicos. Simplemente tenemos
que ser serios y previsibles. Depende de nosotros.
Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el señor diputado del Caño,
por Buenos Aires.
Sr. del Caño.-
Señor presidente: este proyecto que presenta el Poder Ejecutivo, que ya fue
aprobado por unanimidad en el Senado, dice claramente que es de
“fortalecimiento de la sostenibilidad de la deuda pública”, pero ni siquiera
hay parámetros que marquen esa sostenibilidad. Por ejemplo, no se establece
ningún límite al stock de deuda en
relación con el PBI ni se estipula ningún límite al ítem sobre pago de servicio
de la deuda en el total del gasto público, es decir, en lo que se presupuesta
cada año.
Por lo tanto, y por varias razones más
que vamos a explicar, estamos ante un proyecto que es una verdadera impostura.
La mayor impostura es lo que queda establecido cuando se habla de que es un
proyecto de soberanía, sobre todo porque en realidad lo que se está planteando
es la posibilidad de que el Congreso actúe como una verdadera escribanía que dé
garantía a todas las operaciones de deuda con prórroga de jurisdicción, es
decir, en jurisdicciones extranjeras.
En realidad, tal como lo hemos dicho
muchas veces, no solo nos hemos opuesto a este proceso de endeudamiento que se
dio bajo el gobierno de Mauricio Macri, sino también particularmente en lo que
se refiere a la prórroga de jurisdicción porque aquí se está atando totalmente
al Estado argentino. En realidad, habría que hacer lo contrario y declarar nulo
de toda nulidad cualquier prórroga de jurisdicción cedida por el Estado
argentino. De esa forma sí podríamos empezar a hablar de soberanía. Pero,
reitero, este proyecto plantea todo lo contrario.
Un diputado del oficialismo preguntaba
qué hubiese pasado en los últimos años del gobierno de Macri si esta ley
hubiese estado vigente. Yo le contesto: ¿qué hubiese pasado, por ejemplo, en
2016, cuando este Congreso aprobó la ley de pago a los fondos buitre, con el
apoyo de gran parte del peronismo, entre ellos, del presidente de esta Cámara?
Lo que inició el proceso de endeudamiento del gobierno de Mauricio Macri fue el
pago a los holdouts.
En el presupuesto votado para 2019,
que se sancionó en 2018, ya estaba el Fondo Monetario Internacional comandando
la economía, pero imponía el déficit cero para liberar recursos para los pagos
de la deuda. Esto también lo votó el peronismo, como también votó gran parte de
las leyes de Mauricio Macri, que no hubiesen podido prosperar en ninguna de las
Cámaras del Congreso porque el bloque de Juntos por el Cambio tenía minoría y
esa parte del peronismo ‑esos gobernadores, Sergio Massa, etcétera‑
le dieron los votos necesarios en aquel momento. Solo se hubiese requerido una
votación especial en lo que hace al crédito del Fondo Monetario Internacional
que, teniendo en cuenta estos votos, también podrían haberlo aprobado.
También puedo traer otro ejemplo que
es más reciente. El año pasado, en la Legislatura de la ciudad de Buenos Aires,
todos los bloques ‑el Frente de Todos incluido‑, a excepción del
Frente de Izquierda, votaron el endeudamiento que planteó el gobierno de la
Ciudad, es decir, el jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta. Ese
endeudamiento tampoco decía a qué se iba a destinar.
Entonces, me parece que hay que ser
honestos respecto de qué se está planteando con este proyecto, que tampoco
hubiese impedido que el ministro de Economía lograra la aprobación del
Congreso, como vimos acá, para emitir esos bonos para fondos como Pimco o Templeton, que querían
dolarizar sus carteras porque, como dijo el ministro de Economía, se quedaron
atrapados en el peso.
Esto claramente no tiene nada que ver
con lo que pregona o lo que aducen que tiene este proyecto.
Acá no se plantea investigar
absolutamente nada respecto del fraude que significó la fuga de capitales.
Escuchamos decir permanentemente a los miembros del oficialismo y al ministro
Guzmán que se utilizó el crédito del FMI para la fuga de capitales y el
endeudamiento, pero sin embargo no se investiga. También escuchamos recién que
alguien dijo que el FMI estaría analizando la posibilidad de investigar si ese
crédito que le dio a la Argentina va en contra de su propio estatuto. Realmente
no creemos en los Reyes Magos, pero ni siquiera se ha planteado la
investigación de la deuda, que es completamente fraudulenta, como lo son todos
los bonos que emitió Caputo para los fondos de inversión en los que él había
trabajado o de los que había sido parte.
También creo muy importante señalar ‑ya
lo hemos dicho y, como se sabe, claramente lo publicó el periodista Horacio
Verbitsky‑ a quién benefició este endeudamiento y quién encabezó la fuga
de capitales: los grandes grupos económicos, como Arcor. Los principales grupos
económicos de la Argentina son los que fugaron capitales en el gobierno de
Mauricio Macri y en todos los procesos de fuga de capitales.
Para finalizar, señor presidente,
quiero decir que acá lo que se está planteando es lo que quiere el Fondo
Monetario Internacional: el aval de todo el régimen político para pagar el
crédito fraudulento que le dio al gobierno de Mauricio Macri. Eso se paga con un ajuste
al pueblo trabajador, tal como venimos viendo durante este tiempo.
Más que nunca, el “nunca más” sería desconocer e investigar
esta deuda; no sancionar este proyecto completamente fraudulento. Directamente,
deberíamos plantear el desconocimiento soberano de esta deuda y que los
recursos se destinen, por ejemplo, al 64 por ciento de las niñas, los niños y
los adolescentes que se encuentran por debajo de la línea de pobreza, a la
salud, a la educación y a la construcción de viviendas. Tendrían que ser
destinados a todo lo anterior; no a la estafa que significan este crédito del
Fondo Monetario Internacional y los acreedores privados que Macri logró llevar
adelante gracias al aval político del peronismo en el Congreso.
En suma, los recursos provenientes del desconocimiento
soberano de la deuda deberían destinarse a cubrir las necesidades de las
grandes mayorías populares. Este es el puntapié inicial para reorganizar la
economía sobre nuevas bases que beneficien a dicho sector.
Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el señor diputado Giordano,
por Buenos Aires.
Sr. Giordano.-
Señor presidente: desde Izquierda Socialista‑Frente de Izquierda estamos,
como dijo el compañero Nicolás del Caño, categóricamente en contra del proyecto
en tratamiento. Sáquenos entonces de ese famoso consenso al que arribaron el
Frente de Todos y Juntos por el Cambio, porque desde el Frente de Izquierda nos
oponemos en forma categórica. Es un proyecto que avala los pagos de una deuda
completamente usurera y fraudulenta. Es, esencialmente, el aval al pacto
mafioso entre Macri y el Fondo Monetario Internacional.
Es una iniciativa elaborada a pedido del mencionado
organismo y lejos estamos de lo que dicen Carlos Heller, otros que también la
defienden y, por supuesto, Alberto Fernández y Martín Guzmán, porque el
Congreso no se va a poner de pie. Esto es más sometimiento, entrega, ajuste y
dependencia para el país y centralmente para los trabajadores, los sectores
populares, quienes sufrirán brutales ajustes, cambios estructurales, más
reformas jubilatorias y laborales. Esta iniciativa se traducirá en más saqueo y
sometimiento para pagar una deuda completamente usurera.
El propio Alberto Fernández sostiene que los 50.000
millones de dólares de deuda contraída por Macri fueron a parar a la bicicleta
financiera y a la fuga de capitales. Sobre esto ya hizo una investigación el
propio Banco Central. No obstante, el gobierno nacional ‑un gobierno
supuestamente nacional y popular‑ reconoce dicha deuda. O sea, Macri nos
endeudó; la plata la usaron los banqueros y los especuladores, y ahora es el
pueblo trabajador quien tiene que hacerse cargo de un endeudamiento que no fue
utilizado para mejorar los salarios ni el trabajo.
- Ocupa la Presidencia el señor presidente
de la Honorable Cámara, doctor Sergio Tomás Massa.
Sr. Giordano.- ¿Cómo
puede ser que, en medio de la pandemia, cuando crecen los contagios y las
muertes, faltan vacunas y hay un 45 por ciento de pobreza, la prioridad del
gobierno sea cumplir con el Fondo Monetario Internacional?
Alberto Fernández habla sobre la vacuna con Merkel, con
Putin, con Kristalina Georgieva,
con el papa Francisco y pide que lo acompañen para salir de esta situación.
Pero ¿cómo se sale, según el gobierno? Mediante el pago de una deuda usurera y
fraudulenta.
¡Es mentira que se despejarán los vencimientos, que
recuperaremos la economía y que mejorarán los indicadores sociales! ¡Ya hay un
ajuste! ¿Qué es, si no, quitar el IFE, establecer una movilidad jubilatoria a
la baja y firmar techos salariales del 30 por ciento con una inflación prevista
en 45 o 50 por ciento para 2021?
A partir de la ley de emergencia, el Congreso habilitó el
pago de 6.000 millones de dólares. Es decir que, desde que asumió el actual
gobierno, se pagó esa cifra. El 1° de febrero se pagaron 300 millones de
dólares en concepto de intereses al Fondo Monetario Internacional.
Con esos 50.000 millones de dólares que el gobierno
reconoció, ¿cuántas vacunas, respiradores y camas podrían comprarse? ¿Cuántos
salarios y jubilaciones podrían pagarse y cuántas viviendas populares podrían
construirse? Cuando afirman que el Congreso podría poner límites al pago de la
deuda, es una mentira absoluta porque en todos los presupuestos, lo primero es
pagar la deuda. Por eso, la partida destinada a tal fin es mayor que los
recursos en salud, educación y ciencia y tecnología juntos.
Ningún país salió de la mano del Fondo Monetario
Internacional. De aquellos que recibieron créditos de dicho organismo o
llegaron a algún acuerdo, ¿cuáles salieron adelante? Ecuador, Grecia, la
Argentina en 2001. Pero ¿qué le pasó a nuestro país? Se hundió.
Todos los gobiernos y, por supuesto, todas las
conformaciones del Parlamento estuvieron al servicio de pagar una deuda que
viene de la época de la dictadura. Recordemos la hiperinflación durante el
gobierno de Alfonsín y la entrega del patrimonio nacional ‑teléfonos,
YPF, ferrocarriles‑ durante el gobierno peronista de los 90 con el
argumento de que era para pagar la deuda externa. Sin embargo, esta creció el
doble.
Por otro lado, es mentira que en los doce años de gobierno
peronista‑kirchnerista hubo un desendeudamiento. Sacaban plata del Banco
Central para afrontarlo; pagaron 200.000 millones de dólares y otro tanto quedó
como deuda.
En suma, ¿quiénes están de acuerdo con esta cuestión de
Estado a la que han convocado, con este pago de la deuda? El Frente de Todos,
Juntos por el Cambio, la UIA, la Sociedad Rural Argentina, la CGT, la CTA.
Todos ellos a favor de reconocer la deuda contraída durante el gobierno de
Macri, de la misma manera que lo ha hecho el Congreso en el transcurso de estos
años.
Entonces, ¿a qué va a poner límites el Poder Legislativo?
¡A nada, si aquí están los partidos tradicionales dispuestos a sancionar este
proyecto de ley por consenso!
El Frente de Izquierda propone otro camino. No el de la dependencia
y el sometimiento, sino el de la soberanía e independencia nacional. En vez de
pagar la deuda, esos recursos deben ser destinados a salud, a generar trabajo,
a los salarios, a la educación y a un plan de construcción de viviendas
populares.
Asimismo, proponemos que se recuperen las empresas
privatizadas, y que se nacionalicen la banca y el comercio exterior. Estos
recursos deben ser para sacar el país adelante; no para cumplir con usureros
internacionales.
En 2001, el “argentinazo” mostró
un camino cuando se suspendió el pago de la deuda. Especialistas como Alejandro
Olmos y Éric Toussaint sostienen que, en medio de una
pandemia, cualquier país o gobierno tienen el derecho de decir que no cumplirá
con los usureros internacionales y que utilizará los recursos para combatir los
males sociales derivados de la pandemia, el hambre y la pobreza.
Este es el planteo que hacemos desde Izquierda Socialista‑Frente
de Izquierda. Es preciso formar un movimiento latinoamericano, un frente de
países deudores, para que en común dejemos de pagar. Porque la deuda, señor
presidente, es con el pueblo; no con los usureros internacionales.
Lo que hoy hará el Congreso es sancionar una ley de
consenso que significará más saqueo y endeudamiento. Nosotros seguiremos luchando
por otra salida, por un plan económico alternativo obrero y popular, porque
entendemos que ese dinero debe ser para salud, trabajo y para reactivar la
economía; no, reitero, para los usureros internacionales.
Continuaremos bregando por una medida soberana y no por la
que se impulsa hoy, que significará más sometimiento.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra el señor diputado Rodríguez, por Buenos Aires.
Sr. Rodríguez.-
Señor presidente: miembros de mi interbloque ya adelantaron nuestro acompañamiento,
con alguna observación, al proyecto de ley en tratamiento.
Hablamos de una iniciativa que fija reglas institucionales
para enmarcar el proceso de toma de decisiones en materia de política de
endeudamiento.
Ahora bien, dichas reglas, en este y en cualquier otro
caso, no garantizan la definición de tal política en sí y menos aún sus
resultados. Veamos qué ha ocurrido en el pasado reciente y qué ocurre en el
presente.
¿De qué default, de qué cesación de pagos con los
acreedores privados salió la República Argentina el año pasado? Del default
al que nos llevó, durante su propio gobierno, el presidente Macri.
No obstante, habiendo estado en una situación de default
con Macri, no se entiende por qué los argentinos no hicimos el mayor de los
esfuerzos para computar, dentro de los esfuerzos que el país venía haciendo en default,
como parte de pago de lo que finalmente fue un acuerdo con los acreedores
privados, los 4.571 millones de dólares que el Congreso dio al Poder Ejecutivo
para honrar parte de las acreencias en moneda extranjera. Actualicemos la
cifra, porque con la ley 27.541, de solidaridad social, permitimos al Poder
Ejecutivo el manejo de 4.571 millones, pero se terminaron ejecutando 4.830
millones de dólares, 259 millones de dólares más que lo inicialmente previsto
por el Congreso de la Nación.
Entonces, repito la pregunta: ¿por qué no hicimos el
esfuerzo que había que hacer para computar esos 4.830 millones de dólares como
parte de los esfuerzos que la Argentina hacía en cesación de pagos ante ese
acuerdo con los acreedores privados?
Las reglas institucionales pueden dar marco, pero no
garantizar los resultados ni la definición de la política de endeudamiento. En
tal sentido, si veníamos del default
de Macri, ¿por qué le dimos 1.500 millones de dólares a fondos especulativos en
pesos que vinieron, como han dicho varios diputados del oficialismo, a hacer el
carry trade,
atraídos por el clima especulativo del gobierno de Macri?
Si es que veníamos del default
de Macri, ¿por qué tuvimos una evolución de la deuda bruta de la administración
central argentina, pasando de 313.000 millones de dólares en noviembre de 2019
a 333.000 millones de dólares en noviembre de 2020? Se trata de 20.000 millones
de dólares más. Veníamos del default
de Macri, y hoy Argentina tiene, sufre y registra 1.460 puntos básicos de
riesgo país.
Las reglas institucionales pueden enmarcar, contener u
orientar la política de endeudamiento o cualquier política pública. Las
decisiones políticas y sus resultados son algo que no pueden garantizar este
tipo de reglas.
Vamos a acompañar este proyecto, como ya se ha manifestado
oportunamente, pero es momento ‑ojalá se entienda como una oportunidad
por parte del oficialismo‑ de que discutamos con responsabilidad, con
mucho respeto, pero con mucha firmeza, la política sustantiva de endeudamiento
público en la Argentina, que no va por buen camino y no ha dado buenos
resultados.
Sr.
Presidente (Massa).- Tiene la palabra el señor diputado López, por la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr.
López.-
Señor presidente: en primer lugar quiero decir con todas las letras que esta
oposición quiere que el gobierno de Alberto Fernández y Cristina Kirchner logre
un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional. Es imprescindible; nos van a
ver ayudando en lo que tenemos que ayudar, cumpliendo las leyes de la República
Argentina, pero también toda la normativa del fondo.
Ustedes se tienen que hacer cargo de eso; tienen que
generar el clima para eso, y ojalá lo encuentren. Ya en febrero de 2020
demostramos que votábamos la ley para que solucionen y renegocien con los
acreedores privados, pero vamos a la ley que estamos considerando ahora.
Ustedes les ponen nombre a las leyes ‑una costumbre
que tiene ya varios años‑, y esta norma se llama o se va a llamar Ley de
Fortalecimiento de la Sostenibilidad de la Deuda Pública. Miro el texto, y
digo: ¿es una ley para controlar el gasto? No. Entonces, ya estamos hablando de
otra cosa. ¿Cómo se controla el gasto o cómo podemos aportar desde el Congreso,
no digo para ajustarlo, porque se entienden las restricciones y la pandemia,
sino para controlarlo? Eso se logra votando presupuestos con equilibrio fiscal,
y eso lo veo bastante difícil.
Pero nos preocupa mucho más el clima. Ustedes tienen un
ministro bastante valorado -creo- por todos nosotros, que desde que asumió
habla de “calmar la economía”. Lo hace de una manera calma, pero no
necesariamente los hechos y los actos de ustedes y del gobierno que lleva
adelante Alberto Fernández van en ese sentido; eso nos preocupa. No solamente
porque herramientas tendientes a esto, como la ley de responsabilidad fiscal
que se sancionó ‑fue una de las primeras leyes que nos tocó votar a los
que asumimos en diciembre de 2017‑, se suspendió, y nosotros nos opusimos
a que esas buenas prácticas se suspendieran, sino también por una situación y
un contexto de declaraciones bastante grandilocuentes, erráticas y
preocupantes.
Por supuesto que algunos podrán darle más o menos sentido o
poder a las declaraciones de la diputada Vallejos, que hablaba de la tragedia
de ser un país exportador, pero cuando lo dice el presidente de la República es
relevante. Entonces, ayer tuvieron una reunión con la Mesa de Enlace y hoy
parece que no van a subir las retenciones, pero hasta hace unos días decían:
“No me obliguen a subir las retenciones”.
Esa no es la manera de controlar y de calmar un clima de
negocios o de confianza muy difícil. La sostenibilidad de una deuda tiene que
ver con los déficits, pero también con la confianza que generemos en nuestros
acreedores públicos o privados. Es tan sencillo como eso.
Hoy vemos que se anuncia que para combatir un flagelo ‑del
que no vamos a hacer cargo a este gobierno, aunque no pudo hacer nada‑
que afecta todos los días los bolsillos de los ciudadanos de una manera
preocupante a niveles pocas veces visto en los últimos treinta y pico de años,
como es la inflación, que impacta día a día, la solución es sacar a los
movimientos sociales a la calle para controlarla.
¿Es una política pública difícil? Sin duda. ¿Puede haber
especulación? Por supuesto. Ahora, que no estamos ayudando en nada sacando a los
movimientos sociales a la calle para trabajar para que los productos bajen de
precio hasta ustedes lo saben. No sabemos ni por qué lo hacen. No sabemos por
qué se enredan tanto sobre sí mismos. No sabemos por qué no encuentran las
soluciones. Estamos acá para ayudar en lo que podamos, con la humildad que
debemos tener porque, por supuesto, nosotros tampoco pudimos.
Ahora, les pido que el clima, que era otro hace poco
tiempo, lo generen ustedes. Eso solo depende de ustedes: del presidente, de los
diputados, de los movimientos sociales que adhieren al gobierno que ustedes
ejercen y, con todo respeto, con humildad y hablando a todos en plural, no
podemos tomar medidas y hacer declaraciones y no hacernos cargo del nivel y la
dimensión de los problemas pensando siempre en la próxima elección, que es muy
pronto.
El presidente la Nación va a tener que tomar decisiones
difíciles y deberá tener un carácter, un aplomo y una palabra que hoy no tiene.
La tiene que encontrar; tiene que hacerse cargo e, insisto, todos tenemos que
votar leyes, tomar medidas y actuar no pensando solo en las elecciones de
agosto y de octubre de este año, sino en las dificultades y restricciones que
tenemos, poniéndonos de acuerdo en cómo salir adelante.
Ojalá los acuerdos con los acreedores lleguen mucho más
temprano que tarde porque es absolutamente necesario para salir con
tranquilidad de la situación en la que estamos.
Sr.
Presidente (Massa).- Tiene la palabra el señor diputado Koenig, por Buenos Aires.
Sr.
Koenig.- Señor presidente: la deuda externa es un robo. No
lo digo yo, sino Chomsky. Esto lo probó en sede judicial, con el famoso fallo
Ballesteros, ese patriota y militante de la primera resistencia peronista que
fue Alejandro Olmos.
La deuda externa no es un problema económico, sino
político, porque es un condicionamiento ideológico de la derecha, en sus
diferentes versiones ‑que son generalmente los que contraen deuda‑,
pero, además, la deuda externa también es, fundamentalmente, un mecanismo de
apropiación del excedente de los países convertidos en periferia del sistema
mundial, donde uno de los principales mecanismos de hegemonía los tiene el
capital financiero especulativo.
¿Quiénes nos endeudaron y con qué intereses a lo largo de
nuestra historia? Podríamos comenzar el relato de la historia de nuestro
adeudamiento con Rivadavia y el empréstito de la Baring
Brothers, en el que se pidió un millón de libras esterlinas, de las cuales
llegaron a nuestras playas solamente 570.000, porque todos sabemos que con este
tema de la deuda los que la contraen siempre se quedan con algún vuelto. Si no,
preguntémosle a ese Messi de las finanzas que se llama Caputo.
Hubo un solo período de nuestra historia en donde nos
desendeudamos, que fue en 1952, durante la presidencia del general Perón,
después de una fuerte política de independencia económica. Pero veamos cuáles
son los procesos más recientes y fuertes, los picos de endeudamiento más fuertes
y cuáles fueron los resultados en las condiciones concretas de vida de nuestro
pueblo.
La dictadura cívico-militar genocida endeudó, o subió la
deuda exponencialmente, de 7800 millones de dólares a 45.000 millones, incluida
la estatización de la deuda privada que hizo Cavallo, en esa época al frente
del Banco Central. Entre otras empresas y grupos económicos que se beneficiaron
estaba el grupo Macri, al que le fue bastante bien con la dictadura, que pasó
de 7 empresas a tener 40 y pico.
El otro gran pico lo hizo el menemismo, que llevó ‑a
pesar de las privatizaciones y el desguace del Estado, por el cual entró un
montón de dólares‑ esa cifra de 58.000 millones que había dejado Alfonsín
a 140 mil millones de dólares.
El tercer gran pico es el del gobierno de de la Rúa. Ese gobierno de la Alianza conducido por un
radical nos llevó a la crisis de deuda más profunda. A pesar de la ayuda
norteamericana y del FMI, el blindaje, el megablindaje,
el megacanje, el corralito y la mar en coche, nos dejó en una crisis no
solamente económica, sino también social de gran magnitud.
Hubo una sola excepción en este período, que fueron los
gobiernos de Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner, que volvieron a
retomar la política peronista de desendeudamiento. Por eso, cuando asumió Macri ‑y esto
fue reconocido por el propio Dujovne‑, la Argentina estaba relativamente
desendeudada en relación a su PBI, que es como se mide el endeudamiento.
Ahora bien, lo que nos tenemos que preguntar a esta altura
es qué hizo Macri con ese país desendeudado. Lo que hizo fue endeudarnos a 100
años. A lo largo de toda esta historia nos podemos preguntar qué pasó con la
calidad de vida de los argentinos en esos picos de endeudamiento. ¿Qué pasó con la inversión de la deuda? ¿Eso
llegó al bolsillo de los trabajadores, a las grandes obras públicas o a los
créditos blandos para la industria, la vivienda o cualquier cosa? La respuesta
contundente es no.
La deuda externa siempre fue una cadena o un mecanismo que,
a través del FMI y el Banco Mundial, condicionó nuestra macroeconomía, con las
mismas recetas y resultados: poner a la Argentina de rodillas y sumir en la
pobreza a las mayorías populares.
¿Qué estamos debatiendo hoy? Una cosa que ya contiene
nuestra Constitución en el artículo 75, inciso 4°, que señala que es en el
Congreso donde tenemos que debatir la deuda para que una mayoría
circunstancial, una que pueda ganar por un 2 por ciento en un ballotage, no nos endeude por 100 años.
Es cierto que, además, le agregamos otras cosas y
condicionamientos, que ya explicaron mis compañeros de bancada, porque nos
podemos endeudar, y eso también lo agregamos, pero, sobre todo, lo central es
que haya un control popular, por lo menos a través del Congreso, de esta
contracción de deuda.
Por eso, señor presidente, y para terminar, yo me sumo a la
esperanza que expresaron algunos de mis compañeros de bancada de que esto sea
el principio de un nunca más para esa deuda externa, contraída con intereses
espurios, que hambrea a nuestro pueblo, que pone de rodillas a nuestra Nación,
porque, como decía Eva Perón, “nuestra patria dejará de ser colonia o la
bandera flameará sobre sus ruinas”. (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Massa).- Tiene la palabra el señor diputado Luis Contigiani, por Santa Fe.
Sr.
Contigiani.- Señor presidente: yo
titularía, por lo menos mi intervención, mi humilde intervención, diciendo “la
política al diván”, porque a 38 años de la democracia damos este paso positivo,
muy bueno, y lo reconozco, en que la
política representada en el Parlamento argentino puede administrar el
endeudamiento argentino. La deuda en la Argentina tiene un peso social y
económico tremendamente negativo y, de la dictadura militar a la fecha, es uno
de los grandes temas agobiantes de la Argentina.
Después de todo eso, si damos este paso, yo lo reconozco,
pero también digo “la política al diván”. Hace 38 años que corremos de atrás.
Le puedo nombrar a algún dirigente gremial, cooperativo, social y a algunos
dirigentes del peronismo y del radicalismo reconocer que fueron coherentes en
todo este proceso y todos estos años. Pero la política como sistema tradicional
ha corrido de atrás en el tema de la deuda.
Yo le recuerdo al diputado preopinante que la investigación
de Alejandro Olmos, con la sentencia del juez Ballesteros del año 2000, está
acá en el Congreso y hace más de 10 años que no hacemos nada. Fue elevada acá
esa investigación sobre la deuda y la estafa escandalosa de la dictadura
militar, que aumentó la deuda externa en un 460 por ciento en ese período, que
permitió la acumulación originaria de muchos grupos económicos en la Argentina
y que pagó el pueblo argentino. La política al diván también, y con humildad,
para no ser grandilocuente.
En definitiva, esta ley es una autocrítica de la política y
del campo popular frente a la deuda. Hay que entender en este punto que
corrimos de atrás y que no hemos sabido investigar, esclarecer, limitar la
valorización financiera, la timba financiera, la fuga de capitales y hemos
permitido escándalos como el megacanje de los 90, así como lo de la dictadura
militar y lo que ha ocurrido en todos estos últimos años ‑los últimos y
varios anteriores‑ en relación al endeudamiento argentino.
Todos tenemos algo que ver. Hay que hacerse cargo de esto.
Por eso la expresión de “la política al diván” y también a asumir con humildad
que la corremos de atrás. Bienvenido sea este paso adelante.
También quiero decir que una forma de defender esta ley y
esta política de hacer del endeudamiento algo sostenible o sustentable en la
Argentina es tratar de no generar las condiciones macroeconómicas que nos
llevaron a esa enfermedad del endeudamiento y que nos llevan a esa dependencia
del juego financiero de los grandes centros mundiales, y esas condiciones
macroeconómicas no están presentes hace tiempo en la Argentina.
No generamos dólares genuinos, no tenemos un relato
productivo o una política integrada de industrialización, no tenemos un
entramado macroeconómico sólido que nos permita crecer en la Argentina y, en
todo caso, hacer una palanca con el endeudamiento de carácter productivo.
En el proyecto de Jorge Sarghini,
que yo firmo, hablamos de las razones del endeudamiento y de la limitación
cuantitativa, de una Argentina que pueda defender la sostenibilidad de la deuda
y de una política macroeconómica desde el sector agroindustrial, desde la
petroquímica, desde los biocombustibles, desde la nueva economía del
conocimiento, donde podamos generar dólares genuinos y no buscarlos
financieramente afuera y condicionar al pueblo argentino y depender de la fuga
de capitales.
Señor presidente: quiero finalizar con una apelación que
hizo el exministro de Relaciones Exteriores del gobierno de Ricardo Alfonsín,
Dante Caputo. Tal vez fue el ministro y el gobierno que más hicieron por poner
la problemática de la deuda externa en Latinoamérica en el campo de la política
y de la negociación de la política.
Dice Dante Caputo en el Grupo de Cartagena en 1984: “La
democracia argentina no acepta la trampa en la que el sistema financiero
internacional y las minorías a él asociadas la han colocado al generar esta
agobiante deuda externa. Los Estados nacionales han sido usados para apañar a
estos grupos especuladores. El destino del continente está en salir fuera de
esta trampa”.
Salgamos de esa trampa, presidente. Lo que estamos haciendo
hoy frente a ese problema estructural es dar un paso tibio, autocrítico.
Vayamos a la etapa del desarrollo en la que no necesitemos endeudarnos y
tengamos una macroeconomía sana, entendimiento nacional y desarrollo industrial.
Vayamos a un gran acuerdo que, desde la política, nos permita resolver este
problema que siempre nos llevó a la trampa del juego financiero.
Esa es nuestra posición. Desde este lugar voy a acompañar
con esta mirada que planteo.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra el diputado Cacace, por San Luis.
Sr. Cacace.- Señor
presidente: recién escuchaba la exposición de los bloques y el diputado Ramón
le hacía un reconocimiento al Frente de Todos por despegarse de la grieta. Debo
decir que no comparto ese reconocimiento porque la verdad es que he escuchado
una cadena de intervenciones profundamente sesgadas respecto de cuál es la
realidad de la deuda en nuestro país.
Se buscó endilgar culpas como si la deuda fuera un fenómeno
exclusivamente ligado a una gestión política o a un presidente, sin reconocer
ni hacerse cargo de la parte que les toca en la gestión de la deuda.
Después del supuesto proceso de desendeudamiento, el stock
de deuda era en realidad de 154.000 millones de dólares y, cuando terminó la
gestión de Cristina Fernández de Kirchner, ya había ascendido a 240.000
millones de dólares. Es decir que, si bien en esa década se acumularon casi
cien mil millones de dólares de deuda pública, nada de eso se dijo; en ningún
momento lo escuché.
Asumió el presidente Fernández y luego de solo nueve meses
ya había aumentado el stock de deuda en 10.000 millones de dólares
respecto de lo que había heredado del presidente Macri. Tampoco escuché eso en
ninguna de las intervenciones.
Hemos tenido en 2020 el déficit fiscal más alto desde 1975,
más de 8 puntos del PBI, 2,2 billones de pesos. Y el problema no es solo la
deuda fiscal, sino también la cuasifiscal, aquella
que emite el Banco Central de la República Argentina.
¿Se acuerdan cuando el presidente dijo: “Vamos a terminar
con las Leliq?” Ahora resulta que el stock de Leliq, al comenzar 2021, es más del doble del que heredó
cuando comenzó su gestión. Entre Leliq y pases tenía
1,1 billones y ahora tiene 2,7 billones de pesos. No escuché ni una sola palabra
sobre esto ni sobre cómo se ha incrementado la base monetaria ni sobre la
enorme asistencia y deuda que genera el Banco Central ni sobre cuál es el
déficit que vamos a generar este año.
Sí coincido con lo que dijo el diputado Sarghini
en cuanto a que, si vamos a hacer un debate en serio, debemos reconocer que la
deuda es parte de nuestra historia y que es un problema institucional. Eso nos
permitirá saber si acá venimos a regular el tema del crédito público o a hacer
discursos políticos para responsabilizar a una gestión u otra. Porque si
venimos a regular el crédito público, entonces estamos de acuerdo en tratar
esta iniciativa y en devolver las facultades al Congreso, pero que ese sea el
tema.
La Constitución, en su artículo 75, inciso 4), dice que
corresponde a este Congreso contraer los empréstitos sobre el crédito de la
Nación y el inciso 7) dispone que corresponde al Congreso arreglar el pago de
la deuda interior y exterior de la Nación.
Lo que ha ocurrido -y no es exclusivo de una gestión‑
es que se han contraído empréstitos a lo largo de la historia sin la
autorización del Congreso, y también se ha pagado o dejado de pagar la deuda
-como ha ocurrido aquí- no con la autorización de este Congreso, sino tal vez
solo con su aplauso, como pasó con el default en 2001.
Entonces, no nos quedemos con una visión sesgada y parcial
que nos lleve a equívocos y a hacer de este ámbito solo una tribuna política,
sino realmente regulemos el crédito público. Dicho sea de paso, para hacerlo
bien hubiera correspondido hacerlo como una reforma de la Ley de Administración
Financiera, no duplicando esa ley a partir de otra norma.
Espero que este sea un ejercicio para que nuestro Congreso
de la Nación asuma plenamente sus facultades y para que, a futuro, no le tengamos
que echar la culpa a nadie ‑ni a un presidente ni a otro‑ por la
deuda emitida, sino que sepamos que vivimos en una República en la que este
Congreso, que todos nosotros integramos, toma sus decisiones de acuerdo con la
Constitución Nacional. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- Como
ya estamos finalizando la lista de los oradores individuales anotados, les
recuerdo a las señoras y señores diputados que, al momento de la votación,
tienen que estar conectados al VPN, por lo que sería conveniente que lo vayan
haciendo para que no tengamos luego dificultades al momento de votar.
Tanto los diputados que asisten en forma presencial como
remota votan con la VPN.
Tiene la palabra la diputada Aparicio, por Buenos Aires.
Sra. Aparicio.- Señor
presidente: el tema que nos trae hoy a debate es fortalecer la sostenibilidad
de la deuda pública, lo que nuestro gobierno viene gestionando desde su inicio.
El hecho de que la deuda pública sea sostenible debería ser
una lógica de Estado para cualquier gobierno que asume los destinos de esta
Nación. En este sentido, el tema es profundo y nos debe llamar a la reflexión.
Este proyecto hoy seguramente se aprobará por unanimidad, y
es precisamente a partir de ese consenso que debemos reflexionar porque, ¿quién
puede estar en desacuerdo con que el endeudamiento que tome el Poder Ejecutivo
de una administración ‑que además impactará en otros períodos
administrativos y en varias generaciones de argentinos‑ debe ser
autorizado por los representantes del pueblo, es decir, por el Congreso de la
Nación? En definitiva, es el pueblo el que seguirá pagando la deuda luego de
que el Poder Ejecutivo de turno cese en sus funciones.
Creo que nadie en este recinto puede estar en desacuerdo
con que la sostenibilidad de la deuda debe ser un tema de Estado. Pero esto,
que tiene su lógica, no fue siempre así. Cuando el presidente Macri nos decía
que había decidido iniciar conversaciones con el Fondo Monetario o cuando
Caputo nos endeudaba a cien años ‑por encima de nuestra capacidad de
pago, poniéndonos de rodillas ante los acreedores y socavando nuestra libre
determinación como país soberano‑, la deuda pública interna y externa
pasó del 52 por ciento al 92 por ciento del PBI en solo cuatro años, de 2015 a
2019.
Escuché a un diputado preopinante decir que encontraron el
Fondo de Garantía de Sustentabilidad lleno de papeles. Mire, señor presidente,
el Fondo de Garantía perdió el 34,3 por ciento de su valor en dólares entre
diciembre de 2015 y diciembre de 2019; pasó de 65.000 millones de dólares en
2015 a 33.500 millones en 2019. Hoy estamos recuperando lentamente esos valores
y estamos en 46.000 millones. Entonces, endeudó a la Argentina
hasta más del 90 por ciento de su PBI y aumentó un 76 por ciento la deuda
externa. A la luz de esa experiencia, nosotros venimos a proponer a este
Congreso la sanción de este proyecto de ley.
También se ha dicho que el crédito tomado por Macri fue a espaldas de este
Congreso y con la complicidad externa, ya que contrariaba lo que establece la
propia Carta Orgánica del Fondo Monetario Internacional, que impide otorgar
créditos para financiar la formación de activos externos en sí, es decir, la
fuga de capitales.
El
informe del Banco Central de la República Argentina que abarca el período
2015-2019 estima una fuga de capitales de 87.000 millones de dólares. En fin,
una política de endeudamiento inconsistente sin la participación de este
Congreso. Los representantes del pueblo no pudieron debatir cómo las familias
argentinas íbamos a pagar tremenda deuda.
Quisiera
pensar que los argentinos hemos aprendido de estos errores, aunque llamarlos
errores es, por lo menos, indulgente. Tengo un grado de pesimismo en este
sentido.
Siempre
el lobo se viste con piel de cordero. A través del marketing venden que están
del lado de la gente; nos hablaron de Juan, de Lomas; de Héctor, de Ensenada y
de Doña María, de Lugano; pero sabemos que sólo escucharon a Christine Lagarde,
de Nueva York.
Sin
embargo, sí tengo la esperanza de que a partir de la crisis en la que nos
sumergió esta pandemia saldremos mejor y, de esta manera, se asentarán los
cimientos de una Argentina sostenible y sustentable.
En esta
línea se encuentra este proyecto de ley, con una dirigencia responsable y un
pueblo maduro que dice nunca más a los ciclos de endeudamiento insustentables y
a los dirigentes que pagan la deuda a costa del hambre de los argentinos y de
las argentinas.
Por
eso, desde ya adelanto mi acompañamiento a este proyecto.
Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el
señor diputado Menna, por Chubut.
Una
alegría darle la palabra, señor diputado.
Sr. Menna.- Señor presidente: muchas gracias. Estoy participando de manera remota
por una cuestión de responsabilidad, más allá de que, como usted sabe, el test de antígenos dio positivo probablemente
por el hecho de que padecí COVID-19 y debe haber quedado algún vestigio que
generó ese resultado del estudio inicial.
En
relación con la iniciativa en tratamiento, quiero manifestar que este proyecto
de ley no hace más que ratificar una premisa constitucional básica: que el
arreglo de la deuda pública –sea exterior o interior- es una potestad que la
Constitución Nacional le otorga al Congreso de la Nación, como dijo recién el
diputado Cacace.
Esto
surge del artículo 75, inciso 7), de la Constitución y también de su artículo
4º, que habla de la formación del Tesoro de la Nación, de los recursos de
fuente tributaria y de la venta y locación de tierras fiscales. Además, ese
artículo hace alusión expresa a la toma de empréstitos como fuente de financiamiento.
Este
proyecto no puede dejar de apoyarse en esa inteligencia puesto que va en la
misma línea de ratificar lo que dice la Constitución Nacional. No podría ser de
otra manera, dada la supremacía que tiene nuestra Carta Magna. Todas las normas
infraconstitucionales deben ajustarse a la norma
suprema. Lo mismo respecto de la imposibilidad que establece el artículo 3º.
Como se dijo acá, en la Ley de Administración Financiera ya se previó la
imposibilidad de destinar el producto de empréstitos al sufragio de gastos
ordinarios, es decir, corrientes.
Puede decirse que la norma en
tratamiento es más flexible que la Ley de Administración Financiera porque solo
contempla el endeudamiento externo, pero debo decir que en este punto también
hay un mandato constitucional.
El
artículo 4º antes mencionado, que se refiere a la formación del Tesoro, dispone
que el Congreso puede aprobar empréstitos. Es decir, la primera condición es la
aprobación congresional. Pero estos empréstitos
también pueden ser para empresas de utilidad nacional. Entonces, la propia
Constitución veda la posibilidad de utilizar el producto de los empréstitos
para financiar el gasto corriente.
Este es
el programa de los padres fundadores. Este es el programa de los constituyentes
de 1853, que tenemos que respetar. Por lo tanto, más allá de que, en
definitiva, estamos ratificando lo que dispone la Constitución Nacional ‑ley
que en ese sentido podría catalogarse de súper abundante-, este proyecto puede
ser positivo y considerarse como la ratificación de un compromiso político.
Asimismo,
quiero manifestar que todas estas intervenciones tan declarativas y
conmovedoras respecto del “nunca más de la deuda” deberían también trasladarse
hacia las provincias y los gobiernos que integran muchos de quienes se han
expresado en ese sentido. La verdad es que el endeudamiento público es
exorbitante en muchas provincias.
Me
referiré al caso concreto de la provincia del Chubut. Mi provincia tiene una
deuda en dólares con prórroga de jurisdicción y, lo más grave, con cesión en
garantía de las regalías hidrocarburíferas. Esto nos
ha llevado a que prácticamente esa fuente de financiamiento ‑suerte que
no la tienen todas las provincias, sino solo las petroleras- está prácticamente
en buena medida comprometida en el repago, cedida a un fideicomiso de garantía
que directamente percibe las regalías para el repago de esa deuda y de sus
servicios.
Esto
ha provocado que, por ejemplo, al día de hoy en la provincia de Chubut todavía
no se terminó de pagar el medio aguinaldo del mes de julio, el aguinaldo del
mes de diciembre y se les debe el sueldo de diciembre a la mitad de los
empleados y jubilados. De hecho, a toda esa masa de personas se les debe el
sueldo de enero.
Por lo tanto, creo que también
deberíamos alinear estas declaraciones de principios y ponerlos en vigencia en
las provincias, puesto que en muchos casos es el oficialismo nacional el que
tiene la obligación y la misión de gobernar allí.
Sr. Presidente (Massa).- Toda vez que resta que expongan nada más que
tres oradores, la Presidencia solicita a los señores diputados que se conecten
al sistema VPN, tanto quienes se encuentran participando de manera remota como
aquellos que están presentes en el recinto.
Tiene la palabra el señor diputado Fernández,
por Córdoba.
Sr. Fernández (E.).- Señor
presidente: la iniciativa en tratamiento no es una más de la agenda
legislativa. Es un proyecto fundamental que está dentro de las nuevas
prioridades colectivas que ha fijado nuestro gobierno. Fundamentalmente, es para revertir la
situación de endeudamiento y sus condicionamientos, a favor de las grandes
mayorías y del desarrollo nacional.
Este proyecto apunta a un modelo de
país sostenible y soberano, que está en las antípodas del endeudamiento
reiterado en la historia reciente de la Argentina. Es sintético; son tres
artículos claros y entendibles.
Muchos viejos legisladores decían que
cuando la mayoría de la gente entiende una ley es porque, en realidad, legisla
cuestiones importantes como el tope fijado para los títulos públicos, la
obligatoriedad de que todo programa de financiamiento con el FMI debe ser
aprobado por una ley o la prohibición de financiar gastos corrientes.
Como ya expresaron mis compañeros de
bancada, esta iniciativa del Poder Ejecutivo es coherente con la gestión que
viene llevando el gobierno. También es coherente porque lo asumimos con
responsabilidad. Pedimos esa misma coherencia a quienes han hecho observaciones
concretas desde el punto de vista de técnica legislativa puesto que, en
definitiva, es un proyecto que no se contrapone con la Ley de Administración
Financiera, que también regía en la gestión anterior.
Sí quiero dejar aclarado que a lo
largo del debate se ha dicho varias veces que el proyecto devuelve facultades
al Congreso. La verdad es que esta afirmación resulta, por lo menos, inexacta.
Estas facultades fueron negadas por la administración anterior; Juntos por el
Cambio resolvió una deuda de forma express, discrecional, inconsulta y corporativa.
Entonces, endeudó a la Argentina hasta más del 90 por
ciento de su PBI.
Sr. Presidente (Massa).-
Disculpe la interrupción, señor diputado.
Pido a los presentes que por favor guarden silencio.
Continúa en el uso de la palabra el señor diputado Eduardo
Fernández, por Córdoba.
Sr. Fernández (E.).- Señor
presidente: el problema grave no es la interpretación que surja de la Ley de
Administración Financiera, sino la coherencia entre lo que hace un gobierno y
la legislación que propone, y el respeto a esa normativa. Eso es fundamental.
La sanción de este proyecto de ley permitirá al pueblo
argentino, a través del Congreso, saber qué deuda adquirimos y cuáles son sus
condicionalidades. También otorgará seguridad y previsibilidad al sector
privado. Para los empresarios será una gran oportunidad, porque podrán saber el
condicionante externo que muchas veces producen esas presiones devaluacionistas, cuando ven los compromisos exteriores que
tiene un Estado. Asimismo, abogo para que las provincias adopten criterios
similares.
Por otra parte, me permitiré disentir con el diputado de mi
provincia que dijo que la renegociación de la deuda fue exitosa. Según nuestra
percepción, no solo es exitoso haber logrado un arreglo, sino también hacerlo
sostenible. Eso es lo que esta iniciativa está proponiendo al pueblo argentino.
Espero que entre todos la transformemos en ley y que no busquemos excusas o
atajos, supuestamente jurisprudenciales, para oponernos a alguno de sus
artículos.
Sr. Presidente (Massa).-
Quiero recordarles que quedan solo dos oradores y que para votar, los diputados
que deben estar presentes en el recinto tienen que conectarse a través del
sistema VPN.
Tiene la palabra el señor diputado Campos, por Buenos
Aires.
Sr. Campos.- Señor
presidente: he escuchado hoy que básicamente hay intereses del mundo a través
de la deuda, cuyo único objetivo es poner a la Argentina de rodillas.
Escuché que hay intereses, obviamente, espurios, que
quieren ganar con la deuda argentina. Pero lo curioso es que estos intereses
solo quieren hacerlo con nuestro país, ya que no lo hacen con Uruguay,
Paraguay, Chile o Brasil, ni tampoco con Australia. Parece que el mundo solo
nos mira a nosotros para robarnos nuestros dólares, los dólares de nuestro
trabajo.
En cuanto al tema de la deuda, también escuché que se acusó
al gobierno de Juntos por el Cambio, casi a propósito, como una idea de
sojuzgar a las mayorías populares y de condicionar el desarrollo futuro del
país. Escuché también decir que el tema de la deuda era prácticamente culpa de
Bernardino Rivadavia, porque empezó en esa época, en el principio de los
tiempos. Es decir, se dijo que era una cosa cultural.
La realidad es que no escuché a nadie -salvo honrosas
excepciones, como el diputado Laspina y algunos otros
legisladores- hablar de lo que sería el delito económico precedente.
Sr. Presidente (Massa).- Pido
a los señores diputados que guarden silencio.
Sr. Campos.- Me refiero
al delito económico precedente de toda deuda, que es el déficit fiscal, y no
hablamos del déficit fiscal en esta casa, que es la casa del pueblo.
Con el déficit fiscal estamos empobreciendo a nuestra
población a través de la inflación que genera, y nadie en este cuerpo defiende
a los ciudadanos de este país por los déficits que genera una pésima
administración política como la que tenemos.
La realidad es que la Argentina tuvo cien años de déficit
fiscal prácticamente ininterrumpido. Ahora bien, de eso no nos hacemos
cargo. ¿Qué es lo que está pasando
ahora? Traemos un proyecto de ley que,
en síntesis, lo que hace es impedir a un alcohólico -que es el Estado
argentino- ir a tomar de fiado al bar. O sea, ya no va a poder ir a tomar al
bar sin autorización del Congreso.
¿Eso hace que este personaje deje de ser alcohólico? No.
Sigue siéndolo. Pero eso tampoco lo hablamos. Estamos totalmente acostumbrados
a un déficit crónico en la Argentina, y los cien años de déficit fiscal lo
atestiguan. Hasta que no superemos esa barrera cultural, no podremos progresar
en nuestro país.
El oficialismo habla de la deuda contraída, pero no de la
deuda que está contrayendo hoy, que también es monumental. Solo desde el punto
de vista de la remuneración de las LELIQ, estamos hablando de 7.000 millones de
dólares este año.
Señor presidente: no me parece gracioso lo que estoy diciendo.
¿Me está escuchando? No es gracioso que en el país se siga…
Sr. Presidente (Massa).-
¿Sabe lo que pasa, señor diputado? Un compañero de su bloque vino a hacerme un
planteo respecto del funcionamiento de la Cámara la semana que viene y, antes
de irse, me hizo una broma.
Sr. Campos.- Está bien,
señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Tengo derecho a sonreír frente a una broma de un diputado. Lo que usted dice es
importante, pero estaba escuchando a un colega de su bloque.
Continúe con su exposición, señor diputado Campos.
Sr. Campos.- Ningún
problema. Gracias, señor presidente.
Estamos hablando de deuda en este recinto mientras
continuamos endeudándonos en este momento a una tasa muy importante.
Básicamente debemos asumir que tenemos un Estado fallido y que la
administración política de este país lo único que hace es mantener esa
condición de fallido.
Yo no soy de los que creen que la Argentina está quebrada,
aunque sí pienso que el Estado argentino está quebrado y está transmitiendo esa
pobreza a toda la comunidad. Por lo tanto, si no nos ponemos a trabajar para
que la administración política de este país sea realmente buena para los
ciudadanos, seguiremos tropezando con la deuda y con la pobreza. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- Quiero
recordarles que daremos la palabra al señor diputado Ponce y que él será el
último orador individual en este tema. Luego de su intervención, procederemos a
votar.
En primer lugar, votaremos en general. A continuación, por
pedido del diputado Pastori, votaremos de manera
nominal los artículos 1° y 3°. El resto del articulado se votará en un único
acto de manera nominal. Por lo tanto, pido por favor a todos que procuren la
conectividad.
Tiene palabra el señor diputado Ponce, por San Luis.
Sr. Ponce.- Señor
presidente: estamos considerando este proyecto de ley sobre fortalecimiento de
la sostenibilidad de la deuda pública. Pero antes de entrar en temas técnicos,
que ya han expresado muchos diputados, y antes de votar, debo expresar lo que
pienso sobre la deuda, que para mí es el mal de todos los argentinos.
Pienso que la deuda es el mal por el cual hoy seguramente
muchos argentinos y argentinas -que ahora deben estar escuchándonos- están
desocupados, en la indigencia y desesperanzados en la Argentina.
Sobre lo que ha sido la deuda, gobierno tras gobierno,
tratamos de echarnos la culpa. Pero es muy cierto lo que dijo recién uno de mis
compañeros de bancada en relación con lo que es esta deuda, que ha sido
contraída mayormente por la dictadura militar y que sabemos que es odiosa e
ilegítima en gran medida.
Aquí se hizo mención del fallo del juez Ballesteros y de la
lucha del caso Olmos. Esta es una deuda que el pueblo hoy tiene que pagar con
sangre, sudor y lágrimas, mientras nosotros aquí discutimos una norma que yo
celebro. Por fin el Congreso va a disponer o va a autorizar que el Estado
nacional pueda endeudarse o suscribir los acuerdos de pago de esta deuda.
En relación con los comentarios sobre quienes están en
contra de esta norma, quiero decir que vengo de una provincia que justamente
tiene como política de estado no endeudarse; se trata de una política de estado
muy clara. Esto ha sido así a través del tiempo; la provincia de San Luis nunca
ha tomado deuda y no por ello ha dejado de crecer y desarrollarse
- Varios señores
diputados hablan a la vez.
Sr.
Ponce.-
Parece que hay mucha bulla, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Si algunos tienen que mantener una conversación
personal, los invito a que lo hagan fuera del recinto, a fin de poder seguir
escuchando al diputado en el uso de la palabra.
Continúe, diputado Ponce.
Sr.
Ponce.-
Acerca del tema de que la provincia de San Luis no ha tomado deuda, decía que
incluso en el momento del pacto fiscal de 2017, la provincia de San Luis fue la
única que no lo firmó. Fíjese ese detalle: ese pacto fiscal fue la antesala del
endeudamiento que tuvo el gobierno anterior. No solamente se endeudó el
gobierno, o sea, endeudó a todos los argentinos y argentinas, sino que también
fue una invitación clara a que todas las provincias o gran parte de ellas se
endeudaran.
Por eso, destaco que el 7 de julio de 1947 Perón dictó un
Acta de Independencia Económica. Perón, y más adelante Néstor Kirchner, fueron
los únicos que llevaron adelante políticas de desendeudamiento, cosa que otros
gobiernos no han podido hacer en estos tiempos. Se ha dicho mucho sobre el tema
de la deuda, pero no se ha destacado que el de Perón y el de Néstor Kirchner
han sido los únicos dos gobiernos que han tenido esta política.
Para finalizar, quiero reivindicar lo que han dicho muchos
de nuestros compañeros. Me refiero al “nunca más”; nunca más endeudarnos, nunca
más tener que someter a nuestro pueblo argentino al pago de una deuda que ha
sido contraída por gobiernos y políticos irresponsables. La verdad es que hasta
me da vergüenza decir nunca más a un endeudamiento. Ojalá que nunca tengamos
que hacer uso de esta ley, ya que eso significará que no hemos tenido que pedir
ni un solo centavo. (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Massa).- Se va a votar en general, de forma nominal, el
dictamen de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Finanzas recaído en
el proyecto de ley venido en revisión del Honorable Senado, sobre fortalecimiento
de la sostenibilidad de la deuda pública.
- Mientras se practica la votación nominal:
Sr.
Presidente (Massa).- La Presidencia procederá a preguntar, de manera
verbal, el voto de aquellos diputados que no ha sido registrado por el sistema.
Señor
diputado Allende: ¿puede expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Fregonese:
¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra.
Fregonese.- Mi voto es afirmativo,
señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Lehmann: ¿puede expresar el sentido
de su voto?
Sra.
Lehmann.- Mi voto es afirmativo.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Uceda: ¿puede expresar el sentido
de su voto?
Sra.
Uceda.-
Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Allende: ¿puede expresar el sentido
de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Allende
es considerado ausente en la votación.
Sr.
Martín.- Mi voto es afirmativo. Tuve dificultades para loguearme.
Sr.
Presidente (Massa).- Exactamente, señor diputado, no figura logueado, pero está presente en el recinto.
Señor diputado Martín: ¿puede expresar el sentido de su
voto?
Sr.
Martín.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Burgos: ¿puede expresar el sentido
de su voto?
Sra.
Burgos.- Afirmativo, señor presidente.
Sra.
Piccolomini.- Señor presidente: deseo
modificar el sentido de mi voto. Mi voto es afirmativo.
Sr.
Presidente (Massa).- La señora diputada Piccolomini
modifica el sentido de su voto a afirmativo.
Sr.
Fernández (E.).- Señor presidente: ¿se computó mi voto? Le pregunto
porque en un momento se me cortó la señal de internet.
Sr.
Presidente (Massa).- Sí, diputado. Figura su voto.
Se cierra la votación.
Por Secretaría se dará cuenta del resultado:
Sr.
Secretario (Cergnul).- Se han registrado 233
votos afirmativos, dos negativos y dos abstenciones. [2]
Sr. Presidente (Massa).- Resulta
afirmativa.
En consideración el artículo 1°.
Tiene la palabra el señor diputado Laspina,
por Santa Fe.
Sr. Laspina.- Señor
presidente: vamos a proponer una modificación en este artículo.
Tenemos una propuesta de redacción para el artículo 1° que
creemos va a quedar mejor desde el punto de vista de las formas. Básicamente se
trata de una reforma al artículo 60 de la ley 24.156 que es la que regula la
forma en la cual el Congreso de la Nación establece en el presupuesto las
autorizaciones para la emisión de deuda.
En ese sentido, proponemos que el artículo 1° diga lo
siguiente: “Modificase el artículo 60 de la ley 24.156 que quedará redactado de
la siguiente manera: ‘Artículo 60: Las entidades de la administración nacional
no podrán formalizar ninguna operación de crédito público que no esté
contemplada en la ley de presupuesto general del año respectivo en una ley
específica. La ley de presupuesto general debe indicar como mínimo las
siguientes características de las operaciones de crédito público autorizadas:
tipo de deuda, especificando el porcentaje por tipo de moneda local o
extranjera, monto máximo autorizado para la operación, plazo mínimo de
amortización, destino del financiamiento, monto máximo del programa global de
emisión a ser emitido bajo legislación extranjera y monto máximo global del
programa de emisión a ser emitido en moneda extranjera.
“Si las operaciones de crédito público de la administración
nacional no estuvieran autorizadas en la ley de presupuesto general del año
respectivo requerirán de una ley que las autorice expresamente.
“Se exceptúa del cumplimiento de las disposiciones
establecidas precedentemente en este artículo a las operaciones de crédito
público que formalice el Poder Ejecutivo nacional con los organismos
financieros internacionales de los que la Nación forma parte, a excepción de
los créditos solicitados en el marco de eventuales acuerdos con el Fondo
Monetario Internacional, cuyo monto máximo requerirá una ley que la autorice’.”
Básicamente esta es la modificación que proponemos, que
establece que el Congreso de la Nación tendrá que autorizar en la ley de
presupuesto el porcentaje de emisión de montos en moneda extranjera y bajo
legislación extranjera, cuando no necesariamente los dos coinciden, y también
fija la excepción para las negociaciones con los organismos multilaterales de
crédito para el caso del Fondo Monetario Internacional, que va a requerir una
ley especial de este Congreso.
Estamos impulsando esta modificación porque creemos que va
a ser mejor a los fines de la técnica legislativa y especifica algunas cosas
que no quedan del todo claras en el dictamen de mayoría.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra el señor diputado Heller, por la Ciudad Autónoma de Buenos
Aires.
Sr. Heller.- Señor
presidente: ayer, cuando tratamos el proyecto en la comisión, resaltamos como
un hecho altamente positivo que, en un tema de esta trascendencia, cada uno
había dejado de lado sus discrepancias y entendimos que la votación en la
comisión había sido unánime. Por supuesto, hoy hay algún voto en contra que
tiene que ver con los diputados que no integran ni la Comisión de Presupuesto y
Hacienda ni la de Finanzas que ayer estuvieron reunidas.
Creemos que no hay razón para que introduzcamos
modificaciones, ya que las mismas solo serían dilatorias. Tengamos en cuenta
que este es un proyecto del Poder Ejecutivo que cuenta con sanción del
Honorable Senado y nosotros estamos actuando como Cámara revisora.
Por lo tanto, no vamos a aceptar la modificación propuesta.
Sr. Presidente (Massa).- Se
va votar en forma nominal el artículo 1° sin las modificaciones planteadas por
el señor diputado Laspina.
- Mientras
se practica la votación nominal:
Sr. Presidente (Massa).- La
Presidencia procederá a preguntar, de manera verbal, el sentido del voto a los
señores diputados que el sistema no ha podido registrar.
Señor diputado Asseff: ¿puede indicar el sentido de su
voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Gioja: le deseo una pronta
recuperación y le solicito si puede indicar el sentido de su voto.
Sr. Gioja.- Muchas
gracias, señor presidente.
Mi voto es afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Mestre: ¿puede indicar el sentido de su voto?
Sr. Mestre.- Mi voto es
negativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Diputado Asseff: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al
no haberse expresado, el señor diputado Asseff es considerado ausente en la
votación.
Sra. Penacca.- Pido la
palabra.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra la señora diputada Penacca, por la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sra. Penacca.- Señor
presidente: quiero cambiar el sentido de mi voto.
Sr. Presidente (Massa).- ¿Me
puede indicar el sentido de su voto, señora diputada Penacca?
Sra. Penacca.- Mi voto es
por la afirmativa.
Sr. Presidente (Massa).-
Gracias, señora diputada.
¿Algún otro diputado quiere hacer uso de la palabra?
Sra. Pértile.- Señor
presidente: entendí mal la forma en que se estaba vitando.
Por lo tanto, mi voto es afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).-
Gracias, señora diputada Pértile.
Sr. Mosqueda.- Señor
presidente: yo también quiero cambiar el sentido de mi voto ya que entendí mal.
Le pido disculpas señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).- ¿Me
puede indicar el sentido de su voto, señor diputado Mosqueda?
Sr. Mosqueda.- Mi voto es
afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Tiene la palabra la señora diputada Figueroa, por Salta.
Sra. Figueroa.- Señor
presidente: aclaro que mi voto también es afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).- Se cierra la votación. Por Secretaría se leerá el resultado.
Sr. Secretario (Cergnul).-
Se han registrado 134 votos por la afirmativa, 105 votos por la negativa y
ninguna abstención. [3]
Sr. Presidente (Massa).- En consideración el artículo 2°.
Se va a votar.
-
Resulta afirmativa.
Sr. Presidente (Massa).- En
consideración el artículo 3°.
Tiene la palabra el señor diputado Pastori,
por Misiones.
Sr. Pastori.- Señor presidente:
para no repetir las expresiones que formulé en ocasión del tratamiento en
general, quiero señalar que en la reunión de comisión de ayer advertí acerca de
la vaguedad de este artículo 3° en cuanto a si modificaba o no el artículo 56
de la ley 24.156. Pedí que en el transcurso de la jornada de hoy esto se
aclarara por parte del oficialismo, pero no lo hizo ninguno de los oradores.
Por lo tanto, es un artículo que se contrapone con el 56 y lo restringe en vez
de ampliarlo, por lo que importa limitaciones para el uso del crédito público
bajo jurisdicción y legislación extranjera y en moneda extranjera, y deja
liberada la prohibición del uso en gasto corriente solamente para este tipo de
créditos. Además, indirectamente, puede entenderse que libera el uso de
créditos públicos para gastos corrientes, por ejemplo para pagar sueldos,
cuando se toma deuda pública interna en moneda local.
En consecuencia, pedimos la eliminación de este artículo
3°, porque en lugar de aclarar, obstaculiza y confunde la actual redacción del
artículo 56 la ley de administración financiera.
Sr. Presidente (Massa).- Tiene
la palabra el señor diputado Heller, por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Heller.- Señor
presidente: lamentablemente, debo decir que ayer el señor diputado Pastori hizo referencia a un matiz, pero personalmente
entendí que su voto sería positivo dejando asentada su discrepancia. No quedó
claro ‑por lo menos para mí‑ que él pensaba votar por la negativa,
aunque está en todo su derecho a hacerlo.
No comparto para nada el argumento de que esto confunde y
no aclara, y vamos a mantener el texto tal cual ha venido del Senado, es decir
que no se acepta la modificación o el retiro del punto, tal como propone
el señor diputado Pastori.
Sr. Presidente (Massa).- Se va
a votar de manera nominal el artículo 3°, sin la eliminación propuesta por el
señor diputado Pastori,
es decir, tal como figura en el dictamen explicitado por el señor diputado
Heller.
- Mientras
se practica la votación nominal:
Sr. Presidente (Massa).- La
Presidencia va a requerir el voto a aquellos señores diputados a quienes el
sistema no identificó.
Diputado Enrique Estévez.
- Luego de unos
instantes:
Sr. Presidente (Massa).-
Diputado Miguel Nanni.
Sr. Nani.- Mi voto es
negativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Diputado Humberto Marcelo Orrego.
Sr. Orrego.- Negativo,
señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Diputado Enrique Estévez.
- Luego de unos
instantes:
Sr. Presidente (Massa).- El
señor diputado Enrique Estévez será considerado ausente al momento de la
votación.
Diputada María Gabriela Burgos.
Sra. Burgos.- Señor
presidente: no he podido loguearme. Mi voto es
negativo.
Sr. Presidente (Massa).-
Diputada Graciela Navarro.
Sra. Navarro.- Señor
presidente: voté mal. Mi voto es afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).- Con
la incorporación de los votos expresados a viva voz por los señores diputados,
se cierra la votación. Por Secretaría se dará cuenta del resultado.
Sr. Secretario (Cergnul).-
Se han registrado 132 votos por la afirmativa, 108 votos por la negativa y
ninguna abstención. [4]
Sr. Presidente (Massa).- En
consideración el artículo 4°.
Se va a votar.
-
Resulta afirmativa.
-
El artículo 5°
es de forma.
Sr. Presidente (Massa).- Queda
definitivamente sancionado el proyecto de ley.
[5]
Se comunicará al Poder Ejecutivo y se
dará aviso al Honorable Senado. (Aplausos.)
- 33 -
Sr. Presidente (Massa).- Corresponde considerar el dictamen de las comisiones de
Presupuesto y Hacienda y de Defensa Nacional -Orden del Día N° 357-, recaído en
el proyecto de ley del Poder Ejecutivo por el que se otorga por única vez un
beneficio extraordinario a los y las familiares de los y las tripulantes del
Submarino ARA “San Juan.
Aquí Orden del Día N° 357
Tiene la palabra el señor diputado Fernández, por Buenos
Aires.
Sr.
Fernández (C.A.).- Señor presidente: estamos analizando un proyecto
elevado por el Poder Ejecutivo nacional que pretende consagrar en favor de
determinados familiares de las y los tripulantes del submarino ARA San Juan el
derecho a percibir por única vez un beneficio extraordinario de carácter
económico equivalente a la remuneración mensual de una determinada escala del
convenio colectivo de trabajo para el personal del sistema nacional de empleo
público multiplicado por cien.
- Ocupa la
Presidencia la señora presidenta de la Comisión de Legislación General, doña
Cecilia Moreau.
Sr.
Fernández (C.).- Tal como se expresa en el mensaje de elevación, esta
iniciativa se inscribe en el marco del resto de los homenajes realizados a lo
largo y ancho del país en un hecho que obviamente conmovió a la opinión
pública.
La pérdida total del submarino ARA San Juan, conformada por
44 hombres y mujeres, oficiales y suboficiales de la Armada Argentina, fue un
hecho doloroso que conmovió a la sociedad argentina. La inmensa solidaridad
internacional que tuvimos oportunidad de ver en el desarrollo de la búsqueda
del submarino hundido permitió apreciar con claridad la conmoción que se había
generado alrededor del hecho.
Concretamente, pocos hechos concitan semejante nivel de atención y
solidaridad.
Este asunto repercutió en cada uno de los rincones de
nuestro país. Tuve oportunidad de asistir a un homenaje que fue la puesta en
valor de una réplica en la localidad de Hinojo, en el centro de la provincia de
Buenos Aires, cercana a Olavarría. Se trata de una localidad que no tiene nada
que ver con la Armada ni con la actividad submarina. La realidad es que ese
hecho que conmovió a los familiares, conocidos y vecinos de los tripulantes,
generó una honda repercusión en la totalidad de la Argentina.
Luego de un año de tareas y de búsqueda los restos del
submarino fueron localizados en un cañón del talud continental a más de 900
metros de profundidad. De acuerdo con la información disponible, más allá de
todas las investigaciones que se están llevando a cabo en búsqueda de las
responsabilidades, de los sumarios y consejos de guerra que se están haciendo
en el marco del Ministerio de Defensa, debemos decir que la tripulación del
submarino se comportó con una elevada dedicación profesional, con un acabado
cumplimiento del juramento de honor que hizo cada uno de los hombres y mujeres
al dedicarse al servicio de la defensa nacional. No alcanzan las palabras que
podamos pronunciar para definir los comportamientos heroicos. No alcanzan los adjetivos que podamos
utilizar para describir un hecho de estas características que nos conmociona
profundamente. El tratamiento que tuvimos en conjunto con las comisiones de
Presupuesto y Hacienda y de Defensa Nacional fue absolutamente respetuoso en el
marco de un hecho simbólico. Como todos interpretamos el sentir de esa reunión
quisimos rendirle un homenaje a aquellos que hacen realidad eso que nosotros
cantamos cuando decimos que estamos dispuestos a dar nuestra vida por la
patria. Este hecho que causó tanta conmoción nos obliga a una compensación que
es mínima respecto para los familiares de las víctimas del hundimiento del ARA
San Juan directamente afectados.
Un dato no menor: ustedes saben que en todas estas
cuestiones vinculadas con aspectos económicos
siempre hay diferencia de opiniones. Lo que plantea esta ley es un hecho
voluntario de que el familiar puede adherir o continuar su búsqueda de
resarcimiento por otra vía.
Por lo tanto, con estas pocas palabras, que solo pretenden
enmarcar el alcance de lo que tenemos que votar, pido a la Cámara que con ese
sentimiento que representa a todos los argentinos acompañemos con su voto
favorable la aprobación de este proyecto de ley. (Aplausos.)
Sra.
Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra el señor diputado Martínez, por
Santa Fe.
Sr.
Martínez.- Señora presidenta: en el marco de lo recientemente
expresado por el presidente de la Comisión de Defensa Nacional, diputado Carlos
Fernández, quiero aprovechar la oportunidad
para mencionar algunos otros elementos que pueden agregar argumentación
en el mismo sentido de lo ya planteado.
Venimos al tratamiento de este tema con el objetivo de
otorgar este beneficio extraordinario a las y los familiares de los tripulantes
del submarino ARA San Juan sabiendo que es un tema que por mucho tiempo va a
seguir despertando sensibilidades y posiciones distintas en el interior de este
recinto en lo que tiene que ver con las responsabilidades y el vínculo con los
familiares. Seguramente en eso los que estamos aquí tenemos diferencias. Ahora,
no tenemos dudas -como bien planteó el diputado preopinante- en la necesidad de
avanzar en este gesto de acompañamiento a las y los familiares de los
tripulantes del submarino. Por eso nos pareció muy pertinente la presentación
de este proyecto allá por el 30 de noviembre del año pasado con la firma del
presidente de la Nación, del ministro de Defensa, Agustín Rossi y del Jefe de
Gabinete, Santiago Cafiero. También la posibilidad de que fuera incluido en el
temario de extraordinarias. Asimismo, agradezco a los presidentes de bloque y
al presidente de esta Cámara esta posibilidad habiendo analizado en el día de
ayer este tema en las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Defensa
Nacional con la presentación del Orden
del Día número 357, cuyo despacho fue firmado por unanimidad.
Además, quiero decir que no es la primera vez que este
Congreso analiza normas de este tipo que plantean algún tipo de beneficio
extraordinario y una indemnización reparadora.
Hubo algunos casos recientes. Me refiero a la ley 27.139,
que tiene que ver con lo que pasó en la AMIA; la ley 27.179, que remite a lo
sucedido en Río Tercero; la ley 26.690, vinculada al atentado contra la
Embajada de Israel. A esto le agregamos la ley 24.411, de desaparición forzada.
Lo cierto es que todas estas leyes tienen algunos mínimos comunes.
Le pido autorización señora presidenta para extenderme un
par de minutos más en mi discurso.
Como
todas las leyes de este carácter, se trata de fijar el monto del beneficio a
recibir y de establecer que la indemnización tiene un carácter de bien propio,
de acuerdo con lo que establece nuestro Código Civil y Comercial, distinto del
sistema que generaría su distribución si fuese considerado como un bien
ganancial.
Además,
se prevé la distribución de los recursos entre los beneficiarios, se fija una
autoridad aplicación y se establece que, de existir acciones judiciales contra
el Estado nacional fundadas en los mismos hechos, es necesario avanzar -para
quienes pretendan acogerse a este beneficio- en su desistimiento.
Como
bien dijo el diputado preopinante, esta es justamente una propuesta; no es
obligatoria ni bajo ningún punto de vista pretende pasar por encima de la
voluntad de nadie. Acogerse a este beneficio es un derecho y no una obligación;
será un acto voluntario por parte de las familias de los tripulantes del ARA
San Juan.
Para
cerrar, me parece importante mencionar estos antecedentes y también el espíritu
de consenso que en general primó en el Congreso argentino cada vez que se
trataron leyes de este tipo. Por ejemplo, la que tiene que ver con el atentado
a la embajada de Israel, en esta Cámara de Diputados se sancionó en junio de
2011 con la unanimidad de 144 votos afirmativos; la vinculada con la AMIA se
votó en la Cámara de Diputados en abril de 2015, también por unanimidad, con
198 votos afirmativos, y la de Río Tercero se votó en esta Cámara en julio de
2014 y también se aprobó por unanimidad, con 180 votos afirmativos.
Esto
marca una profunda sensibilidad del Congreso argentino, y de la Cámara de Diputados
en particular, para avanzar con estos necesarios gestos de reparación y de
acompañamiento, así como la vocación de los distintos espacios políticos, aun
con nuestras diferencias –insisto-, en tratar de ponernos de acuerdo.
Con
este espíritu, señora presidenta, ponemos a consideración este proyecto, a la
espera de que no sea la excepción y que también podamos avanzar en forma
unánime con su aprobación. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra el
señor diputado Martiarena, por Jujuy.
Sr. Martiarena.- Señora presidenta: hoy estamos
tratando una iniciativa muy importante, que otorga un beneficio para las
familias de los tripulantes del submarino ARA San Juan.
Esta
muy buena iniciativa del Poder Ejecutivo nacional, con este beneficio extraordinario,
de carácter voluntario y por única vez, viene a dar certidumbre y significa una
ayuda para recomponer la situación económica de las familias frente al hecho
que se ha producido como consecuencia de la desaparición física de quienes en
vida sostenían a sus familias. Entonces, celebro y acompañó realmente esta
iniciativa.
Si
se me permite hacer algunas consideraciones, quiero destacar el aporte que ha
hecho la provincia de Jujuy, que desde el nacimiento de la Patria viene
contribuyendo a la grandeza nacional. Nuestra provincia ha entregado muchas
vidas humanas, y en esta oportunidad fueron nueve los submarinistas jujeños que
han entregado su vida en el cumplimiento del deber y en la defensa nacional.
Yo
quiero agradecer y destacar el gesto que ha tenido el ministro de Defensa,
Agustín Rossi, quien me invitó a acompañarlo el 14 de diciembre pasado, en
oportunidad de rendir un justo y merecido homenaje a los jujeños caídos, y al
resto de los tripulantes, en un acto muy emotivo llevado a cabo en el
Regimiento 20, en la capital jujeña.
Como
decía, señora presidenta, la desaparición física de estas personas ha sido
imprevista, impactante y conmovedora para todos los argentinos, pero
fundamentalmente para los familiares de las y los tripulantes, y ha generado no
solamente un gran impacto emocional, sino también una consecuencia económica,
con la incertidumbre que ello significa a futuro.
Por
supuesto que este resarcimiento es una ayuda para recomponer la situación
económica de las familias y mitigar en parte esta pérdida irreparable, pero
siguiendo en línea con lo que es la voluntad de nuestro gobierno y de todos los
legisladores ‑porque entiendo que esta ley será aprobada por unanimidad,
ya que es la voluntad de todo el parlamento argentino-, yo creo que sería bueno
analizar la posibilidad de que, más allá de este beneficio económico, se pueda
diseñar o formular un régimen especial de ingreso a la administración pública
nacional de un familiar directo dee cada uno de los
44 marinos caídos, que de alguna manera también ayude a fortalecer y a
recomponer un poco más el cuadro de situación económica mirando hacia el
futuro.
Dejo
esta propuesta concreta para que la consideren los distintos bloques, pero creo
que también sería un acto de justicia y traería más tranquilidad a todos los
familiares.
Por
otro lado, creo que es importante hacer algunas consideraciones esta tarde.
Este hecho tan lamentable que enlutó a toda la República Argentina todavía no
ha tenido un esclarecimiento en cuanto a lo sucedido, en lo que se refiere a la
investigación judicial.
Hemos
escuchado a los familiares de los caídos en cumplimiento del deber, quienes
reclaman –y lo han hecho públicamente- de manera legítima su derecho a conocer
la verdad de lo sucedido y a que se haga justicia. Están esperando que concluya
una investigación judicial que ya lleva más de tres años, porque es importante
llegar a la verdad.
Por ello, creo que es
importante, en este día en que estamos tratando este tema tan trascendente, que
desde este alto cuerpo legislativo nacional pidamos que quienes tienen en sus
manos la posibilidad de investigar hasta llegar a la verdad y la justicia
aceleren el proceso judicial para que no solamente los familiares puedan lograr
un poco más de resignación y tranquilidad sino también todo el pueblo
argentino.
Sra.
Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra la señora diputada Rey, por
Buenos Aires.
Sra.
Rey.-
Señora presidenta: celebro doblemente este proyecto que estamos tratando hoy
aquí; lo celebro como familiar de víctima y lo celebro como legisladora, como
diputada nacional.
Entiendo que este proyecto es la continuación de un
acompañamiento que han recibido los familiares de tripulantes del submarino ARA
San Juan y también creo que todo reconocimiento de derechos a favor de las
víctimas es parte de una cadena de reconocimientos que la sociedad tiene frente
a quienes sufren hechos tan dolorosos.
Valoro el objeto de este proyecto y por eso desde ya
adelanto el acompañamiento, del mismo modo que acompañé, acompaño y acompañaré
siempre a las víctimas de cualquier situación trágica y dolorosa como esta que
nos ocupa hoy.
Destaco, además, el tiempo, la importancia de que este
beneficio sea dado en un plazo razonable. Es necesario ‑como escuchaba
recién a los diputados preopinantes‑ darles las herramientas a esas
familias, que en muchos casos perdieron a quienes eran el sostén del hogar.
No puedo dejar de decir que hace casi treinta años,
felizmente, me convertí en la mamá de Lucas, y van a ser casi nueve años que me
convertí en la mamá de una de las víctimas de una de las tragedias más
dolorosas de nuestra historia reciente.
Junto con Lucas se fueron cincuenta y una vidas más, y a
partir de ese momento formo parte de una gran familia, que son los familiares
de las víctimas de la tragedia de Once.
Por eso, no puedo dejar de manifestar, con mucho dolor, que
siento que en este proyecto que estamos tratando ‑que valoro, que celebro
y que acompaño‑ hay una implícita discriminación frente a otras víctimas.
Lo decían los diputados que hablaron antes. Esta casa, mediante la sanción de
leyes que se votaron de manera unánime, ha dado respuesta a cada una de las
víctimas de los hechos que conmocionaron a nuestra sociedad en los últimos
años. Todas han tenido respuesta, excepto la tragedia de Once de hace nueve
años.
Escuchaba recién al diputado hablar del impacto que tiene
la pérdida, no solo en lo emocional sino también en toda la familia, cuando al
que despedimos es el sostén del hogar, cuando quedan chicos sin papá, sin mamá,
sin el que traía la comida a casa. Y en el caso de la tragedia de Once debo
recordar que muchos de los trabajadores y estudiantes que venían en el
Sarmiento eran trabajadores precarizados, no tenían ART ni obra social ni
seguro de vida. Hubo familias que por años no tuvieron dinero para poner una
lápida arriba de la tumba; hubo familias que tuvieron que dejar la casa en la
que vivían porque no tenían para pagar el alquiler; pibes que se tuvieron que
ir de la escuela, cambiarse a otra, porque no había manera de seguir
sosteniéndola, porque papá, mamá o quien proveía al hogar ya no estaba. Hubo
enfermedades que devinieron con la tristeza o la depresión, y no hubo plata ni
acompañamiento para los tratamientos psicológicos, para las prótesis, para las
rehabilitaciones.
Como muchas otras tragedias contamos hoy, a nueve años, a
muchos sobrevivientes que se han suicidado y familias que quedaron devastadas.
Hoy muchos chiquitos, a nueve años de no tener a su papá o a su mamá, siguen
afrontando las consecuencias de esa trágica pérdida, y sin tener un
acompañamiento por parte del Estado.
Yo estoy absolutamente convencida de que las víctimas son
víctimas, y de que antes de que les toque nadie les pregunta nada; no les
preguntan a quién van a votar, no les preguntan qué música les gusta, qué
religión profesan. Y tampoco las víctimas son más o menos víctimas según
quiénes sean sus victimarios. Las víctimas son todas iguales.
Sé del compromiso del presidente de esta Cámara, porque sé
que fue él quien escuchó en octubre de 2016 cuando las víctimas de diferentes
hechos nos reunimos en esta plaza al grito de “para que no te pase”. Y fue él
quien presentó un proyecto de ley que después se convertiría en lo que hoy es
la ley de derechos y garantías de las víctimas. Gracias a esa ley de 2017 los
familiares del ARA San Juan contaron con un acompañamiento, que seguimos
celebrando, y sabemos que hay mucho más para seguir trabajando en pos de los
derechos de las víctimas.
Pero no es discriminando ni jerarquizando, porque creo que
se desluce y se desmerece el tratamiento de este proyecto, como el de todos los
que han nombrado los diputados preopinantes: para los familiares de AMIA, de la
embajada, de Río Tercero; hasta los familiares de Cromañón también tienen su
reconocimiento y su resarcimiento dado por la Legislatura porteña.
Se deja afuera a algunas víctimas, a las víctimas de Once,
aun cuando en esta casa hubo proyectos presentados por la diputada Ocaña, por
la diputada Victoria Donda, por el diputado Ricardo Alfonsín, pero nunca
tuvieron tratamiento.
Esperamos sinceramente que este compromiso que hoy vengo a
proponerles pueda dejar en claro que desde esta casa no vamos a señalar qué
víctimas tienen derechos y cuáles no, qué víctimas son de primera y cuáles son
de segunda. Las víctimas son todas iguales. La discriminación implícita al dar
un reconocimiento a algunos y a otros no genera un mensaje que es doloroso, que
es erróneo y que no vamos a permitir.
Hoy se salda una deuda con los familiares del ARA San Juan.
Sé que esta casa tiene la posibilidad de hacer lo mismo para los familiares de
la tragedia de Once. Espero el acompañamiento de todos y cada uno de los
diputados, entendiendo solamente que las víctimas, los sufrimientos, los
dolores, los pesares y las necesidades son iguales para todos, y que no es
desde este lugar y desde esta casa que tenemos que hacer una diferencia.
Espero que el presidente de esta casa, el diputado Sergio
Massa, no borre con el codo lo que ha escrito con la mano. Sé de su compromiso
para con las víctimas y espero que traiga a este recinto el expediente
ingresado por el presidente de mi bloque, diputado Cristian Ritondo. Muchas
gracias. ¡Justicia por la tragedia de Once! (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).-
Aquí el presidente de la Cámara ratifica el compromiso que asumió con usted,
señora diputada, de incluir esa iniciativa en el período de sesiones
extraordinarias.
Tiene la palabra la señora diputada Camaño, por Buenos
Aires.
Sra. Camaño.- Señora
presidenta: usted ha sido parte de un bloque sumamente comprometido con la
causa del A.R.A. San Juan, pero yo debo ser honesta, precisamente por ese
compromiso. Si bien en el mensaje de elevación de esta iniciativa se reconoce y
acuerda un beneficio extraordinario de carácter económico, o se acuerda un acto
de reconocimiento que aparece aquí traducido en un valor pecuniario, la
realidad es la siguiente. Más allá de querer asignarle un significado simbólico
al destacar que se trata de uno “entre otros” reconocimientos, lo cierto es que
cuando se va al articulado de la ley se advierte que este beneficio claramente
tiene un talante resarcitorio o reparador. O dicho de otro modo y sin
eufemismos: no oculta el carácter indemnizatorio o resarcitorio, que claramente
se revela en artículos claves como el 5°, el 6° y el 8°, que según
correspondiera, y conforme a cada caso en particular, fuerzan a los sujetos con
derecho a acceder al beneficio a renunciar a sus derechos, o sea, al
desistimiento de las acciones y derechos y a subrogarse o colocarse en la
posición del Estado, ocupando su rol pasivo y haciéndose cargo, ante eventuales
reclamos futuros, de quienes se considerasen con mejor derecho a percibir el
beneficio.
¿Por qué digo esto, señora presidenta? Porque en la última
reunión plenaria de comisiones se eliminó y entonces quedan en el proyecto
múltiples contradicciones. O sea, este beneficio es incompatible con cualquier
derecho o con cualquier acción resarcitoria, a excepción de una hipótesis
bastante dudosa de poder verificar en la actualidad, que está contenida en el
artículo 7°.
La solución que postula dicho artículo es formalmente
correcta desde el punto de vista jurídico. El inconveniente que presenta es que
la solución que establece dispara en el caso de que se verifiquen dos
requisitos: resolución judicial que establezca el resarcimiento y cobro de
percepción de las sumas. Pero esto difícilmente se pueda verificar, porque las
etapas materiales del proceso judicial difícilmente se puedan obtener en una
sentencia en el plazo que se establece para aceptar el beneficio.
Además, en el plenario de comisiones también se ha
eliminado un párrafo del artículo 6° que contemplaba la subrogación del Estado
en el beneficiario que percibió el pago. El artículo que se eliminó decía:
quienes hubieren percibido en legal forma dicho beneficio quedarán subrogando
al Estado si con posterioridad solicitasen igual beneficio otras u otros
familiares con igual o mejor derecho.
Es decir que ese artículo ponía en cabeza de quien percibía
el beneficio extraordinario hacerse cargo de éste si se presentaba alguien con
mejor derecho, dado que el instituto de la subrogación consiste en colocar a un
sujeto en la posición de otro; en este caso, el sujeto que cobró se coloca en
la situación del Estado, y asumiría así la obligación del Estado frente al que
se presente ulteriormente invocando un mejor derecho.
Al eliminarse ese párrafo y no consignar en el proyecto de
ley la solución en forma expresa, el análisis puede derivar en una
multiplicidad de hipótesis, entre las que no se elimina la alternativa antes
prevista en la norma, solo que esta vez por vía de la aplicación analógica de
las normas del Código Civil y Comercial que regulan la subrogación.
Entonces, la pregunta es: ¿qué pasa si aparece un
legitimado con mejor derecho? Y las preguntas que quedan sin responder son
varias. En primer lugar, el primer beneficiario retiene el beneficio y el
Estado paga nuevamente al que se presente invocando ese mejor derecho. En
segundo término, el Estado pide al primero que reintegre lo que en función de
la ley estaría mal habido de su parte. Tercero, el Estado puede aceptar como
definitivo e irrevocable si el primero se presentó de buena fe a percibir el
beneficio. Y cuarto, el Estado le planteará que ya desinteresó al interesado y
que el nuevo legitimado tendrá que reclamar del primero si el Estado invoca esa
circunstancia, operando de hecho una subrogación que se suprime en la norma.
De manera, señora presidenta, que son muchos los
interrogantes que van a quedar pendientes como consecuencia de que la norma no
consigna una solución, con lo cual supone que debería establecerse una
reglamentación que permita conocer a quién le asiste verdaderamente un mejor
derecho. Yo entiendo que se haya querido mejorar, pero en realidad se empeoró
el articulado. Por ahí es una solución aparente, en la medida que entiende que
el cobro lo deja liberado de tener que hacerse cargo frente al nuevo legitimado
que aparezca. Pero en la indefinición, esa solución que se quita no deja de ser
una alternativa eventual por el juego de las normas civiles que pudieran
aplicarse analógicamente.
En el caso del artículo 7°, que habla de indemnización por
sentencia judicial y percibida inferior al beneficio económico que estipula el
proyecto, quiero decir lo siguiente. En la medida en que hubiese sido ya
decidida la cuestión judicial, para entonces vamos a tener el problema de que
no se le va a permitir acceder a la diferencia hasta que alcance el monto del
beneficio otorgado por la ley.
De manera que hay muchas dudas, por lo que seguramente va a
tener rechazos, resistencias o reproches. Esto va a ser así, señora presidenta,
porque es dable suponer que los pretendidos legitimados a acceder al beneficio,
puestos en una opción antipática, dudosamente lo acepten si es que alientan la expectativa
de procurarse un reconocimiento resarcitorio mayor, por lo que no se
encontrarían seducidos por esta propuesta, que como contrapartida por obtenerlo
los obliga a renunciar y a desistir de sus derechos o de las acciones, que
están regidas por la ley 26.944 y bajo un régimen de derecho público.
Recordemos que los artículos 1764 y 1766 del Código Civil y Comercial
definieron la materia responsabilidad estatal y de sus agentes a este último,
pese a que la ley pueda aparecer ofreciendo teóricamente la ventaja de
demostrar los hechos y el nexo de causalidad, que sí deberían hacerlo en el
caso del juicio.
De todos modos, señora presidenta, hay un desaliento o un
desincentivo, porque el ofrecimiento de una suma que pone freno a todo reclamo
resarcitorio que supondría conducente a un reconocimiento económico superior,
máxime ante un caso que da cuenta de una responsabilidad objetiva, directa,
actual y regular del Estado como fuente u origen del deber de reparar.
Realmente, este pretendido beneficio económico no va a ser
lo que se anhela, en cuanto se imponga como una indemnización que conmina a los
familiares de los tripulantes del A.R.A. San Juan a renunciar a todo derecho
por indemnización de daños y perjuicios, a incompatibilizar el beneficio con cualquier
acción judicial en trámite de reclamo de daños y perjuicios por parte de las y
los beneficiarios. Esto lo dice la ley. Y no es que “vamos a agarrar esto;
total, después vamos a seguir”. No, es incompatible. Además, es liberatorio
para el Estado de la responsabilidad patrimonial, con el agravante que tiene un
plazo de caducidad y pasados los 365 días deja sin efectividad la disposición.
Acá se dijo que había habido posiciones encontradas, o algo
por el estilo, y que debíamos abandonarlas. Quiero decir a los diputados que si
algo hubo frente al ARA San Juan fue una decisión política del Congreso de la
Nación, como poder del Estado, de contener a esa gente y de investigar a fondo.
Más allá de todo lo que se dijo públicamente o en los medios, la realidad es
que la investigación que hizo la Comisión Bicameral del ARA San Juan, cuyos
archivos están en esta Cámara, es absolutamente ejemplar, y los diputados y
senadores de todos los bloques han dicho claramente que había una
responsabilidad política que debía ser investigada.
Que la Justicia no lo quiera receptar, motivo por el cual
la jueza tiene un pedido de investigación en el Consejo de la Magistratura, es
harina de otro costal, pero tanto en Diputados como en Senado, legisladores de
todos los partidos políticos tuvimos un compromiso único desde el día uno,
cuando el diputado por Mendoza ‑le pido mil disculpas por no recordar su
nombre porque debería hacerlo, fue un gran diputado del Frente para la
Victoria- encabezó el proyecto de la comisión bicameral, juntamente con mi
querido compañero Alejandro Grandinetti, diputado por Santa Fe.
Para finalizar, señora presidenta, quiero decir que aquí se
mencionaron las reparaciones de AMIA, de Río Tercero, etcétera. En todas estas
reparaciones claramente se hablaba de indemnización, no de beneficios. Teníamos
claro qué era lo que estábamos haciendo. A diferencia de la situación que
tenemos con los tripulantes del ARA San Juan, en Río Tercero incluso los
beneficiarios previamente habían recibido beneficios económicos dispuestos por
decretos específicos que planteaban una compensación económica.
Hay que dejar claro este concepto para que no haya
confusión en quienes vengan a aceptar lo que estamos tratando y lo que vamos a
votar; hay que aclararlo de manera tal que quien acepte cobrar este monto sepa
que no va a tener posibilidad de seguir sus reclamos ni de reclamar en sede
judicial.
Sra. Presidenta (Moreau).-
Señora diputada Camaño: se trata del diputado Guillermo Carmona.
Tiene la palabra el señor diputado Zottos,
por Salta.
Sr. Zottos.- Señora
presidenta: voy a compensar los minutos de la diputada Graciela Camaño, ya que
estamos en el mismo interbloque y solicito autorización para insertar mi
discurso porque hay familiares esperando la aprobación de esta ley. Sin
embargo, deseo pronunciar algunas palabras.
Más allá de que ya sabemos muy bien lo que ocurrió el 15 de
noviembre de 2017, cuando se produjo la desaparición trágica del submarino ARA
San Juan mientras cumplía funciones, perdiendo la vida sus 44 tripulantes,
quiero destacar que este proyecto que estamos tratando, tal como explicó muy
bien la diputada Camaño, habla de una asignación económica para los familiares
de los tripulantes por un equivalente a la categoría A-0 del Convenio Colectivo
Sectorial del Sistema Nacional de Empleo Público.
Fui autor del proyecto contenido en el expediente
2160-D.-2018, presentado el 18 de abril de 2018 e inscripto en el Trámite
Parlamentario 31, referido al otorgamiento de
una pensión honorífica vitalicia a los derechohabientes de los
tripulantes del submarino. Es la misma que se dio a los excombatientes de
Malvinas.
Aquí quiero destacar que esta fórmula que se está aplicando
es la misma que se aplicó, tal como lo expresaron otros diputados, a las
víctimas de la AMIA y de la Fábrica Militar de Río Tercero, y el resarcimiento
económico llegará aproximadamente a 6.600.000 pesos, porque el salario de la
categoría A-0 al 1° de octubre es de 66.932 pesos.
Sra. Presidenta (Moreau).-
Tiene la palabra el señor diputado Di Giácomo, por
Río Negro.
Sr. Di Giácomo.- Señora
presidenta: estamos hablando de un homenaje y de una reparación. También nos
estábamos refiriendo a ciertos acuerdos, no sé si explícitos o tácitos, en los
cuales habíamos establecido que en este tipo de cuestiones era más importante
el respeto por lo que había sucedido. No se debía entrar en utilizaciones
políticas instrumentales respecto de la búsqueda de otro tipo de elementos que
podrían dar para un debate; no era este el momento en el cual debía darse.
Por supuesto que, de todas maneras, en algunas expresiones
que se han dado aparecen situaciones que se prestarían para la discusión. Acá
somos representantes del pueblo en un poder del Estado, el Poder Legislativo, y
por supuesto que yo nunca entraría en discusión con un familiar de una víctima
porque en ese carácter de familiar, por el dolor sufrido y las secuelas, tiene
derecho a expresar su situación y sus aflicciones sin que desde el Estado
pongamos ninguna cortapisa. Pero si la discusión la damos como representantes
del Estado, ahí tenemos que analizar qué víctimas a lo largo de la historia ha
habido; lamentablemente hay y habrá muchas. De hecho, hoy en este recinto se
muestra un cartelito de una víctima de la violencia donde, sin ninguna duda, el
Estado también tiene responsabilidad, por lo menos por omisión.
La Argentina es un país de víctimas y victimarios a lo
largo de su historia. Lo que acá estamos focalizando cuando estamos hablando de
determinado tipo de víctimas, son las que están en relación con un accionar,
como digo, por omisión o por responsabilidades personales e institucionales de
representantes del Estado.
En este caso, la desaparición del submarino ARA San Juan,
ocurrida el 15 de noviembre de 2017, no sucede en una situación en la cual uno podría
parangonarlo con cualquier víctima de tránsito o de la inseguridad, sino que
sucede en un acto de servicio.
Quienes somos
patagónicos y vivimos de frente al litoral marítimo sabemos que lamentablemente
la Argentina no ha valorado a lo largo de su historia lo que significa la
soberanía territorial o las riquezas que se pierden. Por ejemplo, hace pocos
días vimos una filmación del ARA Canal Beagle donde más de 400 naves estaban
pescando en esa orilla de nuestros límites. Este mismo Congreso ha fijado el
homenaje a la enorme labor que realizara esa comisión, que a lo largo de los
años pudo establecer los límites de nuestra plataforma.
Sabemos perfectamente que este accidente les ocurrió
justamente a quienes se encontraban en un acto de servicio ya que el A.R.A.
“San Juan” y su tripulación estaban, entre otras cosas, controlando la pesca
ilegal y los daños que causa a nuestro patrimonio y a nuestra soberanía.
Por lo tanto, quien muere en un acto de servicio requiere
una atención, a nuestro entender particular y especial, distinta de aquella que
merece quien muere en un accidente de trabajo común ‑llamémosle así‑
o en otras circunstancias. Y yo pondría esta atención en el mismo plano para
quienes murieron en actos de servicio en la gesta de Malvinas.
En lo que se refiere a estos 44 héroes, a estos 44
servidores públicos, en definitiva ‑si bien no están terminadas las
investigaciones, pero tomando lo que han sido las investigaciones de la
comisión bicameral‑, es evidente que hubo responsabilidades funcionales,
políticas, jerárquicas para que este hecho sucediera. Eso debe ser investigado,
y quien tiene un familiar, víctima de esa situación, o es familiar de alguien
que ha sido víctima, merece tener la oportunidad y el derecho a su
reivindicación, a la búsqueda de esa verdad y a las indemnizaciones
correspondientes.
Lamentablemente, a pesar de que por supuesto esta es una
voluntad indemnizatoria que pretende llegar a poner en forma rápida en manos de
los familiares una solución económica, debo decir que esta solución económica,
si la traducimos a valores ‑que todavía no me quedan claros porque no
queda claro si esta indemnización es por los sueldos brutos, los sueldos netos,
o si es para todos igual o tiene alguna diferenciación‑, en todo caso
estará entre los 5 y 8 millones de pesos, es decir, 35.000 dólares o un poco
más. De eso estamos hablando; no estamos hablando de ninguna situación que va a
cambiar la vida de nadie.
Entonces, ayer nosotros hicimos estas observaciones en la
comisión en la que discutimos este tema ‑por supuesto, la diputada
preopinante las presentó con la brillantez a la que nos tiene acostumbrados‑
en cuanto a la minuciosidad de objeción respecto de algunos artículos. En tal
sentido, nosotros marcamos ayer que no nos parecía correcto, sino criticable
que coloquemos a los familiares frente a la disyuntiva de tener que renunciar a
las acciones en trámite o a tramitarse, porque entonces este beneficio más que
como un beneficio puede aparecer como un elemento de presión. Es cierto que es
voluntario y uno puede prestarse o no a esto que se está ofreciendo hoy, pero
me parece que de alguna manera desluce la intención primigenia respecto de lo
que significa homenajear a estos héroes.
Para terminar, porque ya se me agota el tiempo, quiero mencionar
al suboficial segundo Mario Armando Toconas, un rionegrino de Sierra Grande,
que es uno de los que perdió la vida en esa ocasión.
Sra.
Presidenta (Moreau).- Les recuerdo a los presidentes de bloque y demás
señores diputados que restan dos oradores, con tres minutos de exposición cada
uno, para luego proceder a votar. Les solicito que se vayan logueando
o que se vayan acercando al recinto.
Tiene la palabra la señora diputada Sapag, por Neuquén.
Sra.
Sapag.-
Señora presidenta: la desaparición del submarino A.R.A. “San Juan” el 15 de
noviembre de 2017 conmovió profundamente a toda la ciudadanía argentina. De un
momento a otro, familiares de los 44 tripulantes se encontraron ante una
situación muy dolorosa y ante la pregunta menos deseable: ¿qué pasó con el
A.R.A. “San Juan”? Fuimos testigos de su peregrinar y de su lucha incansable
por encontrar la verdad y velar por la justicia ante un hecho a todas luces
evitable.
A lo largo de estos tres años se llevaron adelante
investigaciones, tanto en el ámbito judicial como administrativo, con el fin de
determinar responsabilidades, pero en el camino los familiares han padecido
múltiples situaciones que no son dignas de los deudos de una titulación que se
comportó con una tremenda vocación de servicio para afrontar los rigores a los
que se vio sometida, dando cumplimiento cabal a sus deberes en atención a las
necesidades de la defensa nacional.
Fue mucho el padecimiento hasta encontrar el lugar del
hundimiento; se vivieron eventos indeseables, injustos e inmerecidos para las
familias.
Señora presidenta: otorgar por única vez un resarcimiento
económico a los familiares de los y las tripulantes del submarino A.R.A. “San
Juan” representa una forma más de reparación para aquellos que perdieron a sus
seres queridos cumpliendo su servicio y su deber, aunque en modo alguno puede
ser la única pues la verdadera reparación es la justicia.
Tal como lo han expresado los familiares de esos 44 hombres
y mujeres que ya no están entre nosotros, la reparación económica se agradece y
se valora, en un contexto en el que muchos han pasado por necesidades. Pero
ello no debe hacernos perder el eje del objetivo principal, que es la verdad y
la justicia.
El mejor homenaje que podemos ofrendar a las 44 almas del
A.R.A. “San Juan”, tal como sostienen sus familias y amistades, es luchar por
la verdad recordando lo ocurrido para evitar que vuelva a suceder. Bien sabemos
que los pueblos sin memoria están condenados a repetir su historia. Que la
dolorosa pérdida de tan valiosas personas nos interpele con un lema común:
“prohibido olvidar”.
Sra.
Presidenta (Moreau).- Para finalizar con las intervenciones sobre el
expediente en tratamiento, tiene la palabra el señor diputado Giordano.
Sr.
Giordano.- Señora presidenta: quisiera plantear la postura del Frente
de Izquierda ante este proyecto de ley.
- Varios señores diputados hablan a la vez.
Sr. Giordano.- ¿Se escucha,
señora presidenta?
Sra.
Presidenta (Moreau).- Solicito a los señores diputados que hagan
silencio, por favor. Continúe, señor diputado.
Sr.
Giordano.- Decía que quiero expresar nuestra postura ante el proyecto
de ley por el que se fija un beneficio económico a los familiares de los 44
tripulantes del A.R.A. “San Juan”. Por supuesto, vamos a acompañarlo, con todos
los reparos a las renuncias y condicionamientos que establece la propia ley
para los familiares que han sufrido mucho durante todo este tiempo. Parece algo
de un Juzgado Civil y Comercial y no una verdadera reparación para aquellos
que, como dice el proyecto, estaban desarrollando tareas de vigilancia y
control del mar en el límite de la zona económica exclusiva.
Esta iniciativa también habla de que hay que mantener vivo
el recuerdo, la memoria, los homenajes, pero nadie se refirió al marco en el
que se dio la explosión que terminó en el hundimiento del A.R.A. “San Juan”.
Recordemos que cuando empezaron a surgir novedades desde la cúpula de la
Armada, los familiares rápidamente salieron a decir “los mandaron a navegar
atados con alambre”, “los mandaron al muere”, “nos mintieron”, todo ello propio
de una conducción en su momento repudiada, mentirosa y corrupta de la Armada,
en ese entonces conducida por el ministro Aguad. Además, se ocultó información
porque en un momento se supo que había habido una explosión, pero se la negó.
- Ocupa la Presidencia el señor presidente
de la Honorable Cámara, doctor Sergio Tomás Massa.
Sr.
Giordano.- La pura verdad
de lo que ocurrió es que el A.R.A. “San Juan” fue lanzado sin las más mínimas
condiciones de seguridad y de mantenimiento y el entrenamiento de la
tripulación estaba por debajo de los estándares internacionales.
Entonces, no se trató de ningún accidente ni de ningún
siniestro, sino de una tragedia evitable. En 2014, por ejemplo, hubo un
encallamiento del submarino “San Cruz”, gemelo del “San Juan”, que poseía un
casco completamente deficiente. Se decía que era por falta de presupuesto, pero
el presupuesto militar había aumentado del 2002 en adelante, con los gobiernos
de Cristina Kirchner y de Mauricio Macri. En ese momento se denunció que el
aumento del presupuesto había sido para pagar los sueldos de los cargos
jerárquicos de la Armada y para la represión interna. Veníamos del Proyecto X,
de la inteligencia de Milani, de la compra de armas
para reprimir la protesta social con la Gendarmería que luego utilizó Patricia
Bullrich. Ahí se iba la plata.
De esta manera, la Argentina quedó con nula capacidad
operativa para llevar adelante las tareas básicas de defensa de la soberanía
nacional. Propio de un país alineado con el imperialismo yanqui y la Unión
Europea, que no quieren que una nación como la nuestra desarrolle capacidad
para defender su soberanía.
Este desguace también se dio en el achicamiento del
astillero Río Santiago, de Tandanor y de la fábrica
militar FADEA, que persiste. En décadas anteriores se terminó con industrias
estratégicas como Altos Hornos Zapla, SOMISA y demás.
Sr. Presidente (Massa).-
La Presidencia solicita al señor diputado que vaya terminando su exposición.
Sr. Giordano.-
Por eso, en la actualidad Gran Bretaña continúa incrementando su presencia
militar en las islas Malvinas; centenares de buques nos roban a partir de la
pesca clandestina, a lo que debemos sumar el narcotráfico, etcétera.
Por lo tanto, lamentablemente no podía ocurrir otra cosa
con el ARA “San Juan”. En su momento, Macri dijo que no era el momento de
hablar de culpables; sin embargo, como se dijo recién, el caso quedó en una
completa impunidad. Recuerdo que nosotros, desde la izquierda, sosteníamos que
era necesario conformar una comisión investigadora con familiares de las
víctimas para llegar a la verdad y castigar a todos los culpables.
Sr. Presidente (Massa).-
La Presidencia pide nuevamente al señor diputado que cierre su discurso.
Sr. Giordano.-
Ninguna reparación podrá negar el marco en que se dio esta situación y que es
responsabilidad de todos los gobiernos.
Con estas consideraciones, he querido honrar la memoria de
los cuarenta y cuatro tripulantes del ARA “San Juan”.
Sr. Presidente (Massa).-
Para referirse a una corrección en el texto del dictamen, tiene la palabra el
señor diputado Martínez, por Santa Fe.
Sr. Martínez.-
Señor presidente: la observación es muy sencilla.
Tal vez, por el ánimo de no reiterar en el recinto lo
manifestado en el ámbito de la comisión, cometí una injusticia. Ayer
reivindiqué la tarea llevada adelante por la comisión investigadora. Durante la
sesión, una diputada preopinante se refirió al tema. Obviamente, valoramos
mucho el aporte de los diputados y las diputadas que participaron de esa tarea.
Por eso, en primer lugar, lo menciono para subsanar el olvido.
En segundo término, respecto de la redacción del proyecto,
en virtud de la tradición normativa creo que dará mucha más tranquilidad dejar
en claro que lo que establece sobre el monto y el desistimiento de la acción
civil también está especificado en las leyes que mencioné. Entonces, lejos de
generar dudas, esta vinculación con normas reparatorias brinda certeza a los
familiares.
Finalmente, ayer introdujimos una modificación en el
artículo 6° del dictamen porque cuando lo redactamos quedó un tanto discordante
si consideramos el criterio que estamos adoptando de incluir el lenguaje de
género en los textos normativos.
Concretamente, al final del artículo 6° ‑el resto
queda igual‑ debe decir: “…frente al beneficiario desinteresado o
beneficiaria desinteresada.” Este es el cambio, que no modifica en nada lo
acordado según lo consultado con las áreas jurídicas del Estado.
Por último, si la Presidencia no ha recibido otro pedido,
creo que existe la posibilidad de hacer una sola votación, en general y en
particular. No obstante, queda ello a su criterio en función de la información
con la que cuente.
Sr. Presidente (Massa).-
La votación sería en general y en particular. Como la Presidencia entiende que
hay una observación del interbloque Federal a tres artículos, tiene la palabra
el señor diputado Bucca, por Buenos Aires.
Sr. Bucca.-
Señor presidente: en efecto, pedimos que los artículos 5°, 6° y 7° sean votados
en forma nominal.
Sr. Presidente (Massa).-
Entonces, en el entendimiento de que son los únicos con observaciones, los
artículos 5°, 6° y 7° serán votados nominalmente en bloque.
Tiene la palabra el señor diputado Di Giácomo,
por Río Negro.
Sr. Di Giácomo.-
Señor presidente: ayer, en la reunión de comisión, hice exactamente las mismas
observaciones, que hoy repetí. Por lo tanto, comparto el criterio enunciado.
Sr. Presidente (Massa).-
La Presidencia reitera entonces que los artículos 5°, 6° y 7° serán votados
nominalmente en bloque. Por lo tanto, aquellos diputados que voten en forma
negativa podrán expresarlo en esa instancia.
Se va a votar en general el dictamen de las comisiones de
Presupuesto y Hacienda y de Defensa Nacional ‑Orden del Día N° 357‑
recaído en el proyecto de ley del Poder Ejecutivo por el que se establece un
beneficio extraordinario de carácter económico y por única vez para los
familiares del personal tripulante del submarino ARA “San Juan” (expediente
13-PE.‑20).
- Mientras
se practica la votación nominal:
Sr. Presidente (Massa).-
La Presidencia procederá a preguntar el sentido de su voto a los señores
diputados que el sistema no ha podido registrar.
Señor diputado Asseff: ¿puede manifestar el sentido de su
voto?
-
Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).-
Señora diputada Burgos: ¿cuál es el sentido de su voto?
Sra. Burgos.- Mi
voto es afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señora diputada Cornejo: ¿podría expresar el sentido de su voto?
Sra. Cornejo.-
Voto por la afirmativa, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Enrique Estevez: ¿cuál es el sentido
de su voto?
Sr. Estevez
(E.).- Mi voto en general es afirmativo, señor presidente.
Tuve un problema con el VPN. Entiendo que hay un apartado que se votará luego.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Héctor Flores: ¿me puede indicar el sentido de su
voto?
Sr.
Flores (H.).- Señor presidente: mi voto es afirmativo.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Gaillard: ¿me puede indicar el
sentido de su voto?
Sra.
Gaillard.- Señor presidente: mi voto es afirmativo.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada García: ¿me puede indicar el
sentido de su voto?
Sra.
García.- Señor presidente: mi voto es afirmativo.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Igon: ¿me
puede indicar el sentido de su voto?
Sr.
Igon.- Señor presidente: mi voto es afirmativo.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Lampreabe:
¿me puede indicar el sentido de su voto?
Sra.
Lampreabe.- Señor presidente: mi voto
es afirmativo.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Dolores Martínez: ¿me puede
indicar el sentido de su voto?
Sra.
Martínez (D.).- Señor presidente: mi voto es afirmativo.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Marziotta:
¿me puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Mosqueda: ¿me puede indicar el
sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Pértile:
¿me puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Piccolomini:
¿me puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Reitero el llamado a los señores diputados que no
han respondido.
Señora diputada Marziotta: ¿me
puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, la señora diputada Marziotta es considerada ausente a la hora de votar.
Señor diputado Mosqueda: ¿me puede indicar el sentido de su
voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, el señor diputado
Mosqueda es considerado ausente a la hora de votar.
Señora diputada Pértile: ¿me
puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, la señora diputada Pértile es considerada ausente a la hora de votar.
Señora diputada Piccolomini: ¿me
puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, la señora diputada Piccolomini es considerada ausente a la hora de votar.
Se cierra la votación. Por Secretaría se dará lectura del
resultado.
Sr.
Secretario (Cergnul).- Se han registrado 233
votos por la afirmativa, ninguno por la negativa y ninguna abstención.[6] (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Massa).- En consideración en particular.
Se van a votar por signos y en bloque los artículos 1° a
4°, que son los que no tienen observaciones.
- Resulta
afirmativa.
Sr.
Presidente (Massa).- Se van a votar en bloque de manera nominal los
artículos 5°, 6° y 7°, que son los que tienen observaciones.
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Vamos a ver qué pasa si “resetean” el sistema.
Reitero el llamado votación.
- Se practica la
votación nominal.
Sr.
Presidente (Massa).- Quiero señalar que 39 diputados no han señalado su
voto porque, evidentemente, cuando se “reseteó” el sistema, no llegaron a
conectarse.
Por lo tanto, les propongo a todos los diputados y
diputadas que volvamos a practicar la votación.
- Asentimiento.
Sr.
Presidente (Massa).- Solicito a los técnicos del sector de Informática
que por favor me avise cuando el sistema esté listo para llamar a votar.
- Luego de unos
instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Se van a votar en forma nominal los artículos 5°,
6° y 7° del proyecto en tratamiento.
-
Mientras
se practica la votación nominal:
Sr.
Presidente (Massa).- Se va a tomar el voto a veintiséis diputadas y diputados que no señalaron
su voto.
Señor diputado Allende: ¿puede
expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Bernazza: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Bernazza.- Afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Bogdanich: ¿puede expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado
Brizuela del Moral: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Brizuela del Moral.- Afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Bucca: ¿puede expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado
Cisneros: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Cisneros.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada
García: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. García.-
Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Gioja: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Gioja.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada
Hernández: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Hernández.- Mi voto es por la afirmativa, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Jetter: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Jetter.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Landriscini: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Landriscini.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada
Latorre: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Latorre.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada
Lena: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Lena.-
Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada
López: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. López.-
Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Masin: ¿puede expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado
Mestre: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Mestre.-
Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada
Morales: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Morales.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada
Najul: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Najul.-
Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Piccolomini: ¿puede expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Riccardo: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Riccardo.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado
Rodríguez Saá: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Rodríguez Saá.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado Schiavoni: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Schiavoni.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado
Suárez Lastra: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Suárez Lastra.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señor diputado
Tonelli: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sr. Tonelli.-
Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Uhrig: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Uhrig.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente (Massa).- Señora diputada Yutrovic: ¿puede expresar el sentido de su voto?
Sra. Yutrovic.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr.
Presidente
(Massa).- Se procederá a hacer la última lectura convocando a votar a los
diputados que no respondieron.
Señor diputado Allende: ¿puede
expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- Al no haberse
manifestado, el señor diputado Allende es considerado ausente a la hora de
votar.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Bogdanich: ¿puede expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Bogdanich es considerado ausente en la votación.
Señor
diputado Bucca: ¿puede expresar el sentido de su
voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Bucca es considerado ausente en la votación.
Señora
diputada Massín: ¿puede expresar el sentido de su
voto?
- Luego de unos instantes:
Sra. Massín.- Mi voto es afirmativo, señor
presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señora diputada Piccolomini:
¿puede expresar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, la señora diputada
Piccolomini es considerada ausente al momento de
votar.
Se
cierra la votación. Por Secretaría se dará lectura del resultado de la votación
nominal de los artículos 5°, 6° y 7°.
Sr. Secretario (Cergnul).- Hubo 220 votos por la afirmativa, 11 por la
negativa y ninguna abstención.[7]
Sr. Presidente (Massa).- Resulta
afirmativa.
En consideración los artículos 8° a 12.
Tiene la palabra el señor diputado del Caño, por Buenos
Aires.
Sr. del Caño.- Señor presidente: deseo
aclarar el voto negativo en el artículo 8°, tanto en mi caso como en el del
diputado Giordano. Esto porque obliga a los familiares que acepten el
resarcimiento a renunciar a las acciones judiciales en curso o futuras.
Sr. Presidente (Massa).- Vamos a dejar
asentado el voto por la negativa.
Se van a votar por señas los artículos 8° a 12.
-
Resulta afirmativa.
-
El artículo 13 es de forma.
Sr. Presidente (Massa).-
Queda sancionado el proyecto de ley.[8]
Se comunicará al Honorable
Senado. (Aplausos.)
- 34 -
Sr. Presidente (Massa).- Corresponde considerar el
dictamen de las comisiones de Vivienda y Ordenamiento Urbano y de Presupuesto y
Hacienda -Orden del Día N°
358- recaído en el proyecto de ley del Poder Ejecutivo por el cual se implementa un régimen destinado a promover las inversiones
en la construcción de obras privadas nuevas realizadas en el territorio
de la República Argentina (8‑P.E.-2020).
AQUÍ ORDEN DEL DÍA N° 358
Sr. Presidente (Massa).- En
consideración en general.
Tiene la palabra el señor diputado Amaya, por Tucumán.
Sr. Amaya.- Señor presidente: en el día de ayer hemos trabajado
en las
comisiones de Vivienda y Ordenamiento Urbano y de Presupuesto y Hacienda y por
unanimidad hemos emitido dictamen en este proyecto que es fundamental para la reactivación económica en
nuestro país, principalmente para el sector de la construcción, ya que generará
puestos de trabajo de manera concreta.
Como
bien se dijo, se trata de un proyecto de incentivo a la construcción federal y
de acceso a la vivienda. Consta de tres títulos por medio de los cuales se
busca dar acceso a la vivienda impulsando las inversiones a través de la obra
privada mediante un régimen de incentivos para la construcción, ampliación e
instalación en general, para obras nuevas al momento de sancionar esta ley o
para obras que tengan no más de un 50 por ciento de avance en ese momento.
Para
citar algunos de los beneficios e incentivos, podemos mencionar la exención de
impuestos a los bienes personales y a las ganancias y el diferimiento del pago
del impuesto a la transferencia de inmuebles de personas físicas.
Quiero
destacar que estos beneficios también regirán para las personas jurídicas. Esta
norma, en su Título II, permite una normalización de la tenencia de moneda
nacional y extranjera para la realización de inversiones en construcción. Dicha tenencia se podrá declarar de manera
voluntaria ante la AFIP en un plazo máximo de 120 días a partir del momento de
la promulgación de la presente ley, estableciendo de esta manera, según el momento
en que se presente, una alícuota porcentual del 5, el 10 o el 20 por ciento de
acuerdo con la pronta incorporación establecida.
Cabe
destacar que en esta normalización quedan excluidos los funcionarios públicos
de todos los órdenes ‑nacionales, provinciales, municipales‑ y de
los organismos que comprenden la estructura pública administrativa, así como
también sus familiares.
Cabe
mencionar que no podrán ser objeto de normalización los fondos radicados o
depositados en entidades identificadas como grupos de acción financiera de alto
riesgo o no cooperantes.
También
es importante el Título III, que es la consolidación de la obra pública para la
vivienda social.
-
Ocupa
la Presidencia el señor presidente de la Comisión de Previsión y Seguridad Social,
contador Marcelo Pablo Casaretto.
Sr. Amaya.- Con respecto a la importancia de la necesidad de
reactivar la obra pública y la vivienda social, esta norma estipula porcentajes
de avance físico real para determinar el saldo pendiente a financiar de las
obras paralizadas o abandonadas.
Estos
informes serán debidamente confeccionados por los profesionales y rubricados
por autoridades jurisdiccionales para ser presentados ‑fundamentalmente
certificados por escribano público‑ ante el Ministerio de Desarrollo
Territorial y Hábitat.
El
Ministerio determinará los requisitos que los entes ejecutores deberán cumplir,
pudiendo dictar las normas pertinentes para el adecuado funcionamiento e
implementación.
Esta
norma es importante porque hoy muchos argentinos que están anotados en los
distintos institutos de la vivienda de las provincias tienen la esperanza de
recibir esas viviendas que se deben terminar.
Esta
iniciativa que hemos trabajado en forma conjunta las dos comisiones y todos los
bloques tiene un solo objetivo: el beneficio de los argentinos a través del
trabajo, brindándoles una vivienda digna a tantas personas que hoy sueñan con
tenerla. Creo que esto no pasa por ningún color político sino por el compromiso
que tenemos en esta Cámara todos los diputados.
Por eso
hemos llevado a cabo este dictamen en forma unánime en el día de ayer. Sabemos
lo que pasó en la pandemia y hemos podido ver la situación de tanta gente que
perdió su trabajo y también el lugar que alquilaba por no poder cubrir el costo
del alquiler. Por lo tanto, creo que es importante que todos pensemos y
trabajemos en forma conjunta para llevar soluciones.
Quisiera
cederle la palabra al presidente de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, el
diputado Heller, dado que trabajamos juntos.
Señor
presidente: le agradezco mucho. Espero que podamos concretar este proyecto y
que se convierta en ley. (Aplausos.)
Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la diputada Delú, por La Pampa.
Sra. Delú.- Señor presidente: buenas tardes a
todos.
No
queda mucho más para agregar sobre lo expuesto por el presidente de la Comisión
de Vivienda y Ordenamiento Urbano que me precedió en el uso de la palabra.
La
actividad de la construcción es estratégica por su aporte al Producto Bruto
Interno y a la generación de puestos de trabajo genuino, tanto por sus efectos
directos como por su cadena de valor agregado ‑lo que yo entiendo como
parte importantísima de un círculo virtuoso de la reactivación económica-. Sin
embargo, dado el deterioro del contexto macroeconómico de los últimos años y
los efectos económicos de la pandemia del COVID-19, se ha afectado severamente
el desarrollo de la actividad como tal, así como su potencial para incentivar
el desarrollo económico, disminuir la pobreza y, sobre todo, el déficit
habitacional.
En este
contexto, y a los efectos de contribuir con la reactivación económica y de
enfocarse en la generación de empleo, creo que este proyecto de ley propone
medidas sumamente acertadas que tienen que ver con lo tarifario y con la reactivación
de la obra pública que administra el Ministerio de Desarrollo Territorial y
Hábitat sobre la cual voy a hacer un paréntesis.
Veo con
sumo placer este enfoque en la reactivación. Soy una mujer que estuvo diez años
en la gestión de un IPV. Fui gerente de un IPV por lo que entiendo la angustia
material de las administraciones provinciales cuando no pueden concretar o no
ven concretados los complejos habitacionales. También entiendo las necesidades
de aquellos que pasan todos los días frente al loteo donde están construyéndose
las viviendas pero las ven abandonadas, deterioradas y no llegan a la
conclusión a la que realmente deberían arribar.
Ha sido
sumamente acertado el agregado que se hizo al texto original del artículo 3º ya
que dotó al Ministerio de una herramienta que le permitirá terminar las casi
55.000 unidades habitacionales que hoy en día se encuentran paralizadas con
distintos estadíos de avance de obra.
En
primer lugar, este proyecto de ley propone en su Título I, Capítulo II, exenciones
del impuesto sobre los bienes personales y el cómputo como pago a cuenta de ese
impuesto del equivalente al uno por ciento del valor de las inversiones.
También se dispone el diferimiento del
pago del impuesto a la transferencia de inmuebles de personas físicas y
sucesiones indivisas o del impuesto a las ganancias, según corresponda. Todo
esto se estipula desde la fecha de entrada en vigencia de la ley hasta el 31 de
diciembre del 2022.
En
segundo lugar, y con el mismo objetivo de movilizar los ahorros hacia la
actividad de la construcción en el rumbo
iniciado por la ley 27.541 de Solidaridad Social y Reactivación Productiva en
el marco de la Emergencia Pública, se propone establecer por un tiempo limitado
un régimen de normalización de la tenencia de moneda extranjera o de moneda
nacional en el país o en el exterior mediante una declaración voluntaria ante
la AFIP de las personas humanas, sucesiones indivisas o sociedades de
capitales.
Se
establece un único tributo sobre dichos fondos con una alícuota creciente en el
tiempo -del 5, 10 o 20 por ciento- según el plazo transcurrido desde la entrada
en vigencia de la ley. Es un plazo correlativo.
El monto del tributo se determinará de
acuerdo con el valor de la tenencia que se declare, expresada en moneda
nacional, al momento del ingreso a la cuenta especialmente creada a tal efecto.
Celebro que este dictamen se haya
acordado por unanimidad y, como lo mencioné anteriormente, celebro también la
incorporación del Título III. Más allá de esto, celebro la ampliación de los
plazos y la reducción de alícuotas en el marco del régimen normativo.
Es muy
importante la prohibición de que sean objeto de normalización aquellas
tenencias en el exterior depositadas en entidades bancarias radicadas en
jurisdicciones identificadas por el GAFI como no cooperantes o de alto riesgo.
Todo esto tiende a evitar el lavado de activos y las amenazas relacionadas con
la integridad del sistema financiero, la seguridad y la paz.
Por
último, para no extenderme más en el uso de la palabra, considero que la
implementación de esta ley se encuentra en línea con el modelo de desarrollo
sustentable en términos económicos, sociales y políticos, reuniendo además
cinco condiciones estructurales: la inclusión, el dinamismo, la estabilidad, el
federalismo y la soberanía. Es por eso que insto a mis colegas a acompañar el
presente proyecto de ley.
Sr. Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra el señor diputado Leiva, por Chaco.
Sr. Leiva.- Señor presidente: en primer
lugar, sin dudas existe el consenso necesario para poder aprobar hoy este
proyecto. Por lo tanto, mis consideraciones van ser más que nada políticas.
Reflexionaré sobre algunas cuestiones
para que en el futuro, así como hoy tratamos el proyecto de ley sobre el fortalecimiento
de la sostenibilidad de la deuda pública, nunca más vuelvan a pasar en el país.
Es bueno reflexionar sobre estas cuestiones sin resentimiento ni odio, pero sí
con mucha memoria.
Debemos
tener memoria fundamentalmente para que en el futuro las nuevas generaciones
puedan valorar y comparar todo aquello que las diferentes fuerzas políticas
plantean al conjunto de la sociedad de cara a las elecciones. En este punto no
puedo dejar de mencionar que en su momento el Congreso de la Nación votó un blanqueo
de capitales que, en definitiva, era para favorecer a los amigos y parientes
del entonces presidente de la Nación. Los amigos de la oposición se enojan
mucho cuando les decimos que perdieron las elecciones porque no cumplieron con
lo que prometieron durante la campaña política.
Hoy
estamos avanzando en esta dirección para reactivar esas 55 mil viviendas
paralizadas. Se habían prometido la construcción de miles y miles de viviendas
durante los cuatro años de gestión del “domador de reposeras”. Es importante
saber, señor presidente, que de esas 55 mil viviendas, seguramente se generarán
las condiciones para reactivar 1.957 en el Chaco.
También
es bueno reflexionar hoy sobre la deuda. Señor presidente: si un 10 por ciento
de esos 45.000 millones de dólares se hubiesen destinado a construir viviendas,
¿se imagina la enorme cantidad de argentinos que hoy vivirían más dignamente?
Sin ninguna duda, todos esos argentinos habrían salido de la situación en la
que hoy se encuentran y de la que tratan de hacernos cargo a quienes formamos
parte del oficialismo desde el 10 de diciembre del 2019.
Es
bueno saber que desde aquel 10 de diciembre a la fecha nuestro gobierno se ha
hecho cargo de todas y cada una de las acciones en las que ha tenido
responsabilidad. Inclusive, hoy hemos votado el aporte para los familiares de
los tripulantes del ARA San Juan. Aprovecho para homenajear a esos 44
patriotas. Seguramente que el proyecto hoy votado no sanará el dolor de cada
uno de sus seres queridos pero es lo que podemos hacer desde nuestro lugar.
Hablamos
de estas cuestiones y defendemos con tanta convicción y vehemencia a nuestro
gobierno simplemente porque siempre, a largo de la historia, nos ha tocado
tener que corregir y hacer las cosas que el pueblo argentino demanda.
En este
momento y en este contexto mundial de pandemia, no se puede dejar de mencionar
la enorme irresponsabilidad de muchos dirigentes de la oposición que todo el
tiempo estuvieron fogoneando todas las medidas
adoptadas por el gobierno de la Nación, llegando a situaciones patéticas tales
como cuando dijeron que íbamos a envenenar a los argentinos.
Ahora,
muchos de esos que se quejaban y atacaban, andan buscando la vacuna para poder
inmunizarse de alguna manera. Eso está bien porque, como dijo el presidente de
la Nación, nosotros venimos para trabajar y resolver los problemas de todos los
argentinos. En esa línea estamos trabajando, y en esa línea también pretendemos
que hoy el sector privado pueda hacer las inversiones correspondientes.
Nosotros
sí trabajamos para que la inversión sea genuina. Nosotros trabajamos para que,
en lugar de llevar la plata a los paraísos fiscales, puedan llevarla a la
construcción, a esas obras que necesitamos para que haya trabajo, para que los
trabajadores de la construcción vuelvan a tener dignidad, como la tuvieron
hasta 2015; para volver a ver, como veíamos a lo largo y a lo ancho del país,
esos cascos amarillos que nos llenaban de orgullo, mientras que en los cuatro
años del gobierno anterior lo único que veíamos eran compañeros lamentándose
porque las obras se paralizaban, porque no había inversiones, porque todo lo
que nos habían dicho había sido una farsa.
He
visto a algunos dirigentes quejarse y decirnos: “Compañeros, les quiero
recordar tal cosa”, pero lo dicen con mucho odio, falta de respeto y
consideración. Lo que en verdad debieran hacer es un mea culpa y entender que si el pueblo les dijo que no, es
simplemente porque no fueron capaces de cumplir ninguna de las promesas que
hicieron.
En los
próximos días también avanzaremos en el tratamiento de un proyecto de ley sobre
impuesto a las ganancias. Recuerdo aquella promesa de que “…durante mi gestión
ningún trabajador va a pagar impuesto a las ganancias”. No solamente se mintió,
sino que aumentó la cantidad de trabajadores que debieron pagar ese impuesto.
Lo mismo ocurrió con la obra privada, con la obra pública, y ni hablar del
endeudamiento.
En ese
aspecto, también sería bueno que hoy recordemos lo que sucedió en todas las
provincias y municipios del país. Yo fui intendente. Nos hacían firmar los
préstamos en dólares, pero nosotros recibíamos pesos, y hoy esa deuda se
devuelve en dólares. Sin embargo, se pavoneaban diciendo que eran el mejor
equipo de los últimos cincuenta años. Y, como se suele decir, ¡se fueron a la
B, muchachos!
Se fueron a la B. Si siguen así, se van a ir a
la C y van a ir al Torneo Argentino. ¿Por qué? Porque lamentablemente siguen
con el mismo discurso, siguen con el mismo odio. Durante cuatro años, en lugar
de trabajar como lo venimos haciendo nosotros, se dedicaron a perseguir y a
calumniar. Pareciera que el único tema que tenían para hablar era Cristina. No
había otro tema.
Nosotros,
muchachos, nos dedicamos a gobernar.
Nosotros,
muchachos, nos dedicamos a resolver los problemas de la gente.
Nosotros,
muchachos, cuando les toca hablar a ustedes, nos callamos y los escuchamos. Y
ustedes, muchachos -o algunos, por lo menos-, son unos maleducados porque creen
que gritando nos van a amedrentar, y la cosa no funciona así. Sepan que nosotros
estamos para trabajar y para avanzar en la resolución de los problemas.
Por
eso, hoy venimos a decirle sí a este proyecto. Venimos a decirle sí, porque va
a generar posibilidades a lo largo y a lo ancho del país. También va a generar
las condiciones para que se vaya reactivando en cada una de las provincias la
construcción de viviendas, que se había paralizado, y va a generar la dignidad
del trabajo.
Cuando
hay trabajo, hay dignidad y existe la posibilidad de que la familia pueda
compartir el pan en la mesa diaria. Cuando hay trabajo, el padre se siente
orgulloso de saber que con el sudor de su frente puede llevar el pan a su casa.
Para
finalizar -no quiero extenderme para que no siga sonando la chicharra-,
simplemente quiero decirles, muchachos, que esto que estamos haciendo es lo que
ustedes debieron haber hecho; es lo que sin duda el pueblo argentino espera.
Como dijo el Martín Fierro, esto que hoy estamos por votar: “No es para mal de
ninguno, sino para bien de todos”. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Casaretto).- Continuando
con la lista de oradores, tiene la palabra el señor diputado Ritondo, por
Buenos Aires.
Sr. Ritondo.- Señor presidente: la verdad es que me sacó un poco
de eje lo que acabo de escuchar. Primero, porque se fundamenta en distintas cosas.
Me parece que hoy tendríamos que estar festejando que acá hay un proyecto que,
más allá de todas las diferencias, lo hemos trabajado juntos y hemos llegado a
un acuerdo.
Quiero
recordar a ese diputado que el primer proyecto presentado en esta materia, del
cual se ha tomado gran parte del articulado, es el que lleva mi firma y la de
quince diputados de mi bloque, entre los que se encuentra el presidente de la
Comisión de Vivienda y Ordenamiento Urbano. (Aplausos.)
Es
decir que fue a partir de eso que empezamos a trabajar junto con la Cámara
Argentina de la Construcción y con la UOCRA, una UOCRA que hoy tiene un 38 por
ciento menos de trabajadores en relación con los que había en el momento que
cita el señor diputado preopinante, cuando dijo que no se construía nada en la
Argentina.
Los
mismos que hoy dicen esto, son los que antes decían: “Los argentinos no pueden
comer cemento si tienen la heladera vacía”, refiriéndose a la cantidad de obras
que hacíamos. Entonces, me parece que nos estamos confundiendo y que estamos
buscando al enemigo en otro lado.
En
realidad hoy deberíamos estar festejando que, aun transitando un año electoral,
fuera de la política estamos atendiendo una situación real y dándonos una
política de crecimiento en la construcción. Este es, seguramente, uno de los
sectores que más trabajadores puede tomar, que rápidamente permitirá que la
economía se recupere y que apuesta a la inversión del sector privado.
Principalmente el 70 por ciento de este tipo de obras corresponde a la construcción
de viviendas particulares y se realiza con inversiones privadas. Es decir que
en ese 70 por ciento que tiene que ver con obras arquitectónicas es donde se
mueve la mayor cantidad de trabajadores.
Ojalá
que la sanción de esta ley, con el espíritu que propusimos, permita recuperar
50.000 puestos de trabajo y que podamos llegar a los 350.000. No obstante,
vamos a estar lejanos a los 450.000 trabajadores que tuvo la UOCRA en el año
2018.
Este proyecto trata de aliviar a sectores y
propone incentivos económicos, entendiendo que por cada persona que entra en la
obra hay, además, una cantidad de gremios alineados que aumenta muchísimo más.
En toda obra no se necesita solamente el cemento, la cal, el agua, y el
ladrillo, sino que también se mueven la industria del hierro, el acero, el
plástico y la metalmecánica. Piensen que desde el uso del martillo neumático
hasta cualquier otra herramienta, eso abarca mucho trabajo en nuestro país y se
da en cualquier lugar en el que se enclava una obra. Son cientos los trabajadores
que se emplean, principalmente en la construcción de edificios, que en promedio
trabajan entre 15 y 18 meses y tienen todo el resguardo necesario. En este
sentido, la UOCRA tiene un convenio especial, que da la oportunidad de tomar
una mayor cantidad de trabajadores.
Esta
norma contempla un incentivo para aquellos que invierten, y a aquellos que
puedan blanquear dinero, se les ha pedido -en esto debemos reconocer el trabajo
realizado en forma conjunta- que cumplan con todos, absolutamente todos los
requisitos solicitados. Al mismo tiempo, no podrá blanquear nadie que esté
impedido por los artículos de las leyes de blanqueos precedentes.
Por
otro lado, el incentivo fiscal es importante,
porque a partir de la sanción de esta ley se permitirá a aquel que
construye -es decir, que tenga una obra nueva o una obra que no haya llegado al
50 por ciento de ejecución- que reanude la obra. Muchas de las obras que con
motivo de esta pandemia y como resultado de la crisis económica hoy están
paradas, podrán reactivarse, y quienes las construyen tendrán posibilidades de
reinvertir con los recursos que antes debían utilizar para pagar impuestos.
Lamento
también que no fuera aceptado algo a lo que nosotros habíamos apostado, es
decir, la reinversión sin pagar ganancias de una obra que podría continuar, por
ejemplo, comprando un lote. Para nosotros esto es importante, porque habría
permitido que se continuaran realizando obras.
El
impacto que esto tiene en la obra privada ‑que, como dije, representa el
70 por ciento-, es de gran importancia en todos los lugares, porque la verdad
es que esta será una ley federal.
En
cuanto a lo que se ha agregado en relación con la terminación de casas de
complejos habitacionales en el país, estamos de acuerdo y debemos intentar no
volver atrás. Nosotros hemos podido sobrevolar la provincia de Buenos Aires y
hemos visto que era interminable la cantidad de complejos sin concluir, y la
verdad es que no quiero recordarlo.
Vuelvo
a decir que me parece importante que hagamos un acuerdo para votar por consenso
eso, pero las casas de Schoklender estaban todas sin
terminar y eran muchísimas en la provincia de Buenos Aires. Ha complicado la
vida a muchísimos intendentes de toda la provincia de Buenos Aires por
convenios que tuvieron que firmar, en los que ellos eran quienes las iban a
hacer pero nunca las terminaron y luego desaparecieron. Muchos intendentes de
todos los partidos políticos pagaron graves consecuencias por ello.
Hoy
tenemos que festejar que, más allá de estar en un año electoral y en el cual
tenemos muchísimas diferencias que podemos discutir, estemos sancionando una
ley que reactiva un sector, da acceso a la vivienda a los sectores más
populares, da la posibilidad de invertir a aquellos que tienen y crea trabajo
para miles y miles de argentinos. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra la señora diputada Vigo, por Córdoba.
Sra. Vigo.- Señor presidente: voy a tratar de ser
breve porque ya se han dicho ampliamente los alcances de esta iniciativa que
fundamentalmente busca promover la actividad de la construcción en el ámbito
privado dirigido a la construcción de viviendas que, como sabemos, es
fundamental para bajar el déficit habitacional y mejorar el hábitat que incluye
a miles y miles de familias en la Argentina.
Un
aspecto central del proyecto es el de generar empleo y no hay elemento más
reactivador del empleo como la construcción, tanto la pública como la privada.
Este es un aspecto que contribuye con este objetivo tan importante que tiene el
proyecto, como es el de generar empleos.
Aprovecho
para felicitar al gremio de la UOCRA, el principal gremio de la construcción,
porque seguramente no ha sido ajeno al armado de esta iniciativa.
Sabemos
que la construcción es una actividad que impacta de manera directa en la
reactivación de la economía nacional y entendemos que este proyecto está basado
en el incentivo tributario para la recuperación de la actividad de la
construcción y, por lo tanto, contribuye a promover el rol del sector como
dinamizador de la economía y su estado de situación.
La
industria de la construcción es conocida por generar muchos puestos de trabajo
e incentivar de manera transversal a diversas cadenas productivas, como también
se dijo aquí. Tanto es así que en promedio representa el 4 por ciento del PBI y
genera unos 419.000 puestos de trabajo mensuales.
Sin
embargo, hacia el tercer trimestre de 2020, el sector representó el 3 por
ciento del PBI y generó unos 321.361 puestos de trabajo, acumulando una merma
en el nivel de empleo del 24 por ciento respecto al mismo periodo del año
anterior, según datos de INDEC. Entonces, hace dos años que esta actividad
evidencia una continua caída interanual, según ISAC, el Indicador Sintético de
la Actividad de la Construcción, publicado por el INDEC.
Por
otro lado, nos parece interesante o bueno resaltar esta idea de movilizar
ahorros hacia la actividad de la construcción, promoviendo el rol del mercado
de capitales y disminuyendo los costos financieros que el pago de los tributos
podría generar en esta actividad en particular, teniendo la intención
claramente de promover la construcción privada como objetivo central del
proyecto.
Para
ello, creemos importante que el proyecto establezca el Programa de
Normalización para Reactivar la Construcción Federal Argentina, que es
creciente en el tiempo, gozando de un conjunto de beneficios tributarios,
administrativos y judiciales.
Un
aspecto que me parece central en este proyecto, que no es menor, es el de haber
logrado planificar y unir la reactivación de la construcción con un plan de
blanqueo de capitales e inversiones con un dinero que vuelve a producir y que
regenera, sin lugar a dudas, el bolsillo de los trabajadores y de todo el
aparato productivo nacional.
Finalmente,
en materia de vivienda social se ha agregado una serie de medidas al proyecto
para que el Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat pueda concluir con
las obras o permita concluir con las obras que hoy se encuentran paralizadas
por diversos motivos, que se estiman en alrededor de 55.000 obras paralizadas y
abandonadas.
Para
ello, en este proyecto se planteó la consolidación de la obra pública para
vivienda social, tal como lo entendemos, a fin de reactivar las obras
paralizadas o abandonadas en proceso de construcción con aportes del Estado, a
través de los diferentes programas del Ministerio de Desarrollo Territorial y
Hábitat de la Nación como autoridad de aplicación. En ese sentido, las
jurisdicciones y los entes ejecutores acreditarán y cumplimentarán los
requisitos que va a disponer o que dispondrá el Ministerio de Desarrollo
Territorial y Hábitat, a fin de acceder a este mecanismo de consolidación.
Señor
presidente: en referencia a esto último, permítame aprovechar el uso de la
palabra para reclamar, una vez más, ya que es el único ámbito donde puedo
hacerlo, que se incluya en el debate de la Comisión de Vivienda el tratamiento
del proyecto de ley de mi bloque por el cual se plantea modificar la ley de
RENABAP. Solicito esto para que cuando las provincias y municipios lleven
adelante la integración sociourbana y todos estos
programas a los que hace referencia este proyecto de ley que estamos debatiendo
hoy, siempre y cuando se hayan dado sobre tierras nacionales, se transfieran a
título gratuito esos bienes inmuebles para que se pueda llevar adelante la
regularización dominial.
Nos
parece que este proyecto cierra un círculo virtuoso y pone en marcha una
cuestión fundamental, como es la construcción en el ámbito privado.
Concluyo
adelantando el voto positivo del bloque de Córdoba Federal.
Sr. Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra el señor diputado Ramón, por Mendoza.
Sr. Ramón.- Señor presidente: satisface
enormemente que estemos aquí para tratar otro proyecto que tiene un amplio
consenso de todos los bloques, porque estamos hablando de una actividad
económica que desde el Estado va a permitir reactivar la economía, generar
empleo y poder reconstruir una de las actividad más golpeadas en esta pandemia,
junto con el sector gastronómico, las instituciones educativas y otros sectores
para los que, en esta época de pandemia, ha sido muy difícil su subsistencia.
En ese
sentido, desde nuestro interbloque sostenemos nuestra concepción humanista y
esta idea de que nuestra Constitución nos obliga a tener una visión que vaya en
pos del progreso, porque a nosotros también nos interesa el progreso de la
economía de cada una de las familias. Pero lo importante de este proyecto es
que viene a sostener puestos de trabajo y a recuperar la actividad.
Respecto
a lo sustancial del proyecto, voy a tratar de quedarme con cada una de las
frases y de los conceptos que ya fueron expuestos por los miembros informantes
del proyecto y por cada uno de los diputados preopinantes.
Sin
embargo, sí me gustaría cambiar el ojo desde donde miramos este tema de la
reactivación de los puestos de trabajo. Este proyecto está mirando uno de los
temas desde el lado de la oferta y nosotros queremos hacer hincapié ‑y no
podemos dejar pasar‑ en que tenemos varias falencias en nuestra Argentina
que tienen que ver con aquella mirada que nosotros podamos tener desde la
demanda de aquellos que necesitan una habitación.
Este no
es un tema menor y con esto no digo que no tengamos que incentivar la oferta.
De hecho, nos hemos puesto de acuerdo con esta iniciativa que va a ayudar a
reactivar la actividad económica.
Pero el
hábitat, la vivienda, es un tema troncal, del que se habla en nuestra
Constitución Nacional. En ese sentido, el Estado tiene que garantizar la
vivienda y la Constitución Nacional nos exige como legisladores tener el ojo
puesto en la demanda. Sobre todo, en la demanda de los sectores medios de la
sociedad y de quienes tienen menores ingresos.
Recuerdo
que, en 2018, cuando gobernaba Cambiemos, este Congreso de la Nación tuvo la
oportunidad de sancionar la ley 27.453 de Regularización Dominial para la
Integración Socio Urbana de miles y miles de familias. De hecho, hay más de
4.000 barrios a lo largo y a lo ancho de toda la Argentina, que están esperando
por un hábitat, que es todo lo que significa el establecimiento de esta norma.
Esa ley
también fue votada por unanimidad. Pero la faltó algo que nosotros marcamos. Me
refiero al financiamiento de la norma, que es un tema delicado y que lo vino a
solucionar el Frente de Todos cuando asumió el gobierno en el mes de diciembre
con la sanción de dos leyes fundamentales.
Fíjense
lo que es poner el ojo en la oferta o ponerlo en la demanda.
Cuando
ponemos el ojo en la demanda y sancionamos una ley no puede ser de carácter declamativo. Hay 4.000 barrios populares, donde viven
familias a lo largo y a lo ancho de toda la Argentina, que están esperando por
un hábitat. Pero para eso se necesita dinero.
Para
ello se sancionaron dos leyes, la del impuesto PAIS y la del aporte
extraordinario. Las dos leyes establecen un aporte automático a ese fideicomiso
que permite el financiamiento de esa ley.
Ahora,
si miramos la problemática desde la oferta ¿qué sucedió? Acá hay bloques de
muchos diputados, que son mayoritarios en esta Cámara de Diputados, que votaron
en contra del aporte extraordinario y del impuesto PAIS, dos normas que
contenían el financiamiento de la ley de regularización dominial que veía la
demanda de la vivienda social, lo cual felicito.
Miremos
este tema desde el lado de las familias de la clase media, por decirlo de
alguna manera. En ese sentido, por un lado, está el alquiler y por el otro el
acceso a la vivienda, a la casa propia.
El tema
del alquiler fue solucionado. Sancionamos una norma que miró la problemática
desde la demanda, desde lo que es la protección del inquilino, desde la visión
de que faltan siete millones de casa y desde la visión de que no hay acceso a
la vivienda a través del alquiler si existe abuso y no hay oferta suficiente de
alquileres.
Esa
norma se aprobó. Pero fíjense que el sector de la sociedad que es propietaria
de inmuebles, todavía está presionando porque dice que esa ley es injusta y no
favorece la inversión porque estamos cuidando la demanda de aquél que necesita
alquilar y que pertenecen a los estratos medios de la sociedad.
Por
otro lado, tenemos a quien quiere la casa propia. Por eso quiero hacer hincapié
en que miremos el tema desde el lado de la demanda.
Hace
unos años hubo dos programas. Uno de ellos fue el Procrear y, el otro, fue el
que transformó a miles de argentinos en usuarios bancarios. Esas personas
adquirieron un préstamo o un crédito por ser usuarios bancarios. Les pusieron
una zanahoria por delante y les dijeron que iban a adquirir una propiedad si se
transformaban en usuarios bancarios, que les iban a dar un crédito, que se iba
a ajustar por la inflación y que iba a tener un índice que era bastante
razonable ya que lo ajustaban por el capital, etcétera. Me refiero a los
créditos UVA.
Pero
hay que terminar con esto. Si lo miramos desde la visión de los bancos ¿qué es
lo que quieren? Que el capital se ajuste. No le importa que la gente sea
deudora toda su vida porque las actualizaciones del capital van al final.
El
usuario bancario que cayó en la publicidad engañosa de un presidente y de un ministro
de Economía, hoy está molido. Estoy hablando del usuario bancario que adquirió
créditos UVA para adquirir su primera casa. Esa persona está presa de ese
crédito. En realidad, está presa de dos cosas. Por un lado, de los bancos que
quieren ganar mucho dinero, es decir aquellos que hacen las inversiones y, de
un Estado, que no está permitiendo que, ante la crisis de los salarios que no
se actualizaron y la inflación galopante, haya un esfuerzo compartido de toda
la sociedad para solucionar este problema de los usuarios del crédito UVA para
la casa, para el auto o para los créditos personales.
Por eso
vuelvo a insistir en que el ojo lo tenemos que poner desde la demanda, porque
es ahí donde se ve la necesidad.
Hoy,
muchas de las familias jóvenes que cayeron en la publicidad engañosa del
gobierno argentino, del Ministerio de Economía y del Banco Central de la
Nación, están presas.
Pero
este gobierno, al no estar mirando el problema desde la demanda y observarlo
desde la oferta de los bancos no toma la decisión de terminar con los créditos
UVA. No se puede seguir actualizando por el capital y dejar la actualización
para el final. A esa gente les va a explotar la situación en las manos.
No
importa el valor de la propiedad. Digo esto porque escuchaba decir a quienes no
quieren solucionar el problema que la casa tiene un valor y que la misma
aumentó. Pero quien quiere su primera casa, no le importa que sea un bien de
mercado. Es su casa. Es donde proyecta su vida, la de sus hijos y todo lo que
viene para adelante.
Quería
hacer estas dos consideraciones de la vivienda social y de la vivienda de la
familia de la clase media, porque si la seguimos mirando solamente desde la
oferta de las empresas y de la especulación de algunas entidades financieras,
vamos a seguir teniendo este problema grave en la Argentina donde faltan siete
millones de viviendas.
Las
inmobiliarias no quieren torcer el brazo del abuso en los alquileres y quieren
seguir cobrando las comisiones.
En
Argentina está arraigado que la inversión en ladrillos es una inversión segura
y que se obtienen rentas. Mentira que cobran alquileres, está hecho para
rentas. Quisiera que tuviéramos presente esto para el futuro porque necesitamos
solucionarlo.
Esta es
una propuesta, sobre todo para el frente oficialista, en el sentido de que hay
que tomar cartas en el asunto con el Banco Central de la Nación. No puede
seguir apretando sin dar una solución. Los bancos que hicieron usuarios
bancarios para adquirir su primera casa están apretando a esas personas. Ahora
estamos en pandemia y queda algún tiempo en el que le están perdonando la
deuda. Pero va a llegar un momento donde les van a querer poner la bandera de
remate o van a estar endeudados de por vida, lo cual también requiere de una
solución.
Aproveché
este proyecto con el cual consensuamos porque creo que es necesario que cada
uno de nosotros tenga la mirada puesta no solamente en el desarrollo y la
actividad económica sino en para qué queremos la actividad económica y para qué
queremos el desarrollo, que es para el bienestar y las economías de las
familias.
Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la
palabra el señor diputado del Caño, por Buenos Aires.
Sr. del Caño.- Señor presidente: en este proyecto que presenta el
Poder Ejecutivo y que busca dar un incentivo a la construcción privada, lo que
vemos son muchos beneficios para empresas y para las grandes constructoras.
Por
ejemplo, está el beneficio de la eximición del impuesto a los bienes
personales. Esto me hace acordar al gobierno de Macri.
El proyecto
también plantea la posibilidad de ingresar en un blanqueo, algo que también se
hizo en el gobierno de Macri. Es decir que aquellos que se la fugaron toda, van
a tener la posibilidad de blanquear sin pagar un centavo todos los impuestos
que evadieron y que eludieron.
Me
parece que primero hay que dejar en claro que lo que está planteado en los
fundamentos del proyecto, en el sentido de que la prioridad sería apuntar a
combatir el déficit habitacional, no es cierto.
Sabemos
que la inversión privada en la construcción no se destina fundamentalmente a
aquellas personas que necesitan una vivienda nueva, sino que se destinan,
fundamentalmente, a personas que ya tienen vivienda y, por supuesto, a la
especulación.
Tenemos
poco tiempo para explayarnos, pero son conocidos los grandes negociados que hay
alrededor de las grandes constructoras. Muchos integrantes del Frente de Todos
se escandalizan con lo que hace el gobierno de la ciudad de Buenos Aires ‑que
es un escándalo, realmente‑ en la venta de terrenos de Costa Salguero. Se
benefician las mismas grandes constructoras con rebaja de impuestos, y también
hay beneficios respecto del impuesto a las ganancias. Entonces, me parece que
estamos frente a un proyecto que no apunta a resolver este grave problema que
emergió con muchísima claridad durante la pandemia con las ocupaciones de
tierras de muchas familias que necesitan y que reclaman un techo para sus hijas
e hijos. No hay un plan de viviendas planteado en este proyecto, sino que ‑insisto‑
se plantean beneficios para desarrollar la actividad de las constructoras
privadas, es decir, las empresas de la construcción. Este proyecto plantea
falsamente este fundamento de que apunta a combatir el déficit habitacional.
Recién
se mencionaba el tema de los hipotecados UVA. Tampoco resuelve un problema de
más de ciento cinco mil familias que están reclamando, que llevaron cartas al
presidente Alberto Fernández, al presidente de la Cámara de Diputados y a la
presidenta del Senado. No hay una respuesta favorable y siguen aumentando las
cuotas, que son realmente impagables. Es una estafa que hicieron los bancos, y
la mayoría son públicos. Hay que brindarles también una solución a las familias
hipotecadas UVA y plantear verdaderamente un plan de viviendas para resolver este
enorme flagelo de más de tres millones y medio de familias que sufren el
déficit habitacional. Hay que construir 1.300.000 viviendas nuevas. Acá no se
plantea nada de eso, sino más beneficios y más negociados para las grandes
constructoras.
Por
eso, nosotros vamos a rechazar el proyecto, más allá de que hay consenso del
Frente de Todos y de Juntos por el Cambio, que llevan políticas que benefician
a estos sectores.
Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la
palabra el señor diputado Giordano, por Buenos Aires.
Sr. Giordano.- Señor presidente: en el mismo sentido que el señor
diputado del Caño, estamos en contra de este proyecto. Desde la Izquierda
estamos a favor, peleamos y luchamos por un plan de viviendas populares, por
una obra pública que reactive la economía, que dé trabajo genuino y que combata
efectivamente el déficit habitacional de tres millones y medio de viviendas.
Esto
pasa con todos los gobiernos hace cuarenta años. La plata que va para los
usureros de la deuda debe ir para ese plan de reactivación. Imagínense las
viviendas que se podrían haber hecho con los 6.000 millones de dólares que pagó
el gobierno en concepto de deuda externa desde que asumió.
Efectivamente,
no es este proyecto el que va a favor de esa política. Es lo opuesto: beneficios
impositivos a los empresarios de la construcción para las obras privadas nuevas
–eso es lo que dispone el proyecto‑ y
exención del impuesto de bienes personales, diferimiento de ganancia,
crédito fiscal para el desembolso de la inversión y el blanqueo de capitales de
aquellos que ya evadieron y que fugaron. Ya lo había hecho Macri, y ayer en la
reunión de comisión lo escuché a Carlos Heller decir que Macri lo hizo por
decreto y ellos, por ley.
¿Cuántas
viviendas se construyeron con el gobierno anterior? Ninguna. Entonces, esta ley
sale por consenso, de nuevo, de Frente de Todos y de Juntos por el Cambio.
Quiero señalar que estos son nuevos beneficios y perdones impositivos a grandes
empresarios. En la causa de los cuadernos hay extitulares de la Cámara de la
Construcción como Benito Roggio, IECSA y Calcaterra.
¿A ellos se va a apelar para que reactiven la economía y construyan viviendas?
¿Así empezaremos a ver soluciones? Desde ningún punto de vista. Los que van a
agarrar los beneficios impositivos son IECSA e IRSA, las corporaciones inmobiliarias más grandes del país, que en la
ciudad de Buenos Aires son los mayores terratenientes urbanos, que adquirieron tierras del Estado, explayas
ferroviarias. Lo que se está beneficiando en concreto ‑no se lo dice,
pero le ponemos nombre‑ es el negocio inmobiliario, las torres, el metro
cuadrado valuado en dólares. Fíjense que en la ciudad de Buenos Aires hay
138.000 propiedades ociosas, el diez por ciento del total. Si esas propiedades
no fueran para el negocio inmobiliario sino para la gente que las necesita,
habría quinientas mil personas menos con problemas de vivienda. Pero no, lo que
se fomenta es el negocio inmobiliario.
El
diputado Heller también dijo ayer que se les estarían dando estos beneficios a
las empresas que se suman al negocio propio de la construcción. Nos está dando
la razón. Ahora, ¿de dónde sale que la baja de impuesto a los empresarios va a
generar inversión? Joseph Stiglitz, Premio Nobel de Economía, esta semana
escribió una columna en el sentido de que la enorme rebaja de impuestos que
Trump concedió a las corporaciones en 2017 provocó más déficit fiscal y que las
promesas de inversión jamás se realizaron. Pasó en los Estados Unidos, en la
Unión Europea, y lo podemos bajar a tierra a la Argentina. Esto es más o menos
como decir que la flexibilización laboral ‑que se anunció en la década
del 90‑ también iba a bajar el costo laboral, que los empresarios iban a
invertir y que se iban a generar puestos de trabajo. Pero no, se generó más
desocupación.
Ayer un
diputado en la comisión dijo que desde los años 90 recordaba que había
exenciones positivas. Pasó en los 80, 90, 2000 y 2010, cuarenta años de
exenciones impositivas, menos impuestos para las patronales, pero las obras no
aparecen, o aparecen para los grandes capitalistas y los grandes empresarios,
porque el problema de la vivienda popular no se soluciona.
Podríamos
hacer una pregunta ante los discursos que han dicho recién. Si están tan
preocupados por la construcción, ¿por qué no empezaron con las cien hectáreas
que reclamaban los vecinos de Guernica? Estaban deshabitadas las viviendas y
los desalojaron violentamente. Detrás de las cien hectáreas que no le dieron a
Guernica para solucionar su problema habitacional estaba el Grupo Bellaco, que
tiene un country de trescientos cincuenta hectáreas. Dicen que hay
cincuenta y cinco mil viviendas paralizadas que se van a reactivar con este
proyecto. Imagínense esas viviendas de esta promesa contra las cuatro millones
de viviendas que faltan. Con lo
que se destina a viviendas en el presupuesto para 2021, habría que esperar
setenta años para resolver ese problema del déficit habitacional. Durante doce
años de gobierno kirchnerista prometieron cuatrocientos veinte mil viviendas y
se construyó la mitad.
Para
terminar, estamos en contra de este proyecto, pero efectivamente tenemos con
una propuesta alternativa de un plan de viviendas populares, que se construyan
escuelas y hospitales, y que esas obras sean controladas por los trabajadores y
las organizaciones genuinas de desocupados, no apoyándose ‑como decía
Ritondo- en la burocracia de la UOCRA. Gerardo Martínez tiene a todos los
trabajadores en negro y precarizados. Con la plata que se va a la deuda externa
tenemos la posibilidad de reactivar la economía, construir viviendas populares
y crear trabajo genuino como parte de un plan económico alternativo al servicio
de los trabajadores. No hay que dar beneficios impositivos al servicio de las
grandes corporaciones de la construcción.
Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la
palabra la señora diputada Hernández, por Chubut.
Sra. Hernández.- Señor presidente: celebro el
tratamiento de este proyecto que básicamente, como ya han dicho los oradores
que me precedieron en el uso de la palabra, tiene para mí un objetivo central,
que es la motorización del trabajo, es decir, la posibilidad de poder
generarlo.
Sabemos que la construcción es uno de los
sectores que más trabajo puede dar, no solo por el que en sí genera, sino por
todo el valor agregado que tiene el tema de la construcción. Cuando hay
construcción en una ciudad o en un pueblo se movilizan el comercio y los
trabajadores de la construcción, y todo eso genera mucha reactivación. Es
importante estimular la inversión y dar beneficios impositivos como los que propone
este proyecto.
Sabemos
que en medio de esta pandemia la construcción fue uno de los sectores más
golpeados y no se han hecho muchas obras. Por medio de esta ley estamos
movilizando los ahorros hacia la actividad de la construcción, promoviendo el
rol del mercado de capitales y disminuyendo los costos financieros que tiene el
pago de tributos. Todas estas acciones serán muy importantes cuando se
desarrollen en las distintas provincias.
En la
provincia del Chubut la construcción genera muchos puestos de trabajo. Esto no
se da solamente en la construcción, sino en lo que se deriva de ella. Ya han
hablado aquí acerca de cuáles serían los estímulos a través de los beneficios
impositivos, como es el tema del impuesto a los bienes personales, que exime
del pago de este impuesto durante dos años a los activos financieros que se
inicien a partir de la entrada en vigencia de esta ley.
A eso
hay que agregar el tema del diferimiento del pago del ITI y del impuesto a las
Ganancias. También me pareció sumamente importante la exteriorización
voluntaria de la tenencia de moneda extranjera y moneda nacional en el país y
en el exterior, abonando un impuesto del 5, 10 o 20 por ciento, según la fecha
en que se realice la citada exteriorización. También deseo destacar el tema del
tiempo limitado del régimen de declaración voluntaria de activos.
Creo
que todos estos beneficios conjugan en algo que para nuestro gobierno es de
absoluta importancia: la generación de puestos de trabajo. Sabemos que durante
todo el año pasado se ha vivido una situación especial en nuestro país y en el
mundo a través de esta pandemia que ha dejado no solo situaciones sanitarias
terribles, sino personales y emocionales.
Mucha
gente ha perdido su trabajo y muchas personas están precarizadas en su
trabajo. Este es un dato que nuestro
gobierno nacional y popular siempre ha tenido en cuenta, o sea, la posibilidad
de poder generar puestos de empleo genuino y que se pueda reactivar la
economía.
Por
ello celebro que todos los bloques hayan logrado trabajar en conjunto este
proyecto para que sea sancionado en forma unánime. Lo que no voy a poder
celebrar lamentablemente, es la falta de respeto que hoy he escuchado en esta
sesión. Ha habido una falta de respeto hacia un gobernador electo democráticamente
por el pueblo.
También
hubo falta de respeto por parte de una diputada que habla de salud y toma
dióxido de cloro cuando esto no está aprobado, nunca lo estuvo y produjo
muertes. Falta de respeto porque nos hayan tratado a todos los diputados y
diputadas que estamos en el Congreso de la Nación de corruptos y corruptas.
Eso no es lo que la ciudadanía quiere ni
pretende, sea o no un año electoral. Creo que la ciudadanía pretende que
hayamos podido debatir en comisión un proyecto de semejante magnitud y que
todos y todas hayamos estado de acuerdo.
Debemos mirar lo que este proyecto propone
para las viviendas sociales. En todas nuestras provincias hay viviendas
sociales que no han podido concluirse. Detrás de esas viviendas y de esas
construcciones hay muchísimas familias que están esperando porque tienen
necesidades.
Celebro,
acompaño este proyecto y me parece importante que se traten estos temas que
benefician a argentinos y argentinas, y que podamos hacerlo, pese a nuestras
diferencias, con respeto y en forma conjunta.
Sr. Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra el señor diputado Pastori, por
Misiones.
Sr. Pastori.- Señor presidente: como tengo poco
tiempo me voy a centrar en un par de aspectos que quisiéramos destacar o más
bien proponer.
Este
proyecto tiene tres bloques diferenciados en donde se encuentran distintos
tipos de beneficios que no son acumulables unos con otros. Es decir, quien se
acoge a uno de ellos no lo podrá hacer en el otro. Por ejemplo, los beneficios
del impuesto sobre los bienes personales no pueden ser con recursos del
blanqueo. Quien tiene dinero no declarado no puede acogerse a ese beneficio,
sino que tendrá que ingresar al blanqueo y así de la misma manera al revés.
Estamos
de acuerdo con la propuesta efectuada en cuanto a los beneficios impositivos
para impulsar la actividad de la construcción, tanto en bienes personales como
en el impuesto a las ganancias.
Me
quiero detener en un aspecto del blanqueo que es el impuesto especial que se
crea para quienes exterioricen activos financieros no declarados, sean en
moneda nacional o en moneda extranjera, lo tengan en el exterior o en el país.
Este impuesto del 5, del 10 o el 20 por ciento, según sea el plazo en que se
acoja al beneficio el contribuyente, no tiene un destino específico.
Por lo tanto, lo vamos a votar en la
convicción e inteligencia de que este impuesto que se está creando, al no tener
un destino específico, va a correr la suerte de cualquier impuesto existente o
que se cree en la Argentina, según lo que establece nuestra Constitución
-artículo 75, inciso 2- de ser coparticipable con las provincias. En el texto
del proyecto no dice que va a ser coparticipable, pero tampoco tiene una
afectación específica. Ergo, corresponde entonces ser coparticipable con las
provincias.
Nosotros
–y por eso lo expreso para que quede constancia en la versión taquigráfica-
votamos el artículo 9 en la convicción e inteligencia de que el producido de
este impuesto debe ser coparticipable por imperio constitucional con las provincias
argentinas.
El otro
aspecto es un agregado que queremos proponer al final del articulado. Vamos a
pedir la palabra en su momento para hacer la propuesta concreta, pero adelanto
que tiene que ver con beneficios a los contribuyentes cumplidores. Cada vez que
aprobamos una moratoria o un blanqueo de alguna forma estamos premiando a
quienes han evadido o tenido malos comportamientos tributarios para con el
fisco. En las últimas moratorias y blanqueos se ha adoptado la buena práctica
de agregar artículos que beneficien a los buenos cumplidores.
En este
sentido, quiero resaltar el trabajo de la Asociación Argentina de
Contribuyentes, que se ha conectado con muchos diputados para hacer conocer sus
propuestas. Dicha asociación ha sido galardonada recientemente por la
Universidad de Pensilvania, Estados Unidos, con el premio a uno de los nuevos
Mejores Think Tank a nivel
mundial, lo que posiciona a esa asociación como un centro de excelencia en la
propuesta de políticas públicas.
A partir
de un trabajo y de una propuesta también de ellos, y de algunos aportes que
hemos hecho, en el tratamiento en particular vamos a sugerir a este cuerpo el
agregado de un par de artículos a fin de establecer algunos beneficios para
quienes, a pesar de todas las dificultades, y fundamentalmente en este año que
hemos atravesado con la pandemia -que la seguimos sufriendo, obviamente, pero
con un año 2020 que ha sido muy difícil-, han cumplido en tiempo y forma con
sus obligaciones tributarias.
Por esta
razón vamos a formular una propuesta que, por razones de tiempo, me la
reservaré para ese momento.
Sr.
Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el señor diputado
Sarghini, por Buenos Aires.
Sr. Sarghini.- Señor presidente: en primer lugar, quiero señalar que
voy a hablar en nombre de cuatro bloques, que son los de Consenso Federal,
Justicialista, Socialista y Progresista Cívico y Social, y lo estoy haciendo en
el espacio individual, por lo que quiero que esto sea tenido en cuenta. No se
trata de un reclamo, sino que simplemente quiero que se sepa con claridad en
nombre de quiénes hablo.
En
términos generales y, por lo tanto, en la votación en general, nosotros
acompañaremos el proyecto en consideración porque lo vemos desde el punto de
vista de la coyuntura que estamos viviendo. No estaríamos de acuerdo con que,
para desarrollos inmobiliarios de ciertas características, para ciertos tipos
de construcciones sin terminar o para ciertas situaciones que podríamos
describir como innecesarias, se gasten incentivos y recursos fiscales.
Preferiríamos un fuerte direccionamiento al tema de la vivienda, pero
entendiendo la coyuntura, y sabiendo que la construcción, cualesquiera sean sus
características, ayuda al empleo, reitero que acompañamos esta iniciativa.
También
consideramos que los instrumentos elegidos, como el impuesto a los bienes
personales, el cómputo como pago a cuenta de este impuesto de parte de la
inversión, el diferimiento de los impuestos a la transferencia de inmuebles o a
las ganancias, según sea el caso, son los idóneos.
Ahora
bien, todo esto me lleva a la siguiente reflexión: por qué el oficialismo
considera la reducción de impuestos como un incentivo importante cuando se
trata de sectores de la construcción o cuando está dirigido a desarrolladores
inmobiliarios y no lo hace en otros sectores. Nosotros
creemos en los incentivos y por eso acompañamos esta iniciativa. No tenemos ese
tipo de contradicciones. Esto no quiere decir que apoyemos abiertamente la
reducción de impuestos como garantía de inversión. En este caso, parece claro
que el oficialismo entiende que la reducción de impuestos es un buen incentivo
para la inversión y para fomentar la oferta.
Dicho
esto, quiero hacer hincapié en aquello que de ninguna manera vamos a acompañar,
y en este sentido, por supuesto que vamos a pedir la votación nominal del
Título II que, con una gran capacidad para hacer uso de eufemismos, se denomina
“Programa de Normalización para Reactivar la Construcción Federal Argentina”.
En el
mensaje de elevación a nuestra Cámara se dice que esto es “para movilizar
ahorros en un régimen de declaración voluntaria”. ¡Qué manera increíble de
denominar a aquellos fondos que surgen del delito! Porque, ¿quién puede
blanquear? Solo puede hacerlo aquel que ha cometido el delito de fraude fiscal,
el que ha evadido o, en todo caso, quien ha eludido. Porque el que lo hace y no
tiene resto, no tiene resto. En cambio, el que puede blanquear –y esto es un
blanqueo- es aquel que hizo fraude fiscal y la guardó en algún lado.
La
verdad es que, desde el regreso a la democracia, la Argentina lleva seis
blanqueos. He escuchado debates fortísimos por los blanqueos, y tiene lógica
que así sean por lo que significa un blanqueo; he escuchado de todo en cada uno
de esos debates. Ahora bien, créanme que nunca vi, como en este caso, un
consenso tan silencioso para blanquear.
Se
habla de la promoción de la construcción y del empleo, pero el blanqueo está
allí. Nos puede preocupar la tasa del impuesto que le ponemos, pero lo cierto
es que estamos incentivando la inconducta fiscal, que ya es alta en nuestro
país. Estamos blanqueamos fondos que surgen del fraude fiscal, de la evasión o
de la elusión.
Vamos a
suponer que el Estado tiene la capacidad para administrar que los recursos no
surjan de actividades ilícitas. En la letra está y lo reconozco. Vamos a
suponer entonces que es así. Aun así, estamos blanqueando, estamos eximiendo de
explicitar el origen de los fondos, de todo reclamo impositivo, de sanciones de
leyes penales, así como en materias tributaria, cambiaria y aduanera. Eso sí,
que vengan para un desarrollo inmobiliario; con eso, y en nombre del empleo,
premiémoslos.
Yo he
dicho –y es algo en lo que desde nuestro bloque venimos insistiendo- que la
informalidad en la Argentina es el talón de Aquiles para resolver la cuestión
fiscal, que a su vez es una cuestión central para resolver la estabilidad
macroeconómica. Y sabemos que, si no hay estabilidad macroeconómica, las
medidas micro que incentivan pueden servir solo para que algunos vivos se
apropien de ciertos beneficios y no tengan ningún resultado en materia
agregada. Por lo tanto, estamos corriendo ese riesgo.
Pero,
además, cuando hablamos de informalidad, estamos hablando de aquellos que no
cumplen rigurosamente con las leyes impositivas en algunos casos, pero porque
no les cierra la ecuación económica. En efecto, con el nivel de presión fiscal
y los costos que tienen que hacer frente no les cierra la ecuación económica a
las pymes. Es hora de que, cuando pensemos cómo movilizamos recursos,
analicemos cómo incorporamos a aquellos que están en la informalidad. No pueden
estar adentro porque la ecuación económica no les cierra, y entonces terminan
despidiendo y generando desempleo. Me refiero fundamentalmente a las pymes, que
son las que más empleo generan.
En cambio,
estamos premiando a aquellos que evadieron, a aquellos que la sacaron y ahora
se la dejamos traer en nombre de una inversión que tampoco sabemos si va a
llegar.
No
vamos a votar en contra de un proyecto de ley que puede generar un solo puesto
de trabajo y en el que acompañamos los instrumentos que utiliza en materia
impositiva. Pero de ninguna manera vamos a votar a favor del Título II. Por eso
vamos a pedir claramente que los artículos 6° al 20 se voten por separado y de
manera nominal.
Sr. Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra el señor diputado Quetglas, por Buenos Aires.
Sr. Quetglas.- Señor presidente: viene a
tratamiento un proyecto de ley que llega en tiempo oportuno, ya que la
Argentina vive una situación de enorme fragilidad económica y social, y
probablemente este tipo de instrumentos contribuyan a sacarnos del pantano
económico en el que estamos.
Pero
déjeme decir cuatro cosas sobre esta iniciativa que me parecen relevantes y que
dialogan con la letra del proyecto.
En
primer lugar, quiero señalar cuál es el rol de la construcción. Quizás lo
pasamos desapercibido, pero la construcción ‑aparte de dar empleo y todo
lo que se dijo‑ dota al espacio de funcionalidad. El espacio no tiene
funcionalidad natural y la construcción es fundamental en cualquier sociedad
para ganar funcionalidad espacial, ya sea logística, de hábitat, económica,
etcétera.
En ese
sentido, hay una serie de variables que hacen que la tradición contemporánea
determine que se construya sobre lo construido, y tiene que ver con los costos,
las posibilidades tecnológicas, los nuevos materiales, la evolución sociológica
‑las necesidades de una vivienda no son idénticas a las de hace cincuenta
años‑ y, sobre todo, con un tema para adelante: las necesidades
sanitarias y ambientales que determinan que probablemente tengamos que
reconstruir nuestras ciudades de acá a treinta o cuarenta años.
Tenemos
que acompañar esta iniciativa en ese sentido. La Argentina precisa un shock
constructivo. Necesitamos impulsar esta actividad porque tenemos un retraso de
infraestructura, de dotación de hábitat, etcétera, ya señalado. La paradoja es
que lo hacemos mediante instrumentos fiscales.
Reconocemos
que una presión fiscal razonable mejora el funcionamiento de una actividad
económica. Digo esto para trasladar este mismo razonamiento a la actividad
agropecuaria, turística, metalmecánica o industrial, etcétera. No puede ser que
aceptemos implícitamente que un tratamiento fiscal razonable impulsa la
actividad económica, y que a la media hora presionemos fiscalmente a otros
sectores.
El
segundo tema es la cuestión del blanqueo que acá se ha dicho, más allá de los
eufemismos. Todos los gobiernos de la democracia, desde Alfonsín hasta el
actual, impulsaron algún blanqueo. No hubo ningún gobierno que no haya tenido
un blanqueo. Entonces, reservémonos el tono. Sí ya sabemos que nuestra
capacidad de persecución fiscal es limitada y que cada tanto en el ciclo
precisamos este instrumento ‑que es perverso y anómalo‑, no
levantemos el tono frente a una situación de necesidad. No hay blanqueos buenos
y malos. Este blanqueo tiene el mismo estatus moral que otros blanqueos en los
cuales ustedes se gastaron las gargantas.
La
tercera cuestión es que esta ley puede ser todo lo buena que sea, pero es
apenas una condición de posibilidad, porque después están las regulaciones
provinciales y locales. Además, tenemos un problema cultural muy severo, que
estamos enfrentando en la Argentina: que se asimila toda actividad inmobiliaria
con la especulación inmobiliaria.
Entonces,
las mismas fuerzas políticas y sociales que traen a este Parlamento la
posibilidad de impulsar la construcción, en la ciudad de Buenos Aires combaten
el desarrollo inmobiliario. Hagamos un poquito de psicoanálisis a ver si
podemos superar el trauma y saber que la actividad inmobiliaria tiene, por
supuesto, iniciativas nobles e innobles, pero que las ciudades precisan
transformación, inversión y creatividad. El mundo que conocemos y disfrutamos
es el que nos hacen los ingenieros.
Para
terminar, acá se han dicho muchas cosas en relación con la Argentina y la
vivienda. ¿Cuántas faltan? Se dio un
número de siete millones y otro de tres millones y medio. ¿Con qué está más
fuertemente asociado el resultado en el mercado de viviendas? Con el crédito.
Para el
95 por ciento de los habitantes de este planeta, la vivienda es un bien al que
se accede por crédito. La Argentina, desde 1975 para acá, tiene el mercado de
capitales roto. Es obvio que con el mercado de capitales roto no vamos a tener
un buen mercado de viviendas.
La
paradoja es que al tener una moneda que se ha devaluado sistemáticamente, la
vivienda se ha constituido en un refugio de valor; lo sabemos todos: una
cantidad de gente ahorra en vivienda para poder dársela a sus hijos, para tenerla,
para no tener los pesos, etcétera. Al ahorrar en vivienda, eleva el costo de
ésta artificialmente respecto de aquellos que no pueden acceder al crédito para
comprarla. Quiero aclarar que esas viviendas no son ociosas; son vacías, que
son dos cosas distintas, porque su finalidad, que es reservar el valor, la
cumplen.
Aquí
viene una gran reflexión que tenemos que hacer: construir un instrumento que
permita canalizar el ahorro sistemáticamente hacia la construcción. El UVA
puede estar mal o bien diseñado ‑probablemente, a la luz de los
resultados, estuvo mal diseñado‑, pero si nosotros no construimos un
instrumento, nunca vamos a tener un mercado de capitales. Si no hay un mercado
de capitales, tenemos al 90 por ciento de la población forzada a estar fuera de
la posibilidad de acceder fluidamente a la vivienda, porque solo el 10 por
ciento accede al mercado en términos tradicionales.
Entonces,
se trata de entender que, para tener una economía competitiva y una sociedad
que funcione razonablemente, hay que construir. Tenemos que impulsar una
Argentina constructiva.
Para
construir tenemos que razonar acerca de cómo funciona ese mercado. No es ni con
voluntarismo ni leyes específicas anómalas, como puede ser alguna que circule
por este Parlamento. Es con una visión que le permita a una actividad económica
funcionar razonablemente.
Sr. Presidente (Casaretto).-
Tiene la palabra el señor diputado Alderete, por Buenos Aires.
Sr. Alderete.- Señor presidente: el proyecto de ley
en consideración parte de una serie de premisas que compartimos con el gobierno
nacional. La construcción es una actividad económica dinámica, que cumple un
rol trascendente en nuestra economía y en la sociedad, ya que realiza un
importante aporte al producto bruto interno en nuestro país y genera cientos de
miles de puestos de trabajo de forma directa e indirecta.
En este
momento de consternación que nos toca vivir es fundamental pensar medidas que
ayuden a reactivar la economía, profundamente golpeada por la pandemia, y así
mejorar las condiciones materiales de vida de millones de argentinos que
perdieron o sufrieron una fuerte disminución de sus ingresos en el último año.
En este
sentido, compartimos la intención de nuestro gobierno al ver en la construcción
una rápida y consistente solución a buena parte de este problema. Según los
últimos datos que brinda el INDEC de la Encuesta Permanente de Hogares,
actualizada recientemente, en nuestro país más de un millón trescientos mil
habitantes viven en situación de hacinamiento crítico. Por otra parte, cuatro
millones quinientos mil argentinos y argentinas se encuentran sin trabajo.
Está
claro que en esta situación de crisis económica generada durante el gobierno de
Macri y agravada por la pandemia es necesario tomar medidas que busquen reactivar
e incentivar la economía para todos los sectores de la sociedad que hoy están
sufriendo muchísimas necesidades.
Efectivamente,
la construcción es una actividad económica dinámica que genera de forma rápida
una gran cantidad de trabajo y reactiva la economía, ya que muchos de los
insumos que utiliza son de industria nacional. En ese sentido, compartimos la
intención del gobierno de incentivar la construcción.
Pero,
por otra parte, si algo demostró la pandemia es el precio que tiene que pagar
nuestro pueblo por la miseria, la pobreza y las malas condiciones de vida. Los
habitantes de villas y barrios humildes fueron los que primero sufrieron la
pandemia y la continúan sufriendo. Son quienes están en la primera línea
atendiendo las necesidades de sus vecinos.
En este
contexto, se vuelve imprescindible que cualquier iniciativa que apunte a
fomentar el trabajo y la construcción en la patria tenga en cuenta de forma
directa y clara a todos y todas. Ningún argentino o argentina puede estar fuera
de eso.
Por
ello, lo que no compartimos de esta iniciativa es que beneficie principalmente
a las grandes empresas que reproducen un sistema de especulación inmobiliaria.
Esta especulación guiada por los intereses económicos de un pequeño grupo quita
la posibilidad de acceder a una vivienda digna a miles de argentinos y
argentinas.
Nosotros
acompañamos la intención del gobierno de incentivar la construcción para
reactivar la economía y generar miles de puestos de trabajo y recuperar el
empleo. Por eso, en este intento de contemplar soluciones habitacionales
reales, para que nuestro pueblo pueda conseguir una vivienda digna, no se debe
continuar con la especulación inmobiliaria, el negocio de unos pocos que
producen viviendas de mala calidad, que no son suficientes para garantizar las
necesidades de nuestro pueblo y a las cuales pueden acceder muy pocos.
Por
eso, con la misma intención y consideración del gobierno, tenemos que tratar
otros proyectos que también incentiven las viviendas populares, como el proyecto
de Techo, Tierra y Trabajo, y otros que también están en el Congreso para su
tratamiento.
Sr. Presidente (Casaretto).- La
Presidencia informa a las señoras y señores diputados que se está agotando la
lista de oradores, por lo que nos estamos acercando al momento de la votación.
Por eso, les pido a quienes estén sesionando en forma remota que se vayan logueando para estar en condiciones de votar.
Tiene
la palabra la señora diputada Carrizo, por Córdoba.
Sra. Carrizo (M.S.).- Señor presidente: en primer lugar, quiero decir que celebro el retorno de la
actividad de este Congreso en un año en el que los argentinos tienen puestas
muchas expectativas. De a poco estamos tratando de retornar a la normalidad
después de un año muy complejo, como fue el 2020.
Estamos
en una oportunidad inmejorable para comenzar a trabajar en herramientas que
permitan la reactivación económica, pero sobre todo que permitan fortalecer
este entramado social, generando incentivos para darle nuevamente confianza a
los ciudadanos y respaldar sus proyectos personales.
Esta
iniciativa que estamos tratando es una muestra de ello. Es un estímulo para la
recuperación de la actividad de la construcción, de la generación de empleo, de
la movilización de materiales y de la obra privada, pero sobre todo en el
desarrollo de todo el país.
Pero lo
más importante es que nuevamente se pone en valor al sector privado como motor
del desarrollo productivo y económico de nuestra Argentina. Se trata de
empoderar nuevamente a la ciudadanía como actora del cambio y encontrar una
alternativa a ese pensamiento sesgado de creer que debemos agigantar el Estado
porque es la única fuente de generación de todas las soluciones.
Sin
embargo, señor presidente, no puedo dejar de decir que esta también es una
oportunidad para visibilizar una gran problemática, como es el déficit
habitacional, como bien lo han mencionado diputados de distintos colores
políticos que me precedieron en el uso de la palabra. Tenemos un grave y
creciente déficit habitacional, como quedó crudamente demostrado en este año de
pandemia.
En el
mensaje que acompaña este proyecto de ley el Poder Ejecutivo habla, de una
manera imprecisa y casi indirecta, de la potencialidad que tiene este proyecto
para brindar las soluciones. Pero acá debemos hablarle con sinceridad a los
argentinos y decirles que, si bien esta va a ser una herramienta para comenzar
a paliar el déficit habitacional o al menos un aliciente, de ninguna manera
traerá una solución definitiva. ¿Por qué? Porque evidentemente a lo largo del
tiempo nuestro país no ha tenido una política seria y coordinada que realmente
aborde el problema habitacional.
Por eso
la falta de hogares en nuestra Argentina ‑sean 4 o 7 millones‑ nos
lleva a la necesidad de tomar una política estratégica. Aquí tenemos que hablar
de las consecuencias de la pandemia, como lo fueron la toma de terrenos, las
ocupaciones, el hacinamiento y la gravedad de la crisis sanitaria en los
lugares más vulnerables, justamente por ese déficit habitacional, hacinamiento
y falta de elementos y servicios básicos.
Entonces,
hay que decirles a los argentinos que este gobierno ha creado un Ministerio de
Vivienda y Hábitat, pero lamentablemente esta unidad ministerial ha sido la que
menos ha ejecutado su presupuesto en este año, y claramente lo ha hecho con muy
poco criterio federal.
Las
mayores carencias habitacionales se registran en las provincias del Chaco,
Formosa, Corrientes, Santiago del Estero, Misiones, Tucumán, Salta y Jujuy, es
decir, en todas las provincias del arco norte del país. Sin embargo, todavía
hay políticas públicas que no acompañan este desarrollo del crecimiento
poblacional con perspectiva federal.
Por
eso, señor presidente, no puedo dejar de señalar una preocupación que vengo
expresando desde que presenté un proyecto para que los recursos del FONAVI no
sean desviados libremente ‑ya que algunos gobernadores pagaban con ellos
los sueldos de sus empleados‑, sino que realmente tengan el destino que
deben tener. Así se receptó en el Pacto Fiscal de 2017 ‑y se ratificó en
2018‑, donde las provincias se comprometían a realizar este gasto del
Fondo Nacional de la Vivienda para paliar este déficit. Seguramente deberemos
ponerlas bajo la lupa para ver si están cumpliendo con este compromiso.
Señor
presidente: este Congreso debe trabajar en políticas urgentes para solucionar
los problemas de los argentinos. El déficit habitacional es uno de ellos, pero
debemos trabajar de manera urgente, con perspectiva federal y con planificación
y coordinación, invitando no solo a las provincias a adherir a esta norma sino
también involucrando a los gobiernos locales para que sean protagonistas en la
ejecución de este programa, como en la de muchos otros, y llevar adelante las
soluciones para sus vecinos. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Casaretto).- Reitero a
todos los colegas diputados y diputadas de los distintos bloques, compañeros,
correligionarios, camaradas, que luego de escuchar a la última oradora
individual procederemos a la votación. De manera que en cinco minutos pasaremos
a la votación. Lo aclaro para que los diputados se vayan acercando a este
recinto y para que quienes están participando de esta sesión en forma remota se
vayan logueando para poder votar.
Tiene
la palabra la señora diputada Yutrovic, por Tierra
del Fuego.
Sra. Yutrovic.- Señor presidente: creo que todos y
todas coincidimos en el carácter dinamizador de la construcción por su impacto
positivo en las economías locales y en la generación de puestos de trabajo,
tanto directos como indirectos, por su transversalidad a todas las cadenas
productivas. En este sentido, este proyecto de ley propicia incentivos fiscales
que contribuyen a la recuperación de la actividad.
No nos
olvidemos que la construcción es el sustento de miles de empresas, de pymes, de
cuentapropistas; en definitiva, de las familias argentinas. El deterioro que
sufrió esta actividad entre 2016 y 2019 se agravó con la pandemia, pero ya
empezó a recuperarse. Esa caída se comenzó a revertir gracias a la fuerte
apuesta de nuestro gobierno nacional a través de la obra pública.
Cuando
nosotros pensamos que a pesar de la emergencia sanitaria tenemos un Estado
presente, que piensa políticas públicas para generar actividad económica,
también pensamos que esos incentivos no solo generan actividad económica y
empleo, sino que apuntan a disminuir el déficit habitacional y generar
condiciones más dignas para las viviendas sociales.
Aquí
quiero hacer un paréntesis, porque justamente en el día de mañana firmaremos un
convenio con la Secretaría de Integración Socio Urbana, a cargo de Fernanda
Miño, con un financiamiento muy importante ‑de 400 millones‑ que
nos va a permitir el saneamiento de dos asentamientos muy grandes que tenemos
en la provincia, específicamente en la ciudad de Ushuaia. Este financiamiento
se suma a otro casi idéntico de ENOHSA con el que podremos instalar agua y
cloacas. Eso es mejorar la calidad de vida de nuestro pueblo.
Volviendo
al proyecto, está claro que Argentina necesita generar condiciones que fomenten
las actividades estratégicas, como es la industria de la construcción, pero en
todo su potencial, es decir, no solamente en la obra pública, sino también en
la privada.
Tal
como han explicado varios de mis pares y los miembros informantes, este
proyecto propone un conjunto de medidas tributarias que permiten disminuir los
costos financieros y, de esa manera, incentivar a quienes tienen ahorros a que
inviertan en estas obras privadas y desarrollos inmobiliarios.
- Ocupa la Presidencia el señor presidente
de la Honorable Cámara, doctor Sergio Tomás Massa.
Sra. Yutrovic.- Se hablado mucho también sobre una de
las medidas de este proyecto, me refiero al llamado blanqueo, el sinceramiento
fiscal o como lo queramos llamar.
Seguramente lo podemos cuestionar o puede no
gustarnos, pero creo que hay que tener en cuenta que esta iniciativa ha logrado
consenso en las cámaras empresarias, en quienes representan a los trabajadores,
en el gobierno ‑que ha trabajado mucho la propuesta- y también, como se
ha manifestado acá, en muchos de los bloques que no son oficialistas. Dentro de
esta coyuntura y este contexto han considerado que era una herramienta efectiva
para poder lograr la reactivación de la construcción.
Me voy
a centrar en la parte positiva. Yo quiero ser optimista, este proyecto puede
resultar ser virtuoso porque establece claramente que la inversión se destina a
obras nuevas, a lo que llamamos de pozo, para que se traduzca efectivamente en
la creación de nuevos puestos de trabajo. Ha pasado en otras ocasiones que se
ha invertido en obras ya hechas y no se ha generado nuevo empleo. Así que en
eso me parece muy importante resaltarlo.
Aquí no
hay lugar para el blanqueo de dinero que esté depositado en paraísos fiscales
ni tampoco que sea sospechoso de actividades ilícitas o delictivas. También
existe una manifestación sobre el artículo 9°, que genera algunas dudas sobre
la coparticipación o no del impuesto.
Quiero
pedirles que se queden tranquilos, que basta ver cómo el presidente, sus
ministros y ministras recorren todo el país anunciando obras en todas y cada
una de las provincias sin distinciones partidarias.
Como
decimos en Tierra del Fuego: confiamos en Alberto porque es el porteño más
federal. Por ese lado sé que nuestro gobierno, el del Frente de Todos, apuesta
a un modelo de desarrollo federal y de largo plazo, y tiene bien en claro que
la industria de la construcción es un motor fundamental para seguir este camino
que reiniciamos el 10 de diciembre de 2019 para poner a la Argentina de pie con
Alberto y con Cristina, obviamente.
Por
estos motivos, adelanto mi acompañamiento a esto proyecto que, como dije antes,
ha logrado el consenso de casi todos los bloques, de los trabajadores y de las
cámaras empresarias. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia les recuerda que el diputado
Heller es el último orador y que posteriormente se pasará a votar, por lo tanto
solicita a los señores diputados que estén logueados.
Además,
por favor avisen al diputado Ritondo que vaya bajando, debido a que es coautor
del proyecto.
Tiene la palabra el señor diputado Casaretto, por Entre Ríos.
Sr. Casaretto.- Señor presidente: estamos tratando un
tema muy importante para la República Argentina, que tiene que ver con una ley
para promover la actividad de la construcción y, especialmente, la construcción
de viviendas.
Ayer
hemos trabajado tanto en la Comisión de Vivienda y Ordenamiento Urbano como en
la de Presupuesto y Hacienda y hemos arribado a un consenso mayoritario acerca
de este proyecto a votar, si bien no hay unanimidad, como han expresado algunos
colegas en sus exposiciones.
En
primer lugar, nosotros vemos que la Argentina tuvo una circunstancia muy
difícil en lo económico en 2018 y 2019 y una situación muy especial en 2020,
año que acaba de terminar, en relación con la pandemia. Así que tenemos que
pensar cómo estabilizar la economía nacional y cómo generar condiciones para
una reactivación económica.
Vemos
que hay algunos sectores, como el agropecuario, que no sufrió las consecuencias
más duras de la pandemia. Vemos que el sector industrial sufrió en marzo y en
abril, que desde mayo ha comenzado la recuperación y en alguna rama de la
actividad ya está en niveles superiores a febrero del año pasado, antes de la
pandemia.
Vemos algunas actividades, como la
construcción, que venía de años malos, que sufrió entre marzo y abril una caída
muy fuerte y que comenzó a revertirse a partir del mes de mayo. Desde el mes de
mayo ‑me refiero a junio, julio, agosto y septiembre- la construcción ha
crecido. Este es el registro de la actividad económica del INDEC. Hasta el mes
de diciembre se ha dado un crecimiento del 27 por ciento por sobre los niveles
de actividad de diciembre de 2019, antes de la pandemia. Esto nos llena de
satisfacción porque lo vemos en cada uno de los rincones de la Argentina, lo
veo en mi provincia de Entre Ríos, en la ciudad de Paraná, en Concordia, en
Gualeguaychú, la actividad de la construcción se dinamiza en parte por la
inversión pública y en parte por la privada.
Todo
esto se ve en el crecimiento de los puestos de trabajo y en la recuperación que
se está dando en los distintos lugares de la Argentina. También se nota en la
demanda de insumos en cada uno de los corralones de materiales de construcción
en toda la Argentina.
Vemos
pueblo por pueblo y ciudad por ciudad que hasta hay problemas de abastecimiento
de insumos básicos, como el cemento, los ladrillos, las aberturas, los pisos
cerámicos y demás; hay una demanda importante de distintos sectores de la
sociedad y estamos peleando para que tengan un adecuado abastecimiento en el
ritmo de crecimiento.
Sin
embargo, pese a que la Argentina está recuperándose, naturalmente hay sectores
que todavía tienen problemas, como el comercial o el de servicios que tienen
que ver con la circulación de la gente y también con los avances del plan de
vacunación que el gobierno está llevando adelante y hasta que no avancemos más,
vamos a continuar con dificultades. Por eso pensamos dar un apoyo o un
incentivo a aquellos sectores que tienen una mayor potencialidad de
crecimiento, que pueden crecer rápidamente, que pueden tomar mano de obra y
generar trabajo de una forma rápida en toda la Argentina.
Por eso
pensamos en esta ley, que fundamentalmente se basa en proyectos del Poder
Ejecutivo y en iniciativas que han presentado legisladores de los distintos
partidos políticos, y que tiene tres partes.
Por un
lado, están los incentivos, rebajas o diferimientos impositivos. Una segunda
parte tiene que ver con la regularización de activos en pesos y en dólares, un
blanqueo como se lo ha llamado, en relación con un destino específico, que es
la inversión en construcción privada nueva en la República Argentina. Esta es
una distinción frente a otros regímenes de regularización que permitían
blanquear, pero dejar los fondos en el exterior o en otros destinos.
Con
esta ley vamos a conseguir que vuelvan los capitales que se han ido de la
Argentina, pero para que sean destinados a la inversión en la economía real, y
que el dinero que está en nuestro país, pero que no forma parte de la economía
formal, sino que tal vez se lo tiene en efectivo en un cajón, debajo de un
colchón o adentro de una caja de seguridad, salga y sea colocado dentro de la
economía formal, vinculándolo a la inversión en obras privadas nuevas que
generen actividad económica adicional.
Entendemos,
además, que esta va a ser una herramienta rápida porque el proyecto prevé un
período determinado para la declaración de estos activos. Entonces, si quien
los declara dentro de los 60 días, tendrá que pagar un impuesto por única vez
del 5 por ciento; si se toma 30 días más
para hacerlo, tendrá que pagar el 10 por ciento, y si se toma 30 días más,
tendrá que pagar el 20 por ciento.
Hoy
estamos trabajando en la Cámara de Diputados, pero debo decir que entre ayer y
hoy he estado en contacto con la Cámara Argentina de la Construcción, con la
Cámara de la Construcción entrerriana, con los sindicatos vinculados a la
actividad económica, y claramente esto va a depender de que se generen
proyectos para invertir en cada rincón de la Argentina y de que se brinde
información clara. Asimismo, esta iniciativa será enviada a todos mis colegas
contadores de la delegación del Consejo de Ciencias Económicas para que puedan
asesorar a todos los que trabajan con ellos en la utilización de este mecanismo
de regularización.
A
través de esta ley estamos ofreciendo la posibilidad de blanquear capitales con
un destino productivo que genera actividad económica para beneficio de todos
los argentinos. Esto se lo planteamos al presidente de la Nación, al ministro
de Economía, y con usted, señor presidente, lo hemos hablado muchas veces y
compartido con diputados de distintos bloques. Por lo tanto, es una
satisfacción avanzar en este plano.
Por
último, en unos pocos segundos quisiera referirme a la tercera parte de esta
iniciativa, que tiene que ver con las obras en ejecución que se han paralizado
a lo largo de los años. Al respecto había una controversia en el sentido de
que, si la obra la hacía un gobierno, el siguiente no continuaba porque se
pondría a revisar si estaba bien o mal.
Así,
nos hemos encontrado con que hay proyectos de viviendas en ejecución, de 100,
200, 300 viviendas, en la provincia de Buenos Aires, en Entre Ríos y en otras
jurisdicciones, sobre los cuales el gobierno que llegaba decía: “Pará, que voy
a revisar”. Pero mientras revisaba pasaban los años, las obras se deterioraban,
finalmente no se concretaban y la gente se quedaba mirando la fiambrera.
En
conclusión, mediante estos tres artículos que se han acordado con la Secretaría
de Vivienda y Hábitat de la Nación vamos a estar en condiciones de terminar
esas obras y, en definitiva, de poder dar una solución habitacional a las miles
de personas que la necesitan. Este es un buen proyecto, generado por este
gobierno y consensuado con muchas fuerzas de la oposición, que va a incentivar
la inversión y la actividad económica. En definitiva, es una iniciativa que
sirve para la Argentina, y ese es nuestro objetivo.
Sr. Presidente (Massa).- Se va a votar nominalmente en
general el dictamen de las comisiones de Vivienda y Ordenamiento Urbano y de
Presupuesto y Hacienda recaído en el proyecto de ley del Poder Ejecutivo, por
el que se implementa un régimen destinado a promover las inversiones en la
construcción de obras privadas nuevas realizadas en el territorio de la
República Argentina.
- Mientras
se practica la votación nominal:
Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia informa que hay
15 señores diputados a los que el sistema no les ha registrado su voto. En
consecuencia, voy a tomar dichos votos de forma verbal.
Señora
diputada Ávila: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Bogdanich: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Brizuela del
Moral: ¿puede indicar el sentido de su voto?
Sr. Brizuela del Moral.- Mi voto es afirmativo, señor
presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Cipolini: ¿puede
indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Contigiani: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Felix: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señora diputada Frade: ¿puede
indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado González: ¿puede
indicar el sentido de su voto?
Sr. González.- Mi voto es afirmativo, señor
presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Kirchner: ¿puede
indicar el sentido de su voto?
Sr. Kirchner.- Mi voto es afirmativo, señor
presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señora diputada Landriscini: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- -Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Menna: ¿puede indicar el sentido de su voto?
Sr. Menna.- Mi voto es afirmativo, señor
presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Nanni: ¿puede indicar el sentido de su voto?
Sr. Nanni.- Mi voto es afirmativo, señor
presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señora diputada Russo: ¿puede
indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Schiavoni: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Torello: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Negri: ¿puede
indicar el sentido de su voto?
Sr. Negri.- Mi voto es afirmativo, señor
presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señora diputada Marziotta: ¿puede indicar el sentido de su voto?
Sra. Marziotta.- Mi voto es afirmativo, señor
presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Haré un último llamado a
quienes no expresaron su voto.
Señora
diputada Ávila: ¿puede indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr.
Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, la señora diputada Ávila es
considerada ausente en la votación.
Señor diputado Bogdanich: ¿cuál es el sentido de su
voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Bogdanich es considerado ausente a la hora de votar.
Señor
diputado Cipolini: ¿podría decir el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado
Cipolini es considerado ausente en el momento de la votación.
Señor
diputado Contigiani: ¿cuál es el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Contigiani es considerado ausente a la hora de votar.
Señor
diputado Felix: ¿podría decir el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Felix es considerado ausente en el momento de la votación.
Señora
diputada Frade: ¿cuál es el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, la señora diputada
Frade es considerada ausente a la hora de votar.
Señora
diputada Landriscini: ¿podría indicar el sentido de
su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, la señora diputada Landriscini es considerada ausente en el momento de la
votación.
Señora
diputada Russo: ¿cuál es el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, la señora diputada
Russo es considerada ausente a la hora de votar.
Sra. Marziotta.- Si el señor presidente me
permite, tuve un problema con el VPN y, al no figurar, no pude votar; pero
quisiera poder hacerlo.
Sr. Presidente (Massa).- Es decir que la señora diputada está
presente, pero no pudo “loguearse”. Frente a esta
situación, de acuerdo con el protocolo debe indicar el sentido de su voto para
que quede constancia.
Sra. Marziotta.- Mi voto es afirmativo,
señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Schiavoni:
¿cuál es el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Schiavoni es considerado ausente en el momento de la votación.
Señor
diputado Torello: ¿podría indicar el sentido de su
voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Torello es considerado ausente a la hora de votar.
Se
cierra la votación. Por Secretaría se dará cuenta del resultado.
Sr. Secretario (Cergnul).- Se han
registrado 205 votos afirmativos, 2 votos negativos y 11 abstenciones.[9]
Sr. Presidente (Massa).- En consideración en particular el título I,
que comprende el capítulo I, artículos 1° y 2°, y el capítulo II, que incluye
los artículos 3°, 4° y 5°.
Se va a
votar.
- Resulta afirmativa.
Sr. Presidente (Massa).- En consideración el título II, que comprende
un capítulo único que abarca los artículos 6° a 20.
Se va a
votar. A pedido del interbloque Federal, la votación se realizará nominalmente.
- Mientras
se practica la votación nominal:
Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia procederá a preguntar, de
manera verbal, el sentido de su voto a los doce diputados que, pese a estar
“logueados”, el sistema no ha podido registrar.
Señor
diputado Asseff: ¿podría indicar el sentido de su voto?
Sr. Asseff.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Por
otro lado, pido que en la versión taquigráfica quede constancia de que he
votado afirmativamente el proyecto de ley por el que se otorga un beneficio a
los familiares de los submarinistas del ARA San Juan. He tenido problemas de
conectividad durante toda la tarde y no he podido expresar el sentido de mi voto.
Sr. Presidente (Massa).- Quedará constancia, señor diputado.
Señora
diputada Ávila: ¿podría indicar el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, la señora diputada
Ávila es considerada ausente en el momento de la votación.
Señor
diputado Cipolini: ¿cuál es el sentido de su voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado
Cipolini es considerado ausente a la hora de votar.
Señor
diputado Contigiani: ¿podría indicar el sentido de su
voto?
- Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el señor diputado Contigiani es considerado ausente a la hora de votar.
Señora
diputada Figueroa: ¿cuál es el sentido de su voto?
Sra. Figueroa.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Igon:
¿podría indicar el sentido de su voto?
Sr. Igon.- Voto por la afirmativa,
señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Señora diputada Landriscini: ¿me puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, la
señora diputada Landriscini es considerada ausente a
la hora de votar.
Señor
diputado Medina: ¿me puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, el
señor diputado Medina es considerado ausente a la hora de votar.
Señor
diputado Rodríguez Saa: ¿me puede indicar el sentido
de su voto?
Sr. Rodríguez Saá.-
Señor presidente: mi voto es afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).- Señora diputada Russo: ¿me
puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, la
señora diputada Russo es considerada ausente a la hora de votar.
Señor
diputado Suárez Lastra: ¿me puede indicar el sentido de su voto?
Sr. Suárez Lastra.- Señor presidente: mi voto es
afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Torello: ¿me puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, el
señor diputado Torello es considerado ausente a la
hora de votar.
Se
cierra la votación. Por Secretaría se dará lectura del resultado.
Sr. Secretario (Cergnul).- Se
han registrado 199 votos por la afirmativa, 8 votos por la negativa y 13
abstenciones.[10] (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- En consideración el título
III, artículos 21, 22 y 23.
Se va a
votar.
-
Resulta
afirmativa.
Sr. Presidente (Massa).- En consideración el título IV,
que comprende los artículos 24, 25, 26 y 27.
Se va a
votar
-
Resulta
afirmativa.
Sr. Presidente (Massa).- Para la
incorporación de nuevos artículos, tiene la palabra el señor diputado Pastori, por Misiones.
Sr. Pastori.- Señor presidente: quiero proponer la
incorporación de dos artículos, tal como lo anticipamos ayer en la reunión de
comisión, que están en conocimiento del presidente de la Comisión de
Presupuesto y Hacienda.
El
primero se refiere a venta y reemplazo, que es una figura que se utiliza en el
impuesto a las ganancias para la tercera categoría, en el caso de empresas, en
el supuesto de la venta de un bien inmueble para reemplazarlo por otro bien
inmueble con destino a un proyecto inmobiliario, o sea que damos a esta figura
la congruencia necesaria respecto al proyecto que estamos tratando, que
pretende promover las actividades de la construcción.
El
beneficio consiste en que las ganancias que surgen de la venta del bien
inmueble se podrán afectar como costo en la compra del nuevo inmueble destinado
a un proyecto inmobiliario, siempre y cuando entre la venta y el reemplazo no
transcurra un plazo mayor de un año. Nos parece una interesante figura, que a
muchos inversores les podrá ser muy útil; no tiene un impacto fiscal
significativo y es un elemento más de incentivo que estamos proponiendo.
A
través de la segunda propuesta, se trata de beneficiar con un reconocimiento a
los contribuyentes cumplidores. Hoy se dijo ‑creo que fue el diputado
Quetglas‑ que todos los gobiernos de la democracia han tenido su blanqueo
y su moratoria, que siempre es la última pero que después aparece otro
blanqueo, otra moratoria. Y por ahí aparecen como tontos cumplidores aquellos
que en tiempo y forma presentan sus declaraciones juradas, pagan sus impuestos,
como el año pasado en que, a pesar de la pandemia, sin embargo están al día con
sus obligaciones, en desmedro de aquellos vivos incumplidores, que están
esperando la próxima moratoria o el próximo blanqueo.
Como ya
se hizo en el blanqueo de 2016 y en el de diciembre de 2019 y en la moratoria,
agregando un capítulo para contribuyentes cumplidores, y vuelvo a destacar aquí
el aporte de la Asociación Argentina de Contribuyentes en la figura de su
presidente, Jonás Torrico, que recientemente ha sido galardonada con un premio
de la Universidad de Pensilvania, Estados Unidos, en la categoría “Mejor Nuevo Think Tank” en el índice del año
2020, estamos proponiendo que aquellos contribuyentes cumplidores puedan ser
beneficiados con un bono de crédito fiscal que podrán aplicar al pago de otros
impuestos en un plazo de 24 meses. La forma de cálculo del monto del bono es
diferente según sean sociedades de capital, empresas, mipymes,
autónomos o monotributistas.
En el
supuesto caso que el oficialismo acepte acompañar esta idea, procedería a leer los
artículos que estamos proponiendo.
Para no
extender mi exposición, antes de continuar me gustaría saber si el oficialismo
va a aceptar esta modificación. En caso afirmativo, procedería leer cómo
quedarían redactados los artículos.
Sr. Presidente (Massa).- No lo voy a poner al diputado
Amaya en el compromiso de tener que responder al diputado Pastori.
Por lo tanto, solicito al diputado Heller que responda si aceptan o no la
incorporación de nuevos artículos.
Sr. Heller.- Señor presidente: adelanté esta tarde
mi respuesta al diputado Pastori, pero también él me
adelantó que, de todos modos, iba a plantearlo, así que jugamos con todas las
cartas sobre la mesa.
En el
primer caso, que el diputado propone aplicar el régimen de venta y reemplazo en
el impuesto a las ganancias para inmuebles objeto del régimen, se trata de una
propuesta de diferimiento del impuesto que no vemos necesaria porque el
proyecto, en el artículo 5°, ya prevé un diferimiento en el impuesto a las
ganancias o en el impuesto a la transferencia de inmuebles, según corresponda.
En
cuanto al otro tema que plantea, el caso de los beneficios para contribuyentes
cumplidores con los cuales se intentaría ‑según dice‑, equilibrar
los beneficios que el proyecto establece en el título II, que consiste en un
régimen para quienes declaren voluntariamente activos para la realización de
inversiones en construcción, voy a hacer dos consideraciones. Por un lado, en
el proyecto se establece un equilibrio razonable entre cumplidores y no
cumplidores ‑se lo dije ayer al diputado Pastori
y se lo reitero ahora‑ porque contiene beneficios en el impuesto a los
bienes personales, capítulo II del título I, para aquellos contribuyente que
habían declarado sus activos, beneficios que no alcanzan a los que entren en
esta declaración, es decir, para los blanqueadores o como los queramos llamar.
Es decir que existe el trato diferencial para los cumplidores con respecto a
los que están entrando en el régimen.
Por
otro lado, entre las ventajas que se proponen, hay beneficios en contribuciones
y aportes, cuestión que no tiene nada que ver con el régimen establecido, ya
que son tributos personales.
En ese
sentido, se creen más acordes los beneficios en un impuesto patrimonial como
bienes personales, como los que propone el proyecto, justamente en el capítulo
II del título I. Por lo tanto, no vamos a aceptar los cambios.
Ya que
estoy en el uso de la palabra, aprovecho para hacer referencia a otro asunto.
Acá se ha intentado comparar esto con blanqueos anteriores. Brevemente, quiero
mencionar dos diferencias fundamentales.
En el
último blanqueo que se llevó a cabo durante la gestión anterior, el grueso de
lo que se blanqueó sigue estando en el exterior porque ni siquiera tenían la
obligación de repatriar, es decir que fue un régimen con beneficios y con muy
pocas obligaciones, excepto el pago del canon.
En este
caso ‑y de paso le contesto a algún diputado que hizo el planteo al
respecto‑, esto no funciona si no se concreta la inversión. Alguien
planteó qué pasa si se les da el beneficio y se quedan con el beneficio y no
cumplen. A este beneficio se llega solamente cuando se materializa la inversión
en la construcción de nuevos edificios para vivienda, no para negocios
inmobiliarios de comprar o vender o cosas por el estilo. Hay que construir. Por
eso, además, se incorpora el capítulo III, que es de gran importancia, que
tiene que ver con rescatar 55.000 obras que están paradas y que son 55.000
opciones de vivienda que podrían haber estado habilitadas y usadas por familias
que las necesitan. Con este plan se pretende recuperar esas viviendas o esas
obras paralizadas y abandonadas, y convertirlas en unidades de vivienda
utilizables.
Quiero
decir que a nadie le gusta este tipo de exteriorizaciones como política, pero
para eso, más que soñar son contribuyentes cumplidores, tenemos que trabajar en
legislaciones que impidan la fuga y la evasión, para que después no tengan que
blanquear.
No
tenemos que asustarnos cuando queremos poner medidas que impidan que la plata
se vaya, que haya fuga de capitales y las invoquemos de manera descalificatoria
diciendo que eso coarta la libertad, la iniciativa y que ahuyenta las
inversiones. Para que no tengamos que recurrir a blanqueos periódicos, tenemos
que tener políticas activas que impidan, efectivamente, que la fuga se
produzca. Cuando controlemos la fuga, vamos a dejar de tener la necesidad de
hacer estos blanqueos que nos cuesta tanto aprobar.
Dicho eso, no aceptamos las
modificaciones y queremos que el proyecto quede tal cual fue presentado.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Pastori, tengo la obligación de
preguntarle si lo suyo es una propuesta, una sugerencia o una moción para poner
a votación.
Sr. Pastori.-
Señor presidente: intentaba hacer una moción, pero adelantada la negativa, no
tiene sentido formularla. Por lo tanto, le pido que prosiga con la votación de
los artículos que faltan.
Sr. Presidente
(Massa).- Tiene la palabra la señora diputada Moreau, por Buenos Aires.
Sra. Moreau.- Señor
presidente: justamente, iba a aclarar que nuestra bancada no iba a acompañar la
propuesta, pero no es necesario visto lo dicho por el diputado Pastori.
Sr. Presidente
(Massa).- Teniendo en cuenta que el artículo 28 es el de forma, queda
sancionado el proyecto de ley. [11]
Se comunicará al Honorable Senado. (Aplausos.)
- 35 -
Sr. Presidente
(Massa).- Quiero comunicar a todos los diputados y diputadas que se encuentran
presentes en las galerías ‑les agradecemos‑ el ministro de Ciencia,
Tecnología e Innovación Productiva, Roberto Salvarezza,
la presidenta del Conicet, Ana María Franchi, y el
subsecretario de Coordinación Institucional, Pablo Núñez, que, obviamente,
vienen a acompañar al Parlamento en el tratamiento del importante proyecto de
ley que vamos a poner en discusión a continuación. (Aplausos.)
Corresponde considerar el dictamen de
las comisiones de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva y de Presupuesto
y Hacienda -Orden del día 333-, recaído en el proyecto de ley de financiamiento
del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación.
AQUÍ
ORDEN DEL DÍA N° 333
Sr. Presidente
(Massa).- En consideración en general.
Tiene la palabra el diputado Riccardo, por San Luis.
Sr. Riccardo.-
Señor presidente: antes de informar el proyecto de ley de financiamiento del
Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, quiero destacar que hoy,
por una feliz coincidencia, es el Día Internacional de las Mujeres y las Niñas
en la Ciencia y que, además, una científica argentina, la doctora Alicia Dickenstein, de la Facultad de Ciencias Exactas de la UBA,
ha recibido un reconocimiento internacional por las mujeres en la ciencia. (Aplausos.) Por lo tanto, nos unimos en
felicitarla y en congratularnos como argentinos por este reconocimiento que es
extraordinario, que recibieron cinco mujeres en el mundo este año. Esto tiene
mucho que ver también con lo que discutimos y con la voluntad de esta ley.
-
Ocupa la Presidencia la señora presidenta de
la Comisión de Legislación General, doña Cecilia Moreau.
Sr. Riccardo.-
Señora presidenta: hoy nos convoca un debate que es tan necesario como urgente.
Este debate quedó sin resolver en la larga noche del 30 de noviembre y el 1° de
diciembre y creo que, afortunadamente, hoy podemos estar saldando esto que es
una expectativa muy importante de todo el sistema científico ‑en su
amplia expresión‑, tecnológico y de conocimiento de la Argentina. Se
trata nada más ni nada menos que establecer una política de financiamiento
sustantivo y progresivo para este sistema, cuya organización ya está en la ley
25.647, sancionada en septiembre de 2001.
Es necesario porque, como digo, es
imprescindible establecer previsibilidad y certezas que aseguren el
crecimiento, el fortalecimiento y la expansión progresiva de este sistema en
toda su complejidad. Y es urgente porque, quizás, como nunca antes, toda la
humanidad, todas las argentinas y argentinos estamos a la expectativa de los
logros de nuestras científicas y científicos para poder derrotar la pandemia
que nos está asolando. Me refiero a nuestros médicos, a quienes desarrollan
vacunas, tests, tratamientos, a los que están en la
primera línea y a los que están en la retaguardia. O sea que esto le ha
demostrado a toda la humanidad la necesidad de sostener, fortalecer y promover
la ciencia, la tecnología, la innovación y la transferencia de ese conocimiento
para una mejor calidad de vida de todos los ciudadanos de nuestra patria.
Esto fue el resultado de muchos meses
de construcción de consensos, de trabajo elaborado, que voy a pasar a resumir.
Creo que es un momento importante, que quizás nos podemos atrever a llamarlo
“histórico”, porque es la primera vez que vamos a sancionar una ley en la
Argentina que establezca previsibilidad. Además, se le suma la importancia de
que esto ha sido el producto del trabajo, del consenso político ‑eso le
da una calidad especial‑ de todos los bloques políticos, de los bloques
mayoritarios y de los bloques minoritarios.
El proyecto que vamos a votar se
construyó sobre la base de dos propuestas: el proyecto que me ha tocado
encabezar junto con otras diputadas y diputados de Juntos por el Cambio –como
Austin, Najul, Cipolini, Matzen, Bazze
y muchos otros más‑, al que posteriormente se sumó el encabezado por la
diputada Bernazza, que también fue suscripto por Masin, Mounier, Rauschenberger,
Caliva, Landriscini y otras
diputadas y diputados más.
Además de nuestras voluntades y de las
iniciativas de los bloques, es muy importante resaltar que en el medio del
desarrollo de la pandemia pudimos desarrollar un proyecto de consulta muy
amplio con todo el sistema científico y tecnológico argentino, con responsables
de las provincias, ex funcionarios del sistema científico-tecnológico,
tecnólogos, científicos de áreas de base, con la participación de decenas de
especialista que también representaban un colectivo de miles o cientos de miles
de actores.
Eso se hizo en forma participativa y
equilibrada. Estuvimos más de dos meses trabajando sobre esto y, además, sus
aportes fueron muy importantes para el dictamen final, porque todos esos
aportes aggiornaron el texto final, para que
tuviéramos un mejor proyecto que las iniciativas propias de los diputados. Por
eso, quiero agradecerles y reconocerlos a todos; ojalá tenga tiempo al final
para nombrarlos, pero de todos modos pido que los incluyamos en el Diario de
Sesiones la nómina de todos los participantes.
Partimos
de la ley vigente de Ciencia y Tecnología, sancionada en 2001 y extremadamente
oportuna en términos de diseño y planificación del Sistema Nacional de Ciencia
y Tecnología. Esa norma establece una articulación integral de todas las
partes, la necesidad de elaborar un plan nacional y la existencia del Gabinete
Científico Tecnológico, del Consejo Federal de Ciencia y Tecnología y del
Consejo Interinstitucional de Ciencia y Tecnología (CICYT).
Esta es
la ley que tenemos hace veinte años; sin embargo, para avanzar en la
consolidación del sistema es necesario no solo un aumento inmediato de la
fuente de financiamiento, sino también corregir los vaivenes que hemos tenido
durante décadas.
El
financiamiento del sistema científico argentino durante dos décadas a veces ha
mostrado picos de buen financiamiento, pero ha seguido los vaivenes de la
política y la economía, y un sistema científico-tecnológico no puede prosperar
con ese escenario de imprevisibilidad. Nos hemos mantenido en términos promedio
constantes durante mucho tiempo.
La
necesidad de mejorar el financiamiento del sistema ya había quedado reflejada
en las discusiones del Senado que se habían dado con el proyecto Perotti. Muchas de las cuestiones ‑si bien no
exactamente en la forma‑ fueron tenidas en cuenta. Es decir, todo este
proceso tuvo una amplia participación y consenso.
El
financiamiento actual nos coloca muy por debajo de los niveles de los países
centrales. Solemos escuchar que Israel destina el 4,54 por ciento del PBI a
ciencia, tecnología e innovación y Brasil el 1,26. Tenemos que revertir la imprevisibilidad
que existe en nuestro país al respecto, y esa es la decisión política que hemos
tomado ambos bloques políticos respecto a nuestros proyectos con la voluntad de
lograr un consenso.
Me
referiré al proyecto en líneas generales y luego pasaré a las particulares.
En la
iniciativa se estipulan una serie de metas y objetivos. Básicamente, el primer
objetivo es establecer una curva de financiamiento que nos lleve del actual
0,28 por ciento al 1 por ciento del PBI en 2032; es decir, el acuerdo es más
que triplicar el financiamiento actual en una década.
Si
consideramos que el PBI de la República Argentina hoy en día está en el orden
de los 420.000 o 430.000 millones de dólares, estamos hablando de alcanzar un
financiamiento anual de casi 4.000 o más de 4.000 millones de dólares para
2032, lo que sería, acumulado en una década, una inyección de prácticamente
15.000 a 20.000 millones de dólares de financiamiento, de sobrefinanciamiento
si los números del PBI fueran los actuales ‑por supuesto, siempre confiamos
en que la Argentina va a salir adelante‑; además, esto se irá
apalancando. Ese es el primer objetivo.
El
proyecto también tiene otros componentes muy importantes que quiero señalar.
Uno de ellos es la voluntad federal de la ley. Un 20 por ciento del incremento
anual, de las diferencias incrementales anuales, se destinarán a las
provincias, y el Consejo Federal de Ciencia y Tecnología cobrará un
protagonismo en la distribución de esos fondos para reducir las asimetrías en
el desarrollo federal de la ciencia y la tecnología.
Este
será un elemento muy importante para un desarrollo integral que a veces no se
da por el peso de los grandes centros urbanos. También nos deja un mandato
claro respecto de la inversión privada, porque debo aclarar que cuando hacemos
comparaciones entre nuestro presupuesto en términos del PBI y los números
internacionales, estos últimos incorporan la inversión pública y privada
acumulada.
Cuando
decimos que Alemania destina el 2,9 por ciento del PBI a ciencia, tecnología e innovación,
es en inversión pública y privada, y en todos esos casos la inversión privada
supera a la pública; es un 70 a 30 o 60 a 40. En la Argentina es al revés: la
industria privada invierte el 23 por ciento y el Estado hace el mayor esfuerzo.
Por lo
tanto, hay un mensaje muy claro respecto del consenso político de destinar el 1
por ciento del PBI en una década. Además, obviamente, más allá de la ley de
economía del conocimiento, nos quedará la tarea de diseñar -como la propia ley
lo dice- los instrumentos de ley, las iniciativas para apalancar el esfuerzo
público ‑que es el de los argentinos‑ en una Argentina en la que
tenemos muchas otras necesidades, pero donde dicho apalancamiento es necesario
para el desarrollo integral del sistema.
Hay
ejes transversales en la ley que son muy importantes, como la cuestión de
género. Tiene un claro mensaje respecto a la perspectiva de género en las
políticas de inclusión y no discriminación, a la necesidad de trabajar en la
mejora de los salarios de los científicos y las científicas y a la
jerarquización de las y los investigadores.
Se
prevé la optimización de todos los procesos burocráticos que aportan
transparencia para que el financiamiento genere rápidamente un impacto en el
sistema. Tenemos una deuda en la Argentina en este sentido: la matriz
productiva, la promoción de una mayor diversificación de la matriz productiva
que impacte en la generación de divisas sobre exportaciones con alto valor
agregado de conocimiento, también en el establecimiento de líneas de
financiamiento y proyectos en actividades prioritarias que impacten en el
sistema productivo.
Hay una
definición muy importante en el artículo 1°; allí se declara de interés
nacional el desarrollo del Sistema Nacional de Ciencia y Tecnología. Y este es un
claro mensaje de la importancia que este Congreso y la política argentina le da
al sistema científico-tecnológico en el desarrollo del futuro de nuestra
economía, de nuestra equidad, de la generación de trabajo.
Además,
hay un componente muy importante: los objetivos de esta ley deben incorporarse
a los objetivos del Plan Nacional de Ciencia y Tecnología. Como dije recién, la
ley marco del año 2001, la ley 25.647, crea los organismos ‑Gabinete
Tecnológico, Consejo Federal de Ciencia y Tecnología, CICYT‑, pero además
establece la obligación de crear las comisiones respectivas para desarrollar el
Plan Nacional de Ciencia y Tecnología, plan que debiera acompañar el
presupuesto nacional como un anexo todos los años.
Por
alguna razón hace veinte años tenemos una ley y no hemos podido potenciar este
virtuoso dispositivo. Este proyecto de ley fue el resultado de consensos
políticos. Me consta la voluntad del Poder Ejecutivo, y quiero aprovechar para
saludar al ministro Salvarezza, colega científico
aquí presente, que acabo de ver que llegó.
Quiero
hacer una observación importante.
Sra. Presidenta (Moreau).- Señor diputado: hago una breve
interrupción para aclararles a los diputados que me están reclamando que lo
dejé pasar cuatro minutos y medio en el uso de la palabra que no es que se
pasó, sino que no comparte el dictamen.
Luego
hará uso de la palabra la diputada Bernazza.
Sr. Riccardo.- Exactamente, soy miembro informante.
Sra. Presidenta (Moreau).- Claro, por eso tiene más minutos.
Sr. Riccardo.- Sin perjuicio del consenso político
que tiene este proyecto, estoy haciendo uso de la palabra como miembro
informante.
Por
supuesto, luego como autor del proyecto no haré uso de la palabra para agilizar
el tratamiento.
Decía
que está presente el ministro Salvarezza. Si bien
estamos en partidos políticos diferentes, compartimos el sistema científico
hace muchísimos años y ambos, en la responsabilidad que nos compete en estas
circunstancias, sabemos de la necesidad y la expectativa que tiene el sistema
científico de establecer una política de consenso, no una ley que se apruebe a
gusto de cada uno de los autores.
Y eso
ha sido posible quizás por esa buena coincidencia de conocer, desde distintas
perspectivas políticas, que esta debe ser una política de Estado. Estamos dando
un paso importante. Sabemos, como lo han expresado muchos colectivos de
investigadores, que a lo mejor hay más expectativas -hasta en nuestros
proyectos éramos más ambiciosos-, pero este es el resultado del consenso
político, y hablar de triplicar o más que triplicar el presupuesto en una
década en valores constantes en términos del PBI es un paso importante, sumado
al consenso que subyace.
A raíz
de ese consenso político, también podremos participar como bloques políticos en
la construcción del plan de ciencia y tecnología. Me consta que el ministerio
es consciente de la necesidad de elaborar este plan, de acompañarlo y de
sumarlo al proyecto de ley de presupuesto, tal como lo dispone la ley 25.647,
si bien aún no lo hemos hecho.
Necesitamos
potenciar la estructura de ese organismo siendo su financiamiento un componente
esencial para recuperar la credibilidad y estimular a los jóvenes
investigadores y a las jóvenes investigadoras que están allí. Como sabemos,
ellos dedican su vida al sueño de lograr desde el conocimiento, tener un país
más justo, con mejor calidad de trabajo y distribución de la riqueza. Todos
estos son objetivos que, en definitiva, consagra nuestra Constitución Nacional.
Por
último, quiero decir que el Congreso tendrá una participación decisiva.
Conforme al Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, el Poder
Ejecutivo deberá elevar un informe respecto de la ejecución del presupuesto,
las inversiones que implica y su distribución, así como también deberá informar
anualmente a las comisiones del Congreso.
Hemos
llegado a la conclusión de que una política que destina el uno por ciento del
PBI de la Argentina, es un esfuerzo del pueblo y debe ser abonada, aggiornada y
revisada permanente. De manera que el Congreso tendrá un rol muy importante en
su desarrollo porque anualmente podrá y deberá revisar y estudiar la ejecución
real del plan de ciencia y tecnología y de estos recursos tan importantes que
se volcarán al sistema.
El
sistema científico argentino ya nos ha dado muestras de su calidad; en efecto,
es un motivo de orgullo. De todas formas, esto no nos exime de las discusiones
que tendremos que dar para mejorar el funcionamiento interno del sistema. Pero
definitivamente confiamos -y la historia nos avala- en que vale la pena este
esfuerzo público.
Por
supuesto, siempre nos vienen a la memoria nuestros premios Nobel que nos han
legado el honor nacional alrededor del mundo: Adolfo Pérez Esquivel, Saavedra Lamas, Houssay,
Leloir y Milstein.
También
hay innumerables científicos contemporáneos que nuestro Congreso ha reconocido
en distintas ocasiones. Tengo una larga lista de ellos, quienes se despliegan
en la Argentina y en el mundo de una manera muy virtuosa.
Finalmente,
quiero mencionar y agradecer especialmente a todos los actores del sistema que
nos ayudaron a construir el texto definitivo de este proyecto de ley: Mario
Albornoz, Daniela Castro, Claudia D’Amico, Nicolás Lavagnino, Lucas Luchilo,
Fernando Stefani, Agustín Campero, Mauro Carrasco, Érica Hynes,
Luz Marina Lardone, Marcelo Rougier, Eugenia Rosales,
Graciela Ciccia, Alejandro Díaz y Leandro Linarello. Podríamos decir que todos ellos son argentinos
anónimos que volcaron lo mejor de sus experiencias para que hoy tengamos este
texto.
Asimismo,
merecen ser nombrados Miguel Ponce, Gustavo Lugones –colega rector de la
Universidad Nacional de Quilmes-, Raffaele Oriani,
Adrián Vojnov, Augusto Salvatto
-quien es un joven emprendedor-, Mario Pecheny,
Eduardo Dvorkin, Yamile Socolovsy,
Eduardo Matozo, Armando Fernández Guillermet,
Fernando Quintana, Guillermo Baudino y Susana Hernández. Todos ellos son
argentinos que también nos estimulan y vuelcan de manera generosa su
experiencia para que hoy podamos tener una iniciativa con consenso político,
consistencia y viabilidad política y económica.
Para
todos ellos, para los colegas científicos que están en la trinchera, en la
primera línea de la lucha contra el COVID-19, para esos jóvenes que están en
las universidades y que necesitan un estímulo y para los investigadores jóvenes
y los de todas las épocas, presentamos este proyecto de ley e invitamos a todos
los diputados y las diputadas a avalar este dictamen y darle sanción así pasa
al Senado y se convierte en ley muy pronto. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra la señora
diputada Bernazza, por Buenos Aires.
Sra. Bernazza.- Señora presidenta: con muchísima
alegría finalmente tratamos este dictamen único del proyecto de ley de
Financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación.
Como el
presidente de la comisión ya ha comentado y descripto cuestiones referidas al
propio proyecto, quiero hacer algunas puntualizaciones que me gustaría que
también estén presentes esta noche.
Por un
lado, este debate se está dando en el Día Internacional de la Mujer y de la
Niña en la Ciencia. Seguramente esto ha sido una casualidad, o quizás no lo
sea. Las mujeres, las niñas y las identidades diferentes estamos haciéndonos
cada vez más presentes en el mundo científico, cultural y, por supuesto, en las
legislaturas.
Por
otro lado, también celebramos el hecho de que este proyecto de ley se trate el
mismo día en que una matemática argentina, Alicia Dickenstein,
recibió el premio L’Oreal-Unesco “La mujer y la ciencia”.
Además,
quiero valorar el hecho de que lo estamos tratando el día en el que pedimos
justicia por Úrsula. Seguramente el enfoque de género que le hemos dado a este
proyecto trabajará a favor de todas las “Úrsulas” y
de todas las mujeres que padecen la violencia femicida
que definitivamente hay que desterrar de nuestra vida social.
Como
bien comentaba hace pocos días la presidenta del Conicet, Ana Franchi, este enfoque no solo buscará que haya más mujeres
en los equipos y en la dirección de los programas científicos y tecnológicos
sino que también revisará los temas y verá cuáles conviene estudiar desde un
enfoque situado en nuestro territorio y en nuestros problemas.
Hoy
Úrsula es una espina clavada en el centro de nuestra vida social. Nos duele a
todos y a todas y esto también tiene que ver con la ciencia y con la producción
científica. Este enfoque se encuentra presente en el proyecto en tratamiento.
Por
eso, también quiero agradecer a la Red Argentina de Género, Ciencia y
Tecnología, a Ana Franchi -a quien ya nombré-, a
Silvia Kochen, por supuesto a la queridísima Dora
Barrancos y a tantas científicas que fueron estudiando el rol de la mujer en la
ciencia. Ellas nos contaron que las mujeres científicas que avanzaron y
promovieron su actividad científica tuvieron que relegar otros aspectos de su
vida. Es por eso que trabajan arduamente por un feminismo científico. Eso está
presente esta noche.
A su
vez, celebramos la política porque hizo posible que hoy estemos tratando este
proyecto de ley. Así que muchísimas gracias a los integrantes de mi bloque por
acompañarme. Pude ver cómo varios otros diputados y diputadas se retiraban con
sus carteras en una noche tan especial; es por ello que quiero agradecerles por
su presencia.
También
agradezco al ministro y a su equipo por venir hoy. Esto representa poner
voluntad política al lado de un proyecto. Las conversaciones que tuvimos con el
Poder Ejecutivo y con todos los bloques fueron posibles gracias a esa voluntad
política puesta en acción.
Como
bien comentó el diputado Riccardo, se realizaron
varias reuniones informativas que habrían sido una suerte de entretenimiento
entre nosotros si no hubiera estado presente esta voluntad, si no hubiera
habido conversaciones con la cartera de Hacienda y Economía, por supuesto con
la cartera científica e, incluso, con el titular del Poder Ejecutivo. En
efecto, el presidente Alberto Fernández incorporó este asunto en el temario de
las sesiones extraordinarias.
Entonces,
esto es producto de la política y hay que celebrarlo ante tanto discurso “antipolítica” que anda dando vueltas.
También
se trata de un dictamen sin autores o, si se quiere, con miles de autores y
autoras. Hubo proyectos de varios legisladores y legisladoras y muchos
antecedentes.
Vale
reconocer el caso del proyecto que obtuvo sanción del Senado, del entonces
senador Omar Perotti; el proyecto del entonces
diputado Wado De Pedro, y los proyectos de Daniela
Castro. Todas esas iniciativas hicieron posible lo que sucede esta noche, y
fueron proyectos que durmieron el sueño de los justos en el mismo período en
que se degradaba el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación. Por eso,
celebro la voluntad política que hoy nos permitirá, si Dios quiere, y si todos
nosotros y nosotras queremos, sancionar este proyecto.
Es enorme
la actividad de científicos y científicas, que al mismo tiempo son militantes
de la ciencia. Roberto Salvarezza, quien hoy es
ministro y ha sido diputado, es un militante de la ciencia y tiene comprometida
su vida en ella. También puedo nombrar a Pablo Núñez, a Ana Franchi,
a Susana Mirassou -del INTA-, a Daniela Castro -quien ahora es secretaria de
Ciencia, Tecnología e Industria para la Defensa-, a Diego Hurtado, a Eduardo Dvorkin y a tantos otros, que con mucha injusticia no voy a
mencionar. Todos, ellos y ellas, militaron la ciencia.
Permítanme
hablar aquí de “militar la ciencia”, porque pareciera que son dos palabras que
no se pueden encontrar. Pero es esa militancia la que hace posible la sanción
de este proyecto de ley.
No
solamente a quienes nombré, sino también a todos los investigadores e
investigadoras, trabajadores y trabajadoras anónimos, vaya un enorme
agradecimiento por haber traído la letra del proyecto a este recinto. Gracias,
porque en definitiva esos miles de trabajadores y trabajadoras, esos miles de
militantes, son los verdaderos autores de esta iniciativa.
En ese
contexto, en este escenario, haré un comentario referido a la necesidad de
contar con una ciencia situada en nuestro territorio. Eso no significa no hacer
ciencias duras. Nosotros la hacemos en la periferia, pero no hacemos ciencia
periférica. La hacemos en la periferia de los poderes centrales, de los poderes
reales. Pero eso no nos amilana. Nosotros también estudiamos a fondo todo lo
que tiene que ver con las ciencias sociales, con las ciencias matemáticas, con
las ciencias biológicas.
Alguien
dijo -ese alguien es Arturo Jauretche- que lo nacional no es otra cosa que lo
universal visto con por nuestros propios ojos. Esto es lo que estamos pidiendo:
hacer ciencia desde nuestros propios ojos, desde nuestra propia mirada, desde
nuestra permanencia en el territorio, desde nuestro dolor, desde la tristeza
por el terremoto en San Juan y por la pandemia, desde el enorme dolor que nos
provocan Úrsula y Micaela, y tantas otras Úrsulas y
Micaelas. Desde ahí vamos a hacer ciencia, y la haremos en homenaje a Arturo
Jauretche y a nuestro pueblo.
Para
finalizar -perdónenme porque quizás esté equivocada-, quiero decir que no creo
en los consensos, sino en los acuerdos, en las negociaciones. Todos perdimos
algo para llegar a este dictamen único. Todos cedimos, ofrecimos algo y
negociamos. Entonces, permítanme también celebrar la actividad de negociación y
acuerdo, aun cuando llega el tiempo de perder alguna de nuestras ideas o propuestas.
En esto sí quiero hacer una valoración muy especial en cuanto al acercamiento
que pudo hacer el bloque de Juntos por el Cambio, especialmente el diputado Riccardo, a la hora de ceder alguna de sus propuestas para
llegar a este dictamen.
Gracias,
señor ministro, compañero querido. Muchísimas gracias por estar acá. Gracias,
Anita, por todo lo que hacés. Gracias a todos y a
todas. Gracias, señora presidenta, por este tiempo. (Aplausos prolongados.)
Sra. Presidenta (Moreau).- La señora diputada Graciela Landriscini me envió un mensaje para avisarme que tuvo
problemas de conexión. Si pudo reconectarse, le daremos la palabra.
Sra. Landriscini.- Señora presidenta: estoy aquí, pero no
sé si pueden verme.
Sra. Presidenta (Moreau).- Se la escucha bien, diputada, que es lo
importante en este momento.
Tiene
la palabra la señora diputada Landriscini, por Río
Negro.
Sra. Landriscini.- Señora presidenta: aprovecharé estos
pocos minutos para expresar la felicidad que significa haber construido estos
acuerdos, tanto con el proyecto del señor diputado Riccardo
como con el de la diputada Bernazza y todos quienes
los acompañaron, con quienes trabajamos desde el Frente de Todos, nuestro
bloque. Por supuesto que también los logramos con el apoyo del Ministerio de
Ciencia y Tecnología, luego de varias consultas, con idas y vueltas, y con la
participación de científicos sociales, tecnólogos y expositores que nos
visitaron en las reuniones informativas.
Quiero
resaltar también la importancia del contenido de esta iniciativa en el sentido
de que estamos generando un proyecto federal, que es lo que deseamos. Esto
garantizará la mejora en los recursos para centros de investigación, institutos
y también para el trabajo humano, es decir, para becarios, científicos,
tecnólogos, vinculadores. Lo importante, además, es que irá creciendo el
financiamiento como participación en el gasto público y en el producto bruto
interno, acompañando a la actividad privada y también a la actividad social que
tiene que ver con la ciencia, la práctica, la investigación etnográfica y la
investigación en territorio en un país que tiene que ser federal, donde la
generación y la utilización del conocimiento sirvan para la inclusión, para la
democratización en su acceso y para la incorporación de ese conocimiento en
innovación productiva de manera sistémica.
Necesitamos
desarrollar en el territorio nacional las actividades de base, así como también
las distintas cadenas de valor. Es importante, además, complementar esto con la
investigación en materia social, humana, de salud y de educación, y en las nuevas tecnologías que
están cambiando el mundo. Me refiero a las comunicaciones, a lo que significa
la industria 4.0 y a una cantidad de desarrollos que necesitan del financiamiento,
la estabilidad y la sustentabilidad del trabajo de los equipos científicos a lo
largo del tiempo.
Es
importante que esto funcione de manera sistémica con universidades, con centros
de investigación y con centros de aplicación a la industria, al agro y a los
recursos naturales, para generar valor en la producción que se pueda exportar
desde la Argentina al mundo.
Quiero
felicitar estas negociaciones, acuerdos y trabajo creativo que llega hoy a la
Cámara por medio de este proyecto, cuya idea es que pueda sostenerse en el
tiempo. Esto es lo importante, así como también lo es que se constituya un
modelo federal inclusivo, de dinamismo económico y de soberanía nacional en
cuanto a la ciencia, la tecnología y la producción.
Muchas
gracias a todos. Espero un acompañamiento pleno a este proyecto, junto con los
miembros y las miembras de la comisión.
Por
último, en el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, quiero
reconocer y felicitar a todas las mujeres científicas por el esfuerzo
permanente, por la perseverancia y por el crecimiento en el desarrollo de sus
trayectorias. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Moreau).- Tiene la palabra la señora diputada
Mounier, por Santa Fe.
Mounier.- Señora presidenta: creo que todos estamos contentos, porque
discutir una ley que dé sostenibilidad al financiamiento de la investigación es
algo muy alentador para nuestro país, más aún en estos momentos tan duros que
estamos viviendo.
Necesitamos
que el sistema productivo transforme la ciencia en innovación y que le agregue
valor a nuestros productos y servicios para generar empleo y lograr bienes y
servicios exportables.
Quiero
destacar dos cuestiones fundamentales que ya señalaron otros diputados
preopinantes y que para mí son muy importantes.
La
primera cuestión es que este proyecto asume el compromiso de federalizar
progresivamente el sistema científico-tecnológico para que tenga un mayor
impacto territorial, jerarquizando la investigación científico-tecnológica y
garantizando una inversión que llegue también a las provincias.
Muchos
funcionarios de los sectores científicos de las provincias participaron de las
actividades previas al dictamen y veían con muy buenos ojos esa cuestión, es
decir, que ese presupuesto que se va a ir incrementando pueda llegar a todas
las jurisdicciones de nuestro país,
fundamentalmente teniendo en cuenta a las zonas más desfavorecidas. Creo
que acá vamos a hacer un acto de justicia y eso es lo que esta ley intenta
modificar.
La
segunda cuestión, obviamente, es que este proyecto de ley tiene perspectiva de
género. Brega por la igualdad de las mujeres, de las disidencias y de las
diversidades en el Sistema de Ciencia y Tecnología. Ya lo dijeron aquí: hoy
estamos debatiendo justo en un día muy especial, me refiero al Día
Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.
Además,
una noticia muy importante que hemos recibido el año pasado es que en junio del
2020 se creó en el ámbito del Ministerio de Ciencia y Tecnología el Programa
Nacional por la Igualdad de Géneros. Este programa propone justamente promover la
igualdad de las mujeres en este ámbito, porque todas sabemos que muchas veces,
si bien podemos acceder a trabajos que tienen que ver con la ciencia y la
técnica, nos cuesta acceder a los espacios de decisión y de poder en estos
ámbitos, así como en tantos otros.
Quiero
destacar el trabajo de la Comisión de Ciencia y Tecnología e Innovación
Productiva que orgullosamente integro, quiero destacar el trabajo de todos sus
integrantes, especialmente de las autoridades. Aunque yo sé que no le gusta que
la nombremos, lo voy a hacer igual: compañera Claudia Bernazza,
estamos orgullosas de vos. Asimismo, quiero decirle al señor ministro y
compañero Roberto Salvarezza que hoy estamos
cumpliendo con nuestra palabra y nuestro compromiso. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra el diputado Alume Sbodio, por San Luis.
Sr. Alume
Sbodio.- Señora presidenta: en pocos días se cumplirá un año desde que
nuestro país, nuestra sociedad, comenzó una dura lucha contra una pandemia
mundial. Una pandemia que azotó con mucha crueldad a todo el mundo pero que
también, como toda crisis, dejó abierta entre sus cicatrices oportunidades de
crecimiento en cada una de las sociedades que afectó. Creo que esta pandemia va
a dejar un aprendizaje y un crecimiento social en nuestro país, como
seguramente también lo hará en otras sociedades del mundo.
En un
primer momento, en nuestro país apareció una oportunidad de crecimiento social
importante que significaba esa esperanza que teníamos los argentinos de que las
diferentes fuerzas políticas lograran los consensos para enfrentar en unidad
esta crisis que provoca la pandemia. Pero la verdad es que fue una oportunidad
perdida; a los pocos días de comenzar la lucha contra esta pandemia mundial, un
sector de la dirigencia política argentina vio en los costos sociales,
económicos, sanitarios y, por sobre todo, en los costos humanos de esta
pandemia una oportunidad para capitalizar políticamente. De esta manera,
perdimos una oportunista histórica de lograr un crecimiento social para la
historia argentina.
Sin
embargo, atravesar esta crisis permitió lograr un consenso social sobre las
fortalezas y debilidades de nuestro país, que creo que debemos aprovechar y no
desperdiciar.
Me
gustaría resaltar algunos consensos sociales que se han dado en materia de
educación, de salud y también del tema que hoy nos convoca. Me refiero a la
ciencia y tecnología, tema que atraviesa transversalmente a la salud y a la
educación argentina.
Esta
crisis nos permitió comprender como sociedad que la educación es el camino para
transformar nuestro país, que la escuela es el eje transversal donde debemos
dar la lucha por la igualdad en nuestro país.
En
materia de salud, nos permitió comprender que tanto la salud pública como la
salud privada están interconectadas, y tristemente nos permitió comprender que
la desinversión en materia de salud tiene costos altísimos para nuestra
sociedad.
Principalmente,
respecto de estos dos temas, permitió que la sociedad comprenda, de una vez y
para siempre, que en un presupuesto nacional una cosa es un gasto y otra una
inversión.
En
materia de ciencia y tecnología, por ejemplo, creo que esta crisis trajo
aparejado un crecimiento importantísimo a nivel social. La crisis social,
económica sanitaria y humana que se vivió en el mundo puso ante los ojos de la
sociedad mundial a la ciencia y la tecnología como uno de los capitales más
valiosos que puede tener cualquier país alrededor del mundo.
Ello se
vio en los equipos de la comunidad científica, en el esfuerzo mancomunado entre
las universidades y los centros de investigación y en los logros, que pasaron a
ser una noticia que se comentaba en la mesa de cada hogar de los argentinos.
Esto
permitió generar un gran crecimiento para nuestra sociedad. Desde ahora y para
siempre, los argentinos sabemos que la ciencia y la tecnología son un capital
que debemos defender. Desde ahora y para siempre, los argentinos comprendemos
que la ciencia y la tecnología son un eslabón imprescindible para el desarrollo
de nuestro país y, por lo tanto, para mejorar la calidad de vida de nuestro
pueblo.
Creo
que esto consolida socialmente el concepto de que los recursos establecidos por
el Estado para la ciencia y la tecnología son una inversión y pone un muro o da
por tierra la recurrente remisión al ajuste en materia de ciencia y tecnología
de aquellos que pretenden lograr la reducción del déficit fiscal mediante la
renuncia al desarrollo de la ciencia y la tecnología en nuestro país.
Celebro
que estemos tratando este proyecto de ley porque creo que es un paso más para
colocar a la ciencia y la tecnología como una política de Estado, lugar que no
debió haber abandonado nunca. ¿Por qué no debió haberlo abandonado nunca? Un
solo ejemplo: creo que poner a la ciencia y la tecnología como una política de
Estado es uno de los actos de mayor rebeldía frente a la división internacional
del trabajo, que quiere que la Argentina sea una productora de materias primas
sin valor agregado.
Creo
que la historia argentina ha demostrado que ha sido también uno de los
fundamentos por los cuales la vida democrática de la Argentina se ha
interrumpido en varias oportunidades, que se visibilizaba mediante el inmediato
abandono de cualquier programa en ciencia y tecnología que seguía al golpe
militar.
Rogelio
Frigerio, padre del desarrollismo argentino junto con Arturo Frondizi, escribió
en 1987 un libro que se llamaba “Ciencia, Tecnología y Futuro”. Señora
presidenta: permítame traer unos extractos de este libro al recinto, porque
creo que manifiesta con contundencia este concepto que nosotros hemos vertido
claramente en las reuniones de comisión y en diferentes sesiones. Me refiero a
que la ciencia y la tecnología como política de Estado fortalecen la soberanía
de nuestro país.
Dice
Rogelio Frigerio en este libro: “Que la ciencia y la tecnología sean una
política de Estado es uno de los instrumentos más importantes con los que
cuenta una Nación para poder dar el salto que supone pasar de ser un país
dependiente para tener un grado suficiente de autodeterminación, como para
poder regir su propio destino. La suerte de nuestro pueblo está atada a la
posibilidad de que logremos asegurar nuestro propio desarrollo, sin depender de
decisiones tomadas fuera de nuestras fronteras.
Para cerrar, Rogelio Frigerio agrega: “Un programa de desarrollo no es
tal sin su capítulo científico-tecnológico”.
De esta
manera, creo que la ciencia y la tecnología como política de Estado debería
formar parte de la plataforma de todas las fuerzas políticas. Creo que esto nos
hubiera permitido evitar que en el año 2018 se eliminara el Ministerio de
Ciencia y Tecnología, felizmente creado nuevamente por el presidente Alberto
Fernández como una de las primeras medidas de su gobierno.
Creo
que este proyecto es un eslabón que se suma a la decisión tomada desde que
asumió el Frente de Todos los destinos de los argentinos de volver a colocar a
la ciencia y la tecnología como una política de Estado, lugar que no debió
haber dejado nunca.
Por
eso, señora presidenta, voy a acompañar el presente proyecto que es un “Nunca
Más” al ajuste en ciencia y tecnología y un paso definitivo para lograr que la
ciencia y la tecnología sean una política de Estado para siempre en nuestro
país. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra la señora diputada Austin,
por Córdoba.
Sra. Austin.- Señora presidenta: saludo y agradezco la presencia
del ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación quien ha venido a acompañarnos
con parte de su equipo.
Indudablemente,
no puedo menos que coincidir con alguna de las cosas que se han dicho en cuanto
a que es un día de celebración el hecho de que podamos estar sancionando esta
ley en los próximos minutos, ya que creo que es un paso importante para la
Argentina.
No
quería traer esto a colación, pero me siento en la obligación de hacerlo a
partir de alguno de los comentarios que he escuchado recién.
Cuando
arrancamos la sesión, el diputado Negri, presidente de nuestro interbloque,
hizo un homenaje a Baglini y se refirió al teorema de Baglini. Es decir, la
relación que tienen las propuestas de las fuerzas políticas en función del
lugar en donde están situadas con respecto a las cercanías al poder.
Fíjense
que muchos de los que están acá y que integraban este cuerpo en el período
anterior, cuando el Senado sancionó la ley que impulsaba el senador Perotti, que aspiraba a llegar al 3 por ciento del PBI para
el año 2030, se rasgaban las vestiduras en la Comisión de Ciencia, Tecnología e
Innovación Productiva para que este reciento la aprobara sin más.
¿Qué
pasó? Cuando el diputado José Luis Riccardo asume la
presidencia de esa comisión en este nuevo período, una de las primeras
iniciativas que presenta es, justamente, la réplica de ese proyecto del senador
Perotti o uno muy parecido que buscaba llegar al 3
por ciento del PBI para el año 2030.
¿Cuál
fue ese proceso de negociación que se llevó adelante en la comisión, ese
proceso de acuerdo que se mencionaba? Bajarlo al 1 por ciento. Algo que el
oficialismo, en este momento, entendía que era razonable y posible para el
momento que vivía la Argentina.
Celebro
que hayamos podido encontrar un diálogo constructivo. Me hubiera gustado mucho
que, mientras la situación fue distinta en la Argentina, también hubiésemos
tenido una oposición con vocación de construir.
Alguno
podrá decir o pretender levantar la voz en el sentido de que eso no es así.
Pero la verdad es que nos hemos encontrado en este recinto -y las actas no
pueden mentir- acompañando y votando la gran mayoría de leyes casi por
unanimidad.
Dicho
esto, también digo que me parece importante que el oficialismo señale con
claridad cuál es el camino que busca. Para que realmente la ciencia y la
tecnología tenga un horizonte de largo plazo, no solamente hace falta la
inversión del sector público, también hace falta la inversión del sector
privado. Esto se observa cuando miramos los comparativos de los países que
muchas veces ponemos como ejemplo en el enorme desarrollo que han tenido en
términos de calidad humana a partir de la ciencia y la tecnología como impulso.
Y el vector que la ha impulsado, además de un Estado decidido -como hoy lo está
haciendo acá-, ha sido el sector privado.
Ese
sector privado es el que se ha visto confundido con este gobierno. Por ejemplo,
cuando se detuvo la aplicación de la Ley de Economía del Conocimiento. Por
ejemplo, cuando aquella iniciativa que tenía que ver con promover las
sociedades simplificadas o el ecosistema emprendedor, también se ponía en
cuestión.
Pensar
un programa de desarrollo basado en la ciencia y tecnología obliga a que
discutamos estas cosas.
Luego,
está la importancia de pensar el sistema de ciencia y tecnología como lo que
es, un sistema. Es decir, con distintas patas, donde el CONICET es una de
ellas, pero no solo la única. Tenemos que impulsar también el desarrollo, por
ejemplo, de la investigación en las universidades, algo que es absolutamente
clave y donde, en años pasados, aumentamos significativamente la inversión.
En los
pocos segundos que me quedan voy a expresar mi mensaje final. Nada de esto va a
ser posible si no lo hacemos de la mano de la educación. Lo hemos visto en
datos recientes cuando distintos conglomerados, como por ejemplo la Cámara
Argentina del Software, mostró que el 65 por ciento de los puestos de
programadores quedaron vacantes.
¿Por
qué ocurrió eso? Justamente, porque necesitamos potenciar desde el sistema
educativo el desarrollo de las capacidades que tengan que ver con la
programación, con la robótica, con la ciencia y la tecnología a lo largo de
todo el sistema.
Hay que
repensar también la formación de los trayectos educativos que permitan mirar
este mundo que está cambiando mucho más rápidamente de lo que se avizoraba.
Por
último, una reflexión en el día que hoy estamos celebrando, el Día
Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Este es un mensaje para el
Senado, que hace casi un año tiene un proyecto sancionado por esta Cámara por
unanimidad, con el fin de promover el desarrollo y la inclusión de las mujeres
en los organismos de ciencia y tecnología.
Las
mujeres representan, en el sistema científico argentino, el 60 por ciento de
los cargos de investigación. Sin embargo, solo el 10 por ciento está sentada en
los espacios de toma de decisiones. Cuando miramos las brechas en los cargos de
investigación ocurre lo mismo. Cuando observamos cuántas mujeres son rectoras,
más allá de que el enorme porcentaje de mujeres hoy está dominando una gran
cantidad de profesiones, pasa lo mismo.
Finalmente,
si no tenemos una mirada integral en donde la educación tenga un lugar clave,
esa brecha, esa inequidad, se va a seguir potenciando.
El Foro
Económico Mundial mostró que en las ocho profesiones que más rápido están
creciendo en el mundo, que están generando empleo y tienen que ver con la
ciencia, la tecnología, la innovación y la aceleración de la robótica, las
mujeres, de nuevo, nos estamos quedando atrás.
Por
ejemplo, en inteligencia artificial, apenas hay un 26 por ciento de mujeres, en
ingeniería hay un 15 por ciento y en informática un 12 por ciento.
Por
ello quiero pedirle al oficialismo, a los bloques que integran la oposición y a
quienes tienen la posibilidad desde el Poder Ejecutivo de dialogar con el
Senado, que cuando hablamos de una política integral, la demostremos en todas
estas leyes.
Para
hacer especial honor al día en el que estamos sancionando esta norma, le pido
al Senado que promueva la participación de las mujeres en la ciencia y la
tecnología, apruebe esa ley y, realmente, demos un paso en favor de la equidad,
el desarrollo y el crecimiento para toda la Argentina. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra el señor diputado Ferraro,
por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Ferraro.- Señora presidenta: en primer lugar, por supuesto,
adhiero y celebro el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia.
La ley
de financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación,
tenemos que enmarcarla, por supuesto, en un contexto donde se ha potenciado
producto de la pandemia del COVID-19. Pero, a su vez, también tiene que ver con
un contexto regional y mundial -lo he dicho en algunas otras sesiones donde me
ha tocado intervenir- sobre los dilemas que debemos enfrentar como Estados y
como sociedades en este mundo actual.
Quiero
remarcar esto porque pone en un lugar central a la ciencia, a la tecnología y a
la innovación para el desarrollo de nuestro país, pero también para un
posicionamiento en términos geopolíticos de lo que se juega en estos tiempos,
tanto en la región como en el mundo.
Por
supuesto que mundialmente no cabe ningún tipo de duda con respecto a la
importancia que tiene la ciencia en el desarrollo de nuestra sociedad y de la
economía, y principalmente en la generación de empleo genuino, que tiene que
ver con los alcances de la investigación, el desarrollo y la innovación.
Esto -y la Argentina no está exenta- se
enmarca en las tendencias y las demandas socioeconómicas, culturales y sociales
que tenemos que afrontar en la actualidad y, como decía al principio, en lo que
por lo menos nosotros consideramos que son los dilemas que vamos a tener que
enfrentar de aquí en adelante.
Estos dilemas también tienen que ver, como les decía, con definiciones geopolíticas y medioambientales, al tiempo que establecen claramente si se quiere el crecimiento de un país. Esta tendencia mundial incluye destinar mayores recursos a la ciencia y tecnología para que podamos fortalecer y consolidar el sistema de vinculación científico-tecnológico, entre otros tantos objetivos expresados y logrados en el proyecto en tratamiento.
Sabemos que distintos organismos internacionales ‑sin responsabilidades que achacarnos de un lado y del otro‑ han marcado que el sistema de ciencia y tecnología argentino no pudo sostener un crecimiento importante, mostrando, en el mejor de los casos, que podríamos evaluar un estancamiento que ronda el 0,5 por ciento.
Por supuesto que con el oficialismo actual tenemos diferencias, pero en este aspecto estamos encontrando coincidencias, y vamos a decirlo claro: esto nos marca muy por debajo de los niveles de los países centrales, e incluso de los emergentes. Israel es el país que mayor porcentaje destina a este rubro, por supuesto con recursos públicos estatales, pero también con una alianza estratégica con el sector privado. Esa inversión asciende a casi 4,5 por ciento del PBI.
Los vecinos de la región, por ejemplo Brasil, más que duplican nuestros esfuerzos en materia de ciencia, innovación, investigación y desarrollo. Para insertar la ciencia y la tecnología en la trama del desarrollo es preciso establecer un sistema de relaciones entre el gobierno, la estructura productiva y la infraestructura científico‑tecnológica. Pero también es necesario estimular las relaciones recíprocas que pueden existir entre las universidades, las empresas, los gobiernos y los centros de investigación, a fin de lograr ese desarrollo basado sobre un conocimiento que nos fortalezca como país.
Nosotros vamos a acompañar el proyecto, porque creemos que estamos generando una herramienta legislativa, como claramente se establece en el objetivo planteado, con la progresividad que se establece desde el 0,28 por ciento del PBI al 1 por ciento del 2032, así como acompañamos la cuestión del tope y la distribución con un criterio federal, tratando de buscar un mayor y mejor desarrollo para las zonas más desfavorecidas de nuestro país con una clara perspectiva de género e incorporando las diversidades.
El Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación es para nosotros una de las políticas centrales que debe tener nuestro país a largo plazo. ¿Para qué? Para poder tener esa capacidad estratégica para el desarrollo económico y ambiental. Esta política central va concatenada con otras dos políticas centrales, tal como lo decía la diputada Austin ‑y todos vamos a coincidir‑: la educación y las industrias del conocimiento. Si nosotros verdaderamente construimos políticas de Estado que pongan a la educación, a la ciencia y la tecnología, y a las industrias del conocimiento como políticas centrales, seguramente estaremos construyendo a mediano y largo plazo un país totalmente distinto para todos. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- La Presidencia solicita que por favor se cumplan los tiempos asignados para el uso de la palabra, porque todavía hay varios legisladoras anotados.
Tiene
la palabra el señor diputado Iglesias, por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Iglesias.- Señora presidenta: gracias por darme la palabra. Tarde, pero llegó. Disculpen por ser el aguafiestas de siempre, pero tengo una mala noticia: vamos a votar a favor, desde luego, y nos parece muy bien aumentar el presupuesto de ciencia y tecnología, pero la mala noticia es que el aumento de presupuesto no es una política de ciencia y tecnología, y mucho menos es una política de innovación tecnológica.
Me llama mucho la atención cómo maneja el oficialismo estas cosas. Siempre hablan de ciencia y tecnología, y la innovación tecnológica no existe. Muchachos: lean el nombre completo del Ministerio para ver que la ciencia y la tecnología tienen que estar al servicio de la innovación tecnológica. Disculpen que me ponga setentista, pero iba a la universidad en esa época y en esa época se decía que la ciencia y la educación tenían que estar al servicio del pueblo y el desarrollo del país. Una ciencia que sirve solamente para sí misma no es una política de ciencia y tecnología, y mucho menos de innovación productiva. Es una política clientelística, simplemente para aumentar los sueldos o los recursos de un determinado sector –muy merecido para la mayor parte de los científicos e investigadores‑, pero no tiene nada que ver con desarrollar el país. Una política de innovación productiva implica que haya productividad y competitividad, y la macroeconomía que ustedes han aplicado desde la época del IAPI hasta ahora ha ido siempre en el sentido contrario, pues ha sacado sistemáticamente a los sectores productivos que invierten y que producen con las tecnologías avanzadas para darle a los menos productivos. No hablo solamente del campo, que por supuesto produce en la vanguardia tecnológica del planeta y paga las tasas y los impuestos más altos, sino que hablo también de los productores de servicios, que durante nuestra gestión llegaron a exportar 6.000 millones de dólares en un solo año. Hablo también de los unicornios que escandalizan al señor Grabois, porque valen 100.000 millones de dólares, mientras que YPF ‑en manos del Estado, de la argentinización, la sarasa y el firulete nacional y popular‑ vale 1.400 millones de dólares.
Existe
un sesgo antiexportador. ¿Cuáles son los sectores
productivos? Los que pueden exportar valor. Si produzco algo de valor a un
precio de mercado razonable, no vendo solamente en el mercado argentino ‑que
es muy chico‑ sino que exporto. Por definición, los productivos, los
competitivos, los avanzados tecnológicamente, son los exportan.
Ustedes
han hecho exactamente lo contrario, y por eso tienen esos resultados. Hablan
mucho de la soberanía, de la independencia económica y de las tres banderas.
¿Qué paso con las exportaciones durante el período kirchnerista? En 2013
representaban el 25 por ciento del PBI; en 2015 eran el 10,7 por ciento, menos
de la mitad. Las exportaciones durante su gobierno cayeron a menos de la mitad.
¿Y las
importaciones? ¡Gran sorpresa! Las importaciones pasaron de 13.851.000 millones
de dólares en 2003, según cifras del INDEC, a 60.203.000 millones de dólares en
2015, es decir que se multiplicaron por cuatro, y fueron durante todo el
período entre el 12 y 14 por ciento superiores a las de los años 90. Otro
gobierno peronista, ¡mirá vos! Esto es sin tomar en
cuenta los precios, porque los precios de las importaciones argentinas se
duplicaron, así que el número está inflado. Cuando empezaron el gobierno tenían
diez puntos positivos en la balanza comercial respecto del PBI, pero terminaron
con déficit; se comieron diez puntos del PBI de exportaciones e importaciones.
Si vamos a las cantidades, las exportaciones aumentaron en todos esos doce años
de inversión y gasto un 4 por ciento. Las importaciones aumentaron y se
multiplicaron por tres en cantidad. ¿Cómo es esto, muchachos?
Lo que
quiero decir es que dato mata relato. Durante los cuatro años de nuestro
gobierno las exportaciones crecieron sistemáticamente. Durante los doce años de
su gobierno bajaron. ¿Cómo es que ustedes hablan de innovación productiva y
ciencia y tecnología y nos echan a la cara no sé qué cosa a nosotros? Lo que
estoy diciendo es que la restricción externa de la que tanto hablan es
simplemente una manera de poner la culpa afuera. Es algo externo, la culpa la
tiene el mundo. La restricción externa es atraso productivo argentino y éste lo
han provocado y lo siguen provocando ustedes…
Sra. Presidenta (Moreau).- Señor diputado: le pido por
favor que redondee su exposición.
Sr. Iglesias.- Ya voy redondeando. Le dio dos o tres
minutos a todo el mundo así que, apenas pueda, termino con mi discurso.
El
atraso productivo es una política macroeconómica que han tenido ustedes
permanentemente y que siguen teniendo. Por eso se van las empresas más
avanzadas y competitivas. Por eso se van nuestros profesionales jóvenes más
valiosos. No se van por la pandemia. No es que se dirigen hacia el planeta
Marte donde no hay pandemia. Se van a otros países donde hay pandemia, pero
existen gobiernos con políticas racionales y no con políticas macroeconómicas
que destruyen la ciencia, la tecnología y la innovación productiva.
Le
deseo al señor ministro una buena tarea. Nosotros hicimos nuestra parte.
Apoyamos el aumento del presupuesto. Espero que lo ayuden un poco las políticas
macroeconómicas de este gobierno, porque hasta ahora han ido exactamente en el
sentido contrario.
Sra. Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra la señora
diputada Carrizo, por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sra. Carrizo (A.C).-
Señora presidenta: voy a ser muy breve.
Voy a
aprovechar el mensaje para dirigirlo a quienes quiero que lo escuchen. Celebro
que se encuentre presente el señor ministro de Ciencia y Tecnología y la señora
presidenta del Conicet. Es un honor que compartan este logro con nosotros.
Considero que es un logro, pero incompleto. Digo que es incompleto porque antes
había otro consenso. Ese consenso que fue mencionado aquí y que representó un
enorme esfuerzo interpartidario, con mucho trabajo
del cual el actual ministro fue partícipe. Ese proyecto, con media sanción por
unanimidad, estimula la equidad en la carrera científica en Argentina.
Necesitamos que eso se apruebe.
¿Por
qué digo que es un logro incompleto? Porque es verdad que este proyecto tiene
un inciso en un artículo que propicia una distribución equitativa del dinero en
términos de género. Pero sabemos que no va a ocurrir porque no es lo mismo una
expresión de deseos que un derecho; no es lo mismo. No va a ocurrir que haya
una intención de una distribución equitativa. Esto no va a pasar porque hay una
enorme segregación vertical en la composición de los organismos de ciencia en
la Argentina.
Hoy, 11
de febrero, es el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Todo
el mundo escribió cosas vinculadas con dicha celebración en Twitter. Además,
felicitaron a nuestra científica, es decir, a la matemática Alicia Dickenstein. Yo no quiero que la feliciten tanto, sino que
la lean más. En todas las entrevistas que brindó manifestó esto. Se refirió al
sesgo de género. Ella fue directora de matemáticas en su escuela. Lo primero
que sintió fue una discriminación de género porque tenía que transitar la
maternidad. Pero no es solamente la economía del cuidado sino cómo y dónde
trabajamos.
Fui
investigadora del Conicet, ingresé a la carrera, a los tres años renuncié.
Cuando hicimos esa jornada con las científicas de Argentina -estaba Mario Pecheny y Dora Barrancos- decíamos que se trataba de una
carrera de obstáculos. No es la economía del cuidado sino dónde y cómo
trabajamos. En el mundo Covid aumentó en un 35 por ciento
la productividad de la ciencia en 25 países y bajó un 14 por ciento la
productividad en las mujeres. Mientras la productividad de la ciencia aumenta,
la productividad de las mujeres científicas baja. ¿Por qué? No es el encierro
de la economía del cuidado sino cómo y dónde trabajamos. Me refiero a las
universidades cerradas. No trabajamos bien. Se lo pido al señor ministro, y es
un mandato pues lo logramos y lo trabajamos en conjunto. También se lo digo a
la presidenta del Conicet: necesitamos una reglamentación que sea cuidada para
quienes experimentamos la ciencia. No puede ser para las mujeres científicas de
Argentina una carrera de obstáculos vivir y hacer ciencia.
Tener
una carrera científica no nos salva de la pauperización en la Argentina. La mayoría
trabajamos en las universidades pues éstas nos brindan un espacio de contención
y expansión que no siempre nos dan los organismos de ciencia y técnica en el
país. Necesitamos que el Conicet y el ministerio vean esas asimetrías.
Entonces, el dinero que hoy aspiramos a tener podrá ser distribuido con equidad
en la Argentina. Concretamente, aspiramos a eso, espero que eso ocurra en el
2021, y lo vamos a perseguir. (Aplausos.)
Sra. Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra la señora
diputada Camaño, por Buenos Aires.
Sra. Camaño.- Señora presidenta: un saludo a nuestro
ex colega y ahora ministro de Ciencia y Tecnología de la Nación y a todo el
equipo que lo acompaña.
Voy a
redundar en el concepto de considerar que nunca es más oportuno el tratamiento
de este viejo anhelo de muchos diputados y diputadas. Hoy, a instancias de la
Asamblea General de las Naciones Unidas, el mundo está conmemorando el Día
Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia como cada 11 de febrero.
Estaba
señalado en el calendario universal con el fin de lograr el acceso y la
participación plena y equitativa de la ciencia para las mujeres y las niñas.
Además, la idea es lograr la igualdad de género y el empoderamiento de las
mujeres en la ciencia. Queremos
incentivar a las niñas en el ingreso a las ciencias.
Este
día es un recordatorio de que las mujeres y las niñas desempeñan un papel
fundamental en las comunidades de ciencia y tecnología y que su participación
debe fortalecerse. Por tal motivo, acompaño el pedido que acaba de hacer la
diputada Carrizo con profundo ahínco.
La
carrera científica, en cualquiera de sus ramas, es sumamente compleja para las
mujeres. Esta es particularmente compleja. A pesar de esto, Argentina puede
presentar uno de los porcentajes más altos de participación de mujeres. Como
aquí se dijo, no se condice como en todas las actividades, pues se da el famoso
techo de cristal en todos lados. Se da la posibilidad de alcanzar la categoría
de investigador superior.
En
noviembre del año pasado, el 61,3 por ciento de los investigadores asistentes
eran mujeres. Pero tan sólo el 25 por ciento son investigadores superiores.
Argentina tiene 104 autoras de trabajos científicos por cada 100 hombres que
hacen la misma presentación. Estos números vienen a incrementar la brecha
económica entre hombres y mujeres. Quiero ponerle tiempo al reconocimiento, a
las abnegadas científicas e investigadoras de nuestro país que, con sus magros
sueldos y sus más magros recursos, llevan adelante su vocación en
investigaciones que son realmente importantes, más allá de que algunos
pretendan colocar en el frente de la escena la búsqueda de perfilar la
investigación científica hacia determinadas carreras que obviamente pueden ser
más rentables que otras.
La
Cámara de Diputados está en deuda con el tema que estamos tratando en el día de
hoy. En el año 2017 nos privamos de estudiar y aprobar la media sanción que
vino del Senado. Yo siempre digo que, cuando un proyecto viene del Senado, es
porque cuenta con la venia de las provincias, porque los senadores son
representantes de los Estados provinciales.
Del proyecto ya se dijo prácticamente todo. El
miembro informante fue sumamente puntilloso.
No obstante, yo quiero
señalar que con su implementación se avanza en un diseño de largo plazo, en
planificación, en cumplimiento de programas y proyectos plurianuales, que son
el gran tema en las políticas de ciencia y tecnología, a diferencia de otras
áreas.
La
formación de un investigador, llevar adelante una investigación o un
descubrimiento, requieren de un tiempo que excede largamente el año
presupuestario. Entonces, con proyectos como el que se presenta se puede
avanzar en esa plurianualidad que deben tener las
políticas de ciencia y tecnología.
Ahora
bien, la efectividad del plan que se traza en el proyecto está sujeta al
crecimiento económico que refleja el producto bruto interno, por lo que aquí
opera como una suerte de incentivo para la dirigencia política, para que se dé
este crecimiento que es tan esquivo en la República Argentina. Yo les recuerdo
a mis colegas que hace once años que la Argentina no crece y que acumula
pobres.
Es cierto
que en la regla de progresividad del proyecto hay dos esferas que son
interesantes, que son, en primer lugar, que en caso de que el producto bruto
interno sea menor de lo esperado, el presupuesto para ciencia y tecnología no
puede ser inferior al del año presupuestario anterior, y en segundo término,
que se faculta al jefe de Gabinete a reasignar recursos presupuestarios para
cumplir con los objetivos presupuestarios de progresividad.
Solo debo
hacer notar que en el artículo 11, cuando se habla de la participación del
sector privado, el proyecto prevé el dictado de normas específicas en un
aspecto concreto. Ahora bien, como dicho artículo no fija pautas objetivas, esa
futura legislación debería tomar como puntos objetivos algunos parámetros,
reglas o fines de la presente ley que se está promoviendo. Así se podrá lograr
que los regímenes sean congruentes, principalmente en inversión en
investigación más desarrollo.
En
resumen, si bien avanza y proclama un financiamiento progresivo y constante,
esta iniciativa también opera como una suerte de autorrestricción
o mandato que se impone el propio Congreso en ocasión de considerar y aprobar
anualmente cada presupuesto referido a ciencia y tecnología. Es un primer paso,
esto es innegable, y creo que lo tenemos que dar todos juntos. Así que vamos a
votar afirmativamente el proyecto y daremos ese primer paso para fijar un
objetivo mínimo -porque de esto se trata- en cuanto al presupuesto en materia
de ciencia y tecnología. Esperemos que podamos seguir avanzando.
Sra.
Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra la señora diputada Sapag, por Neuquén.
Sra. Sapag.- Señora presidenta:
saludo con muchísimo afecto al señor ministro, Roberto Salvarezza
–compañero en la Cámara de Diputados-, y a su equipo.
La
ciencia, la tecnología y la innovación, por su capacidad estratégica, son una
pieza fundamental para el desarrollo integral de nuestro país.
Sinceramente,
celebro que hoy, por fin, se convierta en política de Estado el establecimiento
del incremento progresivo y sostenido del presupuesto nacional destinado a esta
área.
Quiero
destacar el consenso logrado y el trabajo realizado por la Comisión de Ciencia,
Tecnología e Innovación Productiva para arribar a un texto común referido a un
tema tan importante para nuestro país, y hago votos –seguramente compartidos
con mis compañeros y compañeras- para que esta política pública sea sostenida a
largo plazo por todos los gobiernos.
Con esta
iniciativa se persigue el desarrollo de criterios federales para la promoción
de esta actividad. El incremento de la inversión en ciencia, tecnología e
innovación deberá destinarse, entre otros objetivos, a promover la
federalización del sistema científico tecnológico.
Se busca
incrementar la infraestructura y el equipamiento para potenciar las actividades
de investigación, desarrollo e innovación alentando su radicación en las
provincias argentinas.
En igual
sentido, la ley establece que la distribución de los fondos se debe hacer con
criterio federal, atendiendo a promover una reducción progresiva de las
asimetrías presentes en las distintas regiones del Sistema Nacional de Ciencia,
Tecnología e Innovación, para lo cual va a ser muy importante el trabajo que se
haga desde el Consejo Federal de Ciencia y Tecnología.
Es nuestro
deseo que se logre una equitativa distribución y de esa manera se aliente el
arraigo del sistema científico tecnológico en cada una de las provincias
argentinas, teniendo como referencia el Plan Nacional de Ciencia, Tecnología e
Innovación.
Señora
presidenta: la tecnología no solo contribuye al desarrollo de un país y de su
pueblo, sino que garantiza independencia y un mayor grado de autonomía para
países en vías de desarrollo como el nuestro, que encuentran en el conocimiento
y en las nuevas tecnologías de la comunicación y de la información aplicada a
las ciencias una oportunidad única para insertarnos con dignidad en el plano
internacional.
Por
supuesto que desde el Movimiento Popular Neuquino vamos a acompañar esta
iniciativa.
Sra.
Presidenta (Moreau).- Tiene la palabra el señor diputado del Caño, por Buenos Aires.
Sr. del
Caño.-
Señora presidenta: por supuesto, desde el Frente de Izquierda consideramos que
es urgente aumentar el presupuesto de la ciencia pública, y más aún si tenemos
en cuenta la situación de pandemia y los graves problemas ambientales que están
sufriendo la Argentina y el mundo.
Este
proyecto, sin embargo, tiene en el inciso h) del artículo 2° y en el artículo
11 un núcleo que plantea la injerencia del sector privado en la ciencia
pública. Por eso queremos hacer la propuesta de que sean eliminados del
proyecto para poder acompañarlo.
Aunque
estamos a favor de avanzar en el aumento progresivo y en aumentar los
porcentajes del PBI destinados a la ciencia pública, no podemos poner como
prioritarios los intereses de los sectores empresarios.
Para ser
claro, el artículo 11 menciona la transferencia de tecnología, generar
incentivos para la inversión del sector privado en investigación, desarrollo e
innovación, y estimular la generación de divisas mediante la exportación. Todo
esto forma parte un modelo científico donde el costo de la investigación es
socializado y afrontado por las instituciones públicas, pero al momento de
llegar a un producto comercializable, se entrega a manos privadas.
Esto lo
podemos ver ahora en algo que constituye realmente un escándalo, como es el
tema de la vacuna. En todo el mundo vemos que muchas de estas grandes
farmacéuticas que han recibido dinero, apoyo del Estado e inclusive todo
conocimiento científico acumulado por instituciones públicas, universidades,
etcétera, se lo han apropiado y lo que hacen es mantener el monopolio privado
de las patentes y de la propiedad intelectual de las vacunas. Esto hace que hoy
tengamos este reparto completamente cruel y desigual, con una enorme capacidad
ociosa en la producción de vacunas, porque si elimináramos las patentes se
podrían producir vacunas, por ejemplo, en la Argentina y en muchos otros
países, bajo el control del Estado, y hacer una vacunación mucho más rápida
para terminar con la terrible pandemia que afecta a todo el mundo.
Esto no es
privativo de lo que sucede con las vacunas, aunque es realmente elocuente y
cruel, e inclusive se lo hemos planteado al ministro Ginés González García
cuando el otro día concurrió a la Comisión de Acción Social y Salud Pública.
Lamentablemente,
desde el gobierno argentino no se ha planteado esta exigencia en todos los
organismos internacionales de los que forma parte y en los que ha tenido la
posibilidad de intervenir.
La
Argentina, decía, no es ajena a este modelo, que realiza concesiones al capital
privado mediante acuerdos con grandes empresas, como por ejemplo ‑nombro
algunas‑, Bioceres, Syngenta, Bayer, Glaxo o el
grupo Insud, que son algunas de estas empresas que
tienen convenios directamente con universidades u organismos estatales.
Entonces,
el proyecto tenía antecedentes, que explicaron el diputado Riccardo
y la diputada Bernazza, con un planteo más ambicioso
que el proyecto que termina presentándose aquí en lo que hace al aumento
progresivo del presupuesto de la ciencia pública. El proyecto del diputado Riccardo planteaba comenzar con un 0,60 por ciento del PBI
para presupuesto de ciencia y técnica en 2021 hasta llegar al 3 por ciento en
2035, mientras que el proyecto de la diputada Bernazza
pretendía comenzar con 0,30 en 2021 y llegar al 1 por ciento en 2030.
Este
proyecto plantea el 0,28 por ciento en 2021 para llegar al 1 por ciento recién
en 2032. Entonces acá se dice que hay una planificación a largo plazo, pero sin
embargo tenemos que decir que el presupuesto asignado en el corto plazo ‑inclusive
podríamos decir en todo el mandato de Alberto Fernández‑ va a mantener el
presupuesto de ciencia y técnica en los estándares que existieron bajo el
gobierno de Macri.
- Ocupa la Presidencia el señor presidente
de la Honorable Cámara, doctor Sergio Tomás Massa.
Sr. del Caño.- Todo esto, señor presidente, mientras
continúa la caída salarial de las trabajadoras y de los trabajadores de la
ciencia, así como del resto de los trabajadores y trabajadoras estatales, por
supuesto, y continúan con una enorme precarización laboral en el sector.
Entonces,
un aumento del 0,03 por ciento con respecto al año 2020 nos parece realmente
muy insuficiente. Nuestro planteo es muy claro: para que la ciencia pública se
ponga al servicio de las necesidades del pueblo, los fondos deben provenir de
las arcas estatales. Por eso, entre otras cosas, hemos planteado el desconocimiento
soberano y el no pago de esa deuda ilegal e ilegítima. Hoy justamente se votó
un proyecto para legitimar y legalizar ese fraude de la deuda de los últimos
años del gobierno de Mauricio Macri.
Por
eso, señor presidente, insisto en la propuesta de eliminar el inciso h) del
artículo 2° y el artículo 11, que plantea la injerencia del sector privado.
Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el señor
diputado Giordano.
Sr. Giordano.- Señor presidente: voy a dar una
opinión sobre este proyecto de ley, que dice que su objetivo es establecer el
incremento progresivo y sostenido del presupuesto nacional de ciencia y
tecnología.
En la
tabla que se acompaña en el informe se dice que hoy ese presupuesto es del 0,28
por ciento del PBI. Si uno saca la cuenta, el 0,28 por ciento de hoy es
alrededor de 1.200 millones de dólares -puede ser menos- y entonces, si uno lo
compara con los pagos de la deuda por 6.000 millones de dólares desde que
asumió el gobierno hasta hoy, la pregunta es cuál es la prioridad.
Volviendo
a la tablita y siguiendo con el mismo razonamiento de que esto es un aumento
del presupuesto de ciencia y tecnología en beneficio del país, en el año 2025
se calcula que la deuda externa va a insumir tres puntos del PBI, mientras que
para ciencia y tecnología se va a destinar 0,45 por ciento. Recién en once
años, en 2032, el presupuesto para ciencia y tecnología va a ser del 1 por
ciento.
¿Cómo
están hoy los trabajadores de ciencia tecnología? La agencia TSS, de la
Universidad Nacional de San Martín dice el 16 de junio de 2020: “Conicet:
salarios que atrasan. Los salarios de gran parte de los investigadores del
Conicet cayeron un 50 por ciento en los últimos cinco años”, y agrega que los
dos escalafones iniciales de la carrera de investigación ‑asistente y
adjunto‑ cobran entre 50.000 y 58.000 pesos. No hace mucho se publicó por
todos lados lo que una científica decía: que para su desarrollo científico y de
investigación tenía que comprar los insumos pagándolos de su propio bolsillo.
Sobre
la precarización laboral voy a dar un dato más reciente, del 26 de enero de
2021. Jóvenes Científicos y Precarizados ‑JCP‑, nucleados para
pelear por sus derechos, dice: “El nuevo año arrancó con política de ajuste
dentro del sector de ciencia y tecnología. Pese a que en enero pasado las
autoridades del Conicet anunciaron un aumento de las becas, hubo un recorte. El
total de las becas fue reducido en un 10 por ciento, de 3.050 en 2020 a 2.713
otorgadas este año”. Y señala que hubo una reducción porcentual en todas las
categorías de becas, donde el directorio del Conicet ‑no sé si hay aquí
alguna autoridad del Conicet, que recién se anunció que estaba presente‑
incumple con lo anunciado, tal como ocurrió con la continuidad laboral de 1.500
becaries durante la cuarentena.
Recién
el miembro informante nos decía que no se pueden comparar los porcentajes que
se invierten en Argentina y otros países porque en otras naciones se mezcla lo
privado y lo estatal. Ahora, no se puede hacer creer que en la Argentina se
invierte lo mismo que en otros países. Acá tengo los datos de 2016: Corea del
Sur, 4,23 por ciento; Suecia, 3,25; Japón, 3,14; Austria, 3,09. Señalo esto
porque muchas veces se dice que hay que mirar el mundo. Bueno, acá están los
datos de todos estos países, que superan 3 o 4 por ciento del PBI, mientras que
en la Argentina hoy está en 0,28. Entonces, los científicos en nuestro país
están empujados a emigrar.
¿Cuáles
son los modelos? El otro día el ministro Ginés González García estuvo dando un
informe. Si se habla del conocimiento, la vacuna de AstraZeneca se produce en
nuestro país; ahora, la vacuna no aparece. ¿Por qué? Porque está el grupo Insud que se la lleva; está el gran negocio con el magnate
Slim. Astrazeneca tiene la patente de la vacuna y la
vacuna no aparece. Y así ocurre con todo el conocimiento mundial.
Por
eso, el tema de la vacuna es la apropiación privada por parte de laboratorios
farmacéuticos del conocimiento, que muchas veces sacan de laboratorios públicos
y universidades públicas para el negocio capitalista de un grupo de cuatro o
cinco farmacéuticas a nivel mundial.
El
diputado Iglesias dice, si no escuché mal, que el gran modelo es MercadoLibre,
el emprendedor Galperín, con cien mil millones de
dólares. ¡Cien mil millones de dólares en el medio de la pandemia! En el medio
de la pandemia, la pobreza y demás, para el diputado Iglesias y Juntos por el
Cambio, el gran emprendedor es Galperín. ¡Qué
bárbaro, es el gran modelo del emprendedurismo, del negocio, etcétera!
Esos
dos modelos para nosotros no van. Para nosotros, el conocimiento, la ciencia,
la tecnología, deben ser puestos en función del desarrollo independiente del
país, no de la ganancia capitalista.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado: el señor
diputado Iglesias le solicita una interrupción.
Sr. Giordano.- Estoy terminando en unos segundos.
Después, que el diputado Iglesias diga lo que quiera.
Sr. Presidente (Massa).- Continúa en el uso de la
palabra el señor diputado Giordano.
Sr. Giordano.- Nosotros creemos que el presupuesto
para ciencia y tecnología debe ser aumentado de verdad, mucho más que el
insuficiente que se está planteando, y debe ser destinado al conocimiento y
desarrollo de un país independiente, no de los grandes negocios capitalistas.
Sr. Presidente (Massa).- A los efectos de facilitar el
desarrollo de la sesión, recuerden evitar hacer alusiones personales.
Como
fue aludido personalmente, tiene un minuto para responder el señor diputado
Iglesias.
Sr. Iglesias.- Necesito menos de un minuto, señor
presidente.
Yo le
recomiendo al diputado preopinante que le dé un vistazo a todos los países de
los que habló que tienen 3 o 4 por ciento de inversión en tecnología, a ver si
tienen economías socialistas o economías capitalistas desarrolladas. Y que
revise también el porcentaje de 3 o 4 por ciento, ahí va a encontrar qué
proporción pone el sector privado, ¿entiende?
Sr. Giordano.- Pido la palabra.
Sr. Presidente (Massa).- No fue aludido; el diputado
Iglesias dijo “preopinante”.
Tiene
la palabra la señora diputada Morales, por Misiones.
Sra. Morales.- Señor presidente: en primer lugar quiero saludar al
señor ministro Salvarezza, compañero de la comisión
de la que me tocó participar en los dos años anteriores. También quiero
agradecer a la diputada Claudia Bernazza por
permitirnos trabajar a todos independientemente de nuestro color político, y al
diputado José Luis Riccardo. La verdad es que se
trabaja muy bien. Realmente fue un placer.
Como
dijeron todos, creo que hoy es un día de celebración, un día histórico. Está
bueno que podamos sancionar una ley que tenga Ministerio, que tengamos memoria
y que aprendamos de los errores. Ojalá que no sea solo la pandemia la que nos
haga revalorizar lo que es un Ministerio de Ciencia y Tecnología.
Este
proyecto resulta vital para generar un progreso sostenible, donde el Estado
tiene que invertir sus recursos de forma progresiva para financiar, mantener y
fortalecer la ciencia, la tecnología y la innovación.
Cuando
hablamos de ciencia y tecnología, es obvio que también hablamos de innovación,
considerándola un espacio del cual depende el futuro de nuestro país. Sin
Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación no hay futuro; no podemos hablar
de un futuro, de un país, de nuestros jóvenes.
La importancia de la ciencia y la tecnología
se ve reflejada como elemento clave para valorar y optimizar el uso de los
bienes, productos y servicios que posee un país. A su vez, otorga a los
ciudadanos mayores competencias ‑no solamente a los científicos sino a
todos‑ para enfrentar los cambios culturales y para ser más conscientes
en sus decisiones, que pueden promover bienestar social, respeto por el otro e
igualdad. O sea que todos los ciudadanos nos vemos beneficiados con la ciencia
y la tecnología.
Como
Estado debemos diseñar ‑y es nuestra obligación‑ políticas
estratégicas que permitan una mayor valoración de la ciencia y la tecnología,
con su respectiva apropiación, lo cual permitiría empoderar a la sociedad
argentina a través del conocimiento, la aplicación y la toma de decisiones
basadas en evidencias científico‑técnicas que tienen efectos en el
desarrollo del crecimiento económico y el bienestar de la población en el país.
Más
allá de ser diputada, hablo con la certificación que me da ser licenciada en
Informática y haber hecho un doctorado en Educación, porque obviamente esto
está vinculado estrechamente con la educación. Es imposible pensar ciencia,
tecnología e innovación sin educación. Es imposible. No entra en mi cabeza.
Dado
que en esta banca represento a todos los misioneros y misioneras, quiero
contarles que mi provincia está invirtiendo gracias a un Estado nacional
presente y federal. Y aquí quiero detenerme a leer el artículo 3°, que habla de
la federalización de los recursos, que lleguen de manera equitativa, que se pueda
desarrollar y diversificar la matriz productiva mediante el impulso de
políticas de innovación sustentable, etcétera. Sinceramente, es riquísimo; no
me canso de leerlo.
El
avance tecnológico lo entendimos primero con recursos provinciales, y ahora acompañados
por un Estado nacional que nos está permitiendo llevar adelante un sueño, como
quizás muchos piensan. Muchos se deben preguntar: ¿qué va a hacer un Silicon en
Misiones? Yo les digo que lo que va a hacer es sumar a todo esto. Y el ministro
Salvarezza lo sabe, porque nos ha acompañado en
varios emprendimientos y desarrollos que viene haciendo la provincia de la mano
de la educación.
El
avance tecnológico distingue la enseñanza misionera ahora en el Silicon, porque
no es solamente la formación de estos talentos, la formación de estos jóvenes
que ya terminaron sus ciclos primario y secundario, sino también este
ecosistema. Y no puedo dejar de mencionar la excelente ley de economía del
conocimiento, porque para mí todo tiene vinculación con todo y es un gran
ecosistema. El avance tecnológico hace que podamos recrear este ecosistema en
economía del conocimiento.
La
verdad es que me emociona profundamente poder estar hablando de ciencia y
tecnología y de un presupuesto asignado para ello, y saber que mi provincia
también se verá reflejada e involucrada cuando esta norma se convierta en ley.
No
tengo más que decirles. Simplemente recordarles que un país sin ciencia, sin
tecnología, sin innovación y sin educación nunca podrá salir adelante; y
tampoco lo podrá hacer solamente con un presupuesto, sino con acciones certeras
que vayan a la federalización de un país. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la señora diputada
Figueroa, por Salta.
Sra. Figueroa.- Señor presidente: la verdad es que como parte
integrante de la comisión celebro este proyecto. Realmente me siento honrada.
También celebro haber podido encontrar un espacio importante para el debate,
para el consenso.
Hoy con
este proyecto no solo estamos sentando las bases necesarias para establecer el
desarrollo estratégico de la ciencia en nuestro país, sino que estamos dando un
mensaje muy importante a los argentinos y argentinas. A lavar los platos no
volvemos más. Solamente lo vamos a hacer después de comer. (Risas.)
A
través de este proyecto también estamos otorgando al desarrollo tecnológico un
carácter prioritario y estratégico. Es preciso recordar que este proyecto no
surge solamente del trabajo de una comisión ‑como bien lo remarcó la
compañera Bernazza‑ sino de un proyecto
político y social que a través de la conducción de la expresidenta Cristina
Fernández de Kirchner, allá por el año 2007, le otorgó rango ministerial a la
política pública vinculada con el desarrollo científico en nuestro país.
El
aumento paulatino que plantea esta norma en el presupuesto es totalmente
coherente y tiene que ver, sobre todo, con una racionalidad: teniendo en cuenta
la profunda crisis económica en la que estábamos sumidos en nuestro país en
años anteriores, agudizada por la pandemia.
Con
este proyecto no solamente estamos fortaleciendo el sistema científico, con ese
financiamiento escalonado y paulatino, sino también a través de una apuesta
estratégica al desarrollo federal, ese federalismo que muchos colegas ya
nombraron y que a nosotros, desde Salta, nos parece sumamente interesante.
En
estos meses nos ha tocado formular proyectos vinculados con el agua, porque ‑como
ustedes saben‑ en departamentos completos de nuestra provincia hay muchas
enfermedades por la falta de agua, y hemos encontrado un solo ingeniero
hidráulico en toda la provincia. Entonces, ¿cómo no vamos a celebrar este
proyecto, que habla de federalismo y dice que las provincias tendrán acceso a
un presupuesto estable, continuo y escalonado para desarrollar o para formar ‑como
decían también los colegas‑ esa relación íntima entre la educación, la
formación académica y el desarrollo de la ciencia, la tecnología y la
innovación?
Entonces,
este hecho de potenciar las actividades de investigación, de desarrollo y de
innovación en las provincias es sumamente importante, especialmente para
nosotros, porque está hablando de una perspectiva inclusiva y popular.
También
debemos mencionar otro ingrediente o el valor agregado de este proyecto, que es
la visión de género, el tema de la equidad, el tema de las mujeres, las
disidencias, la inclusión, la importancia o la relevancia de ir sumándolas y
reconociéndolas, no solamente como investigadoras sino también en los puestos
de decisión más importantes, donde debemos estar las mujeres y también las
disidencias.
Necesitamos
una ciencia y una tecnología para investigar el dengue, el Hantavirus, la
desnutrición, la contaminación y su incidencia en la salud humana.
Por todo lo expuesto, celebro fuertemente este
proyecto. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la señora diputada Matzen, por Río Negro.
Sra. Matzen.- Señor presidente: una de las mejores maneras de
otorgar valor a la actividad económica es desde el conocimiento y la
innovación, e indudablemente esto está atado a la ciencia y a la tecnología.
Por eso
quiero también celebrar que estemos tratando este proyecto y reconocer el
trabajo de la Comisión de Ciencia y Tecnología, de todos los partidos políticos
que la componen y en particular de su presidente, quien presentó un proyecto
que obviamente era mucho más ambicioso que el que estamos aprobando o queriendo
aprobar en este recinto a través del consenso, del diálogo y de la escucha. Es
un proyecto con el que nos comprometemos a cumplir una meta posible.
Quiero
decir que la tarea que se llevó adelante en forma trasversal no fue solamente
la de los partidos políticos, que de alguna manera representa cada uno de los
diputados de esa comisión y de las comisiones que intervinieron, sino también
de científicos y de organizaciones que participaron en las reuniones de
comisión. Por lo tanto, este es un logro conjunto de la sociedad científica con
los representantes del pueblo.
Por eso
me apena que en vez de estar celebrando que hemos logrado cerrar la grieta un
ratito, consensuar, escucharnos para garantizarle a la ciencia y a la
tecnología de nuestro país un mínimo posible, un compromiso que le da certeza,
que le da previsibilidad, escucho algunos discursos sobre quién se lleva la
bandera o la gloria de lo que se está trabajando y tratando acá.
En cada
una de las participaciones de esos científicos y organizaciones era reiterativo
el pedido de la necesidad de financiamiento para la ciencia y la tecnología en
la Argentina, que permitiera garantizar la continuidad y la sustentabilidad de
todo el conjunto.
Sin
dudas, el Estado a través del financiamiento del sector público es el impulsor
estratégico para que desde este financiamiento se pueda fomentar la inversión y
también motivar al emprendedor privado y a los institutos de investigaciones
que se encuentran en los distintos subsectores. Este proyecto es un gran avance
en ese sentido.
Quiero
mencionar algunas cosas que me parecen importante destacar. La primera es que
estamos ante una ley marco, como decía antes, que le da sustento económico y
previsibilidad. La otra cuestión que quiero remarcar es el federalismo que se
pone en énfasis cuando se habla de que un 20 por ciento obligatoriamente tiene
que estar destinado a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires,
también con una mirada de generar un crecimiento armónico en las distintas
regiones de nuestro país.
En el
proyecto original del cual soy coautora junto con el señor diputado Riccardo se aspiraba llegar al 3 por ciento en un período
de tiempo, es decir, en 2035. Vamos a lograr el uno por ciento; es una meta que
nos obligamos a cumplir y ese ya es un paso importante. Este proyecto reúne la
posibilidad de ir progresivamente hacia esa meta y es verdad que arrancamos de
un piso muy bajo; por eso también se entiende que esa progresividad no sea del
ritmo que todos quisiéramos, pero lo cierto es que le da sustentabilidad.
El
proyecto también habla de equidad, del rol de la mujer en la ciencia. Hoy vamos
a decir que no es una casualidad sino una consecuencia de los tiempos que
vivimos, estamos coincidentemente tratando este proyecto cuando se conmemora el
Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia y tenemos que seguir
avanzando en este aspecto. Por eso coincido con la diputada Carrizo en el sentido
de que es necesario el compromiso del gobierno a través del Ministerio y
celebro que esté el ministro presente para escuchar cada una de nuestras
alocuciones.
Damos un paso adelante pero también nos queda
el compromiso de sostener este impulso, de motivar a las provincias, para que
también le den volumen al presupuesto que le va a otorgar el gobierno nacional
a la ciencia y a la tecnología, buscando que las provincias se comprometan a
generar un piso mínimo para que donde existe la ciencia y la tecnología ‑y
donde no, también- puedan darle volumen a este presupuesto que estamos
intentando sostener.
La verdad es que estoy contenta, aunque me
apena haber escuchado que en todos los temas se sostiene la grieta. En este
proyecto en particular podríamos resaltar que cuando nos proponemos, podemos
construir alternativas que le den soluciones a los ciudadanos y a las
ciudadanas de nuestro país, en especial entendiendo que la ciencia y la
tecnología atraviesan todas las áreas de los gobiernos y que todos los gobiernos
hasta acá trasversalmente han tenido más o menos responsabilidad en que todavía
no tengamos una herramienta como la que estamos aprobando hoy.
Para
finalizar, me gustaría remarcar las palabras que se expresaron por parte de la
ONU y de la UNESCO en relación al día que estamos conmemorando. Permítame,
señor presidente, leer lo que se anunciaba en razón de este año. “Para que las
políticas y los programas en materia de igualdad de género sean realmente
transformadores, deben eliminarse los estereotipos de género mediante la
educación, cambiar las normas sociales, promover modelos positivos de mujeres
científicas y sensibilizar a las más altas instancias de adopción de
decisiones. Tenemos que lograr no solo que las mujeres y las niñas participen
en los ámbitos de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, sino que
además estén capacitadas para dirigir e innovar, y que cuenten con el apoyo de
políticas laborales y culturales institucionales que garanticen su seguridad,
tengan en cuenta sus necesidades como madres y las incentiven para avanzar y
prosperar en esas carreras.”
Creo
que ese es el compromiso que debemos asumir, más allá de otorgar financiamiento
y de generar los ámbitos necesarios para que tengamos mayor equidad, mayor
igualdad de oportunidades y para que realmente la ciencia y la tecnología sean
prioridad en nuestro país. (Aplausos.)
Sr.
Presidente (Massa).- Tiene la
palabra el señor diputado Yedlin, por Tucumán. No me
quiero reír mucho porque después los diarios ponen que me río incontrolablemente.
Sr. Yedlin.- Señor presidente: reír hace bien.
Quiero
agradecer al ministro y a su equipo, que hoy nos acompaña.
Vamos a
votar la aprobación en esta Cámara de un proyecto que es la expresión de la
decisión política, de una política de Estado de nuestro gobierno, que viene a
garantizar un aumento progresivo en el presupuesto para ciencia y técnica en
forma anual hasta llegar al uno por ciento del producto bruto, garantizando
además una distribución federal de estos recursos.
Quiero
usar estos minutos que me conceden para no buscar culpas de por qué la
Argentina, que ha tenido siempre un semillero de científicos destacados, en
gran proporción surgidos de las universidades públicas y gratuitas, no ha
destinado en general o en la historia recursos suficientes para la ciencia,
técnica e innovación en el sector público ni en el sector privado.
Hoy que
la voluntad política se expresa a través de la aprobación de este proyecto de
ley, deseo aprovechar simplemente para felicitar a los científicos argentinos
que durante este año pandémico han logrado avances y aciertos importantes.
Simplemente
voy a pedir permiso para leer una pequeña lista. Este no es un listado
exhaustivo ni intenta serlo, sino que incluye a científicos del sector público
y privado pero en relación directa con lo que nos pasó este año.
Primero,
el acierto de haber creado la Unidad Coronavirus que desde mediados de marzo de
2020 se encuentra en funcionamiento y que ha integrado al Ministerio de
Ciencia, el Conicet y la Agencia Nacional de Promoción en la Investigación y el
Desarrollo Productivo y la Innovación, cuyo objetivo es acercar a la
Presidencia de la Nación y a los ministros los avances en ciencia que han
tenido que ver con la pandemia.
Quiero felicitar al Instituto Malbrán y
a su equipo porque en abril de 2020 y a un mes de haber llegado el primer caso
a la Argentina, apenas tres meses después de que el primer lugar del mundo
secuenció el genoma viral, pudo secuenciar el coronavirus.
Este
logro del Servicio de Virosis Respiratorias y de la Plataforma de Genómica y
Bioinformática permitió asegurar la calidad del diagnóstico y contribuir al
desarrollo de una fórmula vacunal representativa de las cepas circulantes en
nuestro lugar.
Quiero
felicitar a varias compañías, públicas y privadas, que han desarrollado tests rápidos
para diagnóstico, algunos de los cuales ya han sido aprobados por la ANMAT y
otros se encuentran en proceso de aprobación. Por ejemplo, el desarrollado por Biocientifica S.A., el desarrollado por Chemtest
Argentina S.A., el desarrollado por Neokit S.A., el
desarrollado por Wiener Laboratorios, el test COVID del Laboratorio Lemos,
CONICET e Instituto Leloir, el test
de detección rápida para COVID “FarmaCov”
desarrollado por CINDEFI-CONICET, en sociedad con Bamboo
Biotech.
Felicito
también a la industria, en gran parte cordobesa, de fabricación de respiradores
de última tecnología, que permitió a la Argentina, al multiplicar su capacidad,
no requerir estos insumos básicos que el mundo salió a buscar desesperadamente.
La Argentina pudo contar con ellos a través de la producción propia por parte
de desarrolladores argentinos.
Quiero felicitar también a los investigadores
de la Universidad Nacional de Hurlingham y del CONICET por el desarrollo de
medidores de dióxido de carbono en el aire, que quizá en experiencias piloto
permitirán saber cuándo un lugar está demasiado cargado y debe ser ventilado
para disminuir el riesgo de contagio por COVID.
Felicito
por el desarrollo argentino del denominado CoviFab,
un suero equino disponible hoy para uso hospitalario que ha demostrado en
pacientes de moderada gravedad no ventilados, una mejora en este camino.
Quiero
felicitar también al sector privado que ha permitido la transferencia
tecnológica que hizo que la Argentina sea el lugar elegido por Oxford
AstraZeneca para la elaboración de 150 millones de dosis de vacuna COVID, parte
de las cuales serán usadas prontamente en la Argentina.
Felicito
al equipo de la vacuna argentina del CONICET y de la Universidad Nacional de
San Martín, que es una vacuna en fase preclínica de tipo de proteínas
recombinantes. Felicito también a todos los equipos científicos argentinos que
participaron en la fase 3 de muchas de las vacunas que hoy se usan en el mundo,
como por ejemplo la Pfizer, con más de 4.500 voluntarios para los ensayos en el
Hospital Militar Central; al Laboratorio Janssen, con más de 6.000 voluntarios
argentinos en la prueba realizada en clínica privada DIM Centros de Salud, con
sede en Ramos Mejía; a CanSino Biologics
y al Instituto de Biotecnología de Beijing. Todos estos estudios de fase 3
permitieron al mundo usar estas vacunas.
Por
supuesto, también felicito los estudios publicados por la Fundación Infant sobre el uso de plasma para pacientes recuperados.
Quiero decir
dos cositas más, una relacionada con el equipo nuevo de genómica que adquirió
ANLIS-Malbrán hace muy poquito, que nos va a permitir a muchos secuenciar en
forma simultánea la posibilidad de hacer 3.000 genomas en 24 horas. Ello
permitirá detectar rápidamente si aparece alguna de las variantes del virus que
anda circulando por Sudáfrica, Brasil e Inglaterra.
Tucumán
ha hecho también un pequeño desarrollo sobre el que quisiera mencionar dos
palabras. Por un lado, acerca del intento de generar un suero a partir de una
llama macho; se trata de una nanotecnología, unos nanoanticuerpos,
que son menos reactivos que los de caballo. Por otro lado, acerca del test tucumano para dosaje de anticuerpos
elaborado por la Universidad Nacional de Tucumán, por el Sistema Provincial de
Salud y por el Instituto de Investigación en Medicina Molecular y Celular
Aplicada ‑IMMCA‑, de la Universidad Nacional.
Creo
que este es un día para festejar, en el que esta Cámara brinda, a través del
ministro, una felicitación a la ciencia y técnica de la Argentina. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia informa a las
autoridades de cada uno de los bloques que la votación será en aproximadamente
15 minutos. En tal sentido, se solicita a los señores diputados y a las señoras
diputadas que vayan revisando su VPN a fin de estar debidamente conectados.
Tiene
la palabra la señora diputada Najul, por Mendoza.
Sra. Najul.- Señor presidente: en primer lugar,
saludo al ministro y al presidente del CONICET.
Quiero
destacar el hecho de que estemos comenzando este año legislativo con la
consideración de este proyecto, que estaba pendiente y por la que tanto
insistimos desde nuestro bloque.
Hoy
vamos a aprobar una ley que significa muchas cosas, pero por sobre todo, una
ley que es pertinente. Estamos próximos a cumplir un año de la aparición de la
pandemia, un año en el que todo cambió a nivel global, pero también en la vida
cotidiana de cada una de nuestras familias. Las consecuencias más graves de
esta crisis sanitaria en el plano económico, social y humano seguramente van a
ser el aumento de la desigualdad, la concentración de la riqueza y la
destrucción masiva del empleo.
En este
escenario tan demoledor que estamos viviendo, todos hemos comprobado la
importancia innegable del sector del conocimiento, de la tecnología y de la
innovación para mitigar los efectos de esta pandemia. El desarrollo de las
vacunas en tiempo récord es, sin ir más lejos, un ejemplo de lo que digo. Claro
está que todavía debemos completar muchos otros casilleros que tienen que ver
con asegurar la producción necesaria para alejar los fantasmas de la
especulación y garantizar una distribución equitativa en la Argentina y en todo
el mundo.
De allí
la relevancia que tiene este proyecto, es decir, que el Congreso argentino
establezca por ley un aumento progresivo y sostenido del presupuesto nacional
destinado al área de ciencia y técnica. Esta es una señal contundente de que
después de tantos discursos, la dirigencia política del país se ha puesto de
acuerdo en este tema, transformándolo en una política de Estado.
Quiero
hacer hincapié en algunos de los objetivos del desarrollo del sistema nacional
de ciencia, tecnología e innovación. El aspecto federal de la norma es clave.
Vengo de una provincia que en el último tiempo ha sido abiertamente
discriminada por el gobierno nacional, por lo que valoro profundamente que se
apunte a fomentar la matriz productiva de la Argentina atendiendo las
necesidades y particularidades de cada región.
El
proyecto propicia además la igualdad real y efectiva en la participación de
mujeres, y a este respecto me sumo también al pedido de las diputadas
preopinantes para que entre todos y con la ayuda del ministro logremos la
sanción definitiva en el Senado de la ley de participación igualitaria de las
mujeres en ciencia y técnica. Sin duda hay una gran brecha de género en el
ámbito de la ciencia y técnica. Esta ley promueve el acceso, la permanencia,
las publicaciones y la participación igualitaria de las mujeres en los órganos
de decisión. Esto es muy importante porque el impacto de la pandemia tiene
género. Somos las mujeres las más afectadas, son las mujeres de la ciencia unas
de las más afectadas ‑así se nos ha hecho saber‑ por todo lo que
significó el confinamiento.
Una
forma de hacer real lo que decimos en el discurso es sancionar este proyecto de
ley y lograr el camino de igualdad en la ciencia y técnica de la Argentina.
Asimismo,
creo que estamos interpretando el mundo en el que vivimos al invertir los
esfuerzos del Estado y del sector privado con inteligencia y previsión. No
podemos seguir aplicando políticas laborales para un mundo del trabajo cuyas
relaciones no son las de hace cincuenta años. La capacitación integral de
nuestros jóvenes y su integración en la producción nacional ya no son una
opción sino una obligación si pretendemos aprovechar al máximo nuestros
recursos y destacarnos en el escenario regional.
Para
finalizar, solicito a los diputados del oficialismo y, a través suyo, al
gobierno nacional que la sanción de esta iniciativa sea acompañada por una
armonización de las políticas públicas en el mismo sentido. Sería una
contradicción flagrante que aprobemos esta ley y al mismo tiempo pongamos palos
en la rueda a los emprendedores que quieren constituir una sociedad.
Por un
lado, decimos que queremos llegar en los próximos diez años con la ciencia e
innovación al uno por ciento del PBI, pero, por otro lado, el Estado bombardea
a los jóvenes con una burocratización inútil para sus proyectos que atenta
contra los sueños y el futuro de la Argentina. Que esta ley no se pierda en el
camino, señor presidente; pongamos todo lo que hay que poner para que nuestras
próximas generaciones vivan mejor que nosotros. De eso se trata.
Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el señor diputado
Yacobitti, por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Sr. Yacobitti.- Señor presidente: en primer
lugar, obviamente quiero saludar y acompañar esta iniciativa. Hemos apoyado
este tipo de proyectos en el pasado, lo hacemos en el presente y también lo haremos
en el futuro. Independientemente de quién lo proponga, todo incentivo para la
educación, la ciencia y la técnica contará con nuestro acompañamiento porque
creemos que constituye una decisión estratégica para un futuro mejor y más
igualitario.
Me toca
ser uno de los últimos oradores y quiero decir que vale la pena convocarnos en
un nuevo desafío.
Usted,
señor presidente, expuso en todos los medios algunas de las injusticias que
conlleva el impuesto a las ganancias.
Por
otro lado, quiero recordar que en distintas provincias está arrancando, de
diferente forma, el proceso escolar en los niveles secundario, universitario y
primario. ¿Pero saben qué ocurre? No solo hoy, sino también en los meses
venideros, tendremos menos médicos, menos científicos y menos docentes, ya que
todos ellos son hijos de trabajadores que, como deben pagar un impuesto al
salario ‑el mal llamado “impuesto a las ganancias”‑, no podrán
costear las herramientas educativas. Este año no podrán seguir afrontando el
alquiler que deben pagar para que sus hijos estudien en la universidad; tampoco
comprar una computadora y contratar una buena conectividad.
No
pueden, ¿y saben por qué? Porque son trabajadores a quienes el Estado no
permite deducir esto que, como decimos nosotros, es la inversión más
estratégica que tiene el Estado.
En
cambio, nuestro sistema tributario permite a quienes más tienen deducir una
prepaga de lujo, las donaciones a fundaciones o asociaciones civiles que,
quizás, no se dedican a ninguna de las actividades que son estratégicas para el
país y también seguros de vida. Está bien que esto se siga haciendo, pero
tenemos que dejar de patear hacia adelante esa discusión que venimos planteando
desde hace más de un año: en la Argentina, pagan el impuesto a las ganancias los
trabajadores. Ya lo dejó en claro el señor presidente esta semana.
Ahora
bien, cuando yo le hice ese planteo al señor presidente de la Comisión de
Presupuesto y Hacienda, me respondió algo con lo que yo coincido: de algún lado
deben salir los recursos. Alguien tiene que pagar y decidir qué no es esencial
para financiar aquello que sí lo es.
Por
eso, muchos proponemos ‑de hecho, de todos los partidos, porque
legisladores de los diversos bloques estuvieron a favor de este proyecto‑
que algo que es una inversión se pueda deducir. ¿Quiénes tendrían la
posibilidad de hacerlo? Los trabajadores, que ni siquiera tendrían que estar
alcanzados por el impuesto. ¿Para qué? Para que, por lo menos, no sea solo el
mérito ‑como gusta decir a muchos‑ y la ciencia, la tecnología y la
educación sigan siendo una herramienta de igualación. Desafortunadamente, en la
Argentina lo son cada vez menos; todos sabemos que por más que tengamos una
escuela y una universidad pública de calidad, para asistir hacen falta
recursos.
¿Por qué
un padre debe hacer cola para pedir una beca y el Estado le cobra el impuesto a
las ganancias porque es un trabajador? Estas son las cuestiones sobre las que
debemos discutir en la Argentina. ¿Por qué un padre tiene que mirar a sus hijos
a la cara cuando deben hacer turno en su casa para usar una computadora porque
al Estado se le ocurrió pagarle menos sueldo al no actualizar el impuesto a las
ganancias?
Esto
pasa en nuestro país, pero nosotros miramos hacia el costado. Si lo planteo es
porque, en verdad, esto no es un gasto para el Estado: el costo que implica
esta nueva excepción es cero. Se trata solo de tomar la decisión política de
asignar o reasignar recursos para algo que todos nos llenamos la boca diciendo
que es una inversión. Seguramente, si lo hacemos de forma sostenida en el
tiempo, el Estado recaudará más.
Así
como festejo esta iniciativa, nos convoco para que
discutamos sobre lo que se viene, para que escuchemos a las madres y a los
padres trabajadores que no saben cómo harán para conseguir las herramientas que
permitan a sus hijos recibir una educación pública de calidad.
Esto
deberemos resolverlo nosotros en el próximo mes o mes y medio. Si no, como dije
antes, habrá muchos menos científicos, muchos menos docentes, muchos menos
médicos y muchos menos argentinos por el mundo dando el ejemplo de lo que es
nuestro sistema educativo. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- Antes de conceder el uso de la palabra al
último orador, la Presidencia solicita a los señores diputados que se aseguren
estar “logueados” antes de la votación.
Tiene
la palabra el señor diputado Carro, por Córdoba.
Sr. Carro.- Señor presidente: si prospera su proyecto, ningún
docente universitario pagará el impuesto a las ganancias. Creo que ello forma
parte de una política de Estado que estamos llevando adelante. (Aplausos.)
Por
supuesto, para todos los que participamos del sistema universitario nacional,
que se esté tratando esta iniciativa es una excelente noticia. También lo es
para quienes integran el sistema de ciencia y tecnología de nuestro país. En
realidad, es una gran noticia para todos los argentinos y las argentinas que
podamos definir una política de Estado para el sector.
Que
para el año 2032 el presupuesto destinado a la función ciencia y técnica deba
alcanzar el uno por ciento del producto bruto interno, para algunos es poco.
Déjenme decir que para quienes trabajamos en el sector, es muchísimo dinero.
Quienes
hacen comparaciones con otros países, sepan que estos tienen una importante
inversión privada en investigación, algo que no ocurre en la Argentina. En
verdad, lo que nosotros necesitamos es una mayor inversión del sector privado
en ciencia y tecnología.
Son
diecisiete los organismos que, en toda la Argentina, están comprendidos en la
función ciencia y técnica. Nombraré solo unos pocos para que se entienda su
importancia: la Comisión Nacional de Energía Atómica, el Conicet, el Banco
Nacional de Datos Genéticos, el Instituto Geográfico Nacional, el INTA, el
INTI, la Administración Nacional de Laboratorios ‑que tanto ha hecho en
materia de vacunas‑, el Instituto Nacional de Prevención Sísmica, el
Instituto Antártico Argentino.
Todos
cumplen una tarea centralísima en la producción de conocimiento y en materia de
soberanía; sobre todo, la labor que se lleva adelante en la Antártida, que aquí
tiene muy poca visibilidad. Justamente, uno de los objetivos de este proyecto
de ley es dar visibilidad a lo que se hace para que haya más jóvenes y jóvenas que quieran estudiar y transformarse en
científicos. Pero, para eso debemos mostrarles que es conveniente, que es un
buen negocio ser científico o científica en la Argentina. Uno de los objetivos
de la iniciativa en tratamiento es aumentar progresivamente los salarios de los
investigadores y las investigadoras.
No quiero
extenderme mucho porque todos estamos cansados y queremos votar, pero hay
algunos aspectos que considero importante mencionar.
Por
ejemplo, que por lo menos el 20 por ciento del incremento anual en el
presupuesto deba destinarse a la aplicación de políticas federales, es muy
importante. Que deba ser distribuido en el Sistema Nacional de Ciencia,
Tecnología e Innovación, también.
Es
cierto, además, que necesitamos crecer en infraestructura, entre otras
cuestiones. Pero, como no quiero repetir lo que ya se ha dicho, cerraré mi
exposición con una cuestión política vinculada con algunos comentarios que se
hicieron en este recinto.
Se ha
dicho que es necesario articular ciencia y técnica con el sistema educativo.
Estoy absolutamente de acuerdo con esto.
Dijo un diputado preopinante que el
aumento del presupuesto no es una política científica en sí misma. Me pregunto:
¿cerrar el Ministerio de Ciencia y Tecnología es una política científica? (Aplausos.)
Quisiera
leer muy rápidamente una nota de un periódico nacional del 11 de septiembre de
2018. Dice: “El Ministerio de Hacienda dispuso una reasignación de partidas que
recorta fondos de Ciencia y Tecnología, de Educación, del área de niñez, del
Ministerio de Desarrollo Social, de Ambiente y Turismo (…). Las universidades
nacionales pierden otros 1.639 millones en transferencias. A su vez, incrementó
los fondos para la Policía Federal, Gendarmería y Fuerzas Armadas.” ¿Esa es una
política científica, tal vez? (Aplausos.)
De
todos modos, sé que aquí hay odiadores seriales, y hay quienes vienen a
discutir con buena leche, con argumentos. Y sé que muchos diputados y diputadas
preopinantes ‑no voy a nombrar a nadie pero se los pueden imaginar‑
que gustosamente hubieran querido que este proyecto se aprobara durante el
gobierno de Macri. Porque este proyecto no depende de voluntades individuales
sino de proyectos colectivos y de decisiones políticas. Y cuando nosotros
propusimos ‑y la ciudadanía eligió‑ a Alberto y a Cristina al
frente del gobierno, eligieron que volviéramos a tener Ministerio de Ciencia y
Tecnología, y decidieron que estas fueran políticas de Estado para nuestro
país. (Aplausos.) Porque la soberanía
del conocimiento es una de las claves para sacar adelante a este país.
Quisiera
agregar una última cuestión porque lo tengo aquí al lado al compañero Roberto Salvarezza, con quien hemos compartido bancada y hemos
peleado por estos mismos proyectos no hace mucho. Que ese compañero esté hoy al
frente del Ministerio hace que sea posible este proyecto de ley. Pero hay que
tener buena articulación entre el Ejecutivo y el Legislativo para que eso
ocurra, y acá se formó una pareja maravillosa, y espero que no se me
malinterprete: Claudia Bernazza y Roberto Salvarezza han hecho posible que hoy estemos aprobando esta
iniciativa.
En
memoria de todos los científicos y científicas que han hecho un gran esfuerzo
en nuestro país para que la Argentina se destaque, quiero agradecerte, Roberto,
quiero agradecerte, Claudia. Quiero agradecer a todos los que estamos aquí, a
nuestra fuerza política y a nuestro gobierno, que impulsa esta política. (Aplausos prolongados.)
Sr. Presidente (Massa).- Se va a votar nominalmente en
general y en particular el dictamen de las comisiones de Ciencia, Tecnología e
Innovación Productiva y de Presupuesto y Hacienda -Orden del Día N° 333-
recaído en el proyecto de ley de financiamiento del Sistema Nacional de
Ciencia, Tecnología e Innovación.
- Mientras
se practica la votación nominal:
Sr. Presidente (Massa).- ¿Quiere hacer uso de la
palabra, diputado Ferraro?
- Varios señores diputados hablan a la vez.
Sr. Presidente (Massa).- Me está gritando desde la
banca. Si quiere dirigirse a la Presidencia, hágalo con micrófono.
Sr. Ferraro.- Señor presidente: ya que habilitó el
tiempo de la votación, quiero aclararle que no nos vamos a registrar y va a
tener que llamar a uno por uno de los diputados y diputadas del interbloque de
Juntos por el Cambio para que le quede claro al bloque oficialista que también
estamos dispuestos a acompañar en esta materia, y que el avance y el incremento
del presupuesto no es una cuestión de unos u otros. ¿O ellos se creen los
dueños de la verdad y la ciencia, la tecnología y la innovación en la
Argentina? (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la señora
diputada Camaño, por Buenos Aires. ¿También solicita la palabra para hacer una
aclaración sobre la votación?
Sra. Camaño.- Señor presidente: me parece injusta y
arbitraria la manipulación del sistema de votación que está haciendo el frente
de Cambiemos. Quisiera que revieran esta actitud, porque más allá de la pelea
que, evidentemente, tienen con el oficialismo, otros diputados no tenemos nada
que ver con esa pelea y, honestamente, nos gustaría que el sistema no sea
manipulado para este tipo de cuestiones. Diriman sus diferencias en otro lado.
Sr. Presidente (Massa).- Se está cerrando la votación,
diputado Ritondo.
Sr. Ritondo.- La señora diputada Camaño hizo
referencia a cuestiones de nuestro interbloque que quiero aclarar.
Sr. Presidente (Massa).- Usted no votó; será el primero
al que le pida la referencia.
Tiene
la palabra el señor diputado Ritondo para aclarar el sentido de su voto.
Sr. Ritondo.- Señor presidente: en este tipo sesiones, las
chicanas no contribuyen, no sirven para nada. Las construcciones de mayorías
son circunstanciales. Sirven para que podamos dar una respuesta a la sociedad
desde el Parlamento, con la seriedad de los doscientos y pico que somos. Lo
demás son chicanas absurdas, estúpidas, que para lo único que sirven es para
seguir dividiendo a los argentinos.
Nosotros
votamos por la afirmativa porque creemos que esto es positivo para la
Argentina, no porque ningún tarado nos quiera llevar por delante. Mi voto es
positivo. (Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- No me obliguen a que corte el
micrófono porque solo es el sentido del voto lo que hay que indicar.
Ya
aclaró el sentido del voto el presidente del bloque, diputado Ritondo. Lo hizo
excediéndose; no me obliguen a tener que cortar el micrófono con el resto.
Señora
diputada Ávila: ¿me puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señora diputada Ávila.
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, la
señora diputada Ávila es considerada ausente a la hora de votar.
Quiero
recordar a los diputados o diputadas que cuando se van del recinto o se
ausentan de la sesión, se acuerden de apretar el botón que indica que abandonan
el recinto.
Señor
diputado Bazze: ¿me puede indicar el sentido de su
voto?
Sr. Bazze.- Señor presidente: mi voto es
afirmativo.
Señor
diputado Campos: ¿me puede indicar el sentido de su voto?
Sr. Campos.- Señor presidente: mi voto es
afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Cano: ¿me puede
indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Cano.
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, el
señor diputado Cano es considerado ausente a la hora de votar.
Señor
diputado Cisneros: ¿me puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Cisneros.
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, el
señor diputado Cisneros es considerado ausente a la hora de votar.
Señor
diputado Enríquez: ¿me puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Enríquez.
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, el
señor diputado Enríquez es considerado ausente a la hora de votar.
Señor
diputado Fernández Langan: ¿me puede indicar el
sentido de su voto?
Sr. Fernández Langan.-
Señor presidente: mi voto es afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Ferraro: ¿me
puede indicar el sentido de su voto?
Sr. Ferraro.- Señor presidente: mi voto es
afirmativo.
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Flores: ¿me
puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Señor diputado Flores.
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- No habiéndose manifestado, el
señor diputado Flores es considerado ausente a la hora de votar.
Señor diputado González: ¿puede expresar el sentido de su
voto?
Sr. González.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Igón, ¿puede indicar el sentido de su
voto?
-
-
Luego
de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al
no haberse expresado, el señor diputado Igón será
considerado ausente en la votación.
Señor diputado
López, ¿puede indicar el sentido de su voto?
Sr. López.- Mi voto es
por la afirmativa, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Manzi, ¿puede indicar
el sentido de su voto?
Sr. Manzi.- Mi voto es
afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señora diputada María Rosa Martínez, ¿puede indicar el sentido de su voto?
Sra. Martínez (M.R.).- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señora diputada Martínez Villada,
¿puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al
no haberse expresado, la señora diputada Martínez Villada será considerada
ausente en la votación.
Señora
diputada Morales Gorleri, ¿puede indicar el sentido
de su voto?
Sra. Morales Gorleri.- Mi voto es afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Negri, ¿puede indicar
el sentido de su voto?
-
Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al
no haberse expresado, el señor diputado Negri será considerado ausente a la
hora de votar.
Señora diputada Oliveto Lago,
¿puede indicar el sentido de su voto?
Sra. Oliveto
Lago.- Mi voto es por la afirmativa, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Pastori,
¿puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego de
unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al
no haberse expresado, el señor diputado Pastori será
considerado ausente a la hora de votar.
Señora diputada Polledo,
¿puede indicar el sentido de su voto?
Sra. Polledo.- Mi voto es
afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señora diputada Russo, ¿puede indicar
el sentido de su voto?
-
Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al
no haberse expresado, la señora diputada Russo será considerado ausente en la
votación.
Señora
diputada Stilman, ¿puede indicar el sentido de su
voto?
Sra. Stilman.- Mi voto es
afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Suárez Lastra, ¿puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego de unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al
no haberse expresado, el señor diputado Suárez Lastra será considerado ausente
a la hora de votar.
Señora diputada Terada, ¿puede indicar el sentido de su
voto?
Sra. Terada.- Mi voto es
afirmativo, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).-
Señor diputado Tonelli, ¿puede indicar el sentido de su voto?
-
Luego de
unos instantes:
Sr. Presidente (Massa).- Al
no haberse expresado, el señor diputado Tonelli será considerado ausente en la
votación.
Señor diputado Yacobitti, ¿puede
indicar el sentido de su voto?
Sr. Yacobitti.- Mi voto es por la afirmativa, señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Concluida la lista
de votos que no se consignaron por el sistema, se va a proceder a dar lectura…
Tiene
la palabra el señor diputado Félix.
Sr. Félix.- Señor presidente: no pude
conectarme y no he podido votar.
Sr. Presidente (Massa).-
¿Puede indicar el sentido de su voto?
Sr. Félix.- Mi voto es afirmativo,
señor presidente.
Sr. Presidente (Massa).- Se cierra la
votación.
Por
Secretaría se dará lectura del resultado de la votación.
Sr. Secretario (Cergnul).-
Se
han registrado 189 votos afirmativos y dos abstenciones. No ha habido votos
negativos.[12]
(Aplausos.)
Sr. Presidente (Massa).- Queda sancionado el
proyecto de ley.[13]
Se
comunicará al Honorable Senado.
La Presidencia
solicita el asentimiento de la Honorable Cámara para autorizar las inserciones
solicitadas por las señoras y los señores diputados durante el transcurso de la
presente sesión.
- Asentimiento.
Sr. Presidente (Massa).- Quedan autorizadas
las inserciones solicitadas.[14]
Habiéndose
cumplido el objeto de la convocatoria, queda levantada la sesión.
- Es la hora 1 y 9 del día 12.
[1] Véase el texto de las renuncias en el Apéndice.
(Pág. )
[2] Véase el Acta N°
de votación nominal en el Apéndice. (Pág. )
[3] Véase el Acta N° de votación nominal en el Apéndice.
(Pág. )
[4] Véase el Acta N° de votación nominal en el Apéndice.
(Pág. )
[5] Véase el texto de la sanción en el Apéndice. (Pág. )
[6] Véase el Acta N° de votación nominal en el Apéndice. (Pág. )
[7] Véase el Acta N° de votación nominal en el
Apéndice. (Pág. )
[8] Véase el texto de la sanción
en el Apéndice. (Pág. )
[9] Véase el Acta N° de votación nominal en el Apéndice.
(Pág. )
[10] Véase el Acta N° de
votación nominal en el Apéndice. (Pág.
)
[11] Véase el texto de la
sanción en el Apéndice. (Pág. )
[12] Véase el Acta N° de votación
nominal en el Apéndice. (Pág. )
[13] Véase el texto de la sanción en el Apéndice. (Pág. )
[14] Véase el texto de las inserciones en el Apéndice. (Pág. )