-   En la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires, al primer d�a del mes de julio de 2021, a la hora 14 y 26:

 

                                                                                                            - 1 -       

IZAMIENTO DE LA BANDERA NACIONAL

Sr. Presidente (Massa).- Con la presencia de 129 se�ores diputados en forma presencial y remota queda abierta la sesi�n especial convocada conforme al requerimiento efectuado por varios se�ores diputados en n�mero reglamentario.

��������� Invito al se�or diputado por el distrito electoral de Buenos Aires don Juan Aicega a izar la bandera nacional en el m�stil del recinto.

-   Puestos de pie los se�ores diputados y el p�blico presente, el se�or diputado Aicega procede a izar la bandera nacional en el m�stil del recinto. (Aplausos.)

                                                                                                                  - 2 -            

HIMNO NACIONAL ARGENTINO

Sr. Presidente (Massa).- Invito a las se�oras y se�ores diputados y al p�blico presente a entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, que ser� interpretado por la Agrupaci�n Las Sachaguitarras Atamisque�as de la provincia de Santiago del Estero, promovido por la diputada nacional Estela Neder acompa�ada por diputadas y diputados representantes de toda la provincia.

-   Puestos de pie, los se�ores diputados y el p�blico presente entonan las estrofas del Himno Nacional Argentino. (Aplausos.)

 

                                                                                                                                                                          - 3 -                 

CONVOCATORIA A SESI�N ESPECIAL

Sr. Presidente (Massa).- Por Secretar�a se dar� lectura a la resoluci�n dictada por la Presidencia mediante la que se convoca a sesi�n especial.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Dice as�:

��������� �Buenos Aires, 29 de junio de 2021.

���������� �Visto la presentaci�n efectuada por el diputado M�ximo Carlos Kirchner y otras diputadas y diputados, por la que se solicita la realizaci�n de una sesi�n especial para el d�a 1� de julio de 2021 a las 14 horas, a fin de considerar diversos expedientes, y;

���������� �Considerando los art�culos 14, 35 y 36 del reglamento de la Honorable C�mara, el presidente de la Honorable C�mara de Diputados de la Naci�n resuelve:

���������� �Art�culo 1�.- Citar a las diputadas y a los diputados para el d�a 1� de julio de 2021 a las 14 horas, a fin de considerar los siguientes expedientes:

��������� �1) 1803-D.-2019 y 2053-D.-2020. Ley 26.130 de R�gimen para las Intervenciones de Contracepci�n Quir�rgica. Modificaci�n de los art�culos 2� y 3�.

��������� �2) 1621-D.-2021. Marco regulatorio de biocombustibles. Aprobaci�n.

��������� �3) 5085-D.-2020. C�digo Procesal Penal de la Naci�n. Modificaci�n.

��������� �4) 2513-D.-2021. Programa de Fortalecimiento y Alivio Fiscal para Peque�os Contribuyentes. Creaci�n.

��������� �5) 7-PE.-2020. Ley de Impuesto a las Ganancias, texto ordenado en 2019 y sus modificaciones; y Ley de Impuesto sobre los bienes personales, texto ordenado en 1997 y sus modificaciones. Modificaci�n.�

��������� El art�culo segundo es de forma.

 

        

                                                                                                            - 4 -       

HOMENAJES

                                                                                                                 ��I

A la memoria del general Juan Domingo Per�n

Sr. Presidente (Massa).- �Para rendir homenaje a Juan Domingo Per�n, tiene la palabra el se�or diputado Gioja, por San Juan.

 

Sr. Gioja.- Se�or presidente: gracias a los compa�eros y compa�eras, amigos y amigas que integran esta C�mara.

��������� Hoy, 1� de julio, se cumplen exactamente 47 a�os del paso a la inmortalidad del general Juan Domingo Per�n, quien nos dej� un legado que el tiempo no ha podido borrar de la historia de la Argentina.� Sin duda, un legado es algo que se deja, que se transmite, que dejan los padres a sus hijos y los conductores a su pueblo tal como lo hizo el general Per�n.

��������� Creo que la genialidad de este ilustre argentino tiene que ver con la creaci�n de ese movimiento nacional y popular que es el Peronismo, el Justicialismo, que cambi� de forma sustancial a los argentinos y argentinas.

��������� Estoy convencido que una de las cosas m�s destacadas de la gran cantidad que se hicieron y crearon en esa �poca es que precisamente argentinos y argentinas, trabajadoras y trabajadoras dejaron de ser un n�mero para empezar a tener dignidad. As�, en muchos casos se reemplaz� el paquete de yerba, el de az�car o el pedazo de carne que pagaban por su trabajo, por un salario y trabajo digno. En la Argentina no debe haber un trabajador o una trabajadora que no conozca sus derechos, los que precisamente fueron adquiridos en la �poca del avenimiento del peronismo con el general Per�n conduciendo la Rep�blica Argentina.

��������� Se�or presidente: en este homenaje quiero decir que las tremendas dificultades que tiene la Argentina hoy nos generan una esperanza, como la esperanza que nos gener� el General Per�n con su formidable movimiento y cuando en forma muy simple escribi� y resumi� en su doctrina en las 20 verdades.

��������� La primera de ellas es una defensa de la democracia. All� dec�a que el que gobierna en democracia tiene que hacer lo que el pueblo quiere y defender un solo inter�s: el de nuestro pueblo. Esa es nuestra meta, ese es el camino. Estamos convocando a las argentinas y a los argentinos a seguir ese sendero, porque tal vez estamos viviendo una de las �pocas m�s complicadas de los 211 a�os de la hist�rica de nuestra Patria.

��������� Los problemas heredados, los inconvenientes que tenemos y los que tiene el mundo no son de f�cil resoluci�n. Por eso necesitamos definitivamente tambi�n poner en pr�ctica otras de nuestras verdades: primero est� la Patria, luego el movimiento y por �ltimo los hombres.

��������� Tambi�n quiero advertir sobre la grandeza y el desprendimiento que hoy hacen falta hoy y que tuvo el general Per�n, quien vino a dejar su vida para defender esos ideales. El general Per�n volvi� a la Patria descarnado para dejar y ratificar esos ideales y cuando regres� al pa�s buscando la unidad que necesit�bamos, cambi� la sexta verdad Justicialista y, en vez de ser que para un peronista no hab�a nada mejor que otro peronista, qued� establecida de la siguiente manera: para un argentino no debe haber nada mejor que otro argentino.

��������� En estos tiempos dif�ciles, de mucha solidaridad, donde hay que ser generoso y dejar las u�as un poco de lado hasta que salgamos del atolladero, necesitamos que el esp�ritu, la pasi�n y la inteligencia del general Per�n nos ilumine a todos los que tenemos responsabilidades institucionales para construir una Patria m�s justa, libre y soberana donde seamos capaces de erigir la felicidad de nuestro pueblo y la grandeza de nuestro pa�s. Gracias, se�or presidente. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Gracias, se�or diputado.

��������� �Tiene la palabra el se�or diputado Koenig, por Buenos Aires.

 

Sr. Koenig.- Se�or presidente: comenzar� citando el Mart�n Fierro: �tiene el gaucho que aguantar
hasta que lo trague el hoyo,
o hasta que venga alg�n criollo
en esta tierra a mandar.�

��������� Creo que esos versos de Jos� Hern�ndez alud�an prof�ticamente al advenimiento de Juan Domingo Per�n, ese gran criollo. Como dijo el diputado Gioja, compa�ero y ex presidente de nuestro partido, un 1� de julio de 1974 Juan Domingo Per�n pas� a la inmortalidad.

��������� Fue electo tres veces presidente de los argentinos democr�ticamente, la �ltima vez obtuvo m�s del 63 por ciento de los votos, fue un hombre que transform� nuestra historia. Sus transformaciones ingresaron en la pol�tica de la mano de una movilizaci�n un 17 de octubre.

��������� Los pol�ticos de derecha no comprendieron que se trataba de la irrupci�n del pueblo y en particular de la clase trabajadora en nuestra historia. Por eso un oscuro diputado radical de nombre Sammartino calific� a esa movilizaci�n como un aluvi�n zool�gico, inaugurando esos discursos de odio que nos niega la condici�n humana a los que somos peronistas. Tampoco la izquierda dogm�tica comprendi� de qu� se trababa. El jefe del Partido Comunista de aquella �poca llamaba a combatir al �nipo-nazi-fasci-falanjo-peronismo�. Es incre�ble c�mo se repiten a s� mismas la derecha y la izquierda en la Argentina.

��������� Los que comprendieron claramente de qu� se trataba fueron los hombres y mujeres humildes de nuestro pueblo. Ellos entendieron que Per�n era el padre de la Patria de la felicidad, no como una promesa, sino como una realidad efectiva y concreta que les cambiaba la vida.

��������� Per�n sab�a perfectamente y as� lo dijo que la econom�a nunca es libre, o la controla el Estado en beneficio del pueblo o la controlan los grandes consorcios en beneficio de este.

��������� �La Constituci�n de 1949 plasm� jur�dicamente aquel proyecto que encarn� el peronismo. Esa Constituci�n es un instrumento desaparecido en la ense�anza jur�dica de nuestras universidades, pero tambi�n de la discusi�n pol�tica de este Congreso. En las rejas, en las puertas de este Congreso figuran todas las modificaciones que sufri� la Constituci�n de 1853 y no se menciona la reforma de 1949.

��������� El general Per�n se despidi� de este Congreso un 1� de marzo de 1974 donde esboz� el modelo argentino para el proyecto nacional donde hablaba de una democracia plebeya con protagonismo de las organizaciones libres del pueblo.

��������� Tambi�n hablaba de medio ambiente ‑a lo cual nadie se refer�a en esa �poca‑ y del proceso de integraci�n continental y universal, advirtiendo que si la globalizaci�n se llevaba delante de la mano de los grandes grupos econ�micos y las grandes potencias ser har�a sin el respeto de la autodeterminaci�n de los pueblos.

��������� La verdadera despedida del general Per�n fue el 12 de junio y, como no pod�a ser de otra manera, en la Plaza de Mayo junto a su pueblo donde dijo esta hermosa frase: �Yo llevo en mis o�dos la m�s maravillosa m�sica que, para m�, es la palabra del pueblo argentino".

��������� Cuando Per�n se fue, como dice el tango, hasta el cielo se puso a llorar, y una tarde lluviosa el pueblo y el cielo llorando lo despidieron, as� como el pueblo y el cielo llorando despidieron a Evita, y as� como el pueblo y el cielo llorando despidieron a N�stor Carlos Kirchner.

��������� Aquellos que nos sentimos herederos del legado de Juan Per�n sabemos y creemos que los problemas y las necesidades de los argentinos y las argentinas se solucionan con m�s peronismo, porque estamos convencidos de que gobernar es crear trabajo, porque estamos convencidos del rol del Estado como clave en la econom�a, porque estamos convencidos de que tenemos que ejercer soberanamente el poder sobre nuestros recursos y porque sabemos que una justa redistribuci�n de la riqueza es una bandera irrenunciable.

��������� Per�n y el peronismo est�n vivos porque las causas que le dieron origen todav�a est�n vigentes y est�n pendientes de resolver. Como dec�a el gran Disc�polo: �Yo no invent� a Per�n, a Per�n lo trajo la injusticia y el dolor del pueblo�.

��������� Por eso, general Per�n, juramos avanzar en esa revoluci�n inconclusa porque sabemos que, como nos ense�� su compa�era Evita, si el pueblo fuera feliz y la patria grande, ser peronista ser�a un derecho; en nuestros d�as ser peronista es un deber. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Gracias, diputado Koenig.

 

                                                                                                                ��II

A los 130 a�os de la fundaci�n de la Uni�n C�vica Radical

Sr. Presidente (Massa).- Para un homenaje por los 130 a�os de la fundaci�n de la Uni�n C�vica Radical, tiene la palabra el se�or diputado Su�rez Lastra, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Su�rez Lastra.- Se�or presidente: hace 130 a�os aparec�a en la vida p�blica argentina una novedad; no era un emergente espont�neo, sino que era un grupo de dirigentes j�venes de aquel momento con la s�ntesis de un pensamiento que se ven�a desarrollando en la Argentina a partir de mayo.

��������� El pensamiento de mayo desarrollado en el tiempo hizo s�ntesis en un punto de superaci�n que era el de incorporar a los sectores populares a la vida pol�tica a partir del sufragio y no se logr� gratuita ni f�cilmente, hubo muchas peleas, hubo muchas revoluciones y hubo que tomar muchas decisiones.

��������� Tenemos que rescatar indudablemente ‑y este Congreso es el lugar adecuado‑ a uno de los grandes dirigentes de origen humilde de la Rep�blica Argentina como fue Leandro Alem, el m�s humilde en su origen de una clase dirigente que fue reconocido como el m�s formado.

��������� Se acaba de hacer un homenaje y mencionar sobre el car�cter criollo de otro homenajeado. Cuando se realiz� el debate sobre la federalizaci�n de Buenos Aires, fue precisamente Jos� Hern�ndez quien empez� su discurso pregunt�ndose c�mo habr�a de hacer para argumentar despu�s de haber escuchado al m�s preparado, al mejor formado y al m�s elocuente de todos, Leandro Alem. Con esa impronta y con ese esp�ritu tuvo su origen la Uni�n C�vica Radical.

��������� Simplemente quiero decir que los radicales de hoy tenemos el orgullo de los radicales de ayer y que en 130 a�os le pudimos dar mucho orgullo a la Rep�blica Argentina. Tenemos orgullo por las presidencias de Hip�lito Yrigoyen, la de Marcelo Torcuato de Alvear, la de Illia y la de Alfons�n. Tambi�n sumamos en la �poca de hoy a los que fueron de origen radical y que, sin ir en nuestras listas, como Arturo Frondizi, dejaron su huella en la pol�tica argentina. Adem�s, a pesar de lo mal que le puede haber ido en una gesti�n, tenemos el orgullo de que a los presidentes que no les fue bien, como Fernando de la R�a, tuvieron en com�n con todos los radicales un signo de honestidad que es vital para la conformaci�n de nuestro propio partido.

��������� En estos 130 a�os de nuestra historia pudimos trabajar por conjugar en forma conjunta la idea de la libertad y de la justicia que son la esencia del radicalismo. Y hoy, luego de 130 a�os, cuando est� en juego la democracia, cuando est� asediada por su propia degradaci�n, no nos cabe duda de que vivimos en una sociedad democr�tica en la medida que se eligen popularmente nuestros gobernantes. Pero los radicales de hoy con perspectiva de futuro y pensando en la democracia que viene, con nuestra experiencia de 130 a�os, sabemos que la democracia es una entidad en su conjunto que se expresa con determinados valores que son inseparables y que para que exista democracia plena tiene que haber libertad, justicia, equidad, honestidad y tiene que haber �tica.

��������� Si este partido de 130 a�os logra aportar este valor cultural en la Argentina, seguramente habr� democracia para siempre. Muchas gracias. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).-� Gracias, diputado Su�rez Lastra.

 

 

Sr. Presidente (Massa).- Para el mismo homenaje, tiene la palabra el se�or diputado Moreau, por Buenos Aires.

 

Sr. Moreau.- Se�or presidente: es muy dif�cil rendir un homenaje a un partido m�s que centenario en un lapso tan breve de tiempo, porque habr�a que recorrer casi la mitad de la historia de la Argentina. El radicalismo tiene 130 a�os, lo que significa un tramo hist�rico que acompa�� pr�cticamente la mitad de la historia de la patria independiente.

��������� Me voy a enfocar nada m�s que en el origen de la Uni�n C�vica Radical porque me parece que ese punto de partida define hist�ricamente su car�cter nacional, popular y democr�tico. Seguramente en el transcurso de tantos a�os tuvo desviaciones, errores, avances y retrocesos, pero no dej� de marcar en la impronta de la pol�tica argentina una trayectoria que fue muy significativa.

��������� �Y c�mo fue el origen del radicalismo? Ustedes saben que precedi� a la creaci�n del radicalismo la Revoluci�n del Parque en 1890, que fue una rebeli�n frente a la decadencia conservadora, a la decadencia de los reg�menes impuestos por el fraude, a la decadencia que significaba para la Argentina el entreguismo que empez� con Rivadavia y el empr�stito de la Baring Brothers. Esa rebeli�n no signific� la ca�da inmediata del r�gimen conservador, pero s� lo hizo temblar y el presidente Ju�rez Celman, que hab�a sido impuesto por la Liga de Gobernadores que ten�a como principal inspirador a Julio Argentino Roca, que fue el que durante 42 a�os sign� la pol�tica argentina en nombre de las oligarqu�as locales, tuvo que renunciar.

��������� Al a�o siguiente como consecuencia de esa Revoluci�n del Parque hubo elecciones anticipadas y los que integraban la Uni�n C�vica de la Juventud, que naci� como consecuencia de esa Revoluci�n del Parque, sosten�an la f�rmula Mitre‑Bernardo de Irigoyen para enfrentar esa elecci�n.

��������� Pero �qu� sucedi� en el camino? Mitre, traicionando los principios de la Revoluci�n del Parque y en nombre del centralismo porte�o que defendi� a lo largo de toda su vida, sali� corriendo a pactar con Roca, con el representante m�s rancio del conservadorismo, de la oligarqu�a y del fraude.

��������� Y ese pacto de Mitre con Roca es lo que da origen a la Uni�n C�vica Radical. Se rompe la Uni�n C�vica en dos expresiones, por un lado, la Uni�n C�vica Radical en cabeza de Alem, de Yrigoyen y tantos otros, que repudia el pacto con los representantes del conservadurismo de aquel entonces y, por el otro lado, la Uni�n C�vica Nacional, en la que quedan Mitre y sus seguidores. �Por qu� traigo a colaci�n esto? Porque esto sign� siempre a la Uni�n C�vica Radical, como todo movimiento nacional y popular, no como partido pol�tico. Siempre tuvo alas, siempre tuvo expresiones.

��������� Continu� despu�s incluso en el triunfo del radicalismo. Yrigoyen tuvo que enfrentar al antiyrigoyenismo, al antipersonalismo, que tambi�n se uni� con los conservadores y despu�s sigui� esa trayectoria. Y en el radicalismo hubo expresiones diferentes en la �poca de la Uni�n Democr�tica. Por ejemplo, hubo sectores del radicalismo que pactaron en la Uni�n Democr�tica, otra vez con los conservadores, y otra vez hubo radicales yrigoyenistas, como los de FORJA, que no pactaron con los conservadores.

��������� As� fue a lo largo de toda la historia. La historia no se repite pero a veces s�, a veces s� se repite la historia� (aplausos) �y hoy tambi�n fuimos testigos de un pacto con los conservadores que muchos radicales hemos repudiado. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Para rendir homenaje a Mart�n Miguel de G�emes, tiene la palabra la se�ora diputada Cornejo, por Salta.

 

Sra. Cornejo.- Se�or presidente: el 17 de junio ten�amos los actos en homenaje por el bicentenario de la muerte de nuestro gran general. Ya van 200 a�os desde su muerte. Queremos ser hijos dilectos de nuestro general, levantar la bandera de su bando, que es levantar la bandera del amor a la Patria que nos dej�. Ese legado que, sin duda, hemos visto con mucha tristeza que no s� respeto en todos los festejos que se deber�an haber hecho a nuestro general.

��������� Tuvimos que vivir momentos muy desagradables en nuestra provincia de Salta, donde los gauchos que estaban preparados para rendir homenaje a su general quedaron relegados por las cuestiones pol�ticas, cuestiones pol�ticas tanto llevadas adelante por un gobierno provincial como por el gobierno nacional. Estos ganchos que no pudieron rendir sus homenajes quedaron atr�s de lo que es la militancia, atr�s de lo que fueron estos atropellos.

��������� La verdad es que hoy vemos con mucha tristeza c�mo nuestra patria camina hacia lo que son la p�rdida de los valores, la p�rdida de las libertades que nuestro general realmente levant�, que enarbol� a trav�s de su batalla y a su vez tambi�n muchos de nuestros patriotas, como el general Belgrano, del que tambi�n festejamos el d�a de nuestra bandera.

��������� Realmente, Salta es tierra de patriotas, pero que vemos que d�a a d�a se batalla no solamente en nuestra Santa porque tenemos much�simas necesidades, much�simas necesidades que no son atendidas. No son atendidas por ese Estado que deber�a estar preocupado en que el trabajo, la dignidad, la libertad sean los valores que enarbolemos en nuestra patria.

 

Sr. Presidente (Massa).- Para rendir homenaje a Horacio Gonz�lez, tiene la palabra la se�ora diputada Macha, por Buenos Aires.

 

Sra. Macha.- Se�or presidente: quiero rendir homenaje a Horacio Gonz�lez, que nos dej� hace pocos d�as. En ese sentido, pensar la muerte Horacio nos deja a la intemperie, pero, como dir�a Horacio, debemos alimentarnos de esa intemperie y de ese dolor porque su historia lo reclama y es justo para con su recuerdo y el lugar que ocupa no s�lo nuestras vidas, sino en la vida intelectual, pol�tica y social de nuestro pa�s.

��������� Homenajear a Horacio ser�a seguir su legado, pero entendemos que eso es bien dif�cil, porque Horacio Gonz�lez es irrepetible. Es imposible de continuar. Es �l mismo una tradici�n. Podemos heredar sus ideas y cuidarlas, transmitirlas y mantenerlas vivas, podemos ser sus disc�pulos y disc�pulas, pero eso inconcluso e imposible que queda con la partida de Horacio es tambi�n nuestra potencia y nuestro horizonte.

��������� Podemos habitar esa incertidumbre que sentimos a partir de ahora sin �l, esa incertidumbre de ideas y procesos hist�ricos que nadie ha habitado como �l. Siempre fue cr�tico y nunca se call�. Para m�, su voz cr�tica, a�n con nuestros gobiernos, era una voz de militancia, de compromiso, de fidelidad intelectual. Si Horacio criticaba algo era porque le importaba el destino y la contingencia de nuestra patria.

��������� Escuchar a Horacio fuera de los �mbitos p�blicos, en una cena o en una reuni�n de amigos, era igual que dentro. No hab�a un Gonz�lez p�blico y un Gonz�lez privado en t�rminos pol�ticos. La conversaci�n era su pol�tica, su �mbito, su territorio. Nunca una voz sola o dislocada, siempre pensada en contrapunto, pensando las otras vidas posibles.

��������� El pensamiento de Horacio es un pensamiento repleto de hallazgos, paradojas, sublevaciones, irrupciones, es un pensamiento de la conversi�n; convierte una cosa en otra. Tiene esa capacidad intelectual y m�gica. Cuando habl� en su despedida de la Biblioteca Nacional se refiri� a la pena de ese momento, pero, de inmediato, dijo �Tenemos que alimentarnos de esa pena.� As� era Horacio, no entregaba nada. Todo lo usaba a su favor, en todo encontraba una potencia, no hab�a en �l desperdicio o quiz� todo fuera desperdicio, hilacha, fragmentos, esquirlas. Quiero decir que no se pon�a l�mites para pensar, incluso figuras inc�modas y antag�nicas para el pensamiento nacional, como Sarmiento, eran para Horacio una potencia para pensar lo popular, ya sea por la negativa, por sus cualidades, por su relaci�n. Era capaz de combinar a Sarmiento, Spinoza, Jauretche, Marx, Hegel, Borges, los poetas m�s experimentales, las tragedias griegas, el peronismo, la pregunta por el lenguaje, todas son l�neas de una trama que se anuda de forma �nica en su nombre. Ten�a la rara virtud de pensarlo todo.

��������� En este sentido, Horacio era un pensador de la modernidad. Lo hemos escuchado en sus clases de sociolog�a pero tambi�n sobre literatura Argentina, sobre salud mental, el peronismo, la cultura nacional, la coyuntura social. Cuando Horacio pensaba ‑y para alguien como �l decir pensar es decir, accionar, intervenir, actuar en el campo social‑ lo que hac�a era salir de los lugares comunes, era poner en relaci�n lo que no estaba puesto en relaci�n, era siempre la posibilidad de contribuir a algo m�s grande, a eso que podr�amos llamar el esp�ritu de nuestra patria plurinacional.

��������� Y ten�a una virtud a�n m�s exc�ntrica y preciosa. Fue un intelectual en la marea de la gesti�n estatal. Diez a�os en la conducci�n de la Biblioteca Nacional, diez a�os en los que la Biblioteca Nacional se convirti� en un laboratorio abierto de experiencias y pr�cticas culturales populares.

��������� Horacio era un intelectual que no dejaba de lado las emociones. A menudo se lo pod�a escuchar diciendo que al mejor poder se lo puede reconocer por sentimientos o advirti�ndonos que deb�amos trascender nuestro momento o que una comunidad es un s�ntoma de libertad; pero sobre todo Horacio era y es una presencia. Con su voz inconfundible envolv�a y encantaba a quien tuviera delante, su voz era de canto de la tierra pol�tica, a su modo de hablar misterioso, a la vez lento y r�pido, a la mirada profunda con sus ojos peque�os, lejanos, inquietos, no se les escapaba nada.

��������� Ese modo de moverse cuando hablaba, porque en �l lenguaje no verbal era tan importante como el verbal, sus gestos brillantes, que nos quedan en la memoria para siempre, la presencia de un cuerpo que era siempre una promesa de que algo inesperado, vital, luminoso, desconcertante estaba por pasar.

��������� Amamos a Horacio Gonz�lez y de ese amor nos vamos alimentar para seguir haciendo de nuestra vida pol�tica y social un espacio de libertad. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Para un homenaje, tiene la palabra el se�or diputado Mart�nez, por Santa Fe.

 

Sr. Mart�nez.- Se�or presidente: en tiempos tan dif�ciles, donde muchas veces nos vemos privados de hacer las despedidas necesarias de muchos argentinos y argentinas que son v�ctimas del COVID-19 o no, pero igualmente tenemos restricciones para hacerlas, quiero realizar un homenaje a dos compa�eros trabajadores de esta C�mara que fallecieron en estos �ltimos meses y fueron personas muy importantes en el funcionamiento cotidiano de la administraci�n de la C�mara de Diputados. Estamos hablando de los compa�eros Juan Carlos Gallegos y Carlos Federico Guerrero.

��������� Para los que no los conocen, fueron personas con ampl�simas responsabilidades, principalmente, en el �rea de �comisiones. Juan Carlos Gallego, ingres� en 1973 con la recuperaci�n de la democracia; con el golpe militar fue cesanteado, torturado y preso. Cuando el presidente Alfons�n asume es designado secretario de la Comisi�n de Defensa Nacional de la C�mara Diputados; particip� activamente en la Comisi�n de Hacienda y Administraci�n de la Convenci�n Constituyente; particip� de la Convenci�n Estatuyente de la Ciudad de Buenos Aires; en julio de 1999 fue designado director de comisiones hasta el momento en que se jubil�.

��������� Carlos Federico Guerrero, "Carlitos", ingres� tambi�n en 1973; fue v�ctima del golpe militar, fue secuestrado y torturado en una comisar�a durante la dictadura; cuando recuperamos la democracia fue designado secretario la Comisi�n de Recursos Naturales; particip� de la Convenci�n Constituyente, en la Secretar�a de la Comisi�n de los Sistemas de Control; tuvo un rol muy similar en la Convenci�n Estatuyente de la Ciudad Buenos Aires, en 1996; fue subdirector de Direcci�n Comisiones entre 1999 y 2004; tuvo un rol protag�nico en los tiempos donde en el Congreso se discut�a el juicio pol�tico a los que integrantes de la Corte Suprema de Justicia; estuvo muy comprometido con el Instituto de Capacitaci�n Parlamentaria que hoy conduce Carlos Lazzarini con tanta eficiencia; su �ltimo cargo en esta C�mara de Diputados fue en la Comisi�n de Peticiones Poderes y Reglamento.

��������� En el caso de Carlos, adem�s, fue un afiliado muy activo en la Asociaci�n del Personal Legislativo -APL- con una vida sindical muy integra y siempre vinculado a los derechos humanos.

��������� En primer lugar, quiero hacer este homenaje en reconocimiento a estas dos personas, que aquellos que tienen m�s tiempo en la C�mara de Diputados se deben acordar de ellos. Recuerdo que donde hoy est� la oficina de nuestra compa�era, Paula Penacca, en el tercer piso, estaba la oficna de Direcci�n Comisiones y yo lo conoc� en diciembre de 2005.

��������� Quiero hacer un reconocimiento a ellos, y en ellos, a todos los trabajadores legislativos, especialmente hacer una reivindicaci�n en estos tiempos de fuerte estigmatizaci�n de los compa�eros legislativos. Creo que nosotros tenemos que reivindicar su trabajo y, obviamente, en este homenaje hacerlo extensivo a todos los trabajadores de la Casa. (Aplausos.)

 

                                                                                                               ��III

A la memoria de Sergio Fausto Varisco

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Lacoste, por Entre R�os.

 

Sr. Lacoste.- Se�or presidente: quiero rendir un homenaje al diputado nacional, mandato cumplido, Sergio Fausto Varisco, fallecido el 27 de mayo �ltimo.

��������� Fue un dirigente que tuvo un rol importante en la pol�tica de mi provincia, Entre R�os, desde 1983 a la fecha. Fue un hombre de dialogo, cultor de acuerdos y de b�squeda de consensos permanentes. Nos represent� en esta C�mara entre el 2005 a 2009 con una destacada labor legislativa. Puso �nfasis, particularmente, en tres temas que fueron siempre motivo de preocupaci�n de su larga trayectoria pol�tica.

��������� El primero de ellos, los derechos humanos bien entendidos. Causa que abrazo desde muy joven, a fines de los 70, principios de los 80, levantando la consigna: Somos la Vida, Somos la Paz; luch� por la defensa del federalismo, particularmente, de los recursos en tiempos de una extraordinaria concentraci�n de recursos en el poder central; luch� por la defensa de la educaci�n p�blica, porque cre�a -como muchos de nosotros que estamos aqu�- que es la herramienta para resolver o empezar a resolver las asimetr�as sociales.

��������� En lo partidario ocup� casi todos los cargos. Fue presidente de la Juventud Radical provincial, del Comit� Provincial de Mayores; fue secretario de la mesa del Comit� Nacional de la Uni�n Civica Radical; fue delegado de la Convenci�n Nacional del partido; fue presidente del Foro de Intendentes Radicales de mi provincia, y tambi�n fue vicepresidente del Foro Nacional de Intendentes de la Uni�n C�vica Radical.

��������� Sus vecinos de Paran� lo eligieron dos veces intendente. En 2003, en tiempos de la peor performance electoral del radicalismo, donde apenas alcanzamos un 2 por ciento con Leopoldo Moreau como candidato a presidente, Varisco fue candidato a gobernador de la provincia y obtuvo un 35 por ciento. Ten�a cierto desd�n por los bienes materiales, a excepci�n de los libros, y si eran de la �historia de la Uni�n C�vica Radical, m�s los atesoraba.

��������� El periodista Antonio Tardelli, un destacado periodista de Paran�, al escribir la cr�nica de su muerte dijo que la sociedad no lo vinculaba con la pol�tica corrupta y consider� una rareza que pudiera gozar de ese privilegio, pese a la situaci�n judicial en la que se encontraba. Nadie lo caracteriz� jam�s como un pol�tico ladr�n; su austeridad personal nunca fue motivo de disputa.

��������� A Sergio Varisco la muerte no lo hizo un buen tipo, como habitualmente sucede, lo hizo un buen tipo su vida pol�tica que desarroll� con aciertos y errores, como cualquier dirigente, pero con una marca indeleble de honestidad en el manejo de los recursos p�blicos. Fue un hombre que no se enriqueci� en la pol�tica y no se permiti� jam�s el m�s m�nimo privilegio personal cuando cumpli� funciones p�blicas. Varisco se muri� esperando Justicia. Varisco se muri� denunciando que se viol� el principio de congruencia, porque fue acusado de un delito del que se defendi� y fue declarado absuelto, y fue condenado por otro, sin sentencia firme, porque tal vez hab�a que correrlo de la cancha.

��������� Varisco se muri� denunciando que hab�a sido v�ctima de un entramado pol�tico, judicial y medi�tico del que habr�an participado, adem�s, servicios de inteligencia. Aport� nombres, datos y circunstancias; ser�a bueno que la Comisi�n Bicameral de Fiscalizaci�n de los Organismos y Actividades de Inteligencia se ocupara de este tema.

��������� Sergio, donde quiera que est�s, quiero decirte que Bidone, el fiscal suspendido de Mercedes, a principios de junio �ltimo, en su ampliaci�n de indagatoria ante el Tribunal Oral Federal en la causa que se le sigue al falso abogado, falso agente de inteligencia, falso agente de la DEA, Marcelo D'Alessio, describi� los v�nculos que siempre denunciaste entre la pol�tica y estos servicios paralelos. Se te fue la vida, pero la verdad se acerca. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Se va a girar a la Comisi�n Bicameral de Fiscalizaci�n de los Organismos y Actividades de Inteligencia el discurso del diputado Lacoste, ya que hay una solicitud impl�cita en su discurso para que la misma se aboque al tema mencionado.

��������� Tiene la palabra la se�ora diputada Cresto, por Entre R�os.

 

Sra. Cresto.- Se�or presidente: quiero aprovechar tambi�n este espacio del que disponemos los legisladores para resaltar la personalidad y trayectoria de un gran referente de la pol�tica entrerriana como fue, sin duda, Sergio Varisco.

��������� Como reci�n lo manifest� mi colega -el diputado Lacoste-, Varisco falleci� semanas atr�s en la ciudad de Paran�, capital de mi provincia. Puede ser que les llame la atenci�n que una legisladora del signo pol�tico contrario al de Sergio Varisco quiera poner en valor su recuerdo en esta C�mara de Diputados. Sin embargo, creo que las diferencias partidarias no invalidan el respeto y la consideraci�n que uno debe tener por los adversarios, m�s a�n, cuando el adversario hizo m�ritos que justifiquen ese reconocimiento.

��������� Como bien dijo reci�n el diputado Lacoste, Varisco fue intendente de Paran� en dos per�odos, fue diputado nacional, candidato a gobernador y ocup� varios cargos partidarios. Lo que est� claro es que en las �ltimas d�cadas tanto desde la Uni�n C�vica Radical, como desde el escenario de la pol�tica entrerriana, Varisco fue protagonista.

Creo que principalmente debemos resaltar que Sergio Varisco fue un pol�tico de raza que abraz� con pasi�n la pol�tica y defendi� sus ideales y convicciones sin medias tintas ni tibieza. �Muchas veces fue duro y frontal, pero siempre entendi� a la pol�tica como una herramienta transformadora de los pueblos.

��������� Alguien utiliz� la palabra �anacr�nico� para describir la poca simpat�a que ten�a Varisco por las recetas prefabricadas que muchas veces utilizan los especialistas en marketing y las consultor�as que pretenden vender a los pol�ticos como si fueran autos o marcas de dise�o. �Yo no comparto esa definici�n; en realidad, creo que a Varisco ‑un pol�tico formado en la pol�tica del mano a mano, del cara a cara y de la charla frontal con el militante‑ le resultaron un poco inc�modas ciertas pr�cticas de maquillaje y simulaci�n tan propias del espacio pol�tico con el que se ali� en los �ltimos a�os. Esto pone de relieve a pol�ticos como Varisco, quienes consideran a la pol�tica mucho m�s que como mensajes positivos y afiches coloridos.

��������� Como reci�n se�alaba el diputado Lacoste: �fue Varisco v�ctima de pr�cticas de manipulaci�n, espionaje y golpes bajos que sus aliados usaron hasta el hartazgo contra otros dirigentes pol�ticos y actores sociales? Aunque son otros quienes deber�n contestar estos interrogantes, es importante que lo hagan porque estamos en democracia y es fundamental que se distinga la verdad de la mentira y que se termine con estas pr�cticas o intenciones de falsear la realidad.

��������� Para terminar, quiero dejar a Luc�a ‑la hija de Sergio, quien seguramente defender� y preservar� el legado de su padre‑ y a sus familiares y amigos un gran saludo desde la banca del Frente de Todos de esta peronista entrerriana.

 

                                                                                                              ��IV

A la memoria de Macacha G�emes

Sr. Presidente (Massa).- Para un homenaje, tiene la palabra la se�ora diputada Figueroa, por Salta.

 

Sra. Figueroa.- Se�or presidente: adem�s de recordar al general Mart�n Miguel de G�emes al conmemorarse los doscientos a�os de su fallecimiento, tambi�n quiero homenajear a Macacha, su hermana.

��������� Macacha, junto a Mart�n Miguel de G�emes, fue la �lideraza� de la revoluci�n y de la independencia argentina.

��������� Quiero resaltar que el 22 de marzo de 1816 los generales Rondeau y G�emes firmaron el Pacto de los Cerrillos, se�alado por algunos historiadores como el s�mbolo de la unidad nacional. Ese mismo pacto fue celebrado por el general San Mart�n con una salva de veinte ca�onazos en Mendoza.

��������� El historiador Felipe Pigna denomina a Macacha como la operadora pol�tica, ya que fue consejera en las distintas batallas que pele� su hermano de Mart�n Miguel de G�emes y particip� de los actos de gobierno y de guerra como organizadora de las redes de mujeres esp�as para la causa de la independencia.

��������� Cabe resaltar que Macacha varias veces reemplaz� a Mart�n Miguel de G�emes cuando era gobernador, as� como tambi�n desbarat� conspiraciones en su contra.

��������� En 1819 Macacha fue encarcelada junto a su madre, su esposo y dem�s personas. A partir de ese entonces, un grupo de mujeres colaboradoras de la revoluci�n libertaria sali� a la calle con el gauchaje a pedir por su liberaci�n. Ese hecho fue denominado hist�ricamente como �La revoluci�n de las mujeres�.

��������� Las mujeres hemos sido invisibilizadas a lo largo de la historia, la que muchas veces fue escrita por hombres. Nuestra responsabilidad es ejercer el revisionismo hist�rico, reconociendo y poniendo en valor la lucha de las mujeres a lo largo y ancho del pa�s, especialmente a partir de la gesta emancipadora que encabez� el general Mart�n Miguel de G�emes, donde tuvimos un papel sustancial en la lucha por la liberaci�n.

��������� Por lo expuesto, quiero homenajear a Macacha y a trav�s de ella a todas las mujeres de nuestro pa�s, las hist�ricas y las actuales, que luchan por la defensa del territorio y de la naturaleza. Entre ellas, quiero nombrar a Luc�a Ruiz, a Teresita Fr�as, a Gregoria L�pez y a M�nica Romero, todas ellas de mi provincia; y a Milagro Sala de la provincia vecina de Jujuy.

��������� Finalmente, reitero nuestro homenaje a Macacha y a todas nuestras mujeres que a lo largo y ancho del pa�s luchan por la liberaci�n, la independencia y la justicia social.

 

                                                                                                               ��V

A Tehuel de la Torre

Sr. Presidente (Massa).-� Para un homenaje, tiene la palabra el se�or diputado Medina, por Buenos Aires.

 

Sr. Medina.- Se�or presidente: la verdad es que no har� un homenaje, sino un simple recordatorio ya que estamos a diez d�as de que se cumplan cuatro meses de que un vecino de San Vicente, mi ciudad, saliera de su casa con la esperanza de conseguir un trabajo y no volviera nunca m�s.

��������� A pocos d�as de haberse celebrado el D�a Internacional del Orgullo LGBT, recuerdo que Tehuel de la Torre no pudo festejar el orgullo que sent�a por haber elegido ser como es.

 

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Comisi�n de Asuntos Constitucionales, doctor Hern�n P�rez Araujo.

 

Sr. Medina.- Hoy su familia est� destrozada y muchos nos seguimos preguntando qu� pas�, d�nde est� Tehuel y por qu� los detenidos no hablan.

��������� Al mismo tiempo, seguimos pidi�ndole al Ministerio de Seguridad de la Naci�n, al Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires y a la Justicia actuante que no dejen de buscar a Tehuel. Reitero que necesitamos saber qu� pas�, d�nde est� y que hoy su silencio se convierte en un gran grito de justicia para que todos sepamos d�nde est� Tehuel.

 

                                                                                                              ��VI �

A la memoria de Norberto Centeno y los abogados laboralistas desaparecidos en la �Noche de las Corbatas�

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Para un homenaje, tiene la palabra la se�ora diputada Siley, por Buenos Aires.

 

Sra. Siley.- Se�or presidente: en esta oportunidad no har� un homenaje a t�tulo personal sino en nombre de todos los diputados y diputadas de extracci�n sindical que formamos parte del bloque del Frente de Todos, Todas y Todes. Se trata de un homenaje a Norberto Centeno y a todos los abogados y abogadas laboralistas y a sus familiares desaparecidos en la denominada �Noche de las corbatas�, ocurrida entre el 6 y el 8 de julio de 1977.

��������� Norberto Centeno era el m�s viejo de un grupo de abogados laboralistas, conocido no solamente por su compromiso con los trabajadores y trabajadoras y las organizaciones sindicales que representaba como abogado letrado, sino tambi�n por ser el encargado, en nombre de la Confederaci�n General del Trabajo, de redactar en 1974 el proyecto que luego el general Juan Domingo Per�n enviara al Congreso de la Naci�n sobre contrato de trabajo, la ley 20.744.

��������� Hoy es un d�a de homenajes, tanto a la UCR como al partido peronista. En el Senado, se aprob� por unanimidad la ley de contrato de trabajo que enviara Centeno. El presidente del bloque de la UCR, Carlos Perette, en su momento pronunci� unas hermosas palabras finales diciendo: �El bloque va a adherir y a votar la norma en particular y en general.� Luego agreg�: �Queremos que haya ley de contrato de trabajo, queremos que haya justicia social, como queremos que haya libertad en la Argentina.� Esto lo dec�a un senador de la UCR en oportunidad de votar esta ley.

��������� Luego, en la dictadura militar no solamente secuestraron, torturaron y asesinaron a Centeno, sino que adem�s desguazaron el cuarenta por ciento de esta ley de contrato de trabajo. Le cambiaron varios art�culos y suprimieron otros tantos, llegando a sacar alrededor de 125 art�culos de la norma. F�jense ustedes que, no por casualidad, tambi�n fue la dictadura militar la que increment� la pobreza y la desocupaci�n de manera abrumadora en la Argentina. Esto demuestra una vez m�s que en los momentos en los que el modelo econ�mico destruye el empleo, y quita el trabajo genuino y registrado que se necesita para desarrollar la vida, tambi�n se reducen los derechos laborales. Por suerte, bajo la premisa del general Per�n, quien hoy tambi�n ha sido homenajeado, nuestro gobierno plantea la generaci�n de empleo y la acompa�a con m�s y mejores derechos laborales.

��������� Este homenaje es a la memoria de Centeno, quien podr�amos decir que adem�s era un constitucionalista, porque fue quien a trav�s de esta ley originaria de contrato de trabajo respet� m�s cabalmente el art�culo 14 bis de la Constituci�n Nacional, que brega no solamente por evitar el despido arbitrario ‑a trav�s del sistema de indemnizaci�n‑ sino que tambi�n plantea el reparto en las ganancias y el control en la producci�n de las empresas. Vaya este homenaje a la memoria de Norberto Centeno de parte de quienes somos diputados y diputadas de extracci�n sindical. (Aplausos.)

 

                                                                                                             ��VII

A la memoria del doctor Hermes Juan Binner

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Tiene la palabra el se�or diputado Est�vez, por Santa Fe.

 

Sr. Est�vez.- Se�or presidente: en primer lugar, saludo a los compa�eros y a las compa�eras del peronismo por este nuevo aniversario del fallecimiento de Juan Domingo Per�n, y a los correligionarios y a las correligionarias de la Uni�n C�vica Radical por el 130 aniversario de la creaci�n de su partido.

��������� Vengo a hacer un homenaje a uno de los principales referentes de la historia del socialismo: Hermes Binner. El s�bado pasado se cumpli� un a�o de su fallecimiento. En el homenaje a Hermes tambi�n hago un homenaje al Partido Socialista, que hace poquitos d�as tambi�n cumpli� 125 a�os de su creaci�n.

��������� Hermes, sin duda alguna, fue hijo de esas ideas y de esos valores, como tambi�n de las ideas y de los valores de la Reforma Universitaria, y creo que este homenaje es para recordar un camino y proyectar un ejemplo.

��������� Hermes Binner, desde su temprana juventud en aquella Facultad de Ciencias M�dicas de la Universidad Nacional de Rosario, en la d�cada del 60, abraz� la militancia pol�tica, y las ideas y los valores de la Reforma Universitaria de 1918. En el d�a de ayer se le hizo un justo homenaje y reconocimiento desde la Universidad Nacional de Rosario con el Doctorado honoris causa y poniendo su nombre al comedor universitario del �rea Salud, algo que sin duda a Hermes lo hubiera llenado de orgullo y alegr�a. En aquellos a�os ‑particularmente, en la d�cada del 60 que fue tan importante y dolorosa para la universidad p�blica argentina‑, Hermes puso su vida al servicio de esas ideas.

��������� Ya como estudiante de medicina, Hermes entendi� la importancia de poner el conocimiento al servicio de una pr�ctica que garantice derechos. En aquellos a�os ‑d�cadas del 60 y 70‑, Hermes, con otros estudiantes y algunos graduados, arm� desde ese Centro de Estudiantes un dispensario, una salita, y creo que fue ah� donde form� fundamentalmente su idea de lo que era un sistema de salud p�blica. Muchos a�os despu�s llev� adelante esa idea, y sent� los cimientos de ese sistema cuando fue secretario de Salud de la Municipalidad de Rosario. Claramente, en esa pr�ctica entendi� que lo m�s importante de un sistema de salud p�blica eran los centros de salud; y debe ser por eso que hoy en la ciudad de Rosario, en promedio, no hay centros de salud a m�s de quince cuadras de distancia de cada rosarino o rosarina. Esto no fue una construcci�n de una �nica persona; esto fue una construcci�n colectiva, donde todos quienes participaron de ese sistema de salud, participaron tambi�n en su dise�o, algo que Hermes, a lo largo de toda su vida, reivindic�, incluso cuando fue diputado nacional, al presentar en esta C�mara un proyecto para generar un sistema �nico de salud en la Argentina.

��������� Binner fue intendente y cambi� rotundamente casi todas las caracter�sticas de la ciudad de Rosario, siempre bajo la idea de no administrar bien un viejo Estado ‑como �l dec�a‑, sino de construir un nuevo Estado.

��������� D�jeme extenderme, se�or presidente; s� que estoy pasado en el tiempo, pero para m� es importante poder decir lo siguiente. No le tocaron a�os f�ciles. Hermes Binner atraves� la crisis de 2001 siendo intendente y ‑por ser un gestor transparente y cercano a la gente‑ siempre dio la cara, y particip� de todas y cada una de las asambleas que se hac�an en aquellos a�os. En 2007 fue electo gobernador y se transform� en el primer gobernador socialista en la historia de nuestro pa�s. Abri� caminos y planific� obras que otros iban a inaugurar. Para Hermes no hab�a lugar para la improvisaci�n y siempre manifestaba la necesidad de estudiar para transformar la realidad.

��������� Termino diciendo que Hermes Binner fue un referente de la buena pol�tica, que crey� en el di�logo y el respeto como herramientas para la construcci�n y la consolidaci�n de acuerdos. Tambi�n crey� en la escucha: era com�n ver a Hermes caminar por su ciudad, en el marco de sus responsabilidades p�blicas, solo y sin custodia, escuchando a la gente.

��������� Comenc� diciendo que este tambi�n era un homenaje al Partido Socialista en sus 125 a�os, porque Hermes no hubiera podido ser lo que fue sin ser consecuente, a lo largo de su vida, con las ideas y los valores del socialismo. Fue Hermes quien llev� hasta lo m�s alto ese concepto que nos diera el fundador del Partido Socialista en la Argentina, Juan B. Justo, de �manos limpias, u�as cortas�. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo)-. Tiene la palabra el se�or diputado Valdes, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

-     Luego de unos instantes:

 

                                                                                                            ��VIII

A la memoria del doctor Arturo Umberto Illia

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Dado que no se encuentra presente el se�or diputado Valdes, tiene la palabra el se�or diputado V�ctor Hugo Romero, por C�rdoba.

 

Sr. Romero (V.H).- Se�or presidente: hoy venimos a recordar la gesti�n de un gran presidente: el doctor Arturo Umberto Illia.

��������� El 28 de junio de 1966 se produjo ese golpe nefasto para la Argentina. Quien les habla, proviene del municipio de Villa de Soto, que forma parte del departamento de Cruz del Eje. La verdad es que no puedo esconder la emoci�n de poder dirigir unas palabras relacionadas con la gesti�n del doctor Illia, a quien conoc� desde joven; abrac� su causa del radicalismo. Adem�s, conoc� su calidad humana en el ejercicio de la medicina. Ocup� distintos cargos y lleg� a la presidencia el 12 de octubre de 1963. Gobern� sin estado de sitio, con plena vigencia de la Constituci�n Nacional, sin proscripciones, con el celo defensor de la independencia de los poderes y la tan ansiada libertad de prensa y de expresi�n.

��������� Argentina tuvo un per�odo de crecimiento basado en un plan de gobierno cuyo pilar era la honestidad y la austeridad; pero su gobierno no se limit� a la honestidad. Adem�s, en su corto per�odo, gener� un crecimiento econ�mico y social. Destin� el 23 por ciento del presupuesto a la educaci�n p�blica, cre� el Plan Nacional de Alfabetizaci�n. El presidente Illia siempre estuvo convencido de que, al brindar m�s educaci�n y capacitaci�n, la persona era m�s independiente. Durante su gesti�n se produjo un gran crecimiento econ�mico: increment� el PBI; en 1964, creci� un 10 ciento y, en 1965, un 9 por ciento. Las exportaciones -sin l�mites- permitieron contar con una balanza comercial favorable. En su gesti�n no contrajo un solo peso de empr�stito ni de cr�dito internacional. Disminuy� la deuda externa, aument� el 35 por ciento de la producci�n industrial, pero tambi�n puso la mira en las remuneraciones de los obreros creando la ley de Salario M�nimo Vital y M�vil, garantiz�ndoles su poder adquisitivo. Disminuy� la desocupaci�n del 8 al 5 por ciento, fortaleci� la salud sancionando una ley de medicamentos que regulaba la producci�n y comercializaci�n; consideraba al medicamento como bien social.

��������� En su gesti�n se desarrollaron varias obras p�blicas, pero siempre se caracterizaron por estar relacionadas con el desarrollo, como la Represa H�drica El Choc�n.

��������� Lamentablemente, la complicidad de las corporaciones nacionales e internacionales, los sindicatos, y el periodismo, fueron creando un clima adverso para su gobierno y alimentaron la imagen p�blica de una gesti�n a cargo de una persona lenta e inoperante. As� se produjo el golpe del 28 de junio de 1966, ante la indiferencia de la sociedad argentina que no lo repudi� ni gener� acciones ante tal hecho. Pasaron 55 a�os, pero a partir de aquel golpe y de aquella fecha los argentinos empezamos a ser considerados y a poner en valor su gesti�n. Pasamos de la indiferencia a la valoraci�n de su gesti�n, anhelando volver al camino del crecimiento. El Premio Nobel Luis Federico Leloir sostuvo que la Argentina tuvo un breve per�odo de oro en las artes, la ciencia y la cultura, entre 1963 y 1966.

��������� Hoy m�s que nunca necesitamos volver al camino del progreso, con el respeto de las instituciones, fortaleciendo la pol�tica como el espacio del di�logo para generar y solucionar los problemas que nuestra sociedad nos requiere.

��������� En uno de sus discursos manifest� lo siguiente: �Nuestra democracia como forma de vida, no podr� lograrse a no ser que estemos resueltos a aceptar modificaciones sustanciales en las actuales estructuras econ�mico-sociales de nuestro pa�s, que devuelvan al pueblo la fe en sus instituciones y gobernantes�. Quienes representamos al pueblo argentino tenemos que tomar esos valores de honestidad y austeridad, y convertirnos en verdaderos servidores p�blicos. Combatir la desigualdad y la pobreza tiene que ser nuestro objetivo. Este es el legado que nos dej� Arturo Illia. Hay que dejar de lado las diferencias sectoriales para convertir a la Argentina en una sociedad m�s justa y libre. El legado que nos deja es enorme y el desaf�o es gigante. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Para el mismo homenaje, tiene la palabra el se�or diputado Iglesias, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Iglesias.- Se�or presidente: quiero homenajear a Don Arturo, un piamont�s en la Argentina. Austeridad, sencillez, honestidad -todas caracter�sticas que en Italia se reconocen a los piamonteses- se encontraban en este presidente de la Argentina.

��������� Recuerdo que yo era alumno del Normal de Avellaneda, �bamos en el micro y cant�bamos una canci�n a favor de Ongan�a y en contra de Illia, repitiendo idioteces. Quien les habla ten�a 9 a�os y pertenec�a a una familia de clase media y de laburantes. Todo el pa�s particip� de ese desastre. Tambi�n guardo en mi memoria personal la foto de la asunci�n del gobierno que lo sucedi�. Estaban el general Ongan�a, y en la primera fila hab�a representantes de las 62 organizaciones peronistas, el �Lobo� Vandor y Taccone. Recuerdo que al domicilio de mi abuelo -obrero de Luz y Fuerza- llegaba la revista con Taccone en la tapa. Ah� estaba Taccone, al que yo ve�a en la revista de Luz y Fuerza que recib�a mi abuelo. Todo se gest� con la complicidad de dos grandes sectores: el partido militar y el partido populista peronista, si es que lo quieren llamar de esa forma.

��������� Voy a leer una declaraci�n que lleg� en ese momento de Madrid. �Adivinen qui�n envi� estas declaraciones desde Madrid? Dice as�: �Para m� este es un movimiento simp�tico porque se acort� una situaci�n que ya no pod�a continuar�. As� nos hablaba el coronel desde Madrid. Y sigue diciendo: �Cada argentino sent�a eso. Ongan�a puso t�rmino a una etapa de verdadera corrupci�n.� Esto es ins�lito. �Illia hab�a detenido al pa�s. Si el nuevo gobierno procede bien, triunfar�. Es la �ltima oportunidad de la Argentina para evitar que la guerra civil se transform� en la �nica salida�. Estamos hablando del golpe militar de 1966. Adem�s, afirmaba lo siguiente: �Simpatizo con el movimiento militar porque el nuevo gobierno puso coto a una situaci�n catastr�fica. Como argentino hubiera apoyado a todo hombre que pusiera fin a la corrupci�n del gobierno de Illia�. Estas son las declaraciones del entonces -creo- coronel Per�n, desde Madrid.

��������� Esa es la responsabilidad hist�rica. Per�n dec�a que simpatizaba con el gobierno militar. De los siguientes diez presidentes de la Argentina, ocho ser�an militares: Ongan�a, Levingston, Lanusse, C�mpora, Per�n, Isabel Mart�nez, Videla, Viola, Galtieri y Bignone. Esa fue la puerta que abrieron: �simpatizo con el movimiento militar�. Dec�an que Illia hab�a detenido el pa�s. Durante su gobierno hubo un 10,1 por ciento de crecimiento del PBI en 1964; 10,6 por ciento en 1965; 18,9 por ciento y 13,8 por ciento de crecimiento de la industria. La deuda externa baj� un 35 por ciento. Las reservas del Banco Central crecieron 1.500 por ciento. Se duplic� el porcentaje del presupuesto nacional destinado a educaci�n. La participaci�n de los trabajadores en la renta nacional tuvo un aumento del 4,8 por ciento. Ese era el pa�s detenido del que hablaba Per�n en 1966. Esa era la situaci�n catastr�fica. �ltima oportunidad para evitar la guerra civil, nos dice el general desde Madrid. Sabemos lo que sigui�: la barbarie militar de Ongan�a, la barbarie montonera y el crimen de Aramburu. Sigui� la lucha demente entre la Triple A peronista y los �monto� peronistas; las primeras desapariciones y las primeras listas negras en nuestro pa�s. Y apenas diez a�os despu�s, vino la noche m�s negra: la de la dictadura genocida.

��������� Se lo recuerdo, se�or presidente, porque en el marco de este crecimiento por encima del 10 por ciento, hubo un plan de paros de la CGT para voltear a Illia, como lo hubo contra Alfons�n. Se lo digo a algunos que son alfonsinistas, pero alfonsinistas de Ricardito. (Aplausos.) Y lo m�s dram�tico...

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Vaya redondeando su discurso, se�or diputado.

 

Sr. Iglesias.- Ya termino, se�or presidente.

��������� Adem�s del desastre, la barbarie y la conversi�n de la lucha pol�tica en lucha militar y en sangre de todos los que fueron responsables ‑en primer lugar, los militares y, en segundo lugar, los que apoyaron ese golpe militar‑, ese fue el �ltimo pa�s. Lo recuerdo muy bien. Fue la Argentina de los a�os 60. Lo vi en su n�cleo productivo, en Pi�eiro, el barrio obrero de Avellaneda, con sus obreros engominados, que llegaban en la Siambreta, en el Siam, en el Fiat 600, y al mediod�a, cuando sonaba el timbre, iban a la fonda a comer milanesas y ravioles. Vayan ahora, los que rompieron la provincia, los que rompieron Avellaneda, los que rompieron el pa�s, a ver a los chicos tirados en los cordones tomando cerveza, con trabajos en negro, con kioscos de venta de droga.

��������� Eso es lo que se rompi� en 1966, la �ltima Argentina con �ndices de pobreza y de desocupaci�n de un d�gito. Esa era la Argentina en situaci�n catastr�fica de la que nos hablaba alguno desde Madrid.

��������� Reitero mi homenaje a Arturo Illia y a aquella Argentina en cuya infancia feliz me cri�. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).-� Solicito encarecidamente que respetemos el acuerdo de la Comisi�n de Labor Parlamentaria, que asign� tres minutos a cada orador para rendir estos homenajes.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Asseff, por Buenos Aires.

 

Sr. Asseff.- Se�or presidente: quiero expresar austeramente, como era austera la vida y la conducta del presidente Illia, unas breves palabras para rendir homenaje a ese presidente democr�tico, republicano, institucionalista, honorable, eficiente, sobresaliente y excepcional buen administrador porque con una dificultad pol�tica -no ten�a mayor�as en las C�maras ni un poder pol�tico suficientemente sustentado o fortalecido-, pudo hacer crecer al pa�s, pagar la deuda externa, enfrentar a los laboratorios, mantener la m�s absoluta libertad, levantar la proscripci�n que originariamente exist�a para la fuerza pol�tica del peronismo, que en 1965, en la primera elecci�n de medio t�rmino ‑en aquel tiempo eran seis a�os de mandato‑ pudo competir y llegar a la C�mara de Diputados con una nutrida representaci�n.

          El pa�s marchaba muy austeramente conducido por el doctor Illia, en una senda de progreso y de expectativas favorables. Los oradores propinantes en este homenaje me relevan de mencionar estad�sticas. Sin embargo, no quiero dejar de recordar algo que no se dijo. Cuando fue requerida la intervenci�n de la Rep�blica Argentina en la Rep�blica Dominicana, el presidente IIlia, siguiendo los lineamientos que ense�� Hip�lito Yrigoyen, se neg� rotundamente a hacerlo; no quer�a injerencias militares en nuestra Am�rica, y esto tambi�n hay que destacarlo.

          Quiero transmitir una breve vivencia personal. Fui uno del pu�ado de j�venes que estuvo esa noche y madrugada del 28 de junio de 1966 velando por la democracia, que estaba desfalleciendo. Toda la madrugada estuvimos acompa�ando al presidente, que se mantuvo en su despacho sin dormir, y a las 7 y 25 fue desalojado por la Guardia de Infanter�a de la Polic�a Federal comandada por el entonces general Alsogaray, que fue quien orden� literalmente que lo levantaran en vilo y lo sacaran a la explanada de la Casa de Gobierno. Ah� el presidente, con la modestia y austeridad republicana que lo caracteriz� toda su vida, como era su conducta -repito lo de la austeridad porque es la palabra m�s excelsa para destacar a este hombre ejemplar-, pidi� un taxi para irse a la casa de su hermano, en Mart�nez. Y apareci� un coche con el ministro de Educaci�n, que lo recogi� y lo llev� hasta ese domicilio.

          Junto con los ministros que hab�an estado hasta hac�a unos minutos a cargo de sus respectivas carteras, como el del Interior ‑a quien acompa��‑, salimos caminando, tomamos diagonal, la calle Florida hacia nuestros destinos. Evidentemente, era cierto lo que se dijo reci�n en esta C�mara por parte del diputado Romero: hab�a una indiferencia absoluta por parte del pueblo argentino. Indiferencia aturdidora, penosa.

          Por eso, quiero terminar mis palabras condenando la manipulaci�n, que hizo cierto periodismo, de la opini�n p�blica, como la revista Confirmado. Cuando el periodismo no cumple su alta misi�n �tica de informar con veracidad y objetividad, con independencia, y se sesga hacia determinados intereses, en este caso realmente espurios, el periodismo hace mucho mal. Vamos a defender siempre a la libertad de prensa, como la defendi� nuestro homenajeado presidente Illia, pero no podemos ocultar el rechazo a cierto periodismo al que llam�bamos ‑con viejo lenguaje‑ amarillento, que fue uno de los que caus� las condiciones que dieron lugar a este nefando golpe de Estado, uno de los peores y m�s nefastos hechos de nuestra historia.

 

                                                                                                              ��IX

A la memoria de los fallecidos en la Escuela N� 144 de Aguada San Roque, Neuqu�n

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Para un homenaje a los fallecidos en la escuela de Neuqu�n, tiene la palabra el se�or diputado Giordano, por Buenos Aires.

 

Sr. Giordano.- Se�or Presidente: en nombre de Izquierda Socialista, junto a la compa�era diputada M�nica Schlotthauer, voy a rendir un homenaje a la memoria de los dos trabajadores fallecidos por un crimen social, no por accidente, en la explosi�n en la Escuela N� 144 de Aguada San Roque, de Neuqu�n.

��������� Desde nuestra banca, como desde toda la docencia de Neuqu�n, queremos dar fuerza a M�nica Jara, que est� peleando por su vida en el hospital Castro Rend�n, con gran parte de su cuerpo quemado. Solo se salvaron los alumnos porque se hab�an ido antes. As� les paga el gobernador de turno, Omar Guti�rrez, del MPN, a quienes est�n en la primera fila, defendiendo la educaci�n p�blica. Lo mismo pas� con los trabajadores y las trabajadoras de la salud, que se tuvieron que revelar, con una lucha enorme, para lograr un aumento del 53 por ciento; les quer�an dar solo un 15 por ciento.

��������� En la provincia de Vaca Muerta, donde nos roban el petr�leo y el gas, las escuelas se caen a pedazos por falta de infraestructura. Se trata de la misma provincia donde asesinaron a Carlos Fuentealba por defender la educaci�n p�blica.

��������� Vaya este homenaje en memoria de los fallecidos: Nicol�s Franc�s, docente, que estaba haciendo una changa en esa escuela como gasista porque no le alcanza el salario, y su sobrino, Mariano, de 48 a�os, que lo estaba acompa�ando.

��������� La docente M�nica Jara se hab�a recibido en abril; este era el primer trabajo que hac�a como docente. Su tesis para recibirse fue sobre las condiciones laborales.

��������� F�jese, se�or presidente, la tremenda contradicci�n, no de ella, sino de estos gobiernos. Fue culpa del gobierno, no hubo ning�n accidente, que decidi� hace dos semanas la presencialidad a cualquier costo; incluso, amenazando a los directivos con sumariarlos si no abr�an las escuelas.

��������� Por supuesto, esto no ocurre solo en Neuqu�n. Nuestra agrupaci�n �Docentes en Marcha� dice que no es solo en Neuqu�n, sino que esto se repite en todo el pa�s por decisi�n de Alberto Fern�ndez, Trotta, Larreta y dem�s gobernadores. Me refiero a la presencialidad en medio de la pandemia, en el medio del invierno y con escuelas en p�simo estado.

��������� Ayer hubo una movilizaci�n enorme en Neuqu�n por una multisectorial, dirigentes opositores de ATEN, nuestra compa�era Ang�lica Laguna y los vocales del MPN del Consejo Escolar. Presupuesto para las escuelas, se�or presidente, no para la deuda; se han reconocido 430.000.000 de d�lares al Club de Par�s en estos d�as. �Qu� podemos decir de este crimen contra la docencia y sus m�rtires? Tendr�n que pagar los responsables pol�ticos, como tambi�n los responsables pol�ticos de Sandra y de Rub�n, en Moreno.

��������� Exigimos que CTERA no se haga la desentendida y convoque a un paro nacional porque no se trata de accidentes, sino de muertos por la desidia de los gobiernos. Se trata de muertos por la falta de inversi�n en la escuela p�blica.

��������� Vaya, entonces, nuestro homenaje. �Nicol�s, Mariano, presentes! �Fuerza a M�nica Jara! El Frente de Izquierda Socialista y el Frente de Izquierda Unidad apoyan todas las medidas de lucha de la docencia en esa provincia y en el pa�s por estos reclamos, repudiando estos dos cr�menes pol�ticos y sociales que hubiesen sido completamente evitables de haber existido una pol�tica distinta.

 

                                                                                                               ��X

A la memoria de Ramona Orellana Bustamante

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Para un homenaje a Ramoma Orellana Bustamante, tiene la palabra el se�or diputado Eduardo Fern�ndez, por C�rdoba.

 

Sr. Fern�ndez (E.).- Se�or presidente: esta ma�ana nos sorprendi� la noticia del fallecimiento de Guillermo Mariani, el Padre �Quito� Mariani, como lo conocimos muchos y muchas. Si bien ped� esta intervenci�n hace varios d�as para realizar un homenaje a Ramona Orellana Bustamante, no quer�a dejar de mencionar esta triste noticia, sobre todo por lo que su obra significa para el campo popular en la provincia de C�rdoba que hoy lo llora.

��������� Se�or presidente: el pasado 18 de junio, falleci� en mi provincia de C�rdoba una mujer de 95 a�os, cuyo nombre e historia quiero traer hoy a la C�mara de Diputados y pido a los diputados y a las diputadas que me acompa�en en este homenaje.

��������� Quiero hablar de Ramona Orellana Bustamante. Ramona del campo, la maravilla; Ramona, de un cacho de tierra y bosque nativo donde naci�, vivi� y muri�, a unos 20 kil�metros de Sebasti�n Elcano, en el departamento R�o Seco, en el norte campesino de la provincia de C�rdoba.

��������� La vida de Ramona no fue muy diferente a la de otras y otros campesinos de nuestra Argentina. Una Argentina que en los 90 le dio todas las ventajas al poderoso agronegocio, aquel que en mi C�rdoba avanz� muchas veces en la transformaci�n forzosa, voraz y violenta de la cultura rural, las econom�as regionales y la virtuosa relaci�n con el medioambiente que cultivan los peque�os productores serranos.

��������� Ramona se convirti� en un s�mbolo de resistencia porque pas� los �ltimos treinta a�os de su vida luchando por sostener la propiedad de su tierra, una isla de 150 hect�reas en medio de un mar de soja, donde criaba a sus animales: caballos, cabras, vacas y ovejas.

��������� All�, en la tierra que trabaj� y vivi� hasta su final, Ramona vio en 2003 c�mo las topadoras volteaban su casa, mientras la Justicia cordobesa daba cr�dito al reclamo de dos agroempresarios, aquellos que todav�a se adjudican la propiedad de dicha tierra en una maniobra que Ramona denunci� como una estafa hasta el d�a de su muerte.

��������� Voltearon su casa, pero Ramona se qued�. Con palos y nylon arm� un rancho al lado de las ruinas de su hogar y sigui� viviendo all�, hasta que un tractor volvi� a tirar abajo su techo, pero Ramona se qued�. Le envenenaron el pozo de donde ella y su hijo Orlando sacaban agua para vivir, pero Ramona se qued�. Le mataron algunos animales y Ramona resisti�.

��������� En 2018, le hicieron un juicio por usurpaci�n y fue sobrese�da. En el marco internacional de la lucha campesina, la Facultad de Filosof�a y Humanidades de la Universidad Nacional de C�rdoba la distingui� con el Premio Jos� Mar�a Aric� en reconocimiento a sus saberes ancestrales, la lucha por la tierra y la defensa de los recursos naturales.

��������� La vida de Ramona es un icono de dignidad que se transform� en ejemplo y permiti� exponer en la agenda p�blica los cientos de �Ramonas� que hay en C�rdoba, y que sabemos que tambi�n existen a lo largo y ancho de nuestro pa�s.

��������� Soportando hasta el d�a de su muerte la incertidumbre ante la posibilidad de desalojo, el fallecimiento de Ramona deja al Estado con una gran cuenta pendiente para con ella, su familia y todo el movimiento campesino. Hablo de la necesidad de poner en discusi�n el rol del Estado en el desarrollo de nuestras comunidades, en la necesaria y posible armon�a entre la producci�n, el trabajo rural, la vida campesina, la vida serrana, el medioambiente y el buen vivir.

��������� Hace dos semanas que Ramona falleci� en su campo, en su casita que voltearon dos veces y ella volvi� a levantar. All� se queda, record�ndonos todo lo que estamos haciendo mal y proponiendo, desde el ejemplo, una forma m�s humana de habitar este mundo.

 

                                                                                                              ��XI

Al Aniversario de la Provincializaci�n de R�o Negro

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- En conmemoraci�n del aniversario de la provincializaci�n de R�o Negro, tiene la palabra la se�ora diputada Landriscini, por R�o Negro.

 

Sra. Landriscini.- Se�or presidente, se�ores y se�oras legisladoras: ser� extremadamente breve, en honor al tiempo transcurrido de la sesi�n.

��������� Quiero recordar, a fin de hacer presente al Sur de la Argentina, que el 28 de julio de 1955 se promulgaba la ley 14.408, por la que el general Juan Domingo Per�n declaraba la provincializaci�n de R�o Negro y de Neuqu�n.

��������� R�o negro se convert�a en provincia y emprend�a un camino de autonom�a, democracia y soberan�a. Previamente, el 5 de abril del mismo a�o, el entonces presidente Per�n �a quien hoy honramos en el 47� aniversario de su fallecimiento- mantuvo un encuentro con representantes de distintas localidades patag�nicas que impulsaban las provincializaciones de lo que en aquel entonces eran el territorio nacional de R�o Negro y el territorio nacional de Neuqu�n. Per�n les dijo: �Vuelvan tranquilos a su tierra, porque antes de que lleguen a destino, el anteproyecto de las provincializaciones de los territorios estar� en el Congreso�; y as� fue. A ra�z de ello, se ha creado la provincia de R�o Negro con una Constituci�n que se sancion� el 10 de diciembre de 1957.

��������� No escapar� a ustedes que ya para ese entonces la democracia se hab�a transformado en dictadura y, por lo tanto, la b�squeda de una autonom�a y una democracia plena a nivel provincial no era posible de manera amplia, porque ya hab�a ocurrido el 16 de septiembre de 1955 con la revoluci�n que derroc� al gobierno constitucional a cargo del general Per�n.

��������� Resulta importante decir que, posteriormente, la ciudad de Viedma, elegida como capital transitoria, el 20 de octubre de 1973, recuperada la democracia y estando al frente un gobierno peronista en la Naci�n y en la provincia, fue convertida en capital definitiva de la provincia de R�o Negro.

��������� As� es como se pusieron en marcha planes de desarrollo regional y de obras p�blicas. El Estado estuvo presente generando trabajo, producci�n, riqueza y proyectos de desarrollo puestos en marcha desde a�os previos, tanto en los valles, en la zona atl�ntica, en los puertos y en obras de comunicaci�n.��

��������� Pero esos desarrollos colapsaron nuevamente cuando ocurri� el �ltimo golpe de Estado, que dur� desde 1976 hasta 1983. La provincia se fue reponiendo con dificultades de los programas neoliberales, del monetarismo y del ajuste sobre el Estado, la moneda y la producci�n. As� llegamos hasta el presente, en el que volvemos a disputar la econom�a, el trabajo y la producci�n gracias a un Estado presente, con desarrollo nacional y provincial con inclusi�n, soberan�a y sin deuda. El gobierno de Cambiemos hab�a llenado de deudas a las provincias ‑y deudas en d�lares‑ y hoy hay dificultades para pagarlas.

��������� Para recuperar las provincias no alcanza con gobiernos exclusivamente provincialistas. Necesitamos un modelo de desarrollo integran y nacional como el que hemos puesto en marcha el 10 de diciembre de 2019. As� lograremos el desarrollo definitivo de nuestras provincias patag�nicas.

 

                                                                                                             ��XII

A la memoria del padre Guillermo �Quito� Mariani

Sr. Presidente (P�rez Araujo). Para un homenaje al padre Guillermo �Quito� Mariani, tiene la palabra la se�ora diputada Gabriela Est�vez, por C�rdoba.

 

Sra. Est�vez.- Se�or presidente: en primer lugar, quisiera hacer m�as cada una de las palabras del diputado Eduardo Fern�ndez para homenajear a nuestra querida Ramona Orellana Bustamante, quien ha sido una bandera de lucha por la tierra en nuestra querida provincia de C�rdoba.

��������� Hablando de emblemas y banderas de lucha, quiero rendir homenaje a nuestro querido Guillermo �Quito� Mariani. Mariani fue, como el mismo se defin�a, sacerdote, escritor, scout, poeta y bailar�n. Fue un emblema de la lucha desde el amor y la solidaridad. Fue un ejemplo de cercan�a y de humanismo. En suma, fue alguien que ha dejado una huella en todos y cada uno de los que creemos que se pueden transformar las realidades.

��������� Fue sin duda un rebelde. Se expres� sistem�ticamente en contra del poder de la Iglesia. Entend�a que la Iglesia ten�a que ser un mecanismo de pr�dica del amor y en ning�n caso un mecanismo de control social. Mariani formaba parte del grupo del padre Angelelli. Estaba en cada una de las causas del pueblo. Acompa�aba esas causas, las militaba y estaba siempre presente. Fue un activista por la memoria, la verdad y la justicia. En la provincia de C�rdoba, siempre estaba encabezando las marchas del 24 de marzo al lado de los organismos de derechos humanos.

��������� Una de las cosas que Mariani siempre manifestaba era que la Iglesia del Dios todo poderoso no existe, que eso no puede ser as� ni tiene nada que ver con lo que predicaba Jes�s de Nazaret. �l hablaba del Jes�s que planteaba que hab�a que amar al pr�jimo como a uno mismo y que lo que verdaderamente deb�a promover la Iglesia era el amor hacia el otro. Esa ten�a que ser la s�ntesis de la predica de la Iglesia cat�lica. Por eso, tambi�n lo llamaban �el obispo de los ateos�. Muchas personas que son ateas y no son practicantes cat�licas, como yo, lo segu�amos porque hac�a de la solidaridad un camino. Desde la militancia, el activismo y el amor nos invitaba a transitar su camino a todos los que nos acerc�bamos a �l y ten�amos vocaci�n social.

��������� El abr�a los brazos muy ampliamente para la causa de los humildes. Lo hac�a desde la alegr�a. Sus misas en la cripta eran conocidas y muy convocantes porque las hac�a alegremente. Predicaba la esperanza. Lo hac�a desde la m�sica, los bailes y las pe�as, donde iban personas que a lo mejor ten�an una vida un poquito amarga porque les tocaba transitar un momento triste y all� se sent�an acompa�adas. �l regocijada esas almas por la enorme esperanza y amor que transmit�a.

��������� Hoy quiero acompa�ar a su familia. Tambi�n quiero recordar que Mariani, adem�s de ser un cura de pueblo, fue un perseguido pol�tico y tuvo que exiliarse. Cuando hace cuatro a�os le hicimos el homenaje en la C�mara de Diputados, con motivo de sus noventa a�os y con la presencia de su familia, una de las cosas que recordamos fue su rebeld�a y valent�a transformadoras, ya que no callaba y expresaba cada una de las injusticias que le toc� vivenciar. Por ejemplo, cuando se hizo la misa de despedida al padre Angelelli, a viva voz dijo que a su colega lo hab�an matado las Fuerzas Armadas. Eso le cost� la persecuci�n y el exilio.

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Honorable C�mara, doctor Sergio Tom�s Massa.

 

Sra. Est�vez.- Pero no baj� los brazos. Volvi� a la Argentina y a C�rdoba. Volvi� a predicar el amor por el otro y el amor por la patria. Las veces que nos ha tocado interactuar siempre me dijo que le transmitiera a Cristina Fern�ndez su enorme admiraci�n, amor y acompa�amiento. Quiero recordarlo as�: como un hombre que dio todo por el amor, que pensaba que la transformaci�n se hac�a desde el amor y que no cre�a en el pecado sino en el arrepentimiento. Cre�a en la humanidad y en las personas. La fe que ten�a y prodigada era por lo colectivo, por lo que pod�amos cambiar si hac�amos acciones que eran valiosas para la vida de los dem�s, sin ego�smo, con amor, con fe, con alegr�a, bailando, cantando y transmitiendo siempre much�sima esperanza. (Aplausos.)

 

                                                                                                            ��XIII

A la rebeli�n de �Stonewall�

 

Sr. Presidente (Massa).‑ Tiene la palabra la se�ora Schlotthauer, por Buenos Aires.

 

Sra. Schlotthauer.- Se�or presidente, se�ores diputados, se�oras diputadas y se�ores diputades: en nombre de Izquierda Socialista y de la bancada del Frente de Izquierda, junto con el compa�ero Giordano, quiero rendir homenaje a una rebeli�n que sucedi� a muchos kil�metros de este pa�s pero que sell�, tanto aqu� como en el mundo, el d�a del orgullo en el calendario de las luchas contra el patriarcado y la homofobia.

��������� Este es nuestro homenaje a las travestis, a las trans, a las lesbianas y a todas las personas no binarias que se levantaron el 28 de juni de 1969 en lo que se llam� �la rebeli�n de Stonewall�, que fue una lucha de tres d�as contra la persecuci�n y la criminalizaci�n llevada a cabo por la polic�a de Nueva York. All� se reclamaba contra el dominio heterosexual, contra la monogamia instalada por las iglesias y a favor del derecho a la libre elecci�n sexo‑afectiva, a la libre identidad y al ser.

��������� Cincuenta y dos a�os despu�s, la crueldad con la que son tratados los colectivos de la diversidad y la disidencia mantiene vigente las banderas de esa lucha. Hace unos d�as, justamente, estuvimos hablando en esta C�mara sobre este tema. Se mantiene vigente la lucha contra la patologizaci�n, contra la discriminaci�n y por los derechos civiles y sociales de todo el colectivo, ya que en el mundo capitalista y patriarcal actual son expulsadas todas las personas que no responden al esterotipo de relaciones heterosexuales. Un tercio de los pa�ses del mundo criminaliza las uniones entre personas del mismo sexo. En seis pa�ses del mundo se aplica la pena de muerte por realizar uniones civiles del mismo sexo, que no son criminalizadas en muy pocos pa�ses, entre ellos la Argentina.

��������� Millones de personas por los ajustes capitalistas son expulsados actualmente en el mundo, pero en particular este colectivo es de los m�s afectados.

��������� Entonces, estamos conmemorando esa lucha, en un momento que es muy dif�cil para ese colectivo y para todo el mundo, pero tambi�n crecen las luchas en contra de las injusticias. Entonces, el colectivo de la diversidad y las disidencias es hoy parte del batall�n que est� en las primeras l�neas de las luchas en Colombia y en Chile, y tambi�n fue protagonista de las luchas que conmovieron tanto contra el racismo en Estados Unidos.

��������� La Rep�blica Argentina est� avanzada en la legislaci�n, en particular, por la lucha del colectivo despu�s de la dictadura y las que se llevaron adelante en este pa�s por derechos civiles a partir de la rebeli�n de 2001, la del �Argentinazo�, que reclam� al poder pol�tico �Que se vayan todos�. Desde ah�, empezamos a tener numerosos derechos, entre ellos, el matrimonio igualitario, el derecho a la identidad y el cupo femenino que acabamos de votar. Falta presupuesto para esas leyes y para muchas m�s que demanda ese colectivo.

��������� Terminamos nuestro homenaje reclamando -junto con los que ya lo dijeron aqu�- la necesaria aparici�n con vida de Tehuel, con el compromiso del colectivo y con todas las luchas de pelear, desde nuestra bancada -la de la Izquierda Socialista-, por un mundo donde las personas tengamos socialmente igualdad, humanamente el derecho a ser diferentes y seamos totalmente libres.

 

                                                                                                           ��XIV

Al Instituto Nacional de Tecnolog�a Agropecuaria�

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Grande, por Salta.

 

Sr. Grande.- Se�or presidente: quiero homenajear a una instituci�n argentina extraordinaria, que es el Instituto Nacional de Tecnolog�a Agropecuaria, creada en diciembre de hace sesenta y cinco a�os. �

��������� Cabe precisar que elijo este momento, porque el INTA est� a punto de ser desguazado. Yo tengo una larga relaci�n con el instituto, porque mi vida ha sido una vida agropecuaria: desde los 16 a�os, en el kil�metro 280, en Pichanal, plantando tabaco Burley en zonas que eran absolutamente tropicales; tambi�n como periodista agropecuario desde hace treinta y cinco a�os; como asistente del productor tabacalero que era mi padre; como productor ovino en un proyecto de queso de ovejas; y, m�s tarde, como pol�tico en las huertas de nuestros barrios.

��������� Siempre el INTA estuvo al lado nuestro. No importa qui�n sea el gobierno que estuviese en ese momento, el INTA siempre estaba apoyando. Es decir que sea el gobierno de Alberto o el gobierno de Mauricio, no le hacen asco al tema del apoyo, sobre todo, cuando se trata de los dem�s, especialmente, los m�s humildes.

��������� Hace cinco d�as estuve con Delia, Carmen y Silvana, que son productoras de puros. El INTA se ocup� de capacitarlas con gente que ven�a desde La Habana. Se dedican a hacer puros en La Vi�a, Coronel Moldes y Chicoana. Han recuperado de su banco de gen�tica los viejos tabacos que se plantaban en el Valle de Lerma. Me refiero a los criollos, que se secan al aire libre, que son muy parecidos a los tabacos que se plantan en Cuba. Se hace un producto de primera calidad y est�n aprendiendo algo por lo cual es muy probable que Salta dentro de poco tiempo tenga trascendencia internacional.

��������� Hoy dedico un homenaje al INTA porque despu�s de sesenta y cinco a�os, este instituto -que es aut�rquico, financiera y operativamente- est� siendo asaltado por la clase pol�tica. Le van a sacar miles de hect�reas en todo el pa�s y los gobernadores de m�s de diez provincias, incluyendo la m�a, forman parte de este festejo y este fest�n de repartija de terrenos. Seguramente, para decir que van a solucionar el problema habitacional, sin saber que b�sicamente de la primera a la �ltima hect�rea que tienen todos los institutos del pa�s est�n siendo plantados y en uso experimental para que nuestro campo sea la potencia que merece ser.

��������� A la gente del INTA, a toda la familia, a la cual he conocido durante toda mi vida, mi apoyo y mi homenaje. (Aplausos.)

 

                                                                                                            ��XV

A la memoria de Hip�lito Yrigoyen por cumplirse 88 a�os de su muerte

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene el uso de la palabra el se�or diputado Yacobitti, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Yacobitti.- Se�or presidente: quiero hacer honor a un gran presidente, que ha impulsado una lucha muy importante sobre la cual, durante toda mi vida, me ha agradado mucho leer, discutir, y me ha llevado a participar en seminarios que tienen que ver con la reforma universitaria. Todo esto lo quiero combinar con el homenaje a un presidente que daba las peleas que cre�a que val�a la pena dar.

��������� En esa reforma universitaria, b�sicamente, se discuti� y se lleg� a la conclusi�n de que el sistema de la educaci�n superior argentina ten�a que ser para todos y no para unos pocos, porque era considerada -por este presidente y por quienes la llevaron adelante- una herramienta fundamental para vivir, no solamente con libertad sino tambi�n con igualdad.

��������� En este momento, homenajeando a Hip�lito Yrigoyen, quiero decirles que el Poder Ejecutivo est� avasallando a esta C�mara de Diputados. El Poder Ejecutivo, sistem�ticamente, vulnera el esp�ritu con el que funciona esta C�mara de Diputados, y no me refiero a mi bloque sino a todos los bloques. Lamentablemente, cuesta mucho llegar a consensos en esta C�mara y hemos llegado a dos -por lo menos- que eran importantes para todos.

��������� Cuando modificamos el impuesto a las ganancias en el proyecto que usted present�, se�or presidente, plante� en esa sesi�n, que era importante incluir que se puedan deducir las herramientas educativas, porque entend�a que por primera vez esta C�mara ten�a que llegar a la conclusi�n de que la educaci�n era una inversi�n y no un gasto. Por lo tanto, ten�a que ser deducible.

��������� No me quiero extender en el tiempo, porque este homenaje tiene dos partes. Consider� que tambi�n val�a la pena plantearlo ah� porque era un gasto necesario para obtener despu�s una ganancia. De esta forma, se beneficiaban much�simos trabajadores que entend�an que apostar e invertir en la educaci�n de sus hijos era la mejor inversi�n que pod�an hacer. Nosotros planteamos que no solamente era para sus hijos sino para el pa�s.

��������� Al Poder Ejecutivo, al presidente de la Naci�n, al jefe Gabinete y a la responsable de la Administraci�n Federal de Ingresos P�blicos se les ocurri� vulnerar lo que votamos nosotros en conjunto y dejaron a todos los universitarios fuera de esa potestad.

��������� Cuando el Poder Ejecutivo reglament� esta ley solo permiti� deducir los gastos educativos de quienes tienen hasta 18 a�os. Esto no solamente nos muestra que no cree en el sistema universitario como una inversi�n, sino que aparte est� dispuesto a vulnerar lo que votamos en esta C�mara. Repito que no solamente lo votamos los diputados de Juntos por el Cambio, sino que esto fue un acuerdo al cual llegamos en el proyecto que usted hab�a presentado, se�or presidente.

��������� Por eso, a fin de recalcar estas cuestiones, vale la pena homenajear a los presidentes que hac�an valer las instituciones.

��������� Seguramente voy a solicitar un pedido de informes dirigido al presidente de la Naci�n, al jefe de Gabinete y tambi�n a Marco del Pont, quien es la responsable de la Administraci�n Federal de Ingresos P�blicos.

��������� No solamente pas� esto con el sistema universitario, se�or presidente. Por eso, creo que sistem�ticamente el presidente de la Naci�n cuando reglamenta lo que nosotros votamos, vulnera el sistema universitario o la intenci�n que tiene esta C�mara sobre este sistema.

��������� Nosotros llegamos a otro consenso que ten�a que ver con votar todos juntos un refuerzo en el presupuesto de las universidades que era de 5.100 millones de pesos. Hasta ahora, no le lleg� ni un solo peso en relaci�n con lo votado a fin del a�o pasado a ninguna de esas universidades. O sea que nosotros votamos ac�, hacemos el esfuerzo por ponernos de acuerdo, y despu�s al Poder Ejecutivo se le da la gana de no cumplir lo que nosotros votamos. Pero no solamente est� en esos 5.100 millones la plata y el presupuesto que votamos para las universidades, que ahora tiene un ajuste acumulado al d�a de hoy de 1.700 millones, sino que tambi�n est� el refuerzo presupuestario que votamos�

 

Sr. Presidente (Massa).- Vaya redondeando su exposici�n, se�or diputado.

 

Sr. Yacobitti.- Se�or presidente: ya redondeo. Sucede que si pasa para el final, la gente se va y no tenemos qu�rum.

 

Sr. Presidente (Massa).- Pero lleva dos minutos pasados del t�rmino, se�or diputado Yacobitti.

 

Sr. Yacobitti.- Se�or presidente: ya termino. Es por un acuerdo que hab�amos llegado entre todos, as� que quiz�s su bloque me puede ceder un ratito.

 

Sr. Presidente (Massa).- No hay nadie de nuestro bloque, se�or diputado. Usted es el �ltimo orador.

 

Sr. Yacobitti.- Dentro de esos 5.100 millones de pesos tambi�n hab�an 1.400 millones de pesos que esta C�mara en conjunto decidi� destinar a los hospitales universitarios. Hospitales universitarios, de varias universidades del pa�s, que est�n con su capacidad colmada porque desde el primer d�a de la pandemia vienen siendo la columna vertebral de ese sistema en cuanto al aporte que pueden hacer para reforzar el sistema de salud en las distintas provincias.

��������� De lo que votamos en esta C�mara, se ejecut� el cero por ciento. Ni un solo peso para los hospitales universitarios, lo cual implica un ajuste de m�s de 130 millones de pesos.

��������� Como homenaje a Hip�lito Yrigoyen, un presidente que cumpl�a la palabra, un presidente que respetaba las instituciones, quer�a llamarle la atenci�n al Poder Ejecutivo de la Naci�n para que deje de vulnerar el esp�ritu con el cual esta C�mara vota las leyes, sobre todo, con lo que implica llegar a un acuerdo. Much�simas gracias. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Con las palabras vertidas por los se�ores diputados quedan rendidos los homenajes del d�a de la fecha de esta Honorable C�mara.

                                                                                                            - 5 -       

MOCIONES DE Apartamiento del reglamento

Sr. Presidente (Massa).- Quiero aclarar que los tres pedidos de apartamiento del reglamento se van a votar en una sola votaci�n por signos, porque todos sabemos que van a ser rechazados.

��������� Se trata de tres pedidos de apartamiento del reglamento. Para el primero de ellos, tiene la palabra la se�ora diputada Najul, por Mendoza.

 

Sra. Najul.- Se�or presidente: voy a pedir el apartamiento del reglamento para tratar el expediente 2766-D.-2021 de mi autor�a ‑en el mismo sentido, hay otros expedientes de la diputada Carmen Polledo, diputado Hern�n Berisso, diputado Rub�n Manzi, diputada Rezinovsky, diputada Roxana Reyes, diputada Leonor Mart�nez Villada‑, al que han acompa�ado todos los diputados y diputados del bloque de Juntos por el Cambio.

��������� Solicitamos al Poder Ejecutivo Nacional que realice todas las acciones necesarias y en forma urgente para permitir la llegada de vacunas para ni�os de 12 a 18 a�os con enfermedades muy graves; ni�os con enfermedades oncol�gicas, inmunodeprimidos, con fibrosis qu�stica, con enfermedades prevalentes, que est�n esperando trasplante o trasplantados, con cardiopat�as cong�nitas, etc�tera.

��������� Son ni�os y ni�as a los que la vida no les ha sido f�cil desde que nacieron; viven y han vivido ‑ellos y sus pap�s y sus mam�s‑ todos los d�as derribando barreras, obst�culos que les pone permanentemente el sistema de salud, la obra social para conseguir el turno, la medicaci�n, el tratamiento, el medio de transporte, la rehabilitaci�n, una pr�tesis o un turno para operar. Todo eso, todos los d�as, estos ni�os y ni�as lo est�n sufriendo.

��������� Cuando se arm� el plan de vacunaci�n en la Argentina no exist�a ninguna vacuna autorizada para este grupo de ni�os y adolescentes de 12 a 18 a�os, pero desde mayo tenemos dos vacunas ‑Pfizer y Moderna‑ que est�n autorizadas y que se est�n usando en el mundo para este grupo.

��������� Nosotros hemos tenido reuniones con much�simos padres, madres y con los mismos ni�os; los hemos escuchado en las redes y en la televisi�n, estamos permanentemente en contacto. Cada uno de nosotros, en nuestras localidades donde vivimos, conocemos a alguna familia que est� con esta terrible realidad.

��������� La pandemia nos ha afectado a todos. Tenemos todos much�simo dolor; hemos perdido gente cercana, amigos, familiares, pero ellos la est�n pasando much�simo peor. �Hace un a�o y medio que est�n totalmente encerrados, encapsulados, el mundo exterior es algo al que no acceden, est�n separados de hermanitos, de abuelos, no ven la calle, no ven la plaza, no ven la escuela!

��������� Es realmente angustiante. Pap�s y mam�s que han perdido el trabajo porque no van a trabajar para no traer la infecci�n a la casa, ya que saben que si se infectan, esos chicos la van a pasar muy mal.

��������� Se�or presidente: por eso les pido a todos los diputados y diputadas hoy en este recinto que demos un mensaje a todas esas familias, a esos ni�os y ni�as, de que estamos al lado de ellos, que los vamos a acompa�ar, que le vamos a pedir al Poder Ejecutivo que haga todo.

��������� No pueden ser m�s de 100.000 las vacunas que necesitamos, solo 100.000 en todo el pa�s. Estamos comprando, por suerte, millones de dosis; necesitamos 100.000 para resolverles la problem�tica terrible a estos ni�os, para darles luz y esperanza.

��������� �Voy a pedir votaci�n nominal porque realmente quiero que todos me acompa�en en esto. �Es una cuesti�n humanitaria, de empat�a y de amor! (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la se�ora diputada Polledo, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sra. Polledo.- Se�or presidente: quiero pedir un apartamiento del reglamento para incorporar a la sesi�n el tratamiento del proyecto 2372-D.-2021, que cuenta con el acompa�amiento de numerosos diputados del interbloque de Juntos por el Cambio.

��������� Este proyecto propone modificar el art�culo 4� de la ley 27.573, de Vacunas Destinadas a Generar Inmunidad Adquirida contra el COVID-19. En concreto, lo que proponemos es quitar la palabra �negligencia�, la cual no estaba en el proyecto original, como una de las excepciones previstas en la ley que autoriza al Poder Ejecutivo a pactar cl�usulas que otorguen indemnidad patrimonial en favor de quienes hayan participado de la investigaci�n, desarrollo, fabricaci�n, provisi�n y suministro de las vacunas contra el COVID-19, respecto de los eventuales reclamos.

��������� �Como nosotros no participamos de las negociaciones con los proveedores, desconoc�amos que esa palabra era un obst�culo para firmar los contratos con algunos laboratorios. Esto se vio meses despu�s con las idas y vueltas del gobierno en torno a la firma del contrato con Pfizer, hasta que funcionarios y el propio laboratorio dijeron que hab�a un problema con la ley. Si adem�s hubo razones ideol�gicas o geopol�ticas, no es el tema que me preocupa.

��������� Lo que me preocupa ahora es que esta es la �nica vacuna autorizada de momento en el pa�s para ni�as, ni�os y adolescentes de 12 a 18 a�os y que, lamentablemente, son los grandes ausentes del Plan Nacional de Vacunaci�n del Ministerio de Salud de la Naci�n.

��������� La salud de nuestros chicos est� por encima de todas estas cuestiones y de la b�squeda de intenciones o responsabilidades. Especialmente, es urgente vacunar a los chicos que tienen factores de riesgo que, seg�n nos dicen, ser�an alrededor de 100.000.

��������� Tambi�n se nos dijo que el problema de las limitaciones o renuncia a la defensa de la inmunidad soberana del Estado que se establecen en la ley era un problema para que Pfizer pudiera firmar. Me extra�a que esto sea un impedimento para que el Poder Ejecutivo firme el contrato porque la ministra Vizzoti, el 24 de febrero firm� con Astrazeneca, mediante COVAX, la cl�usula 16.4.c, por la cual la Argentina renuncia expresa e incondicionalmente a cualquier derecho de inmunidad soberana sin limitaciones. (Aplausos.)

��������� Repito, por si no lo escucharon bien: la Argentina renunci� a la inmunidad soberana sin limitaciones. Es decir, con Astrazeneca no existieron esos impedimentos contractuales que tanto tuvieron en cuenta para firmar con Pfizer. (Aplausos.)

��������� Si en todo caso hay problemas que no se solucionen con este proyecto, el presidente puede acudir a la v�a que tanto ha utilizado desde el inicio de la pandemia. El tema es que haya voluntad pol�tica y un poco de humanidad para dejar a los chicos afuera de la geopol�tica y de la campa�a electoral, y los ayudemos y acompa�emos.

��������� El diputado Berisso organiz� hace un par de d�as una reuni�n con estos padres. Estuvieron los diputados Lospennato, Najul, Rey, Juez, Maquieyra, Mestre, Cornejo; no me quiero olvidar de ninguno. Vimos a esos padres angustiados. Ac� hay muchos padres y madres. Ustedes no saben lo que es ver llorar a estas mujeres con sus criaturas encerradas en sus casas sin poder hacer sus tratamientos normales. Se nos cayeron las l�grimas a todos. A ustedes tambi�n se les hubieran ca�do; ojal� los puedan recibir en sus despachos.

��������� No estamos viendo un capricho. Esto no es un capricho, una obsesi�n. Es la vida normal para chicos que la �nica vacuna que pueden recibir es la de Pfizer, no hay otra hoy. (Aplausos.)

��������� Cr�anme que una de las experiencias m�s dif�ciles que me ha tocado vivir fue el de la madre de un chico de 14 a�os con par�lisis cerebral.

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputada:�

 

Sra. Polledo.- Perd�neme, pero es muy importante. Ser� breve. Habl� con la mam� de dos chicos�

 

Sr. Presiente (Massa).- El resto de sus compa�eros fueron respetuosos del tiempo.

 

Sra. Polledo.- Perd�n, ya termino.

��������� Lo que quiero que entiendan es que hay chicos con enfermedades de base, cr�nicas, severas que no pueden recibir otra vacuna que no sea la de Pfizer. No es un invento ni un capricho.

��������� Todos estaban all� pidi�ndonos ayuda; en realidad, pidi�ndoles ayuda a ustedes, ya que ustedes son el oficialismo y nosotros los vamos a acompa�ar a ustedes si toman la medida de empat�a y humanidad de solucionarles la vida a esos chicos.

��������� Se�or presidente: s� que usted es una persona sensible, y le pido disculpas si me he extendido en el uso de la palabra, pero realmente la gravedad del tema lo amerita.

��������� Le pido a todo el cuerpo que, por favor, el d�a de hoy tenga un gesto de grandeza para estas 100.000 familias que est�n devastadas. Est� en nosotros la posibilidad de darles vuelta la vida.

��������� Se�or presidente: le pido que la votaci�n sea nominal. (Aplausos.) (Varios se�ores diputados rodean y felicitan a la oradora.)

 

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Manzi, por Catamarca.

 

Sr. Manzi.- Se�or presidente: antes de concretar mi pedido, quiero expresar que no coincido con su criterio de hacer votar tres proyectos en conjunto asumiendo que el resultado ya est� cantado.

��������� Con esa l�nea de pensamiento podr�amos evitar el debate de varias leyes y darlas por sancionadas sin votar.

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputado: quiero hacer una aclaraci�n. Hacen falta las tres cuartas partes de la C�mara y uno de los bloques mayoritarios manifest� su rechazo. Dije que la votaci�n era por signos, no que no fu�ramos a votar.

 

Sr. Manzi.- No, dijo que iba a ser por signos y en conjunto; esto, asumiendo que iban a ser rechazados.

 

Sr. Presidente (Massa).- Le pido entonces que, cuando se presenten estas cuestiones, se las manifieste a su presidente de bloque porque es parte del acuerdo de labor parlamentaria.

��������� Contin�e en el uso de la palabra.

 

Sr. Manzi.- No soy un soldado vertical; puedo tener mi propia opini�n, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Ning�n problema. H�blelo con su presidente de bloque, diputado.

 

Sr. Manzi.- Y probablemente haya diputados de otros bloques que se desmarquen de la orden que reciban.

 

Sr. Presidente (Massa).- H�blelo con su presidente de bloque.

 

Sr. Manzi.- Perfecto, ya lo voy a hablar, pero no lo podemos descartar como posibilidad. Hasta que no se vota, no se sabe el resultado.

 

Sr. Iglesias.- Deje de dar �rdenes a los diputados. No estamos en el ej�rcito. No d� �rdenes.

 

Sr. Presidente (Massa).- Silencio, diputado.

 

Sr. Manzi.- En �ltima instancia, tengo derecho a expresar mi disenso.

��������� Se�or presidente: solicito el apartamiento del reglamento para que tratemos el proyecto de la diputada Mar�a Luj�n Rey, expediente 1971-D.-2021.

��������� Es sabido que el plan de vacunaci�n va dejando unas cuantas dudas en su desarrollo. Por ejemplo, actualmente hay cerca de 5 millones de vacunas que no han sido aplicadas y, en realidad, hemos visto que hay una especie de pool de vacunas que oscila entre los 2 y los 5 millones que, si bien est�n disponibles, no se aplican. Esto podr�a responder a varias cosas, entre otras, a que hay una lentificaci�n, un delay entre que las vacunas llegan y se aplican. Esto no deja de ser un problema, ya que, con el paso del tiempo, se va la vida de la gente.

��������� Hay otro detalle en el plan de vacunaci�n que me parece a�n m�s grave y trascendente, que es que varios cientos de miles de argentinos ya han cumplido el lapso estipulado unilateralmente por el Ministerio de Salud de la Naci�n de los tres meses de espera entre la primera y la segunda dosis.

��������� Y digo unilateralmente porque la vacuna Sputnik fue autorizada por el Ministerio de Salud y revisada por la ANMAT seg�n el plan presentado por Gamaleya, que dudo mucho que haya estipulado tres o cuatro meses entre dosis y dosis, que es el tiempo que efectivamente pasar� hasta que las vacunas finalmente est�n aplicadas.

��������� La verdad es que, adem�s de los dichos de la se�ora ministra, no tenemos ninguna certificaci�n ni evidencia cient�ficamente comprobada �si la hay, no nos la han transmitido� que demuestre que es lo mismo vacunar a los 21 o a los 28 d�as, a los tres o a los cinco meses. Por eso es necesario que haya un programa muy bien definido de observaci�n y seguimiento del plan de vacunaci�n.

��������� Creemos que la �nica manera de que esto se reencauce es que se empiece a informar a los argentinos como corresponde y no se vaya cambiando el discurso en forma permanente. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Yedlin, por Tucum�n.

 

Sr. Yedlin.- Se�or presidente: simplemente quiero explicar la posici�n que va a tomar el bloque respecto de este apartamiento del reglamento y c�mo vemos nosotros la situaci�n.

��������� Desde ya, estamos contentos de que en este momento nadie hable en contra de las vacunas en general o en funci�n de una situaci�n geopol�tica, o a favor del di�xido de cloro, como ha sucedido. (Aplausos.)

��������� La verdad es que�

 

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Presidente (Massa).- Perd�n, diputado. Quiero hacer una aclaraci�n.

��������� Han pedido una votaci�n nominal. El diputado, adem�s de presidente de la comisi�n, es el miembro informante del bloque del Frente de Todos que manifiesta por qu� vota por el rechazo.

��������� Ustedes pidieron una votaci�n y para ello hicieron uso de la palabra tres diputados de su bloque. Hay un solo diputado que va a fundamentar su posici�n respecto de los tres pedidos de apartamiento del reglamento.

��������� Tiene derecho el bloque oficialista a que un miembro informe el porqu� del rechazo. No est� el tema abierto a debate.

��������� Contin�e en el uso de la palabra, diputado Yedlin. (Aplausos.)

 

Sr. Yedlin.- Simplemente quiero decir que el mundo est� viviendo y ha vivido una situaci�n absolutamente excepcional y grav�sima.

��������� Nadie desconoce la gravedad de lo que hemos vivido cada uno de nosotros, cada una de las familias y de los adultos mayores, de los ni�os, ni�as, adolescentes, mujeres embarazadas y poblaci�n toda durante esta pesadilla. Tambi�n sabemos que las vacunas han llegado sobre el final de la primera ola, no estuvieron disponibles desde el principio.

��������� Y sabemos que este Congreso, esta C�mara de Diputados, y nuestra Comisi�n de Salud -que tengo el honor de presidir- le dio las herramientas que nos pidi� el Ministerio de Salud de la Naci�n para poder hacer frente a las negociaciones con todos los laboratorios.

��������� Tambi�n sabemos que muchos laboratorios accedieron a este sistema de negociaci�n, y por eso, tenemos los millones de dosis de vacunas que han llegado a la Argentina y que hoy se vienen colocando a lo largo y ancho del pa�s a un ritmo excepcional. Y la verdad, van generando la respuesta necesaria, y ello claramente se ve en todas las curvas de mortalidad por edad en la Argentina.

��������� Es clar�simo que la mortalidad de las personas� vacunadas mayores de 60, de 70 y de 80 a�os en la Argentina viene disminuyendo, a pesar del inicio del invierno, y eso es atribuible a las vacunas.

��������� Decir que el tiempo transcurrido entre una dosis y la otra hace que la vacuna se haya �vencido� es de tal ignorancia supina, que no vale ni la pena aclararlo. Se dir� y se aclarar� cuando sea el momento.

��������� El tema de los ni�os merece una consideraci�n particular. Al d�a de hoy hay un solo laboratorio -como bien se dijo, o casi bien se dijo- que tiene autorizada la vacunaci�n para menores de dieciocho a�os.

��������� Hay otros laboratorios que ya han publicado en The Lancet, por ejemplo, la semana pasada Sinovac ‑que es una vacuna muy parecida a Sinopharm, dir�a que casi igual‑, demostrando en China su efectividad y absoluta seguridad en un plan para personas de tres a diecisiete a�os. Por lo tanto, hoy hay uno solo, pero pronto habr� muchos laboratorios que trabajen en esa direcci�n.

��������� Quiero decir que la voluntad del bloque al cual pertenezco es realizar los ajustes necesarios a la ley que haga falta para conseguir la cantidad y el tipo de vacunas necesarias para todos los argentinos; incluso ni�os, ni�as y adolescentes. No tenemos ninguna mirada geopol�tica en contra de las vacunas.

��������� Quiero aclarar que el otro d�a, en la reuni�n que se realiz� en esta C�mara, a la cual asisti� el representante de Pfizer, se estableci� claramente una mesa de trabajo entre el Ministerio de Salud, la industria y la Secretar�a Legal y T�cnica de la Presidencia que est� trabajando en este aspecto

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputada, �se puede callar la boca? Sea respetuosa de quienes hablan.

 

Sr. Yedlin.- El proyecto de ley que hoy se trae a debate en este apartamiento del reglamento, lamentablemente no soluciona el tema.

��������� Estamos esperando la confirmaci�n del laboratorio porque no vamos a seguir cambiando leyes todas las semanas si no va a dar el acuerdo suficiente. (Aplausos.) Vamos a cambiarla cuando tengamos la garant�a de que la industria va a vender las vacunas. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Se va poner en votaci�n las tres solicitudes de apartamiento del reglamento en una �nica votaci�n, de manera nominal.

��������� No va a ser por signos, diputado, porque gente de su bloque pidi� que sea nominal.

��������� Quiero recordarles que para que se apruebe el tratamiento de este tema, se necesitan las tres cuartas partes de los votos que se emitan. Por eso, le aclaro al diputado Manzi que la mayor�a agravada por signos bastaba.

 

-   Mientras se practica la votaci�n nominal:

Sr. Presidente (Massa).- Hay diecinueve se�ores diputados y diputadas que no han registrado su voto. Los voy a mencionar.

��������� Se�ora diputada Abdala de Matarazzo, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Abdala de Matarazzo.- Negativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Hern�n Berisso, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Berisso.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado C�ceres, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. C�ceres.- Negativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Cama�o, �puede indicar el sentido de su voto?

 

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Campagnoli, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Campagnoli.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Cipolini, �puede indicar el sentido de su voto?

 

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Cornejo, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Cornejo.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Corpacci, �puede indicar el sentido de su voto?

 

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Daives, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Daives.- Negativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado De Marchi, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. De Marchi.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Est�vez, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada M�rquez, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. M�rquez.- Negativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Moreau, �puede indicar el sentido de su voto?

Sr. Moreau.- Negativo

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada P�rtile, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. P�rtile.- Negativo, se�or presidente. Estuve con problemas de conexi�n, disculpe.

 

Sr. Presidente (Massa).- Gracias, ning�n problema, diputada P�rtile.

��������� Se�ora diputada Sand, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Sand.- Negativo, presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Su�rez Lastra, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Su�rez Lastra.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Tonelli, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Tonelli.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Torello, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Torello.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Wolff, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Wolff.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Reitero, se�ora diputada Cama�o, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Yedlin.- Pido la palabra para rectificar mi voto.

 

Sr. Presidente (Massa).- Esperen que termine el listado y me pasan los que tienen que rectificar el sentido del voto. Lo veo tan entusiasmado, diputado Yedlin. Hizo la gran Iglesias al rev�s, hoy. (Aplausos.)

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Rodr�guez.

 

Sr. Rodr�guez.- Se�or presidente: no s� si es procedente, pero quiero consignar que estoy en comunicaci�n permanente con la diputada Cama�o, que tiene problemas de conexi�n, problemas t�cnicos, y me pide por favor que le solicite consignar que su voto es afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- No se puede, se�or diputado.

 

Sr. Rodr�guez.- De todas maneras, le dije al principio�

 

Sr. Presidente (Massa).- Imag�nese si un diputado se ausenta del recinto y lo llama por tel�fono�

 

Sr. Rodr�guez.- Yo no me imagino nada, por eso al principio le dije, con todo respeto, se�or presidente�

 

Sr. Presidente (Massa).- Por eso, con todo respeto, no se puede.

 

Sr. Rodr�guez.- Con todo respeto le dije, se�or presidente, que no s� si es procedente, pero sin embargo quiero consignar lo que ha sucedido. Gracias por dejarme consignar.

 

Sr. Presidente (Massa).- Ning�n problema, pero no procede. (Aplausos.)

��������� Ausente a la hora de votar la se�ora diputada Cama�o.

��������� Se�or diputado Cipolini, �puede indicar el sentido de su voto?

 

-   Luego de unos instantes:

Sr. Rodr�guez.- Es un problema del sistema, no de la diputada Cama�o. Est� en contacto con los t�cnicos suyos.

 

Sr. Presidente (Massa).- Los t�cnicos son de cada bloque, diputado.

��������� El se�or diputado Cipolini est� ausente a la hora de votar.

��������� Se�ora diputada Corpacci, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- La se�ora diputada Corpacci est� ausente a la hora de votar.

��������� Se�or diputado Est�vez, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- El se�or diputado Est�vez est� ausente a la hora de votar.

 

Sr. C�ceres.- Se�or presidente: pido la palabra para cambiar el sentido de mi voto, que es afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se toma nota del voto afirmativo del se�or diputado C�ceres.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Yedlin, para indicar el sentido de su voto.

 

Sr. Yedlin.- Mi voto es negativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� lectura del resultado.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Fueron 102 votos afirmativos, 122 negativos y ninguna abstenci�n.[1]

 

Sr. Presidente (Massa).- Queda rechazada la moci�n.

 

Sr. Campos.- Se�or presidente: yo le ped� la palabra y no me la dio. Quiero hacer un solo comentario, si me lo permite.

��������� Quiero que quede constancia en este cuerpo que a partir de esta votaci�n los ni�os no son m�s privilegiados en este pa�s. Estamos dejando atr�s una tradici�n enorme del partido al que usted representa. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Gracias, se�or diputado, pero no estaba en el uso de la palabra.

 

 

                                                                                                            - 6 -       

modificaci�n de los art�culos 2� y 3� de la ley 26.130, de r�gimen para las intervenciones de contracepci�n quir�rgica

Sr. Presidente (Massa).- Corresponde considerar el dictamen de las comisiones de Acci�n Social y Salud P�blica y de Discapacidad reca�do en el proyecto de ley contenido en los expedientes 1.803-D.-2019 y 2.053-D.-2020, por el que se modifican los art�culos 2� y 3� de la ley 26.130, de r�gimen para las intervenciones de contracepci�n quir�rgica (Orden del D�a N� 283).


AQU� ORDEN DEL D�A N� 283


Sr. Presidente (Massa).- En consideraci�n en general.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Yedlin, por Tucum�n.

 

Sr. Yedlin.- Se�or presidente: hoy venimos a tratar esta modificaci�n a la ley de intervenciones de contracepci�n quir�rgica -la ley 26.130, del a�o 2006-, en dos art�culos. B�sicamente modificamos los art�culos 2� y 3�, dado que la ley original establec�a que estas pr�cticas estaban autorizadas a toda persona mayor de edad y capaz.

��������� Lo que vamos a hacer hoy es cumplir con un compromiso con muchas organizaciones de personas con discapacidad y con una vieja lucha de muchos diputados y diputadas. En este sentido, quiero mencionar el proyecto original de la diputada mandato cumplido Gabriela Troiano y, por supuesto, a la autora del proyecto, la diputada Luc�a Masin, as� como a Magdalena Sierra, quien tambi�n ha sido miembro de esta C�mara. Ellas han llevado adelante una lucha importante para arribar a este proyecto de ley.

��������� El objetivo de esta iniciativa tiene que ver con que aquellas personas con discapacidad no sean o no puedan ser intervenidas quir�rgicamente para una contracepci�n sin haber expresado claramente su voluntad, y que esta voluntad no requiera tampoco de la intervenci�n judicial. Son ellas y ellos, en sus capacidades y en sus posibilidades, quienes podr�n y deber�n decidir sobre su voluntad o no de recibir esta intervenci�n quir�rgica, que por otro lado es definitiva.

��������� Desde ya, adelanto el voto afirmativo de nuestro bloque a esta iniciativa, dado que nos parece que es un avance en materia de derechos humanos para nuestras personas con discapacidad y es un avance tambi�n en una intervenci�n quir�rgica importante, que tiene que tener esta regulaci�n para darles a ellas el mismo derecho.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la diputada Mart�nez Villada, por C�rdoba.

 

Sra. Mart�nez Villada.- Se�or presidente: como acaba de decir el se�or diputado preopinante, vamos a modificar la ley 26.130, en sus art�culos 2� y 3�. Buscamos modificar estos art�culos para ordenar el sistema jur�dico interno en relaci�n con la Convenci�n sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.

��������� En este momento, de acuerdo con el C�digo Civil y Comercial, las personas con discapacidad solamente con el consentimiento informado pueden acceder libremente a las pr�cticas de contracepci�n quir�rgica.

��������� En caso que su incapacidad sea declarada por el juez �con lo que tienen un impedimento-, deben ser representadas por su curador o tutor. De lo contrario, la persona con discapacidad, como premisa, tiene la libertad y la autonom�a para decidir sobre la ligadura de trompas o, en su defecto, si es un var�n, la vasectom�a.

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Comisi�n de Previsi�n y Seguridad Social, doctor Marcelo Pablo Casaretto.

Sra. Mart�nez Villada.- Esto tambi�n es as� de acuerdo a las convenciones internacionales de derechos humanos. La Comisi�n de las Personas con Discapacidad exhort� a la Argentina a reformar los art�culos 2� y 3� para poder dar libertad a estas personas, con respeto y autodeterminaci�n.

��������� De manera que simplemente apoyamos este proyecto para las personas en esta situaci�n. El Estado debe ayudar y contener a las personas con discapacidad para transitar un embarazo o para enfermedades o crianza de ni�os, cuando la situaci�n lo requiera. No hay excusa para tomar la determinaci�n en la cantidad de esterilizaciones que ha habido de personas con discapacidad sin su consentimiento. Este es un freno que nos pide la Convenci�n de los Derechos de las Personas con Discapacidad. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Agradezco a la se�ora diputada por las salutaciones.

��������� A efectos de comenzar con las exposiciones de los bloques, tiene la palabra la se�ora diputada Masin, por el Chaco.

 

Sra. Masin.- Se�or presidente: el tratamiento de esta iniciativa recoge en cierta medida el trabajo y el consenso alcanzado en las comisiones de Acci�n Social y Salud P�blica y de Discapacidad en el a�o 2017 alrededor de un proyecto que, como bien manifestaba el diputado Yedlin, lo ha presentado y trabajado incansablemente la diputada mandato cumplido Gabriela Troiano, que cuenta adem�s con el aporte de organizaciones de personas con discapacidad. Tambi�n existen informes t�cnicos que lo apoyan, de la Agencia Nacional de Discapacidad, del Ministerio de Salud de la Naci�n y de la Secretar�a de Derechos Humanos.

��������� Al respecto, quiero referirme a cinco aspectos que me parecen sustanciales para este debate.

��������� En primer lugar, esta modificaci�n propone establecer un r�gimen para las intervenciones de contracepci�n quir�rgica, garantizando a todas las personas mayores de edad el derecho a acceder a la realizaci�n de las pr�cticas denominadas ligadura de trompas de Falopio y ligaduras de conductos deferentes o vasectom�a. Digo esto porque, tal como est� redactada en la actualidad esta norma, se admite la esterilizaci�n de las personas con discapacidad sin su consentimiento.

��������� En segundo lugar, desde el marco estrictamente normativo que da sustento a esta modificaci�n, podemos decir que se actualiza en concordancia con lo dispuesto por el C�digo Civil y Comercial de la Naci�n, que establece en sus art�culos 31 y 32 la capacidad general del ejercicio y la toma de decisiones de todas las personas, donde las limitaciones a la capacidad son de car�cter excepcional y se imponen siempre en beneficio de la persona.

��������� Toda persona tiene derecho a ser informada y que esto le permita dise�ar su plan de vida a trav�s de los distintos medios o de las tecnolog�as adecuadas para su comprensi�n. Adem�s, esto se regula a trav�s de la adopci�n de un sistema de apoyo, cuya funci�n es promover la autonom�a y facilitar la comunicaci�n, la comprensi�n y la manifestaci�n de la misma voluntad de la persona para el ejercicio pleno de sus derechos.

��������� Por otro lado, y en consonancia con la Convenci�n Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, la norma manifiesta claramente en su art�culo 23 que los Estados deben garantizar el respeto de los derechos de las personas con discapacidad, tanto para decidir libremente y de manera responsable el n�mero de hijos que quieren tener y el tiempo que debe transcurrir entre un nacimiento y otro, como acceder a la informaci�n y a la educaci�n sobre reproducci�n y planificaci�n familiar que sean apropiados para su edad, y que se ofrezcan los medios necesarios que les permitan ejercer plenamente esos derechos.

��������� Por lo tanto, la iniciativa plantea que su fertilidad se mantiene en igualdad de condiciones respecto de los dem�s, lo que significa que las personas con discapacidad, al igual que todas las personas, tienen derecho a solicitar la anticoncepci�n quir�rgica y brindar, como ac� se dijo, su consentimiento previo, libre e informado. De all� que la condici�n de persona con discapacidad no justifica la realizaci�n de una pr�ctica de anticoncepci�n quir�rgica sin su consentimiento.

��������� En tercer lugar, quiero hacer referencia a que en el proyecto tambi�n se prev� la obligaci�n de brindar apoyos o controles para que las personas con discapacidad que atraviesan por esta intervenci�n, en caso de que decidan someterse al tratamiento, puedan ser informadas a lo largo de todo el proceso y asistidas para que no se encuentren indefensas ni se sientan aisladas en sus tomas de decisiones, respetando su dignidad y autonom�a.

��������� En cuarto lugar, deseo resaltar que la atenci�n de la salud se debe regir por la presunci�n de capacidad de las personas con discapacidad para tomar las decisiones sobre sus derechos sexuales y reproductivos. Es decir que las personas deben ser tenidas como capaces por el sistema de salud, a excepci�n de aquellas que -como tambi�n se dijo ac�- cuentan con una sentencia que determine su incapacidad.

��������� Los sistemas de salud deben adoptar medidas tendientes a facilitar a las personas con discapacidad el ejercicio de sus derechos de manera aut�noma, y brindar la atenci�n sanitaria de manera accesible y con la mejor calidad posible. Una vez que esa informaci�n pueda ser brindada, corresponde siempre aceptar las decisiones que toma la persona con discapacidad sobre sus derechos sexuales y reproductivos, m�s all� de lo que determinen el equipo de salud o las personas de apoyo, est�n de acuerdo o no.

��������� Digo esto porque, si bien la pr�ctica de contracepci�n quir�rgica se efect�a generalmente en varones, podemos identificar que la contracepci�n quir�rgica sin el consentimiento informado de la propia mujer tambi�n se enmarca en varios tipos de violencia. Por ejemplo, los previstos en el art�culo 5� de la ley 26.485, que determina las violencias f�sicas, psicol�gicas y simb�licas, como tambi�n en el art�culo 6� de dicha ley, que establece las diferentes modalidades, como la violencia dom�stica, institucional o contra la libertad reproductiva.

��������� Como quinto punto, quiero resaltar que estamos debatiendo esta norma teniendo en cuenta algunos par�metros, reclamos y recomendaciones de organismos internacionales de derechos humanos, como el Comit� de los Derechos de las Personas con Discapacidad, que insta a la Argentina a modificar el art�culo 3� de la norma; el Consejo de Derechos Humanos, en cuyo informe el Relator Especial sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes tambi�n plantea que la esterilizaci�n forzada es un acto de violencia y una forma de control social que viola el derecho de las personas a no ser sometidas a torturas y malos tratos; o tambi�n la Organizaci�n Mundial de la Salud; la CEDAW, o la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Cada uno de ellos ha manifestado que el Estado debe tomar las medidas necesarias para revertir esta situaci�n que actualmente se da en nuestro pa�s.

��������� Con esto quiero decir que modificar la norma nos permitir� garantizar un derecho humano para las personas con discapacidad sometidas de manera desproporcionada a procedimientos de esterilizaci�n forzada por diversas razones; entre ellas, muchas veces eugen�sicas, de higiene menstrual o de prevenci�n del embarazo.

��������� A pesar de que se dispone de pocos datos sobre las pr�cticas actuales, los estudios demuestran que la esterilizaci�n de mujeres y ni�as con discapacidad sigue siendo frecuente y que los porcentajes son hasta tres veces mayores que en los casos de poblaci�n general. Pero tambi�n nos permite evidenciar una de las situaciones que se vienen dando y se han dado en la provincia de R�o Negro en 2011, cuando el Tribunal Superior de Justicia aleg� razones eugen�sicas para evitar el nacimiento de un ni�o con deficiencia mental, y fund� as� su decisi�n de autorizar la esterilizaci�n de una joven con discapacidad intelectual.

��������� Por �ltimo, y no menos importante, quiero resaltar que el dictamen en consideraci�n ha sido el fruto de un intenso trabajo colectivo y que ha tomado el aporte de diferentes organizaciones de personas con discapacidad, como REDI y FUSA, que impulsaron este proyecto desde hace varios a�os. Con ellos se han organizado jornadas de concientizaci�n en todo el pa�s y se cont� tambi�n con su participaci�n en reuniones de asesores. Adem�s, quiero mencionar a las especialistas Marisa Herrera y Natalia De La Torre, quienes han puesto todo su conocimiento al servicio de la mejor redacci�n posible.

��������� Por cada una de estas consideraciones, esperamos que el d�a de hoy podamos sancionar este proyecto, que es una deuda pendiente de nuestra democracia desde hace muchos a�os. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra la se�ora diputada Caselles, por San Juan.

 

Sra. Caselles.- Se�or presidente: la verdad es que quienes me han precedido en el uso de la palabra han expuesto muy bien tanto los datos cient�ficos y t�cnicos, como los humanos y sociales. Por lo tanto, creo que es muy positivo que hoy podamos llevar adelante la aprobaci�n de este proyecto.

��������� Quiero agradecerles el trabajo que se ha venido realizando para que esto pueda ser aprobado, no solo como diputada, como madre y como mujer, sino tambi�n porque soy mam� de una joven de 16 a�os que tiene s�ndrome de Down. Siento que en esta norma se visualiza un cambio social positivo a favor de todos los derechos de las personas con discapacidad.

��������� Siento que hoy se da un paso m�s en saldar una deuda que, por un lado, tiene que ver con algo que ya se dijo: adecuar una vieja legislaci�n a lo que fundamentalmente nos est� pidiendo la Convenci�n Internacional de las Personas con Discapacidad, adem�s de otros organismos internacionales y nacionales.

��������� Por otra parte, de esta manera se salda una deuda que tiene que ver con haber puesto el o�do y el coraz�n ante un reclamo hist�rico de much�simas personas con discapacidad. Siento que hoy damos un paso m�s en su consideraci�n como personas sujetos de derechos -y tambi�n de deberes, claro est�. Pero, reitero, estamos haciendo hincapi� en su condici�n de sujetos de derechos.

��������� Este proyecto le pone o�do a entender que cada persona con discapacidad fundamentalmente es una persona capaz: capaz de elegir, capaz de decidir, capaz de tomar conciencia hacia d�nde quiere ir y cu�l es su futuro en la relaci�n de conformaci�n de una propia familia.

��������� Quiero agradecer que esto se transforme en un camino m�s en incorporar a la agenda humana los temas de discapacidad.

��������� Creo que es un acto de buena fe, de justicia y de igualdad el brindar a cada persona con discapacidad esta posibilidad de elegir y saber ad�nde quiere ir.

��������� Considero que la sanci�n de esta norma es un acto humano, es un acto de inclusi�n, es un acto de libertad, es un acto de autonom�a que brinda a cada persona con discapacidad el poder ser de acuerdo con lo que quiera ser. Y cuando haya dificultades, se les podr� brindar las herramientas de informaci�n en igualdad de condiciones, como a cualquier otro ser humano.

��������� Creo que es una jornada muy positiva, y quiero invitar a todos y a todas a que, en nuestra agenda diaria, en cada una de nuestras acciones, en cada uno de nuestros proyectos de ley y en cada una de nuestras legislaciones, incorporemos los temas de discapacidad.

��������� Como diputada y como mam� de una jovencita que tambi�n tiene el derecho de elegir y ser informada, entiendo que este es el camino para consolidar esa Argentina grande, soberana e igualitaria que todos queremos alcanzar.

��������� Desde ya, adelanto mi voto afirmativo a la iniciativa en consideraci�n.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Antes de conceder el uso de la palabra al pr�ximo orador, la Presidencia recuerda a los colegas diputados y diputadas que en aproximadamente quince minutos se proceder� a votar el dictamen reca�do en el proyecto de ley por el que se modifica la ley 26.130, sobre intervenciones de contracepci�n quir�rgica, contenido en el Orden del D�a N� 283. Por lo tanto, les pide que est�n conectados.

��������� Tiene la palabra la se�ora diputada Lospennato, por Buenos Aires.

 

Sra. Lospennato.- Se�or presidente: en verdad, para m� es una gran alegr�a encontrarme pr�xima a votar este proyecto de ley.

��������� Hace ya varios a�os, una diputada nacional de mi provincia, pero de otro partido pol�tico -me refiero a Gabriela Troiano, del socialismo‑ vino a verme para proponerme esta iniciativa. Ella es una de las grandes luchadoras que tiene nuestro pa�s para defender los derechos de las personas con discapacidad. Entonces, a Gabriela quiero decir que hoy estaremos sancionando esa ley por la que milit� durante tantos a�os.

��������� Fue pasando el tiempo y, como no logr�bamos avanzar, un grupo de organizaciones de la sociedad civil comenz� a movilizarse en el marco del Proyecto DeSeAr. Quiero mencionarlas, ya que han hecho un gran trabajo explicando y convenciendo sobre la necesidad de modificar la ley: ACIJ, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, el Centro de Estudios Legales y Sociales, CLADEM y especialmente ELA, FEIN, FUSA y REDI, la Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad.

��������� Todas ellas trabajaron much�simo para que alcancemos este consenso: el dictamen fue suscripto por unanimidad y no tengo dudas de que tambi�n la votaci�n en este recinto ser� un�nime.

��������� Estamos simplemente cumpliendo con las responsabilidades que corresponden a la Argentina, porque hace ya muchos a�os incorporamos a nuestro ordenamiento jur�dico la Convenci�n sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. Adem�s, en 2014 le otorgamos rango constitucional.

��������� Por ende, est�bamos en mora por lo menos desde 2012, a�o en que recibimos una observaci�n del Comit� sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y el Estado argentino es instado a revisar toda la normativa, a hacer las modificaciones necesarias y a cambiar aquella legislaci�n basada en la sustituci�n de la toma de decisiones que priva de su capacidad jur�dica a las personas con discapacidad.

��������� En 2012, en la recomendaci�n 32, el Comit� dec�a lo siguiente: �El Comit� recomienda al Estado parte a que modifique el art�culo 86 de su C�digo Penal, as� como el art�culo 3� de la ley 26.130 de R�gimen para las Intervenciones de Contracepci�n Quir�rgica, de conformidad con la Convenci�n y tome medidas para ofrecer los apoyos necesarios a las mujeres sometidas a un r�gimen de tutela o curatela para que sean ellas mismas las que den su consentimiento informado para acceder a la pr�ctica del aborto no punible o esterilizaci�n.�

��������� No queremos que contin�en siendo otros quienes decidan que esas mujeres no pueden tener hijos, ya sea por abortos o por esterilizaciones forzadas. La decisi�n de ser madres corresponde a ellas, y eso es justamente lo que les garantiza la Convenci�n sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.

��������� �Miren qu� importante, qu� profundo es que, en el marco del reconocimiento de los derechos de estas mujeres, hoy reafirmemos que pueden elegir ser madres, que tienen esa capacidad y que nadie puede decidir por ellas!

��������� Esa reforma a la ley que establece un r�gimen para las intervenciones de contracepci�n quir�rgica es necesaria, es justa, es una deuda con los derechos humanos de las personas con discapacidad que hoy empezamos a saldar. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra la se�ora diputada Najul, por Mendoza.

 

Sra. Najul.- Se�or presidente: como bien dijeron algunas diputadas que me precedieron en el uso de la palabra, desde 2006 est� vigente en nuestro pa�s la norma que establece un r�gimen para las intervenciones de contracepci�n quir�rgica. Me refiero a la ley 26.130, que garantiza que toda persona mayor de edad y capaz que brinde su consentimiento informado tiene derecho a acceder a la realizaci�n de las pr�cticas conocidas como �ligadura de trompas de Falopio� y �vasectom�a� en los servicios del sistema de salud.

��������� En este punto me quiero detener. Si bien esta ley signific� un important�simo avance en materia de derechos sexuales y reproductivos al facilitar la planificaci�n familiar, lamentablemente tambi�n dio lugar a que se produjeran situaciones que han constituido un gran atropello a la dignidad y una grave violaci�n a los derechos humanos de las personas con discapacidad.

��������� Al amparo de esta norma se han realizado en nuestro pa�s esterilizaciones forzadas, no consensuadas, a muchas personas con discapacidad, ya que su redacci�n lo avala o no resulta efectiva para impedirlo.

��������� A ellas no se las consulta sobre si quieren o no someterse a dichas pr�cticas. En muchos casos, ni siquiera se les informa que se les practicar� una vasectom�a o una ligadura de trompas; mucho menos se les pide un consentimiento informado.

��������� La voluntad de estas personas es absolutamente reemplazada por un representante legal o por la autorizaci�n de un juez. Sus planes de vida, sus proyectos, quedan en manos de otros.

��������� Tal como est� redactada, la ley 26.130 perpet�a una discriminaci�n hist�rica, no solo social sino tambi�n institucional, porque profundiza las inequidades en el acceso a la salud de las personas con discapacidad. Olvida que todas ellas tienen el mismo derecho de mantener su fertilidad en igualdad de condiciones, tal como lo establece el art�culo 23 de la Convenci�n sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad que, como bien se dijo, desde 2014 tiene rango constitucional.

��������� Por otro lado, es necesario que adecuemos la ley al nuevo C�digo Civil y Comercial, que recoge una nueva concepci�n sobre la capacidad al considerarla un derecho humano. Entonces, las restricciones deben ser siempre excepcionales, ya que en todo momento deben respetarse la autonom�a y la dignidad de las personas.

��������� Por supuesto, tambi�n yo quiero recordar a Gabriela Troiano por su lucha, ya que fue la primera en presentar, all� por 2016, un proyecto sobre esta tem�tica, y a las siguientes organizaciones defensoras de los derechos humanos: la Asociaci�n Civil por la Igualdad y la Justicia, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, el Centro de Estudios Legales y Sociales, CLADEM Argentina, el Equipo Latinoamericano de Justicia y G�nero, la Fundaci�n para Estudio e Investigaci�n de la Mujer, FUSA y la Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad, entre otras. A todas ellas agradezco profundamente su compromiso y su lucha.

���������

��������� En ese sentido quiero nombrar a Pamela Mart�n Garc�a que tanto me ha instruido sobre estos temas. Hoy, en nombre de la inclusi�n y de la equidad, tenemos la oportunidad y la obligaci�n de ponerle punto final a esta terrible situaci�n de discriminaci�n que impide a las personas con discapacidad el pleno ejercicio de sus derechos sexuales y reproductivos.

��������� Una sociedad empoderada e inclusiva es condici�n excluyente para poder crecer y desarrollarnos como pa�s. Por ello creo que convertir en ley esta iniciativa constituye un paso concreto hacia una Argentina consciente de sus fallas y dispuesta a corregirlas. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el se�or diputado Di Giacomo, por R�o Negro.

 

Sr. Di Giacomo.- Se�or presidente: antes que nada, perm�taseme hacer una peque�a digresi�n porque justamente me voy a referir a este tema como parte de lo que ha sido mi pr�ctica profesional en los �ltimos cuarenta a�os, pero esta digresi�n la hago sobre un tema anterior teniendo en cuenta que, al votar tres cosas en bloque, qued� difuso.

��������� Simplemente aclaro que vot� afirmativamente el acceso con la mayor urgencia a los menores y las personas con discapacidades a las vacunas que est�n aprobadas a tal efecto.

��������� Si bien no dudo de lo que est� haciendo el Ministerio de Salud para avanzar en este aspecto, creo que es oportuna toda presi�n que se pueda realizar para que esto se haga cuanto antes.

��������� Si uno entiende el pedido desesperado de los familiares que nos llega a todos los que trabajamos en este �mbito, no podemos dejar en esto en ninguna grieta. De alguna manera tenemos que reconocer que es un tema en el cual, cuanto mayor esfuerzo le pongamos, antes tiene que salir.

��������� Por otro lado, teniendo en cuenta que la mayor�a de las cuestiones que ten�a para desarrollar ya las han expresado muy bien quienes me antecedieron en la palabra, har� algunas observaciones que quiz�s sean de utilidad.

��������� En primer lugar, quiero referirme al tema que aparec�a en el art�culo 2�, que hoy estamos proponiendo modificar, cuando se�ala que las pr�cticas m�dicas mencionadas en el art�culo anterior -obviamente estamos hablando de la contracepci�n quir�rgica- est�n autorizadas para toda persona capaz.

��������� Ah� ya estamos entrando en algo que hasta no hace muchos a�os era tambi�n un concepto no solo de tipo jur�dico sino incluso m�dico y social. A esto se refiere lo absoluto del t�rmino: uno era capaz o incapaz.

��������� El tiempo nos fue se�alando que eso era un grave error porque las personas tienen capacidades e incapacidades. As� como la mente es multimodular y de repente somos muy inteligentes para ciertas cosas y bastante incapaces para otras, las personas tambi�n son as� y tienen posibilidades a�n dentro de un marco de incapacidad de alg�n aspecto de su vida -no hablo solo de la incapacidad decretada jur�dicamente sino de las distintas incapacidades generales que existen- en otros tienen todo el derecho a opinar y poder decir qu� quieren.

��������� Este problema de la inflexibilidad que se presenta con respecto a la cuesti�n de la capacidad y la incapacidad debe ser tenido en cuenta en el caso de muchas personas que en alg�n momento de su vida son declarados incapaces inclusive judicialmente. En esos casos, es dif�cil recuperar esa capacidad si no son acompa�ados por un curador honesto que los ayude o que tenga la intenci�n de llevarlos adelante, en especial cuando hay cuestiones materiales de por medio. Por eso muchas veces se encuentran ante terribles situaciones en las que se les hace muy dif�cil volver a adquirir la capacidad que quiz�s ya tienen para poder volver a resolver sobre su propia vida y sus bienes.

��������� Por eso me parece un avance absolutamente importante que las personas tengan derecho a recibir toda la informaci�n sin ning�n requerimiento de autorizaci�n judicial. De alguna manera, y est� bien explicitado, las personas tienen derecho a acceder a informaci�n objetiva, pertinente, precisa, confiable, accesible y actualizada.

��������� Adem�s, no nos olvidemos que en este esquema, m�s all� de las cuestiones que tienen que ver con la incapacidad laboral o con la incapacidad para determinado tipo de cuestiones, lo que est� en juego es la cuesti�n de la sexualidad.

��������� Hasta no hace mucho y, lamentablemente todav�a es as� para muchas personas de mentalidad muy conservadora, la sexualidad es algo negado a las personas que tienen distintas formas de discapacidad.

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Honorable C�mara, doctor Sergio Tom�s Massa.

Sr. Di Giacomo.- Justamente, la capacidad que puedan tener tanto para asumir la sexualidad dentro de sus posibilidades como a su vez decidir si la maternidad o la paternidad puede ser algo a lo cual quieran arribar en alg�n momento, tiene que ser muy bien explicitado, estudiado, investigado y, con todos estos elementos, sea la persona quien pueda tomar la decisi�n final y no un juez, un curador o un profesional, que quiz�s lo va a hacer desde su propia ideolog�a y mentalidad, no respetando -por supuesto- a la persona con esta discapacidad.

��������� Por estas razones, adelanto nuestro voto positivo a esta propuesta.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la se�ora diputada Schlotthauer, por Buenos Aires.

 

Sra. Schlotthauer.- Se�or presidente: con respecto a la ley 26.130, que establece el derecho a la ligadura de trompas o a la vasectom�a, y la modificaci�n que se quiere introducir, queremos manifestar nuestra aprobaci�n no solo porque otorga derechos a las personas discapacitadas, que es algo que �como se dice ac�- se les est� debiendo, sino que tambi�n en la pr�ctica cotidiana de la aplicaci�n de la ley el hecho de que exista la expresi�n �adulto capaz� pone un manto de sospecha sobre todas las mujeres que van a los centros. Por supuesto que eso es por los prejuicios existentes en esta sociedad acerca de la insania de las mujeres o de nuestras incapacidades mentales para decidir sobre nuestros cuerpos, etc�tera.

��������� Hablo de las mujeres porque conozco esos casos -no s� si ocurre en los hombres‑ pero la realidad es que las mujeres, a�n las no discapacitadas, cuando tienen que hacer estas pr�cticas, pasan por una cantidad de interrogatorios tan maliciosos como manipuladores para tratar de quitarles su derecho. Desde ese punto de vista, queremos saludar esta modificaci�n.

��������� Tambi�n queremos traer al recinto la importancia de establecer la capacidad y el derecho, m�s que nada en este momento donde todo el colectivo feminista est� conmovido por la descarnada denuncia de Britney Spears a quien, por incapaz, se le quita el derecho a decidir si se saca o no un espiral de su cuerpo, entre otros tantos derechos. Por eso, saludamos este avance en la legislaci�n de nuestro pa�s.

��������� Creemos que tanto en esta norma como en la ley sobre la interrupci�n voluntaria del embarazo queda pendiente sacar el art�culo que da derecho a la objeci�n de conciencia.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se va a votar en general y en particular el dictamen de las comisiones de Acci�n Social y Salud P�blica y de Discapacidad, reca�do en el proyecto de ley por el que se modifican los art�culos 2� y 3� de la ley 26.130 del R�gimen para las Intervenciones de Contracepci�n Quir�rgica, contenido en el Orden del D�a N� 283.

-   Mientras se practica la votaci�n nominal:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se preguntar� el sentido del voto a los diecinueve se�ores diputados que no pudieron registrar su voto.

��������� Se�or diputado Baldassi, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Baldassi.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Bernazza, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Banfi, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Banfi.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Cama�o, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Caparr�s, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Caparr�s.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Cornejo, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Cornejo.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado de Lamadrid, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Enr�quez, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Enr�quez.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Frade, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Frade.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Frigerio, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Frigerio.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Juez, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada L�pez, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. L�pez.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Martiarena.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Mois�s, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Mois�s.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Moyano, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Orrego, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Orrego.- Afirmativo, se�or presidente.

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Osuna, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Osuna.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada P�rtile, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vessvessian, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Vessvessian.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia pasar� lista por �ltima vez.

��������� Se�ora diputada Bernazza, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Bernazza.- Afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Cama�o, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�or diputado de Lamadrid, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�or diputado Juez, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�or diputado Moyano, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�ora diputada P�rtile, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

��������� Antes de leer el resultado de la votaci�n, y para aclarar el sentido de su voto, tiene la palabra el se�or diputado Est�vez, por Santa Fe.

 

Sr. Est�vez.- Se�or presidente: por un problema t�cnico no puedo votar a trav�s del celular, tal como me sucedi� anteriormente. Quiero manifestar que mi voto es afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se deja constancia de su voto afirmativo, se�or diputado.

��������� �Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� lectura del resultado.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Se han registrado 237 votos afirmativos, 1 negativo y 1 abstenci�n.[2]

 

Sr. Presidente (Massa).- Queda sancionado el proyecto de ley.[3]

��������� Se comunicar� al Honorable Senado. (Aplausos.)

 

                                                                                                            - 7 -       

MARCO REGULATORIO DE BIOCOMBUSTIBLES

Sr. Presidente (Massa).- Corresponde considerar el dictamen de mayor�a de las comisiones de Energ�a y Combustibles y de Presupuesto y Hacienda reca�do en el proyecto de ley contenido en el expediente 1.621-D.-2021, por el que se aprueba el marco regulatorio de biocombustibles (Orden del D�a N� 383).


 

AQU� ORDEN DEL D�A N� 383

 


 

Sr. Presidente (Massa).- En consideraci�n en general.

          Tiene la palabra el se�or diputado F�lix, por Mendoza.

 

Sr. F�lix.- Se�or presidente: hoy nos ocupa un tema estrat�gico vinculado con el desarrollo y la expansi�n de la econom�a nacional y que ha sido tratado teniendo en cuenta la protecci�n y el cuidado del medio ambiente que la realidad nos impone.

��������� Nos proponemos dar previsibilidad y seguridad jur�dica a una actividad que a partir de 2006 ha generado en la Argentina importantes inversiones por 3.000 millones de d�lares, como as� tambi�n 80.000 puestos de trabajo directos. Ambos bienes �inversi�n y trabajo, hoy tan necesarios- fueron resultado de la ley 26.093. Eso ha sido tenido en cuenta y valorado, tanto en las reuniones informativas de la comisi�n como en oportunidad de emitirse el dictamen correspondiente al proyecto en consideraci�n.

��������� A partir de la vigencia de la citada ley, cincuenta y cinco plantas nacieron y se desarrollaron en nueve provincias, pero el escenario actual ha variado desde la promulgaci�n de esa norma legal.

En la diversidad de la industria de los biocombustibles conviven grandes empresas junto con pymes que, a su vez, se nuclean en distintas c�maras y localizan en provincias de realidades diferentes, con distintos impactos sobre las econom�as regionales, seg�n su ubicaci�n.

��������� Este escenario requiere un marco legal que contemple esas diversidades y permita que la actividad sea constante -hoy se desarrolla intermitentemente-, procurando adem�s la rentabilidad de valor del producto y facilitando el acceso a los insumos y al mercado financiero.

��������� Este proyecto de ley propone atender las necesidades espec�ficas del sector sin descuidar el inter�s de los consumidores. Es sabido que cuando hablamos de combustibles el incremento del precio no solo impacta en el tema del transporte sino que tambi�n se traslada a todos los costos, es decir, a los de los hogares, los de la producci�n primaria y los de la industria. De una u otra forma, la comunidad en su conjunto es la que se ve afectada.

��������� Aqu� no se trata de intereses sectoriales sino del bien com�n. Sabemos que no ser�amos equitativos ni justos aplicando al sector azucarero, por ejemplo, las mismas normas que al de la soja o al del ma�z.

��������� El proyecto de ley en consideraci�n contempla estos criterios de proporcionalidad, ubicando en primer t�rmino el inter�s general para luego atender los intereses de los distintos sectores.

��������� El valor en el surtidor, el cuidado ambiental, el impacto sobre la econom�a regional en que opera cada empresa y la protecci�n de los trabajadores y de sus fuentes de trabajo constituyen el objetivo primordial de esta iniciativa. A ello debemos agregar el sostenimiento de todas las plantas en funcionamiento. Cada uno de los objetivos planteados conforma el esp�ritu del proyecto en tratamiento.

��������� Hasta aqu� he enumerado las consideraciones generales.

��������� Desde el punto de vista particular, podemos decir que se establece un plazo de vigencia hasta el 31 de diciembre de 2030, con la posibilidad, por parte del Poder Ejecutivo, de extenderlo por cinco a�os. Entendemos que estos plazos de vigencia permitir�n, tanto al sector privado como al p�blico, planificar y definir estrategias que facilitar�n la sostenibilidad del sector, su expansi�n y su crecimiento.

��������� Tambi�n se establece con precisi�n la autoridad de aplicaci�n, recayendo esa funci�n en la Secretar�a de Energ�a, en el �mbito del Ministerio de Econom�a de la Naci�n. Asimismo se determinan espec�ficamente las funciones de la autoridad de aplicaci�n.

��������� Por otra parte, se definen con claridad qu� biocombustibles se encuentran alcanzados por el proyecto de ley en consideraci�n.

��������� Se requiere la habilitaci�n de las empresas que desarrollen la actividad, por parte de la autoridad de aplicaci�n. Al mismo tiempo, se proh�be taxativamente a las empresas que producen o destilan hidrocarburos ser titulares o participar en otras empresas del sector de los biocombustibles. Este ha sido un tema muy marcado.

��������� El art�culo 6� del proyecto de ley autoriza toda modificaci�n o ampliaci�n de las plantas productoras, como as� tambi�n cambios en los modelos de negocios, verific�ndose previamente que no generen posicionamiento con ventajas sobre otras empresas del sector. No debemos dejar de considerar que el mercado de los biocombustibles existe por imperio de la ley y que la demanda del producto estar� condicionada fundamentalmente por los porcentajes de corte y la demanda del producto final. 

��������� Entonces, es l�gico que se otorguen a la autoridad de aplicaci�n las herramientas adecuadas para equilibrar la producci�n, de manera que todas las empresas participen del mercado y se eviten futuras posiciones dominantes.

��������� La autoridad de aplicaci�n tambi�n fijar� pautas m�nimas de calidad requeridas para el producto. Esto es l�gico y est� contemplado en la ley vigente. El porcentaje de corte a fijarse en el caso del biodi�sel es del 5 por ciento -precisamente igual que en el r�gimen de promoci�n hasta hoy vigente-, mientras que en el del bioetanol es del 12 por ciento. En este sentido, se faculta a la autoridad de aplicaci�n a reducir el porcentaje de corte hasta el 3 por ciento en el caso del biodi�sel. En el del bioetanol, el porcentaje de corte se distribuye en un 6 por ciento para el bioetanol derivado de la ca�a de az�car y en un 6 por ciento para el derivado del ma�z, pudiendo reducirse en este �ltimo supuesto hasta un 3 por ciento.

��������� La reducci�n del porcentaje de corte por debajo del 5 por ciento en el caso del biodi�sel o por debajo del 6 por ciento en el del bioetanol derivado del ma�z tendr�, l�gicamente, un car�cter excepcional y siempre ser� para evitar una distorsi�n de precios en el surtidor.

��������� Claramente, se trata de proteger la econom�a de todos los argentinos y se considera la posibilidad, tal como ocurre en la actualidad, de transitar per�odos de precios elevados de insumos u otras situaciones que generen distorsiones que afecten al consumidor final. En estos casos, el �rgano de aplicaci�n tendr� a su disposici�n herramientas que permitir�n corregir esas distorsiones y hacer sostenible la actividad, en la comprensi�n de que se trata de situaciones de excepcionalidad y que, una vez superadas, se debe volver a los par�metros establecidos para situaciones de normalidad.

��������� En cuanto al precio, en correspondencia con lo anterior, los art�culos 13 y 14 del proyecto de ley se refieren a su determinaci�n, garantizando la rentabilidad. Tambi�n aqu� se establece una relaci�n con la estabilidad de las empresas, ya que especialmente en situaciones de excepcionalidad en que se reduce el porcentaje de corte deben variar el precio, guardando siempre una relaci�n de equilibrio entre el precio y el corte.

��������� Ya dijimos que estas plantas se encuentran localizadas en diferentes provincias. Como consecuencia de ello, las distancias respecto de los proveedores de insumos y los puntos de destino del producto final suponen diferencias en costos log�sticos, lo que tambi�n se contempla a la hora de fijar precios. Esta situaci�n fue planteada por algunas provincias.

���� El proyecto en tratamiento tambi�n establece la creaci�n de la Comisi�n Especial de Biocombustibles -esto es muy importante-, presidida por la Secretar�a de Energ�a e integrada por los ministerios que tienen injerencia en el tema, como los de Econom�a; de Ciencia, Tecnolog�a e Innovaci�n Productiva; de Ambiente y Desarrollo Sostenible y de Agricultura, Ganader�a y Pesca y de Desarrollo Productivo. 

���� A esto debe agregarse algo muy importante, que es la participaci�n de un consejo de las provincias productoras de biocombustibles.

���� El art�culo 15 del proyecto de ley establece las funciones y objetivos de la citada comisi�n, obviamente efectuando una articulaci�n con los actores del sector. Considero que esto es muy importante. Reci�n comentaba que esto se encuentra en diversas c�maras de diferentes provincias. En este sentido ha habido un nivel de di�logo y coordinaci�n con distintos sectores. Aqu� debo reconocer la importante labor de coordinaci�n con el sector llevada adelante por el diputado Cleri, a quien le agradezco su esfuerzo en esta actividad.

��������� Otro tema importante a tener en cuenta es la sustituci�n de importaciones. Y ac� hay una valoraci�n: en diversas etapas de nuestra vida como pa�s hemos sido testigos de la importaci�n de insumos primarios o industrializados pese a que en muchos casos nuestro pa�s los produce. Escuchamos reiteradas veces a lo largo de nuestra historia, en especial cuando gobiernan aquellos que dogm�ticamente aplican las recetas del libre comercio, la justificaci�n que aduce que se consiguen mejores precios para el consumidor, o que es por incapacidad para satisfacer la demanda con la producci�n local.

��������� La verdad es que entre 2016 y 2019 se importaron combustibles por aproximadamente 6.000 millones de d�lares: 4.200 millones en gasoil y 1.600 millones en nafta. �Qu� bueno habr�a sido que esos vol�menes hubiesen sido cubiertos con biocombustibles! Tal vez as� no hubiese tenido que cerrar la planta que fue desguazada en Santiago del Estero, y adem�s se hubiese evitado la salida de divisas tan valoradas y necesarias en la Argentina.

��������� Esperamos que en el futuro no vuelva a ocurrir y que, si las refinadoras no alcanzan a cubrir la demanda nacional, los vol�menes faltantes se cubran con biocombustibles de las plantas nacionales.

��������� Por eso esta norma prev� espec�ficamente, en el art�culo 16, la sustituci�n de importaciones de combustibles f�siles con biocombustibles hasta donde lo permita la capacidad de producci�n local. En consecuencia, en el art�culo 17 se establecen las condiciones para la participaci�n equitativa de las empresas del sector.

��������� Tambi�n se establecen sanciones por infracciones a las normas. Las mismas pueden ser inhabilitaciones transitorias o definitivas, o multas acordes a la gravedad de las faltas ‑pudiendo �stas ser leves, graves o muy graves‑, y previendo tambi�n la sanci�n, por supuesto, en caso de reincidencia.

��������� Es importante destacar que se except�a al biodi�sel y al bioetanol del pago de impuestos a los combustibles l�quidos y al di�xido de carbono establecido en la ley 23.966.

��������� Se�or presidente: el tema que hoy tratamos fue largamente debatido en comisi�n, donde tuvimos la presencia de c�maras del sector y del secretario de Energ�a, y tambi�n se debati� en otros �mbitos sin la presencia de todas las voces. All� se argument�, entre otras cosas, que es una norma intervencionista.

��������� Si se trata de un mercado que existe solamente por la decisi�n pol�tica expresada en una ley, es l�gico que esa misma ley tome todas las previsiones y prevenciones para un funcionamiento arm�nico, en equidad entre los diferentes actores, y que no se generen efectos no deseados.

��������� Tambi�n se argument� que la norma disminuye los porcentajes de corte en funci�n de la ley hoy vigente y que no se cumple con el principio de progresividad. En el caso del biodi�sel ‑ya lo hemos dicho‑ se conserva el mismo porcentaje, que es el 5 por ciento, y en el caso del bioetanol, el porcentaje de corte es del 12 por ciento, distribuido de la siguiente manera: 6 por ciento en el caso de origen en ca�a de az�car y 6 por ciento en el caso de origen en ma�z.

��������� Y la norma es clara: solo excepcionalmente cuando el valor de los insumos impacte sobre los costos de producci�n y se traslade en la cadena hasta el surtidor, la autoridad de aplicaci�n podr� bajar los porcentajes de corte: hasta el 3 por ciento en biodi�sel y hasta el 3 por ciento en bioetanol de origen en ma�z, siendo estas reducciones temporarias y pensadas para el normal funcionamiento de la totalidad de las plantas instaladas.

��������� As� como en 2006 nuestro gobierno cre� el marco jur�dico para el surgimiento de los biocombustibles en nuestro pa�s y con ello gener� un proceso virtuoso, hoy adaptamos ese marco a nuevos escenarios emergentes y con esta norma generamos las herramientas que den previsibilidad, sustentabilidad y seguridad jur�dica al sector.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Para fundar el dictamen de minor�a, tiene la palabra la se�ora diputada Latorre, por Mendoza.

 

Sra. Latorre.- Se�or presidente: estoy convencida de que la Argentina necesita y merece m�s. Lo que hoy el oficialismo nos trae para discutir ac� ‑despu�s de eternas idas y vueltas por no poder sortear sus propias contradicciones y sus internas‑ es cortoplacismo y mediocridad; es un traje a medida de unos pocos empresarios amigos del kirchnerismo.

��������� Pero, necesariamente, para hacer un an�lisis serio debemos hacernos algunas interrogantes: �qu� es esto? �De qu� se trata este marco regulatorio?

��������� No es la pr�rroga del r�gimen de la ley 26.093, como propuso el mismo Frente de Todos en el Senado. Tampoco es un nuevo r�gimen de promoci�n y fomento, porque ac� no hay ni promoci�n ni fomento; muy por el contrario. Lo que hay ac� es un castigo para el que invirti� y un incentivo a la mediocridad.

��������� Dicen que es un nuevo marco regulatorio. Pero les cuento que les ha quedado grande el t�tulo y tambi�n el relato para describir lo que en realidad es un proyecto regresivo, intervencionista e inconstitucional.

��������� �Cu�les son los objetivos? �A d�nde quieren ir con esto? Seguramente, hacia atr�s, porque ah� es el �nico lugar hacia donde van. A esto se le suman quince a�os de estancamiento pr�ximos, demasiado tiempo para caminar sin rumbo debido a la falta de una pol�tica energ�tica y de una planificaci�n estrat�gica.

��������� �Y qui�nes van a ser los beneficiados? Ser�n solo unos pocos y por demasiado tiempo: las pocas empresas que seguir�n en pie a costa de este capitalismo de amigos �K�.

��������� �Hubo consenso? He escuchado decir que s�, pero no lo hubo. No se escuch� a nadie m�s que a los pocos beneficiados. No se escuch� a las m�s de 10.000 familias que pasar�n a engrosar el alt�simo n�mero de desocupados de nuestro pa�s, justo en el momento en que necesitamos un mayor incentivo a la producci�n y al empleo privado.

��������� Tampoco se escuch� a los responsables en materia de ambiente y cambio clim�tico. Este proyecto ni siquiera pas� por la Comisi�n de Recursos Naturales y Conservaci�n del Ambiente Humano de esta C�mara.

��������� Ped� expresamente que dicha comisi�n interviniera en el debate, pero la respuesta fue que no hab�a tiempo. El oficialismo no tiene tiempo para planificaci�n ni para legislar con sustentabilidad real.

��������� Tampoco se escuch� a la industria y a la producci�n que, para ser competitivas en el pa�s y en el mundo, necesitan b�sicamente crecer y ganar mercados, cosa que no va a ocurrir si continuamos aumentando el nivel de emisiones de carbono en lugar de reducirlas y neutralizarlas.

��������� Ni siquiera tienen consenso dentro del mismo Frente de Todos. Est�n derogando un r�gimen promovido por el kirchnerismo, cuya pr�rroga tambi�n fue propuesta en el Senado por el kirchnerismo. El consenso que tendr�a que haber ac� deber�amos encontrarlo en el acuerdo sobre la necesidad de la diversificaci�n de la matriz energ�tica en la Argentina. Pero, con propuestas como esta, los que se dicen �abanderados del progresismo� lo �nico que hacen es atrasar.

��������� No puedo dejar de hablar del contenido del proyecto que estamos debatiendo, sin advertir -sobre todo‑ que en los �ltimos d�as, y a �ltimo momento ‑como acostumbran a hacer‑, lo cambiaron.

��������� Un proyecto que se present� sobre mezclas m�nimas obligatorias hoy llega a la votaci�n en este recinto con una palabrita menos, ya que eliminaron el t�rmino �m�nimas� en todo el texto. Y si bien esto puede pasar como poco relevante o desapercibido ‑como ocurri� con la palabra �negligencia� cuando se vot� la ley de vacunas‑, tiene implicancias graves, a tal punto que desnaturaliza lo que estamos discutiendo. Digo esto porque con un r�gimen sin planificaci�n, sin objetivos, sin incentivos, sin fomento y sin garant�as, lo �nico que estamos discutiendo ac� es una autoridad de aplicaci�n y sus facultades. Eso s�, una autoridad de aplicaci�n de las que le gustan al oficialismo: con superpoderes, que en manos de un Estado que a duras penas puede garantizar y cumplir en forma eficiente sus funciones m�s elementales, viene a intervenir en el mercado cual si supiera, cual si pudiera. Es decir, un Estado que quiere ser regulador, administrador, fiscalizador, sancionador, con amplias facultades. Es decir, se trata de un Estado que va decidir a qui�n contrata, a qu� precio, con qu� cupo, cerrando las posibilidades al crecimiento y a la innovaci�n, con una regulaci�n de amplias facultades pero de poca transparencia y con criterios difusos. Por lo tanto estamos hablando de un proyecto de ley que fomenta la corrupci�n y castiga a la inversi�n.

��������� Se�or presidente, con esta iniciativa tiene muy poco sentido hablar del car�cter regresivo. �Qu� sentido tiene que hablemos y discutamos porcentajes en m�s o en menos si se otorga al Poder Ejecutivo nacional la facultad para disminuirlos discrecionalmente? Existe una delegaci�n expresa de facultades.

��������� Sin duda que es regresivo bajar los cortes del biodiesel al 5 por ciento, con posibilidad de llegar al 3 por ciento, y del bioetanol al 12 por ciento ‑dividido en 3 por ciento para el etanol de ma�z‑, con posibilidad de volver a bajarlo, sin que lo mismo ocurra con el etanol de ca�a que tiene asegurado su 6 por ciento.

��������� Sin embargo, atar las decisiones a la discrecionalidad y a la burocracia de una autoridad de aplicaci�n del Poder Ejecutivo es peor y retr�grado.

��������� No nos confundamos, se�or presidente: una cosa es un Estado presente y eficiente, y otra cosa es esto: el intervencionismo de un Estado ineficiente.

��������� El contenido de este proyecto es que act�a en perjuicio de esas pymes con las que se llenan la boca diciendo que las vienen a defender. Esto genera una menor utilizaci�n de la capacidad instalada de esas pymes, inevitables cierres y quiebres de los productores, y una concentraci�n de la oferta en grupos econ�micos �eso s�‑ de cuatro a seis empresas disfrazadas de pymes que, casualmente, son los �nicos y m�s fervientes defensores del proyecto y con los �nicos que hablaron.

��������� El otro argumento insostenible del oficialismo es el pretendido control del precio de los combustibles, que no resiste el menor an�lisis a la luz de los datos objetivos.

��������� En tal sentido, la composici�n aproximada del precio de los combustibles l�quidos tiene un 12 por ciento de margen de comercializaci�n, 1,5 por ciento de flete, 21 por ciento de IVA, 3 por ciento de ingresos brutos y 20 por ciento de impuesto a los combustibles l�quidos ‑19 pesos cada litro‑. Ello significa que el total de impuestos directos es del 44 por ciento.

��������� Se�ores, si queremos controlar los precios, debemos empezar por la presi�n impositiva. Desde abril de 2019 el impuesto a los combustibles l�quidos aumento 115 por ciento para las naftas y 189 por ciento para el gasoil. Pero, evidentemente, para este gobierno el hilo se corta por lo m�s d�bil. Es decir, en lugar de aliviar la presi�n impositiva, destruye la actividad y tira por la borda el esfuerzo realizado durante catorce a�os por los contribuyentes.

��������� Cuidado con quienes quieran apoyar este proyecto creyendo que sus provincias o sus econom�as van a tener la vaca atada. En la mediocridad de pensar que aunque la torta vaya a ser cada vez m�s chica se divide entre menos. Lamento decirles que el jueguito K es solo para el capitalismo de amigos y en ese esquema solamente ganan ellos.

��������� La mediocridad de este proyecto no solo significa un retroceso, sino que tambi�n compromete la sustentabilidad y el futuro de los argentinos y argentinas y no contempla la posibilidad de utilizar nuevas tecnolog�as. Por ejemplo, elimina el biog�s de la definici�n de biocombustibles quit�ndole el espacio ganado.

��������� Existen ciudades en distintas partes del mundo que abastecen con biog�s la flota de transporte y que han logrado promover marcos de econom�a circular utilizando los residuos cloacales, por ejemplo, para el desarrollo del biog�s. Estos biocombustibles se obtienen de materias primas no aprovechables para la alimentaci�n humana.

��������� Cabe se�alar que nuestros cient�ficos est�n trabajando en este sentido y existen numerosas investigaciones que se llevan a cabo en la Argentina -por ejemplo, en el INTA y en el INTI‑ sobre las tecnolog�as a utilizar para un mejor aprovechamiento.

��������� Me pregunto cu�ndo vamos a empezar a hablar en serio de la econom�a circular y de la sustentabilidad y cu�ndo vamos a aprovechar con responsabilidad nuestros recursos. Este tipo de proyecto deber�a servir como ejemplo para modelar la Argentina que queremos y no lo estamos aprovechando.

��������� En esta iniciativa tampoco se consideran los combustibles de segunda y tercera generaci�n. Esto es esencial y deber�a ser el objetivo de una nueva ley superadora, dado que la evoluci�n de los biocombustibles viene a trav�s del uso de tecnolog�as que promueven estos biocombustibles de segunda y tercera generaci�n. Adem�s, implican la mejor y mayor eficiencia en la producci�n y permiten ampliar las fronteras productivas de lo que hasta hoy conocemos como biocombustibles.

��������� El mundo est� hablando de la descarbonizaci�n de la matriz energ�tica. Algunos pa�ses ya han marcado el fin de la producci�n de los hidrocarburos y nosotros nos damos el lujo de retroceder quince a�os en nuestra pol�tica de biocombustibles.

��������� La Argentina ha tomado compromisos internacionales a trav�s del Acuerdo de Par�s y aqu� los estamos incumpliendo. Para citar algunos ejemplos, Francia prohibi� toda la producci�n petrolera para el a�o 2040 y los l�deres del G7 llegaron a un acuerdo para poner fin a las ayudas gubernamentales para las centrales t�rmicas que no hayan adoptado medidas anticontaminantes.

��������� En Irlanda el gobierno aprob� una propuesta de ley que incluye que no podr� conceder nuevas autorizaciones para la exploraci�n de gas y petr�leo en el mar, menciono esto solo por nombrar algunos casos.

��������� Con estos comentarios no quiero realizar una oposici�n injustificada sino que son los fundamentos que me llevan a decir que este proyecto es inconstitucional.

��������� El corte de biocombustibles est� directamente relacionado con las metas de reducci�n de gases de efecto invernadero, obligaci�n que est� impuesta por nuestra Constituci�n y adem�s por los acuerdos internacionales ‑de los que somos signatarios‑ receptados en nuestra ley general de ambiente. Esto deber�a ser suficiente para que entendamos que se trata de pol�ticas de Estado; no de trajes a medida de la voluntad pol�tica y econ�mica cambiante de cada gobierno de turno que, en el caso de ustedes, ya no respeta ni sus propios antecedentes.

��������� La diversificaci�n de la matriz energ�tica es consecuencia de las pol�ticas de promoci�n y del uso de energ�as renovables y esto no constituye el objetivo de este proyecto.

��������� Adem�s, subordinar el porcentaje de biocombustibles ‑tal como plantea la iniciativa‑ a las necesidades de la econom�a nacional ‑f�jense qu� abstracto, flexible y sobre todo discrecional es el concepto‑ es a todas luces un sinsentido que refuerza la necesidad de una autoridad de aplicaci�n diferente a la que este proyecto llena de superpoderes, cuyos objetivos tienen que estar alineados con la generaci�n de energ�as sustentables.

��������� Esta iniciativa va en contra del principio de progresividad. Lo hemos dicho y lo afirmamos, y seguramente ser� lo que en los distintos planteos de inconstitucionalidad tambi�n afirme la Justicia.

��������� El principio de progresividad ambiental, que comprende tanto la gradualidad como la no recreaci�n, no es caprichoso, sino que est� puesto justamente para que en tiempos de crisis econ�micas no se eche mano a limitar o a anular normas de protecci�n del ambiente como primer mecanismo para afrontar la falta de crecimiento.

��������� Se�or presidente, este tiempo que hemos perdido con las negociaciones del Frente de Todos para desandar el camino, deber�amos haberlo usado para trabajar en propuestas superadoras. As� lo propusimos desde Juntos por el Cambio. Al igual que otros colegas, present� un proyecto que ten�a como objetivo analizar los resultados del funcionamiento del r�gimen de estos �ltimos catorce a�os y proyectarnos seriamente en el marco de un plan energ�tico hacia los pr�ximos quince a�os, pero con un r�gimen en el que se definan reglas de juego claras, transparentes, estables y sostenibles en el tiempo, que respeten los compromisos internacionales, que premien el incentivo y el esfuerzo. Dichas reglas deben estar destinadas a aumentar la productividad y favorecer la innovaci�n tecnol�gica y la generaci�n de empleos sustentables.

��������� Para terminar, se�or presidente, solicito autorizaci�n para hacer una peque�a lectura que espero refresque un poco la memoria de los colegas del oficialismo: �En definitiva, la introducci�n de los biocombustibles en nuestra matriz energ�tica no solo tiene enormes beneficios ambientales, sino que nos va a permitir diversificar nuestra oferta energ�tica disminuyendo el peso del combustible no renovable e incrementando la participaci�n de combustibles renovables.� N�stor Kirchner, discurso de apertura de sesiones en el Congreso de la Naci�n en 2007.

��������� Les pido que construyamos consensos, que los busquemos y que no borren con el codo lo que escribieron con la mano por perseguir intereses particulares. Muchas gracias. (Aplausos.)

Sr. Presidente (De Marchi).- Para iniciar los tiempos de bloques, tiene la palabra el se�or diputado Leito, por Tucum�n.

 

Sr. Leito.- Se�or presidente�

 

Sr. Mart�nez.- �Me concede una interrupci�n, se�or diputado, con la venia de la Presidencia?

 

Sr. Leito.- S�, se�or diputado.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- �Para una interrupci�n, tiene la palabra el se�or diputado Mart�nez, por Santa Fe.

 

Sr. Mart�nez.- Se�or presidente: estamos comenzando un debate en el cual en nombre del di�logo y del consenso nos dijeron que este proyecto fomenta la corrupci�n, el capitalismo de amigos K y de empresarios amigos.

��������� Le iba a pedir una interrupci�n a la diputada preopinante -creo que no est� escuchando‑ pero no lo hice por respeto al eje de su discurso. Me parece que esta no es la forma de comenzar un debate de estas caracter�sticas. La diputada preopinante firm� un dictamen que debe tener sus fundamentos y tiene todo el derecho del mundo a plantear el tema desde su verdad relativa, al igual que nosotros tenemos la obligaci�n y el derecho de plantear nuestra mirada.

��������� En funci�n de lo que estipula el reglamento de la C�mara de Diputados, me parece absolutamente desubicado decir que esta iniciativa tiene que ver con la corrupci�n y con el amiguismo.

��������� Por eso, respetuosamente solicito a todos los que en alg�n momento est�n presidiendo la sesi�n a que nos ayuden a dar este debate con argumentos, sin chicanas ni agresiones. Le ofrezco a la diputada preopinante mi tel�fono para que vea si efectivamente tengo alg�n llamado de un supuesto empresario amigo y de paso que me diga si ella puede decir lo mismo de los empresarios de su provincia. (Aplausos.)

Sr. Presidente (De Marchi).- �Contin�a en el uso de la palabra el se�or diputado Leito, por Mendoza.

 

Sr. Ferraro.- �Me concede una interrupci�n, se�or diputado, con la venia de la Presidencia?

 

Sr. Leito.- S�, se�or diputado.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- �Para una interrupci�n, tiene la palabra el se�or diputado Ferraro, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Ferraro.- Se�or presidente: m�s que nada quiero abarcar una consideraci�n que creo que vale la pena plantear producto de la opini�n de un diputado preopinante.

��������� Deseo expresar al diputado preopinante que la diputada que hizo uso de la palabra en virtud de los tiempos otorgados que tiene cada uno de los bloques, est� ejerciendo ‑al igual que lo puede hacer cualquier diputado o diputada de un bloque de esta C�mara‑ una opini�n en el marco de lo que se da en este recinto y de lo que representan los fueros colectivos e individuales que tenemos de cada uno de los diputados y diputadas de la Naci�n.

��������� Pareciera ser que a algunos sectores del oficialismo le molesta la opini�n que podemos dar algunos diputados o diputadas en el seno del cumplimiento de nuestra labor. Esto lo digo en virtud de esa apreciaci�n. ���������

��������� Pero en mi caso personal, producto de mi participaci�n en un debate, un funcionario del Estado nacional pretende tambi�n violar el art�culo 68 de nuestra Constituci�n nacional.

��������� Por lo tanto, para seguir con un debate ordenado donde cada uno de los diputados y diputadas expresamos nuestra opini�n sobre lo que estamos discutiendo, creo que tenemos que ser respetuosos del punto de vista de una diputada, que podemos o no compartir, pero se trata de la expresi�n de una legisladora nacional en su funci�n.

��������� Hago esta observaci�n para no pasar a otras instancias que hacen a cuestiones de privilegio u otras que establece el Reglamento. Creo que este es el respeto genuino que debemos tener los diputados y diputadas en esta C�mara a la hora de debatir los distintos temas. Gracias, se�or presidente. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Gracias, se�or diputado Ferraro.

��������� Por haber sido aludida, tiene la palabra la se�ora diputada Latorre, por Mendoza.

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

Sr. Presidente (De Marchi).- Ha habido una alusi�n directa al hacer referencia a la diputada preopinante. A pesar de no haber indicado el nombre y utilizar t�rminos gen�ricos, se entiende a qui�n alude al usar t�rminos abstractos. Al haberse referido en forma espec�fica a la diputada preopinante, existe una alusi�n.

��������� Como la discusi�n de este tema reci�n inicia, la Presidencia solicita el m�ximo respeto y prudencia, y solicita a la diputada que haga una breve consideraci�n, de dos minutos, y luego continuamos con la lista de oradores.

��������� Tiene la palabra la se�ora diputada Latorre, por Mendoza.

 

Sra. Latorre.- Se�or presidente: ser� muy breve porque el diputado Ferraro ya ha sido contundente.

��������� Replanteo y reitero lo indicado por el diputado Ferraro: los diputados en ejercicio de nuestras funciones tenemos inmunidad de opini�n. El hecho de que muchos crean que esto se relaciona con fueros ‑que utilizan como impunidad‑ no significa que sean lo mismo.

��������� Nosotros utilizamos los fueros como lo que son: inmunidad de opini�n. En ese marco, con respeto, con solvencia t�cnica y con datos objetivos fund� mi dictamen y mi opini�n.

��������� Por lo tanto, no vayamos a los llamados que se hicieron o no se hicieron. Sin lugar a dudas, al igual que muchos representantes de mi interbloque, dialogu� con el sector privado, que es muy distinto a hacer negocios y a la corrupci�n. Muchas gracias. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (de Marchi).- Contin�a en el uso de la palabra el se�or diputado Leito, por Tucum�n. Gracias por su paciencia.

 

Sr. Leito.- Se�or presidente: hace mucho tiempo que un sector de la industria estaba buscando tener certeza y previsibilidad, y ese sector de la industria es precisamente la azucarera.

��������� El proyecto que hoy debatimos viene a establecer un marco regulatorio para lo que precisamente reclamaba esa industria.

��������� El a�o pasado junto a un grupo de diputados tucumanos pedimos que se tratara un proyecto de resoluci�n en el que hac�amos menci�n a la necesidad de la pr�rroga de la ley vigente. En aquel momento tambi�n expres�bamos y dec�amos que era necesario comenzar a trabajar en la elaboraci�n de una norma para traerla a recinto. Hoy celebramos que estemos debatiendo esta norma.

��������� Esto es muy importante para Tucum�n. La industria azucarera y la ca�a de az�car son fundamentales para la econom�a de nuestra provincia.

��������� En Tucum�n hay 280 mil hect�reas destinadas al cultivo de la ca�a de az�car. Es necesario que se sepa que Tucum�n aporta el 68 por ciento de la producci�n de az�car a nivel nacional y que en las �ltimas tres d�cadas la industria registr� un importante crecimiento producto de las inversiones que se han venido realizando.

��������� Para que tengan idea, tuvimos un pico m�ximo de producci�n de az�car en Tucum�n y as� llegamos a 2006 cuando se produjeron 1.600.000 de toneladas de az�car.� Luego vino una meseta. Muchos de esos ingenios ‑algunos est�n moliendo en Tucum�n‑ producen alcohol y bioetanol.

��������� Para que ustedes sepan, hay veintitr�s ingenios en el pa�s de los cual quince son tucumanos. De esos quince ingenios tucumanos, doce producen alcohol, y de ellos son ocho los que producen bioetanol. Este sector genera aproximadamente 250 mil puestos de trabajo en Tucum�n y la regi�n. Tambi�n sabemos que en el norte del pa�s tenemos algunos ingenios, y me refiero a Jujuy y Salta.

��������� Este marco regulatorio, esta norma que estamos tratando, tiene que ver con la elaboraci�n, el almacenaje, la comercializaci�n, la mezcla del combustible y su vigencia. Es as� que el propio proyecto establece su vigencia hasta el 31 de diciembre de 2030, con la posibilidad de que luego del vencimiento sea prorrogada por el Poder Ejecutivo nacional por cinco a�os. Adem�s, la autoridad de aplicaci�n ser� la Secretar�a de Energ�a, que depende del Ministerio de Econom�a de la Naci�n.

��������� En cuanto al corte, que es lo m�s importante, lo central de esta norma, se establece que el bioetanol deber� tener un corte del 12 por ciento como m�nimo y el biodiesel del 5 por ciento.

��������� Se�or presidente: no quisiera terminar sin hacer menci�n a algunas cuestiones que han pasado en Tucum�n. No queremos volver al 22 de agosto de 1966, cuando durante el gobierno de facto de Ongan�a se cerraron once ingenios tucumanos: Santa Luc�a, Santa Ana, San Jos�, San Ram�n, Los Ralos, Nueva Baviera, Esperanza, Mercedes, Amalia y Lastenia, que se transformaron en pueblos fantasmas; quedaron 50.000 puestos de trabajo sin que los tucumanos los pudieran ocupar. Para que ustedes tengan una idea: de una poblaci�n de 700.000 habitantes, 200.000 emigraron de Tucum�n para ir a otros centros a poblar las villas miserias de la Capital Federal o de la provincia de Buenos Aires. Los tucumanos no queremos volver a vivir ese 22 de agosto de 1966.

��������� Es por eso que venimos a acompa�ar este proyecto, y lo vamos a votar afirmativamente porque creemos que los tucumanos nos merecemos tener certidumbre, previsibilidad y darle garant�a a la industria para que puedan trabajar en beneficio de todos los tucumanos.

��������� �Por ello, reitero que vamos a acompa�ar este proyecto. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- �Tiene la palabra el diputado Eduardo Fern�ndez, por C�rdoba.

 

Sr. Fern�ndez (E.).- Se�or presidente: en principio quiero decirles a mis colegas, diputados y diputadas, que estamos discutiendo un muy buen proyecto de ley.

��������� El marco regulatorio de biocombustibles s� otorga estabilidad fiscal, beneficios impositivos y una segmentaci�n orientada al acompa�amiento del Estado para el desarrollo del sector. Entre otros puntos, garantiza por diez a�os la estabilidad de los beneficios con opci�n a pr�rroga por otros cinco a�os por decisi�n del Poder Ejecutivo.

��������� Eso permite, como dijo el diputado que me precedi� en el uso de la palabra, dar previsibilidad a las inversiones y al desarrollo del sector; otorga un rol preponderante y necesario a la Secretar�a de Energ�a de la Naci�n para garantizar el cumplimiento del r�gimen y la concreci�n de sus objetivos en esa implementaci�n; crea una comisi�n especial para el abordaje permanente de las necesidades del sector y la implementaci�n de este r�gimen de promoci�n con criterio federal de desarrollo regional� con representaci�n de las provincias; fija pautas de corte que permiten equilibrar el est�mulo al sector y segmentarlo; sustituye la importaci�n de combustibles f�siles por biocombustibles; y protege la producci�n nacional.

��������� El texto que hemos alcanzado concluye ineludiblemente con una perspectiva de promoci�n del sector, de apuntalamiento por parte del Estado al desarrollo productivo y regional y de cuidado del medio ambiente entendiendo el rol que para ello tienen los biocombustibles.

��������� Nadie, sino a trav�s de eslogan o de lecturas sesgadas, puede argumentar en medios de comunicaci�n que el texto que hoy vamos a aprobar genera desempleo, desincentiva el crecimiento de la actividad o resulta del lobby del sector petrolero.

��������� Les propongo a los miembros de la oposici�n que elevemos el debate. En los �ltimos d�as he escuchado en C�rdoba a diputados de mi provincia pronunci�ndose en contra del texto esgrimiendo argumentos altisonantes y diciendo que este era un proyecto anticordob�s. La verdad es que esos argumentos que hablan de una acci�n deliberada del gobierno al que pertenecemos o de este Poder Legislativo contra C�rdoba ha quedado desdibujado. Quiz�s surge porque estamos en proximidades de debates electorales y de las elecciones, pero no se condicen con la realidad, con la enorme ayuda que est� recibiendo mi provincia en el aspecto productivo y del empleo. Son argumentos vac�os.

��������� La verdad es que a los legisladores, a mis colegas de C�rdoba, nos ponen en una posici�n seg�n la cual si no legislamos como piden dos o tres empresas vendr�n todos los males del mundo. Nosotros estamos legislando por los intereses de las mayor�as y dentro de esas mayor�as tambi�n est� el sector empresario. Lo que est� en discusi�n es libre mercado o Estado. Esto es lo que hay detr�s de este debate. Hablar de producir desempleo en C�rdoba cuando los legisladores que sostienen eso defienden un modelo que ha transformado a C�rdoba en la capital del desempleo ‑seg�n la �ltima medici�n C�rdoba y el Gran C�rdoba ostentan el 14,8 por ciento de desempleo, es decir, casi el 15 por ciento‑, con �ndices de pobreza que se han duplicado, no es el mejor apoyo que pueden tener los sectores productivos.

��������� Se�or presidente, se�ores legisladores: la situaci�n de la producci�n y el empleo en mi provincia es dif�cil, como lo es en muchos lugares del pa�s, pero no se le debe echar la culpa a este proyecto de ser anticordob�s o de provocar desocupaci�n, diciendo que no es una propuesta a favor de los cordobeses y las cordobesas.

��������� En realidad, esta norma es la continuaci�n del proyecto de 2006. Se equivocan quienes nos dicen que no estamos siguiendo lo que nos propuso N�stor Kirchner. Gracias a la ley del a�o 2006 se crearon miles de puestos de trabajo y se fundaron tambi�n empresas peque�as y medianas. La segmentaci�n es otro de los atributos de esta norma. Es decir que este proyecto estabiliza los beneficios al sector por diez a�os, los segmenta y los integra a una pol�tica p�blica en materia de producci�n y desarrollo nacional coherente, sostenible y responsable.

��������� Los comprometo a que hagamos el debate con altura y sin recurrir a chicanas. S� que estamos pr�ximos a la discusi�n electoral, pero los argentinos y argentinas esperan de nosotros argumentos y proyectos serios.

��������� Tenemos dos a�os de gobierno por delante y es por eso que queremos la energ�a a un costo adecuado, protegiendo el medio ambiente y el empleo.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada Osuna, por Entre R�os.

 

Sra. Osuna.- Se�or presidente: la evoluci�n de la civilizaci�n ha estado siempre acompa�ada por el descubrimiento de diversas fuentes de energ�a.

Claramente, la energ�a es un problema multidimensional. Las diferentes fuentes de energ�a disponibles en el planeta son el centro de numerosos debates. De hecho, hoy lo estamos teniendo en esta C�mara.

��������� En ese marco, la Argentina juega un papel de Estado como pa�s en desarrollo, con posibilidades de expandir la producci�n de fuentes de energ�a alternativas. Por supuesto que la tensi�n generada por la producci�n de biocombustibles en el mercado interno o la producci�n de biocombustibles para la exportaci�n, genera la intervenci�n de numerosos actores nacionales e internacionales. En torno a la industria de los biocombustibles hay cuestiones de diferente tipo: pol�ticas, econ�micas, sociales, ambientales y comerciales. En mi opini�n ser�a un reduccionismo de muy mala fe simplificarlo y plantear la centralidad de uno de los ejes o cuestiones.

��������� Hay algo que, quiz�, el proyecto de ley no aborda, pero que ha surgido con fuerza en este debate. Me refiero al rol del Estado. De alg�n modo, la Argentina tiene un gran potencial para la producci�n de biocombustibles por sus notables e importantes ventajas competitivas. Pero creo que hay que ubicarse en el punto de arranque y ver cu�l fue el desarrollo principal de la producci�n de biocombustibles. Justamente, eso fue posible gracias a la intervenci�n del Estado; fue producto de la decisi�n de un presidente y de la sanci�n de una ley ‑que fue mencionada por el miembro informante y por distintos legisladores‑ a instancias de N�stor Kirchner en el a�o 2006.

��������� En ese momento era legisladora y participaba de la Comisi�n de Energ�a, y creo que fue a partir de esa instancia revolucionaria y movilizadora que se fue desarrollando esta industria y esta tecnolog�a que hoy tiene un presente innovador, prometedor y que queremos conservar, proteger y expandir.

��������� Tambi�n creo que en el marco de la regi�n es necesario echar luz para que en la Argentina se afirme esta herramienta de regulaci�n que hace a la soberan�a en materia de combustibles.

��������� Entonces, es oportuno plantear en este debate que el biocombustible tiene impacto ambiental positivo en relaci�n con los combustibles f�siles. El desarrollo del biocombustible forma parte de estrategias de descarbonizaci�n que se discuten en el marco de los Acuerdos de Par�s del a�o 2015. Pero desde lo pol�tico hay una alerta vinculada con las propuestas de pa�ses desarrollados que buscan ampliar y controlar los mercados a trav�s de acuerdos bilaterales.

��������� Adem�s, desde el punto de vista econ�mico los biocombustibles constituyen un nuevo sector productivo, con potencial y ventajas que hay que aprovechar, pero que tambi�n hay que controlar y cuidar. Esto tiene que ver con el objetivo de la norma. Un desarrollo no regulado de la actividad implicar�a perder esa soberan�a sobre un sector estrat�gico, ya que las principales empresas productoras de biocombustibles son�

-   Se interrumpe el audio.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- No la estamos escuchando, se�ora diputada.

 

Sra. Osuna.- Se�or presidente: dec�a que es muy importante el impacto que la ley ha tenido en el desarrollo productivo y tecnol�gico de la provincia de Entre R�os y de la regi�n.

��������� En ese sentido, creo que aqu� se ha planteado con absoluta claridad la importancia del rol del Estado en la regulaci�n.

��������� Para finalizar, creo que sirve de ejemplo se�alar que en materia energ�tica durante el gobierno de Cambiemos se autorizaron aumentos de tarifas por m�s de 4.450 por ciento, lo que gener� un incremento de la pobreza energ�tica que salt� del 1 al 20 por ciento. Tengamos en cuenta que el congelamiento de las tarifas de luz y gas que se dispuso durante nuestro gobierno, sac� de la pobreza energ�tica a 1.800.000 argentinos. Esto ha sido se�alado por el Observatorio de Servicios P�blicos de la Universidad de La Plata.

��������� Lo traigo a colaci�n porque creo que de lo que hemos estado hablando ac� y lo que le da sentido a esta iniciativa, es el rol del Estado. Cuando un Estado regula, cuando define y protege la competencia y cuando alienta las inversiones, adem�s est� acompa�ando el crecimiento nacional, la generaci�n de trabajo y, en definitiva, el desarrollo del pa�s. Lo contrario es favorecer a los m�s grandes, es decir, a aquellos que est�n tratando de ver c�mo pueden hacerse de recursos a espaldas del desarrollo nacional. El desarrollo y el cuidado de las peque�as y medianas empresas que producen biocombustibles es lo que buscamos con este proyecto de ley.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada Caliva, por Salta.

 

Sra. Caliva.- Se�or presidente: quiero celebrar y agradecer el tratamiento de este nuevo marco regulatorio para los biocombustibles en la Argentina.

��������� En mi provincia de Salta y en nuestra regi�n es fundamental. Por supuesto, hab�a mucha preocupaci�n del sector de la industria, pero sobre todo hab�a una gran preocupaci�n de los trabajadores, de sus familias y de los pueblos en los que est�n enclavados los ingenios.

��������� En mi pueblo, General G�emes, donde nac�, est� el ingenio San Isidro y ah� la situaci�n es muy cr�tica, porque en 2018 ‑en el peor momento del infierno de la era macrista, que tanto da�o hizo‑ despidieron a 700 obreros del Ingenio San Isidro. La empresa ‑el grupo Gloria‑, argumentando que la econom�a estaba muy mal y que su rentabilidad no era suficiente, decidi� dejar en la calle a 700 obreros del ingenio San Isidro. Esos obreros ni siquiera fueron indemnizados: solamente les pagaron un porcentaje de lo que les correspond�a y tuvieron que esperar. Es as� que esperaron, siguen esperando y hoy est�n en un plan de lucha porque quieren cobrar la indemnizaci�n como les corresponde.

��������� Lamentablemente, la respuesta de la empresa ha sido militarizar el ingenio y lejos de responder, de ajustarse a derecho y de cumplir con todas las normativas en materia de derechos laborales y sindicales de los compa�eros y sus familias, contesta con violencia.

��������� Por ello, pensaba que nuestro gobierno y este Congreso est�n haciendo un gran esfuerzo para dotar de previsibilidad y darle garant�a y seguridad al empresariado, a quienes invierten, a los capitales nacionales y extranjeros y a las pymes para generar trabajo. Sin embargo, hay empresarios a los que nada les importa y no piensan que son 700 familias �lo que significa hablar de miles de hombres, mujeres, ni�as y ni�os‑ que en 2018 perdieron su trabajo. Por eso hoy estamos haciendo todos los esfuerzos para que ellos puedan recuperar el empleo.

��������� Quiero aprovechar este lugar y esta banca para instar a la gente del ingenio San Isidro a que por favor abonen lo que le corresponde a cada uno de los obreros y a sus familias. Quiero que sepan que con este proyecto y este nuevo marco normativo tienen todas las garant�as para seguir invirtiendo, para producir y para generar trabajo. Pero el trabajo tiene que venir desde el paradigma de los derechos humanos.

El trabajo es un derecho humano b�sico fundamental, porque sin trabajo no podemos comer ni vestirnos, no podemos mandar a nuestros hijos a la escuela y no podemos vivir.

��������� Por eso nuestro bloque trabaj� e hizo grandes esfuerzos para que hoy podamos estar discutiendo este nuevo r�gimen. Celebro que lo hagamos porque adem�s crea una comisi�n especial para discutir el desarrollo de los biocombustibles en la Argentina hacia el futuro. All� estar�n representados el Ministerio de Ciencia y Tecnolog�a, e Innovaci�n Productiva, el Ministerio de Econom�a, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, el Ministerio de Agricultura, Ganader�a y Pesca, y la Secretar�a de Energ�a, todos juntos trabajando en un plan estrat�gico para el desarrollo de los biocombustibles en la Argentina. No tenemos otro fin que no sea el de generar trabajo y ampliar derechos.

��������� Por estas razones, saludo y celebro nuevamente este proyecto. Desde ya, nuestro voto ser� por la afirmativa, para que todas, todos y todes protejamos el empleo y sigamos dotando a la regi�n de m�s derechos, como ocurri� en el caso del proyecto de ley de zonas fr�as, para beneficios de las familias que la est�n pasando mal con la pandemia. Imag�nense c�mo la puede estar pasando una familia sin trabajo.

��������� �Quiero agradecerles y enviarles un gran abrazo a los compa�eros del SOEASI -Sindicato de Obreros y Empleados del Az�car San Isidro-, en Campo Santo, departamento de General G�emes, Salta. Quiero que sepan que no est�n solos y que vamos a seguir trabajando incansablemente por sus derechos.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada El Sukaria, por C�rdoba.

 

Sra. El Sukaria.- Se�or presidente: estoy siguiendo con atenci�n el debate y algunos p�rrafos de las alocuciones que venimos escuchando me parecen extraordinarios. No s� de qu� texto est�n hablando, porque el proyecto establece todo lo contrario de lo que nos tratan de explicar.

��������� Tambi�n nos hablan de certidumbres, y lo que justamente no surge de esta propuesta es certidumbre para quienes invierten en este pa�s, cuando la base de protecci�n de derechos a todo aquel que invirti� estaba clara.

��������� Hablamos de 10.000 puestos de trabajo de manera directa y 60.000 de manera indirecta, y nos vienen a decir que hay que proteger el empleo, cuando eso es lo que ponen en riesgo en primer lugar. En este sentido, escuchando a un diputado de mi provincia tuve la sensaci�n de que conoce muy poco del tema, porque este proyecto pone en riesgo a las empresas del sector, que son pymes y no grandes empresas ni nada de lo que a este gobierno le encanta exaltar como un descr�dito al trabajo y a la inversi�n. La capacidad est� infravaluada y estas pymes tienen la posibilidad de generar mucho m�s. Sin embargo, con este proyecto de ley est�n poniendo en riesgo los puestos de trabajo en ciudades que fueron postergadas.

��������� Realmente, resulta doloroso tener que escuchar esas alocuciones. De todos modos, interpreto que se trata de lo que este gobierno trae constantemente al debate en cada sesi�n del Congreso, es decir, leyes que van en contra de la matriz productiva de nuestro pa�s.

��������� En todo caso, y en un momento tan delicado atravesado por la pandemia del COVID-19, deber�amos privilegiar a todo aquel que genera trabajo. Sin embargo, lo llenamos de dudas y de cuestionamientos y le ponemos nuevos impuestos. Hoy escuchamos en los medios que el impuesto a la riqueza ya no es excepcional por este a�o, sino que se puede aplicar mientras dure la pandemia.

��������� Respecto al manejo de la pandemia, los propios organismos internacionales han se�alado que el gobierno argentino es el que peor manej� la pandemia. Por eso hace casi diecis�is meses que el pa�s est� absolutamente estancado y sin norte.

��������� �Qu� estamos esperando para ayudar a la zona productiva? Por el contrario, no senv�an un proyecto de ley que tiene que sublevar a todo aquel que produce; no es justo. Tampoco es justo lo que est�n haciendo con la hidrov�a, con el campo, con el tema de la carne y con todo aquel que genere empleo.

��������� En verdad, es muy triste asistir a una sesi�n para hablar de az�car versus ma�z. No se trata de az�car versus ma�z. Este pa�s es az�car, m�s ma�z, m�s carne, m�s trabajo, m�s generaci�n de empleo con reglas claras, m�s la certidumbre. Pero eso tiene que ver con un gobierno que piense en un pa�s que quiera salir adelante, no que se estanque, que genere subsidios e impuestos y que doblegue a los ciudadanos.

��������� Les voy a dar un dato sobre el aumento de los subsidios. Este gobierno comenz� 2004 con un gasto p�blico en subsidios del 2 por ciento y termin� en 2015 con un 10 por ciento destinado a ese gasto. Esto fue para subsidiar el crudo y el gas natural y as� compensar a las petroleras.

��������� Estas herramientas son cortoplacistas y atrasan tarifariamente, generan inflaci�n y falta de inversi�n. Se calcula un costo de 97.000 millones en subsidios y en exenciones relacionadas a los combustibles f�siles. Sin embargo, est�n discutiendo el costo final del biodiesel.

��������� Quiz� para este gobierno la matriz productiva y el modelo de producci�n sea Hotesur, pero para el resto del pa�s el modelo de producci�n es todo el que genere trabajo.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Quetglas, por Buenos Aires.

 

Sr. Quetglas.- Se�or presidente: estamos tratando un proyecto de ley de presunta regulaci�n de los biocombustibles, en el marco de una transici�n energ�tica global. No estamos discutiendo esto en cualquier momento.

��������� Por el car�cter mayoritario de los combustibles no renovables, por la tendencia creciente de consumo de energ�a de parte de la poblaci�n, por los riesgos que abren las m�ltiples fuentes diversas que hemos explorado, por la necesidad de aumentar nuestra tasa de eficiencia agregada, por la necesidad de diversificar la matriz productiva, por la necesidad de hacerla m�s limpia, precisamos y estamos embarcados en un proceso transicional que llevar� algunas d�cadas, aunque se ha iniciado hace tiempo.

��������� �Cu�l es la clave de ese proceso transicional? El conocimiento. Cada una de las fuentes de energ�a nueva que se generan y que se explora, requiere una taza de conocimiento y de ingenier�a sobre c�mo distribuirla, almacenarla, generarla y darle eficiencia. Ese conocimiento lo necesitan las empresas -muchas veces lo generan ellas mismas-, las universidades y la sociedad. Es un conocimiento que no se construye de manera instant�nea ni en forma te�rica; se construye generando espacios exploratorios en el marco de la econom�a.

��������� O sea que para alcanzar m�ltiples objetivos energ�ticos en este marco, se necesita una condici�n de base: que las cadenas de valor que producen energ�a sean rentables; si no son rentables, este conocimiento en materia de reparaci�n de productos, almacenamiento, distribuci�n, seguridad, etc�tera, no se puede generar.

��������� En este punto quiero poner un asterisco. El caso de estudio a escala mundial sobre la necesidad de rentabilidad para gestionar bien la energ�a, es Venezuela, un pa�s que nada en petr�leo y que vive con cortes sistem�ticos de energ�a. Esto se debe a que al no haber rentabilidad, no hay reinversi�n. Por lo tanto, es un fiasco energ�tico.

��������� Eso lo tenemos que tomar en cuenta, porque nosotros tenemos que discutir esta y otras leyes vinculadas con el tema de la energ�a, garantizando a la producci�n y a la distribuci�n una rentabilidad que nos permita ponernos a la vanguardia del conocimiento.

��������� La Argentina ha transitado un camino en materia de biocombustibles. Se trata de una econom�a circular muy interesante por su car�cter de renovable y por lo que puede progresar a futuro en materia de eficiencia. Especialmente, en el caso argentino, por la enorme cuenca fotosint�tica de la que disponemos para generar energ�a renovable.

��������� En 2006, con una herramienta relativamente sencilla, que fue la garant�a de corte, se impuls� el sector cre�ndose 54 plantas, export�ndose tecnolog�a y emiti�ndose menos emanaciones. Por lo tanto, en t�rminos te�ricos, deber�a haber mejorado la calidad del aire. Me refiero a la calidad del aire porque despu�s de la pandemia, este tema se pondr� nuevamente en discusi�n en el mundo y, en consecuencia, no ser� un asunto menor. Quiz�s la transici�n hidrocarbur�fera sea m�s r�pida de lo que pensamos.

��������� Hoy el mundo �bio� integra la revoluci�n de los biocombustibles de nueva generaci�n. �Qui�n liderar�a la generaci�n de biocombustibles de nueva creaci�n en la Argentina? Las empresas de biocombustibles, las mismas a las que llevaremos al quebranto si les bajamos el corte. Entiendo que teniendo un horizonte, las empresas y las universidades generan valor. Sin embargo, con arbitrariedad, vamos a correr el futuro siempre desde atr�s.

��������� En este recinto se habl� del rol del Estado. Este es un tema muy interesante porque esta iniciativa muestra el t�pico rol del Estado que quiere arbitrar y decir qui�n gana y qui�n pierde. Creo que el Estado debe cumplir su rol con una calidad institucional m�s sofisticada y que la pol�tica debe recuperar su lugar arquitect�nico.

��������� Debemos saber que la Argentina todav�a importa combustibles. En el pa�s de mis sue�os los hidrocarburos, las energ�as renovables y los biocombustibles tienen lugar y la transici�n es una oportunidad para generar conocimiento, valor, exportaci�n y empleo. Pero en esta Argentina decadente toda oportunidad es un riesgo y el Estado es el rey de la arbitrariedad. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Maquieyra, por La Pampa.

 

Sr. Maquieyra.- Se�or presidente: hoy nos toca debatir un nuevo r�gimen de biocombustibles. No hay dudas de que estamos atravesando una crisis clim�tica. Nadie puede discutir que cada vez generamos m�s gases de efecto invernadero y que nuestro planeta se sigue calentando. Por eso, debemos cambiar la forma de producci�n y de generaci�n de energ�a, as� como tambi�n nuestro modo de vida porque la Tierra, tal como la conocemos, puede no ser habitable en los pr�ximos a�os. Ya no se trata de un problema que tendr�n nuestros hijos o nietos, sino que ya lo estamos viviendo.

��������� Vemos que los glaciares se derriten, que las inundaciones y las sequ�as en nuestra provincia, La Pampa, son cada vez m�s recurrentes y que el nivel del mar sube. Sin embargo, no parece que estuvi�ramos atendiendo estas situaciones, ya que estamos por votar un proyecto de ley que pretende ser ecol�gico a pesar de que se aumentar�n las emisiones de gases de efecto invernadero. Esto sucede mientras los distintos pa�ses del mundo est�n trabajando y poni�ndose de acuerdo para disminuir esas emisiones y el propio presidente Fern�ndez ratific� esos acuerdos. Sin embargo, la verdad es que hoy el kirchnerismo nos propone sancionar un proyecto de ley pro petr�leo que no impulsar� la disminuci�n de las emisiones.

��������� El biocombustible ha mostrado un impacto muy positivo ya que genera un 70 por ciento menos de emisiones que los combustibles f�siles. Obviamente, no es ciento por ciento neutral, pero durante la implementaci�n de la ley han dejado de emitirse 49 millones de toneladas de di�xido de carbono. Incluso, nuestra legislaci�n habla del principio de progresividad que comprende tanto la gradualidad como la no regresi�n en cuestiones ambientales. Esto significa que el Estado no puede disminuir los esfuerzos en protecci�n ambiental.

��������� En esta sesi�n se propone disminuir el corte de los biocombustibles pasando, en el caso del biodi�sel, de un 10 o 12 por ciento a un 5 por ciento, o incluso a un 3 por ciento, lo que pr�cticamente significa eliminarlo. Este proyecto de ley rompe el principio de progresividad establecido en el art�culo 41 de nuestra Constituci�n y en nuestras leyes ambientales. Por eso, m�s que una ley de promoci�n del biocombustible es una ley de erradicaci�n.

��������� Por otro lado, quiero referirme a c�mo impacta esta iniciativa en La Pampa. Al sancionarse la antigua ley de biocombustibles, se busc� fomentar el federalismo e instalar industrias con valor agregado en nuestras provincias. Espec�ficamente, en La Pampa se instalaron dos f�bricas de biocombustibles: una en Catril� y otra en mi ciudad: General Pico. A partir de la soja estas plantas generan el biodi�sel que reemplaza el 10 por ciento del di�sel que uno carga en la estaci�n de servicio.

��������� Ahora pretenden bajar la producci�n al 5 por ciento y debemos tener en cuenta que hay m�s de doscientos pampeanos trabajando en forma directa o indirecta en estas plantas. No se trata solamente de los que trabajan en la planta, sino tambi�n de quienes lo hacen en los talleres, brindando servicios o transporte. La verdad es que se trata de una industria ha generado mucho trabajo en mi provincia. Pero la disminuci�n del 10 al 5 por ciento en el corte, o incluso al 3 por ciento, la verdad es que va a mermar la capacidad productiva de la provincia y el trabajo de los pampeanos. Las plantas de Catril� y de General Pico no podr�n trabajar con el 50 por ciento de corte y ver�n afectado no s�lo su funcionamiento, sino tambi�n el trabajo de tantos pampeanos que dependen de esa industria.

��������� Entonces, no solo es un retroceso ambiental lo que nos plantea el kirchnerismo, ya que tambi�n peligran las pymes de todo el pa�s, y sobre todo las de mi provincia. Peligran los puestos de trabajo de cientos de piquenses y de pampeanos de Catril� que hoy trabajan en esas plantas.

��������� Se�or presidente: �qu� les van a decir a los cientos de pampeanos qu� dependen de esa producci�n? �Qu� les van a decir a los industriales pampeanos que quer�an seguir apostando por esta tecnolog�a? �Qu� les van a decir a los j�venes ambientalistas que creen en este cambio para mejorar nuestra pol�tica ambiental, a los que hoy ni siquiera dejaron venir? �Cu�ntas ONG vinieron cuando tratamos la ley de educaci�n ambiental? Sin embargo, hoy cerraron las cortinas porque evidentemente les da verg�enza el proyecto de ley que quieren votar.

 

 

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Comisi�n de Previsi�n y Seguridad Social, contador Marcelo Pablo Casaretto.

 

 

Sr. Maquieyra.- Por lo expuesto, como pampeano no puedo votar esta propuesta, porque afecta directamente los intereses de mi provincia. En cambio, pido que se voten los proyectos que hemos presentado para poder prorrogar y mejorar la ley de biocombustibles.

��������� Se�or presidente: nuestra agenda ambiental en el Congreso debe mantener la premisa de eliminar las emisiones de gases de efecto invernadero y no aumentarlas, como lo plantea este proyecto de ley.

��������� Para finalizar, durante la gesti�n de Juntos por el Cambio se presentaron diversos proyectos de ley y se sancionaron las leyes de generaci�n distribuida de energ�as renovables, de fomento de parques e�licos ‑como el que hay en mi provincia‑ y de parques solares, de educaci�n ambiental y la denominada �Ley Yolanda�.

��������� Queremos seguir trabajando en esa l�nea, impulsando una reglamentaci�n y una nueva ley de hidr�geno verde, eliminando los basurales a cielo abierto y fomentando la industria de los veh�culos el�ctricos.

��������� Nos preguntamos si esta reticencia a seguir fomentando los biocombustibles es producto de la impericia de la pol�tica ambiental kirchnerista o es simplemente un acuerdo con el lobby petrolero.

��������� Nuestro planeta no puede esperar m�s. Los pampeanos necesitan que este proyecto de ley se sancione con una pr�rroga y no como se est� planteando. Es urgente dar soluci�n a la crisis clim�tica; si no actuamos ahora, no habr� presente ni futuro viable.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el se�or diputado De Marchi, por Mendoza.

 

Sr. De Marchi.- Se�or presidente: a esta altura creo tener alg�n fundamento para sostener que no existe plan de pa�s. En consecuencia, tambi�n es evidente que no existe plan econ�mico. Con m�s raz�n afirmamos que no existe plan de desarrollo energ�tico. Siguiendo esta sucesi�n, tambi�n es evidente que la consecuencia es la inexistencia real de un plan de desarrollo para el sector de los biocombustibles. Esto no lo digo porque se me ocurra o como un planteo vac�o de la oposici�n.

��������� Hace apenas unos meses, el 30 de octubre de 2020, el Senado trataba la pr�rroga del actual r�gimen de biocombustibles, ley 26.093, que como todos saben, fue aprobada por unanimidad.

En aquel momento el senador Taiana sostuvo: �Esta pr�rroga tiene que ver con una estrategia de desarrollo del pa�s e introducci�n de mayor valor agregado a nuestra producci�n, y combina una estrategia exportadora con una estrategia de desarrollo regional, de generaci�n de empleo y de dar m�s herramientas a nuestra producci�n ante los vaivenes del mercado mundial...�, bla, bla, bla. Alguien miente: lo hace el oficialismo en esta sesi�n, intentando fundamentar lo contrario; o ment�a el mismo oficialismo hace algunos meses, intentando sostener la pr�rroga del actual r�gimen de biocombustibles.

��������� No s� qui�n miente. Lo que se sucede es que no hay plan y no sabemos a d�nde nos llevan. Todo es circunstancial, minuto a minuto, como se les ocurre en la ma�ana y luego ven c�mo termina el d�a. Evidentemente, lo que esconde este nuevo r�gimen de biocombustibles es quiz� intentar llegar �sin conseguirlo‑ al surtidor con un par de centavos m�s barato, porque supuestamente la soja estar�a en un veranito y el corte de biocombustibles har�a que el precio del surtidor se eleve un poco. Por eso hablo del d�a a d�a. Sin embargo, est�n haciendo un r�gimen por siete a�os; esto es lo grave.

��������� Este es un r�gimen que gener� 54 empresas de biocombustibles en la Argentina, decenas de miles de puestos de trabajo y m�s de 3.000 millones de d�lares de inversi�n. Detr�s de esta decisi�n no se esconde una situaci�n circunstancial pasajera o una resoluci�n que se modifica la semana que viene. Lo que se esconde detr�s de esta decisi�n es un cambio sustancial en el r�gimen.

��������� Se ha hablado aqu� permanentemente del impacto negativo que va a generar el corte, que en el caso de los combustibles ser� del 10 al 5 por ciento, y eventualmente al 3 por ciento. Tambi�n generar� un trato discriminatorio para el ma�z respecto de la ca�a de az�car y la violaci�n evidente del principio de progresividad en materia ambiental, de la ley general de ambiente y del Acuerdo de Par�s de 2016. Habr� que explicar eso tambi�n. Todo mal, todo al rev�s. Sinceramente, no se advierte cu�l es el beneficio real, salvo que haya un beneficio oculto que uno no conoce.

��������� A trav�s de este proyecto se crea una supersecretar�a de Energ�a, sin plan y sin equipo. Respeto personalmente al actual secretario de Energ�a, que fue diputado hasta hace muy poco tiempo atr�s, pero eso evidencia la falta de un equipo de energ�a, porque hace unos meses el gobierno tuvo que echar mano un diputado para poder articular la Secretar�a de Energ�a. El gobierno lleg� a conducir la Argentina desnudo en estos temas, y esta Supersecretar�a que est�n generando hoy va a tener la autoridad para definir, por ejemplo, los vol�menes de venta con su sola firma. Va a definir la pol�tica de precios y podr� establecer sanciones ‑en algunos casos expropiatorias‑ de m�s de 400 millones de pesos ‑una de las multas m�ximas‑ con la sola firma del secretario. Lo m�s grave es que esta ley proh�be la instalaci�n de nuevas empresas.

��������� Es evidente que esto va concluir en un mercado claramente limitado, absolutamente cautivo y con tendencia al monopolio, con una evidente destrucci�n de la mano de obra argentina. No entiendo c�mo muchos diputados para colmo hac�an hincapi� en el empleo, si lo primero que hace esta propuesta es reventar el empleo generado durante muchos a�os.

��������� Por lo tanto, solicito a los diputados del oficialismo que recapaciten y que se genere una pr�rroga ‑al menos de cuatro a�os, como vot� el Senado‑ para que mientras tanto se pueda articular un plan y convocar equipos, para ofrecernos a los argentinos un plan sustentable e integral hacia futuro en materia econ�mica, energ�tica y de biocombustibles. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el se�or diputado Rodr�guez, por Buenos Aires.

 

Sr. Rodr�guez (A.).- Se�or presidente: con amargura llegamos a tratar esta iniciativa porque, luego de un entusiasmo fundado el a�o pasado, vimos que un rumbo que parec�a encaminarse por el sendero correcto, se fue a la banquina y puso a la pol�tica de biocombustibles de la Rep�blica Argentina en una situaci�n sin destino. Cuando digo esto, lo hago compar�ndolo con el destino que tuvo durante quince a�os ‑que era acertado‑, que gener� las condiciones para desarrollar de la nada la industria del biocombustible en la Argentina, que era tan necesaria.

��������� Esto demuestra que el Poder Ejecutivo nacional de la Rep�blica Argentina no tiene una pol�tica de combustibles y que se rompi� una pol�tica de Estado prexistente, que adem�s le correspond�a por herencia pol�tica hist�rica y por consenso. Ese rumbo se empez� a perder despu�s de haber votado por unanimidad la pr�rroga al r�gimen de promoci�n de los combustibles el 30 de octubre del a�o pasado en el Senado de la Naci�n.

��������� Esa oportunidad se desech�. Fue hace muy pocos meses. Estamos hablando de un esfuerzo significativo, en plena pandemia, de haber puesto el tema en el tope de prioridades del Senado de la Naci�n. Es una ley que vino a impulsar y a desarrollar la inversi�n y la producci�n de biocombustibles con la creaci�n de 54 plantas y miles de puestos de trabajo en diez provincias, que adem�s ‑esto es lo importante‑ daba un horizonte de posibilidad por los contextos nacional e internacional, que hac�a prever un crecimiento a futuro si es que se tomaban las decisiones correctas.

��������� En esa jornada del 30 de octubre de 2020 en el Senado de la Naci�n, la pr�rroga del r�gimen de promoci�n de biocombustibles fue aprobada por 70 senadores y senadoras de todas las bancadas pol�ticas, incluyendo a los legisladores de las provincias petroleras representadas por senadores y senadoras de todas las fuerzas pol�ticas. Esa ley cont� el consenso activo de senadores por Tierra del Fuego, Santa Cruz, Chubut, R�o Negro, La Pampa, Neuqu�n, Mendoza, Jujuy, Salta y Formosa.

Esas son las diez provincias que en Argentina forman la OFEPHI, es decir, la Organizaci�n Federal de Estados Productores de Hidrocarburos, es decir, las denominadas, vulgarmente, provincias petroleras.

-    Ocupa la Presidencia el se�or vicepresidente 1� de la Honorable C�mara, doctor Omar De Marchi.

 

Sr. Rodr�guez.- Por lo tanto, hay aqu� un dato objetivo, un dato duro de car�cter institucional. Nadie debe decir aqu� ni instalar la falsedad y la mentira de que en la Argentina hay una especie de balcanizaci�n, guerra de regiones o enemistad irreconciliable entre provincias petroleras y las que no lo son. Eso no es cierto. No lo digo yo; lo dijo el Senado de la Naci�n, con el voto de las 23 provincias m�s el de la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires. As�, se incluy� dentro de las 23 provincias el consenso activo de las diez provincias petroleras que conforman la Organizaci�n Federal de Estados Productores de Hidrocarburos.

��������� Esa ley hab�a logrado consolidar en 2006 un marco de modernizaci�n m�s amplio con la ley del software del 2004; luego vino la ley de econom�a del conocimiento. Dichas normas ven�an a poner en la Argentina -despu�s de la dolorosa salida de la crisis de la convertibilidad- un horizonte de modernidad y de construcci�n de posibilidades para nuevas econom�as y para el desarrollo regional. A su vez, se buscaba la consolidaci�n de una econom�a mucho m�s productiva en lo federal.

��������� Sin embargo, el proyecto sancionado por el Senado se tir� a la basura. Recordemos que la propuesta consolidaba cuatro a�os m�s del desarrollo de este sistema, que podr�a haberse combinado, por ejemplo, con otro excelente proyecto que se present� el 19 de noviembre del a�o 2020. Se trat� de un proyecto presentado por nuestro interbloque federal, encabezado en su firma por el diputado nacional de C�rdoba Federal, Carlos Guti�rrez, que fue acompa�ado por compa�eros y compa�eras de nuestro espacio pol�tico. Se propon�a un salto de calidad a la pr�rroga que hab�a aprobado el Senado. Se trataba del empalme natural, porque creaba un verdadero sistema nacional de biocombustibles con diversidades regionales, pero integradas, con una visi�n estrat�gica y de futuro donde no s�lo participaba la Secretar�a de Energ�a. En ese proyecto ten�an y tienen un rol sustantivo el Ministerio de Agricultura, Ganader�a, Pesca y Alimentaci�n de la Naci�n, incentivando el desarrollo de cultivos que luego proveyeran estrat�gicamente al mercado y a la producci�n de biocombustibles. Tambi�n debemos mencionar al Ministerio de Ciencia y Tecnolog�a, trabajando codo a codo en el desarrollo de una pol�tica de biocombustibles y al propio Ministerio de Desarrollo Productivo, a trav�s de la Secretar�a de la Peque�a y Mediana Empresa.

��������� Se�or presidente: debemos enfocarnos en esta visi�n integral donde concurren distintas �reas de pol�tica p�blica. A su vez, la Argentina es un sistema que se mueve de manera equilibrada respetando la diversidad y con visi�n de futuro. Esta era la ley y el proyecto para empalmar, luego de ser estudiado y discutido, con la pr�rroga que hab�a aprobado el Senado. Es decir que estaban dadas las condiciones para tener una verdadera pol�tica -modelo a nivel mundial- de desarrollo de los biocombustibles. Y la propuesta presentada por Carlos Guti�rrez, de C�rdoba Federal, inclu�a nada menos que el aval de todas las provincias productoras de biocombustibles ligadas, valga la redundancia, a la liga bioenerg�tica. Aqu� se daba el aporte de a�os de trabajo de t�cnicos y de profesionales.

��������� Por supuesto que tambi�n ten�a la visi�n que corresponde a una norma de ese sentido; una visi�n progresiva, pasando el corte en el caso del biodiesel del 10 al 15 por ciento y en el caso del bioetanol comenzando por el 15 por ciento y pasando al 18. Esa alternativa tambi�n se tir� a la basura.

��������� Luego, apareci� lo que hoy implica resquebrajar el sistema de producci�n de biocombustibles en la Argentina. Digo esto porque, parad�jicamente, el proyecto de ley divide lo que no estaba dividido ni en la realidad ni en el Senado. Es este proyecto el que balcaniza regionalmente, el que rivaliza artificialmente, el que crea descompensaciones regionales en una Argentina que no las ten�a e incentiva la divisi�n y la competencia entre regiones. Esto lo digo con todo respeto, pero creo que es grave, porque todos sabemos que esta norma decide de manera contundente bajar los porcentajes de mezcla de combinaci�n de biocombustibles con los combustibles de origen f�sil. En el caso de lo que les toca a las provincias de C�rdoba, Santa Fe y Buenos Aires es realmente grave, porque tanto el bioetanol de ma�z como en el biodiesel, perjudican al complejo productivo m�s din�mico e importante de la Rep�blica Argentina.

��������� Como diputado nacional por la provincia de Buenos Aires tengo la obligaci�n de hacer una referencia respetuosa pero sincera. Concretamente, el gobierno de la provincia de Buenos Aires no ha dicho nada sobre c�mo afecta esta norma a esa regi�n. Y no lo ha dicho porque el gobernador y su equipo productivo han hecho la opci�n p�blica de convertirla en una provincia petrolera. No s� cu�l ser� la posici�n del Ministerio de Desarrollo Agrario o del ministro Costa que nada dice respecto de los biocombustibles. Repito: el gobernador Kicillof y su equipo productivo han decidido hacer de la provincia de Buenos Aires una provincia petrolera. �Por qu� motivo? El motivo que se expone es que en la provincia de Buenos Aires se refina, se procesa y se comercializa un importante volumen del petr�leo que se genera en la Argentina. Y yo estoy en la obligaci�n de plantear que deber�amos aceptar -con ese mismo criterio que tiene Kicillof- que el jefe de Gobierno de la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires, Horacio Rodr�guez Larreta, nos pida que la ciudad sea declarada un Estado triguero por su contribuci�n al procesamiento de harinas en f�bricas de pastas, en panader�as, en f�bricas de tortas. �A qui�n se le ocurre plantear que la provincia agroindustrial, industrial y de generaci�n de conocimiento por excelencia -Buenos Aires- se embarque en la aventura de ser una provincia petrolera descuidando la producci�n de biocombustibles?

��������� Con todo respeto, creo que estamos a tiempo de reflexionar sobre la posibilidad de no votar este proyecto. El objetivo es trabajar sin ning�n tipo de presi�n ni confrontaci�n sino con ideas y con propuestas, para devolverle a la Argentina una pol�tica de biocombustibles que no afecte el ambiente, que no atente contra la producci�n federal, que genere trabajo y que no nos ponga a nivel internacional a dar explicaciones de por qu� hemos retrocedido y no avanzado en materia ambiental. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Ram�n, por Mendoza.

 

Sr. Ram�n.- Se�or presidente: estamos discutiendo este proyecto -luego de muchas idas y vueltas y caprichos de los dos bloques mayoritarios, con todo el respeto que me merecen sus miembros- y los intereses que est�n en pugna y en juego. La verdad es que a los bloques que nos toca una participaci�n minoritaria en la C�mara estamos muy lejos de poder tener la agenda de aquello que se va a tratar en cada una de las sesiones y las comisiones. Me refiero a la planificaci�n de cu�les son los proyectos de ley que van a hacer posible el desarrollo y aquello que nosotros venimos a defender en esta C�mara, que es el derecho de los consumidores, de los trabajadores y de las pymes. En alguna medida, este proyecto tiene ciertas afectaciones que van a contramano de los intereses que a nosotros nos toca defender.

��������� Sobre este proyecto, quiero empezar la conversaci�n diciendo que es el producto del fuerte lobby de las 54 o 57 empresas que han logrado establecerse, hacer un negocio que es millonario, y tambi�n generar empleo a m�s de 30.000 trabajadores en la Argentina. Por eso, desde mi bloque y desde el interbloque estamos discutiendo este proyecto de ley.

��������� Hay algunos temas t�cnicos que hab�a anotado. En principio, creemos que este proyecto tiene una propuesta que es superadora de la simple pr�rroga para los pr�ximos a�os de la ley de biocombustibles. Creo que ninguno de los argumentos que he escuchado en esta C�mara por parte de los representantes de los distintos bloques tiene sost�n.

��������� Reiteradamente se hace alusi�n a la disminuci�n del corte, pero este proyecto de ley no lo disminuye de ninguna manera; incluso lo ampl�a en comparaci�n con la ley actualmente vigente. El 10 por ciento, que tanto se mencion� aqu� ‑que no est�‑, se alcanz� con la reglamentaci�n del Poder Ejecutivo, y en el futuro se podr� establecer, de la misma manera en que se lo hizo con la norma anterior. La verdad, no entiendo esa discusi�n.

��������� El segundo argumento es el relacionado con el problema ambiental. Creo que no se sostiene y, claramente, con esta iniciativa no estamos yendo ni para adelante ni para atr�s en ese aspecto. Tan solo se est� dictando una norma que sienta las bases de un negocio de empresas que han logrado hacer lobby para que la estemos tratando y se convierta en ley dentro de unos minutos. F�jense c�mo ser� de fuerte el acuerdo de los dos bloques mayoritarios que en la soledad de este recinto estamos intentando justificar algo que desde nuestro bloque y nuestro interbloque venimos pidiendo a gritos. Me refiero a una planificaci�n de la agenda y del tratamiento de aquellos proyectos que hacen a la tarea que tenemos como diputados, que es defender los intereses del pueblo de la Naci�n.

��������� Esta es una norma para 54 empresas. Se hace referencia a los beneficios del desarrollo, de los ingresos de d�lares para nuestra Naci�n, de la posibilidad de que disminuya la contaminaci�n ambiental y de la sustentabilidad en el tiempo, pero esta iniciativa no habla� absolutamente de nada de eso.

��������� Tambi�n escuch� algunos argumentos, que creo que son bastante c�nicos, presentados por algunos de los representantes de los interbloques que dicen que esta norma es excesiva, porque pareciera ser que el Estado argentino est� actuando sobre el libre mercado.

��������� La verdad, creo que debemos aclarar de qu� trata y c�mo funciona el libre mercado en el mundo y en nuestro pa�s. La ley de la oferta y la demanda no funciona sola, sino que todo pa�s que pretenda equilibrar el fiel de la balanza debe intervenir para nivelar las desigualdades que existen, m�xime en nuestro pa�s, m�xime en los lugares donde est�n asentados territorialmente los intereses de estas empresas que han hecho lobby para tratar esta norma. El libre mercado necesita de la intervenci�n del Estado para controlar la lealtad comercial entre las empresas, la competencia y, por qu� no, algo que marcamos en cada proyecto que se discute: la protecci�n de los derechos de los usuarios y los consumidores.

��������� La pregunta es la siguiente: �este sistema de los biocombustibles existir�a por el libre mercado si no existiera un r�gimen jur�dico que le diera fundamento y legalidad para que pudiera funcionar? Imposible. Si as� fuera, dejar�amos que el mercado de la oferta y la demanda lo regulara, y tendr�an su actividad garantizada sin intervenci�n maliciosa alguna. He escuchado a algunos colegas hablar hasta de corrupci�n en la reglamentaci�n y establecimiento del funcionamiento de este negocio.

��������� Dejemos que las distribuidoras compren los biocombustibles, si as� lo desean, y fijen el monto que quieran incluir en las naftas que ellas mismas est�n distribuyendo, o que los consumidores elijan qu� combustible quieren utilizar.

��������� No debemos ser c�nicos cuando hablamos de c�mo funciona el mercado en la Argentina. Lo dec�a de una manera casi chabacana, pero el Estado, seg�n qui�n est� gobernando, es quien dirige el chorro de los beneficios para que se produzcan los negocios como este de los biocombustibles.

��������� Esa es la realidad, no la disfracemos, porque los intereses que ‑al menos desde mi bloque y mi interbloque‑ venimos a representar en este Congreso no son los de las empresas de biocombustibles. Les puedo asegurar que muy probablemente no estar�a en la agenda que tenemos para nuestras sesiones y nuestras comisiones, porque tenemos otros proyectos que est�n muy lejos de ser tratados.

��������� No estamos tratando iniciativas como el proyecto de ley de humedales. �Esa es una norma para la protecci�n del medioambiente! Si no, estamos jugando. Este proyecto de ley no protege el medioambiente, sino el negocio de 54 empresas.

��������� Hablamos del proyecto de ley del etiquetado frontal de los alimentos, del etiquetado frontal de los huevos. �Qu� significa eso? Cuidado de la salud de los usuarios y consumidores; cuidado del derecho a estar informados correctamente para poder elegir un producto o la prestaci�n de un servicio.

��������� �Tratamos el c�digo de la protecci�n de los usuarios y los consumidores de la Argentina? Porque los consumidores deben tener herramientas para que se equilibre ese fiel de la balanza.

��������� �Miren si hay leyes que podr�an estar en la agenda! Por eso dije al comienzo de mi exposici�n que esta iniciativa est� hoy en la agenda por su vencimiento, no porque hayamos propuesto que se trate.

��������� �C�mo se dio esta discusi�n? �Cu�l es el motivo? Tenemos que hablar de la producci�n, de la matriz energ�tica de nuestra Argentina.

��������� Hay una migraci�n muy fuerte en todo el mundo, y tambi�n en nuestro pa�s. Este es un tema serio, y hay que hablar de pol�tica. Por eso quiero abstraerme de la idea t�cnica del asunto. Debemos planificar la matriz energ�tica de la Argentina para los pr�ximos veinte a�os, porque en los pr�ximos diez a�os habr� una migraci�n de los combustibles f�siles hacia la electricidad.

��������� El negocio de la electricidad es tremendo. Vamos a tener que instrumentar leyes que favorezcan la utilizaci�n y el transporte el�ctrico. Los hogares de la Argentina ya no utilizar�n el gas hacia el futuro.

��������� Hace muy poco tratamos la ley de las zonas fr�as porque era reparadora de los derechos que no se hab�an incorporado hacia atr�s, porque la Argentina planificada all� por los a�os 90 en relaci�n con la energ�a lo era para el grupo de empresas que se constituyeron para proveer servicios p�blicos de un grupo muy chiquito.

��������� Hoy tenemos la oportunidad de tener un plan en el Congreso de la Naci�n, y no lo tenemos. Por eso quiero hablar del futuro. Esta norma no es del futuro, sino del pasado. Por m�s que se inspiren aquellos colegas que intentan justificar lo maravilloso que es que sancionamos esta ley para el desarrollo, son beneficios indirectos para los ciudadanos comunes. Son muchas las leyes que necesitamos sancionar para beneficio de la econom�a de las familias.

��������� Repito: �cu�l es la matriz energ�tica que queremos para la Argentina en los pr�ximos veinte a�os? Esos son los proyectos de ley que debemos discutir.

��������� Hace muy poco, un colega de Juntos por el Cambio de la provincia de Formosa dec�a que ya hablamos de las zonas fr�as; reparamos. Hablemos hacia el futuro, tenemos que hablar de la zona caliente de nuestra Argentina que no tiene acceso a la red de gas. El costo de llevar la red de gas hacia el Norte de nuestra Argentina es car�simo, mientras la posibilidad de llevar, transportar y distribuir� energ�a para la calefacci�n y para el consumo de todas las necesidades de los hogares y del transporte es posible. Entonces, esas son las normas que tienen que estar en la agenda.

��������� Desde nuestro interbloque, no nos gusta hablar en negativo. Tenemos muchas cosas para cuestionar, pero lo que quiero decir es que en este recinto debemos hablar de pol�tica. Eso significa planificar, porque necesitamos una sociedad que termine de entender de una vez por todas que el derrame de la riqueza no ha generado igualdad. Las grandes desigualdades en nuestro pa�s, en los pa�ses de Am�rica del Sur y hasta en los pa�ses desarrollados es culpa del uno por ciento que se apoder� de las riquezas y de cada una de las actividades econ�micas.

��������� Lo que va a hacer posible el bienestar de la familia, ya que cada vez vivimos m�s tiempo en el planeta, en nuestro continente y en nuestra Argentina, es que se logre mejorar la calidad de vida y la econom�a de la dignidad, de abajo hacia arriba de la presencia del Estado.

��������� �Para qu�? Para que todos aquellos que bajaron por debajo de la l�nea de pobreza -son muchos, estamos hablando del 42 por ciento ac� en la Argentina- vuelvan a recuperar esa condici�n que ten�an de pertenecer a la clase media de la Argentina. Me refiero a la clase media que nos hizo grande, que proyect� la Argentina. Me refiero a aquellos que produjeron, que son industriales, que son comerciantes.

��������� Por eso, la agenda de nuestro Congreso no puede estar vac�a ante los negocios de las empresas que siguen haciendo lobby. Este proyecto de ley, por ejemplo, no piensa en la econom�a circular. Habla de los biocombustibles de la primera generaci�n. Con un 42 por ciento de pobreza, no puede ser que la soja, el ma�z y el az�car se utilicen y est� cerradita la ley para el negocio de ellos, en el centro de la Argentina.

��������� Mientras, la segunda generaci�n podr�a utilizar, si se abriera -y este proyecto de ley no lo hace-, el cebo de los animales, los desechos, aquellos que vienen de la ca�a o de la industria de la madera. Fuerte, �no? �Fuerte! Est�n cerrando su negocito, cuando ac� lo que necesitamos son leyes para el pueblo.

��������� Para finalizar, se�or presidente, no podemos mirar hacia atr�s. El futuro de la energ�a va por la electricidad. Los tiempos que corren nos obligan a sentarnos en este recinto a dar qu�rum y apoyar la sanci�n de este proyecto de ley. Estamos hablando de inversiones millonarias y de m�s de 30.000 puestos de trabajo que se generaron gracias a la acci�n del Estado, no del libre mercado.

��������� Por eso, creemos que la pr�rroga de esta ley, a pesar de la manera en que est� tomada de los pelos, tiene que ser apoyada por estas condiciones. Sin embargo, sepamos que en este recinto de la C�mara de Diputados y en cada una de las comisiones tenemos que comenzar a discutir aquellos proyectos que planifiquen la matriz energ�tica para los pr�ximos veinte a�os. Aquellos que miramos hacia fines del Siglo XXI queremos mirar ese tipo de proyectos de ley y no estos, fruto del lobby de las empresas.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Dentro de los tiempos de bloques, tiene la palabra la se�ora diputada Schlotthauer, por Buenos Aires.

 

Sra. Schlotthauer.- Se�or presidente, se�ores diputados, diputadas y diputades: desde el bloque de Izquierda Socialista y el Frente de Izquierda, en primer lugar y como consideraci�n general, queremos aclarar que nos parece lamentable que en un pa�s -nuestro pa�s- azotado por el fr�o, el hambre, la enfermedad, la desocupaci�n y la inflaci�n, el presidente del bloque del oficialismo nos convoque a una sesi�n especial para discutir, de entre cinco proyectos de ley, dos -aquellos por los que m�s est�n interesados- que vienen a garantizar la continuidad de la fortuna que est�n amasando los agrodepredadores, los petropiratas y los bancos.

��������� Eso es lo que est�n interesados en discutir. Otra vez vamos a discutir que se aumenten los tributos a ciertos sectores de la poblaci�n, como los monotributistas, quienes est�n azotados por la falta de trabajo en la cuarentena.

��������� Resultar�a much�simo pero much�simo m�s alentador para quienes creemos en la pol�tica, y m�s para quienes los votaron para que est�n aqu� y para que gobiernen, que discutamos medidas que resuelvan, por ejemplo, que le quitemos los impuestos, no a los grandes, sino a los trabajadores que todav�a pagan el impuesto a las ganancias; a los jubilados, que est�n ganando 23.000 pesos y que las primeras leyes recortaron los aumentos que se les hab�a otorgado; a los que les quitaron el IFE cuando recortaron el presupuesto para el COVID-19, y a todos los que hoy est�n sin trabajo.

��������� �Sobre eso estar�amos necesitando hablar en este Congreso y legislar. Sin embargo, dado que quieren discutir beneficios para el biocombustible, vamos a dejar asentada nuestra posici�n. Claro que vamos a rechazar cualquier nuevo beneficio �y m�s a�n a este proyecto de ley- que se le otorgue a un grupo que fue beneficiado desde el Estado, no para que desarrolle, sino para que gane desde su propio inicio.

��������� Me refiero a un grupo de agrodepredadores que no hizo m�s que beneficiarse con el no pago de impuestos durante los primeros quince a�os de esta ley y con el gobierno macrista, que baj� los impuestos a la exportaci�n y libert� los d�lares. Ahora, este grupo vuelve a beneficiarse con la pr�rroga de todos los beneficios por diez a�os m�s. No estamos de acuerdo en seguir beneficiando a este grupo que la viene amasando en pala.

��������� Asimismo, tambi�n queremos aprovechar la oportunidad para ir contra ese discurso mentiroso de que con los biocombustibles estamos mejorando el medioambiente. Hubiera sido interesante, tal como dijera una de las diputadas aqu�, que tambi�n opinara la Comisi�n de Recursos Naturales y Conservaci�n del Ambiente Humano. No s� si hubiera sido auspiciante pero, por lo menos, interesante.

��������� De los datos que se recaban en este pa�s, quiero traer algunos que surgen del propio INTA para compartir con aquellos de la industria azucarera que est�n llorando. Respecto del bioetanol, por cada litro que se produce, reproduce, a su vez, entre 12 y 13 litros de vinaza, un veneno que est� estropeando las napas de la tierra tucumana. Esto est� denunciado y fue informado por el propio INTA.

��������� Es esta industria la que est� haciendo de nuestro suelo hect�reas y hect�reas des�rticas. La propia Secretar�a de Ambiente est� denunciando desde 2012 que se est�n desertificando nuestros bosques. Est�n en peligro la Selva Misionera, la Selva Tucumano-Boliviana y el Parque Chaque�o. Todo lo que es desierto termina convirti�ndose en problemas para la poblaci�n.

��������� Adem�s, estamos con problemas con el agua. Todos los estudios indican que la producci�n del biodiesel lleva, por cada litro, entre uno y 2.000 litros de agua. Eso es lo que nos est�n saqueando, depende de la zona y tambi�n del cereal del cual estemos hablando para su producci�n.

��������� Entonces, no queremos m�s que nos digan que con esta industria estamos mejorando el ambiente. Puede ser que bajen las emisiones en el primer mundo, pero ac�, �ac� nos est�n dejando la cagada con toda esta industria del biodiesel! Esta ser� la realidad si no se regula y si no se frena el saqueo.

��������� Tambi�n queremos ir contra otra mentira, una tan grande como cipaya. �Es mentira que este Congreso o cualquier gobierno va a poder tener un plan de desarrollo integral en este pa�s si seguimos librando al azar y a los beneficios de los exportadores toda la econom�a! �No hay manera de tener un plan de desarrollo industrial y sacar el pa�s a flote si la Argentina no nacionaliza el comercio exterior, si no se lo sacamos a los pulpos que se vienen beneficiando! Parece no ser del inter�s de nadie, m�s que del Frente de Izquierda y del �Gringo� Giordano, que ha presentado el proyecto.

��������� �Vamos a rechazar este proyecto de ley y vamos a seguir reclamando contra estas mentiras. Como dato concreto, el grupo del Movimiento Peronista -los economistas del Siglo XXI- han hecho un estudio que arroja que desde los 90 hasta ahora, las exportaciones han crecido un 600 por ciento pero el aparato productivo de este pa�s ha perdido el 30 por ciento de los puestos de trabajo. As� que basta con el chantaje de que si no nos seguimos agachando y llen�ndoles los bolsillos vamos a perder trabajo. El trabajo lo tenemos perdido y lo que necesitamos es otro plan econ�mico.

��������� Por eso, por lo que queremos seguir batallando desde el Frente de Izquierda es por la nacionalizaci�n del comercio exterior y por la nacionalizaci�n de todo lo que tenga que ver con la matriz energ�tica. Honestamente, creemos que si siguen gobernando los partidos que representan a este gran empresariado, no tendremos salida a la hora de poder transformar la intoxicaci�n o el envenenamiento que est�n provocando todos estos grupos depredadores en pos de generar grandes fortunas. Nada m�s.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada Sapag, por Neuqu�n.

 

Sra. Sapag.- Se�or presidente: voy a activar el video, pero est� nevando y puede ser que Internet funcione de manera intermitente; est� nevando much�simo.

��������� El vencimiento del r�gimen de los biocombustibles establecido en el a�o 2006 por la ley 26.093, aquel que comenz� a tener plena vigencia con la incorporaci�n de los cortes de biodiesel y bioetanol en los combustibles l�quidos en el a�o 2010, ha provocado cierto grado de conflictividad entre sectores ante la posibilidad de prorrogar el vigente o establecer un nuevo r�gimen.

��������� El desarrollo y la presencia de los biocombustibles es una realidad en el mercado de los combustibles. Cabe se�alar que en los momentos en que nuestra producci�n de petr�leo deca�a, por la inmadurez de nuestras cuencas productoras, el aporte del biodiesel y del bioetanol signific� un ahorro de divisas para el pa�s. Pero la realidad es din�mica, y aquello que parec�a caer inexorablemente no cay�. La aparici�n en el horizonte productivo de la formaci�n de Vaca Muerta, con su petr�leo y su gas no convencionales, m�s la aplicaci�n de t�cnicas de recuperaci�n secundaria y terciaria en viejos campos convencionales, est� dando sus frutos, ya que est� incrementando la producci�n y potenciando el horizonte de reservas hidrocarbur�feras en la Argentina.

��������� Con esto no pretendemos de ninguna manera negar la necesidad de disminuir la cantidad de di�xido de carbono que tiene nuestra casa com�n, que es el planeta Tierra. Pero el cambio a fuentes de energ�a renovables y limpias ser� gradual y, seg�n las previsiones que realizan expertos, los combustibles f�siles necesariamente nos acompa�ar�n algunas d�cadas por delante. Es m�s, combustibles como el gas tendr�n un papel destacado en esta transici�n de nuevas fuentes de energ�a, constituyendo un aporte para la descarbonizaci�n.

��������� En el marco de esta cuesti�n ambiental, lamento ciertas expresiones que parecen presentar a nuestro pa�s como un actor importante en la emisi�n de gases de efecto invernadero, cuando en realidad la Argentina solo representa el 0,5 por ciento de las emisiones totales de carbono. De acuerdo con trabajos de especialistas del INTA, cuyas conclusiones fueron replicadas en diarios extranjeros, como El pa�s de Espa�a, el gas metano que libera nuestro ganado bovino, m�s los residuos, la deforestaci�n, la producci�n de compuestos, el procesamiento de carne, son las actividades que m�s inciden, ya que constituyen un 35 por ciento de las emisiones totales del pa�s, superando las del parque automotor, que quedan en segundo lugar.

 �������� En ese sentido, los tan demonizados combustibles f�siles a�n tienen un papel muy importante que desempe�ar.  El gas es considerado internacionalmente un energ�tico de transici�n hacia las energ�as renovables y limpias. T�ngase en cuenta el potencial que en este camino puede desarrollar el gas no convencional de Vaca Muerta y, por caso, el gran yacimiento Loma La Lata, que nos est� proveyendo de gas natural desde hace m�s de cuarenta a�os. Ten�a reservas de 10 trillones de pies c�bicos, mientras Vaca Muerta posee reservas de 300 trillones. Eso nos brinda una idea no solo del aprovechamiento energ�tico que podemos obtener de ella, sino tambi�n de su aporte a la reducci�n de las emisiones.

��������� Se�or presidente: con esto no pretendo negar el papel que en nuestra canasta energ�tica tienen los biocombustibles. Necesariamente, deben tener un lugar en la mesa de discusi�n que nos debemos en nuestro pa�s sobre la disponibilidad, utilizaci�n y conveniencia de cada combustible. Considero que  en nuestro desarrollo energ�tico ha faltado una planificaci�n que deber�a ser descentralizada. El caso de los combustibles l�quidos no escapa a este criterio. 

��������� Nos debemos un encuentro de todos los sectores hacia el futuro, empezando por el sector p�blico, los productores y refinadores de combustibles f�siles, los productores de biocombustibles y hasta los fabricantes y comercializadores de veh�culos que necesitan planificar qu� inversiones deber�an realizar para adaptarse t�cnicamente a los combustibles. La realidad es que no tenemos tiempo para ello.  Tenemos un r�gimen vencido que se ha prorrogado para darnos tiempo a establecer otro que evite ese vac�o legal y que nos permita un an�lisis m�s profundo del tema. 

��������� En funci�n de ello, adelanto mi voto favorable al proyecto de la mayor�a, como lo hice en la comisi�n, as� como al tratamiento en particular de la modificaci�n de los art�culos 5�, 8� y 16, la eliminaci�n del art�culo 17 y la incorporaci�n de un nuevo art�culo. Por supuesto que esto quedar� a consideraci�n del diputado informante. De ser as�, lo fundamentar� en su momento. Si no, muchas gracias por todo.

��������� Entiendo que el asunto de la energ�a en nuestro pa�s debe ir por la v�a del di�logo y del acercamiento de todos los sectores. No tenemos que creer que somos unos contra otros. Terminemos con esta historia de las grietas y no llevemos ninguna al campo de la producci�n energ�tica. 

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Para finalizar con la lista de oradores de los bloques, tiene la palabra la diputada �vila, por Tucum�n.

 

Sra. �vila.- Se�or presidente: quiero recordar que, cuando en 2006 se sancion� la ley 26.093 de biocombustibles, el pa�s atravesaba un contexto local e internacional sumamente dificultoso. En ese momento se asist�a a una ca�da en la producci�n de petr�leo y de gas que nos obligaba a recurrir a las importaciones. Por otro lado, crec�an los precios internacionales de los hidrocarburos. Por entonces, el objetivo de la ley era reducir la dependencia que ten�amos de los combustibles f�siles, restringiendo la importaci�n de combustibles l�quidos y, por supuesto, abaratando la nafta y el gasoil en el mercado local. 

��������� Pues bien, el impacto de esa norma ha sido considerable porque no solamente ha logrado dicho objetivo sino que tambi�n ha generado un enorme crecimiento de las econom�as regionales, como ha sucedido en la provincia que represento, Tucum�n. Gracias a esta ley, as� como a la elaboraci�n de la ca�a de az�car, hubo una enorme incidencia respecto de la generaci�n de nuevos puestos de trabajo y de mayores ingresos para la provincia de Tucum�n.  Tambi�n hay que recordar que el antecedente de esta ley fue el Plan Nacional de Alconafta, que se lanz� en nuestra provincia, pero que lamentablemente dej� de funcionar en 1987. El corriente a�o se cumple el bicentenario de la creaci�n de la industria azucarera. 

��������� Es decir que lo que se ha logrado con la ley de biocombustibles es diversificar la matriz energ�tica de nuestro pa�s. Obviamente, ha provocado un gran avance: ha ayudado a los econom�as regionales y tambi�n, como he dicho, al abastecimiento de combustible en nuestra provincia.

��������� Hay una tendencia  mundial a imponer restricciones a los combustibles f�siles en favor de los biocombustibles. Solamente voy a hacer referencia de lo que pasa en nuestra regi�n. Brasil est� llegando a un corte del 27 por ciento del bioetanol en nafta, mientras que Paraguay est� llegando a un 25 por ciento. La Argentina est� dentro de este lote de pa�ses, con un corte superior a un d�gito. Estamos en el 12 por ciento, pero es necesario llegar a m�s. 

��������� Ahora bien, desde que se sancion� la ley en el Senado hasta el d�a de hoy el sector ha sufrido una gran incertidumbre. No se sab�a qu� pasaba. La pregunta era por qu�, si hab�a salido por unanimidad en el Senado, no lo trat�bamos en la C�mara de Diputados. Despu�s supimos a qu� se refer�a el presidente de la Comisi�n de Energ�a cuando dijo con total sinceridad que apostaba a la ley de biocombustibles pero siempre y cuando no afectara a la industria del petr�leo. Luego nos dimos cuenta de que se hab�a presentado un nuevo marco normativo, con nuevas regulaciones, y en la comisi�n se hab�an hecho algunos cambios. Debo confesar que esto ha beneficiado a la provincia que represento.

��������� Como dec�a la diputada preopinante, no se trata de una puja entre las provincias petroleras y las provincias pampeanas, o entre estos dos grupos� y el noroeste argentino. Hay que decir que hubo un lobby y una embestida de las petroleras muy fuerte en contra de la ley de biocombustibles. Pienso que hoy vamos a saldar en parte esta deuda con el sector. 

��������� Evidentemente, los biocombustibles no tuvieron el mismo comportamiento en t�rminos de su incidencia en el balance de divisas o en el equilibrio fiscal. Por eso es necesario diferenciarlos: no es lo mismo el aceite de soja, cuyo horizonte exportador es muy amplio, que el bioetanol, que se produce en el noroeste argentino sobre la base de la ca�a de az�car. 

��������� Esta ley es muy significativa para la regi�n del noroeste argentino, que est� compuesto por veinte ingenios azucareros: quince en Tucum�n, dos en Salta y tres en Jujuy. Hay diecis�is destiler�as de alcohol, doce deshidratadoras de alcohol, 8.000 ca�eros azucareros y 400.000 hect�reas plantadas con ca�a. Adem�s, hay 60.000 trabajadores que est�n afectados de manera directa y 156.000 de manera indirecta.

Tucum�n tambi�n es energ�a, se�or presidente. El Noroeste Argentino tambi�n es energ�a en nuestro pa�s, y esto hay que destacarlo.

��������� Considero que este sector es el principal empleador y generador de trabajo del sector privado; adem�s, tambi�n ayuda a la diversificaci�n. Esto es sumamente interesante y es notable resaltarlo.

��������� Asimismo, quiero destacar como algo positivo que en la comisi�n se han aceptado las propuestas que se realizaron desde el Centro Azucarero Argentino. Por ejemplo, lo relativo a la producci�n nacional para el r�gimen, que no producen bios quienes mezclan y distribuyen a las petroleras o el corte bioetanol al 12 por ciento. Esto quiere decir que cuando cualquier argentino vaya a un surtidor a cargar nafta, un porcentaje ser� con nafta y el 12 por ciento deber� ser obligatoriamente de bioetanol. De ese 12 por ciento, el 6 por ciento, es decir, el 50 por ciento, se vincula con el tema del alcohol.

��������� Entonces, cuando se carga este combustible en cualquier lugar de la Argentina eso genera ingresos y puestos de trabajo tambi�n en nuestra provincia. Considero que esa situaci�n es muy valiosa y positiva.

��������� Lamentablemente, lo negativo ‑porque no se tuvo en cuenta‑ es que la norma que estamos tratando no contempla la participaci�n del productor ca�ero, y me estoy refiriendo a 80.000 ca�eros. En las cuotas de alcohol que se entregan a las empresas petroleras deber�a haberse incluido tambi�n la ley de maquila agropecuaria. Esta cuesti�n no aparece, as� como tampoco hay un esquema creciente en la participaci�n de los biocombustibles en las mezclas, y ello no es una cuesti�n menor.

��������� Para ir cerrando mi exposici�n, quiero se�alar que la continuidad de esta ley es de absoluta necesidad para nuestros sufridos y pobres pueblos norte�os. En suma, creemos y vamos a seguir apostando a la generaci�n de riqueza genuina, al arraigo de muchos ciudadanos en las zonas de trabajo, a la generaci�n de trabajos de calidad y a potenciar las econom�as regionales.

��������� Considero que hoy se sancionar� esta iniciativa. Como representante de los tucumanos, voy a adelantar mi voto positivo para esta norma, porque siempre voy a estar a favor de la industria, de los trabajadores y del pueblo de Tucum�n. Apoyo esta iniciativa y espero que tenga iguales o mejores beneficios que la ley anterior, que es la ley 26.093.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- A partir de este momento, iniciamos el bloque de tiempos individuales de los distintos diputados.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Rauschenberger, por La Pampa.

 

Sr. Rauschenberger.- Se�or presidente: estamos tratando un nuevo marco regulatorio del r�gimen de biocombustibles, que tiene como antecedente la ley 26.093, que fue promulgada el 12 de mayo de 2006 y tiene 15 a�os de vigencia; por lo tanto, venci� el 12 de mayo de 2021 y el Poder Ejecutivo la prorrog� por sesenta d�as.

��������� Se trata de una ley en la cual tenemos que analizar el camino recorrido para proyectar lo que viene en funci�n de ello. El camino recorrido hubiera sido imposible sin la ley 26.093.

��������� A partir de una decisi�n estrat�gica del entonces presidente N�stor Kirchner, adem�s de ser una ley ambiental signific� una ley de desarrollo de las econom�as regionales, de federalismo. Ten�a como consigna la misma de hoy, que es la industrializaci�n de la ruralidad, lo cual significa darle valor agregado y generar empleo a nivel local.

��������� Esta ley gener� m�s de 60.000 puestos de trabajo. Me refiero a cuarenta y seis empresas en once provincias de la Argentina que nacieron de la mano de N�stor Kirchner, como tambi�n pas� con las pymes pampeanas, que son hijas de la ley de N�stor. Nuestras pymes nacieron de la ley de N�stor. En ese nuevo marco regulatorio entiendo que tenemos que potenciar, mantener y consolidar lo que ya se consigui�.

��������� Uno de los puntos que se cuestionan de este proyecto es que es intervencionista. A aquellos que hoy se plantan como defensores de la ley 26.093 les quiero decir que ese r�gimen plantea un mercado altamente regulado, y es necesario que as� sea porque estamos ante un mercado imperfecto. Nuestras pymes necesitan que el mercado se regule, porque de esa manera pueden funcionar. El Estado tiene que fijar el precio y el cupo, porque no pueden competir con las grandes aceiteras que son las que tienen la materia prima y est�n integradas.

��������� Esa materia prima se la venden a las pymes con primas que le generan una alta rentabilidad y en este proyecto estamos limitando esas primas. Estamos estableciendo que el precio sea solamente al valor del insumo, precio de exportaci�n menos los respectivos gastos, no con las primas que se estaban cobrando hasta este momento. Creo que este es un claro mensaje en favor de las pymes.

��������� En el caso de La Pampa tenemos dos empresas de biodi�sel: una de ellas se encuentra en General Pico y la otra est� en Catril�, que tienen una generaci�n de 200 puestos de trabajo, de modo directo e indirecto. Esto fue una conjunci�n del esfuerzo nacional y provincial. En ese sentido, la provincia otorg� cr�dito de promoci�n industrial y beneficios impositivos para que esas plantas estuvieran funcionando. Se trata de plantas que tambi�n nacieron de la mano de N�stor.

��������� Si bien la infraestructura y la capacidad productiva de nuestras empresas son deficientes: son eficientes productivamente, pero no lo son desde el punto vista econ�mico por un problema que se genera por la distancia a puerto. Es bien sabido que estamos 500 km de distancia, entonces, desde el puerto de Rosario traer el aceite a las plantas productoras genera un costo adicional y nos saca de la competitividad.

��������� Por esta raz�n, uno los puntos centrales que tiene este proyecto es justamente la determinaci�n del precio, que debe asegurar la rentabilidad y ella significa cuidar el trabajo, la producci�n y a las econom�as regionales.

��������� Respecto de ese precio, en la provincia La Pampa entendemos que, en el caso del biodi�sel, cumpliendo el objetivo de promover las econom�as regionales, el hecho de reconocer el mayor costo log�stico de las plantas regionales, producto de su localizaci�n desfavorable respecto al puerto de exportaci�n de la materia prima, es enaltecer el esp�ritu federal que persigue esta iniciativa. Desde la provincia de La Pampa hemos logrado que se contemple esta situaci�n en el art�culo 14. Esto significa que los productores perciben un precio razonable que les permite cubrir sus costos operativos y tener una rentabilidad adecuada.

��������� Por ello, acompa�ar� este proyecto con mi voto favorable en el tratamiento en general, y plantear� una disidencia en el art�culo 8� en relaci�n con el corte, porque entiendo que el mismo no debiera ser inferior al 5 por ciento, bajo ninguna circunstancia.

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Comisi�n de Asuntos Constitucionales, doctor Hern�n P�rez Araujo.

 

Sr. Rauschenberger.- Quiero destinar un p�rrafo aparte a aquellos que hoy se dicen defensores de la ley. Me refiero al bloque de Juntos por el Cambio. Quiero recordarles que, durante el gobierno anterior, quien estaba a cargo de la relaci�n con las empresas de biocombustibles era el ingeniero Juan Jos� Aranguren. El ministro de Energ�a les dec�a a las pymes pampeanas: �Ustedes no deber�an haber existido nunca�. Esos eran los calificativos con los cuales se trataba a las pymes en el gobierno anterior. Esa era la caracterizaci�n que grafica el pensamiento que ten�a Juntos por el Cambio cuando era gobierno, pero ahora resulta que son oposici�n y aparecen como los grandes defensores de la ley.

��������� Tambi�n observo que cuando este bloque opositor fue gobierno le dijo a las empresas que no deber�an haber existido mientras que ahora descubren que la ley 26.093 no es tan mala como hab�an dicho cuando se debati� en 2006 sino que es una ley buena y quieren que se prorrogue. Entonces, hacen una cosa cuando son gobierno y otra cuando son oposici�n. Esa es la evidente y recurrente contradicci�n en la que incurren desde ese sector pol�tico.

��������� Considero que este marco regulatorio no debiera pensar solo en un sector productivo sino en un proyecto de pa�s, porque si la Argentina no se desarrolla y crece, ning�n sector productivo puede hacerlo. Entendemos que en este proyecto no solo estamos teniendo en cuenta el desarrollo productivo, sino tambi�n el desarrollo ambiental y la mejora de la calidad de vida de nuestra gente.

��������� Para cerrar, quiero expresar que en este proyecto hemos podido expresar nuestra posici�n desde las distintas zonas de la Argentina, dado que hemos logrado acordar y hemos entendido las necesidades del sector productivo, privado, p�blico, de las econom�as regionales, as� como las necesidades de nuestra Naci�n.

��������� Tal como manifest�, vamos a acompa�ar en el tratamiento en general el presente proyecto. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Tiene la palabra la se�ora diputada Garc�a, por Santa Fe.

 

Sra. Garc�a.- Se�or presidente: claramente la ley vigente debe ser actualizada, para ser mejorada y avanzar, pero no para retroceder.

 

��������� Necesitamos una ley que mire hacia el futuro, que otorgue previsibilidad jur�dica y econ�mica para producir, que promueva la investigaci�n y el uso de las tecnolog�as para la elaboraci�n de biocombustibles de avanzada, que impulse el desarrollo regional y el empleo y que se enmarque en el principio de progresividad ambiental.

��������� Este proyecto de ley, lamentablemente, no contempla estas condiciones. Es un proyecto retr�grado y arbitrario que no fue trabajado ni consensuado con el sector productor de biocombustibles.

��������� Asimismo, esta iniciativa pone fin a una pol�tica de Estado, que con vaivenes durante estos quince a�os ha desarrollado una industria verde, que permiti� iniciar un camino de transici�n hacia las energ�as limpias, hacia las energ�as renovables y que aparte tiene un plus: es fuente generadora de empleo en localidades del interior y dinamizadora de las econom�as regionales.

��������� �Por qu� decimos que es un retroceso? Porque objetivamente lo es, ya que reduce los cortes de biocombustibles con combustibles f�siles, solo mantiene el 6 por ciento del bioetanol a base de ca�a de az�car, pero lo reduce al 3 por ciento en el bioetanol a base de ma�z. En el caso del biodiesel, reduce el corte del 10 por ciento al 5 por ciento, con posibilidad de reducirlo a un 3 por ciento, si la autoridad de aplicaci�n as� lo quisiere.

��������� Estas modificaciones condenan al cierre de peque�as empresas del sector que al verse limitadas en su capacidad de producci�n al 50 por ciento no encuentran punto de equilibrio, es decir, no encuentran rentabilidad.

��������� La mayor�a de estas pymes se encuentran localizadas en el interior del interior de nuestro pa�s, en nueve provincias del centro norte de la Argentina y una de ellas es mi provincia, Santa Fe, en donde se encuentran localizadas dieciocho plantas productoras de biocombustibles de las cincuenta y cuatro que hay en el pa�s.

��������� �Santa Fe produce el 80 por ciento del biodiesel de la Argentina y este proyecto pone un cepo al crecimiento de sector de biodiesel porque no permite ampliar las plantas ya instaladas, ni tampoco crear nuevas. Es decir, desincentiva la productividad en calidad y en volumen concentrando el mercado en pocas manos.

��������� Hay una ecuaci�n que es clara: reducci�n de los cortes, imposibilidad de crecer, de ampliarse, de instalar nuevas plantas productoras de biocombustibles; igual a expulsi�n de peque�as empresas. Es decir, m�s cupos en menos manos.

��������� Adem�s, el proyecto no contempla al biog�s en la definici�n de biocombustibles. Esto s� est� incluido hoy en la ley vigente que permite que sea inyectado en la red de distribuci�n de quienes lo generen.

��������� Con respecto a la fijaci�n del precio, nuevamente otorga discrecionalidad absoluta a la autoridad de aplicaci�n para que fije corte y precio. Es decir, le otorga superpoderes a la Secretar�a Energ�a para que disponga sobre la vida de las econom�as regionales y marque nuestra pol�tica de cambio clim�tico.

��������� Asimismo, este proyecto desnaturaliza el esp�ritu originario de la ley cuando fue sancionada, que ten�a por objeto diversificar nuestra matriz energ�tica y desarrollar combustibles que tengan menos impacto ambiental.

��������� Es as� que Argentina avanz� en tratados internacionales medioambientales, como lo fue el Acuerdo de Par�s sobre el cambio clim�tico, en donde los pa�ses que suscribieron al acuerdo se comprometieron a bajar sus emisiones de gases de efecto invernadero para el a�o 2030 y as� lograr mantener la temperatura global.

��������� La mayor causa de calentamiento global son los combustibles f�siles. Por esta raz�n, el aporte de los biocombustibles es una contribuci�n eficaz y fundamental, ya que los biocombustibles de primera generaci�n permiten reducir los gases de efecto invernadero entre un 65 y un 70 por ciento en relaci�n a los combustibles f�siles, y los biocombustibles de segunda generaci�n, es decir, de avanzada, permite reducirlos entre 85 y un 95 por ciento.

��������� La propuesta oficialista no solamente incumple tratados internacionales, sino que tambi�n nos lleva al ostracismo del mercado internacional. Queda en evidencia que el compromiso con las generaciones futuras por parte del Frente de Todos es endeble.

��������� Adem�s, el crecimiento del sector significa ahorro de divisas, solo en 2019 se import� gasoil por 1.165 millones de d�lares. Los biocombustibles pueden suplir este d�ficit, tenemos la capacidad instalada, tenemos la materia prima para producirlo y toda su cadena de producci�n, de venta y de distribuci�n es en pesos.

��������� Con estas reflexiones y cuestionamientos quiero despertar conciencia de lo que significa aprobar esta iniciativa que divide y atrasa, cuya flagrante arbitrariedad pone en claro las verdaderas intenciones del oficialismo que es someter al sector productivo, como lo hace hoy con las restricciones a la exportaci�n de la carne y al querer tomar por asalto el control de la hidrov�a y hacerse de la caja millonaria del cobro de los peajes.

��������� No permitamos que avasallen a un sector que tiene un gran futuro por delante, que marc� el camino de transiciones y energ�as limpias, que promueve la investigaci�n y el desarrollo de los biocombustibles de segunda generaci�n, que impulsa el desarrollo regional y la generaci�n de empleo genuino. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Tiene la palabra la se�ora diputada Cornejo, por Salta.

 

Sra. Cornejo.- Se�or presidente: quiero utilizar mis pocos minutos para hablar de algo que me parece muy importante que es el derecho a la vida. Vacuna Pfizer para los ni�os con comorbilidad.

��������� La verdad es que el Estado est� atentando contra la vida de estos ni�os que tienen patolog�as de riesgo y que necesitan de esta vacuna Pfizer contra el COVID. �Qui�n le explica a estos chicos que para ellos no hay vacunas por razones ideol�gicas?

��������� Hace muy poco tiempo, en esta C�mara de Diputados se ha votado en contra un proyecto para ellos. Me pregunto c�mo se estar�n sintiendo en estos momentos.

��������� Apelamos todav�a a la piedad y a la sensibilidad de las autoridades del Poder Ejecutivo, aunque tenemos serias dudas de su respuesta.

��������� Se necesitan aproximadamente 1.500 vacunas Pfizer y que se autorice la aplicaci�n para los ni�os menores de 12 a�os. Esto ya se ha hecho en Chile, Brasil, Uruguay y Estados Unidos. Que los funcionarios no miren para otro lado. El gobierno nacional es responsable por la vida de estos ni�os.

��������� Tambi�n quiero aprovechar estos breves minutos�

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Se�ora diputada: �me permite?

��������� Este no es el tema que estamos tratando, o �est� haciendo una introducci�n?

 

Sra. Cornejo.- Perd�n, todos han tomado sus minutos de acuerdo con lo que han considerado que es el tema al cual lo deben aplicar.

-   No se alcanzan a percibir las palabras de una oradora por pronunciarlas fuera del micr�fono.

Sra. Cornejo.- Si no le gusta, apague su micr�fono, diputada.

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Se�ora diputada: le permitir� continuar, pero debe ce�irse al tiempo que le corresponde.

 

Sra. Cornejo.- No tiene ning�n derecho a cercenarme la posibilidad de hablar.

��������� Tambi�n quiero hacer menci�n a la situaci�n de imprevisibilidad y autoritarismo que vivimos los argentinos ahora con la restricci�n de los vuelos internacionales.

��������� La verdad, se�or presidente y se�ores diputados, que vivimos en un sistema de autoritarismo que nos asombra.

��������� D�jenme leer una breve definici�n: �R�gimen pol�tico en el que una sola persona gobierna sin someterse a ning�n tipo de limitaciones y con las facultades de promulgar y modificar las leyes a su voluntad.� �Les suena?

��������� Esta definici�n es de autocracia y se ajusta perfectamente a los momentos que estamos viviendo. Estas restricciones son un cepo al turismo, atenta contra el federalismo y perjudican a las provincias.

��������� Se�or presidente y se�ores diputados: �ustedes creen que el COVID entra por Ezeiza? Se equivocan. El COVID viene a pie, pasa por las fronteras de Salta y Jujuy, en los l�mites con Bolivia y Paraguay, por la falta de verdaderos sistemas de control.

��������� Necesitamos que se reabran los aeropuertos internacionales, como el de Salta, para que ingresen turistas vacunados porque necesitamos recuperar nuestro trabajo, necesitamos que trabajen nuestros hoteles y necesitamos que trabajen nuestros restaurantes.

��������� Quiero expresar solidaridad por estas personas varadas en el exterior por estas medidas autoritarias; a pesar de estar vacunados no los dejan volver. Parece que a las autoridades de Migraciones les molestan los argentinos que viajan en avi�n. La verdad, se�or presidente, que hay que decir estas cosas.

��������� Con respecto a la ley de biocombustibles, estamos en desacuerdo. En diversas oportunidades hemos solicitado la pr�rroga de la ley todav�a vigente de promoci�n a los biocombustibles. Es necesario que nos sentemos a debatir y que consensuemos ese proyecto que necesita la Argentina, que beneficia a su pueblo, a su gente.

��������� Consideramos que es necesaria una actualizaci�n de la ley vigente o, de lo contrario, una buena ley. Solo se hace �nfasis en lo que significan los superpoderes que le estamos delegando a trav�s de este proyecto a la autoridad de aplicaci�n cuando, en realidad, se dar� lugar al amiguismo, a las negociaciones, a la arbitrariedad y a la corrupci�n.

��������� El intervencionismo del Estado ha sometido a la producci�n y al trabajo a una inseguridad jur�dica por la cual nadie ya quiere invertir en nuestro pa�s. Hay muchos otros motivos tambi�n -no son solo estos que he enunciado- por los cuales no estamos a favor de una norma que es un desastre. El proyecto del kirchnerismo es un volver atr�s, tal como dijeron muchos de quienes me precedieron en el uso de la palabra. Adelanto mi voto negativo.

��������� Finalmente, quiero referirme a lo que es el cierre de las exportaciones de la carne. Todo se relaciona con un pa�s que en Juntos por el Cambio no queremos.

��������� Hay preocupaci�n, indignaci�n e incertidumbre en todo un sector que genera miles de puestos de trabajo para los argentinos. Esto no lo podemos dejar pasar. Entre 2008 y 2011, a causa del tipo de restricciones como las que hoy vemos, se perdieron 10 millones de cabezas de ganado, se baj� la producci�n en un 18 por ciento y se cerraron m�s de 100 frigor�ficos.

��������� Se�ores diputados: en alg�n momento debemos pensar qu� tipo de pa�s queremos. Digamos �no� a todas estas medidas arbitrarias y autoritarias que nos est�n destruyendo.

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Para referirse al r�gimen de biocombustibles, tiene la palabra el diputado Zottos, por Salta.

 

Sr. Zottos.- Se�or presidente: estamos tratando hoy esta iniciativa a pocos d�as de que caduque la pr�rroga de una ley muy importante, una ley para la que hemos trabajado arduamente en este Congreso y que no me arrepiento haber votado en 2006, una ley en la que muchos no confiaban, una ley para m� federal que permiti� la inversi�n y la creaci�n de fuentes de trabajo.

��������� La Argentina ha sido pionera en lo que a biocombustibles se refiere. La ley 26.093 est� a punto de caducar, ya que la pr�rroga establecida por el Ejecutivo por decreto vence el 12 de julio.

��������� Sinceramente, prefiero tener una ley. Lamento como legislador �en mis fundamentos enunci� que se trata de una ley federal� que esta norma, que debe ser una pol�tica de Estado, no salga por consenso. Temo que terminen judicializ�ndola.

��������� Estamos tratando hoy esta iniciativa en momentos en los que los combustibles f�siles son los m�s objetados en todo el mundo. En Gran Breta�a, el corte se duplic�; en Alemania, pas� del 10 al 20 por ciento, al igual que en la India, en China y en otros pa�ses.

��������� Como dec�a, los combustibles f�siles actualmente son objetados, al igual que algunas petroleras. Por primera vez en la historia �esto hay que decirlo�, la empresa Shell recibi� un palazo de parte de la Corte Internacional de Justicia de La Haya: debe reducir sus emisiones en un 45 por ciento. Esto equivale a todas las emisiones de Rusia de aqu� a 2030.

��������� Respecto de los niveles de 2019, aplicable a los 80 pa�ses en los que opera esta empresa y su cadena de proveedores, no alcanza con el 20 por ciento que estableci� esta compa��a. Me parece muy bien este fallo que, como dije, es hist�rico.

��������� Por primera vez se responsabiliza legalmente a una empresa, sobre todo por el calentamiento global, y una orden judicial dispone la aplicaci�n del acuerdo de Par�s.

��������� Lo mismo ocurre con Exxon M�vil, la compa��a m�s grande de hidrocarburos de los Estados Unidos. Sus inversores est�n pidiendo un cambio. Tienen otro director y se pide un cambio de rumbo respecto al cuidado del medioambiente. La misma situaci�n se da en Chevron.

��������� Para finalizar, creo que la Argentina debe tener una ley. �Deberemos mejorar alg�n art�culo �como ha dicho el diputado preopinante por La Pampa respecto del art�culo 8� en cuanto a la necesidad de aumentar el corte�, pero es indispensable que tengamos una ley que regule el biocombustible.

��������� Para la provincia que represento, Salta, es muy importante. La producci�n de etanol �que sale del az�car� para Jujuy, Tucum�n, y especialmente para Salta, es muy importante.

��������� Voy a acompa�ar esta iniciativa. Tambi�n he presentado algunas sugerencias de cambio en los cortes, tanto del ma�z como de la soja.

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Tiene la palabra el diputado Nanni, por Salta.

 

Sr. Nanni.- Se�or presidente: si no trat�bamos hoy esta norma, est�bamos a punto de caer en un vac�o legal. En poquitos d�as venc�a la pr�rroga.

��������� Todos coincidimos, y es evidente, en que los biocombustibles son el futuro y son, para la Argentina, sobre todo para muchas regiones de nuestro pa�s, un recurso estrat�gico. Soy de Salta, productora de biocombustibles en una zona muy pobre, Or�n, al norte de la provincia.

��������� Lo primero que quiero decir es que tengo la sensaci�n de que esta iniciativa tiene la l�gica de que peor es nada. Digo esto porque no innova, no obliga a invertir y pr�cticamente proh�be las nuevas inversiones. No es superadora porque no genera nuevas inversiones; de hecho, las proh�be. Mantiene las condiciones m�nimas, no solo respecto de los cortes, sino de todo, cuando en realidad, por la Ley General del Ambiente, por ejemplo, debiera ser progresiva y no regresiva. La ley no habla pr�cticamente de progresividad en los cortes, al contrario, los deja librados a la reglamentaci�n del Poder Ejecutivo para subirlos, y sin mucho para bajarlos. Eso es lo grave de esta ley.

��������� Esta es una ley contraria a lo que est� planteando hoy el mundo. Mientras el mundo ampl�a los cortes del biodiesel y del bioetanol, nosotros tenemos la l�gica de reducirlos.

��������� Les dec�a que esta ley tiene la l�gica de �peor es nada�, y que hemos ca�do en la trampa del vac�o legal. Pensemos en las empresas que producen biodiesel. Imag�nense una empresa que en el mes de marzo pasado tuvo que planificar la zafra, cu�nto iba a cosechar, cu�nto iba a producir, y cu�nto mano de obra iba a tener. Muchas empresas planificaron con la ley vieja; muchos, con algunos borradores que daban vuelta; otros pensaban en alg�n vac�o legal que ten�a esta ley.

��������� La l�gica de �peor es nada� le ha hecho mucho da�o a la producci�n argentina y a los empresarios para generar m�s mano de obra.

��������� Esta ley -adem�s de da�ar el ambiente- no tiene metas progresivas; pr�cticamente proh�be que se instalen nuevas empresas, justamente cuando el pa�s necesita que entren m�s divisas, m�s inversi�n y que tomemos m�s mano de obra porque la desocupaci�n est� haciendo estragos en nuestro pa�s.

��������� A m�, personalmente, me sensibiliza mucho esta ley porque Salta -como he dicho- es productora de biocombustibles. Es una peque�a productora porque hoy apenas es una diminuta actividad que empieza a girar, sobre todo para la ca�a de az�car y para los biocombustibles a base de az�car. Pr�cticamente, se han quedado fuera de esta ley los biocombustibles a base de soja y de ma�z.

��������� Hoy, la regi�n de mi provincia donde se producen biocombustibles es la zona m�s pobre del pa�s. Es all� donde necesitamos m�s producci�n, que se ampl�en los cupos y que se tome m�s mano de obra.

��������� En Or�n, la pobreza, la desocupaci�n y el narcotr�fico hacen estragos, y nosotros vamos a contramano del mundo. Yo lamento que tengamos la agenda y la l�gica de �peor es nada�. La verdad, considero que esta ley es un nuevo cap�tulo de una oportunidad desperdiciada.

 

Sr. Presidente (P�rez Araujo).- Tiene la palabra el se�or diputado Frizza, por C�rdoba.

 

Sr. Frizza.- Se�or presidente: escuch� hablar con cierta nostalgia sobre la ley del 2006 a un colega diputado que me precedi� en el uso de la palabra. Hizo referencia a una ley federal, una ley que conten�a a todos.

��������� La verdad, cuando uno se pone a pensar en la ley que estamos tratando hoy, hay que marcar con mucha m�s fuerza que estamos discutiendo una ley que atrasa y que dej� de ser federal. Asimismo, dej� de fijar pisos m�nimos para una actividad que est� naciendo y que, la verdad, est� generando inversi�n ya que est� creciendo. Pero la estamos matando.

��������� Hace pocos a�os, cuando �ramos gobierno, quer�amos darle promociones a la actividad. Hoy, cuando logramos que empiece a mostrar frutos de crecimiento, la queremos matar. La verdad es que no entiendo por qu� estamos hoy discutiendo esto.

��������� No entiendo por qu� en vez de garantizarnos un crecimiento permanente, sustentable, que nos permita tener inversiones productivas, amigables con el ambiente, elegimos volver sobre nuestros pasos, incumplir compromisos asumidos con el mundo y desalentar la inversi�n en algo tan trascendental para el crecimiento de un pa�s, como es la energ�a.

��������� He escuchado varios argumentos al respecto. Algunos que dicen que el precio de los combustibles aumenta por este commodity, como si el petr�leo no lo fuera, como si en la Argentina el precio de los combustibles aumentara por el precio del ma�z. La verdad es que es il�gico que nos planteen que el valor del combustible aumenta por los biocombustibles. Esto no resiste ning�n an�lisis.

��������� Escuch� decir a un diputado: �Mi provincia merece esta ley�. Y yo me pregunto: �y las dem�s provincias qu�? Ac� no podemos debatir una ley para una provincia, necesitamos incluir a todas, que en cada rinc�n del pa�s podamos crecer.

��������� Tambi�n escuch� decir que el problema es que el ma�z debe ser para la alimentaci�n y que se debe priorizar en este sector. �Y si probamos generar condiciones para sembrar m�s? La Argentina tiene la posibilidad de seguir creciendo, como lo viene haciendo, en la producci�n de ma�z.

��������� Se me ocurre preguntar si vamos a dejar trabajar tranquilos, producir tranquilos, asentar los pisos, como lo hizo la ley del 2006. Hay que crecer a partir de ah�, no retroceder. Seguramente la Argentina tendr�a la posibilidad de crecer mucho m�s, y, sobre todo, de generar riqueza donde se realiza la producci�n.

 

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Honorable C�mara, doctor Sergio Tom�s Massa.

Sr. Frizza.- En los peque�os pueblos del norte de C�rdoba, donde est�n la mayor�a de las peque�as plantas de biocombustibles, se retiene a las poblaciones rurales en su lugar. Ah� se genera la riqueza, pueden tener un mejor porvenir, y no ser expulsados a las grandes urbes, como normalmente ocurre.

��������� Podr�amos repasar los fr�os n�meros de la actividad. Surgen un mont�n de preguntas: �qu� cantidad de puestos de trabajo se pierde con las empresas que van a cerrar y las inversiones enormes que se van a perder? �Disminuye o no el precio del combustible en relaci�n con los precios internacionales?

��������� A partir de ac�, �qu� pa�s queremos? Queremos un pa�s de lobbies o un pa�s incluido en el mundo? �Queremos ese pa�s que nos propone el oficialismo en muchos discursos, con una agenda verde, o queremos degradar el medio ambiente?

��������� Queremos estabilidad, reglas claras, pisos m�nimos cuando generamos alguna actividad y alg�n incentivo, para que las empresas que quieren invertir en nuestro pa�s sepan que esas son las condiciones de m�nima, y que no las vamos a cambiar a los pocos a�os, como est� ocurriendo en este momento.

��������� Claramente, la energ�a es una de las actividades que genera m�s emisiones de gases de efecto invernadero. En el 2019 el transporte represent� el 33 por ciento de la demanda de energ�a. De ese 33 por ciento, el 39 por ciento fue de gasoil; el 36 por ciento, de nafta; el 12 por ciento, de gas natural; solo un 9 por ciento, de biocombustibles; y el 4 por ciento, de otros combustibles.

��������� Por eso tenemos que discutir c�mo cambiamos la matriz energ�tica del pa�s, no c�mo matamos la actividad, en este caso, el biocombustible sobre la base de ma�z, o de soja. La producci�n de ma�z crece a�o a a�o, tenemos inversiones realizadas, tecnolog�a disponible y mano de obra capacitada. Falta la decisi�n pol�tica de poder crecer con todas las actividades, sin excluir a ninguna.

��������� Por eso creo, se�or presidente, que estamos en el camino equivocado. Estamos a tiempo de cambiarlo, necesitamos una pr�rroga de esta ley para discutir en serio, como lo dijo alg�n diputado que me antecedi�, una ley federal.

��������� Se necesita una ley que aliente la inversi�n, cuide el ambiente y genere desarrollo social y econ�mico en cada rinc�n de la Argentina. No podemos perder una oportunidad m�s. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Berhongaray, por La Pampa.

��������� Le pregunto al se�or diputado Berhongaray si no le molesta que termine de hablar un tema con el diputado Ferraro, que se ha acercado al estrado de la Presidencia por este motivo.

 

Sr. Berhongaray.- No tengo ning�n problema, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Muchas gracias, se�or diputado. Ocurre que s� que a veces le incomoda cuando dialogo con alg�n diputado.

 

Sr. Berhongaray.- Alguna vez me distraje, pero est� todo bien.

��������� Se�or presidente: es imposible acompa�ar esta iniciativa, y en verdad es imposible encontrarle una l�gica. No cierra desde el punto de vista ambiental, no cierra desde el punto de vista social, no cierra desde el punto de vista del sostenimiento de las fuentes laborales, ni cierra desde el punto de vista econ�mico. En definitiva, no cierra.

��������� Me voy a detener en la cuesti�n ambiental porque las consecuencias y los perjuicios en lo social y en lo econ�mico, as� como las inconsistencias jur�dicas, ya han sido suficientemente explicados por otros diputados y diputadas del bloque al que pertenezco.

��������� Me pregunto si alguien en este recinto puede desconocer que los biocombustibles emiten un nivel de gases de efecto invernadero considerablemente menor que los combustibles f�siles. Ese es un dato objetivo, un dato de la evidencia.

��������� Todos sabemos que el camino es hacia una transici�n que aumente el uso de energ�as de alta eficiencia y que baje la tasa de contaminaci�n porque, adem�s, ese es el camino que se�alan los acuerdos internacionales que en materia ambiental firm� la Argentina, como el Acuerdo de Par�s, que nos dicen que tenemos que ir para all�. Pero resulta que vamos para otro lado.

��������� Ese camino, el que no elegimos, es el que marca la ley 25.675, a partir de una serie de principios protectores que nos ense�an un rumbo que no podemos confundir. Y esa es la s�ntesis de los principios de progresividad, de gradualidad y de no regresi�n. �Cu�ntas veces escuchamos decir que es necesario transformar la matriz energ�tica nacional hacia un modelo que sea plenamente sustentable! Porque, en definitiva, estamos hablando de eso: estamos hablando de energ�a, y como dijo el diputado preopinante, todos sabemos que es una de las actividades que generan m�s emisiones de gases de efecto invernadero.

��������� Estamos hablando de un esfuerzo protector del Estado y de unas exigencias que deber�an ser crecientes y no decrecientes. Y qu� decir de algo que ya se mencion�, que son las implicancias sociales que traer� aparejadas la reforma que se intenta, con la p�rdida de miles de puestos de empleo que dependen directa o indirectamente de la actividad. Qu� decir de la falta de reglas de juego estables, y qu� decir de la falta de apego a los compromisos internacionales que ha suscripto nuestro pa�s, que reci�n mencionaba.

��������� En verdad, se puede discutir si el camino correcto es la pr�rroga del r�gimen actualmente vigente, en l�nea con el proyecto sancionado hace pocos meses por el Senado en forma un�nime. Lo que es muy dif�cil de discutir es un esquema que claramente constituye una involuci�n en el aspecto en que se lo mire.

��������� Nos queda apelar a la reflexi�n de quienes impulsan este nuevo cambio de rumbo, y por supuesto, si esa reflexi�n no ocurre, mi decisi�n ser� la de rechazar esta iniciativa. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia informa que en relaci�n con las �rdenes del D�a n�meros 419 y 420, sobre r�gimen del monotributo y promoci�n del r�gimen de ahorro en pesos, que son los pr�ximos temas a tratar, ser�n giradas a todos los diputados y diputadas las modificaciones. En el caso del r�gimen del monotributo, se trata de las que modificaciones que con posterioridad a la firma del dictamen acercaron algunos legisladores y el Consejo Profesional de Ciencias Econ�micas de la Capital Federal. Y en el caso del r�gimen de promoci�n del ahorro en pesos, se trata de la eliminaci�n del art�culo 3�, ya que de alguna manera generaba incertidumbre o dudas, y hac�a que la iniciativa no estuviera dentro del consenso alcanzado en las comisiones.

��������� De manera tal que, para que todos est�n tranquilos, ahora les va a ser girado por el diputado Heller a los responsables de cada uno de los bloques c�mo quedan los dict�menes, para que cuando empecemos el debate todos tengan el nuevo texto ordenado.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Amaya, por Tucum�n.

 

Sr. Amaya.- Se�or presidente: hoy nos convoca el tratamiento de esta iniciativa en relaci�n con la producci�n y elaboraci�n de los biocombustibles mediante la sustituci�n parcial de los combustibles f�siles por esos combustibles renovables que dispone la ley 26.093.

��������� Esta regulaci�n pretende lograr una contribuci�n eficaz y verificable para reducir tanto la emisi�n de gases que causan el efecto invernadero como tambi�n el cambio clim�tico por calentamiento atmosf�rico.

��������� Adem�s, la norma trajo consigo un gran beneficio para el pa�s, especialmente a diez provincias donde se instalaron 54 plantas industriales para la producci�n de biodiesel y bioetanol, con lo que la Argentina se adelant� a muchos pa�ses del mundo.

��������� En el seno de la Comisi�n de Energ�a y Combustibles, que integro, he participado activamente desde que este proyecto comenz� a insinuarse con lineamientos generales. Y como se trata de un tema importante y de mucho inter�s para mi provincia �Tucum�n-, he tomado contacto con los distintos factores y actores de la actividad sucroalcoholera: ingenios, ca�eros independientes, sindicatos y representantes de muchas empresas de servicio industrial metalmec�nicas, que trabajan exclusivamente con todas las f�bricas azucareras.

��������� Para que conozcan todos los diputados, este sector contempla una mano de obra directa de casi 61.000 trabajadores, tanto en el campo como en los ingenios y en el transporte. Nuclea a veinte ingenios, de los cuales quince son tucumanos, dos salte�os y tres juje�os. Hay diecis�is destiler�as de alcohol y doce deshidratadoras de alcohol, 160 industrias metalmec�nicas de servicio, 7.100 productores ca�eros independientes, con un total de 400.000 hect�reas plantadas de ca�a de az�car, de los cuales -para que conozcamos- 5.450 son ca�eros con campos de menos de 50 hect�reas de superficie.

��������� Tambi�n quiero resaltar que el bioetanol representa el 30 por ciento de los ingresos brutos del sector y absorbe el 25 por ciento de la producci�n de az�car. Si no tuvi�ramos esta ley ni la producci�n de bioetanol, el az�car deber�a destinarse a un mercado externo que realmente tiene precios de quebranto.

��������� Tambi�n quiero ser claro y contundente: sin esta ley de biocombustibles, la industria azucarera estar�a hundida, no tendr�a futuro, con consecuencias devastadoras para la regi�n.

��������� Ya se vivi� un tiempo en Tucum�n, durante la �poca de la dictadura de Ongan�a, en que cerraron once ingenios. Eso signific� la migraci�n y el �xodo de 250.000 tucumanos que vinieron a poblar el conurbano bonaerense.

��������� Se�or presidente: como he visto que al aprobarse el dictamen en las comisiones se han tenido en cuenta las distintas inquietudes planteadas por los gobiernos de las provincias azucareras y por el mismo sector, voy a acompa�ar esta iniciativa. Pero quiero detenerme en algunos aspectos generales que contempla esta norma.

��������� Los biocombustibles que se destinen al corte obligatorio deben ser de producci�n nacional, como tambi�n la materia prima, y esto es muy importante.

��������� Siguiendo el criterio que tiene nuestro pa�s con otras fuentes de energ�a, como la electricidad y el gas, quien las produce no las distribuye ni las transporta. En el caso del biocombustible sucede lo mismo: quienes lo mezclan y lo distribuyen, que son las petroleras, no pueden producirlo.

��������� Tambi�n es correcto que el biocombustible permanezca sin estar alcanzado por el impuesto a los combustibles l�quidos y al di�xido de carbono porque, como lo establece la ley, se los cre� espec�ficamente para los derivados de hidrocarburos.

��������� Asimismo, se prev� que el corte del bioetanol sea del 12 por ciento, que es lo que la ley vigente contempla, y hay un aspecto interesante que se incorpora en esta norma, que no estaba en la ley actual. Me refiero a la prohibici�n de sustituir la importaci�n de naftas con bioetanol por fuera del corte obligatorio, ya que para satisfacer la demanda de biocombustibles en un a�o de consumo normal, como ocurri� en 2019 -es decir, en la prepandemia-, se tuvieron que importar 500.000 metros c�bicos de nafta.

��������� He aqu� que en los �ltimos tres a�os -entre 2017 y 2019- los biocombustibles han generado un ahorro al pa�s de 1.600 millones de d�lares. En particular, me voy a referir a lo que significa la actividad sucroalcoholera, que es lo que realmente nosotros como norte�os y como tucumanos espec�ficamente defendemos, porque no podemos darnos el lujo de perder un solo puesto de trabajo m�s en la situaci�n que hoy vive nuestro pa�s.

��������� Por otra parte, se mantiene el 6 por ciento de ese 12 por ciento que corresponde en general sobre la ca�a, y si hubiera escasez de bioetanol por problemas productivos -cosa que puede ocurrir-, esas reducciones ser�an solamente transitorias.

��������� Adem�s, por las caracter�sticas de nuestro mercado de combustibles, es acertado que el volumen y el precio del bioetanol sean regulados, porque el 92 por ciento de la demanda lo tienen solamente tres refiner�as de petr�leo, mientras que son veinte las f�bricas que lo producen. De no ser esto regulado, esta producci�n podr�a colapsar en el corto plazo.

��������� Por �ltimo, el art�culo 2� contempla los cupos actuales de abastecimiento del bioetanol que cada fabricante tiene asignado por la Secretar�a de Energ�a de la Naci�n, lo que brinda el contexto de continuidad en la producci�n y abastecimiento de las necesidades del mercado.

��������� Para terminar, quiero reiterar que voy a acompa�ar este proyecto, porque beneficia a una actividad muy importante para mi provincia, Tucum�n.

��������� Espero que los diputados entiendan que uno tiene que defender las econom�as regionales de cada una de las provincias. Por eso, les pido que acompa�en este proyecto a fin de que pueda convertirse en ley.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Yedlin, por Tucum�n.

 

Sr. Yedlin.- Se�or presidente: veo que hay muchos tucumanos hablando. La verdad es que estamos muy contentos en Tucum�n. Esta ser� una muy buena ley para los tucumanos. Esperemos que tambi�n sea una gran ley para la Argentina.

��������� Creo que se ha trabajado mucho en esta iniciativa y que es muy superadora de la norma que ven�a en pr�rroga del Senado porque tiene varias ventajas. No me voy a referir a ello ahora, porque muy bien ha se�alado el diputado preopinante lo atinente a esta actividad. Simplemente quiero marcar algunas de las condiciones que destaco de este proyecto de ley, compar�ndolas con lo que hubiese sucedido si directamente hubi�ramos prorrogado la norma que vino del Senado.

��������� Por un lado, debemos considerar los tiempos. Esta es una norma que, en lugar de dos a�os, nos va a dar diez a�os, lo que realmente permitir� a la industria tener un horizonte mucho m�s claro para su inversi�n. Son diez a�os, m�s la posibilidad de prolongarlo por otros cinco a�os.

��������� Adem�s, se genera el piso del corte del bioetanol en 12 por ciento, que es el que ten�amos, pero lo cierto es que no lo ten�amos establecido por ley. La norma original preve�a un 2 por ciento de corte, y los aumentos fueron dados por decreto. Ahora, por ley, tendremos un 12 por ciento de piso: 6 por ciento por bioetanol de ca�a y 6 por ciento por bioetanol de ma�z.

��������� Otra cosa que me parece importante -y que lo es, sobre todo, para la industria azucarera, pero que tiene l�gica- es que la norma separa los distintos biocombustibles seg�n qui�n los produce; es decir, el bioetanol de ca�a, el bioetanol de ma�z y el biodiesel de soja.

��������� Esto tiene importancia, ya que definitivamente el mercado de los commodities internacionales y el precio de la soja, del ma�z y del az�car van por carriles muy diferentes. Por lo tanto, m�s de una vez el bioetanol de ca�a quedaba sin poder ser aplicado como biocombustible, debido a que los aumentos de la soja o del ma�z en el mercado internacional hac�an poco atractivos a estos productos para llevar a la mezcla con los combustibles f�siles.

��������� Desde que comenzamos con esta discusi�n, el precio de la bolsa de az�car de 50 kilos mantuvo m�s o menos el mismo precio que en 2019. El precio de la bolsa de az�car de 50 kilos hoy ronda los 1.700 pesos; en 2019, el precio era de 1.850 pesos por bolsa. O sea que ese valor est� 150 pesos por debajo respecto del a�o anterior.

��������� Esa es la realidad del az�car. Por eso, esta realidad no puede ser comparada con los valores que tienen estos otros productos que tambi�n generan biocombustibles, y eso es otra fortaleza que tiene la futura ley.

��������� Hoy se dijo ac� que de alguna manera esto beneficiaba a unas pocas empresas. En realidad, en Tucum�n beneficia a toda la provincia porque, tal como se dijo, esta actividad genera 60.000 puestos de trabajo directos y 150.000 indirectos. Pero la verdad es que la provincia de Tucum�n late al comp�s de la zafra azucarera.

��������� Tucum�n tiene -y lo hemos aprobado ac� hace muy poco tiempo por unanimidad- el d�a nacional de desagravio al pueblo tucumano por el cierre masivo de ingenios azucareros en 1966, ocurrido durante el gobierno de facto de Ongan�a.

��������� En este sentido, justamente hoy rendimos varios homenajes a Illia. Pero el gobierno que lleg� despu�s, al poco tiempo de asumir, cerr� once ingenios, generando un �xodo de casi el 20 por ciento de la poblaci�n tucumana.

��������� Creo que hoy de alguna manera ese desagravio que votamos hace unos d�as cobra sentido en una ley que vuelve a pensar en proteger a muchos azucareros. Los ca�eros en Tucum�n son, en general, peque�os ca�eros. Hay muchos peque�os ca�eros; son cerca de 7.000. Es decir, no son grandes productores. As� que esta es una ley beneficiar� a toda una regi�n y a toda una provincia.

��������� Por lo expuesto, adelanto mi voto afirmativo a este proyecto de ley de biocombustibles, y felicito a los autores de la norma.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Benedetti, por Entre R�os.

 

Sr. Benedetti.- Se�or presidente: creo que esta ser� una mala ley. Pienso que es una norma arbitraria e inequitativa y que forma parte de una matriz constante de este gobierno del Frente de Todos: es cortoplacista y, en todo caso, busca atender cuestiones de coyuntura, ya que estamos proponiendo una ley para los pr�ximos ocho o nueve a�os.

��������� Cuando digo que es una norma arbitraria, pongo como ejemplo lo que han expresado dos diputados preopinantes, a quienes he escuchado con mucho respeto, que provienen de una provincia cuyas econom�as regionales se ver�n favorecidas con la sanci�n de esta norma. Pero debemos tener en cuenta que toda la Rep�blica Argentina tiene econom�as regionales; toda la Rep�blica Argentina tiene pymes que hay que cuidar, y se nota siempre una desconsideraci�n hacia la inversi�n privada y hacia la sustentabilidad de las pymes.

��������� Ya dije en alguna otra ocasi�n que el trabajo de una pyme no es algo que arranca o se puede apagar, y aun as� todo est� bien, sino que es un proceso que implica mucho tiempo y esfuerzo. As� que no entiendo por qu� no avanzamos con aquel proyecto de ley que vino del Senado que propon�a prorrogar la ley actual hasta 2024, de manera que podamos estudiar en profundidad una alternativa que sea equitativa.

��������� Lamentablemente, hasta fin de a�o est�bamos con esta idea, y luego comenzaron 2021 con la intenci�n de sancionar esta ley que, reitero, ser� una mala ley.

��������� Cuando digo que esta es una norma inequitativa, pregunto: �cu�l es la raz�n por la cual se modifica el corte de las naftas y del gasoil? �Ser� que contamina menos el gasoil y podemos arreglarlo con un 5 por ciento, mientras que las naftas van a tener un 12 por ciento? En verdad, mi impresi�n es que tenemos un doble est�ndar en los temas ambientales.

��������� He escuchado hablar en esta C�mara de la nueva agenda ambiental; ha habido floridos discursos en ese sentido. He escuchado decir cu�n importante es avanzar en materia de educaci�n ambiental, en el cuidado de los humedales y en el establecimiento de fuertes castigos para la quema de pastizales, sea intencional o no. Sin embargo, cuando tratamos un tema como este, que tiene que ver con todos, retrocedemos en el plano ambiental.

��������� Por otro lado, no entiendo por qu� se reduce la proporci�n de biodi�sel, fij�ndola en el 5 por ciento, incluso con la posibilidad de que sea disminuida a�n m�s, llev�ndola al 3 por ciento. Ahora bien, si este insumo aumentase un ciento por ciento, sobre un costo que en total equivale al 60 por ciento de los insumos, ese 2 por ciento vendr�a a ser un mango con cincuenta. Realmente, como aqu� se dijo, no es algo que vaya a afectar a los consumidores; pero, s� influir� en el cuidado del ambiente, con lo cual habremos empezado un camino de retroceso en la Rep�blica Argentina. Adem�s, que se cuide ese porcentaje en un pa�s donde la inflaci�n ronda el 4 por ciento mensual, tiene muy poco sentido; menos a�n que lo establezcamos en una ley. Ser�a como poner ruedas de palo a una bicicleta por si en alg�n momento sube el precio de los neum�ticos. Es un absurdo si pensamos en lo que significa avanzar en el cuidado del ambiente.

��������� Pienso que es un proyecto de ley inequitativo porque no trata a los Estados provinciales y a las econom�as regionales con equilibrio. Es una involuci�n desde el punto de vista ambiental y, por c�mo est� redactado, atenta no solo contra las fuentes de trabajo existentes, sino tambi�n contra las pymes. Pongo como ejemplo alguna pyme de biodi�sel de mi provincia, Entre R�os, que es la cr�nica de una muerte anunciada porque con esta reducci�n ser�n las empresas m�s peque�as las que m�s van a perder.

��������� Por las razones expuestas, votar� negativamente este proyecto de ley.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Est�vez, por Santa Fe.

 

Sr. Est�vez.- Se�or presidente: estamos frente a un tema que, desde nuestro punto de vista, viene siendo mal encarado. Para nosotros, estos procesos condicionan el resultado que buscamos.

��������� Pocos meses atr�s, en octubre del a�o pasado, el Senado de la Naci�n aprob� por unanimidad la pr�rroga del R�gimen de Regulaci�n y Promoci�n para la Producci�n y Uso Sustentables de Biocombustibles. Tiempo despu�s, en esta C�mara el oficialismo comienza a promover otra idea para regular los biocombustibles.

��������� Esto no es casualidad. No sabemos hacia d�nde queremos ir y tomamos decisiones en el marco de coyunturas que, en el mejor de los casos, son parches que no resuelven los problemas de fondo que tenemos en la Argentina.

��������� �Qu� destacaban en el Senado? Que esto era lo m�s parecido a una pol�tica de Estado; que durante quince a�os no se tocaron las reglas de juego y que obtuvimos resultados muy positivos sin que el Estado tuviera que hacer demasiado. O sea, que todo camin� solo y con resultados muy importantes: valor agregado, puestos de trabajo, cuidado del ambiente, econom�as regionales.

��������� Quince a�os despu�s esperamos hasta �ltimo momento y el oficialismo de turno no ten�a una propuesta que, por lo menos, pintara como superadora.

��������� Esto quiere decir que no hay plan; se da el debate entre gallos y medianoche, se construye un proyecto que brinda respuesta a particularidades y se plantea que hay que intermediar o compatibilizar intereses. Eso est� claro. No somos irresponsables y tambi�n creemos que es necesario compatibilizar intereses, pero no sobre la base de condenar el futuro de un pa�s que debe empezar a discutir y a tomar decisiones progresivamente a fin de resolver problemas que son muy graves.

��������� Esta noche, en este recinto se ha dicho muchas veces que hemos sancionado varios proyectos relacionados con el cuidado del ambiente. A prop�sito de ello, quiero recordar la urgencia de que tratemos, porque ya es tarde, la ley de humedales. Existe la Ley General del Ambiente; entonces, no seamos contradictorios en nuestros planteos.

��������� Aqu� se habl� sobre el principio de progresividad y esta misma C�mara aprob� el Acuerdo de Escaz�, que contempla el principio de no regresi�n. Sin embargo, ahora estamos yendo hacia atr�s.

��������� Hoy un diputado del oficialismo trataba de explicarme que llegaremos a cumplir con los compromisos internacionales que nos fijamos. Se ve que tienen miedo de que nos excedamos, a lo mejor, en aquello que asumimos respecto del cuidado del medio ambiente.

��������� En suma, no creemos que la reducci�n de los cortes sea una salida posible para la industria de los biocombustibles. No creemos que as� se van a profundizar los ejes positivos que tiene la ley en vigor.

��������� En la actualidad, hay una capacidad ociosa en esta industria. Imaginemos que muchas cerrar�n y que muchos puestos de trabajo se van a perder. Mientras en el mundo los cortes suben, en la Argentina los bajamos. En verdad, es un poco inexplicable.

��������� A esto sumemos que la autoridad de aplicaci�n tiene, por decirlo as�, superpoderes. Esto tambi�n es medio raro: el gobierno anterior congel� los precios y este tambi�n. Los precios est�n �pisados�; sin embargo, el valor del combustible f�sil sigue subiendo. En el mundo, muchas veces el precio del barril de petr�leo baj� y en nuestro pa�s continu� aumentando. Entonces, no s� si el problema son los biocombustibles. Para el caso de que lo fueran, discutamos el tema como corresponde.

��������� El oficialismo plantea una norma a diez a�os, con posibilidad de pr�rroga. Como se dijo durante el debate, hay una definici�n acotada de los biocombustibles: no se contempla el biog�s; tampoco los biocombustibles de segunda generaci�n o coproductos como la glicerina.

��������� Hemos presentado muchos proyectos con el objeto de que esta norma sea prorrogada para que tengamos tiempo de trabajar en un proyecto superador. Necesitamos una ley, pero una ley mejor; claramente, no la que ahora se propone.

��������� Hay una iniciativa de la Liga Bioenerg�tica, de la que participaron las provincias, fundamentalmente las productoras de biocombustibles, que no fue tenida en cuenta.

��������� Necesitamos incorporar la mirada ambiental al modelo de desarrollo y de pa�s que queremos. Es preciso fomentar una econom�a circular, agregar valor, sustituir importaciones, generar puestos de trabajo y tener una matriz energ�tica m�s limpia. Necesitamos un desarrollo federal; mucho se pregona el federalismo, pero poco se cumple.

��������� Por estos motivos, desde el bloque Socialista no acompa�aremos este proyecto de ley.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Buryaile, por Formosa.

 

Sr. Buryaile.- Se�or presidente: creo que hablamos de una ley que deber�a unirnos a todos en esta C�mara, porque entiendo que el esp�ritu de pol�tica de Estado est� presente en cada uno de los integrantes de este cuerpo legislativo.

��������� Es una muy buena ley que se sancion� en 2006, por iniciativa del gobierno de N�stor Kirchner: la 26.093, a la que debemos agregar la 26.334, de bioetanol y biodi�sel. Se fue sosteniendo en el tiempo y marc� una pol�tica de Estado; se lleg� a un corte del 10 por ciento para el biodi�sel y del 12 por ciento para el bioetanol.

��������� En verdad, es desconcertante la pol�tica del gobierno. A poco de andar, uno preguntar�a a los empresarios del sector.

��������� Hace poco tiempo, apenas unos meses atr�s, en el Senado se aprob� por unanimidad la pr�rroga por cuatro a�os, pero no porque la ley fuera buena ya que necesitaba retoques.

��������� Puedo dar fe de que cuando se otorgan facultades discrecionales a un funcionario, no siempre el �rea funciona como se pretend�a. Por eso, le hac�an falta unos retoques a la ley, pero se trataba de que los mismos fueran consensuados �con todos los sectores para darle previsibilidad a futuro.

��������� Esta norma, a poco de empezar a transitar el a�o, con todos los problemas de pandemia y con todo lo que se creaba, no se trataba porque hab�a una intenci�n de modificarla.

��������� No voy a hablar de intenciones ocultas, pero s� de intenciones equivocadas del oficialismo. Esta norma, como bien se sabe, lo que hace es bajar el corte en el biodiesel y otorgar facultades para bajar hasta el 3 por ciento. ������������

��������� Como bien se ha dicho ac�, hemos suscripto un convenio internacional como el acuerdo de Par�s para bajar la emisi�n de gases de efecto invernadero.

��������� Sin embargo, la verdad es que los efectos que tienen estas leyes van a contramano de lo que pide el mundo, y las nuevas barreras paraarancelarias van a ser las pol�ticas ambientales. Sin embargo, esta C�mara no ha girado a la Comisi�n de Recursos Naturales y Conservaci�n del Ambiente Humano un proyecto de tanta trascendencia como es el proyecto de biocombustibles.

��������� De poco vale discutir si est� bien o est� mal, si le damos seis puntos al az�car y qu� hacemos con el ma�z. No estoy de acuerdo con la discrecionalidad de perjudicar unas zonas para beneficiar a otras. El esp�ritu debe ser el desarrollo arm�nico de todas las econom�as regionales de la Rep�blica Argentina. No puedo estar de acuerdo con eso m�s all� del beneficio que le trae a alguna zona.

��������� Tenemos que pensar en si tenemos una pol�tica ambiental que prescinde de esta materia o toma la cuesti�n ambiental como algo de fondo.

��������� El proyecto del oficialismo tira por la borda todo lo que hemos suscrito, todos los convenios internacionales y la progresividad en el uso de biocombustibles. El mundo entero avanza en el mayor uso de combustibles renovables y �nosotros estamos yendo a contramano de eso.

��������� No es una ley que establezca una pol�tica de Estado. Eso no es cierto.

��������� Particularmente, creemos que en todo lo que es� materia energ�tica es necesaria la regulaci�n. Pero una cosa es la regulaci�n y otra cosa es la discrecionalidad de un funcionario. Sin embargo, ac� estamos hablando de que la autoridad de aplicaci�n tiene triple discrecionalidad: bajar el corte, consagrar cupos y fijar precios.

��������� Entonces, �qui�n va a invertir en la Argentina? �Qu� �va a pasar con las pymes de Santa Fe? �Qu� va a pasar con las pymes de C�rdoba? �Qui�n se va a hacer cargo de estas empresas y de los trabajadores de las mismas que necesitamos en Argentina para generar mayor valor agregado?

��������� En el caso de que prospere este proyecto, se�or presidente, lo que va a haber es desinversi�n producto de la falta de previsibilidad.

��������� Por lo tanto, no creo -lo digo sinceramente- que esta sea una ley de pol�tica de Estado.

��������� �Apelo a la racionalidad, porque est� claro que este proyecto apoyado por el oficialismo y por muchos sectores del lobby petrolero va a ser aprobado por esta C�mara y va a volver al Senado.

��������� Desde mi visi�n, se�or presidente, es un enorme error lo que estamos haciendo. Estamos d�ndole a un funcionario la absoluta discrecionalidad de fijar las pol�ticas energ�ticas y la inversi�n en algo tan importante como es la energ�a de la Argentina. (Aplausos)

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Enriquez, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Enriquez.- Se�or presidente: cuando me aboqu� al estudio de esta ley porque estamos tratando la misma dije: como siempre, el kirchnerismo persiste con el plan sistem�tico de fundir a los emprendedores y al sector privado.

��������� Ahora le toca, justamente, a la industria de los biocombustibles. Pero esta vez tiene la caracter�stica de que rompen con algo que ellos inventaron, porque las leyes 26.093 y 26.334 fueron sancionadas durante los gobiernos kirchneristas y generaban la promoci�n de los biocombustibles, pero ya se encuentra vencido el plazo porque eran normas temporales y fijaban un plazo de quince a�os.

��������� En ese momento, frente al aumento del precio mundial del petr�leo, se busc� contener el precio interno de los combustibles l�quidos oblig�ndolos a cortar con biocombustibles. Sin embargo, el tremendo empuje que tuvo el sector agroindustrial supo ver esa peque�a ventana de oportunidad y transformarla en un nuevo motivo de orgullo nacional, generando que el corte de biodiesel en gasoil fuera equiparable en su porcentaje al de otras naciones desarrolladas, como Alemania y Francia.

��������� Gracias a la enorme capacidad del complejo industrial oleaginoso que ya estaba instalado, la industrial del biodiesel se transform�, se convirti� en un sector estrat�gico de la econom�a.

��������� Seg�n unos datos muy interesantes que tengo, pasamos a ser uno de los principales exportadores mundiales de biodiesel, siendo los segundos en el 2017, la tan malhadada �poca para el sector oficialista, que siempre cr�tica. Sin embargo, en dicha �poca se generaron 55 empresas, 100.000 empleos directos, y exportaciones por 1.224 millones de d�lares.

��������� Esta ocasi�n era buena para el debate. Sin embargo, como siempre, el plan del oficialismo es ver si vamos por ac� o vamos por all�. �Y qu� resuelven hoy? Promover una ley que genera una excesiva intervenci�n estatal en el mercado de los biocombustibles y le quita los beneficios impositivos que hicieron posible ese incremento incre�ble en material agroindustrial.

��������� Pero lo m�s grave de todo es que, en lugar de seguir ampliando el corte de los biocombustibles, hacen diferenciaci�n dentro de la nafta y el gasoil en pos de una producci�n realmente m�s sustentable. Pero ac� estamos violando acuerdos, que para Argentina son ley, como el Protocolo de Kioto y el Acuerdo de Marrakech.

��������� En este punto entramos en un tema que es despreciar el cuidado del medio ambiente y rebajamos y reducimos del 10 al 5 por ciento el corte obligatorio del biodiesel, mientras que el del bioetanol, reemplazo de la nafta, subir� del 10 al 12, pero el 6 por ciento deber� elaborarse con az�car y solo el resto con ma�z.

��������� Lo que buscamos es que el desarrollo de las econom�as regionales sea sustentable y no que se haga en favor de unas y en perjuicio de otras.

��������� Con esta ley se muestra claramente lo poco que les importa la industria, el odio que tienen por el campo y, sobre todo, lo poco que les preocupa que el desempleo siga in crescendo.

��������� Hoy hay pymes que est�n mirando de reojo que 41.200 pymes han cerrado en la Argentina solo en 2020 y que dejaron en la calle a 185.300 trabajadores.

��������� �A d�nde vamos con esta ley? �Qu� es lo que pretende esta norma? Desprecio absoluto por el medio ambiente, destrucci�n de industrias, p�rdida de empleo y aumento de usos de combustibles f�siles.

��������� Por favor, me gustar�a que en alg�n momento explicaran cu�l es el negocio que hay detr�s de todo esto. Hoy, alg�n diputado se ofendi� por los dichos de una diputada de nuestro interbloque. Pero, realmente, como decimos siempre, cuando vemos estas cuestiones pensamos: ac� hay gato encerrado.

��������� Tampoco pudieron explicar, porque ninguna raz�n hay que lo justifique, por qu� se negaron a aprobar un proyecto de ley que eliminaba la palabra �negligencia� como excepci�n a las condiciones de indemnidad a los laboratorios,  para poder as� incorporar la vacuna de Pfaizer. Y no es que tengamos preferencia por esa marca, pero queremos que haya vacunas de cualquier tipo y esta es muy eficaz, sobre todo para los m�s de cien mil chicos que padecen de comorbilidades, que tienen necesidades especiales y que para ello ser�a fundamental.���������������

��������� Ahora, �de qu� nos acabamos de enterar? De que tuvimos que venir a este recinto a pedir una preferencia para que el gobierno dicte un DNU.

��������� �F�jese qu� perversidad! Reci�n hoy sucede esto, despu�s de las distintas manifestaciones realizadas a trav�s de diferentes ONG ‑una muy conocida, que es Vacuna_me‑ y de tantas otras manifestaciones que hubo en los medios de comunicaci�n en estos d�as de padres realmente preocupados por sus hijos que tienen necesidades especiales. Este es el caso del compa�ero de nuestra bancada, Luis Juez, que ayer por televisi�n realmente nos hizo emocionar a todos. Siendo un tipo duro y fuerte se quebr� porque ante esta situaci�n obviamente prima el papel de padre y no de pol�tico.

��������� Entonces, yo me pongo a pensar si era necesario que hoy tuvi�ramos que venir nosotros a pedir esta preferencia...

 

Sr. Presidente (Massa).- Vaya finalizando, por favor, se�or diputado.

 

Sr. Enr�quez.- S�, se�or presidente.

��������� Me pregunto si era necesario este desd�n que han evidenciado por la enfermedad y por la muerte y si era necesario que hoy tuvi�ramos que pedir una preferencia para que el gobierno saque un decreto de necesidad y urgencia.

��������� Las pol�ticas de Estado se hacen entre oficialismo y oposici�n; eso es muy claro. Pero las pol�ticas de Estado tienen que ser acordadas y no generar que nosotros estemos permanentemente pidiendo mociones de preferencia ante la indiferencia de un gobierno absolutamente insensible respecto de los sectores m�s vulnerables de la sociedad.

��������� �En buena hora que salga el decreto de necesidad y urgencia, que espero no sea simplemente el chamuyo al que muchas veces nos han acostumbrado. Esperemos que esta vez sea cierto y que no nos apliquen m�s con prepotencia el n�mero, como hicieron hoy, para despu�s ir corriendo a la Casa Rosada para que saquen el DNU.

��������� �Sabe lo que sucede, se�or presidente�

 

Sr. Presidente (Massa).- Est� dos minutos excedido en su tiempo, se�or diputado.

 

Sr. Enr�quez.- S�, se�or presidente, pero la situaci�n es grave y�

 

Sr. Presidente (Massa).- Lo que sucede es que siempre se me pide que respete el reglamento y ahora�

 

Sr. Enr�quez.- S�, sigamos.

 

Sr. Presidente (Massa).- Sigamos, no; cierre.

 

Sr. Enr�quez.- Sigamos con el cierre.

��������� Para finalizar, se�or presidente, espero que nunca m�s tengan que llevar sobre sus conciencias la infamia que estaban cometiendo hoy al no permitir que se traten estas leyes tan necesarias para los ni�os, ni�as y adolescentes m�s vulnerables.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Zamarbide, por Mendoza.

 

Sr. Zamarbide.- Se�or presidente: voy a ser muy breve. El 31 de diciembre de 2020, la agencia Telam titulaba: �La Argentina se comprometi� a reducir un 26 por ciento las emisiones de gases de efecto invernadero para el 2030.� Esto fue al presentar la segunda contribuci�n determinada a nivel nacional, en la que se establece el aporte que realiza el pa�s para lograr los objetivos internacionales de reducci�n de gases de efecto invernadero del Acuerdo de Par�s; 26 por ciento menos de emisi�n, a lo que ya se hab�a comprometido la Argentina en el a�o 2016.

��������� El presidente de la Naci�n, Alberto Fern�ndez, en dicha oportunidad expres�: �Argentina reafirma su compromiso con el Acuerdo de Par�s a la luz de la ciencia y adopta el cambio clim�tico como pol�tica de Estado.� El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandi�, en esa oportunidad dijo, y cito textualmente: �Esta nueva contribuci�n determinada a nivel nacional es un compromiso de incrementar la ambici�n clim�tica, lo que confirma nuestra firme decisi�n de lograr una transici�n justa hacia un desarrollo integral y sostenible.�

��������� Estamos de acuerdo con todo lo que dicen, pero totalmente en desacuerdo con lo que hacen. Cacarean por un lado, pero ponen los huevos en otro. Disminuir la tasa de biocombustibles en el pa�s es un retroceso grave en materia ambiental, pues va en sentido contrario al objetivo de reducir nuestras emisiones de gases de efecto invernadero y viola el principio de no regresi�n y progresividad de la legislaci�n ambiental. La Ley General del Ambiente ha previsto sabiamente que la transformaci�n hacia una econom�a sostenible debe ser gradual, pero sin retroceder, como s� lo hace este proyecto presentado por el Frente de Todos. Deber�amos estar proponiendo aumentar la tasa de corte de biocombustibles en la Argentina y no reducirla. Eso ser�a coherente y consecuente con los compromisos que el pa�s ya ha asumido de reducci�n de emisiones de gases de efecto invernadero para hacer frente al cambio clim�tico.

��������� Claramente al gobierno esto no le importa; mienten a las organizaciones que trabajan en materia de desarrollo sostenible de la Argentina. Recuerden cuando tuvimos la calamidad de los incendios hace un a�o. �Cu�l fue la soluci�n que propusieron? Modificar la ley de manejo del fuego, como si eso hubiera cambiado en algo la situaci�n.

��������� Creo sinceramente que no somos conscientes de la gravedad del cambio clim�tico y de las implicancias que tiene para el pa�s. Mendoza se queda sin agua; las tormentas son cada vez m�s severas, tenemos inundaciones seguidas de grandes per�odos de sequ�a, enfermedades tropicales en zonas que antes eran templadas, y aumento del fen�meno de isla de calor en las ciudades. Pensemos lo que implica para un pa�s con una base agropecuaria tan importante en su producto bruto interno que tengamos contingencias clim�ticas cada vez m�s severas y frecuentes.

��������� La discusi�n ambiental es ante todo una discusi�n econ�mica. Hay una ola de calor en Canad� que deber�a estar oblig�ndonos a pensar c�mo reducir nuestras emisiones de carbono mientras nos adaptamos al cambio clim�tico que efectivamente ya lleg� y sufrimos. Sin embargo, estamos discutiendo una ley para bajar la participaci�n de biocombustibles y aumentar el consumo de combustibles f�siles en la Argentina.

��������� Por lo expuesto, votar� en contra de esta regresi�n en materia ambiental, y quiero marcar que este no es el camino que debe seguir el pa�s. Estamos ante una emergencia clim�tica sin precedentes y el gobierno deber�a estar pensando en c�mo vamos a enfrentarla, en lugar de proponer soluciones del Siglo XX a problemas del Siglo XXI y retroceder con respecto a los logros ambientales que ya hab�amos conseguido. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Godoy, por Salta.

 

Sr. Godoy.- Se�or presidente: voy a dejar para despu�s la introducci�n que pensaba formular respecto de esta ley. S� quisiera contrarrestar el argumento sobre la regresividad o no progresividad del proyecto y de la sanci�n de una ley de esta naturaleza. Nosotros aprobamos leyes formales. En definitiva, la pr�rroga de la ley vigente, que es del a�o 2006, implica la pr�rroga de los cortes que se establecen en ella y que luego se fueron aumentando, es cierto, mediante diversas resoluciones hasta llegar al 12 por ciento de bioetanol y al 10 por ciento de biodiesel. Definitivamente, una ley que prorrogue la 26.093 lo hace en sentido formal y entonces contin�a con aquellos viejos cortes de 2006.

��������� En cambio, lo positivo de esta norma, sobre todo para la regi�n de la que provengo y para mi provincia, es que estipula que el aumento y la sostenibilidad del corte del 12 por ciento que hoy est� vigente ‑bioetanol 6 por ciento de ca�a y 6 por ciento de ma�z‑ no est� sujeto a resoluci�n.

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Comisi�n de Previsi�n y Seguridad Social, contador Marcelo Pablo Casaretto.

 

Sr. Godoy.- Entonces, me parece que no hay una regresividad normativa en este sentido. Pareciera que lo que estoy diciendo es una cuesti�n t�cnica, pero finalmente no lo es. Aprobamos leyes formales.

��������� Durante el transcurso de las �ltimas d�cadas, diversos pa�ses del mundo han implementado pol�ticas p�blicas para promover el desarrollo de biocombustibles. Este impulso bioenerg�tico se foment� por diversas razones: promoci�n de sectores agr�colas, agregado de valor a la producci�n primaria, generaci�n de puestos de trabajo, fortalecimiento de la exportaci�n y sustituci�n de las importaciones, avanzar en la diversificaci�n energ�tica y cumplir efectivamente ‑como se ha dicho muchas veces‑ con objetivos ambientales tales como la disminuci�n de gases de efecto invernadero.

��������� Se ha destacado mucho la ley 26.093, impulsada en el a�o 2006 por el entonces presidente de la Naci�n N�stor Carlos Kirchner. Una gran ley que estableci� la regulaci�n, pero que, adem�s, en t�rminos progresistas, cre� el mercado de biocombustibles en la Argentina al establecer un corte porcentual obligatorio con los combustibles f�siles e incentivar las inversiones necesarias a trav�s de beneficios promocionales.

��������� Los biocombustibles l�quidos se elaboran con productos agr�colas y forestales ‑ca�a az�car, ma�z‑, y en el Norte ‑en Salta, Tucum�n y Jujuy‑ esta producci�n abarca m�s del 90 por ciento de la producci�n azucarera, es decir, es el cultivo de mayor importancia. Trat�ndose de una econom�a regional, nosotros vamos a acompa�ar esta norma, porque la fortalece, la sostiene y le da previsibilidad ‑tal como dijo un diputado preopinante‑ para los pr�ximos diez a�os, y eventualmente, quince.

��������� Desde la sanci�n de aquella ley se concretaron inversiones por miles de millones de d�lares, con cincuenta plantas industriales localizadas en diez provincias.

��������� El sector de la producci�n de bioetanol de la ca�a de az�car representa decenas de miles de puestos de trabajo en la regi�n del NOA. Estamos hablando de 60.000 puestos de trabajo de manera directa y de m�s de cien mil en forma indirecta.

��������� Adem�s, esta oferta bioenerg�tica ha permitido mejoras en la balanza comercial, sustituyendo importaciones de combustibles f�siles y logrando el ingreso de divisas a partir del biodi�sel.

��������� Desde la perspectiva del cuidado ambiental, el uso de los biocombustibles es un factor importante para la disminuci�n de los gases de efecto invernadero. El cuidado ambiental enmarcado en un desarrollo sostenido es central para reducir los efectos de este cambio clim�tico. En 2019 la Comisi�n Econ�mica para Am�rica Latina y el Caribe, junto con la Organizaci�n de las Naciones Unidas para la Alimentaci�n y la Agricultura y el Instituto Interamericano de Cooperaci�n para la Agricultura, presentaron un informe sobre la agricultura y la ruralidad en las Am�ricas. En �l sostienen que las bioenerg�as y sobre todo los biocombustibles l�quidos, principalmente el bioetanol y el biodi�sel, as� como tambi�n el biog�s, forman una parte importante de la estrategia de descarbonizaci�n que hoy se discute en el marco de aquellos acuerdos que se firmaron. Me refiero al Acuerdo de Par�s y al Protocolo de Kioto. Esto es fundamental para los pa�ses de Latinoam�rica y tambi�n para las provincias productoras.

��������� Como dije antes, a trav�s de este nuevo r�gimen se consolida el corte obligatorio del 2 por ciento por ley y se estipula por la misma v�a �esto no se hab�a hecho- el del 6 por ciento para el bioetanol derivado de la ca�a de az�car. Esto que se ven�a estableciendo por resoluci�n ahora se hace por ley, lo que genera una mayor previsibilidad.

��������� La verdad es que este es un proyecto de ley que apunta a fortalecer las econom�as regionales, con todo lo que eso significa. Se trata, sobre todo, de aquellas econom�as regionales que, como la del NOA, que es la regi�n a la que pertenezco, precisan incentivos, normas, inversiones y pol�ticas p�blicas para sortear de una vez por todas �no me voy a cansar de repetirlo- las grandes desigualdades estructurales e hist�ricas que presentan.�

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el se�or diputado Pati�o, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Pati�o.- Se�or presidente: no iba a hacer uso de la palabra, pero este tema desnuda tres cuestiones recurrentes que deseo mencionar. Quiero hacerlo porque son tan recurrentes que, desde que asum� hace exactamente un a�o, veo que constituyen una matriz de decisi�n en esta Honorable C�mara.

��������� La primera tiene que ver con que cuando legislamos estamos creando una cierta inviabilidad econ�mica por los cambios de las reglas de juego. Es algo que me preocupa porque sin previsibilidad econom�a no hay desarrollo posible. En este caso, estamos cambiando una ley que promovi� inversiones de m�s de 50 empresas por 600 millones de d�lares, poni�ndose en riesgo 30.000 puestos de trabajo.

��������� Estos datos num�ricos que mencion� me llevan a la segunda cuesti�n que quiero plantear. Hoy se suministraron muchas cifras que, si bien son parecidas, difieren entre s�. Aqu� estoy enumerando algunas que son las que pude recabar, pero acabo de escuchar otras y todos mencionamos cifras distintas.

��������� Entonces, vayamos a la segunda cuesti�n, que tiene que ver con el soslayamiento de las opiniones informadas en evidencia y de las que representan a los que recibir�n el impacto negativo de la legislaci�n.

��������� Ac� hubo dos reuniones informativas. A una asistieron funcionarios del Poder Ejecutivo, mientras que a la otra concurrieron empresarios de diferentes c�maras que expresaron algunos de los inconvenientes que deber�n afrontar a partir del momento en que este proyecto se convierta en ley y entre en vigencia.

��������� De manera tal que se podr�a haber prorrogado la ley vigente y tomado m�s tiempo para contar realmente con mayor informaci�n -incluso de car�cter cient�fico-, a fin de saber adecuadamente c�mo son los temas del corte, de la mezcla y del impacto en las condiciones ambientales. Hoy se habl� mucho de esto, pero sucede que no soy un experto en cuestiones ambientales. En consecuencia, me hubiera gustado que vinieran cient�ficos para que nos expliquen c�mo es este tema tan importante que estamos dejando de lado.

��������� La tercera cuesti�n que me preocupa tambi�n tiene que ver con esto, ya que todas van hilvan�ndose. Me refiero a la inconveniencia de un maquillaje ambientalista que veo en esta Honorable C�mara desde el d�a en que asum�. Cuando las empresas incorporan acciones ambientalistas en sus planes de marketing se dice que hacen pol�tica �green washing�. Lo que veo es que de alguna manera nosotros hacemos pol�tica �green washing� cuando un d�a sancionamos una ley de educaci�n ambiental y otro d�a hacemos lo propio con una norma legal como el proyecto en tratamiento, que reduce la producci�n de un combustible renovable y aumenta la producci�n de combustibles f�siles.

Entonces, nosotros estamos teniendo all� un problema. En ese sentido, siempre digo que este proyecto sobre biocombustibles me permite responder a mis hijos -que siempre me lo preguntan- y a muchos j�venes por qu� vot� en contra del proyecto de ley de educaci�n ambiental. Lo hice por esto, es decir, porque se usan consignas ambientalistas para hacer pol�ticas �green washing� y se meten en las escuelas para bajar l�nea obligatoria -y por lo tanto autoritaria-, en lugar de dar el debate y explorar el conocimiento en un marco de libre pensamiento.

Por las razones expuestas, en esta oportunidad mi voto tambi�n ser� por la negativa. Ser� un voto en contra del cambio de las reglas de juego, de dejar de lado la evidencia cient�fica y del disfraz ambientalista que hoy se les cay�.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el se�or diputado Contigiani, por Santa Fe.

 

Sr. Contigiani.- Se�or presidente: tengo un compromiso hist�rico y permanente con el desarrollo de los biocombustibles. Como secretario de Agricultura de mi provincia, primero, y luego como ministro de la Producci�n, he tenido un compromiso estrat�gico con este sector.

��������� Desde ese lugar tengo decir, casi lament�ndolo, que no voy a acompa�ar este proyecto de ley. Se�alo esto m�s all� de que considero algunos aspectos de la ley en t�rminos positivos, mientras que en relaci�n con otros no lo hago de esa forma. �

Creo que el problema estrat�gico del proyecto de ley que estamos debatiendo es que se inscribe en una visi�n general que recorta espacio para los biocombustibles. Esta no es una iniciativa que, con sus elementos positivos que tambi�n voy a nombrar, se inscribe o explaya en el desarrollo de m�s biocombustibles.

Estamos frente a un tema respecto del cual no podemos retroceder. Desde esa experiencia personal hist�rica como militante, no puedo convalidar una reducci�n del 50 por ciento en el corte obligatorio para el biodi�sel.

�������� Tampoco puedo convalidar que se practique un recorte en el caso del bioetanol derivado del ma�z. Cuando se utilizan dos tercios del recorte del piso del 3 por ciento se castiga al bioetanol derivado del ma�z. Del mismo modo, en el caso de la reducci�n del 50 por ciento del corte obligatorio del biodi�sel se puede pasar, a trav�s de la autoridad de aplicaci�n, a un piso del 3 por ciento.

No he encontrado aqu� ning�n argumento s�lido que desde el punto de vista t�cnico me convenciera de las razones por las cuales no se podr�a haber mantenido ‑incluso he hablado de esto con legisladores del oficialismo- el 10 por ciento en el caso del biodi�sel. Inclusive, el 12 por ciento se podr�a haber llevado hasta el 15 por ciento en t�rminos de la producci�n de bioetanol. La producci�n nacional permitir�a perfectamente eso. �

En este punto deseo abrir un par�ntesis y recordar que solo el 3 por ciento del volumen de la producci�n de ma�z se utiliza para la producci�n de biocombustibles. Estoy hablando de una cadena de valor del ma�z donde tenemos casi el 70 por ciento en una exportaci�n que, en t�rminos de grano, es de absoluta primarizaci�n. Es una verdadera irracionalidad ‑no de ahora sino desde hace mucho tiempo‑ que en la Argentina se exporte el ma�z como grano, cuando deber�amos apostar a la industrializaci�n, es decir, a convertirlo en leche, carne y energ�a. Es por eso, se�or presidente, que no encuentro una raz�n t�cnica s�lida para mantener los actuales par�metros de la ley que est� por vencer en t�rminos de desarrollo biotecnol�gico.

��������� As� como se�alo esto, tambi�n debo decir que creo en la honestidad intelectual de quienes trabajaron en el tema, porque hemos conversado, trabajado, debatido e intercambiado ideas al respecto, y que comparto plenamente ‑no me hago cargo de algunas acusaciones que injustamente escuch� aqu� en el recinto‑ el desarrollo organizacional que esta norma plantea, por ejemplo, para el biodi�sel. Me parece que lo profundiza y que es de avanzada. Se trata de apostar al modelo de desarrollo no integrado. �Qu� significa esto? Que aquellas empresas que no se dedican a la exportaci�n y aquellas empresas que no tienen el insumo en s� mismo puedan generar desarrollos industriales diferentes, para abrir las puertas a m�s pymes, a m�s industrias, en sentido federal y a lo largo de todo el pa�s. En concreto, cerrar las puertas a los negocios integrados concentrados, por el lado de las petroleras o por el lado de las exportadoras. Eso est� bien en este proyecto. Comparto esa filosof�a, as� como comparto la filosof�a del art�culo 16. Es de gran importancia que en esta norma que estamos debatiendo, ligada a la producci�n, se mantenga o se ponga el principio desarrollista de sustituci�n de importaciones ‑y as� lo dice‑ de biocombustibles por combustibles f�siles.

��������� Para finalizar, se�or presidente ‑y le agradezco esta extensi�n del t�rmino que dispongo‑, quiero decir lo siguiente. Valoro estas cuestiones positivas que tiene la norma, pero creo que nunca debimos haber retrocedido en los cortes, porque hacen al calentamiento global, a los gases de efecto invernadero, a la lucha contra el cambio clim�tico, a la lucha por el agregado de valor, al desarrollo.

��������� S� que muchos diputados de la bancada oficialista tienen la misma visi�n y el mismo sentimiento. No los voy a juzgar en ese aspecto. Creo que estamos ante un error, injustificadamente, por lo menos en el cap�tulo del corte, y yo no lo puedo convalidar. As� como firm� proyectos de ley para ampliar los cortes y para aumentar el bioetanol o el biodi�sel, me mantengo en esa l�nea y en esa coherencia.

��������� Es por eso que planteo esta posici�n, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el se�or diputado Mart�n, por Santa Fe.

 

Sr. Mart�n.- Se�or presidente: ya varios diputados preopinantes de nuestro interbloque expresaron los motivos por los cuales no podemos acompa�ar este proyecto que impulsa el oficialista. Por un lado, en materia de diversificaci�n de la matriz energ�tica, porque en la Argentina estar�amos incumpliendo compromisos que asumimos internacionalmente para avanzar en energ�as limpias y renovables que reemplacen progresivamente a los combustibles f�siles. Resulta inaudito que se quiera reducir la participaci�n de biocombustibles en los combustibles l�quidos cuando el mundo va justamente en el sentido contrario.

��������� Pero tampoco podemos acompa�ar este proyecto de ley por las consecuencias que trae en materia productiva, ya que va en detrimento del empleo genuino y de calidad en el interior de nuestro pa�s. Conspira claramente contra el arraigo territorial, contra el agregado de valor en origen y contra un vector de desarrollo estrat�gico que tenemos en la Argentina, particularmente en el interior productivo, como lo es la bioeconom�a.

��������� Cabe aclarar que de las treinta y tres plantas productoras de biodi�sel de la Argentina, dieciocho se encuentran en el territorio de mi provincia ‑Santa Fe‑, que representan el 80 por ciento de la capacidad instalada a nivel nacional.

��������� �Es por eso que frente a iniciativas que ponen en riesgo m�s de 8.000 puestos de trabajo ‑directos e indirectos‑ nos preguntamos por qu� ese trato hacia la provincia de Santa Fe. Cuando cierran las exportaciones de carne y se pone en jaque a la producci�n ganadera y a la industria frigor�fica, una actividad que sostiene m�s de 420.000 puestos de trabajo en el pa�s ‑particularmente en el circuito exportador estamos hablando de 100.000 puestos de trabajo, de los cuales 30.000 se encuentran en la provincia de Santa Fe‑, nos encontramos otra vez con el mismo interrogante: �por qu� ese ensa�amiento con Santa Fe?

��������� Cuando se amenaza a los productores de trigo y de ma�z con cambiar las reglas de juegos sobre las retenciones a las exportaciones y, en definitiva, se ponen en riesgo todas las cadenas de valor asociadas a estos cereales, nos preguntamos de nuevo: �por qu� a Santa Fe?

��������� Con eslogan vac�os y consignas que solamente se quedan en la ret�rica se avanza contra la infraestructura y los servicios de la producci�n. Se habla de defender y reivindicar la soberan�a en la hidrov�a cuando en definitiva lo que se esconden son cajas, ineficiencias y mayores costos, particularmente con aquellos que buscan exportar nuestros productos al mundo; parad�jicamente, en un pa�s que tiene una dificultad estructural y un d�ficit recurrente en la balanza comercial, se ponen trabas nuevamente.

��������� Por eso, frente a cada golpe en la producci�n nos preguntamos qu� es lo que hizo mal Santa Fe.

��������� Se�or presidente: yo tengo el orgullo de ser santafesino. En nuestra provincia tenemos muchos problemas, pero son cientos o miles los hombres y mujeres que se levantan todos los d�as para sacar el pa�s adelante, que buscan emprender, innovar, agregar valor, generar riqueza y empleo genuino de calidad.

��������� Humildemente, creo que eso que pasa en Santa Fe todos los d�as es lo que tenemos que potenciar en la Argentina, porque ‑insisto‑ no se trata solamente de Santa Fe. Se trata de la Argentina productiva, esa Argentina que apuesta a la educaci�n como herramienta fundante de la libertad y de la movilidad social ascendente; esa Argentina productiva que cree en la igualdad de oportunidades y que reivindica el m�rito; esa Argentina productiva que se quiere vincular de manera inteligente con el mundo.

��������� Y no pasa solo en Santa Fe, porque hoy mismo, oportunidades que tienen otras econom�as regionales ‑como la acuicultura o la yerba mate‑ tienen problemas similares y se encuentran en otras latitudes.

��������� En definitiva, esa Argentina productiva es un pa�s que necesita cosas bien simples: reglas de juego claras, certidumbre y un Estado que est� buscando acompa�ar y no poner trabas sistem�ticamente al desarrollo y a la prosperidad.

��������� A esa Santa Fe, que puede ser una insignia de la Argentina productiva que podemos tener, se la trata sistem�ticamente con sa�a. Realmente no entendemos por qu�, se�or presidente.

��������� Parece mentira que en una Argentina que no crece desde 2011 y que tiene veinte millones de personas por debajo de la l�nea de la pobreza no pensemos en c�mo crear y sostener el empleo y los puestos de trabajo, sino que impulsemos la agenda inversa. Parece un plan organizado para matar a la gallina de los huevos de oro. La verdad es que es parad�jico.

��������� �Llegamos a esta situaci�n cr�tica porque todos hicimos cosas que nos trajeron a este lugar. Todos tenemos una cuota de responsabilidad. Lo preocupante, se�or presidente, es que se busque profundizar nuestros problemas en vez de intentar resolverlos.

��������� Por eso entiendo que urge, en definitiva, retomar la agenda del crecimiento, del desarrollo equilibrado. Todos tenemos tambi�n esa responsabilidad a futuro, porque se lo debemos a todos esos compatriotas que cayeron por debajo de la l�nea de la pobreza; se lo debemos a los que se quedan en el pa�s y apuestan a sacar a la Argentina adelante; y se lo debemos a esa Argentina din�mica, pujante y productiva que podemos ser.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra la se�ora diputada Lehmann, por Santa Fe.

 

Sra. Lehmann.- Se�or presidente: de la misma forma que mis compa�eros de bancada, voy a votar en contra de este proyecto. Reci�n escuchaba al diputado preopinante hablar de Santa Fe con el mismo orgullo que siento yo por ser santafesina.

��������� �Voy a votar en contra de este proyecto porque est� muy lejos de establecer un r�gimen que fomente los biocombustibles, sino que m�s bien hace todo lo contrario. Como muchos ya han dicho, reduce los cortes especiales del biodi�sel a la mitad ‑de un 10 al 5 por ciento‑ y, peor a�n, habilita al Poder Ejecutivo a poder reducirlos a�n m�s: a un 3 por ciento. Esto va totalmente en contra de la producci�n agr�cola ‑como es costumbre de este gobierno‑ y tambi�n de la ecolog�a. En tal sentido, escuchaba a un diputado preopinante hablar del maquillaje ambientalista. Hace poco tiempo votamos la ley de medio ambiente y hoy votaremos un proyecto que va totalmente en contra y en detrimento del medio ambiente. En lo personal, en alg�n momento tal vez de manera ilusa, pens� que al oficialismo pod�a interesarle este punto.

��������� Se�or presidente: ser� muy breve. Este proyecto, como dec�a, atenta directamente contra las empresas del sector agropecuario, principalmente a las de mi provincia, Santa Fe, en donde se encuentra el 80 por ciento de las productoras de biodi�sel a nivel nacional. Todo esto significa desempleo, que muchas familias se queden sin empleo y que no puedan llevar el pan a su casa.

��������� Adem�s, realmente me parece c�nico hablar de sustituci�n de importaciones cuando la baja del corte del biodi�sel se sustituye directa y �nicamente con el gasoil importado.

��������� Un p�rrafo aparte -y vuelvo al tema medioambiental‑ se merece la cuesti�n ecol�gica. En este sentido, existe una relaci�n directa ya que, mientras mayor es el corte a favor de los biocombustibles, mejor es para el medio ambiente. Entonces, me pregunto por qu� vamos en contra de esto.

��������� Hace unos a�os en la ciudad de Rosario comenz� a funcionar la experiencia de transporte urbano con biodi�sel y realmente funcion� muy bien porque ayud� a reducir el impacto ambiental. �Por qu� estamos yendo en contra de eso? �Por qu� cambiar un sistema que ha sido muy eficiente para el desarrollo de la actividad?

��������� Los expertos en el relato presentan este proyecto como una norma que protege el medio ambiente y a las pymes cuando, en realidad, es todo lo contrario; es un traje hecho a medida de la industria petrolera y tambi�n de la contaminaci�n ambiental.

��������� Quisiera dejar constancia de mi voto negativo porque realmente estoy convencida de que el camino es la pr�rroga de la ley vigente, es trabajar en un proyecto superador y no en este que se propone, que nuevamente atenta contra las empresas del sector agropecuario y en especial, contra las de mi provincia. Por eso, mi voto es negativo. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra la se�ora diputada Mar�a Soledad Carrizo, por C�rdoba.

 

Sra. Carrizo (M.S.).- Se�or presidente: en primer lugar, quiero adelantar mi voto negativo a este proyecto de ley tal como ya lo han hecho mis colegas del interbloque.

��������� En mi opini�n, el gobierno nacional, en un escenario global en el que la situaci�n econ�mica y sanitaria est� crujiendo cada d�a m�s, ha perdido nuevamente la oportunidad de traer tranquilidad a un sector como el de biocombustibles. Claramente nos trajo algo que es el sesgo distintivo este gobierno: la imprevisi�n, la incertidumbre y los cambios permanentes de reglas de juego.

��������� Creo que tendr�an que cambiar el nombre del frente y denominarse �Frente de la Incertidumbre� porque vivimos con la incertidumbre de saber si tendremos vacuna o no, incertidumbre por las reglas de juego, por no saber hacia d�nde va el plan econ�mico; es decir, incertidumbre en todo.

��������� Por eso, se�or presidente, es bochornoso ver que hace siete meses atr�s el Senado sancionaba por unanimidad la pr�rroga de este r�gimen de promoci�n de biocombustibles, resaltando dos extremos: el primero de ellos, la necesidad y la importancia de seguir dando los beneficios impositivos a estas 54 plantas diseminadas en diez provincias de la Argentina; y el segundo, revisar en profundidad el escenario del sector de los biocombustibles para darle nuevamente un impulso.

��������� Sin embargo, en estos siete meses se cambi� radicalmente la propuesta. Nos prometieron que el tema se iba a tratar en sesiones ordinarias y luego el presidente de esta C�mara manifest� que se tratar�a en sesiones extraordinarias, pero no se hizo. Entonces, cuando estaba por vencer, presentaron un proyecto rechazado por el amplio sector de los biocombustibles.

��������� Me pregunto d�nde quedaron los argumentos del gobierno nacional cuyos fundamentos eran que deb�amos llegar a un gran acuerdo entre todos los sectores y, sobre todo, que no deb�amos echar por la borda quince a�os de una pol�tica de Estado nacida con el expresidente N�stor Kirchner.

��������� Sinceramente, no entendemos el esfuerzo que hay detr�s de todo esto, no hay acuerdos, ni una revisi�n ni tampoco una necesidad de estudio �como se plante�‑ porque en siete meses esto no se puede realizar de manera seria.

��������� El sector del biocombustible en la Argentina es nuevo, pero tom� un impulso incre�ble porque somos un pa�s que tiene la materia prima, que produce eficientemente la oleaginosa, pero sobre todo ‑y en esto quiero detenerme‑, es un sector que descentraliz� su producci�n y tiene una caracter�stica que no todos poseen: la federalizaci�n. Es decir, no se concentra en la provincia de Buenos Aires y doy fe de ello porque existen plantas tanto en el Sur de la C�rdoba productiva como en el Norte, donde m�s se necesita la radicaci�n de estas plantas productoras que son modelos de una econom�a circular -como bien lo han se�alado aqu�-, que acompa�an la pol�tica ambiental que hemos suscripto y pretenden borrar con el codo.

��������� Para finalizar, es pat�tico escuchar al se�or presidente de la Naci�n en las videoconferencias en las que habla con los fondos de inversi�n y me permito citarlo textualmente. Dice: �Necesitamos inversi�n extranjera que invierta en trabajo, arriesgue, produzca y gane.�

��������� Me pregunto qui�n va a venir a la Argentina a invertir si todos los d�as estamos cambiando las reglas de juego, si no somos un pa�s serio. �D�nde van a quedar los 550 millones de d�lares que invirti� durante esta d�cada este sector? Tirados.

��������� Se�or presidente: la arbitrariedad y la incertidumbre cuestan caro para los empresarios, para los inversores y para los trabajadores que temen perder sus puestos de trabajo con estos cambios de reglas. Pero preste atenci�n se�or presidente Alberto Fern�ndez �y digo esto para quienes forman parte de este gobierno-, porque detr�s de esta incertidumbre y de este malestar se esconde un grito de disconformidad que se har� o�r en las pr�ximas elecciones. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra la se�ora diputada Fregonese, por Entre R�os.

 

Sra. Fregonese.- Se�or presidente: varios diputados ya comentaron el da�o que generar� la sanci�n de este proyecto de ley a una industria que est� en desarrollo.

��������� Hoy el oficialismo va a votar el cierre de m�s pymes y la p�rdida de miles de puestos de trabajo, como si nuestro pa�s tuviese margen para que cierren m�s empresas y para que haya m�s desempleo. Sin duda, es una decisi�n muy grave, pero la realidad es que no es un hecho aislado y ni siquiera nos sorprende.

��������� El proyecto de ley que hoy estamos discutiendo es un emblema de las contradicciones de un modelo que hace dieciocho meses tiene al pa�s a la deriva.

��������� �Cu�l es la raz�n de ser de los biocombustibles? Diversificar la matriz energ�tica con menor consumo de combustibles f�siles y reducir la emisi�n de gases de efecto invernadero.

��������� La verdad, es que no me explico por qu� este proyecto de ley no tuvo giro a la Comisi�n de Recursos Naturales y Conservaci�n del Ambiente Humano. �Ser� acaso que el oficialismo de la comisi�n decidi� esconder la cabeza como el avestruz y acompa�ar la reducci�n de los cortes y el retroceso en el cuidado ambiental y pasar calladito?

��������� Hace solo nueve meses, el 25 de setiembre pasado, ratificamos en esta C�mara con 240 votos a favor el Acuerdo de Escaz� que hab�a sido firmado oportunamente por el presidente Macri. El miembro informante nos dec�a: �Al aprobar este proyecto se est� recogiendo la bandera levantada por miles de j�venes a lo largo y ancho del pa�s.� �Mi Dios, qu� r�pido que baja la bandera el oficialismo! �Por qu� no invitaron hoy a todos estos j�venes a ver c�mo retrocedemos en materia ambiental?

��������� El Acuerdo de Escaz� nos recuerda el compromiso de lograr el desarrollo en sus tres dimensiones: econ�mica, social y ambiental de forma equilibrada e integrada. En su art�culo 3� inciso c) establece que las partes se comprometen al principio de no regresi�n, esto quiere decir de no ir para atr�s, y al principio de progresividad que quiere decir avanzar en estas medidas. La reducci�n de los cortes en los biocombustibles f�siles es una clara violaci�n a estos principios que son ley.� No pasaron nueve meses que ya violamos el Acuerdo de Escaz�. Es cierto, cada vez vamos a quedarnos m�s solos.

 

-   Ocupa la presidencia el se�or vicepresidente 1� de la Honorable C�mara, doctor Omar De Marchi.

 

Sra. Fregonese.- Sinceramente, espero que todos mis colegas de la Comisi�n de Recursos Naturales y Conservaci�n del Ambiente Humano sean coherentes con el compromiso m�s importante que tiene nuestro pa�s con la conservaci�n del ambiente, que es la reducci�n de gases de efecto invernadero, y no acompa�en la reducci�n de los cortes de biocombustibles. Espero esa coherencia, pero la verdad es que no soy muy optimista.� Tal como dije, este proyecto de ley es una muestra de las contradicciones del relato oficial.

��������� Tal como ocurri� con la hidrov�a y tantos otros temas, el gobierno empieza a discutir los asuntos imprescindibles para el desarrollo con los plazos vencidos. En este caso, no solo con los plazos vencidos, sino que adem�s presenta un proyecto nuevo despu�s de que el Senado votara por unanimidad una pr�rroga de la ley vigente hasta el 31 de diciembre de 2024.

��������� El presidente Fern�ndez alegremente propone incrementar nuestro compromiso de reducci�n de emisiones y en el Congreso el oficialismo hoy vota para aumentarlas. Qu� payasada. La verdad es que la pol�tica ambiental de este gobierno no es otra cosa que t�tulos, slogans y hashtags.

��������� Se modific� la ley de incendios con una propuesta avalada solo por el oficialismo para mantener una fantas�a como los agronegocios y los emprendimientos inmobiliarios.

��������� Tuvimos incendios forestales tr�gicos en Chubut, R�o Negro y La Pampa, y un Estado que no pudo combatirlos debidamente. Es inadmisible y, peor a�n, que solo se haga presente para restringir los derechos de los damnificados.

��������� Sancionamos la Ley Yolanda con 213 votos en esta C�mara, pensando que iba a estar enfocada en la capacitaci�n de temas ambientales. Pero el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible la convirti� en una herramienta ideol�gica que atrasa m�s de 50 a�os. En los lineamientos propuestos por el ministerio, se olvidan de los objetivos de desarrollo sostenible y de toda legislaci�n de presupuestos m�nimos, y proponen una reconceptualizaci�n epistemol�gica contra la econom�a del mercado y supuestos modelos hegem�nicos de posesi�n, les falt� poner la palabra �imperialismo�.

��������� Hoy debemos defender el ambiente en concreto, sosteniendo el compromiso que tiene nuestro pa�s para mitigar el cambio clim�tico; sin embargo, el oficialismo nos propone votar una ley para aumentar las emisiones.

��������� En conclusi�n, y para finalizar, propongo al oficialismo que votemos el dictamen de minor�a que no es otro que la sanci�n parcial que envi� el Senado e impuls� la vicepresidenta. Al menos, muestren unidad entre sus pares y encontremos el tiempo de acordar una ley seria que logre los consensos federales necesarios en un tema tan importante como es el cuidado del ambiente. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada Figueroa, por Salta.

 

Sra. Figueroa.- Se�or presidente: con mucha conformidad y alegr�a votar� este proyecto de ley.

��������� He escuchado atentamente a los colegas, especialmente a los de mi provincia, que mencionaron las zonas donde se produce el biocombustible. En este momento, hablo desde Hip�lito Yrigoyen, departamento de Or�n, la zona donde hay una empresa multinacional que produce biocombustible. Esta producci�n genera un c�rculo virtuoso porque tambi�n se aprovechan los residuos para hacer electricidad y vinaza que se utiliza como abono en las empresas agropecuarias.

��������� No obstante, como represento a los sectores populares porque soy hija de trabajadores del campo, m�s que nada quiero alegrarme por esas mil familias que tendr�n, a trav�s de este proyecto, previsibilidad, sustentabilidad y el marco jur�dico que se enunci� al presentarlo. Esas familias podr�n descansar tranquilas y contentas porque las empresas podr�n sostener y mantener la mano de obra y as� se mantendr� el sustento familiar para desarrollarse y tener calidad de vida. Hablamos de personas que trabajan en la empresa desde hace mucho tiempo.

��������� Sin embargo, hace dos o tres a�os tuvimos otro gobierno. Mi colega habl� desde General G�emes donde se encuentra otra empresa que produce biocombustible en Salta. Me refiero al Ingenio San Isidro que hoy tiene un gran conflicto porque durante 2018 y 2019 hubo m�s de 700 despidos.� Ac� tambi�n durante 2017 y 2018 tuvimos una gran masa de trabajadores despedidos, porque no ten�amos un Estado presente, que regulara, controlara y acompa�ara la producci�n de biocombustible como ocurre desde el a�o pasado. No hemos tenido ning�n despido desde el a�o pasado.

��������� Celebro y me alegro por esos miles de familias trabajadoras que en forma directa trabajan en la producci�n de biocombustible. Pero tambi�n me alegro por las dem�s familias que a su vez, a trav�s de empresas tercerizadas, trabajan en esa actividad tan importante en la zona. Ellos tambi�n tendr�n previsibilidad en su trabajo ya que la ley estar� vigente hasta 2030 con la posibilidad de ser extendida.

��������� Respecto de la sustentabilidad que es tan importante, creo que si bien la producci�n de biocombustible es una de las actividades m�s importantes para la reducci�n del efecto invernadero, tambi�n hay otras maneras de hacerlo. Esto nos permitir� pensar en nuestra matriz energ�tica. Hay otras maneras de contener y frenar el efecto invernadero.

��������� Tenemos much�simo para avanzar. No me cabe la menor duda de que nuestro gobierno y esta C�mara, desde el Frente de Todos y con los otros bloques, pensaremos nuevas maneras de generar empleo y en otro tipo de energ�a amigable con el medio ambiente que cuiden los intereses de la madre tierra que son nuestros propios intereses.

��������� Por otro lado, quiero decirles a los que est�n preocupados porque en este proyecto no se contempla la modificaci�n de los cortes, que hay un p�rrafo en uno de los art�culos que dice que se establecen los mismos cortes de la ley anterior, pero se crea la facultad para elevar o bajar el corte de acuerdo con un momento determinado que sea m�s beneficioso para todo el conjunto de la econom�a. O sea que nos deja la posibilidad de aumentar el corte en la medida que sea necesario y as� se defina. ������������������

��������� Tambi�n tiene como �rgano de aplicaci�n no solamente a la Secretar�a de Energ�a, sino al conjunto de los ministerios que van a acompa�ar la aplicaci�n de este proyecto, y hago alusi�n al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Naci�n y al de Producci�n, as� como a las provincias productoras de biocombustible.

��������� Por lo tanto, creo que este proyecto es bastante completo. Felicito a todo el equipo de autores y adelanto que vamos a acompa�arlo afirmativamente.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- �Tiene la palabra el se�or diputado Giordano, por Buenos Aires.

 

Sr. Giordano.- Se�or presidente: voy a hablar despu�s de la brillante intervenci�n de nuestra compa�era, la diputada M�nica Schlotthauer, sobre el proyecto de ley de biocombustibles que vino precedido por una puja entre las multinacionales del biocombustible ligadas al agronegocio, por un lado, y las petroleras, por otro. Ahora son todas beneficiadas y m�s all� de c�mo est�n compuestas las naftas, el di�sel o bioetanol, los combustibles aumentan.

��������� Nadie lo dijo, pero en el Cronista Comercial sali� una nota �hoy, el d�a que se trata el proyecto de ley de biocombustibles‑, que habr� un aumento otorgado por el gobierno nacional de Alberto Fern�ndez y Cristina Fern�ndez de Kirchner del 21 por ciento, con el compromiso de que no se trasladar� en forma directa al precio del combustible, por las elecciones.

��������� Desde que asumi� el gobierno de Alberto Fern�ndez los combustibles aumentaron diecis�is veces, encabezados por la empresa YPF, de la que el Estado es due�o del 51 por ciento. Es decir, el gobierno empuja a los aumentos y a la inflaci�n en beneficio de estas patronales multinacionales que se quedan con nuestro petr�leo y con el gas.�

��������� En cuanto al tema del biocombustible mucho se ha hablado de las pymes, pero nosotros tenemos registrado otra cosa: los actores privados del negocio del biocombustible, que est�n en las listas mezcladoras y productoras, y del negocio del petr�leo son Cargill, Bunge y Born, Aceitera General Deheza, Molino, Vicentin, Renova, Cofco, Pan American Energy e YPF. Tambi�n se habl� de la hidrov�a. �Claro! Son las multinacionales que usan la denominada Hidrov�a del Paran� como autopista para sacar los alimentos y realizar fuga de capitales, porque est� todo privatizado. Son grandes empresas que, durante quince a�os, desde la ley de 2006 del gobierno peronista-kirchnerista, gozaron de exenciones impositivas por 7.600 millones de d�lares, o sea, se les perdon� 7.600 millones de d�lares mientras que invirtieron 3.000 millones de d�lares, mucho menos de la mitad. La Asociaci�n Argentina de Biocombustibles dice que exportaron por 13.000 millones de d�lares, es decir, un negocio redondo. Y uno escucha decir ��Pobres pymes!�, y que si no tienen la asistencia del Estado se vienen abajo. Argumentan que si no reciben m�s exenciones estatales y subsidios peligran los puestos de trabajo. �Por qu� peligraron los puestos de trabajo de Vicentin? Por una empresa estafadora, saqueadora.

��������� Repudiamos que usen esta ley o la que sea para decir: �Vamos a despedir trabajadores de los ingenios del Norte�. Son patronales explotadoras que despu�s dicen: �Si no me dan el subsidio, me dan la posibilidad de despedir trabajadores�. No, ac� no hay que lamentarse. Los gobernadores deber�an decir que toda empresa que cierre y despida masivamente en medio de la pandemia pase a manos del Estado provincial o nacional. �Qu� ocurre con los gobernadores del peronismo? �No toman esas medidas contra esas grandes empresas?

��������� Por supuesto quiero desmitificar esto de que el biodi�sel no es contaminante. Eso no es cierto, ya que tambi�n genera grandes emisiones de CO2. Primero, el biodi�sel usa alimentos como soja, ma�z y ca�a, y si no, �de d�nde viene la deforestaci�n? El ejemplo m�s emblem�tico es Bolsonaro y la Amazonia, pero en la Argentina, en todas las provincias, los gobernadores del color que sea ‑Frente de Todos o Juntos por el Cambio‑, permiten la deforestaci�n para el agronegocio. Tambi�n hay incendios forestales, la frontera agr�cola, terratenientes, multinacionales, grandes empresarios, y dicen que el biocombustible y Vaca Muerta nos salvan; les comento que no.

��������� Por eso, en un reciente documento ambiental de la Unidad Internacional de Trabajadoras y Trabajadores dec�amos claramente que para frenar el saqueo de los recursos naturales y derrotar la destrucci�n ambiental hay que terminar con la dictadura de las cien multinacionales contaminantes y saqueadoras apa�adas por el gobierno imperialista. Tanto que se habla del partido comunista chino, de la dictadura capitalista china, de Putin en Rusia y de todos los gobiernos.

��������� Se solicita iniciar un urgente plan de transici�n energ�tico ecol�gico que vaya reduciendo el uso del petr�leo y del gas creando empresas estatales con nuevas t�cnicas de producci�n de energ�a, con paneles solares, energ�a e�lica, etc�tera, garantizando que no causen destrucci�n de bosques y que sean autorizados por los pueblos originarios, los sectores populares y las comunidades locales.

��������� Para terminar, les comento que formulamos esto siendo conscientes de que este plan de transici�n energ�tica solo se va a poder llevar adelante combatiendo este sistema capitalista que trae hambre, saqueo y destrucci�n ambiental. Queremos efectivamente un gobierno de las y los trabajadores, y un sistema socialista con una planificaci�n de la econom�a. Reci�n se habl� sobre ese tema: �c�mo es la planificaci�n de la econom�a? Sobre la base de las necesidades del pueblo trabajador. Solo de esa forma se va a combatir el cambio clim�tico y la destrucci�n ambiental.

��������� Por esa salida de fondo vamos a seguir luchando, se�or presidente, desde la Izquierda Socialista y el Frente de Izquierda Unidad.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or Rizzotti, por Jujuy.

 

Sr. Rizzotti.- Se�or presidente: vengo de una provincia en donde la industria azucarera y alcoholera realmente es muy importante.

��������� Como ac� bien dijeron diputados preopinantes, de los veinte ingenios que hay en el pa�s, tres est�n en la provincia de Jujuy, y muchos de los 7.100 productores ca�eros independientes tambi�n est�n en esa provincia. Por otro lado, los tres ingenios que tenemos en la provincia producen bioetanol, y tres pueblos de mi provincia ‑Ledesma, La Esperanza y La Mendieta‑ dependen fundamentalmente de la industria azucarera.

��������� Este proyecto de ley que hoy estamos considerando, y que vamos a apoyar, seguramente no es el ideal, sino que es el posible, el probable y el que mi provincia necesita.

��������� Entend�amos la necesidad de empezar a trabajar frente al vencimiento de la ley 26.093 y es por eso que, con diputados de mi bloque, sobre todo del espacio pol�tico al que pertenezco en la provincia de Jujuy, el a�o pasado presentamos un proyecto bajo el expediente 3.840‑D.-2020, en el que plante�bamos la necesidad de avanzar sobre la pr�rroga de esa ley, pero adem�s en una norma en la que pretend�amos que quedara establecido y claro el incremento en el corte. Pero hoy venimos a tratar la sanci�n de este proyecto de ley, en donde nuevamente est�n claras las asimetr�as regionales, en donde volvemos a debatir las necesidades de unos y otros en nuestras econom�as regionales.

��������� En la provincia de Jujuy necesitamos de esta ley, necesitamos garantizar a nuestros ingenios la posibilidad de crecimiento y desarrollo frente a una industria cuyo producto final es el az�car. Ac� bien se dijo que su precio real ha disminuido. Pero, adem�s, hoy hay una tendencia en las nuevas dietas a la disminuci�n del consumo del az�car, donde la producci�n de bioetanol es una gran alternativa.

��������� Por eso, frente a esta situaci�n, esta ley nos da la posibilidad de seguir en la producci�n en un corte de un 12 por ciento pero, adem�s, seguramente, vamos a seguir trabajando con la autoridad de aplicaci�n para su incremento. Tambi�n debo decir que dentro del marco de esta ley nosotros, los juje�os, venimos planteando que debemos acompa�ar la disminuci�n de las asimetr�as de las regiones. Por eso, entiendo las posiciones de algunos diputados de las provincias del centro, de la Pampa H�meda, en donde la producci�n de bioetanol en base al ma�z es una alternativa, pero debemos recordar que tambi�n est�n en una situaci�n distinta frente a la posibilidad de la venta del producto final, sobre todo, cuando son productos de f�cil exportaci�n o los commodities realmente tienen precios que permiten el desarrollo de esa regi�n.

��������� No venimos a ponernos en beneficio de uno u otro, sino simplemente a defender una situaci�n particular que es la que tiene la provincia de Jujuy en la importancia de la producci�n azucarera. Adem�s, es una provincia en la que el gobierno provincial, con un esfuerzo inmenso, ha logrado en los �ltimos meses disminuir el desempleo; por ejemplo, nuestra Puna ha logrado tener pleno empleo.

��������� Tambi�n quiero resaltar, y con esto voy a finalizar mi exposici�n, cu�l es la lucha frontal que estamos dando en la provincia de Jujuy en relaci�n con el calentamiento global, donde hemos sido capaces de construir la planta solar m�s grande de Sudam�rica ‑la m�s alta del planeta a 4.200 metros sobre el nivel del mar‑; tenemos 600 hect�reas con m�s de un mill�n de paneles solares e inyectamos al interconectado nacional 300 megas, cuando el consumo de la provincia es de 180. Adem�s de eso, hemos inaugurado el s�ptimo pueblo solar y puesto en marcha la primera planta h�brida con capacidad de 2,5 megawatts que funciona con energ�a solar, pero con acumulaci�n en bater�as de litio.

��������� Asimismo, llevamos adelante una pol�tica para terminar con los basurales a cielo abierto a trav�s del programa GIRSU, de gesti�n integral de los residuos s�lidos urbanos, que hasta el a�o 2015 era solo responsabilidad de los municipios y que hoy tambi�n es responsabilidad del gobierno la provincia. Asimismo, creamos los juzgados de medio ambiente; es decir, tenemos un compromiso claro y concreto, que venimos a mostrar respecto de la lucha por el calentamiento global.

��������� Por eso, se�or presidente, como diputado de la provincia de Jujuy, voy a acompa�ar la sanci�n de esta ley que mi provincia y comprovincianos necesitan.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada Ascarate, por Tucum�n.

 

Sra. Ascarate.- Se�or presidente: adelanto mi acompa�amiento con disidencias al dictamen de mayor�a.

��������� La provincia de Tucum�n, que con mucho honor represento en este Congreso, es una tierra que produce limones, soja, ganader�a, leche, metalmec�nica, ar�ndanos; pero su mayor producci�n es la explotaci�n de ca�a de az�car, que es la materia prima para la producci�n de bioetanol, de radical importancia para la industria de los biocombustibles. Por ello, el actual proyecto nos enlaza con el presente, el futuro, el compromiso ambiental y el desarrollo econ�mico.

��������� En las provincias del Norte se produce el ciento por ciento de la producci�n de ca�a de az�car nacional. El proyecto en tratamiento tiene aciertos �muchos‑ y puntos a mejorar, varios. Considero que son subsanables al momento de realizar las consideraciones en particular del articulado.

��������� El dictamen de mayor�a tiene, como fortaleza, la previsibilidad. El art�culo 1� brinda ese horizonte. El proyecto en tratamiento garantiza reglas de funcionamiento hasta el a�o 2030. M�s tiempo es m�s previsibilidad, es m�s seguridad jur�dica, inversiones, empleo y producci�n.

��������� Respecto del corte de biocombustibles, tanto el proyecto en tratamiento como la actual ley en vigencia, establecen un corte del 5 por ciento de biodi�sel para gasoil. El art�culo 9� de la ley establece un porcentaje obligatorio del 12 por ciento de bioetanol en volumen para la nafta e implica un crecimiento del 140 por ciento respecto del corte establecido por la ley 26.093, actualmente en vigencia. Esto brinda certezas para las inversiones en establecimientos de biocombustibles derivados de ca�a de az�car y de ma�z como se ve en el art�culo 12.

��������� En el art�culo 14 se establece claramente la metodolog�a del c�lculo de los precios de los biocombustibles que garantizan una rentabilidad determinada. Se considera muy importante en el art�culo 15 la creaci�n de una comisi�n especial de biocombustibles para el estudio y an�lisis del sector, y la consulta con todos los actores involucrados. Es m�s, tiene una funci�n muy importante: la elaboraci�n del plan estrat�gico para el desarrollo de biocombustibles en la Argentina. Ahora la pregunta es: �por qu� no se hizo antes?

��������� Respecto del art�culo 16 de sustituci�n de importaciones, deseo dejar constancia de que, adem�s del impacto macroecon�mico relacionado con las divisas, no se puede perder de vista la cuesti�n ambiental derivada del uso de biocombustibles.

��������� Es positiva la redacci�n del art�culo 19 que establece un sistema de sanci�n pecuniaria para las infracciones y sanciones, con una actualizaci�n autom�tica mediante el valor de la nafta s�per. �Por qu� es positivo? Porque limita la arbitrariedad de la autoridad de aplicaci�n.

��������� Finalmente, en relaci�n con lo expresado, traigo a colaci�n las disidencias. En primer lugar, hay un margen de discrecionalidad bastante importante, muy visible en el art�culo 3� cuando establece las funciones de la autoridad de aplicaci�n, donde considero que se deben rechazar algunos incisos que permitir�an una amplia discrecionalidad de la autoridad de aplicaci�n. Por ejemplo, dice textualmente: �hacer uso de todos los medios que considere necesarios para el ejercicio de sus funciones de inspecci�n y fiscalizaci�n�, superando ampliamente un margen de discrecionalidad aceptable.

��������� En segundo lugar, el art�culo 4� de la ley establece que se puede considerar biocombustible al bioetanol y al biodi�sel. Llama la atenci�n la exclusi�n del biog�s, pese a que el art�culo 23 de la misma ley considera que el mismo puede ser objeto de reglamentaci�n por parte de la autoridad de aplicaci�n. Sugiero que se modifique dicho art�culo al momento de la votaci�n.

��������� Respecto de los agregados, tambi�n habr�a que considerar a los combustibles de tercera generaci�n, en particular los que provienen de la biomasa de las algas, que es prometedora; sin embargo, se encontrar�a excluida del articulado, tal cual est� propuesto. En este sentido, dejo como aporte ampliar la definici�n legal para considerar tambi�n la producci�n de biocombustibles a partir de microalgas, que formar�a parte de la tercera generaci�n de biocombustibles. Al respecto, hay bastantes investigaciones de desarrollo avanzado en el Conicet.

��������� Por �ltimo, no voy a acompa�ar el art�culo 8�, y me llama la atenci�n que no se mencione en los antecedentes del proyecto un informe que invoque un estudio integral del mercado de biocombustible en la Argentina. Esto hubiera logrado el necesario consenso de los sectores involucrados, que es lo que todos ac� han opinado cuando han hablado de consenso.

��������� Por todo lo expuesto anteriormente, voy a acompa�ar el dictamen de mayor�a, con las disidencias parciales durante la votaci�n en particular del articulado.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Cisneros, por Tucum�n.

 

Sr. Cisneros.- Se�or presidente: como tucumano, obviamente, estoy contento y celebro que estemos tratando esta cuesti�n energ�tica, ambiental y federal.

��������� En lo particular, no conozco ning�n industrial azucarero, ni soy amigo, ni soy lobbista y no conozco a ning�n petrolero. Me interesa y me preocupa el futuro de las fuentes de trabajo que genera esta actividad: 50.000 trabajadores de forma directa y casi 100.0000 de forma indirecta. La sanci�n de esta ley va a llevar tranquilidad y seguridad a estos trabajadores de los distintos ingenios de Tucum�n.

��������� Escuch�, sorprendido, que algunos se quejan de que el nuevo r�gimen beneficia o un sector y que hay arreglos y negociados. Creo que hablan con mala fe, y quiero ser claro y preciso. Reci�n dec�an que cuando uno est� en el recinto tiene libertad de opini�n. Eso es verdad, pero tampoco nos podemos esconder en los fueros o en la libertad de opini�n -que es esa prerrogativa que nos da el hecho de ser diputados de la Naci�n- para decir cualquier cosa y largar cualquier acusaci�n.

��������� Nunca necesit� fueros para denunciar con nombre y apellido. En este recinto, como hay una presunci�n de inocencia, tampoco se dijo nada de que hay tres diputados de la oposici�n que est�n siendo denunciados porque le habr�an retenido el sueldo a sus trabajadores. Entonces, digamos las cosas como son: la pandemia ha beneficiado a la oposici�n. �Saben por qu�? Porque con la pandemia se han podido olvidar de ciertas torpezas que han cometido siendo gobierno.

��������� Preguntan cu�l es plan econ�mico. La pandemia alter� todo. El plan econ�mico seguramente no va a ser el de ajuste que quieren ustedes; no va a ser el de Dujovne; no va a ser el de los bonos a 100 a�os de "Toto" Caputo; no va a ser el ajuste de Sturzenegger.

��������� Cuando se dice que se delegan facultades a la Secretar�a de Energ�a, al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, al Ministerio de Desarrollo Productivo y a las provincias que producen el biocombustible me parece lo m�s sensato. �O acaso Aranguren, cada �vez que ten�a que realizar un aumento en los combustibles hac�a una asamblea o un plebiscito popular?

��������� Entonces, lo que no saben es que en Tucum�n -lo han dicho los diputados de mi provincia- en 1966 se cerraron once ingenios. No los cerr� un gobierno democr�tico, fue la dictadura para quedarse con tierras de peque�o ca�eros. Despu�s, esos ingenios terminaron siendo ‑en la �poca de la dictadura- centros clandestinos de detenci�n. M�s de 250.000 tucumanos tuvieron que venir a poblar las villas del Conurbano Bonaerense.

��������� Me llama la atenci�n que en �pocas electorales mucha gente que va de ac�, del centro del pa�s, a Tucum�n o al norte, se rasga las vestiduras por la pobreza diciendo que hay que hacer algo y que tenemos que ayudar a las provincias del norte con un fondo de reparaci�n hist�rica, pero resulta que cuando podemos ayudar, nos ponemos en contra. Se ponen en contra por una cuesti�n netamente pol�tica, porque es un proyecto del oficialismo y porque se est� dando previsibilidad a una ley. Se est� reivindicando una norma que vot� el peronismo en 2006 durante el gobierno de N�stor Kirchner. Este es proyecto de ley reparador y no quiero entrar a hablar ni de cortes ni de c�mo se maneja.

��������� Voy a votar de forma afirmativa. As� como la pr�rroga tuvo cierta celeridad en el Senado, creo que tambi�n la tendr� ahora y es una forma de hacer justicia social.

��������� Con este proyecto ganan los trabajadores, ganan las econom�as regionales y gana el pa�s. S� se cumplen los tratados ambientales dentro del proyecto. Que queramos ver todos defectos es otra cosa o -como dec�a un diputado preopinante- tal vez no sea la mejor ley, tal vez sea la norma posible en este momento, pero eso no significa que nos olvidemos de un mont�n de cosas que se hicieron en el pasado.

��������� Creo que lo he dicho todo, se�or presidente. Como tucumano que soy con orgullo, mi voto es afirmativo.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Baldassi, por C�rdoba.

 

Sr. Baldassi.- Se�or presidente: en verdad no necesitamos fueros. Todos estamos ac� y los fueros es algo que nos da la C�mara, pero realmente no los necesito.

��������� Para entrar en tema, no me gusta disentir mucho y la diputada Jimena Latorre dio una explicaci�n de porqu� hicimos un dictamen de minor�a dando las razones t�cnicas.

��������� Lo que en un rato va a suceder aqu�, para m�, es de extrema gravedad. �Por qu� lo digo? Porque el oficialismo est� a punto de desechar uno de los escasos consensos que logr� desde el Senado para tener unanimidad en este importante sector que genera empleos, que genera riqueza y que genera divisas.

��������� Creo que preservar este y los dem�s sectores m�s din�micos de la econom�a deber�a ser una raz�n central en la lucha contra el desempleo y la pobreza. Podemos discutir con los motes que quieran ‑de derecha, de izquierda, conservadores, progresista, estatistas‑, pero la realidad se impone ante cualquier calificaci�n. Necesitamos desarrollar la mayor cantidad de actividades productivas que nos permitan la generaci�n de recursos genuinos. �Por qu�? Porque hay una base esencial para la madre de todas las batallas que tenemos que dar los argentinos y las argentinas que es en contra del desempleo, en contra de la pobreza y de la marginalidad.

��������� El sentido com�n, se�or presidente, me indica que el Estado puede ser m�s bondadoso, pero es imposible distribuir lo que no se tiene. Es imposible, salvo que esa distribuci�n sea a trav�s de emisi�n o de inflaci�n, que son condimentos muy esenciales para la pobreza.

��������� La intervenci�n del Estado debe estar orientada a fomentar actividades como la que estamos tratando de los biocombustibles. No se me ocurre hablar de esta manera porque hoy estemos en la oposici�n, sino porque tiene un alto componente de federalismo, tanto en su implicancia en el desarrollo productivo, como en el sostenimiento de pol�ticas de aquellos estados provinciales exentos de beneficios y regal�as.

��������� No est� claro qu� se pretende con este proyecto: si hacer desaparecer a un sector que invirti� mucho en nuestro pa�s, y lo que gener� lo reinvirti� para incorporar nuevas tecnolog�as y mejorar su productividad, o si estamos por empoderar, a�n m�s, a un Estado nacional que avanza de manera sistem�tica sobre los sectores de la producci�n. No est� claro.

��������� Se�or presidente, si cada uno de nosotros pudi�ramos dedicar un par de minutos todos los d�as y mirar a nuestro alrededor, comprender�amos con absoluta claridad que el destino de los que sufren s�lo se puede cambiar con educaci�n, con trabajo, con decencia y con un Estado presente.

��������� El r�gimen de promoci�n de biocombustibles ha sido una pol�tica de Estado exitosa y el Senado de la Naci�n lo demostr� votando en forma un�nime la pr�rroga de esta ley hasta el 31 de diciembre de 2024. Entonces, me pregunto, �cu�l es el motivo por el que hoy vamos a desordenar un marco regulatorio que est� dando certeza y previsibilidad a una industria que desde 2006 viene en crecimiento e invirtiendo permanentemente?

��������� Se�or presidente: tal como se�alaron muchos diputados, el mercado de la industria de los biocombustibles se ha expandido. Hay cincuenta y cuatro plantas industriales distribuidas en diez provincias de la Argentina que invirtieron miles de millones de d�lares.

��������� Casualmente en C�rdoba, ese sector ocupa a aproximadamente 5.000 trabajadores en forma directa e indirecta y agrega valor a la producci�n de granos, especialmente al ma�z.

��������� Realmente estamos preocupados porque si este proyecto del oficialismo prospera, en la provincia de C�rdoba el uso de la capacidad instalada en esta industria caer�a del 77 por ciento alcanzado en 2019 al 41 por ciento. Es cierto, caer�a al 41 por ciento y, en consecuencia, varias empresas cordobesas correr�an el riesgo de cerrar sus puertas.

��������� Creo que todos tenemos que legislar en beneficio de las econom�as regionales, de la protecci�n del medioambiente y de la creaci�n de puestos de trabajo. Sin embargo, no veo reglas claras en el proyecto del oficialismo que faciliten el desarrollo industrial.

��������� Se�or presidente: soy respetuoso de la Constituci�n y entiendo que debemos sancionar leyes que apunten a la prosperidad del pa�s y brinden bienestar a todas las provincias. Por eso, mi postura es bien clara: este proyecto pone fin a la pol�tica de promoci�n y fomento de los biocombustibles y tiene un sesgo absolutamente contrario al progreso.

��������� Para concluir, el sentido com�n me lleva a pensar que el proyecto del oficialismo est� muy de lejos de impulsar una verdadera pol�tica de Estado. Por lo expuesto, adelanto mi voto negativo.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada Dolores Mart�nez, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sra. Mart�nez (D.).- Se�or presidente: la primera pregunta que me hago y traigo a este recinto, porque creo que nos interpela a todos, es c�mo estamos legislando un proyecto de ley que es vital y constituyente de una de las pol�ticas p�blicas m�s importantes si pensamos en la Argentina del futuro, inserta en un mundo que hoy debate la transici�n energ�tica. La verdad es que no lo estamos haciendo muy bien, no solo en lo atinente a los aspectos t�cnicos y reglamentarios, a los cuales luego me voy a referir, sino tambi�n a la perspectiva de dise�o de la pol�tica p�blica.

��������� Es cierto que las leyes en s� mismas no son pol�ticas p�blicas. De todas formas, uno tender�a a pensar que en el seno del Congreso, donde se expresa la m�xima representaci�n popular y federal, se escuchan todas las voces, se analizan las distintas perspectivas, se convoca tanto a los mejores profesionales y expertos como a la propia industria, y se eval�an los resultados de la ley actual, al final se toma un camino. Sin embargo, eso no es lo venimos viviendo durante los �ltimos meses en la C�mara de Diputados ni en la de Senadores, donde se aprob� la pr�rroga del actual r�gimen. Digo esto respetuosamente, sin ir en detrimento de los diputados y diputadas que objetivamente est�n realizando esfuerzos v�lidos para avanzar con este proyecto. Pero la verdad es que los hechos dicen m�s que las palabras y la letra del proyecto de ley que hoy estamos tratando habla incluso m�s que las buenas voluntades.

��������� Desde el aspecto reglamentario, es importante destacar que no se tuvo en cuenta la voluntad expresada por la unanimidad de la C�mara de origen, el Senado de la Naci�n, que vot� la pr�rroga del r�gimen actual. Pero cuando el tratamiento se habilit� en Diputados, como C�mara revisora, directamente se puso en debate otro proyecto. Entonces, autom�ticamente nos transformamos en C�mara de origen. Esto lo marc� muy bien la diputada Cama�o en su observaci�n al orden del d�a. Claro que puede suceder que la C�mara de Diputados no est� de acuerdo mayoritariamente con una iniciativa sancionada por la C�mara alta, pero debe expresarlo y no eludirlo, como lo est� haciendo con este procedimiento. Tampoco puede la C�mara de Diputados no tratar ni poner a la vista otros proyectos en el mismo sentido, entre ellos, el de la diputada Latorre, el del diputado Mestre o el del diputado Rodr�guez. Este accionar nos lleva no solo a legislar de manera antirreglamentaria, sino tambi�n con una mirada much�simo m�s acotada de la que realmente podr�amos tener, porque propuestas hay.

��������� Cabe aclarar que este proyecto tampoco fue girado a la Comisi�n de Recursos Naturales y Conservaci�n del Ambiente Humano y eso constituye otro vicio reglamentario. Esto es altamente llamativo porque esta C�mara viene trabajando la agenda ambiental con un grupo de diputados y diputadas que est�n muy comprometidos con este tema.

��������� Reci�n en la sesi�n de hoy estoy escuchando algunas quejas sobre los hechos acontecidos. Eso me hizo recordar que en este mismo recinto se lleg� a decir que un diputado de Juntos por el Cambio no puede estar a favor del cuidado del ambiente. Parece que eso no le cabe solamente a Juntos por el Cambio porque a pesar de que este proyecto deb�a tratarse en la Comisi�n de Recursos Naturales y Conservaci�n del Ambiente Humano, ello no ocurri�, tal vez porque no quisieron que se analizara desde esa perspectiva.

��������� �Qu� implicancias tiene lo que estoy marcando? Uno podr�a enumerar estas observaciones y pensar que solo tienen que ver con nuestro funcionamiento, con el microclima de la C�mara de Diputados. Pero la verdad es que no es as�, porque siguiendo l�gica de este vicio reglamentario, queda abierto el desenlace de este proyecto que seguramente hoy ser� aprobado y pasar� al Senado de la Naci�n, que si siguiera el mal ejemplo de esta C�mara, podr�a desconocerlo. Entonces, estos vicios no hacen m�s que describir el escenario actual de la Argentina que naufraga en la incertidumbre.

��������� La situaci�n puntual de los biocombustibles es un s�ntoma m�s de un contexto que tambi�n se presenta en la hidrov�a, en la econom�a del conocimiento y en las permanentes modificaciones de regulaci�n que publica el Banco Central de la Rep�blica Argentina. Lamentablemente, esto tambi�n describe las inconsistencias de un gobierno que no encuentra el rumbo: hay dos propuestas distintas del partido de gobierno para generar un r�gimen de biocombustible que a�n tiene final abierto.

��������� Por �ltimo, se�or presidente, no puedo dejar de referirme a la delegaci�n de facultades en la autoridad de aplicaci�n, que realmente contar� con superpoderes. Entiendo que no est� mal delegar facultades, a�n m�s si se trata de darle herramientas al Poder Ejecutivo para que sea din�mico; lo que est� mal es la superdelegaci�n.

��������� En este recinto se habla permanentemente del rol del Estado; ello est� muy bien porque queremos un Estado inteligente y protagonista en materia energ�tica, pero no un Estado paternalista, centralista y discrecional. No creo que ese sea el camino.

��������� A pesar de las marchas y contramarchas, y de las crisis recurrentes que atraviesa la Argentina, el sector ven�a avanzando y hoy tenemos la oportunidad de mejorarlo. Espero equivocarme, pero me parece que lamentablemente esta es una nueva oportunidad perdida.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Cano, por Tucum�n.

 

Sr. Cano.- Se�or presidente: acerca de los temas puestos en consideraci�n, y particularmente del proyecto de ley que estamos debatiendo, creo que todos tenemos que hacer el ejercicio de ser prudentes y no calificar el sentido en el que cada de uno votar� la iniciativa.

��������� Debemos ser intelectualmente honestos. Digo esto porque vengo de una provincia donde la actividad azucarera genera miles de puestos de trabajo. Particularmente, en el caso de la industria azucarera, la producci�n de bioetanol es fundamental para el sustento de esa actividad. De hecho, mi provincia produce el 60 por ciento del alcohol de ca�a que se mezcla con la nafta.

��������� Por otro lado, cuando uno escucha la fundamentaci�n a la pr�rroga de la ley de biocombustibles, aprobada pr�cticamente por unanimidad en el Senado, y se da cuenta de que cuando la iniciativa llega a la C�mara de Diputados el oficialismo cambia absolutamente de posici�n, es porque hay tensi�n y distintas miradas en el gobierno.

 

��������� Tambi�n debo decirlo, me parece que quienes formamos parte de Juntos por el Cambio tal vez nos tenemos que hacer cargo. En particular, cuando �ramos gobierno, yo fui quien ‑entre otros diputados‑ present� la pr�rroga de la actual ley de biocombustibles, y no tuvimos �xito. Es decir, nuestro gobierno ten�a la posibilidad de hacerlo, y no lo hizo. Respecto de la manera en que se fijaba el precio del bioetanol, modificamos tres veces la f�rmula, situaci�n que cuando formaba parte del gobierno discut� con funcionarios del �rea pertinente.

��������� Ac� he escuchado argumentaciones ‑en algunos casos, sin ning�n sustento‑ en el sentido de que cuando asumimos en 2015 la actividad sucroalcoholera estaba quebrada. Esto no es relato, y lo digo desde el lugar en que estoy hablando. Solamente hay que analizar cuanto val�a la bolsa de az�car en 2015, que ten�a el precio de 2010.

��������� Cuando se tom� la decisi�n de aumentar el corte de bioetanol en nafta en casi 140 millones de litros, fue una dura lucha dentro del gobierno, porque hab�a un sector que pretend�a que el 1 por ciento fuera al ma�z y el otro 1 por ciento a la ca�a. Eso no resolv�a el problema del sector sucroalcoholero, porque el alcohol de ma�z que se mezclaba en nafta ten�a una matriz de producci�n compuesta por 60 por ciento de alcohol de ma�z y 40 por ciento de ca�a. Ah� se equipar� la matriz productiva del bioetanol y llegamos al 12 por ciento, lo que signific� para provincias como Tucum�n ‑por lo menos, en los dos primeros a�os‑, inversiones y otorgamiento de cupo a los ingenios que no lo ten�an.

��������� El federalismo no es un colectivo de ida, sino que es de ida y vuelta. Si en esta sesi�n estuvi�ramos tratando una ley que beneficie al sector del bioetanol de ma�z o el biocombustible de soja, seguramente estar�amos diciendo cosas distintas. La ley que se aprob� en la gesti�n de N�stor Kirchner fue una muy buena norma que hizo avanzar, modificar y reemplazar combustibles f�siles por biocombustibles, lo cual signific� m�s de 3.000 millones de d�lares de inversi�n y sustituci�n de importaciones para la Argentina. Solamente en los tres �ltimos a�os, el promedio de la exportaci�n de biodi�sel rond� los 1.100 millones de d�lares. Tengo que reconocer que probablemente la mejor opci�n hubiese sido la pr�rroga de la ley y debatir sensatamente la norma vigente, porque inclusive los exsecretarios de Energ�a de la Naci�n plantearon en un documento que la ley tambi�n requer�a modificaciones despu�s de casi quince a�os de ser puesta en vigencia.

��������� Dicho esto, se�or presidente, y para terminar, quiero fundamentar por qu� vamos a acompa�ar en general, como dijo la diputada Asc�rate, aunque en el tratamiento en particular no vamos a votar afirmativamente el art�culo 8�. Nosotros vivimos en una provincia que tiene quince ingenios azucareros que, de manera directa o indirecta, generan m�s de cien mil puestos de trabajo y que aporta la mitad del bioetanol que se mezcla en nafta.

��������� La actividad sucroalcoholera se sustenta en la producci�n de bioetanol. Hablamos con el presidente del Centro Azucarero Argentino, con la Uni�n Industrial de Tucum�n y con los gremios que representan a trabajadores, quienes nos dieron los nueve puntos que las provincias de Salta, Tucum�n y Jujuy plantearon al gobierno y al Congreso. Ellos han sido receptados e incorporados en este proyecto de ley.

��������� Por lo expuesto, como tucumano, voy a votar favorablemente, y espero que en el sustento del art�culo 15, donde se crea la Comisi�n Especial de Biocombustibles, encontremos un �mbito para retomar un camino de pol�tica p�blica que no est� atado a los vaivenes de los cambios de gobierno, para que la Argentina pueda seguir construyendo futuro desarrollando los biocombustibles.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Mart�nez, por Santa Fe.

 

Sr. Mart�nez.- Se�or presidente: valoro mucho la intervenci�n anterior, porque nos permite ir entrando en este tramo del debate con una evaluaci�n m�s razonable del tiempo en que estuvo en vigencia la ley de biocombustibles de 2006.

��������� Las pol�ticas p�blicas no son lechos de rosas. Hay momentos donde las cosas salen bien, hay momentos donde las cosas se complican, y hay momentos donde se requieren ajustes y modificaciones. Pensar que las pol�ticas p�blicas son siempre un camino ascendente, donde vamos siempre creciendo y mejorando, es un error. En ese sentido, la opini�n del diputado preopinante nos ubica en ese lugar.

��������� Quiero decir tres cosas, e intentar� ser breve. En primer lugar, desmitifiquemos el consenso de 2006. M�s all� de que la votaci�n fue contundente, el debate fue muy �spero. Hab�a muchos diputados en contra de lo que termin� siendo la ley 26.093, y se expres� de dos maneras: los que no vinieron al recinto, y los que vinieron al recinto y se abstuvieron. El principal vocero de oposici�n a ese texto dijo: �Nuestra bancada se va a abstener en la votaci�n de este proyecto. Apoyar este despacho significa, contrariamente a lo que se ha dicho en este recinto, desalentar lisa y llanamente el desarrollo de esta industria.� Tambi�n dijo sobre el final: �La falla grave de procedimiento y la discrecionalidad que hemos apuntado y la delegaci�n inexplicable de facultades constituyen un c�ctel espectacular que genera las peores condiciones para la inversi�n privada de riesgo, en un clima de negocio favorable para el desarrollo de este subsector de la econom�a que tanto est� reclamando y necesitando un marco legal que lo ampare.�

��������� No es casual que Oscar Aguad ‑diputado importante‑ estuviera ausente. No nombro a los que est�n ac�, porque, si no, me van a pedir derecho a r�plica, aparte usted hace un uso extensivo de ese derecho. Mauricio Macri, diputado, ausente; Federico Pinedo, abstenci�n; �ngel Rozas �quiz�s en ese momento el dirigente provincial m�s importante de la UCR‑, ausente. Paro de nombrar porque, si no, me van a pedir r�plica.

��������� Por lo tanto, el consenso de 2006 no era tal, y hoy tenemos una especie de consenso sobre la ley 26.093 que en aquel momento no exist�a. Bienvenido sea, pues habla muy bien del camino recorrido.

��������� Segundo, desmitifiquemos que esto fue una pol�tica de Estado sostenida todo el tiempo, porque hubo muchos problemas, como se�al� el diputado preopinante. Hubo momentos donde todo creci� y hubo momentos muy complicados. Esto se dijo claramente. Ni bien el presidente Macri gan� la elecci�n intermedia de octubre de 2017, empez� a modificar la f�rmula del precio del etanol, y en 2019 profundiz� lo mismo respecto del biodi�sel. Eso gener� much�simas dificultades.

��������� La resoluci�n del etanol fue la 415. Los diarios titulaban: �Productores de biodi�sel molestos por el cambio de f�rmula y la situaci�n del sector�, en abril del 2019. Gustavo Lopetegui, un jugador importante que no se nombr� hoy, dijo: �Los biocombustibles son un costo fiscal.� El secretario de Energ�a asegur� en C�rdoba -no en cualquier provincia- lo siguiente: �Es el costo tributario para una Naci�n que est� quebrada�. Lopetegui consider� que el biocombustible deber�a moverse en un escenario de libre competencia. �Me gustar�a no tener que fijar nunca el precio del combustible�. �No me gusta nada de eso; me encantar�a no tener nunca que poner cu�l es el precio del etanol de az�car, o de ca�a y el biodi�sel. Que lo diga el mercado y que as� se oriente.�

��������� No creo que sea un medio kirchnerista el suplemento Campo de La Naci�n, que el 3 de septiembre de 2019 titulaba �Biocombustibles con plantas paradas y despidos� y dec�a: �Este mes no se cumplir� el cupo para la nafta.�

��������� Se arm� tal l�o que ya no quer�an hablar m�s con Lopetegui; empezaron hablar con el ministro Frigerio. No encontraron respuesta y los n�meros eran contundentes. Macri anuncia la renovaci�n de la ley en biocombustible en Tucum�n d�as antes de elecciones. Fue el 8 de octubre de 2019. Pero lo salen a cruzar las c�maras y los diarios titulan: �Biocombustibles: rechazan una promesa de Macri y piden avanzar con una nueva ley�. �Qui�nes estaban ah�? Las grandes empresas productoras de biocombustibles. En ese momento, rechazaron la pr�rroga que propon�a el presidente Macri. En el mismo texto se se�ala lo siguiente: �Adem�s, la Liga Bioenerg�tica�� ‑que ac� se mencion�‑ ��que integran las provincias de Santa Fe, Tucum�n, Salta, Jujuy, Santiago del Estero, C�rdoba, Entre R�os y Buenos Aires se mostr� en favor de sancionar una nueva normativa��. Hubo un jugador muy importante en ese momento, Luis Zubizarreta, el presidente de CARBIO, es decir, la C�mara Argentina de Biocombustibles, quien expres� lo siguiente: �Se gener� un mercado de no competencia. Es un desprop�sito prorrogar la ley de 2006 cuando funcion� mal�. La secretaria de Energ�a de mi provincia opinaba lo mismo. Esta es la situaci�n y as� llegamos al 2019, se�or presidente.

��������� �Qu� es lo que estoy queriendo significar con esto? Me parece que estamos hablando mucho del corte y es llamativo que ac� no se habl� del precio. �Por qu� no se habla de precio? Porque vos pod�s tener mucho corte y si no le das el precio correspondiente, la ecuaci�n econ�mica y financiera a las empresas no les cierra, ni a la de etanol ni a la de biodiesel. No les cierra de ninguna manera. Entonces, nosotros necesitamos que las dos cosas vayan juntas.

��������� Por eso es falso que ac� estamos retrocediendo en el porcentaje de corte respecto a la ley 26.093. Tenemos el mismo 5 por ciento para el biodiesel, mejoramos el de etanol; no hab�a un piso para que la autoridad de aplicaci�n baje el corte en biodiesel. En este caso, nosotros estamos estableciendo un 3 por ciento. Y me parece que eso, junto a otros elementos que se marcaron aqu�, son claramente importantes. Hablemos de corte, pero tambi�n de precios porque, de lo contrario, no rinde la ecuaci�n.

��������� Me parece que necesitamos salir de las falsas dicotom�as. En la Argentina necesitamos combustibles f�siles tradicionales y biocombustibles. Necesitamos que les vaya bien a las provincias petroleras y tambi�n a los que producen biocombustible. Es importante que tengamos grandes empresas que puedan ocupar un rol en el escenario internacional, pero tambi�n que tengamos un entramado pyme protegido a lo largo y ancho de todo el pa�s.

��������� La Argentina nos necesita a todos y todas en armon�a. Ya que hoy estuvimos recordando al general Per�n, me parece que tenemos que seguir avanzando todo en su justa medida y armoniosamente. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado De Lamadrid, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. De Lamadrid.- Se�or presidente: una vez m�s el gobierno presenta como conveniente y necesario un proyecto de ley que esconde otro inter�s. Estamos acostumbrados a esta estrategia de esconder el verdadero inter�s oculto, no declarado, detr�s de lo que parece aparente.

��������� Creyeron que la pandemia les iba a permitir acelerar y profundizar sus planes de demolici�n institucional y poder hegem�nico, pero afortunadamente esta coyuntura solo sirvi� para denunciar sus verdaderas intenciones. Por eso se�alo esto del inter�s oculto, no declarado en los proyectos de ley. El kirchnerismo es como una Mamushka: uno cree conocerle la intenci�n, pero siempre hay una detr�s de lo aparente. Esto lo denunciamos hace 16 meses. Y hay muchos casos de esto que se�alo. Antes de entrar a hablar del tema del biocombustible los voy a mencionar.

��������� Cuando no hab�a pandemia vinieron con la ley de emergencia econ�mica para quitarle facultades al Congreso y llevarse los superpoderes. Dec�an que iban a restaurar el pa�s con la emergencia econ�mica. La usaron para la discrecionalidad y para bajarles dos veces en el a�o los haberes a los jubilados con un ajuste brutal.

��������� Vino la reforma judicial. Dijeron que iban a terminar con los privilegios; hicieron una cruzada contra los privilegios. �Macana! Buscaban vacantes para tomar por asalto la Justicia.

��������� Vino la moratoria, una moratoria para todos los argentinos. �Macana! Fue un traje a medida para que Crist�bal L�pez no vaya preso, con el fin de que devuelva lo que deb�a, en cuotas, con intereses y si quer�a.

��������� Vino la ley de vacunas y nos dijeron que era imprescindible que se votara una ley para que lleguen las vacunas. Despu�s nos enteramos que era una ley para que no llegaran las vacunas de Pfizer. Era una ley de bloqueo de las vacunas de la democracia y una pavimentaci�n para que llegaran las de las dictaduras y de la autocracia.

��������� Este gobierno demostr� que en lugar de ver a las vacunas como la soluci�n a una crisis sanitaria las pretende usar como una vacuna pol�tica, ideol�gica y electoral.

��������� Vino el presupuesto y nos dijeron que hab�a un plan important�simo de obras para todos los argentinos, pero escond�a art�culos fantasmas para beneficiar a Edenor, para lotearse y jibarizar las partidas presupuestarias para los distintos espacios de poder. No contentos con eso vino el impuesto a la riqueza y el diputado Kirchner nos dec�a que eran fondos para paliar la crisis sanitaria. �Macana! Era la generaci�n de una nueva caja confiscatoria por �nica vez y ahora nos enteramos que la van a prorrogar.

��������� Y vienen los superpoderes con la excusa de la segunda ola. En verdad, buscaban desobedecer a la Corte para avasallar la autonom�a de CABA e intentar, de todos modos, cerrar las escuelas.

��������� Y vino la postergaci�n de las PASO. Nos dec�an que era para que una mayor cantidad de argentinos estuvieran vacunados. �Macana! Era para ganar tiempo y para evitar una situaci�n de derrota electoral.

��������� Y nos hablan de lenguaje inclusivo y recientemente -hace minutos- le acaban de impedir la posibilidad de vacunarse a m�s de cien mil ni�os con enfermedades de base.

��������� Hoy, bajo la excusa de una mejor ley de biocombustibles se ataca una industria que vale m�s que YPF, que tiene inversiones de 3.000 millones de d�lares, que les da fuentes de trabajo a much�simos argentinos y desarrolla las econom�as regionales. Otra idea del diputado Kirchner, el mentor de esta ley de biocombustibles. En realidad, es un ataque a los biocombustibles, a favor de los refinadores de petr�leo, los empresarios, los amigos y los testaferros del poder que buscan menguar y frenar el desarrollo de los biocombustibles y, al igual que el impuesto a la riqueza, intentan que vaya a financiar la fracasada petrolera YPF.

��������� Se�or presidente: vamos a contramano del mundo. El gobierno le exige al sector de los biocombustibles que financie a la industria contaminante. Las peque�as y medianas empresas que producen biocombustible est�n cerrando sus puertas, est�n despidiendo a los trabajadores, tuvieron diez meses de congelamiento de precios, un aumento del 35 por ciento del valor de su materia prima desde enero del 2020.

��������� Y como si fuera poco lo que acabo de decir, el presidente de la Naci�n se infla el pecho y muda la Secretar�a de Energ�a a la provincia del Neuqu�n, en una se�al contundente de sus malas medidas, de sus malas pol�ticas, para abrazarse a las cajas petroleras asociadas al poder y hacer ping�es negocios.

��������� Si el se�or presidente est� escuchando le pido que deje de histeriquear y que gobierne; tiene al enemigo en el espejo. Cuando se mira en el espejo la ve a la vicepresidente. Esto no se resuelve rompiendo los espejos. Se resuelve cambiando de actitud. El mundo est� abandonando al petr�leo como fuente de energ�a. Nosotros somos el �nico pa�s del mundo que no potencia ni ayuda al sector m�s eficiente y din�mico de su econom�a. En nuestro caso, el de los argentinos, es el de la agroindustria.

��������� No voy a acompa�ar este proyecto porque el gobierno vive sacrificando oportunidades de desarrollo, de inversiones y de desarrollo federal a costa de los negociados para los amigos del poder y del saqueo de las cajas. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada Lena, por Entre R�os.

 

Sra. Lena.- Se�or presidente: el marco regulatorio de los biocombustibles en nuestro pa�s debe tratarse con mucho cuidado, con much�sima responsabilidad, por la importancia que tiene no solo en la pol�tica energ�tica sino tambi�n agropecuaria, industrial, ambiental y de comercio exterior. Nuestro pa�s goza de amplias condiciones para el desarrollo arm�nico de un pr�spero sector de biocombustibles, que debe ser acompa�ado de pol�ticas p�blicas sensatas, en el marco de amplios acuerdos que otorguen una previsibilidad y una continuidad en las grandes l�neas estrat�gicas.

��������� En primer lugar, creo necesario reiterar la relevancia de la inserci�n de los biocombustibles en la matriz energ�tica nacional, que aportan el 4 por ciento de la energ�a primaria. El impacto positivo del sector en el balance comercial, con las exportaciones que promedian alrededor de 960 millones de d�lares en los �ltimos tres a�os, hizo una contribuci�n para mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero que permitir�n reducir para el a�o 2030 hasta casi un 6 por ciento de las emisiones comprometidas por la Argentina ante la comunidad internacional.

��������� El proyecto que estamos tratando modifica, sin ninguna fundamentaci�n t�cnica ni ambiental, los niveles de corte para el biodiesel. Y si bien mantiene los niveles para el bioetanol, permite compensaciones que son totalmente discrecionales entre el bioetanol de ma�z y el de ca�a de az�car. Al mismo tiempo, tambi�n permite a la Secretar�a de Energ�a como autoridad de aplicaci�n, actuando de una manera unilateral, arbitraria, modificar todos los niveles de corte, fijar y asignar cupos, regular precios, rentabilidades, cuestiones que, sin ning�n marco de referencia y objetivos claros, atentan sobre todo contra la certidumbre y la seguridad jur�dica necesarias para garantizar las inversiones, y est� en contra de todo tipo de competitividad del sector.

��������� En segundo t�rmino, debemos tambi�n considerar lo que han expresado sobre este tema las c�maras de biocombustibles, que advirtieron claramente que este proyecto pone a nuestro pa�s frente un riesgo inminente de cierre de empresas, la p�rdida de miles de puestos de trabajo y un grav�simo impacto ambiental, en abierta contradicci�n con nuestra Constituci�n Nacional y con nuestros compromisos internacionales.

��������� Sin duda, estamos en presencia de otra iniciativa a las que el Frente de Todos nos tiene acostumbrados. Detr�s de la buena intenci�n, encontramos un l�mite a nuestros derechos o a nuestras libertades, la suspensi�n de nuestros derechos, el otorgamiento de mayores poderes o alg�n negocio para algunas empresas amigas.

��������� En este sentido, la sanci�n de este proyecto determinar� una importante p�rdida del uso de los biocombustibles, un aumento equivalente tambi�n al uso de los derivados del petr�leo, y provocar� el cierre de plantas y la p�rdida de al menos 1.500 puestos de trabajo genuinos y federales, en un pa�s donde no nos podemos dar el lujo de perder ning�n empleo.

��������� Por todo lo expuesto, considero que debemos aprobar el dictamen de la minor�a, que propone prorrogar el r�gimen creado por la ley 26.093 hasta el 31 de diciembre de 2024 y, adem�s, avanzar en el debate de una ley que lo sustituya, pero un debate que debe contar con la participaci�n de todos y no solamente para el beneficio de algunas empresas.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra la se�ora diputada Austin, por C�rdoba.

 

Sra. Austin.- Se�or presidente: he escuchado con atenci�n gran parte de los discursos que durante el d�a de hoy se han vertido en el recinto, y no puedo menos que estar azorada por algunas de las contradicciones evidentes en las argumentaciones.

��������� En primer lugar, cuando hablamos del desarrollo sostenible y de ese triple equilibrio que tiene que ver con lo ambiental, lo social y lo econ�mico, los biocombustibles son un buen ejemplo para nombrar. Son un sector que le ha permitido a la Argentina en estos quince a�os desarrollar efectivamente una industria potente, produciendo y generando puestos de trabajo en distintos rincones del pa�s de manera federal, diversificada, agregando valor a lo que producimos en el campo y, adem�s, contribuyendo a la reducci�n de las emisiones de gases de efecto invernadero. Claramente, un sector al que nuestro pa�s ten�a que seguir apostando.

��������� Hoy estamos en el recinto haciendo exactamente lo contrario. Despu�s de ‑algo que ya se dijo‑ enormes contradicciones del oficialismo, idas y vueltas, un cambio de estrategia de lo que hab�an hecho en el Senado, incertidumbre para el sector, estamos por sancionar una norma que claramente va a perjudicar a los biocombustibles en la Argentina.

��������� Obviamente, el argumento central que se ha escuchado hasta el cansancio tiene que ver con el porcentaje de corte. Bajar el corte no solo tiene que ver con lo ambiental �cuesti�n a la que voy a hacer referencia‑ sino tambi�n con afectar la generaci�n de empleo.

��������� Solo en C�rdoba ‑muchos lo han se�alado‑, el bioetanol de ma�z es una de las actividades clave que se llevan adelante desde nuestra provincia. Se sostiene que de aprobarse esta iniciativa tal como el oficialismo lo est� proponiendo, la capacidad instalada de la industria bajar� del 77 por ciento, valor en el que estaba en 2019, a cerca del 40 por ciento. Eso se traduce claramente en p�rdida de puestos de empleo. Se traduce tambi�n, entre aquellas que logren sobrevivir, en discusiones sobre su estructura de costos para ver cu�nto m�s aguantan en el mercado.

��������� La otra caracter�stica que tiene esta norma es la de la arbitrariedad, la discrecionalidad, en un mont�n de facultades que terminan quedando en manos de un Ejecutivo que ya no puede m�s de todas las facultades que le ha sacado al Congreso: arbitrariedad en el manejo de los porcentajes de corte, en el manejo de los cupos, indudablemente, poniendo una restricci�n para el crecimiento. Pero lo m�s grave tiene que ver, a mi juicio, con el retroceso en materia ambiental. Varios lo han se�alado, pero vale la pena que nos refiramos a ello.

��������� La Argentina, como muchos pa�ses del mundo, asumi� un compromiso cuando suscribi� el Acuerdo de Par�s y cuando recientemente presentaba las contribuciones determinadas a nivel nacional. El propio documento del oficialismo de la actual gesti�n inclu�a el uso de los biocombustibles dentro de las estrategias que iban a usar para llevar adelante en materia de transporte. �Qu� hicieron? Lo contrario. En vez de bregar por el crecimiento del sector, proponen bajar el porcentaje de corte, que adem�s de pagarse en p�rdidas de empleo se paga tambi�n en el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero.

��������� A los diputados que est�n ac� sosteniendo ‑no s� de qu� manera porque argumentalmente es incomprensible‑ que no se viola el principio de progresividad y de no regresividad en materia ambiental, los invito a que me digan c�mo de un porcentaje de corte, en el caso del biodiesel, que hoy est� en el 12 por ciento, a un proyecto de ley que cuando se apruebe bajar� al 5 por ciento, d�ndole facultades para llegar al 3 por ciento, c�mo no se est� violando este principio de progresividad. No pueden pretender compararlo con quince a�os atr�s. Tienen el deber �tico, moral y jur�dico de compararlo con el estado de cosas al d�a de hoy.

��������� En segundo lugar, el bioetanol de ma�z, claramente el gran perjudicado tambi�n en la distribuci�n de bioetanol, esta incertidumbre de la baja eventual en tres puntos, indudablemente, va a golpear fuertemente al sector.

��������� Reci�n me refer�a a la estrategia contradictoria que ha llevado adelante el gobierno. El presidente dijo en el recinto el 1� de marzo: �El futuro ser� verde o no ser�. Pero simult�neamente, anunciaba que iba a llevar adelante una estrategia vinculada con la apuesta a los hidrocarburos.

��������� El mundo el a�o pasado, entre tantas cosas que ocurrieron, lleg� a algunos consensos. La Organizaci�n Mundial de la Salud celebr� un acuerdo que llam� el Manifiesto a favor de una recuperaci�n saludable, donde pon�a el acento en que necesitamos empezar la nueva normalidad de una mejor manera.

��������� Siete millones de defunciones al a�o por enfermedades que devienen de la contaminaci�n del aire. Una de las recomendaciones que hac�a la Organizaci�n Mundial de la Salud junto con un mont�n de expertos era pedirles a los pa�ses que dejen de financiar y de subsidiar los combustibles f�siles y, por el contrario, aceleren la transici�n y el cambio a las energ�as renovables.

��������� �Qu� hizo la Argentina en ese tiempo? Lo contrario: aument� el subsidio a los combustibles f�siles. Por ejemplo, entre otras cosas, cuando aprob�bamos la Ley del Impuesto a la Riqueza, el 25 por ciento iba al fracking, por ejemplo, en iniciativas que tuvieran que ver con la fijaci�n de un precio al barril de petr�leo. Se trata de todas estrategias de subsidios directos e indirectos a un sector espec�fico que el mundo est� tratando de dejar atr�s.

��������� Por �ltimo, un diputado habl� del seguimiento de los datos, de la evidencia cient�fica. Hay un conjunto de especialistas que vienen siguiendo las metas de los pa�ses en materia del Acuerdo de Par�s, en una escala de seis estadios para ver cu�les pa�ses est�n cumpliendo; cu�les, con las acciones que llevan adelante, van a permitir que lleguemos al 2030 con 1.5 grados y cu�les a 2 grados; cu�les est�n incumpliendo; cu�les est�n en una situaci�n cr�ticamente insuficiente.

��������� All� est� la Argentina, en el �ltimo lugar, donde si todo el mundo se comportara de la misma manera, llegar�amos al 2030 con 4 grados de aumento de temperatura; 4 grados si sigui�ramos el comportamiento que tiene nuestro pa�s y este gobierno.

��������� Para finalizar, se�or presidente, �en qu� se traduce todo esto? Para que despu�s no vengan con discursos ambientalistas. Sabemos que el cambio clim�tico lo estamos viendo hoy con las temperaturas extremas en el norte del planeta. Canad� lleva m�s de 500 muertes por la ola de calor. Hoy se conoci� el dato de que en la Ant�rtida, el a�o pasado, la Organizaci�n Meteorol�gica Mundial demostr� que llegaba a 18,3 grados.

��������� T�mense en serio que hablar de ambientalismo y de desarrollo sostenible es pensar en la matriz de desarrollo productivo de la Argentina, no en el ambientalismo de cotill�n, no en las leyes que no tienen costo venir a aprobarlas ac�, no en los discursos vac�os, sino en las iniciativas que realmente le permitan a la Argentina cumplir la meta de emisiones que se comprometi� a nivel global. Esa debe ser la responsabilidad que ustedes asuman y que permita al pa�s entero asumir con las generaciones futuras.

��������� Para cerrar, voy a parafrasear a un diputado del oficialismo. De no hacerlo, ustedes no podr�n decir que son ambientalistas y kirchneristas, porque claramente lo que est�n hoy votando, lo que est�n haciendo, es dar una vuelta de p�gina en la historia argentina para ir hacia atr�s, hacia el retroceso, para afectar y violar lo m�s importante que tiene que tener un pa�s, que es una pol�tica de desarrollo sostenible capaz de proteger la econom�a, el empleo, el crecimiento econ�mico y tambi�n el cuidado del ambiente.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Para cerrar el bloque de oradores individuales, tiene la palabra el se�or diputado Carro, por C�rdoba.

 

Sr. Carro.- Se�or presidente: coincido con la diputada preopinante respecto de que hay que tomarse en serio la discusi�n.

��������� Si nos tom�ramos en serio la discusi�n, el primer punto que habr�a que aclarar es en qu� parte del proyecto de ley que vamos a votar se habla de la reducci�n del corte para los biocombustibles. Usan ese argumento y luego dicen que entonces se va a producir menos, por lo que habr� menos trabajo y mayor desocupaci�n. Dicen que somos anti empresa, que vamos en retroceso, que tenemos un gobierno intervencionista, que le damos arbitrariedad a la autoridad de aplicaci�n, que generamos incertidumbre; tremendo.

��������� Al respecto, en primer lugar, la ley actual habla de 5 por ciento y estamos en el 12 por ciento. Del 5 al 12 por ciento hemos llegado a partir de resoluciones que se fueron tomando durante nuestros gobiernos. El �ltimo aumento para el corte, que pas� del 10 al 12, fue de Cristina. Por lo tanto, durante los a�os de Macri, no hicieron nada para avanzar en la direcci�n que est�n planteando que hay que avanzar. Entonces, el corte no solo no se reduce, sino que se establece un piso m�s alto que el que ten�a.

��������� En segundo t�rmino, respecto de la previsibilidad, tenemos un proyecto de ley hasta el 2030 que se puede prorrogar. Simplemente prorrogar este no genera la previsibilidad que est�n reclamando.

��������� Crea una comisi�n especial para generar una pol�tica de desarrollo estrat�gico en la que participan las provincias que son productoras de biocombustibles. A m� me parece bien importante.

��������� La autoridad de aplicaci�n recepta por declaraciones juradas lo que las empresas de biocombustibles van a demandarles a las empresas de corte. Por lo tanto, se garantiza que se va a comprar todo lo que producen, porque est� establecido. Se garantiza que van a tener los insumos necesarios y se establece un precio razonable para que estos sectores tengan ganancias. Al mismo tiempo, se garantiza la obligatoriedad de comprarles a estas empresas. Adem�s, si hiciera falta importar combustibles, est� prohibido que importemos aquellos que vengan cortados con biocombustibles.

��������� O sea, es todo un sector que existe, en primer lugar, gracias a la iniciativa pol�tica de nuestro gobierno. Si no hubiera sido por la fuerte intervenci�n del Estado, no tendr�amos este mercado de biocombustibles en la Argentina.

��������� Por lo tanto, creo que todo lo que debi�ramos pensar, ya que no han tra�do ideas superadoras, es que las ideas que traemos nosotros van para adelante y mejoran al sector.

��������� Asimismo, se proh�be que otras empresas ingresen al mercado. Es decir, estas empresas que hoy est�n tienen garantizadas sus ganancias.

��������� Es m�s: no nos olvidemos de las exenciones impositivas, porque no pagan impuestos. Estamos levantando el impuesto a los combustibles. Si bien ya estaba en la ley anterior, no perdamos de vista todo lo que este proyecto de ley mejora la situaci�n de este sector.

��������� La verdad es que no entiendo qu� es lo que estamos discutiendo ni por qu� se cuestiona este proyecto de ley que les garantiza un negocio redondo a las empresas del sector. Se los garantiza porque es pol�tica de Estado para nosotros desarrollar ese sector. Es decir, somos la fuerza pol�tica que hemos hecho desarrollar este sector y pareciera que somos la fuerza pol�tica que viene a destruir el sector.

��������� Digo todo esto sin olvidarme de que la bancada opositora actual, en aquel momento se abstuvo o vot� en contra de esta ley que parece que fue tan buena antes. Resulta que nos gusta ver lo bueno en el pasado, pero no podemos ver lo bueno que estamos haciendo hoy, en el presente.

��������� Me parece que esta es una excelente ley. Mejoramos much�simo la ley anterior. Lo que pasa, lo que no se est� discutiendo aqu�, el verdadero problema es el siguiente. He estado en reuniones con empresas del sector donde nos ped�an que les garantiz�ramos el 12 por ciento de corte, que es lo que dice este proyecto de ley. Es decir, en funci�n de las reuniones de las cuales particip� conversando con empresarios, este proyecto de ley contiene todo lo que los empresarios reclaman, salvo un aspecto. Dicho aspecto no ha aparecido mencionado pr�cticamente en todo el tiempo de debate que ha llevado este proyecto. Me refiero a que lo que no les gusta es que el Estado, el gobierno, tenga capacidad para regular los precios.

��������� �Por qu� est� bien regular los precios? Porque hoy los precios de los commodities internacionalmente se fueron para arriba y eso es lo que est� haciendo subir el precio de la nafta que paga la gran mayor�a de los argentinos y las argentinas. Entonces, en este tiempo de rentabilidad extraordinaria que est� teniendo el sector, lo que no quieren es redistribuirla socialmente. Quieren mantener esa ganancia extraordinaria. De verdad se los digo, eso no lo podemos permitir.

��������� Nosotros tenemos que ir por una ley que les sirva a todos los argentinos, no a los grandes empresarios. Por supuesto que esas empresas dan trabajo. Por eso, este proyecto de ley, justamente, es lo que viene a garantizar. Viene a defender el sector de las pyme, viene a defender las econom�as regionales, viene defender los puestos de trabajo, sigue con la pol�tica ambiental y, por sobre todas las cosas, lo que viene hacer este proyecto de ley es a defender el bolsillo de los argentinos y de las argentinas.

 

Sr. Cano.- Pido la palabra para una aclaraci�n.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- �S�, diputado Cano?

 

Sr. Cano.- Solo quiero hacer una aclaraci�n, para que no quede en la versi�n taquigr�fica algo que dijo el diputado preopinante, que me imagino que se deber� a un error.

��������� El �ltimo incremento del corte se dio en febrero de 2016. Se pas� del 10 al 12 por ciento en la gesti�n de Cambiemos. Efectivamente, como bien dice el se�or diputado, el 9 de julio de 2015, la ex presidenta iba anunciar el incremento, pero nunca lo anunci�. Reitero que el �ltimo corte se dio en febrero de 2016. Esto no es relato, sino que es la realidad.

 

Sra. Penacca.- �El diputado estaba en la lista de oradores? Por favor, respetemos la lista de oradores.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Gracias, se�or diputado Cano.

��������� Se inicia el bloque de cierres. Le solicito a los se�ores diputados y diputadas que se aproximen, porque en veinticinco minutos -aproximadamente- se someter� el tema a votaci�n.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Guti�rrez, por C�rdoba.

 

Sr. Guti�rrez (C.M).- Se�or presidente: a partir de las numerosas exposiciones que hemos escuchado hasta este momento, no he podido dejar de preguntarme si N�stor Kirchner habr� querido impulsar esta ley para que despu�s de quince a�os de vigencia exitosa se dejara pr�cticamente sin efecto. Est� claro que una de las principales intenciones y virtudes fue salir de la primarizaci�n de la producci�n argentina, y esta ley contribuy� a tal fin. En ese marco, las empresas encontraron lo que alg�n diputado describi� como �una ventana�.

��������� Quiero aclarar que, a mi humilde entender, no son las leyes las que crean las fuerzas productivas de un pa�s. Eso no funciona as�. En todo caso, las leyes, y N�stor Kirchner, en particular en esta norma, supo ver lo que se ven�a en un contexto determinado y plante� el marco que permiti� que aquello que ya estaba en ciernes se concrete en esta virtuosidad que han desarrollado los biocombustibles, con idas y vueltas, en los �ltimos quince a�os.

��������� Tambi�n est� claro que las promociones deben terminar alg�n d�a, pero deben finalizar cuando el sector promocionado por el Estado tenga la capacidad suficiente para desarrollarse en ese bendito mercado, y no dej�ndolo a merced del lobby petrolero, en este caso a quienes invirtieron y fueron contestes con el esp�ritu de esta ley.

��������� A nosotros no nos asusta hablar del lobby petrolero, que no es lo mismo que hablar del lobby de las provincias petroleras. �Nosotros respetamos! �C�mo podr�amos no hacerlo en una Argentina federal e integrada? Respetamos totalmente a las provincias y a los diputados que defienden con ah�nco sus intereses, pero nosotros tambi�n defendemos los nuestros.

��������� Se�or presidente: se diga lo que se diga, con la excusa de terminar con el supuesto privilegio de algunos, se termina atentando contra la inversi�n realizada, �y vaya si ha sido importante en este sector!

��������� El 5 por ciento inicial del corte con el que parti� la ley, no necesariamente significaba permanecer fijo en ese porcentaje -como se ha manifestado aqu�‑ casi como diciendo: ��De qu� se quejan, si es lo que ya estaba, y ahora est� en m�s?� Tal como he dicho, con idas y vueltas en cada uno de los momentos respecto de la autoridad de aplicaci�n, la evoluci�n deb�a y debe responder al concepto de progresividad que la Argentina ha firmado en todos los foros. Esto ya lo han se�alado muchos se�ores diputados. El incumplimiento traer� dolores de cabeza a nuestro pa�s, por m�s que algunos lo minimicen y no lo tomen en serio.

��������� Sin embargo, se ha echado mano a todo tipo de argumentos en contra de esta industria, y los hemos escuchado incluso fuera de este debate. Por ejemplo, se ha dicho que los combustibles son de mala calidad. Eso es una absoluta falacia. Si esto fuera verdad, �qu� debi�ramos hacer con la autoridad de aplicaci�n transformada ahora en lo que nosotros consideramos una s�per secretar�a?

��������� Tambi�n se dice que los bios son las causantes de los problemas econ�micos que presentan numerosas empresas petroleras, como es el caso de YPF, que debe ser una de las pocas empresas petroleras en el mundo que da p�rdida. Nosotros queremos que YPF est� bien administrada, pero el d�ficit est� y la culpa parece que tambi�n la tienen en este caso los biocombustibles.

��������� Otro argumento del lobby petrolero son los aumentos en el surtidor, que tambi�n son causados por los bios. Sin embargo, el aumento de las naftas, desde el inicio de la promoci�n de esta ley, a la salida de refiner�as, super� en un 28 por ciento al precio del bioetanol fijado por la autoridad de aplicaci�n.

��������� El uso del ma�z para esta producci�n representa el 3 por ciento del total producido de este cereal. Sin embargo, en esta pr�dica permanente del lobby, los bios son tambi�n los causantes del aumento de los alimentos.

��������� Adem�s, en lo relativo a los esfuerzos fiscales de cada uno, �cu�nto es el que hemos hecho todos los argentinos cuando hemos pagado el barril criollo por encima de los precios internacionales? �Y los subsidios, por ejemplo? (Inaudible) Todos sabemos que tambi�n tienen sus problemas.

��������� Respecto de la vaca viva, decimos que ya est� bien, que fueron suficientes quince a�os para nacer y desarrollarse, olvidando que el mundo va en esa direcci�n, por m�s que algunos quieran negarlo.

��������� Adem�s, tal como se ha planteado, si vamos a hablar de los biocombustibles de segunda o tercera generaci�n, hablemos en serio y veamos qu� inversiones y qu� subsidios estamos dispuestos a destinar all�.

��������� En fin, quiero algunas unas consideraciones m�s, entendiendo que tengo diez minutos de tiempo como cierre de bloque.

��������� Nos preguntamos si era necesario revisar la ley 26.093. Hemos dicho una y otra vez que s�, pero no de esta forma. Con tiempo se podr�a haber avanzado en compaginar y actualizar intereses contrapuestos que no nos quitan el sue�o, pero reitero que eso debe hacerse con tiempo y verdadera vocaci�n de di�logo, so pena de terminar como ahora con una ley que va a inclinar la cancha para aquellos por los que se apuesta.

��������� Se ha perdido y se pierde la oportunidad para discutir en serio toda la matriz energ�tica, para ubicar en su lugar a cada sector que la conforma, en t�rminos de verdadera apuesta estrat�gica y no sacrificando a unos en pos de otros. Estamos en serios problemas en relaci�n con la matriz energ�tica en nuestro pa�s. El hecho de que est� faltando combustible es un secreto a voces.

��������� Algunos tienen en claro que los consensos est�n listos cuando se han dado una o dos vueltas completas de zoom con consultas a los que dicen: �Firm� aqu� que te conviene�.

��������� Se�or presidente: se opt� por lotear el mapa bio y aplicar el orden de la imposici�n. Claramente todos saben que la mayor�a de los actores reales estuvieron y est�n en desacuerdo con esta ley.

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Honorable C�mara, doctor Sergio Tom�s Massa.

 

Sr. Guti�rrez (C.M).- Se�or presidente: el hecho de que hay que hacer esfuerzos y que hay algunos que est�n en posici�n de efectuar unos mayores que otros, no es una cuesti�n que est� en discusi�n; al menos no para nosotros. Pero vemos una visi�n equivocada de la pol�tica y, por ende, de la econom�a, si se piensa que se puede seguir orde�ando a la vaca viva y, encima, sin darle de comer.

��������� Si destinamos el 25 por ciento del impuesto a la riqueza al desarrollo del gas -y est� bien, porque necesitamos gas-, �por qu� no pensar que la vaca viva, como el sector de bio, necesita parte de los subsidios para garantizar una matriz energ�tica equilibrada y de futuro?

��������� Por ejemplo, est� bien que C�rdoba ponga 3.000 millones de d�lares nada m�s que en concepto de retenciones agropecuarias todos los a�os. Ahora, est� mal que el sector bio de C�rdoba no reciba o no mantenga los cupos de corte y los precios que hacen a la sustentabilidad de su desarrollo.

��������� Todos decimos que hay que hacer un pa�s m�s federal. Termino pensando en C�rdoba y en Santa Fe, en toda la regi�n centro respetando el leg�timo derecho a defender los intereses que cada uno de los diputados de las distintas provincias tiene y ejerce. Pero pienso que tiene raz�n el gobernador Perotti cuando dice que solo produciendo m�s, exportando m�s, desacoplando precios externos de los internos vamos a resolver todos los problemas que tenemos. �Tan dif�cil es comprender eso?

��������� Se�or presidente: esta es una ley contraria a los sectores productivos de C�rdoba. Nosotros no mezclamos pol�tica electoral. D�jenlos en paz a los electores ‑cordobeses, en nuestro caso‑: ya tendr�n oportunidad de explicarles por qu� diez caramelos es igual que cinco, por qu� seis caramelos es igual que tres y por qu� el que da los caramelos puede, incluso, reducir ese n�mero.

��������� Nosotros no entramos en esa discusi�n. Simplemente, defendemos como hacen todos los dem�s los intereses de la productividad cordobesa, que en los �ltimos a�os ha crecido. No cuestionamos la defensa que otros diputados hacen de sus intereses, pero tampoco vamos a permitir que se nos diga por qu� defendemos los nuestros.

��������� Nuestro voto es negativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Mestre, por C�rdoba.

 

Sr. Mestre.- Se�or presidente: la verdad que es absolutamente imposible que nosotros acompa�emos este proyecto de ley cuando sabemos que la Argentina es productora de ma�z, de soja y de ca�a de az�car.

��������� Adem�s, vemos que este proyecto de ley va a contramano del mundo ya que en nuestros pa�ses lim�trofes ‑nuestros pa�ses hermanos latinoamericanos‑ vemos que Brasil ha venido aumentando progresivamente el porcentaje de corte hasta llevarlo al 27,5 por ciento, que Paraguay lo ha venido aumentando progresivamente hasta el 25 por ciento y que otros pa�ses del mundo ‑como Indonesia‑ tienen el porcentaje de corte en el 30 por ciento. Adem�s, observamos que otros pa�ses del mundo ya est�n pensando en eliminar el uso de combustibles f�siles.

��������� Este proyecto que impulsa el Poder Ejecutivo evidentemente reduce los porcentajes de corte de los biocombustibles en las naftas. Esto es as�: est� absolutamente probado porque hoy el r�gimen tiene el 10 por ciento para el biodiesel y 12 por ciento para el biotalol. En este caso, en funci�n del art�culo 8�, lo quieren llevar al 5 por ciento, a partir de la facultad discrecional de una persona que va a tener la lapicera, que es el secretario de Energ�a de la Naci�n, para poder reducir los porcentajes de corte, para fijar los cupos y para fijar el precio.

��������� Las tres discrecionalidades que tiene el secretario de Energ�a son absolutamente inadmisibles y representan ‑como se ha dicho ac�‑ una delegaci�n de facultades que este Congreso de la Naci�n est� haciendo con la venia y el apoyo del oficialismo en el Poder Ejecutivo.

��������� Esto no nos extra�a porque lo vienen haciendo desde el 10 de diciembre del a�o 2019, con la declaraci�n de emergencia, con las facultades discrecionales y con los superpoderes. Ahora tambi�n le quieren dar al secretario de Energ�a la lapicera para que fije el cupo, el precio y el corte. Eso es absolutamente inadmisible para nosotros.

��������� Lo que deber�amos haber hecho es prorrogar la ley 26.093, con el aumento progresivo que ha venido teniendo desde el a�o 2006, que es lo que se hizo en el Senado.

��������� Entonces, nos preguntamos una vez m�s por qu� no avanzaron con el r�gimen de pr�rroga por un a�o, y en ese lapso podr�amos haber avanzado con los trabajadores del sector ‑que son much�simos‑ con los empresarios y con el gobierno para darnos un debate profundo sobre la ley de biocombustibles, que se adecuen al Acuerdo de Par�s y que de alguna manera ese proyecto vaya en cumplimiento de los valores que significa cuidar el medio ambiente.

��������� Entonces, est� claro que esto es una pu�alada al sector productivo, a los trabajadores que van a perder ‑lamentablemente‑ su puesto de trabajo y a las econom�as regionales.

��������� �Aqu� quiero hacer un par�ntesis, se�or presidente, porque me hubiera gustado ver a los gobernadores de estas econom�as regionales pelear por sus provincias y por sus puestos de trabajo. Me hubiera encantado ver al gobernador Schiaretti ‑lo hubi�ramos apoyado‑ defendiendo a las econom�as regionales, al campo, a los que producen ma�z o soja y a todos esos trabajadores que vienen desarrollando esta gran industria. Lamentablemente �l tambi�n se perdi� la oportunidad -no solamente el gobernador de C�rdoba sino tambi�n los de Santa Fe y de Entre R�os‑ de trabajar en forma conjunta, tal como est� previsto en nuestra Constituci�n Nacional, despu�s de la reforma del a�o 94.

��������� Pudimos ver que esto funciona bien cuando en el a�o 96 se constituy� por primera vez la Regi�n Centro con los gobernadores Mestre, Busti y Obeid, quienes trabajaron en forma conjunta por el crecimiento y desarrollo de sus provincias.

��������� No he visto a ninguno de los gobernadores justicialistas como as� tampoco a los diez ministros de Energ�a de las provincias -que trabajaron en una mesa en el anterior gobierno por la modificaci�n de la ley de biocombustible‑ trabajar en este sentido en esta oportunidad. Han sucumbido ante el poder central. No han defendido el federalismo que est� instaurado en nuestra Constituci�n Nacional y en las constituciones provinciales.

��������� Como si esto fuera poco, se�or presidente, se provoca un da�o enorme al medio ambiente. Aqu� en estos quince a�os de la ley 26.093, se generaron cincuenta y cuatro plantas en estas diez provincias. De esas cincuenta y cuatro plantas, veintitr�s est�n en la provincia de C�rdoba, y han generado cientos de millones de d�lares en inversiones, han dado empleo a 65.000 trabajadores de forma directa, a 100.000 de forma indirecta y han aumentado las exportaciones en un momento donde necesitamos las divisas como el aire para respirar. Tambi�n ha producido 380 millones de d�lares en concepto de sustituci�n de importaciones.

��������� Est�n absolutamente probados ‑esta no es una opini�n‑ los beneficios que tiene esta ley para la econom�a circular porque beneficia a los productores que siembran m�s, a los consumidores, al Estado. Adem�s, genera mayor actividad econ�mica y, con esa mayor actividad, se genera mayor recaudaci�n y fundamentalmente lo que provoca es la industrializaci�n de la Argentina.

��������� �Cu�ntas veces se ha escuchado aqu� en este Congreso Nacional hablar de la importancia de la industrializaci�n de los productos primarios? Esta es la ley en la que deber�amos avanzar para ir por ese camino porque hay que apoyar al campo, a las industrias, a la econom�a del conocimiento y a la ciencia y la tecnolog�a.

��������� Ese es el camino que debe recorrer la Argentina para salir de esta dif�cil situaci�n en la cual se encuentra y porque tambi�n dentro de estos beneficios de la econom�a circular est� el ambiente.

��������� Est� absolutamente probado que el uso de los biocombustibles reduce un 70 por ciento los gases de efecto invernadero, reduce la huella de carbono, provoca la rotaci�n de los cultivos y, fundamentalmente, mejora la calidad del aire, lo que significa que estamos mejorando la salud de los 45 millones de argentinos que se van a ver perjudicados por el uso de los combustibles f�siles que da�an al medio ambiente y, en definitiva, da�an la salud los argentinos.

��������� Con esta ley que ustedes quieren sancionar borran con el codo lo que escribieron con la mano. Fue el anterior gobierno kirchnerista el que firm�, junto a 194 pa�ses del mundo, el acuerdo clim�tico de Par�s, por el cual nos obligamos como Estado a fomentar el uso de los biocombustibles.

��������� D�ganme ustedes en qu� estamos fomentando el uso de los biocombustibles si reducimos los porcentajes de corte y le damos la facultad discrecional a una sola persona para que tenga la lapicera para manejar el cupo, el precio y los cortes.

��������� Es clar�simo que el gobierno nacional, que el Frente de Todos lo que propone, en definitiva, es el cierre de plantas. Y lo que lamentablemente trae aparejado esto es la p�rdida de los puestos de trabajo. Insisto: con este proyecto que ustedes quieren aprobar se perder�n 100.000 puestos de trabajo de forma directa o indirecta.

��������� En definitiva, est� claro que se ha cedido ante el lobby petrolero, que esto va a provocar una crisis clim�tica en el mediano y largo plazo. En definitiva, tambi�n est� muy claro que se viola el art�culo 41 de la Constituci�n Nacional y que se va a provocar un desastre medioambiental. Es lo que aqu� se ha dicho hasta el hartazgo.

��������� En definitiva, todo este marco que estoy mencionando sobre el cuidado del medioambiente se da en un momento en el que se abandonaron las pol�ticas de energ�as renovables, tanto la solar como la e�lica.

��������� En lugar de promover un ambiente sano para las pr�ximas generaciones, este proyecto nos impone la transferencia directa de una renta del sector de los renovables al sector contaminante.

��������� En definitiva, estamos convencidos de lo que estamos expresando y de las consecuencias que va a tener esta ley. Traer� menos inversi�n. D�ganme ustedes si invertir�an un solo peso �y han sido miles de millones de pesos los que se han invertido, y cientos de millones de d�lares, insisto� cuando todo depende de la lapicera de un secretario de Energ�a. Nadie lo har�a. Eso es discrecionalidad. No es institucionalidad, no son reglas claras, no es seguridad jur�dica. En definitiva, va a traer aparejado menos empleo, menos valor agregado y m�s da�o ambiental en momentos en que la Argentina est� empobrecida, tenemos un 45 por ciento de pobreza y no han querido votar, hace escasas tres o cuatro horas, el tratamiento de un proyecto para conseguir la vacuna Pfizer para los menores de 18 a�os. (Aplausos.)

��������� Eso es un acto de crueldad de parte del gobierno, de parte de los diputados que han imposibilitado esa facultad.

��������� En definitiva, cuando vemos que la Argentina lidera el ranking de la inflaci�n, el ranking de la inseguridad, el ranking de la miseria, el ranking de la imprevisibilidad, se hace imposible acompa�ar este proyecto de ley. Va a contramano del mundo, va para atr�s. No cuenten con nosotros. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Les quiero pedir a todos, adem�s de que se sienten, que revisen estar logueados porque el discurso del diputado Cleri es el de cierre, y luego se proceder� a votar.

��������� Si bien votaremos todo junto en general y en particular, dos diputados me plantearon que quieren hacer observaciones para dejarlas sentadas antes de la votaci�n, por lo que, antes de llamar a votar, les dar� el uso de la palabra.

��������� Tiene la palabra el diputado Cleri, por Santa Fe.

 

Sr. Cleri.- Se�or presiente: hemos debatido, conversado sobre un nuevo marco regulatorio para los biocombustibles que es muy importante para la Argentina. Llevamos m�s de cinco horas de debate en las que hicieron uso de la palabra m�s de 48 oradores.

��������� Qui�n hubiese imaginado hace quince a�os que estar�amos hoy debatiendo sobre las virtudes de un proyecto de ley muy importante que promovi� el expresidente N�stor Kirchner en 2006, cuando impuls� los proyectos que se convirtieron en la ley 26.093 y su complementaria, la 26.344, por la cual se incorpor� el bioetanol a base de ca�a de az�car para que tambi�n se puedan producir biocombustibles a base de ma�z y de aceite de soja.

��������� En aquel momento se construy� este marco normativo tan importante, y hoy vemos que hay unanimidad en reconocer las virtudes de ese proyecto de ley.

��������� Quisiera contextualizar un poco. El expresidente N�stor Kirchner fue gobernador de una provincia con petr�leo -Santa Cruz‑ y vino a proponer un modelo de pa�s con desarrollo federal, equilibrado, equitativo, con generaci�n de empleo verde, integraci�n, armon�a, desarrollo, producci�n y agregado de valor.

��������� Cada una de las leyes fueron construyendo tambi�n este modelo de pa�s, y estas virtudes tan importantes tienen que ver con la sinergia positiva entre el acuerdo del sector privado y el acuerdo del sector p�blico. Pudimos avanzar y ver cada uno de nosotros y nosotras c�mo en 2006 se estaban desarrollando 20 plantas, mientras que en el debate de hoy estamos hablando de 54. No puedo decir 55 porque hubo una que en el periodo 2016-2019, antes de inaugurarse, se tuvo que desmantelar y vender como chatarra porque los que estaban en el Ministerio de Energ�a, que eran representantes de Shell, no le dieron precio, a pesar de que ten�a corte y una inversi�n en la provincia de Santiago del Estero.

��������� Esas 54 plantas actuales son muy importantes hoy ya que posibilitan 81.000 puestos de trabajo de manera directa, empleo verde y 280.000 puestos de trabajo de manera indirecta. Los biocombustibles generaron esas posibilidades y lo seguir�n haciendo. Con la sustituci�n de importaciones �principalmente desde 2006 hasta 2015� tuvimos un promedio de 1.370 millones de d�lares de importaciones de gasoil y de nafta por incorporar el corte que establec�a la ley 26.093 y la 26.344, y la Argentina durante ese per�odo cerr� 21.000 millones de d�lares. Asimismo, logramos ser el primer pa�s en el mundo en materia de exportaci�n de biocombustibles.

��������� Esperemos que, adem�s de ser el primer pa�s del mundo en materia de exportaci�n de biocombustibles de primera generaci�n, el debate de hoy permita que la Argentina contin�e con los biocombustibles de segunda y tercera generaci�n, que son cien por ciento exportables. Esto implica agregado de valor y trabajo argentino, e incluye a las econom�as regionales. Es un modelo de pa�s para todas y todos.

��������� Adem�s, las econom�as regionales se vieron beneficiadas porque es el esp�ritu fundamental de la ley 26.093 que se construy� en la C�mara de Diputados y luego fue sancionada por unanimidad en la C�mara de Senadores en 2006.

��������� �Por qu� las econom�as regionales? Porque la integraci�n de un pa�s que se debe recuperar despu�s de un derrumbe neoliberal tiene que surgir con el arraigo, con el esp�ritu, con el trabajo, con el desarrollo, con el agregado de valor, con una sinergia positiva, que en equilibrio y en armon�a, con la estabilidad y la previsibilidad que se construye un pa�s, pudimos lograr entre todos y todas. Por eso es tan importante, sobre todo quince a�os despu�s, debatir esto.

��������� Ese importante acuerdo federal de desarrollo, con el compromiso y la sustentabilidad que generaban estos empleos, tuvo una participaci�n del sector agropecuario y del sector pyme. Tambi�n hubo una gran participaci�n del sector industrial porque hab�a un mercado interno pujante.

��������� Esa sustituci�n de importaciones, con la creaci�n de las industrias y las pymes en cada una de nuestras provincias, en diez provincias de la Argentina, generaron trabajo argentino, desarrollo, arraigo, sustituci�n de importaciones y, principalmente, industrializaci�n.

��������� Ese agregado de valor -porque nosotros somos los que promocionamos los biocombustibles, y lo vamos a seguir haciendo- tiene que ver con una mirada integral. Desde el a�o 2006 hasta el a�o 2015 se creci� en un 400 por ciento en capacidad instalada, en los puestos de trabajo, en la inversi�n privada y en el acompa�amiento del Estado nacional. Hab�a un r�gimen de promoci�n, que es el que est� terminando de utilizarse, atento a que la mirada de la planificaci�n de la transici�n energ�tica de la Argentina tiene que ir en un sendero en donde, adem�s de la capacidad instalada que tenemos hoy, donde hay que garantizar precio, corte, estabilidad laboral, y principalmente, desarrollo con arraigo en nuestras comunidades del interior, tiene que haber una transici�n energ�tica en donde se logren los equilibrios justos y arm�nicos para poder compatibilizar los precios de estos insumos fundamentales, que son commodities, con el usuario, el consumidor que carga la nafta, el productor, la log�stica y el transporte que el biodiesel utiliza para la producci�n.

��������� Ello, que es fundamental en este equilibrio, se termina de plasmar en el nuevo proyecto de ley, en este marco regulatorio de los biocombustibles que potencia el esp�ritu de la ley 26.093. Si bien aqu� todos hemos acordado que dicha ley ha sido virtuosa como pol�tica p�blica, tambi�n tuvo momentos complejos.

��������� Antes les dije que desde el 2006 al 2015 hab�a previsibilidad, aumentos de corte, precio, compatibilidad entre el litro de nafta, el litro de gasoil y la producci�n vinculada al sector productivo para poder tener un equilibrio en la macroeconom�a y tambi�n en la microeconom�a, que es el bolsillo de cada argentino y de cada argentina en cada una de las casas de nuestros compatriotas.

��������� Pero durante el 2016 al 2019 las pymes productoras de biocombustible y de bioetanol peregrinaron constantemente por el Ministerio de Energ�a porque, por resoluci�n, hab�a corte. Ten�an un corte del 10, luego lo llevaron al 12 y del 5 se lo fueron llevando al 7,5 -en el caso del biodiesel‑ y posteriormente al 10. Pero nunca le garantizaban, con la f�rmula polin�mica, el precio necesario para poder comprar el insumo, y de esa manera, poder abastecer a las mezcladoras, que son las ocho que luego les venden a las petroleras.

��������� Entonces, vamos a ser claros: tenemos que repensar y conversar el proyecto de ley de hace quince a�os. En este caso, lo hemos hecho con el presidente de la comisi�n, Omar F�lix, utilizando un m�todo para dise�arlo como pol�tica p�blica, que es el m�todo de la conversaci�n. Me refiero al m�todo del di�logo. Fuimos conversando con cada uno de los sectores productivos, con el sector empresario y con cada una de las c�maras. Nos reunimos con los legisladores de cada una de las provincias, compatibilizamos con la mirada del Poder Ejecutivo, revisamos la legislaci�n vigente, la que estaba por vencer y tambi�n los compromisos internacionales de la Argentina en materia ambiental.

��������� Todo lo que construimos ah� es un proyecto cien por ciento para un modelo argentino en donde se garantice el empleo, las pymes, la producci�n y la continuidad de esta capacidad instalada de los biocombustibles pensando que, luego de garantizar los biocombustibles de primera generaci�n -y seguir teniendo el nivel de exportaci�n que ten�amos y cuidando a las pymes para el mercado interno y el bolsillo de cada uno de los compatriotas-, trabajaremos en los de segunda y tercera generaci�n.

��������� Ese m�todo, que es un m�todo de dise�o de pol�ticas p�blicas en base a la conversaci�n, planificaci�n y el acuerdo con la dirigencia pol�tica y el sector productivo, es tambi�n el esp�ritu de la ley 26.093. Es esa sinergia positiva en donde el compromiso de hoy garantiza la construcci�n del futuro.

��������� Nuestro proyecto de ley, que se establece hasta el a�o 2030, es lo que las c�maras han pedido porque no quer�an una pr�rroga ya que no les daba previsibilidad. No quer�an ni una pr�rroga larga ni una pr�rroga corta. Quer�an una nueva ley, un nuevo marco normativo. Quer�an tener la posibilidad de contar con la previsibilidad, la estabilidad y lograr el equilibrio en base al di�logo que se fue construyendo para poder tener las certezas de que con la participaci�n del Estado y la inversi�n del sector privado construyamos esta Argentina que entre todos y todas vamos a poner de pie. (Aplausos.)

��������� En este sentido, llegamos a este proyecto de ley construido entre todas y todos.

��������� Quiero clarificar algunos puntos porque se ha dicho mucho, pero parece que no se habl� del proyecto de ley.

��������� Voy a leerlo para poder clarificar principalmente cu�l es la definici�n de biocombustibles propuesta por las c�maras para cuidar la industria nacional y los biocombustibles argentinos, sobre todo en un mundo en el que Brasil ha bajado el corte y tiene excedentes, pero aument� el precio, y Estados Unidos ha bajado el corte de los biocombustibles y tambi�n aument� el precio.

��������� Tanto Brasil como los Estados Unidos tomaron el ejemplo de una construcci�n que hicieron las c�maras con la Secretar�a de Energ�a en enero de este a�o en donde se le dio una ecuaci�n de previsibilidad, se baj� el corte y se le garantiz� el precio, y de esa manera volvieron a trabajar, como lo han hecho ahora nuevamente aumentando el precio garantizando las fuentes laborales, la producci�n de las pymes y el desarrollo para que ello no tenga impacto en el litro de nafta ni en el litro de gasoil.

��������� Ese es el equilibrio, esa es la armon�a y esos son los puntos de encuentro que se tienen que encontrar en base al di�logo y a la planificaci�n estrat�gica de las pol�ticas p�blicas.

��������� En art�culo 4� del proyecto de ley la definici�n es clara y aqu� se mejora lo que se establec�a en el proyecto anterior, tomando ese esp�ritu, analiz�ndolo, repens�ndolo y proyectando al futuro: �A los fines de la presente ley se entiende por biocombustible al bioetanol y al biodiesel que cumplan los requisitos de calidad que establezca la autoridad de aplicaci�n y que se produzcan en plantas instaladas en la Rep�blica Argentina a partir de materias primas nacionales cuyo origen sea agropecuario, agroindustrial y/o provenga de desechos org�nicos.�

��������� �Ello es fundamental, sobre todo en este momento en el cual Brasil, gran productor de alconafta, ha bajado el corte, le debe garantizar el precio a sus productores y nosotros estamos cuidando nuestra econom�a.

��������� Estamos cuidando a nuestros productores en Salta, en Jujuy y en Tucum�n. Estamos cuid�ndolos y garantiz�ndoles que la producci�n nacional se va a industrializar en plantas nacionales. Eso tambi�n es tener en cuenta la coyuntura, pero pensando hacia adelante y el futuro, y c�mo se va complementando.

��������� Asimismo, aqu� se habl� mucho del art�culo 8 y del art�culo 12 que, en base a la autoridad de aplicaci�n, terminan fijando cu�l es el corte. Se ha dicho mucho del corte para el biodiesel, que es del 5 por ciento, de la misma manera que se estableci� en la ley anterior. Es un corte que puede elevarse o puede bajar solamente en una circunstancia con un piso del 3 por ciento. �Cu�l es la circunstancia? Que el insumo principal, que en este caso es el aceite de soja -que es un commodity ampliamente exportable de la Argentina- pueda tener un impacto negativo en el biodiesel cuando se lo incorpore en la ecuaci�n de precio para garantizar el corte, es decir, en el surtidor.

��������� �Qu� se est� buscando aqu�? En el equilibrio justo, en base a lo que se convers� con el sector privado y planific� el sector p�blico buscamos el equilibrio arm�nico de un desarrollo que cuide el empleo verde, la capacidad instalada de nuestras pymes y, principalmente, la orientaci�n macro y micro econ�mica, que es el bolsillo de todos y cada uno de nuestros compatriotas.

��������� Tenemos que lograr ese equilibrio. No podemos tener cuatro a�os como el 2016 al 2019, en donde hab�a cortes y no hab�a precio.

��������� Necesitamos tener precio, corte y trabajo argentino garantizado en base a una ley que estamos construyendo entre todas y todos. (Aplausos.)

��������� De la misma manera, es fundamental el art�culo 12, que determina que el corte de bioetanol, a base de ma�z y a base de ca�a de az�car, siga hoy en el 12 por ciento. Y aqu� hay una distinci�n muy importante y las mismas c�maras que quer�an mantenerla unida tambi�n trataban de buscar la diferenciaci�n.

��������� Hoy el cien por ciento de la capacidad instalada de la zafra del az�car va a ser destinado a la producci�n de bioetanol. El cien por ciento, cerca de 550.000 metros c�bicos, representan trabajo, producci�n, arraigo y permiten que nuestros compatriotas tengan la posibilidad de desarrollo en el lugar donde nacieron y viven y, por supuesto, adem�s de cuidar el ambiente, puedan seguir industrializando esa ca�a de az�car que es muy importante para poder seguir sosteniendo los empleos.

��������� Dentro de los mismos art�culos 8 y 12, vale destacar que los medios de comunicaci�n se alarman cuando hay un aumento en el precio del corte de biodiesel y del bioetanol, atento a que se public� la resoluci�n de los precios para junio y julio, previo a que salga este nuevo proyecto de ley.

��������� En el diario El Cronista aparece �Combustibles: �qu� pasar� con el precio de las naftas ante el aumento del biodiesel y bioetanol?�. No van a aumentar. �Saben por qu�? Porque se tiene en cuenta lograr el equilibro justo para que los productores agropecuarios y los de biocombustibles, en esa integraci�n de agregado de valor, puedan cuidar el bolsillo de los argentinos y las argentinas.

��������� Pero antes no pasaba eso, porque hab�a algunos que no daban precio, hab�a corte y hab�a desempleo por plantas que se desindustrializaban y se desmantelaban.

��������� Tambi�n en La Naci�n del d�a de hoy aparece �El Gobierno aument� el precio del biodiesel y el bioetanol�, y agrega: �Podr�a afectar el precio final de los combustibles�. Pero no. �Y saben por qu� no? Porque uno tiene que observar el proyecto de ley de manera integral. No solo lo tiene que mirar desde la definici�n de biocombustible, de cu�l es el corte, cu�l es el precio y la metodolog�a para fijar ese precio teniendo en cuenta el componente principal, el transporte y la log�stica, como lo solicitaron los legisladores de las provincias que tienen plantas m�s lejanas del puerto.

��������� Tambi�n tienen que ver los art�culos 16 y 17, con la posibilidad de sustituci�n de importaciones en el momento; que la ecuaci�n que hoy es �commodities altos, precios de combustibles f�siles bajos�, se revierta; que la Argentina vuelva a sustituir importaciones de combustibles con el n�mero que antes les dije: 21.000 millones de d�lares son los que nuestro pa�s se ahorr� aplicando la posibilidad de incorporar biocombustibles.

��������� �Pero saben qu�? Entre 2016 y 2019 la Argentina import� nafta, adem�s de gasoil, no les dio precio, no tuvieron producci�n de biocombustibles y se import� 1.500 millones de d�lares. Eso pudo haber sido sustituido claramente si las plantas pymes hubieran estado trabajando con precio y con corte, situaci�n que no sucedi�.

��������� Tambi�n tenemos que mirar qu� pasa en el mundo, porque este proyecto de ley est� enmarcado en lo que est� ocurriendo en el mundo, y las pol�ticas de cuidado ambiental que lleva adelante la Argentina son claras y est�n integradas con el mismo proyecto de ley.

��������� Para saber lo que sucede en el mundo, pueden buscar el fallo �El pueblo contra Shell�. Por ese fallo, en La Haya se obliga a Shell a bajar la emisi�n de efecto invernadero en un 45 por ciento para el a�o 2030, tomando como base el a�o 2019.

��������� Tambi�n hay noticias de que los accionistas se rebelan ante Exxon y las pol�ticas de los directivos de la petrolera. Accionistas incorporan a directores en una petrolera y les dicen que tienen que tomar un rumbo distinto para lograr un cuidado ambiental.

��������� Esto est� pasando tambi�n en el mundo. Es la hora de los pueblos y esta hora de los pueblos es una continuidad de las tareas que tenemos que asumir todos y todas para poder, desde nuestro lugar, con la legislaci�n que construimos, incorporarnos en un proceso de transformaci�n y de transici�n energ�tica justa y equilibrada, con medidas de adaptaci�n y de mitigaci�n que sean favorables a un modelo de pa�s con desarrollo inclusivo, que genere empleo y sostenibilidad.

��������� Y esta hora de los pueblos�

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Cleri�

 

Sr. Cleri.- Ya voy terminando, se�or presidente. Tengo much�simas cosas para decir porque este proyecto de ley, gracias a que el presidente de mi bloque, M�ximo Kirchner, me pidi� que me sume a trabajar en el mismo�

 

Sr. Presidente (Massa).- Disc�lpeme, diputado Cleri. �El hermano menor del diputado Ritondo me quiere decir algo? (Risas.)

-   Manifestaciones fuera de micr�fono.

 

Sr. Presidente (Massa).- Es que se hab�a pasado dos minutos y medio, y el diputado Guti�rrez, cuatro.

��������� Contin�a en el uso de la palabra el se�or diputado Cleri.

 

Sr. Cleri.- Gracias, se�or presidente.

��������� Dec�a que agradezco al presidente de mi bloque, M�ximo Kirchner, y al presidente de la Comisi�n de Energ�a y Combustibles, pero especialmente al primero, quien me sum� a trabajar en este proyecto para poder compatibilizar entre todos las visiones de los sectores, en armon�a y en equilibrio, para generar la estabilidad suficiente, protegiendo las virtudes que todos hemos consensuado aqu� que han sido muy buenas, de la ley 26.093 y la adhesi�n de la ley 26.344. La idea es que construyamos este importante marco regulatorio para que, con este modelo de pa�s, con inclusi�n laboral, con empleo verde, con sostenibilidad, con una mirada federal focalizada en la producci�n, el crecimiento econ�mico y la productividad, podamos poner a la Argentina de pie. Nos convoc� a seguir trabajando de manera constante y permanente.

��������� En primera instancia, creo que la Comisi�n de Energ�a y Combustibles tiene que ser una mesa de entradas para todas y cada una de las inquietudes que aqu� se han propuesto, para que, junto con la comisi�n especial generada en el marco regulatorio, podamos construir la elaboraci�n necesaria de las nuevas miradas, de manera que, con esa coyuntura internacional, con la coyuntura local y comprendiendo la diversidad que se tiene que construir dentro de un modelo de pa�s a fin de garantizar el equilibrio, la armon�a y la estabilidad, podamos avanzar con una clara mirada federal y de arraigo.

��������� Todo esto es tan importante que seguramente las c�maras, los trabajadores y las trabajadoras, los legisladores que se han preocupado por elaborar este proyecto de ley, los que han escrito el Acuerdo de Par�s y tambi�n el Poder Ejecutivo, que ha definido cu�les son las pol�ticas para los pr�ximos cinco a�os, nos van a llevar a que los biocombustibles, este marco regulatorio, la construcci�n y el m�todo de conversaci�n constante en la planificaci�n de las pol�ticas p�blicas se puedan seguir plasmando para poder salir adelante entre todos y todas, a efectos de poner r�pidamente a la Argentina de pie. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Antes de pasar a la votaci�n en general y en particular, me han pedido la palabra varios se�ores diputados para dejar asentada sus observaciones sobre determinados art�culos en particular.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Fern�ndez Langan, por Buenos Aires.

 

Sr. Fern�ndez Langan.- Se�or presidente: solicito permiso para incorporar la siguiente redacci�n del art�culo 5�, que paso a leer.

��������� Dice as�: �Solo podr�n elaborar, almacenar y/o comercializar biocombustibles, o llevar a cabo la mezcla de estos combustibles f�siles, en cualquier proporci�n, las empresas que se encuentren debidamente habilitadas a tales efectos por la autoridad de aplicaci�n. En caso contrario, la actividad ser� considerada clandestina.

��������� �Las empresas que produzcan y/o destilen hidrocarburos no podr�n ser titulares o tener participaci�n mayoritaria en empresas y/o plantas productoras de biocombustibles. La producci�n de biocombustibles de segunda generaci�n no estar� alcanzada por esta limitaci�n.

��������� �La adici�n de biocombustibles de segunda generaci�n dar� pleno cumplimiento a la obligaci�n de mezcla m�nima obligatoria establecida por esta ley y sus normas reglamentarias.�

��������� La propuesta de modificaci�n al art�culo 16 es la siguiente: �En los casos que se verifique fehacientemente que una mayor aditivaci�n de biodiesel implica una mejora en la generaci�n de divisas del pa�s en virtud de la utilizaci�n de un producto producido localmente, la autoridad de aplicaci�n podr� modificar de manera temporal el porcentaje de corte de biodiesel hasta el tope de 10 por ciento, con destino al parque automotor, teniendo en cuenta las limitaciones t�cnicas de los motores homologados en el territorio nacional conforme normativa aplicable.

��������� �Las empresas mezcladoras arbitrar�n los medios disponibles para obtener de cualquiera de las elaboradoras de biocombustibles que cuenten con sus instalaciones habilitadas el biodiesel sustituto de la forma m�s eficiente posible en condiciones comerciales de mercado�.

 

Sr. Presidente (Massa).- Entendiendo que no se van a aceptar modificaciones, se insertar� la observaci�n formulada.

��������� Le pregunto a la se�ora diputada Sapag si quiere insertar o si quiere leer lo que iba a proponer. Entiendo que quer�a insertar algo en los art�culos 5� y 17.

 

Sra. Sapag.- Inserto, se�or presidente; no hay ning�n problema.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se toma nota de su pedido, se�ora diputada.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Rauschenberger, por La Pampa.

 

Sr. Rauschenberger.- Se�or presidente: quiero manifestar que, en el caso del art�culo 8�, los diputados del Frente de Todos de la provincia de La Pampa -Hern�n P�rez Araujo, Melina Del� y quien les habla‑ nos abstendremos de votar y queremos dejar constancia de ello.��

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Rauschenberger: se dejar� constancia de las abstenciones.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Cano, por Tucum�n.

 

Sr. Cano.- Se�or presidente: quiero se�alar que firm� un dictamen en disidencia parcial porque no acompa�o el art�culo 8�.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se va a votar en general y en particular en forma nominal el dictamen de mayor�a de las comisiones de Energ�a y Combustibles y de Presupuesto y Hacienda reca�do en el proyecto de ley por el que se aprueba un marco regulatorio de biocombustibles (Orden del D�a N� 383).

-   Mientras se practica la votaci�n nominal:

 

Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia proceder� a tomar el voto de viva voz a los cuatro diputados cuyo voto no ha sido registrado por el sistema.

��������� Se�ora diputada Aguirre, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Aguirre.- Se�or presidente: mi voto es afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Baldassi, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Baldassi.- Se�or presidente: mi voto es negativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Hern�ndez, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Oca�a, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Oca�a.- Se�or presidente: mi voto es negativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Hern�ndez, �puede indicar el sentido de su voto?

-   �Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, se considerar� a la se�ora diputada Hern�ndez ausente a la hora de votar.

��������� Se cierra la votaci�n.

��������� Por Secretar�a se dar� lectura del resultado de la votaci�n.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Hubo 135 votos afirmativos, 110 negativos y dos abstenciones.[4]

 

Sr. Presidente (Massa).- Queda sancionado el proyecto de ley.[5] (Aplausos.)

��������� Se comunicar� al Honorable Senado.

                                                                                                            - 8 -       

plazo m�ximo para la resoluci�n de los recursos de casaci�n

Sr. Presidente (Massa).- En consideraci�n en general el dictamen de la Comisi�n de Legislaci�n Penal reca�do en el proyecto de ley por el que se incorpora el art�culo 469 bis al C�digo Procesal Penal de la Naci�n, sobre plazo m�ximo para la resoluci�n de los recursos de casaci�n (Orden del D�a N�mero 238).

 


AQU� ORDEN DEL D�A 238


 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la se�ora diputada Gaillard, por Entre R�os.

 

Sra. Gaillard.- Se�or presidente: vengo a informar sobre el proyecto de ley contenido en el expediente 5.085-D-2020, Orden del D�a 238.�

��������� El Orden del D�a en tratamiento tiene por objetivo modificar el C�digo Procesal Penal de la Naci�n.� Lo que establece es un plazo total al tr�mite para que se resuelva el recurso de casaci�n en noventa d�as para dictar la sentencia, como plazo total que va a tener casaci�n para resolver, el que ser� prorrogable por �nica vez por veinte d�as, por resoluci�n fundada.�

��������� �Cu�l es el sentido de poner un plazo? Este plazo tiene sentido, ya que en la actualidad existe una laguna en este art�culo del C�digo Procesal Penal de la Naci�n, que hace que muchas causas penales o delitos que son investigados tarden mucho tiempo en resolverse, y la justicia que tarda tiempo, no es tal.�

��������� En ese sentido, lo que esta iniciativa viene a resolver se vincula con el plazo una vez que el recurso est� firme. Actualmente, el C�digo Procesal Penal establece veinte d�as para resolver la sentencia, pero la laguna se produce porque no se establece a partir de la audiencia cu�ndo se cuenta ese plazo.�

��������� Por eso, varios organismos de derechos humanos reiteradamente han planteado este tema, porque muchas causas de lesa humanidad se resuelven cuando los imputados ya han fallecido. Eso se ha dado en llamar impunidad biol�gica.�

��������� �Por qu� es importante este proyecto? �Qu� incorpora, adem�s de establecer un plazo total para resolver el recurso en casaci�n?� Porque establece un incumplimiento para aquellos jueces que no observen estos plazos.�

��������� La inobservancia de los plazos va a constituir una falta grave que deber� ser denunciada por el representante del Ministerio P�blico Fiscal y podr� ser denunciada por la querella. Es decir, aquellos jueces de casaci�n que no cumplan en resolver en tiempo y forma, podr�n ser denunciados o deber�n ser denunciados, y esto constituir� una falta grave.�

��������� �Qu� derechos se conculcan en esta situaci�n que ocurre en casaci�n, en que las causas no se resuelven en tiempo y forma? Aqu� estamos hablando del debido proceso y de la tutela judicial efectiva.�

��������� Cuando hablamos de tutela judicial efectiva, significa que no alcanza con que nuestra normativa prevea la interposici�n de recursos y su resoluci�n, sino que la resoluci�n tendr� que ser en tiempo y forma para que haya efectivamente justicia.� ���������������������

��������� Cuando hablamos de justicia no estamos hablando solamente de las v�ctimas sino tambi�n de los acusados, aquellos que interponen recursos contra los fallos que discutan su condena y no son resueltos o tardan much�simo tiempo en resolverse. A todo esto se le est� poniendo plazo, que ya lo ha incorporado el C�digo Procesal Penal en lo federal y que muchas provincias -como la de Buenos Aires- ya lo tienen, y que tambi�n establece la falta grave para los jueces que incumplen estos plazos. Sin embargo, a�n falta en el C�digo Procesal Penal de la Naci�n.

��������� Por eso, creemos que es imperioso mejorar el servicio de justicia.� La justicia lenta, no es justicia, y necesitamos que los jueces cumplan con estos plazos.

��������� Por lo tanto, teniendo en cuenta que este proyecto ha sido tratado en la Comisi�n de Legislaci�n Penal y ha sido aprobado por unanimidad, pido a mis colegas que avancemos en su tratamiento. El proceso penal tiene distintas etapas: la de instrucci�n avanza r�pidamente conforme a las caracter�sticas de cada investigaci�n; lo mismo ocurre con el juicio oral, ya que es la parte que se acerca a la sentencia. No pasa lo mismo en la etapa de casaci�n, que es la que registra mayores dilaciones.

��������� El proceso lento y sin definiciones, aquel que no se resuelve en un tiempo razonable, termina revictimizando no solo a las v�ctimas, sino tambi�n a sus familiares, quienes congelan sus vidas a la espera de una resoluci�n y de que se haga justicia.

��������� Por eso, resulta imperioso establecer un nuevo plazo y mejorar el servicio de justicia para todos los ciudadanos, ya que se trata de un servicio p�blico. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la se�ora diputada Rey, por Buenos Aires.

 

Sra. Rey.- Se�or presidente: me ha tocado encabezar este proyecto que, como bien dijo la se�ora diputada Gaillard, la comisi�n ha dictaminado por unanimidad. Esto es destacable, porque demuestra que se trata de una iniciativa que nos cruza a todos los argentinos por igual.

��������� Este proyecto nace de la propia experiencia que, como ciudadana com�n, he desarrollado cuando tuve que iniciar un proceso penal. Todos los ciudadanos que no nos dedicamos al estudio de las leyes, del derecho, debemos empezar por aprender cu�les son las etapas procesales y cu�nto tiempo llevan.

��������� A medida que avanz�bamos, la primera pregunta de cada una de las v�ctimas ‑s� que todas las v�ctimas formulan la misma pregunta‑ fue: �y ahora qu�? Ahora el abogado informa y tienen quince d�as, veinte d�as o tanto tiempo para resolver. As� es hasta que se llega a la instancia de casaci�n.

��������� Cuando se logra la condena, nuevamente preguntamos: �y ahora qu�? Ahora, Casaci�n debe resolver, y es ah� donde las causas duermen.

��������� Esa espera hace trizas cualquier esperanza de alcanzar la justicia. Retrasa el luto, hace que las v�ctimas enfermen y que, en muchos casos, no lleguen a ver el final del camino que emprendieron.

��������� Todos vemos, desde hace muchos a�os, c�mo las causas en el fuero penal federal sufren enormes retrasos. Es una demora que desnaturaliza los tiempos del proceso penal. En muchas ocasiones es grosera y afecta a todas las partes; como bien dijo la se�ora diputada Gaillard, deteriora el acceso de los particulares a la Justicia y la imagen que la sociedad tiene de ella.

��������� �Qui�n no ha escuchado, o a dicho, que la justicia lenta no es justicia? Solo pueden valorar profundamente esta m�xima quienes se han visto envueltos en procesos judiciales. No solo padecen esto los acusados, que necesitan una pronta respuesta a su situaci�n, sino tambi�n, y principalmente, los �nicos protagonistas involuntarios de un proceso penal: las v�ctimas. No podemos mirar hacia un costado, porque la historia argentina tiene innumerables ejemplos de una Justicia que, de tan lenta, fue injusta.

��������� Las demoras se agravan mucho m�s en el fuero federal. Podr�a citar muchos casos, pero solo mencionar� como ejemplo Croma��n. Once a�os llev� a la C�mara de Casaci�n resolver sobre el fallo. �Once a�os!

��������� A la hora de analizar este proyecto, es fundamental recordar que la b�squeda de justicia desgasta al ciudadano com�n. Lo coloca en una situaci�n en la que el tiempo se detiene hasta que se llega a una resoluci�n y se determinan las responsabilidades.

��������� Los tiempos de la Justicia nunca ser�n los que las v�ctimas esperan; pero, s� es necesario que los plazos existan, que las v�ctimas sepan que tendr�n que esperar equis cantidad de tiempo y que, finalizado este, hay una respuesta. Hoy, esa respuesta no la tenemos. Por eso, este proyecto de ley apunta justamente a lograr una sociedad m�s justa.

��������� No entrar� en los aspectos t�cnicos de la iniciativa porque los ha explicado muy bien la se�ora diputada Gaillard. Solo dir� que, a partir de su sanci�n, no solo habr� un plazo para que resuelvan los jueces de casaci�n, sino que adem�s habr� consecuencias para el caso de que no lo cumplan. Cuando las causas se demoran, los �nicos que no sufren las consecuencias son los que imparten justicia. En cambio, las v�ctimas y los condenados ven detenidas sus vidas hasta que alg�n juez tenga la voluntad de sentarse a revisar un fallo.

��������� Es cierto que este problema ya est� contemplado en el nuevo C�digo; pero, su implementaci�n es lenta y no podemos seguir esperando.

��������� Para no seguir revictimizando a las v�ctimas, para que la Justicia se acerque al sentido com�n y a lo que esperan los ciudadanos de a pie, es necesario que tambi�n se establezca un plazo para esta instancia del proceso penal, un plazo prudencial que permita la revisi�n por parte de los magistrados. Es importante que esta instancia del proceso tenga un plazo de finalizaci�n.

��������� Pido a cada uno de mis compa�eros que acompa�en este proyecto de ley. A esto vine a la C�mara de Diputados: a que la experiencia sirva para impulsar mejoras para todos. Seguir� trabajando por esto; se trata de una deuda que ten�a conmigo misma. Cuando me dijeron que Casaci�n no ten�a tiempo, pens� que no pod�a ser as�.

��������� No imagin� que estar�a sentada en una de estas bancas y tampoco que ser�a yo la autora de este proyecto. Hoy, me enorgullece haber tenido la posibilidad de hacerlo porque siento que as� respondo a muchos familiares de v�ctimas que acompa�aron una espera interminable.

��������� No los he defraudado, y sigo apostando a los valores que siempre me motivaron. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Se va a votar nominalmente, en general y en particular, el dictamen de la Comisi�n de Legislaci�n Penal �Orden del D�a N� 238- reca�do en el proyecto de ley de la se�ora diputada Rey y otros se�ores diputados por el que se incorpora el art�culo 469 bis al C�digo Procesal Penal de la Naci�n, sobre plazo m�ximo para la resoluci�n de los recursos de casaci�n (expediente 5.085-D.-2020).

-   Mientras se practica la votaci�n nominal:

 

Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia proceder� a tomar el voto de viva voz a los ocho diputados que figuran logueados pero cuyo voto no ha sido registrado por el sistema.

��������� Se�ora diputada Aguirre, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Bucca �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Est�vez, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Est�vez.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Josefina Gonz�lez, �puede indicar el sentido de su voto?

Sra. Gonz�lez.- Mi voto es por la afirmativa, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Grosso, �puede indicar el sentido de su voto?

Sr. Grosso.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Massetani, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Massetani.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Sarghini, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Vara, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputa Aguirre, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Aguirre.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Bucca, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el se�or diputado Bucca ser� considerado ausente en la votaci�n.

��������� Se�or diputado Sarghini, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el se�or diputado Sarghini ser� considerado ausente en la votaci�n.

��������� Se�or diputado Vara, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Vara.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Por Secretar�a se dar� lectura del resultado de la votaci�n.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Se han registrado 246 votos afirmativos, cero negativos y cero abstenciones.[6]

 

Sr. Presidente (Massa).- Queda sancionado el proyecto de ley. [7](Aplausos.)

��������� Se comunicar� al Honorable Senado.

 

                                                                                                            - 9 -       

entrega de distinci�n al se�or eduardo daniel alegre

 

Sr. Presidente (Massa).- Antes de continuar con el temario, quiero recordar que la C�mara hizo un homenaje de reconocimiento al se�or Eduardo Daniel Alegre, quien particip� en casi todas las sesiones desde el a�o 1983. Fueron mil quinientas treinta y cuatro sesiones. Estuvo adem�s en cuarenta y ocho asambleas legislativas, treinta y siete aperturas de per�odos de sesiones ordinarias y once discursos de asunci�n o de reelecci�n presidenciales.

��������� Trabaja en la C�mara desde 1983 ‑es decir, desde hace treinta y siete a�os‑ y hoy se retira.

��������� Por eso, las autoridades de la C�mara han decidido entregarle una plaqueta en reconocimiento a su labor. (Aplausos.)

-   Puestos de pie los se�ores diputados y el p�blico presente, el se�or presidente de la Honorable C�mara, doctor Sergio Tom�s Massa, hace entrega de una plaqueta al se�or Eduardo Daniel Alegre. (Aplausos.)

 

                                                                                                          - 10 -     

CONSIDERACI�N CONJUNTA DE ASUNTOS

Sr. Presidente (Massa).- Corresponde considerar los dict�menes de la Comisi�n de Presupuesto y Hacienda sobre alivio fiscal a los peque�os contribuyentes, contenido en el Orden del D�a N� 420 y sobre modificaci�n del impuesto a las ganancias, contenido en el Orden del D�a N� 419.

��������� En funci�n de lo acordado en la Comisi�n de Labor Parlamentaria, los dos dict�menes se van a considerar en forma conjunta pero luego se van a votar de manera separada al final de la discusi�n. Por lo tanto, despu�s de los discursos de cierre habr� dos votaciones.

��������� Adem�s, quiero aclarar que los dict�menes en tratamiento son los enviados por el se�or diputado Heller y por la Prosecretar�a Legislativa de la C�mara en el transcurso de la tarde.


AQU� TEXTOS CONSENSUADOS SOBRE LA BASE DE LOS DICT�MENES CONTENIDOS EN LOS �RDENES DEL D�A n� 419 Y 420


Sr. Presidente (Massa).- En consideraci�n en general.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Heller, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Heller.- Se�or presidente: en primer lugar quiero hacer una peque�a correcci�n a lo que usted dijo. El texto definitivo de los dict�menes no los enviamos a la tarde sino a la noche. Creo que uno lo enviamos alrededor de las 21 horas y el otro cerca de las 22 horas. Hasta entonces hemos estado trabajando intensamente, recepcionando inquietudes de diputadas y diputados del espacio del que formo parte ‑el Frente de Todos‑, pero tambi�n de los espacios opositores. Muchos diputados y diputadas podr�n dar fe de lo que digo, porque los textos que les hemos enviado tienen cambios respecto de los dict�menes generados en el debate en comisi�n, ya que hemos recogido muchas inquietudes.

��������� Resalto esto como un valor del funcionamiento del Parlamento y de nuestra manera de trabajar, porque he visto en algunos portales de noticias que algunos de los problemas que hemos resuelto aceptando distintas sugerencias e inquietudes que nos han hecho llegar, se plantean como debilidades o enfrentamientos.

��������� Todas las cosas que hemos puesto en consideraci�n han sido el resultado de las conversaciones que hemos mantenido y de los consensos que hemos logrado.

��������� Como bloque oficialista hemos trabajado en todo momento junto con el Poder Ejecutivo ‑en particular con el Ministerio de Econom�a‑, estableciendo consensos y recogiendo inquietudes que nos hicieron llegar distintos diputados y diputadas.

��������� Creo que es importante aclararlo porque nosotros somos una coalici�n y trabajamos como tal, de modo que es normal que escuchemos diversos matices. No somos una escriban�a y no tratamos cosas que vienen empaquetadas y que no se puede modificar.

��������� En consecuencia, lo que hemos hecho con estos dos proyectos de ley se ajusta a ese esp�ritu. Me siento orgulloso de esta manera de trabajar; creo que es un valor de nuestro espacio y espero que as� sea entendido por el resto de los integrantes de la C�mara y, sobre todo, por quienes nos est�n viendo, que es la ciudadan�a y la opini�n p�blica en general.

��������� Me han limitado a brindar en una sola intervenci�n el informe sobre dos proyectos importantes. En general, ambos proyectos contienen beneficios para la gente. Todo el articulado de los dos proyectos tiene que ver con trasladarle beneficios a la ciudadan�a.

��������� La modificaci�n de la llamada ley de monotributo, que tiene un nombre distinto pero que todos la reconocen de esta manera, est� basada en ese criterio.

��������� Por ejemplo, hemos establecido el sostenimiento de los montos mensuales de las cuotas a ingresar a valores que hemos retrotra�do al mes de diciembre 2020 para cada una de las categor�as, respectivamente.

��������� Por otro lado, hemos hecho un esquema excepcional de actualizaci�n de escalas, ampli�ndolas. En este caso, facilitando, porque esa ampliaci�n arranca de una mucho m�s generosa en la categor�a A, que es la de los monotributistas m�s peque�os.

De manera que es razonable pensar que muchos monotributistas podr�n recategorizarse en categor�as m�s bajas, es decir, con un aporte menor.

��������� Tambi�n hemos planteado un programa que tiene que ver con un sistema de regularizaci�n de deuda para estos peque�os contribuyentes que contempla 60 cuotas que no pasan del 1,5 por ciento mensual.

��������� Podr�a repasar todos los puntos, pero creo que los se�ores diputados han recibido los textos actualizados, excepto el referido a un punto que voy a agregar en este momento. El resto, como dec�a, lo tienen. Tengan en cuenta ‑insisto, tal como lo hemos charlado en la comisi�n‑ que muchas de las sugerencias que nos han hecho llegar y de las conversaciones que mantuvimos durante el d�a est�n reflejadas en el texto que les hemos enviado.

��������� Asimismo, se incluye el beneficio de liberaci�n de multas y dem�s sanciones correspondientes e infracciones formales cometidas hasta el 30 de junio de 2021 que no se encontraran firmes ni abonadas, que operar� cuando se haya cumplido o se cumpla con la respectiva obligaci�n formal.

��������� Ya me refer� a las 60 cuotas mensuales, por lo que creo que quedan planteadas la mayor�a de las cuestiones que presenta el proyecto, sobre todo las modificaciones que hemos hecho recogiendo las inquietudes que nos han manifestado.

��������� Tal como mencion� anteriormente, vamos a introducir una modificaci�n m�s que tiene que ver con el art�culo 15 de este proyecto de ley. Fundamentalmente, lo que estamos haciendo es cambiar la cuenta en la cual se acumular� lo producido en concepto de la cuota especial que establece este r�gimen en el art�culo 11, y por el r�gimen de regularizaci�n de deuda para peque�os contribuyentes. El cambio es que en vez del Fondo de Emergencia y Asistencia creado por el art�culo 6� del decreto 908 del 2 de agosto de 2016 ‑como dice el proyecto que ustedes tienen en mano‑, debe hacerse referencia al Fondo Solidario de Redistribuci�n creado por el art�culo 22 de la ley 23.661. En este sentido, he solicitado a la Direcci�n de la Comisi�n de Presupuesto y Hacienda que les haga llegar esta modificaci�n, que supongo estar�n recibi�ndola en este momento. Mientras explicamos el contenido de la iniciativa, seguramente van a recibir el texto por escrito.

��������� Por la misma raz�n, en el �ltimo p�rrafo del art�culo 15 se establece un apoyo financiero de excepci�n destinado a los agentes del seguro de salud utilizando para ello los recursos disponibles en el Fondo de Emergencia y Asistencia creado por el art�culo 6� del decreto 908 del 2 de agosto de 2016.

��������� Esto es todo lo que tiene que ver con el primer proyecto de los dos que estamos considerando en bloque. Insisto en que a trav�s de esta iniciativa estamos trayendo alivio ‑como hemos denominado este proyecto‑ a 4 millones de monotributistas que estaban preocupados y angustiados porque se les hab�a acumulado deuda. Por eso, esta iniciativa tiene la flexibilidad y facilidades necesarias para que efectivamente esos contribuyentes puedan encuadrarse en el r�gimen.

��������� Podr�a extenderme mucho m�s, pero solo quiero agregar que tambi�n est� contemplada la posibilidad de que quienes excedan la categor�a m�s grande dentro de cierto monto puedan permanecer en el r�gimen de monotributistas y no tengan que pasar al r�gimen general. Es decir que hemos tomando en cuenta la mayor�a de las sugerencias que nos han hecho, sobre todo aquellas que mejoran el proyecto y que no van en contra del esp�ritu de la iniciativa. En este sentido, hubo algunas otras cosas que nos han planteado, que nosotros no hemos aceptado.

��������� En lo que respecta a la otra iniciativa, que tiene que ver tambi�n con beneficios para los contribuyentes, en particular con la idea central de crear mejores condiciones para favorecer el ahorro y la inversi�n en moneda local, en un pa�s que se ve afectado ‑todos lo sabemos‑ por un bimonetarismo que tenemos que ir corrigiendo. Y lo hacemos cuando vemos que el Tesoro consigue renovar sus obligaciones en pesos en el mercado local, y no solo ello, sino que en cada una de las licitaciones de fondos consigue mayores fondos que los que vencen. De esta manera se contribuye a cubrir parte del d�ficit fiscal. Asimismo, como correlato ben�fico, se disminuye la necesidad de emisi�n monetaria o de adelanto del Banco Central. Todas estas cuestiones est�n en l�nea con las proyecciones planteadas en el presupuesto vigente.

��������� �En ese marco, respecto de este otro proyecto que estamos considerando, ustedes han recibido algunas modificaciones a la versi�n original. La principal modificaci�n es la eliminaci�n del art�culo 3� en forma completa. Ello se debe a que generaba un malentendido, porque fue considerado como el intento de grabar los plazos fijos en pesos, cuando en realidad el esp�ritu era lograr una mayor permanencia de los plazos fijos en pesos premiando esa permanencia m�s extensa.

��������� Efectivamente, hemos tenido el tiempo suficiente para analizarlo y, ante la duda, hemos coincidido en que era oportuno y conveniente eliminar el art�culo 3�.

��������� Por la misma raz�n, en el art�culo 2�, en su apartado k), cuando habla de un porcentaje a determinar por la reglamentaci�n del 75 por ciento, se eliminan tambi�n todas las menciones de dicho porcentaje. Estoy repasando cosas que ustedes tienen en su poder.

��������� Claramente, el objetivo es eliminar impuestos en una serie de operaciones que esencialmente tienen que ver con las obligaciones negociables emitidas en moneda nacional que cumplan los requisitos del art�culo 36 de la ley 23.576 y sus modificatorias; los instrumentos emitidos en moneda nacional destinados a fomentar la inversi�n productiva que establezca el Poder Ejecutivo nacional, siempre que as� lo disponga la norma que los regule; las cuota partes de fondos comunes de inversi�n comprendidos en el art�culo 1� de la ley 24.083 y sus modificatorias, y los certificados de participaci�n y valores representativos de deuda fiduciaria de fideicomisos financieros constituidos en los t�rminos del C�digo Civil y Comercial de la Naci�n que hubiesen sido colocados por oferta p�blica con autorizaci�n de la Comisi�n Nacional de Valores, y cuyo activo subyacente principal est� integrado por un porcentaje a determinar en la reglamentaci�n por los dep�sitos y bienes a los que se refieren los incisos g), h), i) y j) de este art�culo.

��������� Por su parte, en relaci�n con el art�culo 1� del proyecto de ley por el que se introducen modificaciones a los impuestos a las ganancias y sobre los bienes personales, se propone la siguiente redacci�n: �Sustit�yese,� con� aplicaci�n� a� partir� del� per�odo� fiscal� 2021� y� siguientes,� el segundo� p�rrafo� del� inciso� h)� del� art�culo� 26� de� la� Ley� de� Impuesto� a� las� Ganancias,� texto ordenado en 2019 y sus modificaciones, por el siguiente: �La� exenci�n� dispuesta� en� este� inciso� tambi�n� comprende� a� los� intereses� o� la denominaci�n que tuviere el rendimiento producto de la colocaci�n de capital en los instrumentos� emitidos� en� moneda� nacional� destinados� a� fomentar� la� inversi�n productiva, que establezca el Poder Ejecutivo nacional, siempre que as� lo disponga la norma que los regule, y en la medida en que no resulten comprendidos en el p�rrafo anterior�.�

��������� Estos son esencialmente los contenidos de los dos proyectos. He tratado de ser lo m�s sint�tico posible. Reitero que todo lo que he comentado ha sido recogido en los textos reelaborados en relaci�n con los dict�menes emitidos en las reuniones de la Comisi�n de Presupuesto y Hacienda y sobre la base de iniciativas que hemos recibido y ponderado. Hemos dado el lugar que les corresponde a todas aquellas que cre�mos que mejoraban el esp�ritu, el contenido y el objeto de ambas iniciativas. En consecuencia, est�n contenidas en esta propuesta final, que es la que sometemos a la consideraci�n de esta Honorable C�mara.

��������� Reitero �y finalizo con lo que comenc�- que como hemos hecho con las distintas leyes que sancionamos en los �ltimos tiempos, como las vinculadas con el impuesto a las ganancias de las personas f�sicas y de las empresas, en todos los casos ha habido una preocupaci�n por disminuir esa carga respecto de aquellas personas que menos ganan, como as� tambi�n en relaci�n con aquellas empresas que son m�s peque�as.

��������� De manera tal que seguimos en esa l�nea, en el sentido de trasladar la mayor cantidad de beneficios sin desatender la necesidad de incrementar los ingresos fiscales, los que a nuestro juicio deben estar basados en el criterio de la progresividad, partiendo de la premisa de la capacidad contributiva y de que el objetivo debe ser la reducci�n del d�ficit fiscal, pero en el marco de un proyecto de crecimiento y no de ajuste.

��������� Todos estos proyectos de ley han sido contemplados en esa filosof�a, visi�n y manera de pensar. Por eso los sometemos a la consideraci�n de esta Honorable C�mara y esperamos que reciban el apoyo de los se�ores diputados y las se�oras diputadas.

��������� Si bien todav�a me restan tres minutos para finalizar el tiempo del que dispongo para hacer uso de la palabra, no los utilizar� con el prop�sito de agilizar el debate, teniendo en cuenta que pr�cticamente es la una de la ma�ana. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la se�ora diputada Aparicio, por Buenos Aires.

 

Sra. Aparicio.- Se�or presidente: este proyecto de fortalecimiento y alivio fiscal para peque�os contribuyentes que hoy sometemos a debate resulta complementario de la ley 27.618, que sancion� este Parlamento y posibilit� la permanencia en el r�gimen simplificado para los peque�os contribuyentes.

��������� Este alivio otorgado a los monotributistas cuyas actividades ven�an resentidas, en primer lugar, por las consecuencias de la ca�da de la actividad econ�mica durante el per�odo comprendido entre 2018 y 2019, y luego a ra�z de la pandemia mundial del COVID-19 registrada en 2020 y 2021.

��������� La segunda ola de esta pandemia nuevamente impact�, tanto sanitaria como econ�micamente, a nuestra poblaci�n. Se impuso entonces la necesidad de asistencia y complementaci�n de la ley promulgada con el objeto de llevar alivio �como dijo el se�or diputado Heller- a cuatro millones de monotributistas.

��������� El proyecto es superador, ya que importa el sostenimiento de los valores mensuales de diciembre del a�o pasado para el semestre que se extiende desde enero hasta junio, un esquema progresivo de actualizaci�n de escalas, un programa espec�fico de alivio fiscal y un r�gimen de regularizaci�n para deudas de monotributistas.

��������� Este proyecto de autor�a suya, se�or presidente, y de otros se�ores diputados, busca, al igual que todos los que ha presentado nuestro gobierno, no solo asistir a los sectores que han sido golpeados, sino que tambi�n puede inscribirse en un programa mayor que tiene como objetivo lograr el crecimiento mejorando la equidad del sistema.

-   Ocupa la Presidencia el se�or vicepresidente 1� de la Honorable C�mara, doctor Omar De Marchi.

Sra. Aparicio.- Seg�n un informe del INDEC, durante abril la actividad econ�mica creci� el 28,3 por ciento en relaci�n con el mismo mes del a�o pasado. Si bien se compara contra una base baja, porque abril de 2020 fue el primer mes del ASPO, la econom�a est� solo un 4,4 por ciento por debajo del nivel registrado en abril de 2019.

��������� Con todo esto el estimador mensual de actividad econ�mica, que re�ne varios indicadores que componen el producto bruto interno, acumul� un alza del 8,2 por ciento al t�rmino del primer cuatrimestre del a�o. El producto bruto interno estacionalizado del primer trimestre de 2021 respecto del cuarto trimestre de 2020 arroja una variaci�n positiva del 2,5 por ciento.

��������� Entonces, tenemos una econom�a en crecimiento con una leve tendencia a la baja del �ndice de inflaci�n. A pesar de ello se nos quiere imputar una avidez recaudatoria cuando en realidad eso no es as�, ya que tanto el Congreso de la Naci�n con el gobierno actual han dado muestras acabadas de que las medidas tributarias adoptadas fueron direccionadas exclusivamente hacia quienes ten�an una elevada capacidad contributiva o patrimonial.

��������� Seg�n el �ltimo informe de la AFIP de marzo de 2021, en los primeros cinco meses de este a�o la recaudaci�n del monotributo aument� un 8,4 por ciento respecto de los primeros meses de 2020. Pero si hacemos la comparaci�n entre mayo de 2018 y el mismo mes de 2019 podemos observar que el crecimiento de la recaudaci�n en ese per�odo fue superior al 30 por ciento. Ello se debi� fundamentalmente al aumento de las cuotas que afrontaron los monotributistas. En cambio, este a�o se aminor� ese incremento buscando un alivio.

��������� Adem�s, se concedi� una equitativa moratoria, cumpli�ndose el objetivo de regularizar la situaci�n fiscal de estos contribuyentes para insertarlos nuevamente en la econom�a formal, que era el objetivo original de la ley.

��������� Por otra parte, como dijo el se�or diputado Heller, generamos un esquema donde se otorga a los contribuyentes un plazo de 60 meses a una tasa subsidiada del 1,5 por ciento como m�ximo mensual y en funci�n de la categor�a, entendiendo que se establece as� un est�mulo al cumplimiento del pago.

��������� Esta administraci�n ha asistido y asiste a sectores bajos y medios, como as� tambi�n al sistema productivo nacional, para evitar la p�rdida de empleo y la actividad productiva. En este sentido, el Poder Ejecutivo ha implementado el IFE, el ATP y los Repro I y II, fortaleciendo as� a aquellos sectores m�s afectados por la pandemia, produciendo el mayor rescate del sector p�blico al sector privado del que se tenga memoria.

��������� Se elimin� el impuesto a las ganancias de los salarios de los trabajadores con ingresos de hasta 150.000 pesos y se exceptu� del pago de dicho tributo al aguinaldo.

��������� El Congreso de la Naci�n sancion� siete leyes de emergencia a ra�z de la crisis producida en 2018 y 2019. Recibimos el pa�s quebrado, con una deuda impagable en los t�rminos que acord� el gobierno anterior.

��������� Asimismo, en el caso de las pymes se sancion� una ley por la que se redujo la al�cuota del impuesto a las ganancias del 30 por ciento al 25 por ciento.

��������� Tambi�n este Parlamento sancion� leyes tendientes a adoptar medidas que permitan asegurar los puestos de trabajo.

��������� Por otra parte, en reuniones de comisi�n escuch� cr�ticas referidas a la inflaci�n. En este sentido, quiero decir que a nuestro gobierno le preocupa este tema y se ocupa de �l durante las veinticuatro horas del d�a.

��������� Desde luego, me alienta que la oposici�n est� preocupada por esto, ya que ello significa que acompa�ar� las medidas que posibiliten lograr una disminuci�n de la inflaci�n. Pero no debemos olvidar que en el per�odo comprendido entre 2016 y 2019 la oposici�n tuvo un alza del �ndice de precios al consumidor superior al 300 por ciento. Es el nivel m�s alto desde la hiperinflaci�n registrada entre 1988 y 1991.

��������� Tenemos mucho por reconstruir. Para ello se necesita de todes, en un marco de debate franco y sin olvidar el lugar que ocupa cada uno. La ciudadan�a no olvida esto.

��������� Por las razones expuestas, adelanto mi acompa�amiento al proyecto en consideraci�n.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Casaretto, por Entre R�os.

 

Sr. Casaretto.- Se�or presidente: venimos a tratar esta iniciativa por la cual se modifica la ley de monotributo. Estamos en un contexto mundial particular. El otro d�a en una charla en la Universidad Aut�noma de Entre R�os, junto a otros colegas profesores, el rector y el decano, analiz�bamos qu� hab�a pasado en el mundo entre fines de 2019 y principios de 2020. Las estimaciones del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial indicaban que en 2020 el mundo iba a crecer el 3,3 por ciento; esto lo publicaron en enero de 2020. Pero lleg� la pandemia a cada rinc�n del mundo y r�pidamente los organismos internacionales tuvieron que revisar esas estimaciones.

��������� Ya en abril del a�o pasado dijeron que la econom�a mundial, en vez de crecer el 3 por ciento, iba a caer el 3 por ciento. Tres meses despu�s tuvieron que revisar nuevamente esas estimaciones y finalmente decir que la econom�a mundial iba a caer el 4,5 por ciento.

��������� Naturalmente, hay una disparidad muy grande a nivel mundial, que tiene que ver con la posibilidad de generar medidas de gobierno en un contexto de pandemia, o sea, de qu� manera los estados nacionales pueden invertir para sostener el nivel de actividad econ�mica, c�mo pueden invertir para sostener los empleos y el nivel de vida de la poblaci�n. Claramente, pueden invertir los recursos que tienen o los que pueden disponer. En este sentido, pueden disponer del cobro de los impuestos, pueden disponer de la emisi�n monetaria y pueden disponer del endeudamiento.

��������� Cuando uno mira c�mo invirtieron los pa�ses desarrollados en el contexto de la pandemia, la mayor�a lo hizo utilizando el endeudamiento. Los pa�ses desarrollados, como Estados Unidos y los de Europa occidental, aumentaron 5 por ciento la incidencia de la deuda como proporci�n del PBI, o sea que accedieron a los mercados de capitales y esos estados nacionales invirtieron en sus econom�as internas.

��������� Entonces, �d�nde impact� m�s la crisis? En aquellos pa�ses que ten�an menos recursos, sobre todo en aquellos que no ten�an capacidad de endeudamiento, como era el caso de la Argentina, que no solo ten�a una deuda alta sino que no ten�a acceso a los mercados de capitales.

��������� Por lo tanto, hab�a que utilizar, por un lado, la pol�tica fiscal, procurando recursos de los sectores con capacidad contributiva, y por otro lado, a partir de la emisi�n monetaria de la contribuci�n que hac�a el Banco Central sobre el Tesoro de la Naci�n Argentina.

��������� Por eso, cuando algunos se preguntan por qu� la crisis impact� m�s en algunos pa�ses y menos en otros, es porque algunos pa�ses ten�an la posibilidad de acceder a m�s recursos que otros. Por eso este Congreso de la Naci�n tuvo que tratar de sancionar leyes que le diera herramientas a nuestro gobierno para poder sostener la actividad econ�mica.

��������� �Qui�n deb�a pagar m�s? Por supuesto, aquellos que ten�an mayor capacidad contributiva. Y por eso en este Congreso fuimos con un aporte solidario sobre las grandes fortunas. Algunos dec�an que no se iba a aprobar, pero se aprob�. Tambi�n dec�an �no se va a aplicar�, pero se aplic�. Algunos dec�an que no era constitucional, pero su constitucionalidad ha sido ratificada. Otros dec�an �nadie lo va a pagar�, pero finalmente lo pagaron, la recaudaci�n est� y en definitiva la Rep�blica Argentina cuenta con recursos para invertir en gastos de la pandemia, en vacunas, en medicamentos, en insumos hospitalarios, en asistencia a las pymes, en IFE, en ATP, en subsidio de tasas, en cr�ditos con garant�a estatal, en las becas Progresar, en inversi�n en barrios populares y en inversi�n en energ�a.

��������� Este Congreso tambi�n rebalance� el impuesto a las ganancias y dijo: si tenemos que hacer m�s intensa la carga tributaria, hag�mosla sobre las empresas que m�s ganaron. Por eso este Congreso modific� el impuesto a las ganancias y puso una escala progresiva del 25, 30 y 35 por ciento, para que no se pague por empresa grande o chica sino para que, en definitiva, paguen m�s quienes ganen m�s y est�n en mejores condiciones de aportar para el crecimiento de la Argentina.

��������� Por el contrario, cuando nos planteamos c�mo proteger a la poblaci�n, decimos que lo debemos hacer con una bater�a de medidas, y b�sicamente lo tenemos que englobar con la inversi�n que el Estado hace sobre aquellos sectores que m�s lo necesitan. Por eso reci�n mencion� las medidas que el gobierno tom� en relaci�n con la pandemia.

��������� Ya en 2020 se planteaba c�mo dinamizar el mercado interno y c�mo mejorar el salario de los trabajadores. En septiembre del a�o pasado, en este Congreso recibimos al ministro de Econom�a, quien al referirse al presupuesto plante� un 29 por ciento de inflaci�n y un 33 por ciento de aumento salarial. Si miramos lo que sucede mes a mes, vemos que la inflaci�n no marcha al ritmo previsto, sino que est� por encima de la estimada.

��������� �A nosotros nos conforma ver que baj� la inflaci�n del 54 registrada en 2019? Digamos que nos conforma relativamente. De cualquier manera, en el �ltimo mes fue del 3,3 por ciento, que es la menor registrada desde noviembre de 2020; es bastante menor que la que dej� el gobierno anterior, pero todav�a est� en un nivel alto.

��������� Entonces, nuestro gobierno tiene que plantear, por un lado, medidas que compensen el salario directo de los trabajadores, para preservar el poder adquisitivo, y por otro lado, medidas que preserven el salario indirecto de los trabajadores y su familia.

��������� Las primeras paritarias que comenzaron a discutirse eran del 32 o 33 por ciento. Nosotros planteamos paritarias libres, sin piso ni techo, para que los representantes de los trabajadores pudieran negociar condiciones libremente en la Rep�blica Argentina. Por eso las primeras paritarias fueron del 32 o 33 por ciento. Despu�s siguieron otras que rondaron el 36 o el 37 por ciento. Alguno se asust� con la paritaria del 40 por ciento para los trabajadores de esta casa, pero nosotros creemos que es justo y que corresponde.

��������� Despu�s vimos paritarias de otras ramas de actividades que lograron aumentos del 42, del 43 y hasta del 45 por ciento. Justamente anoche un compa�ero me coment� el caso de una paritaria que logr� un aumento del 45,2 por ciento, que creo que es la m�s alta hasta el momento. Arriba veo a trabajadores de la ANSES, a trabajadores camioneros y a trabajadores bancarios, por mencionar algunos.

��������� Hoy nuestro gobierno se plantea c�mo abrir las paritarias para asegurar que aquellos que firmaron primero y consiguieron un aumento menor tengan la posibilidad de lograr las mejoras que correspondan en la Rep�blica Argentina. Todas las convenciones colectivas de trabajo se cierran con una revisi�n en octubre o noviembre. Ah� vamos a ver qu� inflaci�n hubo, para que estos aumentos graduales garanticen que los trabajadores tengan aumentos por encima de la inflaci�n.

��������� �Entonces, tenemos que atender la situaci�n de los salarios. Nosotros queremos que por primera vez en varios a�os haya una recuperaci�n del salario real, lo cual no es f�cil; y no es una concesi�n, sino que es una lucha que tiene que dar el movimiento obrero organizado y que este gobierno est� apoyando.

��������� Y al mismo tiempo, con cada uno de los rubros que hacen al salario indirecto. Cuando nosotros discutimos el tema tarifario, estamos discutiendo dinero en el bolsillo de los trabajadores, dinero que se queda para mayor consumo y que antes se iba por los aumentos tarifarios del 1.000, del 2.000 o del 3.000 por ciento que hubo en las tarifas de energ�a el�ctrica y de gas natural y en otros rubros de la actividad econ�mica.

��������� Entonces, queremos m�s salario en el bolsillo de los trabajadores y m�s salario indirecto v�a todos los programas de asistencia p�blica y v�a la protecci�n del tema tarifario.

��������� Tambi�n hablemos de los impuestos, que significan salario directo. En este sentido, nuestro gobierno baj� la carga del impuesto a las ganancias sobre los trabajadores. Esto ya se aplic� en el mes de junio. Ya 1.300.000 argentinos recibieron un beneficio de mayor ingreso disponible por la ley que vot� este Congreso de la Naci�n unos meses atr�s. Ya los jubilados recibieron una mejora en los salarios de junio. Todos los trabajadores activos y jubilados reciben un sueldo anual complementario sin retenci�n del impuesto a las ganancias.

��������� De la misma manera, bajamos el impuesto a las ganancias para las peque�as y medianas empresas. As�, aquellas que pagaban 30 por ciento el a�o pasado empiezan a pagar 25 por ciento, y tambi�n lo hacemos en este rubro en lo relativo al monotributo.

��������� En marzo de este a�o sancionamos una ley en esta C�mara y en abril lo hizo el Senado, su reglamentaci�n se vio demorada y ello gener� un problema de instrumentaci�n en las �ltimas semanas.

��������� Reci�n coment�bamos con una compa�era que si debemos votar una ley, lo hacemos, y si posteriormente tenemos que votar otra, tambi�n lo haremos porque siempre queremos beneficiar a aquellos sectores m�s postergados de la sociedad.

��������� Finalmente, cuatro millones de monotributistas van a recibir los beneficios de este proyecto de ley. Para ello, vamos a congelar la cuota a los valores de diciembre para todo el primer semestre de este a�o, elongamos las escalas hasta un 77 por ciento por aumentar la facturaci�n de la Categor�a A sin pasar a la Categor�a B. Es decir, llevamos un alivio fiscal a aquellos que se pasaron y vamos a dar un plan de pagos para que puedan normalizarse.

��������� Dos millones de monotributistas tienen deudas en la Rep�blica Argentina y les daremos un plan de pagos de hasta 60 cuotas con una condonaci�n total de 20 meses y de multas. Aquel que deb�a 10.000 pesos y por los intereses y multas la suma ascendi� a 20.000 o 30.000 pesos, pagar� 10.000 pesos. Entonces, no hay deuda retroactiva, no hay deuda a determinado organismo de recaudaci�n, eso se corrige. Adem�s, si alguno ya pag� o le descontaron por d�bito autom�tico, generamos un cr�dito a su favor para la cuota siguiente.

��������� En definitiva, estamos avanzando con un proceso que tiende a poner dinero en el bolsillo de los trabajadores y de los jubilados de la Rep�blica Argentina. Con la sanci�n de esta ley se beneficiar�n en el pa�s cuatro millones de monotributistas y 147.000 en la provincia Entre R�os.

��������� Se�or presidente, con orgullo venimos a votar este proyecto y vemos con alegr�a que hemos tenido el acompa�amiento de otros bloques. Muchas veces hacemos cosas que quiz�s la gente no valora, pero seguramente esta s�.

��������� En este sentido, tenemos un o�do escuchando lo que pasa porque cuando hubo alg�n ruido con este tema el presidente de la Naci�n, el ministro de Econom�a y el presidente de esta C�mara se reunieron y al d�a siguiente estuvimos hasta las once de la noche para que varios diputados del Frente de Todos pudi�ramos presentar este proyecto de ley; a la semana siguiente fue tratado en comisi�n y hoy ser� aprobado. �

��������� En cuanto a los vencimientos de junio, pedimos y la AFIP los pas� para agosto para evitar problemas. Lo mismo sucedi� en lo que respecta a la recategorizaci�n de julio que tambi�n pas� para agosto.

��������� Hoy este proyecto de ley obtendr� la sanci�n de esta C�mara de Diputados y seguramente en un par de semanas lograr� la sanci�n en la C�mara de Senadores.

��������� Para finalizar quiero decir que este Congreso est� votando leyes que protegen a los trabajadores, a los jubilados, a las pymes y a los monotributistas. Este es nuestro concepto y nuestra convicci�n. Por eso, es una gran alegr�a que el Congreso de la Naci�n vote esta iniciativa que beneficiar� a cuatro millones de argentinos. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Tiene la palabra el se�or diputado Laspina, por Santa Fe.

 

Sr. Laspina.- Se�or presidente: en primer lugar, quisiera hacer algunas observaciones.

��������� Estamos debatiendo dos proyectos al mismo tiempo. El primero, relativo a los cambios en el monotributo y el segundo, a cambios en el impuesto a las ganancias para determinados activos financieros.

��������� En lo que respecta al primer proyecto de monotributo, b�sicamente es una iniciativa que no merece mayor debate ya que viene a corregir una falla o �dir�a yo- una dilaci�n inexplicable por parte del Ministerio de Econom�a en actualizar las cuotas del monotributo y las bandas de sus categor�as; recordemos que esto fue consecuencia del congelamiento de las jubilaciones.

��������� �Qu� tiene que ver el congelamiento de las jubilaciones decretado por el gobierno el a�o 2020 con el monotributo? Las actualizaciones que correspond�a hacer en el r�gimen de monotributo ‑la movilidad del monotributo tanto en la cuota como en sus escalas‑ estaban atadas a la f�rmula de movilidad de las jubilaciones que fue suspendida por este gobierno en el a�o 2020. Por lo tanto, a principios de 2021 nos encontramos con que no ten�amos c�mo actualizarla.

��������� Entonces, el gobierno env�o un proyecto de ley que se demor� en su tratamiento y posteriormente en su reglamentaci�n. Ello produjo una situaci�n bastante extra�a, ya que unos cuatro millones de monotributistas argentinos se encontraron con una deuda retroactiva por las cuotas que se hab�an actualizado de enero a junio, sin que ellos supieran, incluso en muchos casos sin que pudieran trabajar durante esos meses por las medidas restrictivas implementadas en esos momentos.

��������� De modo tal que este proyecto de ley, que se rodea de un discurso �pico, no hace m�s que corregir un error de gesti�n bastante ins�lito y, por lo tanto, no merece demasiado debate. Esta es la raz�n por la que lo vamos a acompa�ar, obviamente advirtiendo y reclamando ‑como han hecho millones de monotributista‑ por esta falla en la gesti�n del Ministerio de Econom�a de la Naci�n, que se ha tomado much�simo m�s tiempo que el que corresponde para hacer una actualizaci�n que hubiese sido bastante f�cil de hacer y podr�a haberse hecho por decreto, ya que al gobierno le gusta abusar de los DNU.

��������� Hoy en este Congreso de la Naci�n se quiso tratar el proyecto de ley de vacunas, para debatir en el �mbito que corresponde los cambios que se necesitan para que los ni�os con enfermedades de base puedan recibir la �nica tecnolog�a en vacunas que, hoy por hoy, est� autorizada en el mundo, que es la de la vacuna de Pfizer. Sin embargo, el oficialismo se neg�. Parece que lo quiere hacer por decreto de necesidad urgencia, como si el Congreso estuviera cerrado y como si hoy no estuvi�semos reunidos aqu�.

��������� Entonces, cuando lo pueden hacer por decreto no lo hacen, y cuando lo tienen que hacer por ley, tampoco lo hacen; es el mundo del rev�s.

��������� El tema del monotributo podr�a haberse resuelto por decreto porque el gobierno est� autorizado a actualizar las escalas de ese modo y no lo hizo. Entonces, aqu� estamos hoy, eliminando esa deuda rid�cula que se gener� a los monotributistas y ese es el punto central de este proyecto.

��������� Obviamente, existe un ensanchamiento en las primeras bandas de las escalas del monotributo, que nos parece bien, pero en ning�n sentido es un alivio fiscal y esto tiene que quedar muy claro. Lo �nico que estamos haciendo es eliminar esa duda retroactivamente.

��������� Las asociaciones de monotributistas nos llaman y nos exigen ‑como si tuvi�ramos los votos que en realidad no tenemos‑ que se incorpore a este proyecto de ley alg�n alivio fiscal, adem�s de la moratoria y de los planes que tiene, que es b�sicamente reconocer que muchos de estos monotributistas no est�n pudiendo trabajar o que est�n sumamente golpeados por la pandemia.

��������� Entonces, esto no es un alivio fiscal y no se puede rodear de una falsa �pica cuando se trata de subsanar un error de gesti�n. Este es el primer punto que queremos se�alar.

��������� Por otra parte, cuando escucho hablar a algunos dirigentes del oficialismo sobre lo que pasa en la econom�a, creo que el grado de distancia entre la pol�tica y la sociedad es cada vez mayor y lo mismo sucede con el tema de las vacunas. Digo esto porque hoy tuvimos un ejemplo de insensibilidad pol�tica total, de c�mo el Congreso de la Naci�n se niega a cambiar una �palabrita� en un proyecto de ley para que se pueda vacunar a cien mil chicos que lo necesitan.

��������� Lo mismo sucede cuando se habla de econom�a. Aqu� escuch� hablar de paritarias de aproximadamente el 40 por ciento. Al respecto, debo se�alar que se trata solo de argentinos que est�n en la formalidad laboral, porque en la informalidad laboral esas paritarias no existen.

��������� En segundo lugar, estamos hablando de un pa�s que tiene una velocidad inflacionaria que, seg�n los �ltimos datos, ya est� en el 50 por ciento interanual y que en los �ltimos seis meses viene navegando alrededor del 60 por ciento anualizado.

��������� Entonces, �de qu� recomposici�n salarial estamos hablando? Los salarios reales en Argentina est�n cayendo fuertemente y la econom�a no crece desde principios de a�o.

��������� Para hacer una comparaci�n el gobierno toma como base los d�as de la pandemia ‑cuando nos ten�an a todos encerrados con cien casos diarios, corr�an los meses de marzo, abril, mayo, junio del a�o pasado‑, cuando obviamente hab�a un derrumbe de la econom�a, y establece que luego de la normalizaci�n hubo un rebote.� Pero la econom�a que tuvo un rebote a la salida de la enorme y largu�sima cuarentena que impuso el gobierno hoy est� estancada. Esto es lo que muestran los n�meros que tengo ac� para mostrarles. No solo est�n cayendo los salarios sino tambi�n toda la econom�a. Todos los sectores est�n en ca�da y esto tiene que ver con una inflaci�n que se ha acelerado y que ha destruido el poder de compra del salario y sobre todo de las jubilaciones y pensiones. El cambio de f�rmula de actualizaci�n de las jubilaciones y pensiones, que aqu� se promocion� como una reivindicaci�n en un contexto de aceleraci�n inflacionaria, lo �nico que ha hecho es desprotegerlas.

��������� Todo el ajuste fiscal que ejecut� Mart�n Guzm�n en la primera parte de este a�o tiene que ver con la licuaci�n de la jubilaciones y pensiones a partir de la nueva f�rmula, con el impuesto a las grandes fortunas y con el boom de la soja. Hoy, el ajuste fiscal que sotto voce aplica el ministro Mart�n Guzm�n se carga sobre esos argentinos, pero esto no ha podido ni alcanzado para bajar la tasa de inflaci�n.

��������� En la Argentina actual, tengo ac� los n�meros del INDEC, el ingreso medio de los trabajadores es de 42 mil pesos; el de los varones es de 48.570 pesos y el de las mujeres es de 36.123. Esto se refiere a la poblaci�n con ingresos. No estoy hablando del ingreso medio familiar que es a�n mayor. Este es el drama de la Argentina del 50 por ciento de pobreza. Este es el drama de la Argentina que ha vuelto a caer despu�s del rebote de la pospandemia porque no encuentra un horizonte que no tiene que ver con la crisis sanitaria sino con la falta de rumbo econ�mico, el desorden administrativo y el caos macroecon�mico en el que est� navegando el gobierno nacional. Esto se ve no solo en la estampida de las empresas, en los 1.600 puntos de riesgo pa�s, en la recategorizaci�n que se ha hecho ahora de la Argentina como un pa�s que ni siquiera est� en un �ndice en particular, sino que figura como un caso aislado.

��������� Los monotributistas est�n sufriendo todo ese contexto. El proyecto de ley que hoy votaremos no debe ser vendido como un acto de reivindicaci�n y como una �pica, sino que debe ser reconocido como lo que es: un error administrativo injustificable del Ministerio de Econom�a que le gener� un dolor de cabeza enorme a millones de monotributistas que hoy subsanaremos en una simple ley que no implica en ning�n sentido un alivio tributario para esos contribuyentes. Gracias, se�or presidente. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- �En uso del tiempo de bloques, tiene la palabra el se�or diputado Pastori, por Misiones.

 

Sr. Pastori.- Se�or presidente: este debate podr�amos denominarlo �Los contribuyentes en su laberinto�. Este pretendido r�gimen denominado �simplificado� es el mejor ejemplo de un complej�simo r�gimen tributario que abarca a cuatro millones de los llamados monotributistas.

��������� Desde hace tiempo y debido entre otras cosas a la gran y profusa cantidad de normas dictadas ‑muchas veces con plazos de cumplimiento faltos de racionalidad, con la p�gina web de la AFIP que se satura y no funciona en reiteradas ocasiones y con aplicativos que llegan a destiempo‑, la vinculaci�n de los contribuyentes y de los profesionales con los organismos tributarios se ha tornado muy dificultosa. Eso sucede pese a los permanentes reclamos y protestas realizados por las instituciones que agrupan a los profesionales que en muchas oportunidades ni siquiera son atendidos por las autoridades del Ministerio de Econom�a ni el organismo fiscal.

��������� Este proceso se inicia el 30 de diciembre de 2020 cuando el Poder Ejecutivo env�a al Congreso de la Naci�n un proyecto de ley que denomin� R�gimen de Sostenimiento e Inclusi�n Fiscal para Peque�os Contribuyentes. Debo leer el t�tulo porque son campeones para nombrar las leyes. Se solicit� la consideraci�n de esta iniciativa durante el per�odo de sesiones extraordinarias. El proyecto reci�n fue sancionado por el Congreso el 8 de abril de este a�o, promulgado por el Poder Ejecutivo el 20 de abril y reglamentado por este un mes despu�s, el 24 de mayo, por medio del decreto 337/21. Se termin� de reglamentar por la AFIP el 2 junio por medio de la RG 5003/2021. Es decir, transcurrieron m�s de cinco meses desde que se envi� el proyecto hasta que se aprob�, lo que origin� el problema que hoy esta iniciativa trata de resolver bajo el nombre de Alivio Fiscal.

��������� No cabe ninguna duda que el Estado nacional origin� esta mora y que la AFIP pretendi� hacerla cumplir a los contribuyentes adheridos al r�gimen simplificado haciendo retroactivo el pago del ajuste de la cuota mensual de enero cuando ya corr�a junio. Se trat� de una sobreactuaci�n de la AFIP que origin� el l�gico reclamo del universo de cuatro millones de monotributistas. El organismo recaudador ignor� el principio denominado efecto liberatorio del pago, por el cual cuando un contribuyente paga en tiempo y forma en base a la ley vigente en cada momento, queda liberado de su obligaci�n tributaria. Incluso hay doctrina sobre el punto de la Corte Suprema de Justicia de la Naci�n.

��������� La AFIP ignor� ese principio y pretendi� de manera absolutamente ilegal, irracional e inconstitucional ‑por lo que dec�a reci�n‑ cobrar el retroactivo de seis meses a los monotributistas. Adem�s, quiso hacer esto en medio de un contexto de un pa�s que sufre los efectos de la pandemia por una muy mala gesti�n tanto sanitaria como econ�mica, con una situaci�n complicada de por s� y, adem�s, donde el mismo Estado reconoce cu�n afectados est�n los monotributistas al permitirles acceder al programa REPRO 2. Si bien el Estado acepta la delicada situaci�n que atraviesa el monotributista, al mismo tiempo le reclama un retroactivo de seis meses.

��������� Esta situaci�n origina este proyecto de ley al que le damos la bienvenida y que corrige este absurdo provocado por la mala actuaci�n del organismo fiscal a cargo de la licenciada Marc� del Pont.

��������� El proyecto de ley contempla otras cuestiones como el aumento de los par�metros de facturaci�n bruta anual. Esto nos parece bien, es necesario hacerlo porque est�n muy desactualizados. Tambi�n propondremos en el tratamiento en particular que se aumente otro par�metro que no ha sido considerado en la iniciativa cual es el monto de los alquileres devengados. Para permanecer en la categor�a A y B que concentra el 64 por ciento de los contribuyentes, el monto de alquiler devengado no debe superar los 105.916,77 pesos, lo que implica un promedio mensual de 8.826,40 pesos. En el cuarto trimestre del a�o pasado cualquier local comercial de hasta 30 metros cuadrados en la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires ya estaba como m�nimo en el orden de los 20 mil pesos y hasta 60 metros cuadrados entre 30 y 40 mil pesos.

��������� Entonces, pretender un par�metro para permanecer en las categor�as A o B de un alquiler que no supere los 8.800 pesos est� absolutamente fuera de la realidad. Este tema tambi�n es necesario corregirlo en forma urgente.

��������� Vamos a proponer agregados de vencimientos de algunas obligaciones como, por ejemplo, la cuota mensual del mes de julio. Este proyecto de ley seguramente tendr� media sanci�n hoy y en un par de semanas se aprobar� en el Senado. Pero con la baja velocidad que caracteriza al Poder Ejecutivo para reglamentar, promulgar y hacer que la AFIP lo ponga en vigencia, cuando esto ocurra ya habr� vencido la cuota del mes de julio, que es el d�a 20. Teniendo en cuenta que las cuotas de enero a junio se pasaron correctamente al 5 de agosto, habr�a que hacer lo mismo con la cuota del mes de julio. De lo contrario, va a llegar el d�a 20 y vamos a encontrarnos exactamente con el mismo problema.

��������� Se�or presidente: usted incluso mencion� que la recategorizaci�n que se deb�a hacer en julio se habr�a pasado a agosto. En realidad, lo que se hizo fue suspenderla ‑porque si no deber�a estar vigente a partir de hoy, que es 1� de julio‑ hasta tanto se sancionara este proyecto de ley. En verdad, lo que deber�a hacer la AFIP es pasar esta recategorizaci�n hasta la fecha del vencimiento de la cuota del mes de agosto, de modo tal de darle un tiempo suficiente a los contribuyentes para que puedan hacer todos los tr�mites administrativos correspondientes. Si no, vamos a solucionar un problema y vamos a crear otro a corto plazo por falta de una visi�n m�s amplia y a futuro.�����

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Comisi�n de Previsi�n y Seguridad Social, doctor Marcelo Pablo Casaretto.

Sr. Pastori.- Estas son las cuestiones que vamos a proponer. Obviamente, estamos acompa�ando la moratoria que se les otorga a los monotributistas que tienen una mora del 50 por ciento de sus obligaciones debido a la situaci�n que comentaba al comienzo de mi exposici�n. Lamento que una vez m�s los grandes olvidados de los proyectos del gobierno sean los aut�nomos, quienes sufren las mismas vicisitudes que los monotributistas pero que fueron olvidados cuando se modific� la ley de ganancias en beneficio de los trabajadores bajo relaci�n de dependencia, que vuelven a ser olvidados en esta norma.

��������� Por �ltimo, en este minuto que me queda, quiero referirme al segundo proyecto. Con la modificaci�n que anunci� el presidente de la C�mara de eliminar el art�culo 3� de la cl�usula antielusi�n, que hac�a de cumplimiento casi imposible la pretendida exenci�n que se daba en el art�culo 2� de bienes personales para determinadas inversiones en pesos, el proyecto ha quedado en l�nea con lo que nosotros estamos decididos a apoyar. En consecuencia, tambi�n adelanto que vamos a acompa�ar este segundo proyecto con esta modificaci�n que anunci� tanto el presidente de la C�mara como el presidente de la Comisi�n de Presupuesto y Hacienda.

���������

Sr. Presidente (Casaretto).- Continuando con la lista de oradores, tiene la palabra el se�or diputado Sarghini, por Buenos Aires.

-   Se interrumpe el audio.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Mientras mejoramos la conexi�n del diputado Sarghini, seguimos con la lista de oradores.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Juan Carlos Giordano, por Buenos Aires.

 

Sr. Giordano.- Se�or presidente: en nombre de Izquierda Socialista, voy a plantear la misma cuesti�n que plante� en la reuni�n de Labor Parlamentaria. Llama la atenci�n que se traten juntos estos dos proyectos. Paso a explicar por qu�. Parece que esta ley es un supuesto alivio fiscal para los monotributistas, pero para nosotros no lo es porque mantiene el aumento del 35 por ciento del monotributo. Entonces, es raro que se diga que se le pone plata al bolsillo de la gente porque, en todo caso, si han tenido que retroceder con el cobro de la deuda de enero a julio es por la rebeli�n que hubo ante ese cobro: llegaron 100.000 firmas de monotributistas a la Casa Rosada.

��������� Ahora bien, este proyecto de ley va junto a otro que es m�s que un alivio: es un perd�n impositivo que exime de impuestos a las ganancias a la patria financiera ‑podr�amos aclarar, en pesos‑ que incluye a grupos y fondos de inversi�n. Esto es vergonzoso. Podr�amos decir que es un proyecto de ley al estilo Macri, con la particularidad de que la ha enviado Alberto Fern�ndez, quien recibe el apoyo de Juntos por el Cambio tanto para el dictamen como para la aprobaci�n en esta sesi�n.

��������� Que se traten juntos porque se trata de impuestos no tiene nada que ver. Lo que pasa es que quieren hacerlo pasar como diciendo: �Qu� bien, este Congreso vota iniciativas progresivas para la gente, los monotributistas, las pymes y ‑como escuch� reci�n‑ los jubilados�. Nosotros tenemos una visi�n totalmente opuesta. Vamos a desenmascarar esto. Se ratifica el 35 por ciento del monotributo a 4.080.000 monotributistas. El propio gobierno reconoce que los dos tercios de ellos ganan una miseria. Ni siquiera facturan 30.000 pesos por mes. Est�n precarizados, como ocurre por ejemplo con las mujeres j�venes que atienden la l�nea 144 de denuncias contra la violencia de g�nero, con los prestadores de la salud, con los acompa�antes terap�uticos, con los artistas, con los j�venes profesionales, con los que hacen peque�os oficios y con los que tienen peque�os comercios. Si tienen una deuda o est�n morosos es porque muchos de ellos no pudieron trabajar ni facturar en pandemia. Adem�s, son los monotributistas que tienen limitado el acceso a las obras sociales y los que se van a jubilar con la m�nima, est�n en la categor�a que est�n, es decir, con 23.000 pesos, mientras que la canasta para un jubilado est� en 69.000 pesos.

��������� A muchos de ellos les sacaron hasta el miserable IFE de 5.000 pesos. Solo el 21 por ciento de la planta de las y los trabajadores del INDEC tiene estabilidad laboral. El resto est� precarizado, es monotributista y tiene contratos basura. Y podr�amos seguir.

��������� Por eso, nuestra propuesta es no al aumento del 35 por ciento, sino que se los ayude con un IFE de 40.000 pesos. Que el gobierno termine con el fraude laboral contra los monotributistas, quienes est�n precarizados y tienen contratos basura en el Estado y en los privados. Los Estados nacional y provinciales son la cabeza de la contrataci�n fraudulenta.

��������� Ahora bien, el otro proyecto ‑ya que nos obligan a discutir dos en uno‑ dice que se exime del pago de ganancias los intereses originados en los dep�sitos en instituciones financieras en moneda nacional, as� como los intereses producto de la colocaci�n de capital en instrumentos emitidos en moneda nacional. Est� todo dicho. Y adem�s dice que ya hay 35.000 millones de pesos en estos dep�sitos. Mientras tanto, un trabajador promedio percibe 40.000 pesos y la canasta familiar est� en 99.000 pesos. Un jubilado o jubilada percibe 23.000 pesos. �Qui�nes son los que invierten en esos 35.000 millones de pesos? �Los jubilados? �Un trabajador? �Un monotributista? No, los beneficiarios de la eximici�n del impuesto a las ganancias son los especuladores, que trafican con d�lares, ponen en pesos, buscan tasas de inter�s, lelic, lebac, etc�tera. Ya sabemos.

Se benefician los bancos, los que cobran las comisiones como Galicia, Santander, Banco Macro, HSBC, Credicoop, y la lista sigue.

��������� Lo vergonzoso de esto son los argumentos que se usan. Por ejemplo, la ley dice que estos incentivos tributarios apuntan al crecimiento econ�mico con inclusi�n social. �De d�nde saca el gobierno que no cobrar impuesto a las ganancias a especuladores significa que van a abrir una f�brica, que van a dar un aumento de salario o que van a dar empleo? �D�nde ocurre eso? En ning�n lado.������������������

��������� Se dice que esta ley va a impedir el estrangulamiento por la falta de divisas, pero la falta de divisas se da por la fuga de capitales, porque no se nacionaliza la banca y el comercio exterior; la fuga de divisas es para los pagos de la deuda. Se habla de que esto impide la fuga de divisas, pero el gobierno acaba de reconocer que va a pagar 430 millones de d�lares al Club de Par�s.

��������� Ten�amos una moci�n de privilegio, porque podemos hablar, porque hay referentes pol�ticos sindicales del peronismo que dicen que se tendr�an que suspender los pagos de la deuda externa mientras dure la pandemia. Estamos de acuerdo, efectivamente. Los invito entonces a que hagan esta cr�tica a su propio gobierno. �C�mo se va a pagar al Club de Par�s en medio de la pandemia? Entonces, que no se diga que se le pone plata al bolsillo de la gente.

��������� Se dice que el Estado est� presente en la pandemia. Estar presente no significa sacarle a la jubilada y al jubilado la movilidad jubilatoria o sacar el IFE; si hubiera un Estado presente en el medio de la pandemia, se habr�an incautado las 100 millones de dosis de la vacuna que se produce en Gar�n para inmunizar a millones que la necesitan.

��������� Concretamente, en esta intervenci�n de dos por uno queremos denunciar el doble discurso del gobierno que impulsa leyes diciendo que le pone plata en los bolsillos de la gente cuando es lo opuesto. Much�simas gracias.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Mientras continuamos tratando de mejorar la conexi�n del diputado Sarghini, tiene la palabra la se�ora diputada �vila, por Tucum�n.

 

Sra. �vila.- Se�or presidente: en primer lugar tenemos que aclarar que esta norma que estamos tratando nace ante el reclamo generalizado de miles de monotributistas que obviamente pusieron el grito en el cielo cuando se dieron cuenta de que le cobraban deudas retroactivas debido a un error del propio Estado nacional. Esto hay que aclararlo desde el principio.

��������� �En segundo lugar, quiero decirle, se�or presidente, que en el articulado de esta norma hay una gran contradicci�n porque en su art�culo 1� dice que su objetivo principal es dar mayor alivio fiscal y previsibilidad a la actividad econ�mica de los monotributistas. Nos llama poderosamente la atenci�n estas palabras ins�litas que se utilizan.

��������� Por un lado, mayor alivio fiscal implicar�a que ya existe y lo que se busca ahora es agrandar ese alivio fiscal para ese sector que obviamente es uno de los m�s castigados y m�s golpeados por el Estado, no solamente por la pandemia ‑una de las m�s largas del mundo, de m�s de quince meses de confinamiento‑, sino porque adem�s esta gente no pod�a trabajar. Son monotributistas profesionales, peque�os y medianos comerciantes, personas con oficios y que lamentablemente cuando necesitan alg�n pr�stamo del Banco Naci�n se les hace imposible acceder a ellos porque uno de los requisitos que les piden es que tengan la cuota al d�a. Pregunto, �c�mo van a pagar si durante quince meses no han podido trabajar? Creo que no se dan cuenta de la dimensi�n de lo asfixiado que est� el sistema. As� que, hablar de mayor alivio fiscal me parece realmente ins�lito.

��������� La segunda palabra que tambi�n se utiliz� en este recinto es �previsibilidad�. Se la mencion� tambi�n cuando est�bamos discutiendo el proyecto de ley de biocombustibles, pero en materia de ordenamiento tributario y en cuanto a las medidas econ�micas y decisiones pol�ticas no hay nada m�s lejos que esto. Si realmente existiera previsibilidad no tendr�amos que estar tratando este proyecto, no tendr�amos que estar corrigiendo una ley que se aprob� en abril de este a�o y que obviamente dejaba a los monotributistas injustamente en condici�n de deudores morosos retroactivos por una demora en actualizar par�metros y categor�as atribuidas al Estado. Realmente pagaban justos por pecadores.

��������� Si existiera previsibilidad no tendr�amos que estar preguntando todos los d�as a cu�nto cierra el d�lar oficial, a cu�nto cerr� el d�lar blue, qu� empresa se va del pa�s, qu� pyme est� cerrando, qui�n se queda sin trabajo, qu� argentino puede llegar hasta fin de mes con un plato de comida en la mesa, qu� pasa con los precios de los alimentos, qu� pasa con la inflaci�n o por qu� no llega la segunda dosis de la vacuna Sputnik.

��������� Por otro lado, lo que pas� hoy fue algo terrible porque demuestra a las claras la grieta que existe entre las clases pol�ticas ‑y me hago cargo de la parte que me corresponde‑ y la sociedad. Esta falta de empat�a, esta falta de sensibilidad, de no haber hecho posible que 10.000 ni�os, ni�as y adolescentes vulnerables accedan a la vacuna para su mejor calidad de vida es realmente lamentable. Y que el presidente de la Comisi�n de Acci�n Social y Salud P�blica, un m�dico pediatra, adem�s justifique esta decisi�n me parece de una crueldad pocas veces vista y habla del alejamiento que existe entre los pol�ticos y lo que pasa por la agenda de la gente. Las vacunas est�n todav�a en la agenda de la gente y sobre todo cuando hablamos de los ni�os.

��������� Se�or presidente: si hay algo que dec�a Eva Per�n era que los privilegiados son los ni�os y hoy no se vio esto ac�. As� que, creo que esto es absolutamente lamentable.

��������� Vuelvo al tema que nos ocupa. Creo que esta es una soluci�n tard�a a la aparici�n de la ley 27.618 que, en su momento, cuando sali� la resoluci�n de la AFIP, muchos de los diputados hicimos objeciones. Obviamente voy a acompa�ar este proyecto de ley. Ojal� que una vez que sea ley no se repita la tardanza del Estado nacional y del Poder Ejecutivo nacional en su puesta en funcionamiento.

��������� Para finalizar, voy a hacer un juego de palabras de Guido Kaczka: este proyecto de ley es bueno, pero no tan bueno. Muchas gracias, presidente.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- �Continuamos tratando de mejorar la conexi�n del diputado Sarghini.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Rodr�guez Sa�, por Buenos Aires.

 

Sr. Rodr�guez Sa�.- Se�or presidente: la verdad es que estoy impactado y asombrado por los discursos de los diputados preopinantes.

��������� En principio me quiero abocar al proyecto que estamos tratando que describi� muy bien el miembro informante de la comisi�n, el diputado Carlos Heller, y usted mismo, diputado Casaretto. Estoy sorprendido por lo que dijeron los t�cnicos especialistas de Juntos por el Cambio. Lamentablemente el diputado Laspina no est� presente, pero ha dicho que eliminamos esta deuda rid�cula que le generamos a los monotributistas. �Juntos por el Cambio hablando de deuda rid�cula! La verdad es que es un alivio fiscal este blanqueo; s�, es un blanqueo, un sinceramiento, 60 cuotas, 4.000.000 de monotributistas beneficiados. Es un blanqueo para los trabajadores, los cuales dos tercios son de las categor�as A y B, y donde hay una recategorizaci�n para que paguen menos much�simos argentinos que sufrieron la pandemia y que ya ven�an en mora, sin pagar en el a�o 2018 y en el 2019.

��������� Entonces, yo s� estoy asombrado e impactado de que hablen de deuda rid�cula, como dijo Luciano Laspina y lo repito, porque cuando lo repito trato de incorporarlo, porque me asombro que hablen de deuda rid�cula ustedes, los de Juntos por el Cambio, que han endeudado el pa�s.

��������� Cuando hoy la presidenta de mandato cumplido Cristina Fern�ndez de Kirchner va a Lomas de Zamora a La Barriada y pide un consenso, como pidieron un consenso muchos de ustedes, diputados preopinantes, entre la dirigencia pol�tica en este momento excepcional, extraordinario, del mundo, donde el mundo se est� cayendo, donde no crece ning�n l�der, donde caen todos los productos brutos internos, excepto de un pa�s que queda muy lejos, hagamos un consenso los que tenemos responsabilidades como nos pide la presidenta.

��������� Y todo tiene que ver con todo. Laspina, econom�a, nosotros alejados de la representaci�n de la gente. El jefe pol�tico de ustedes, Mauricio Macri, est� vacacionando en Espa�a. A los bonaerenses nos prometieron durante cuatro a�os que nunca nos iban a abandonar; Mar�a Eugenia Vidal, que nos dijo en la cara �nunca los voy a abandonar, yo soy bonaerense como ustedes�, nos abandon� y quiere irse a la ciudad de Buenos Aires. Es v�lido, pero nos fall� y que quede bien claro.

��������� Me asombra cuando dicen que los dirigentes, funcionarios y legisladores del Frente de Todos tenemos falta de representatividad y falta de situaci�n y de objeto de realidad. �Por qu� me asombra? Y todo tiene que ver con todo. Cuando Nancy Pazos, panelista de Todo Noticias, en 2019 critic� al ministro de Econom�a que ustedes ten�an, que era Dujovne, porque le hizo mucho da�o a los argentinos y a las argentinas, el diputado Waldo Wolff la trat� de nazi por criticarlo. Nancy Pazos era una persona nazi por criticar a un ministro econom�a. No se critica a una religi�n, no se persigue ideol�gicamente a alguien, se critica, se opone, se argumenta sobre sus pol�ticas p�blicas, que fueron da�inas para nuestro pueblo.

��������� Me r�o cuando hablan de nuestros ni�os, cuando Mar�a Eugenia Vidal ven�a y pon�a la tortita frita, el mate y dec�a �ac� estoy, cercano a vos� y abrazaba a un ni�o en un jard�n, por ah� un curita le abr�a la puerta y se ten�a que ir r�pido, porque el pueblo no es tonto y porque el pueblo no se olvida y porque tiene memoria reciente y sabe lo que hicieron ustedes y sabe lo que est� pasando en el mundo y sabe d�nde estamos nosotros.

��������� Hoy Cristina pide esta unidad nacional, esta responsabilidad que tenemos que tener, ustedes y, sobre todo, los que contrajeron la deuda, pero no la deuda rid�cula con los monotributistas de la que habla Laspina, sino la deuda que hicieron con todos los argentinos a trav�s del FMI.� �Y c�mo quieren saldarla? �Con hambre del pueblo? �C�mo quieren saldarla? �Qu� propuestas hacia delante tienen?

��������� No me extra�a ‑y voy cerrando el hilo‑ que Waldo Wolff hoy a trav�s de las redes sociales �a quien tampoco lo encuentro en este recinto trabajando actualmente‑ haya tratado a la compa�era vicepresidente de la Naci�n de fascista. Creo que es faltarle el respeto a un mont�n de personas.� Un mill�n de italianos murieron con Mussolini; el juda�smo mismo sufri�.� Es bajarle el precio con todas las persecuciones, el holocausto� �Hablar de que en Argentina de hoy, del 2021, estamos viviendo un fascismo? Es algo que hay que repudiar, porque despu�s se hacen naturales estas cuestiones y la verdad que el �nico gobierno que persigui� a los opositores fue el de ustedes.

��������� A esta altura del gobierno en la �poca de Macri, en 2017, hab�a 25 dirigentes o personas ligadas a lo que fue el gobierno de 2003 a 2015 detenidas, presas. �Saben cu�ntas personas hay ligadas al macrismo con causas judiciales presas, y yo le puedo nombrar un listado enorme? Gabriela Michetti, vicepresidenta del Senado, contrataciones ac� al lado, en el Senado, que est� procesada y no s� qu� pas�; Aranguren, por incompatibilidad por los negocios con Shell; Garavano, Arribas, espionaje ilegal. No es fascismo espiar al hermano, espiar a Vidal; creo que hasta espiaron al mismo Waldo Wolff. Y ah� encuentro un s�ndrome de Estocolmo raro en ustedes, que defienden lo que los perjudic�, pero, bueno, creen que es parte de un sistema. Mario Quintana, Flybondi...

��������� Hay que nombrarlo porque nos olvidamos, pasa, se creen que el pueblo tiene memoria a corto plazo y que no sabe qui�n lo representa, qui�n lo benefici�, qui�n le minti�, qui�n le prometi� el mill�n de viviendas, qui�n le prometi� la pobreza cero, qui�n le permiti� y prometi� combatir al narcotr�fico. Dante Sica, con sus subsidios; Oscar Aguad, perdonando el Correo; todos libres. El Poder Judicial es independiente, claramente.

��������� Pero si hablamos de fascismo y de persecuci�n, la verdad es que en la Argentina no lo viv� desde que nac� en democracia, ni siquiera en el gobierno ustedes.� Pero si hablamos de persecuci�n y de relacionarnos a un gobierno autoritario, que persigue al que piensa distinto, yo me acercar�a m�s a los a�os que van de diciembre del 2015 a diciembre del 2019.

��������� Para ir cerrando, se�or presidente, por respeto a las v�ctimas de Mussolini, a las v�ctimas del nazismo, tratemos de elevar la discusi�n con m�s altura. Cuando no hay argumentos pol�ticos se usan esos artilugios para correr ‑como decimos futbol�sticamente‑ el arco. Se corri� con Nancy Pazos con Dujovne, se corri� hoy con Cristina. Hag�monos cargo todos, los que contrajeron la deuda, nosotros que estamos gobernando hoy y saquemos la Argentina adelante. Con hambre y ajuste, No. Ese era el modelo de ustedes; fall�. Bueno, vamos para adelante.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Me informan desde Direcci�n de Modernizaci�n que el diputado Sarghini ha normalizado la conexi�n.

��������� Tiene la palabra diputado Sarghini, por Buenos Aires.

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Casaretto).- Lo vemos que habla, pero no lo escuchamos.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado V�ctor Hugo Romero, por C�rdoba.

 

Sr. Romero (V.H.).- Se�or presidente: este proyecto de ley que estamos analizando, con respecto a modificaci�n al r�gimen simplificado para peque�os contribuyentes, trae cierta certeza a una gran incertidumbre que se hab�a generado en los �ltimos tiempos producto de la implementaci�n de la sanci�n de la ley 27.618, que gener� zozobra y malestar entre los monotributistas por la determinaci�n de deudas sobre impuestos ya pagados, ya cancelados.

��������� El eje de este proyecto tiene varias aristas que, en t�rminos generales, traen cierta certeza, pero no solucionan el problema de fondo del monotributista. El sostenimiento de valores mensuales de enero a junio es un dato importante para dar una soluci�n al planteo que mencion� anteriormente. Pero si decimos que dos de cada tres monotributistas est�n en las categor�as A y B, estamos diciendo que son microemprendedores, trabajadores de oficio, que han sido golpeados por la crisis econ�mica, producto de las circunstancias que vivimos en el pa�s y que no han recibido los subsidios necesarios para cubrir ese d�ficit y la pelean todos los d�as.

��������� Por eso, ser�a bueno hacer extender este sostenimiento de valores mensuales por todo el a�o 2021. No es alto el costo fiscal que tendr�amos. Ser�a bueno incluir dentro de este sostenimiento de los valores no hasta junio de 2021 sino incluirlo a todo el a�o 2021.

��������� Tambi�n este proyecto habla de incremento de las escalas a partir del primero de julio, pero luego, en un agregado que mencion� el presidente, producto de algunas modificaciones, esas escalas van a ser tenidas en cuenta no tan solo para categorizaciones a partir del segundo semestre 2021, sino que se adelantan. Esto es bueno, pero tambi�n es cierto, y hay que decirlo, que el incremento de estas categor�as es escalonado, parte de un 36 y termina en un 5.

��������� Este r�gimen simplificado de peque�os contribuyentes ha sufrido siempre, ya hace muchos a�os, desde su creaci�n, un achatamiento en los par�metros de ingresos, que es uno de los que determinan la categor�a. En el a�o 1998 el ingreso m�ximo de la categor�a m�xima era de 144.000 pesos, si lo actualizamos a valores de 2021 seg�n el INDEC son 8.670.000 y hoy estamos proponiendo 3.700.000.

��������� El verdadero objetivo cuando se cre� el r�gimen simplificado de peque�os contribuyentes era facilitar el cumplimiento tributario y previsional de los contribuyentes para simplificarles las dificultades administrativas y el alto costo que se origina como consecuencia del complejo sistema tributario que tenemos en la Argentina.

��������� Hoy vemos que la categor�a A y B est�n bajo el nivel de pobreza. Este es un tema que nos tiene que preocupar porque estamos viendo que el Estado -al no actualizar las bases- est� tratando de expulsar del sistema de monotributo al r�gimen general a muchos contribuyentes porque hace que sea imposible de cumplir. Es el mismo Estado el que est� fomentando la informalidad en el organismo fiscal.

��������� El monotributo es una herramienta de ascenso social. Si se convirti� en un instrumento de evasi�n es porque no se actualizan las escalas y no hay un Estado inteligente que haga un verdadero control y genere acciones que vayan en contra de la inequidad tributaria que hoy tenemos.

��������� Hay un tema que quiero dejar en claro. Este alivio fiscal est� condicionado en el art�culo 11, a par�metros de patrimonio neto, algo que no est� incluido dentro de la estructura del monotributo. El monotributo reemplaza el impuesto del IVA y el impuesto a las ganancias, no tiene en cuenta el patrimonio del contribuyente. En mi caso, estoy en contra de ese art�culo de incluir como condici�n del alivio fiscal del art�culo 11 inciso b). Pedimos tratarlo en particular para votarlo por la negativa.

��������� Por �ltimo, me voy a referir al art�culo 15 donde se destinan los fondos que son originados de esta cuota especial. Est� bien que se detienen a un fondo espec�fico, pero tambi�n se destinan a un fondo espec�fico los recursos generados por este r�gimen de plan de pago. Pero aqu� hay un tema y es que se lesiona el federalismo con las provincias. Esto se debe a que el monotributo se distribuye el 30 por ciento a las provincias y el 30 por ciento a la ANSES.

��������� Si hoy sancionamos que lo que se genera a trav�s de la recaudaci�n de este plan de pago se destine a un fondo espec�fico, estar�amos sac�ndole plata de coparticipaci�n a las provincias y tambi�n a los municipios. Por lo tanto, proponemos una modificaci�n al art�culo 15 del proyecto.

��������� En definitiva, este proyecto de ley que estamos tratando por el que se crea el Programa de Fortalecimiento y Alivio Fiscal para Peque�os Contribuyentes, no genera un alivio para los monotributistas porque posterga el debate profundo que debemos tener sobre este r�gimen. De esta manera, seguimos sometiendo a los monotributistas a la incertidumbre de siempre. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra la se�ora diputada Campagnoli, por Buenos Aires.

 

Sra. Campagnoli.- Se�or presidente: le agradezco por su defensa del proyecto y por el histrionismo que usted le puso. Me despert�, pude llenarme de aire y alegrarme un poco.

��������� Escuchaba al diputado Rodr�guez Saa y la verdad es que cuando no tienen argumentos para defender el presente se ponen a echarle culpas al pasado. Uno echa las culpas en campa�a, pero cuando uno decide gobernar es porque ya conoce los problemas que tiene una sociedad y decide resolverlos. Entonces, asume el gobierno para dar respuesta a esos problemas, no para seguir echando culpas al pasado.

��������� Pero bueno, mejor nos abocamos a lo que vinimos a tratar. Adhiero a lo que dijeron el diputado Laspina y el diputado Pastori con respecto a que este proyecto de ley no es un alivio para nadie, sino que viene a enmendar lo que ya hab�a corregido la ley 27.618 en abril cuando subsanamos lo que no se hab�a hecho en diciembre al no actualizar los montos de las cuotas del monotributo.

��������� Ven�amos bien porque all� le demostramos al contribuyente que quer�amos corregir -casi seis meses despu�s- lo que no se hab�a hecho en diciembre. Pero luego, en junio, la embarramos cuando reglamentamos la ley y le abrimos la puerta a la AFIP para que con la resoluci�n 5003 recategorizara y, de manera retroactiva, generara una deuda en los contribuyentes; inclusive, para aquellos que estaban al d�a.

��������� Todo esto nos tiene que interpelar como legisladores porque sabemos que hay dos principios. Uno, es la irretroactividad de las leyes. Nunca la ley puede generar consecuencias jur�dicas en acciones o situaciones que han sucedido con anterioridad. La otra, es la mora del Estado. Esto fue evidente porque se tendr�a que haber solucionado desde el Misterio Econom�a o con un decreto en diciembre del a�o pasado, pero todav�a lo estamos solucionando. Entonces, la mora del Estado nunca puede perjudicar al contribuyente y eso es lo que hemos estado haciendo durante todo este a�o.

��������� Si a estas recategorizaciones que generaron este conflicto y perjudican al contribuyente le sumamos que este martes nos anotician en los diarios que no se va a poder abrir la gesti�n que se tiene que hacer para recategorizarse en el mes de julio porque no estar�amos llegando, entonces, hoy, nuevamente tenemos que suspender y postergar esto porque las recategorizaciones tendr�an que haber sido entre el 1� y el 20 de Julio.

��������� �Qu� quiero decir con esto? Voy terminando porque todos hemos hablado, todos est�n cansados y no quiero abundar. La diputada �vila hablaba de un error, pero no estoy segura de que todo esto haya sido un error. Es tan frecuente el error que parece que hay funcionarios que se equivocan a prop�sito, y si pasa, pasa.

��������� Entonces, en un a�o tan dif�cil para los argentinos, donde el que no perdi� a un familiar, perdi� a un amigo o cerr� su comercio o perdi� el trabajo o tuvo que cerrar su empresa. Encima, nosotros, cuando se est� por sentar, le sacamos la silla.

��������� Creo que es importante que dejemos de improvisar y que podamos darle previsibilidad. No solamente no les estamos dando un alivio fiscal, sino que no lo estamos haciendo con previsibilidad para que el contribuyente pueda acomodarse a las nuevas normas con el tiempo suficiente, no llegando con el �ltimo aliento. Lo estamos sometiendo a demasiadas improvisaciones en lo sanitario, en lo migratorio, en lo pedag�gico y en lo fiscal. La sensaci�n que tiene la gente es que parecer�a ser que se est�n llevando puesto a un pueblo que ya no da m�s y est� pidiendo pista. Nada m�s, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Gracias por los comentarios positivos.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Leiva, por el Chaco.

 

Sr. Leiva.- Se�or presidente: en primer lugar, quiero sumarme a todo el pueblo de San Luis que pide por la aparici�n de Guadalupe. Aqu� todos estuvimos exhibiendo su fotograf�a y esperamos que pueda aparecer con vida, sana y salva.

��������� Por otra parte, se�or presidente, creo que tanto usted como todos los compa�eros de bloque que hicieron uso de la palabra con respecto a este proyecto fueron lo suficientemente claros en cuanto a los objetivos que perseguimos.

��������� Por lo tanto, me voy a permitir algunas reflexiones antes de volver a este tema principal. Durante esta sesi�n hemos homenajeado a quien fuera tres veces presidente de los argentinos, el general Juan Domingo Per�n. �l les dec�a a nuestros padres y abuelos, a los padres y abuelos de ustedes, que no es que nosotros seamos tan buenos, sino que en verdad los otros son peores.

��������� Creo eso tiene tanta vigencia que se prolonga a estos d�as. Porque si nosotros hoy estamos tratando de reconstruir el pa�s es porque efectivamente ustedes, que tienen tantas recetas para solucionar los problemas, han sido absolutamente peores en la historia reciente de la democracia Argentina.

��������� Por otra parte, tambi�n nos dec�a que la �nica verdad es la realidad, y esa realidad nos marca que cuando hablan de las vacunas y de la preocupaci�n por los chicos, les est�n mintiendo. Si realmente se hubiesen preocupado por el futuro de nuestros ni�os y j�venes, no hubieran quitado el programa Conectar Igualdad a los chicos, ni los remedios a sus abuelos, ni las pensiones a muchos discapacitados.

��������� Quiero traer a este recinto un refr�n que dice que el que calla, otorga. Toda la noche estuve esperando que alg�n diputado o diputada de Juntos por el Cambio planteara una moci�n de privilegio o hiciera un desagravio. Ellos deber�an dar alguna explicaci�n sobre las denuncias de los empleados de los diputados Jetter, Regidor y Asseff, que integran su mismo bloque.

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Leiva.- Siempre se enojan cuando uno les dice las cosas. �Por qu� no explican? �Por qu� no defienden a sus compa�eros de bancada? �Por qu� no aclaran la situaci�n?

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Leiva.- Ustedes siempre hacen lo mismo; ustedes siempre se ponen a gritar.

��������� Diputado Iglesias: no le tengo miedo. �Grite! �Salte! �Grite todas las veces que quiera porque no me voy a callar! (Aplausos.) ��No me intimida al apuntarme con el dedo! Simplemente deber�an explicar de qu� se trata.

��������� �Saben qu�? Entre los tres compa�eros de su bloque y los trabajadores, estoy del lado de los trabajadores. Eso tiene que quedarles claro. A ustedes les duele cuando uno les dice las cosas tienen que ser.

��������� Finalmente, respecto del proyecto que nos ocupa, nuestros compa�eros fueron excesivamente claros y suficientemente expl�citos.

��������� Lamentablemente en todas las sesiones tenemos que soportar a maleducados que se paran y gritan. Nosotros siempre los escuchamos y estamos para dar el debate. Sin embargo, ustedes vienen, hablan y se van. Adem�s, cuando no les gusta algo, vienen y empiezan a gritarnos.

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Leiva.- Se�or presidente: adelanto mi voto favorable a este proyecto y me pongo del lado de los trabajadores, que es donde deber�an estar ustedes. (Aplausos.)

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el se�or diputado Yasky, por Buenos Aires.

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Yasky.- Se�or presidente: venimos a reafirmar un proyecto de ley que responde a una l�gica que tiene que ver con revertir un proceso aplicado sistem�ticamente durante cuatro a�os con absoluta infalibilidad y que termin� con la depreciaci�n del 20 por ciento del poder adquisitivo de los asalariados del pa�s. Reitero que se perdieron 20 puntos en un plazo de cuatro a�os porque el gobierno aplic� una l�gica contrapuesta a la que queremos impulsar, consistente en transferir los ingresos de los que menos tienen a los que m�s tienen. Eso lo lograron a trav�s de los tarifazos ‑cuando el ministro de Energ�a era el due�o de Shell‑, de la banca Morgan, de los pasadores de dinero, de los �mesadineristas� y de los due�os de los grandes fondos depositados en los para�sos fiscales.

��������� Hoy estamos intentamos revertir esa situaci�n aplicando pol�ticas que se sintetizan en el compromiso asumido, ante los trabajadores y las trabajadoras, de que el salario gane a la inflaci�n. En las paritarias acordamos aumentos cercanos al 30, 33 y 35 por ciento. Sin embargo, en cuatro meses los formadores de precios y las corporaciones que forman parte de aquellos que cogobernaron con Mauricio Macri limpiaron esos avances en el salario de los trabajadores y los succionaron a trav�s de la remarcaci�n de los precios. As�, tuvimos que reabrir las paritarias y convocar al Consejo Nacional del Empleo, la Productividad y el Salario M�nimo, Vital y M�vil para que se ponga en marcha a fin de recomponer los salarios de los sectores estatales y privados.

��������� Asimismo, como se�alaba el diputado Casaretto, estamos manteniendo discusiones paritarias y los incrementos se ubicar�n entre el 43 y el 45 por ciento. A esto debemos sumarle el beneficio que surgir� del proyecto de ley que hoy votaremos, que se aplicar� a 4 millones de monotributistas, en su mayor�a cuentapropistas, que son los trabajadores y las trabajadoras m�s desamparados. Todo esto forma parte de la idea de aumentar el salario y de poner en movimiento el consumo interno para recuperar la tonicidad y el tiempo perdido en la econom�a, las pymes y el sector productivo nacional.

��������� Estamos considerando un proyecto absolutamente coherente que vislumbra el ideario de quienes estamos convencidos ‑desde el peronismo, las fuerzas de izquierda y el progresismo‑ de que no hay posibilidad de sostener un pa�s democr�tico gobernado por la l�gica implacable de favorecer siempre a los m�s ricos. Lleg� el momento de invertir esa l�gica; eso es lo que estamos haciendo mientras vivimos un momento dif�cil y una pandemia que pasar� a la historia como una tragedia de la humanidad. Quienes la miraban desde arriba del hombro, desde�osamente, quienes dec�an que no pasaba nada y que era apenas una gripecita, quienes dec�an que hab�a que sostener a la econom�a antes que a la vida, hoy se dan de narices frente a la realidad.

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Yasky.- Reivindicamos este proyecto, reivindicamos el gobierno popular y reivindicamos los derechos humanos.

��������� Tenemos el orgullo de haber participado ayer de una reuni�n del Parlamento europeo y de haber recibido el apoyo de todos los sindicatos de Europa. Adem�s, la UNESCO tuvo la iniciativa de declarar a la ex ESMA como patrimonio hist�rico de la humanidad. (Aplausos.) �Esto significa el reconocimiento del papel de la Argentina en la defensa de los derechos humanos y en la condena a los genocidas. Este es el proyecto que se contrapone al del gobierno de los ricos para los ricos que ustedes defendieron. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Son las 2 y 24 de la ma�ana.

��������� Informo a las se�oras diputadas y a los colegas diputados que quedan tres oradores de 5 minutos cada uno. En consecuencia, en 15 minutos procederemos a votar las �rdenes del d�a 419 y 420 en tratamiento.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Cacace, por San Luis, pero el se�or diputado Garc�a le solicita una interrupci�n, �se la concede?

 

Sr. Cacace.- S�, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Para una interrupci�n, tiene la palabra el se�or diputado Garc�a por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Garc�a.- Se�or presidente: pido una aclaraci�n. �Usted me puede decir cu�les son los proyectos que est�n en debate? Ya perd� el rumbo y pido que a trav�s de la Presidencia se aclare. Tengo entendido que son dos proyectos. Parte de la conducci�n de la Presidencia es marcar los temas en consideraci�n.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Se encuentran en consideraci�n las �rdenes del D�a n�meros 419 y 420, proyectos de monotributo y de ganancias.�

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Wolff, por Buenos Aires, por haber sido aludido.

 

Sr. Wolff.- Se�or presidente: no estaba presente en el recinto porque hab�a ido al toilette, pero fui aludido. El diputado Rodr�guez Sa� se refiri� a que en alg�n momento tuve un intercambio con una comunicadora. En aquel momento, aquella comunicadora hab�a llamado �rata� a un funcionario nuestro. Quiero decirle, por si no sab�a, que me toc� escuchar en primera persona lo que es el fascismo, y lo primero que hace es tratar de alima�a a la gente. No es casualidad que se nos llame a nosotros �gorilas�, �cucarachas�, �ratas�, pues es t�pico del fascismo. As� que lo que hice fue justamente describir lo que ocurri�. Cuando alguien se refiere a una persona llam�ndolo como una alima�a, est� a un paso de matarlo. Es lo que se hace en todos los totalitarismos. Ratifico mi convicci�n acerca de aquellos que tratan a las personas de alima�as, y ser�a bueno que lo tomen en consideraci�n para que no vuelvan a ocurrir las tragedias de los totalitarismos que muchos veneran como parte de la democracia �y que no lo son‑, para que no vuelvan a ocurrir. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Tiene la palabra el se�or diputado Cacace, por San Luis.

 

Sr. Cacace.- Se�or presidente: estamos discutiendo dos proyectos, el de monotributo y el de los incentivos fiscales a las inversiones en pesos, todo en medio de la discusi�n sobre los salarios y las jubilaciones.�

��������� Vale la pena hacer algunas reflexiones. Primero, en cuanto al monotributo, efectivamente estamos haciendo una correcci�n a una acci�n del gobierno. Algo que no se ha dicho es que el art�culo 16 de la ley de monotributo que aprob� el Congreso facultaba al Poder Ejecutivo a establecer las modalidades, formas y plazos de la implementaci�n de la ley, y dec�a que pod�a atender a las situaciones acaecidas entre el 1� de enero y el momento de la sanci�n. Es decir que la situaci�n desafortunada que se dio con el retroactivo fue entera decisi�n del Poder Ejecutivo y de la AFIP, quienes decidieron aplicar el aumento retroactivamente al 1� de enero, y con eso generar la deuda de los contribuyentes, por lo que ahora tenemos que estar resolviendo en el Congreso este mantenimiento del valor de la cuota mensual.�

��������� Es cierto, adem�s, que esto se produjo por la suspensi�n de la movilidad jubilatoria por parte del Ejecutivo, y con eso se perdi� referencia sobre el aumento de las cuotas del monotributo. Al discutir la ley, se estableci� el valor superior, que era el de la jubilaci�n m�nima.

��������� Lo escuchaba a usted, se�or presidente, cuando hac�a referencia a los salarios y jubilaciones. Vale la pena decir que en 2020 todas las jubilaciones perdieron entre 7 y 18 puntos respecto de lo que correspond�a por la ley, y ahora siguen perdiendo. Cuando los escucho hablar de los salarios y las jubilaciones, los salarios han perdido frente a la inflaci�n, y las jubilaciones a�n m�s. Para que no hagamos ret�rica con esto, leo simplemente un dato que public� la Oficina de Presupuesto del Congreso en su �ltimo informe de junio, sobre la ejecuci�n presupuestaria, en donde dice: �En lo que se refiere a gastos de jubilaciones y pensiones, se observ� una disminuci�n de 10 por ciento a�o a a�o, explicada fundamentalmente por la brecha entre la actualizaci�n de los haberes seg�n la f�rmula de movilidad y la tasa de inflaci�n, 29,4 por ciento a�o a a�o, versus 49 por ciento a�o a a�o.� Esos son los datos, para que no busquemos pintar otra realidad que no es.�

��������� En cuanto al proyecto de los incentivos a las inversiones en pesos, con el tema de ganancias y bienes personales, tampoco creamos que vayamos a cambiar la cultura de ahorro de los argentinos simplemente por una ley de ventaja fiscal. Falta una moneda en nuestro pa�s que sea confiable como reserva de valor, y eso es lo que lleva a los argentinos a tomar decisiones de ahorro en moneda extranjera, es decir en d�lares. Claramente, por estas exenciones no vamos modificar la conducta de ahorro de los argentinos, porque son insuficientes. De todos modos, hay algunos instrumentos como el caso de los plazos fijos en UVA, que han crecido 200 por ciento en el a�o, que aumentan b�sicamente porque la ciudadan�a busca preservar sus ahorros ante la inflaci�n. Ahora bien, se trata de ventajas fiscales, y por eso hemos decidido acompa�arlas.

��������� En cuanto a la cl�usula antielusi�n, celebramos que despu�s de la discusi�n que tuvimos en comisi�n se haya removido, porque si bien era bien intencionada, era de muy dif�cil aplicaci�n, no solo por el establecimiento del plazo y por tener que contar los d�as de tenencia en las cuentas, sino tambi�n porque hab�a que distinguir los conceptos de acuerdo con la condici�n del contribuyente, es decir, si era monotributista, responsable inscripto o trabajador en relaci�n de dependencia. Para declarar el impuesto ten�a que ver cu�nta plata ten�a en la cuenta, en concepto de qu� hab�a recibido el ingreso y, seg�n ese concepto, en qu� momento lo hab�a depositado y retirado. Realmente, era de muy dif�cil implementaci�n.�

��������� Creo que si nosotros realmente queremos preservar el poder adquisitivo del salario y de las jubilaciones ‑como dijeron varios de los diputados‑, tenemos que trabajar para tener una moneda, bajar la inflaci�n y preservar el poder adquisitivo. Eso requiere una pol�tica econ�mica mucho m�s fuerte, en lugar de solo establecer estas ventajas fiscales.

 

Sr. Presidente (Casaretto).- Solicito a los diputados y diputadas que se hagan presentes y se logueen.� Quedan dos oradores de cinco minutos, por lo que en diez minutos vamos a votar estos dos proyectos en tratamiento.�

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Selva, por Buenos Aires.

 

Sr. Selva.- Se�or presidente: estamos tratando una ley de alivio fiscal para peque�os contribuyentes, y esto hay que definirlo como un evento concreto. Tenemos una realidad que debe ser revertida. Se podr�n buscar mil razones, pero lo cierto es que mediante la iniciativa de algunos legisladores, y tambi�n ante el advenimiento de la decisi�n pol�tica de nuestro gobierno de corregir una situaci�n ‑y esto no hay que esconderlo‑, estamos tratando un proyecto que va a tener un efecto positivo en su resultado. Parece que se quiere menoscabar esto, buscando miles de razones y aristas para tratar de desvirtuar el objetivo central, que es favorecer nada m�s ni nada menos que a cuatro millones de peque�os contribuyentes monotributistas.

��������� En ese sentido, se�or presidente, las pautas establecidas son claras. Primero y principal, el hecho que se produjo fue abstracto, porque no se lleg� a concretar la exigencia de la deuda. Estamos retrotrayendo al mes de diciembre el valor sobre el cual se debe tributar, lo cual de por s� lic�a lo que se consideraba como deuda exigible.� Por lo tanto, es un hecho positivo de la ley.�

��������� En segundo lugar, se consideran las acreencias que el fisco tiene pr�cticamente con el 50 por ciento de los monotributistas. Dentro de la ley se crea un plan de facilidades de pago, para que esos contribuyentes puedan ponerse al d�a en un plazo de sesenta meses con una tasa del 2 por ciento mensual. O sea que tambi�n contribuye positivamente con el sector al cual est� orientada la ley.

��������� Pero es imposible hablar de esto si no nos referimos a algunas cuestiones que lamentablemente se han expresado en este recinto. Cuando se habla de improvisaci�n siempre se la considera como un hecho negativo. Improvisar puede ser un error, pero lo cierto es que cuando la improvisaci�n se corrige en sentido positivo estamos hablando de algo que claramente nuestro gobierno interpreta que es recuperar las posibilidades de nuestro mercado y reactivar la econom�a de nuestro pa�s.

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Honorable C�mara, doctor Sergio Tom�s Massa.

Sr. Selva.- Sin embargo, esto no solamente se ha dado con esta medida. Nuestro gobierno ha tomado un dec�logo de medidas para incentivar en esta crisis mundial -no solamente sanitaria sino econ�mica- a nuestro pa�s. Se han atendido a los sectores m�s desprotegidos. Eso lo ha hecho a trav�s de cuadros tarifarios y con la recomposici�n de los salarios, como mencion� un diputado de mi bloque. Esta situaci�n es la que estamos corrigiendo hoy.

��������� Entonces, cuando los hechos son positivos lo �nico que no podemos aceptar es que se quieran relativizar o menoscabar.� Hoy estamos dando un paso adelante con un objetivo central que es recuperar la econom�a. Pero la idea es recuperar la econom�a teniendo a la gente adentro. Ese es el concepto de nuestro gobierno. En ese sentido, vamos a seguir contribuyendo desde este Congreso a propiciar leyes y garantizando que el salario le gane a la inflaci�n. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Les pido a los se�ores y se�oras diputadas que se logueen.

��������� Le vamos a ceder el uso de la palabra al se�or diputado Sarghini quien no se hab�a podido conectar. Luego, contin�a en el uso de la palabra el se�or diputado Rauschenberger.

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Rauschenberger, por La Pampa.

 

Sr. Rauschenberger.- Se�or presidente: estamos tratando dos iniciativas que est�n �ntimamente relacionadas. Una de ellas persigue el alivio a un sector de los trabajadores; la otra busca la generaci�n de empleo a trav�s del fomento del ahorro en moneda nacional con destino a la inversi�n productiva.

��������� Con respecto al monotributo podemos se�alar que es una iniciativa que tiene por objeto aliviar y darle previsibilidad a la actividad econ�mica de los monotributistas. Por ello, en primer lugar, venimos a sostener el valor de las cuotas de diciembre del a�o pasado y, por el otro lado, intentamos dejar de lado esa retroactividad.

��������� El proyecto no se limita a la retroactividad, va mucho m�s all� porque es m�s amplio, integral y abarcativo. Estamos d�ndole respuesta a m�s de cuatro millones de argentinos y argentinas. Se trata de un proyecto que no tiene un objetivo fiscal ni recaudatorio porque el monotributo tiene una participaci�n muy baja en la recaudaci�n. Pero el principal objetivo de este proyecto es el de la inclusi�n. Es decir, la inclusi�n econ�mica y social, como lo ha venido haciendo nuestro gobierno desde que se ha producido esta pandemia, apoyando a aquellos que peor la est�n pasando.

��������� Concretamente, el proyecto tiene un aspecto central porque incorpora el concepto de progresividad de nuestra pol�tica fiscal que la venimos llevando adelante desde diciembre de 2019. Lo hicimos con la ley de solidaridad social, con el aporte solidario a las grandes fortunas y con ganancias a trabajadores, jubilados y empresas. Esa es una se�al clara que indica hacia d�nde va nuestro gobierno. Y ahora lo aplicamos al r�gimen del monotributo. Esto lleva alivio. Con el tema de que van a poder facturar m�s pagando lo mismo, otros van a pagar menos porque van a bajar de categor�a. Ese es el alivio y el fortalecimiento. Se trata de uno de los puntos que alivia todo el r�gimen de monotributo, pero en particular, el �nfasis est� puesto en las categor�as m�s bajas, es decir, la categor�a A y B. Dos de cada tres monotributistas en Argentina est�n en esas categor�as. Estamos legislando para todos, pero fundamentalmente para ellos.

��������� Profundizar la regresividad significa poner l�mites en cuanto a los par�metros de bienes e ingresos. Este planteo tuvo alg�n cuestionamiento. Todos sabemos que hay gente que tiene muchas propiedades, es monotributista y sus ingresos no se corresponden con esas propiedades. Por eso considero que el proyecto fue dispositivo en este sentido.

��������� Nosotros estamos tratando de poner al hombre en el centro de la escena pol�tica: lo que nos preocupa es el ser humano. Nos referimos a ese plomero, gasista, electricista o peque�o profesional. Esos hombres y mujeres que d�a a d�a la est�n peleando para salir adelante en esta pandemia. Nuestro gobierno los viene apoyando desde el primer momento con medidas para que puedan seguir estando insertos en el sistema de la formalidad.

��������� Asimismo, nos estaba faltando la pata fiscal en estas medidas. La ley 27.618 fue un paso, pero esto es mucho m�s abarcativo e integral pues apunta a la inclusi�n. �Qu� significa? Que ese monotributista pueda regularizar su situaci�n y poder tener acceso a una obra social y a una jubilaci�n. Eso es dignidad. La nueva escala en el r�gimen va a aportar recursos a la econom�a familiar y al consumo popular y esto va a ayudar a recuperar ese monotributo de la solidaridad y de la inclusi�n de la que estamos hablando.

��������� Algunos diputados quieren minimizar estos proyectos, tal como lo quisieron hacer con Ganancias a jubilados y trabajadores y con la segmentaci�n a las empresas. Nosotros vamos por el vaso medio lleno y no por el vaso medio vac�o.

��������� Para darle un ejemplo concreto, se�or presidente, con dos medidas nosotros hemos llegado a 5.300.000 millones de argentinos y argentinas. Con el proyecto de que dejen de pagar ganancias los trabajadores y jubilados con ingresos de hasta 150 mil pesos beneficiamos a 1.300.000 argentinos. Con este proyecto beneficiamos a cuatro millones de argentinos y argentinas.

��������� Esas son las medidas concretas que est� tomando nuestro gobierno con un claro sentido de justicia social.

��������� Se�or presidente: creo que no hay posibilidades reales de soberan�a econ�mica ni pol�tica si no tenemos soberan�a monetaria. Tampoco �sta sirve si tenemos una moneda de car�cter transaccional pero impotente como mecanismo de generaci�n de ahorro genuino. Por eso, el proyecto de incentivo tributario brinda herramientas para dinamizar el mercado financiero, el mercado de capitales a trav�s de dispositivos de ahorro, de inversi�n en moneda local. Inyectar recursos financieros al sistema es lo que ha venido haciendo nuestro gobierno para movilizar el aparato productivo que est� teniendo muestras concretas y signos evidentes de recuperaci�n. Esto nos permite un escenario m�s alentador para ver la salida de esta pandemia que est� en su pico m�s agudo pero que nos da un horizonte sumando el impulso al consumo a trav�s del fortalecimiento del ahorro e inversi�n.

��������� Estamos convencidos de que la pol�tica tributaria no agota sus objetivos con la obtenci�n de recursos ni persigue fines meramente fiscales. Sostenemos conceptualmente que toda pol�tica fiscal debe ser consistente con los objetivos de desarrollo y de distribuci�n de ingresos con el compromiso inalterable de defender el patrimonio nacional. Creo que estos proyectos avanzan en ese sentido. Por eso los vamos a votar favorablemente y les pedimos a nuestros pares que nos acompa�en con el voto positivo. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Quiero recordarles a los� diputados y diputadas que se votan por separado la Orden del D�a N� 420 y la Orden del D�a N� 419. Se van a votar en general y en particular, pero entiendo que los diputados Romero y Pastori desean formular algunas observaciones.

��������� Tiene la palabra el se�or diputado Romero, por C�rdoba.

 

Sr. Romero (V.H).- Se�or presidente: en l�nea con lo que expusimos en el debate, se propone en los art�culos 1� y 2� extender el sostenimiento de los valores mensuales. En vez de ser de seis meses -enero a junio de 2021- que sea de enero a diciembre de 2021. Entonces, el inciso a) del art�culo 1� deber�a decir: �El sostenimiento de los valores mensuales de las cuotas a ingresar -impuesto integrado y cotizaciones previsionales- del R�gimen Simplificado correspondientes a los meses de enero a diciembre de 2021 ambos inclusive, los cuales ser�n retrotra�dos a los vigentes para el mes de diciembre de 2020.�

��������� En el mismo sentido, ��� el art�culo 2�, dir�a as�: �Los valores mensuales de las cuotas a ingresar ‑impuesto integrado y cotizaciones previsionales, incluido obra social- del R�gimen Simplificado correspondientes a los meses de enero a diciembre de 2021��.

��������� Luego, dentro del t�tulo �Disposiciones comunes�, en l�nea con lo que expusimos, proponemos la eliminaci�n del inciso b) del art�culo 11. Como hab�amos dicho, entendemos que el patrimonio neto es un par�metro no contemplado en disposiciones generales en este r�gimen.

��������� En cuanto al art�culo 15, donde habla del producido de las cuotas especiales, que hace menci�n al art�culo 11 de la presente ley, y que lo define como fondos espec�ficos, tambi�n incluye: �y por el r�gimen de regularizaci�n de deudas para peque�os contribuyentes, previsto en el T�tulo V de esta norma�. Proponemos eliminar lo producido del r�gimen de regularizaci�n de deuda para peque�os contribuyentes porque entendemos que se est� haciendo una afectaci�n espec�fica de un recurso que es coparticipable a las provincias y a los municipios: 30 por ciento a las provincias, 70 por ciento a la ANSES. Por lo tanto �insisto‑, proponemos la eliminaci�n de esa frase en ese p�rrafo.

 

Sr. Presidente (Massa).- El art�culo 15, efectivamente, requiere mayor�a de 129 votos, pero entendemos que es una ley que tiene amplio consenso. �Usted est� planteando que quiere votar nominalmente el art�culo 15?

 

Sr. Romero (V.H.).- Los art�culos 11 y 15.

 

Sr. Presidente (Massa).- �Propone votar los art�culos 11 y 15 nominalmente en la votaci�n en particular?

 

Sr. Romero (V.H.).- S�, se�or presidente; y si se puede, tambi�n los art�culos 1� y 2�.

 

Sr. Presidente (Massa).- �En la votaci�n en particular propone votar en forma nominal los art�culo 1�, 2�, 11 y 15?

 

Sr. Romero (V.H.).- Vemos si el presidente de la comisi�n acepta los cambios en los art�culos 1� y 2�, y en funci�n de eso, decidimos c�mo votamos. Para los art�culos 11 y 15, estamos proponiendo votaci�n nominal.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Heller.

 

Sr. Heller.- Se�or presidente: no vamos a aceptar modificaciones. En mi intervenci�n, describ� los alcances de los proyectos, y los diputados y diputadas saben que hemos estado trabajando hasta alt�simas horas aceptando diversos cambios. Enviamos lo que para nosotros son los cambios aceptables, admisibles. Por lo tanto, no vamos a aceptar ning�n cambio fuera del texto que les hemos enviado entre las 21 y 22 horas, de los dos proyectos que se van a votar.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado V�ctor Romero, por C�rdoba.

 

Sr. Romero (V.H.).- Ante la postura del se�or presidente de la comisi�n de no aceptar modificaciones en los art�culos 1� y 2�, vamos a acompa�arlos porque, en definitiva, contemplar de enero a junio ya es un alivio para los monotributistas.

 

Sr. Presidente (Massa).- Entonces, acompa�a los art�culos 1� y 2�; no acompa�a los art�culos 11 y 15 y quiere votaci�n nominal.

 

Sr. Romero (V.H.).- Exactamente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Pastori, por Misiones.

 

Sr. Pastori.- Se�or presidente: mi propuesta no es un cambio en el texto difundido anoche, sino que lo que proponemos es un agregado de dos art�culos a continuaci�n del art�culo 15, que son netamente operativos y tienden a evitar dificultades que se van a plantear. Estamos en el mes de julio y hay dos vencimientos importantes. El 20 de julio vence el pago de la cuota de julio y tambi�n durante este mes, a partir de hoy deber�a estar� vigente el plazo para la recategorizaci�n del segundo semestre.

��������� Como estos plazos no se van a poder cumplir acabadamente, porque hasta que la ley se sancione en el Senado, se reglamente, se promulgue, la AFIP luego le d� el toque final, seguramente va a pasar la fecha del 20 de julio, o va a estar muy sobre la fecha, y esto originar� much�simas dificultades operativas a los monotributistas.

��������� Concretamente, la propuesta es la siguiente. Proponemos que se agregue un art�culo a continuaci�n del art�culo 15 que diga: �Disp�nese que la cuota mensual de los contribuyentes del r�gimen simplificado para peque�os contribuyentes correspondiente al mes de julio de 2021 tendr� vencimiento el d�a 5 de agosto de 2021, de la misma manera que lo dispuesto por la AFIP para las cuotas de los meses de enero a junio de 2021. La categorizaci�n prevista en el art�culo 9� del Anexo de la ley 24.977 y sus modificatorias, correspondiente al segundo semestre de 2021, se podr� efectuar hasta la fecha de vencimiento de la cuota correspondiente al mes de agosto de 2021.� Y el segundo art�culo agregado dir�a lo siguiente: �Fac�ltase a la AFIP a incrementar en hasta cuatro veces los valores actualmente vigentes respecto al par�metro �monto de alquileres devengados� del art�culo 8� del Anexo de la ley 24.977 y modificatorias, cuyos nuevos valores regir�n a partir del mes de julio de 2021.�

��������� Con estos dos art�culos solucionaremos muchos problemas operativos que inevitablemente se van a presentar si no se los corrige a tiempo. Esa es la propuesta que hacemos, y el presidente de la comisi�n dispondr� si la acepta.

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Heller.

 

Sr. Heller.- No vamos a aceptar esos agregados.

��������� Solo quiero hacer una aclaraci�n al diputado Pastori. Justamente, entre las cuestiones que hemos corregido e incluido en el texto, el art�culo 14 dice: �El Poder Ejecutivo Nacional, a trav�s de la Administraci�n Federal de Ingresos P�blicos, reglamentar� la presente ley dentro de los treinta (30) d�as corridos contados a partir de la entrada en vigencia de la misma y dictar� las normas complementarias, reglamentarias e interpretativas que resulten necesarias a los efectos de su aplicaci�n, quedando facultado -incluso- para establecer las modalidades, los plazos y las restantes condiciones que sean necesarios para implementar lo dispuesto en la presente ley.�

��������� Hemos agregado, justamente, �a trav�s de la Administraci�n Federal de Ingresos P�blicos� como parte del Poder Ejecutivo, a fin de acortar todos esos plazos que el diputado Pastori ha descripto, y adem�s le estamos dando la posibilidad a la AFIP de que, si no se llegara, pudiera extender los plazos correspondientes. Por lo tanto, no vamos a aceptar ning�n agregado.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se va a votar en general el dictamen de la Comisi�n de Presupuesto y Hacienda reca�do en el proyecto de ley por el que se crea el Programa de Fortalecimiento y Alivio Fiscal para Peque�os Contribuyentes, con las modificaciones introducidas por la comisi�n (Orden del D�a N� 420).

-   Mientras se practica la votaci�n:

Sr. Presidente (Massa).- Se va a tomar a viva voz el voto de aquellos se�ores diputados a los que el sistema no registr�.

��������� Se�ora diputada Aguirre, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Aguirre.- Afirmativo, presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Cama�o, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Ferreyra, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Ferreyra.- Afirmativo, presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vigo, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Yasky, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Yasky.- Afirmativo, presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia proceder� nuevamente a requerir el voto de los se�ores diputados y si no contestan los declarar� ausentes a la hora de votar.

������������������������������� Se�ora diputada Cama�o, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, la se�ora diputada Cama�o ser� considerada ausente en la votaci�n.

��������� Se�or diputado Martiarena, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, el se�or diputado Martiarena ser� considerado ausente en la votaci�n.

��������� Se�ora diputada Vigo, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Al no haberse expresado, la se�ora diputada Vigo ser� considerada ausente en la votaci�n.

��������� Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� cuenta del resultado.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- 233 afirmativos, ninguno negativo y 2 abstenciones.[8]

 

Sr. Presidente (Massa).- Resulta afirmativa. (Aplausos.)

��������� Si les parece bien, a los efectos de agilizar la votaci�n en particular, lo que haremos ser� votar los grupos de t�tulos de manera nominal, a excepci�n de los t�tulos I, II, III y IV, que corresponden a t�tulo y art�culo y en ellos estamos todos de acuerdo.

 

Sr. Presidente (Massa).- A continuaci�n, se proceder� a votar los art�culos 1� al 10 en una sola votaci�n.

��������� Se van a votar en particular el T�tulo I, art�culo 1�; T�tulo II, art�culo 2�; T�tulo III, art�culo 3�; T�tulo IV, art�culo 4�; T�tulo V, art�culos 5�, 6�, 7�, 8�, 9� y 10, de manera nominal.�

-   Mientras se practica la votaci�n:

Sr. Presidente (Massa).- Se va a tomar a viva voz el voto de aquellos se�ores diputados a los que el sistema no registr�.

��������� Se�ora diputada Aguirre, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Aguirre.- Afirmativo, presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Cama�o, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Cama�o.- Afirmativo.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Gioja, �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Gioja.- Afirmativo, presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena, �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes.

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-     Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-     Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-     Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�or diputado Yasky: �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sr. Yasky.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� cuenta del resultado.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Se han registrado 232 votos afirmativos, uno negativo y cuatro abstenciones.[9]

 

 

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra la se�ora diputada Morales, para hacer una aclaraci�n sobre el sentido de su voto.

 

Sra. Morales.- Voto por la afirmativa, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- La votaci�n ha resultado afirmativa.

��������� Se va a votar el art�culo 11, T�tulo VI, sin las modificaciones solicitadas por el se�or diputado Romero (V.H).

-   Mientras se practica la votaci�n:

Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia solicitar� el voto a los cuatro legisladores que no fueron registrados por el sistema.

��������� Se�ora diputada Aguirre: �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sra. Aguirre.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Diputado Martiarena: �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vigo: �puede indicar el sentido de su voto?

-     Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�or diputado Yacobitti: �puede expresar el sentido de su voto?

 

 

Sr. Yacobitti.- Mi voto es negativo, se�or presidente.

 

 

Sr. Presidente (Massa).- Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� cuenta del resultado de la votaci�n.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Se han registrado 132 votos afirmativos, 102 negativos y 3 abstenciones.[10]

 

Sr. Presidente (Massa).- La votaci�n ha resultado afirmativa.

��������� Se van a votar de manera conjunta los art�culos 12, 13 y 14 del T�tulo VI.

���������

-   Mientras se practica la votaci�n:

Sr. Presidente (Massa).- La Presidencia solicitar� el voto a los cuatro legisladores que no fueron registrados por el sistema.

��������� Se�ora diputada Aguirre: �puede expresar el sentido de su voto?

 

 

Sra. Aguirre.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Brawer: �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sra. Brawer.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-   -Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

��������� Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� cuenta del resultado.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Se han registrado 235 votos afirmativos, ninguno negativo y 2 abstenciones.[11]

 

Sr. Presidente (Massa).- Resulta afirmativa.

��������� Se va a votar el art�culo 15. Recuerdo a los se�ores diputados y a las se�oras diputadas que de acuerdo con el art�culo 75 inciso 3 de la Constituci�n Nacional, para la aprobaci�n de este art�culo se necesita la mayor�a absoluta de los miembros del cuerpo, es decir, 129 votos afirmativos.

-   Mientras se practica la votaci�n.

Sr. Presidente (Massa).- Se va a tomar a viva voz el voto de aquellos se�ores diputados a los que el sistema no registr�.

��������� Diputada Aguirre, �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sra. Aguirre.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputado Martiarena, �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�or diputado Torres: �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sr. Torres.- Mi voto es negativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

��������� Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� cuenta del resultado.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Se han registrado 133 votos afirmativos, 101 negativos y 3 abstenciones.[12]

 

Sr. Presidente (Massa).- Resulta afirmativa. (Aplausos.)

��������� Se van a votar los art�culos 16 y 17 del T�tulo VI.

-   Mientras se practica la votaci�n.

Sr. Presidente (Massa).- Tengo que tomar el voto a siete se�ores diputados a quienes el sistema no registr�.

��������� Se�ora diputada Aguirre: �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sra. Aguirre.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�ora diputada Oliveto: �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Oliveto.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�or diputado Ritondo: �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sr. Ritondo.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Schlotthauer: �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sra. Schlotthauer.- Me abstengo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Se�ora diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

��������� Se�or diputado Wolff: �puede indicar el sentido de su voto?

 

Sr. Wolff.- Mi voto es afirmativo, se�or presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� lectura del resultado.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Se han registrado 230 votos afirmativos, 1 negativo y 3 abstenciones.[13]

 

Sr. Presidente (Massa).- El art�culo 18 es de forma.

��������� Queda sancionado el proyecto de ley.[14]

��������� Se comunicar� al Honorable Senado. (Aplausos.)

��������� Se va a votar en general y en particular el dictamen de la Comisi�n de Presupuesto y Hacienda reca�do en el proyecto de ley por el cual se modifica la Ley de Impuesto a las Ganancias, texto ordenado en 2019 y sus modificaciones, y Ley de Impuesto sobre los Bienes Personales, texto ordenado en 1997 y sus modificaciones, con las modificaciones introducidas por la comisi�n y le�das por el miembro informante, Ley de Promoci�n de Beneficios de Ahorro en Pesos. (Orden del D�a N� 419).

��������� Diputado Laspina: habi�ndose eliminado el art�culo 3�, hacemos una sola votaci�n en general y en particular, sin ninguna observaci�n, �es correcto?

 

Sr. Laspina.- As� es, se�or presidente.

-   Mientras se practica la votaci�n nominal:

 

Sr. Presidente (Massa).- Quiero recordar a los se�ores diputados y diputadas que se est�n abrigando y aprontando que seg�n el orden del d�a, a continuaci�n hay quince cuestiones de privilegio solicitadas por los se�ores diputados y diputadas.

��������� Tengo que tomar el voto a siete se�ores diputados a quienes el sistema no registr�.

��������� Diputada Aguirre: �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sra. Aguirre.- Mi voto es afirmativo, presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputada Lehmann: �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputada Lehmann: �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

��������� Pido a los diputados y diputadas que cuando se retiran se desconecten.

��������� Se�or diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputado Martiarena: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Diputado Mestre: �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputado Mestre: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Diputado Pati�o: �puede expresar el sentido de su voto?

 

Sr. Pati�o.- Afirmativo, presidente.

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputado Torres: �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- Diputado Torres: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se lo considera ausente a la hora de votar.

��������� Diputada Vigo: �puede indicar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

Sr. Presidente (Massa).- Diputada Vigo: �puede expresar el sentido de su voto?

-   Luego de unos instantes:

 

Sr. Presidente (Massa).- No habi�ndose manifestado, se la considera ausente a la hora de votar.

���������

Sr. Presidente (Massa).- Se cierra la votaci�n. Por Secretar�a se dar� lectura del resultado.

 

Sr. Secretario (Cergnul).- Se han registrado 227 votos afirmativos, 3 negativos y ninguna abstenci�n.[15]

 

Sr. Presidente (Massa).- Queda sancionado el proyecto de ley.[16]

��������� Se comunicar� al Honorable Senado. (Aplausos.)

 

                                                                                                          - 11 -     

Cuesti�n de privilegio

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado

Heller, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Heller.- Se�or presidente: la verdad es que en mis tres mandatos como diputado nunca hice una cuesti�n de privilegio, pero en esta oportunidad siento la necesidad de plantearla.

��������� Es una cuesti�n de privilegio contra el diputado Enr�quez, porque entendiendo que ha procedido de una manera ofensiva y falaz respecto de un hecho que sucedi� en un plenario de comisiones. Est�bamos tratando un proyecto que ven�a en revisi�n del Senado para la conformaci�n de una comisi�n bicameral que hiciera el seguimiento del tema de la hidrov�a.

��������� Antes de empezar la reuni�n, mientras esper�bamos tener qu�rum se gener� un di�logo entre los diputados y diputadas que estaban presentes. El diputado Gioja tom� la iniciativa y me sugiri�, a ra�z de una iniciativa popular, festejar a las 16 y 9 el gol que Maradona le hizo a los ingleses treinta y cinco a�os atr�s.

��������� Yo le dije que me parec�a que al momento de las 16 y 9 se pod�a interrumpir un minuto, aplaudir �nosotros no nos vamos a poner a gritar- y seguir. Nadie se opuso, desde luego, no se vot� porque todav�a no ten�amos qu�rum y la reuni�n no estaba conformada.

��������� Comenz� la reuni�n, intervinieron los distintos oradores. Mis afirmaciones est�n totalmente documentadas, tengo los videos de todo lo que estoy diciendo y est�n a disposici�n de los se�ores diputados y diputadas, o de quienes tengan que analizar esta cuesti�n de privilegio que estoy planteando.

��������� A las 16 y 9, y unos segundos �estaba hablando el diputado Contigiani que me solicit� finalizar-, seg�n lo acordado, ped� que aplaudamos. Hubo un aplauso y continu� la reuni�n con absoluta normalidad.

��������� El diputado Enr�quez hizo uso de la palabra a las 16 y 50. Durante ocho minutos habl� de todo lo que se le ocurri�, de cosas que no ten�an nada que ver con lo que est�bamos tratando, pero hizo uso de la palabra y tiene derecho a hablar de lo que se le ocurra, aunque ‑repito‑ no ten�a nada que ver con lo que est�bamos hablando. Y a las 16 y 58 hizo la siguiente alusi�n: �soy futbolero de alma y tengo una enorme tristeza por lo que pas�, etc�tera.

��������� Yo no lo le hab�a dado mayor importancia, pero hace un par de d�as el diputado Enr�quez public� una nueva nota en Clar�n en la cual, no solo me agrede a m� sino que tambi�n lo agrede a usted, se�or presidente. Niega y dice que no es cierto que usted en la sesi�n anterior le hab�a se�alado que se retir� de la votaci�n para ver los �ltimos minutos de un partido de f�tbol y que, por consiguiente, no hab�a votado.

��������� Dice en esa nota del diario Clar�n que usted falsea la realidad porque �l, efectivamente, vot�. Es cierto, vot� porque usted le pidi� que vote en ese momento y tengo ac� la filmaci�n donde, incluso, pone una carita, se sonr�e y reconoce la situaci�n anormal.

��������� Segu� analizando, se�or presidente, y el diputado Enr�quez se comunic� con la reuni�n a trav�s del sistema Webex a las 16 y 13. Es decir, cuando ya hab�a pasado todo eso que luego critic�. Insisto que fue a las 16 y 9, �l no lo presenci�, no sufri� ninguna amargura, no le pas� absolutamente nada, es un invento total, y se logue� a las 16 y 38 para dar qu�rum.

��������� Es decir que el se�or diputado ha mentido, no estaba presente cuando sucedi� este hecho, no hubo ninguna oposici�n previa cuando informalmente lo consultamos y no le faltamos el respeto absolutamente a nadie. �l ha utilizado �falazmente- una cuesti�n para montar una provocaci�n y decir un mont�n de cosas.

��������� Por consiguiente, planteo esta cuesti�n de privilegio porque, sinceramente, entiendo que el diputado deber�a recibir una sanci�n por su conducta absolutamente irregular y falaz. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- La cuesti�n de privilegio planteada ser� girada a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Quiero recordar que las cuestiones de privilegio no se discuten, se�or diputado Enr�quez. Tan reglamentarista que es usted para algunas cuestiones...

 

                                                                                                          - 12 -     

CUESTION DE PRIVILEGIO

Sr. Presidente (Massa).- Para una cuesti�n de privilegio, tiene la palabra el se�or diputado Wolff, por Buenos Aires.

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Sr. Wolff.- Se�or presidente: esta cuesti�n de privilegio es para el procurador del Tesoro de la Naci�n, el se�or Carlos Zaninni.

��������� La cuesti�n de privilegio es una herramienta que tenemos los diputados cuando nos damos por aludidos. Habiendo tanto desequilibrio de poder por parte del procurador de la Naci�n, me hago cargo de sentirme aludido como ciudadano y representando a un grupo de ciudadanos de la Naci�n.

��������� Parece que al procurador de la Naci�n, Carlos Zannini, no le alcanz� con haberse robado la vacuna de uno de los 92.000 muertos que tenemos. (Aplausos.)

��������� Adem�s, fragu� la declaraci�n jurada en la que se autodenomin� personal de salud y pas� una raya que todav�a en la pol�tica argentina nadie se hab�a atrevido a superar.

��������� Los pol�ticos nos hacemos cargo del debate y hemos venido discutiendo respecto del atentado a la AMIA- DAIA, de la firma del memor�ndum con Ir�n, pero nunca nadie hab�a dicho algo tan perverso y tenebroso como lo que el Procurador de la Naci�n dijo a los familiares de las v�ctimas de la AMIA-DAIA: que le temen a la verdad.

��������� Creo que la sociedad argentina, todos, tenemos una deuda con la justicia y la verdad. Pero nunca nadie se hab�a atrevido a un comentario tan perverso: decir a quienes se les muri� un familiar que le temen a la verdad. Raz�n por la cual quiero dejar asentado el estupor de tantos familiares que no pueden creer una ofensa tan grande.

��������� La verdad es que pegar una bofetada a un familiar para tapar una posici�n payasesca como esta, pocas veces se hab�a visto en la Rep�blica Argentina.

��������� Esta cuesti�n de privilegio es para repudiar los dichos del se�or Zannini, que como dije antes, no le alcanz� con robarse una vacuna fraguando su declaraci�n jurada, sino que ahora tiene el in�dito r�cord de haberle faltado el respeto a los familiares de los deudos. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- La cuesti�n de privilegio planteada ser� girada a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales. (Aplausos.)

��������� El se�or diputado Menna, por Chubut, informa que retira la cuesti�n de privilegio que pensaba plantear.

 

                                                                                                          - 13 -     

CUESTI�N DE PRIVILEGIO

Sr. Presidente (Massa).- Tiene la palabra el se�or diputado Schlereth, por Neuqu�n.

 

Sr. Schlereth.- Se�or presidente: el diputado Enr�quez me est� solicitando una interrupci�n; se la concedo.

 

Sr. Presidente (Massa).- De acuerdo; sepa que le resta tiempo a usted, se�or diputado.

��������� Para una interrupci�n, tiene la palabra el se�or diputado Enr�quez, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Enr�quez.- Se�or presidente: tengo que recurrir a solicitar una interrupci�n para interponer una cuesti�n de privilegio contra el diputado Carlos Salom�n Heller porque me trat� de mentiroso. Y las pruebas demuestran claramente que no he incurrido en ninguna falacia. En cuanto a lo que �l dice que yo no vi, no lo vi por estar integrando la comisi�n, sino porque estaba viendo la reuni�n conjunta de las comisiones de Peticiones, Poderes y Reglamento y de Presupuesto y Hacienda por Diputados TV. O sea que claramente es una mentira de �l. Primera mentira.

��������� Como segunda mentira, dice que yo, el d�a en que usted efectivamente me hizo una broma, en el sentido de que le iba a pedir una cuesti�n de privilegio y la dej� de lado porque ya el tiempo hab�a pasado �al diputado Heller le encanta revolverse en estas cuestiones-, esa cuesti�n qued� zanjada en aquel momento porque demostr� claramente que yo estaba �vepeado� y que vot�. Era la votaci�n que se refer�a a un beneficio para los abnegados bomberos, y consta en el acta de la votaci�n que yo hab�a votado y que hab�a estado �vepeado�.

��������� Entonces, estas cuestiones que est� planteando �l me obligan a que yo, a su vez, le pida una cuesti�n de privilegio porque me ha tratado de mentiroso en reiteradas oportunidades.

��������� Dejo planteada de esta manera la cuesti�n de privilegio contra el diputado Carlos Salom�n Heller.

 

Sr. Presidente (Massa).- Lo dejo asentado y queda como orador 14 entre las cuestiones de privilegio.

��������� Contin�a en el uso de la palabra el se�or diputado Schlereth, que es el tercer orador de esa lista.

 

Sr. Schlereth.- Se�or presidente: quiero plantear esta cuesti�n de privilegio contra la secretaria Legal y T�cnica de la Presidencia, Vilma Ibarra, con motivo de la publicaci�n del denominado informe -o cuasi informe, no s� c�mo llamarlo- �La reacci�n conservadora�, al cual la doctora Ibarra adhiri� expl�citamente.

��������� En primer lugar, quiero se�alar la gravedad de este hecho. En un Estado democr�tico, en un Estado de derecho, con vigencia de las libertades individuales, libertad de pensamiento, libertad de conciencia, viniendo de un grupo financiado por organizaciones a nivel global y por sectores de un Estado o de un gobierno a cargo de un Estado, es muy grave. Indagar sobre v�nculos familiares, personales, laborales, profesionales, antecedentes de la participaci�n pol�tica, social, comunitaria, es grave.

��������� En segundo lugar, el car�cter de grave se transforma en muy grave, en grav�simo, cuando frente a semejante atrocidad, funcionarios del gobierno, y tambi�n legisladores de esta casa, expl�citamente dieron fe y acompa�aron los dichos de estas personas, que sin lugar a duda debemos interpretar como una adhesi�n de una parte importante del gobierno a lo que en este informe se ha expresado.

��������� Un grupo importante de diputados de esta casa hemos sido se�alados en esta �lista negra�, al mejor estilo y copiado de los procedimientos de los servicios de inteligencia de los reg�menes m�s autoritarios que hemos visto en la historia de las �ltimas d�cadas, de los �ltimos siglos.

��������� Tambi�n l�deres y referentes pol�ticos, l�deres sociales, profesionales, periodistas, organizaciones de la sociedad civil; tambi�n l�deres religiosos y -quiero mencionar- l�deres pertenecientes a la Iglesia Evang�lica, de la cual me siento parte, pastores, referentes -39-, m�s 35 organizaciones evang�licas de todo el pa�s, ACIERA, la Alianza Cristiana Evang�lica, a la que muchas veces se recurre para contener el estado calamitoso de parte de la poblaci�n; la Confederaci�n Bautista; instituciones educativas; Juventud Con Una Misi�n, y podr�a seguir el relato.

��������� Termino diciendo que todo esto tiene un hilo conductor: personas que pensamos distinto, muy distinto, claro, de lo que en este informe se manifiesta. Fuimos incluidas personas y organizaciones que, con total honestidad y convicci�n, hemos cometido el �delito�, parece, de decir lo que pensamos respecto al favor de la vida desde la concepci�n, de la libertad de pensamiento, de conciencia; a favor del respeto de la no intromisi�n del Estado en la vida de las personas ni en sus familias ni en la educaci�n de sus hijos.

��������� M�s all� de las acciones legales que ya est�n iniciadas, y de otras que en breve se iniciar�n, quiero decir enf�ticamente que repudio esta pr�ctica fascista. Advierto sobre el apoyo expl�cito de legisladores y funcionarios del gobierno nacional que han adherido a esta publicaci�n.

��������� Solicito a las autoridades de esta casa especial impulso y tratamiento de este tema en la comisi�n que corresponde y, para terminar, quiero ratificar y decir que a los casi 400 que hemos sido incluidos en este informe, este informe no nos asusta, no nos intimida, no nos har� retroceder. Seguiremos trabajando y construyendo la naci�n que creemos y so�amos, donde ni el Estado ni grupos financiados por sectores del Estado u organizaciones globales nos persigan.

��������� Creemos en la plena vigencia de la Constituci�n, el Estado de derecho, la libertad, la igualdad y los valores democr�ticos. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (Massa).- Al final, se termin� tomando el cr�dito del tiempo que le us� el diputado Enr�quez, a quien le aviso que tiene dos minutos menos en su intervenci�n.

 

                                                                                                          - 14 -     

CUESTI�N DE PRIVILEGIO

Sr. Presidente (Massa).- Para una cuesti�n de privilegio tiene la palabra el se�or diputado Quetglas, por Buenos Aires.

 

Sr. Quetglas.- Se�or presidente: vengo a plantear una cuesti�n de privilegio contra el diputado Giordano, nuestro colega, en virtud de expresiones que se han pronunciado en esta C�mara en la sesi�n del 20 de mayo, referidas a hechos ocurridos en Israel unas semanas antes.

-   Ocupa la Presidencia el se�or vicepresidente 1� de la Honorable C�mara, doctor Omar De Marchi.

 

Sr. Quetglas.- Voy a ser textual, se�or presidente. Se ha dicho que Israel es un Estado racista, usurpador, anexionista, que ha impuesto un apartheid; que Israel es un Estado genocida, y se ha rematado diciendo �nuestra propuesta no es la reaccionaria e inviable salida de los dos Estados; es imposible. Hay que terminar con el Estado sionista�.

��������� Son declaraciones alineadas con las que el 25 de octubre de 2005, en Teher�n, la principal autoridad civil iran�, Mahmud Ahmadineyad, formul� en el marco de una conferencia llamada �El mundo sin sionismo�, cuando dijo �Israel debe ser borrado del mapa�.

��������� Lamentablemente, la idea de terminar con Israel, que aparece como la versi�n contempor�nea de la idea m�s tradicional de terminar con los jud�os, no es novedosa ni creativa, y pone en el mismo lugar de la historia a inquisidores, zares, estalinistas, nazis y, por lo visto, tambi�n a expresiones de la izquierda argentina.

��������� No es mi rol, no me interesa ni me encuentro capacitado para ser yo aqu� quien tenga que defender al Estado de Israel, a sus pol�ticas de integraci�n ni a su rol en los m�ltiples conflictos cruzados que existen en Medio Oriente; entre otras cosas porque se trata de una democracia, imperfecta como todas las democracias, pero cuyas autoridades cuentan con el mismo tipo de legitimidad que tenemos nosotros aqu�, como ha quedado evidenciado en la constituci�n de un nuevo gobierno hace pocos d�as, plural y diverso al de su predecesor.

��������� En tanto democracia, ha tenido a lo largo del tiempo distintos posicionamientos que, con sus distorsiones, reflejan el parecer de la sociedad israel�.

��������� Pero no puede pasar desapercibido en la Argentina que las soluciones que puedan sugerirse desde una perspectiva humanista partan desde el desconocimiento de principios b�sicos que hacen a la cada vez m�s pac�fica convivencia global que buscamos.

��������� El art�culo 1 de la Carta de Derechos Pol�ticos de las Naciones Unidas dice: �Todos los pueblos tienen el derecho de libre determinaci�n�. Muchas veces se ha discutido el alcance de la palabra �pueblo� en ese texto, pero esa discusi�n nunca alcanz� este caso, trat�ndose de una identidad milenaria. Que se recuerde, nadie desconoce la identidad jud�a.

��������� En estos d�as, en Israel han ocurrido otras cosas. D�jeme que exponga dos historias -entre comillas- m�nimas.

��������� Hace algunas semanas, y pese a los esfuerzos de los m�dicos, falleci� un joven ciudadano jud�o, Yigal Iehoshua, quien fuera linchado por una turba �rabe en la ciudad de Lod. Su familia decidi� donar sus �rganos y estos fueron cedidos a una mujer �rabe de 58 a�os, que hace siete a�os esperaba en la lista de trasplantes. El trasplante fue realizado en el renombrado hospital Hadassa, intervenci�n que le salv� la vida cuando ya desesperaba.

��������� Paralelamente tenemos a Muhammed Kiwan, un joven �rabe de 17 a�os, quien fuera baleado por la polic�a israel� durante los disturbios.� Tambi�n en este caso los m�dicos lucharon denodadamente por salvarlo, pero finalmente debieron declarar su muerte cerebral. La familia decidi� donar sus �rganos, que salvaron la vida de seis pacientes en estado grav�simo, cinco jud�os y uno �rabe. El complejo trasplante m�ltiple fue realizado en el hospital Rambam.

��������� Desde ya, y como es norma, los familiares al donar los �rganos ignoraban a qui�nes les tocar�an.

��������� Es razonable que nos sensibilicemos frente al dolor de las v�ctimas de violencia, y es importante que no nos resulte ajena la tragedia humana. Pero renunciemos a las falsas simplificaciones.

��������� Eliminar una realidad nacional como Israel no pondr�a fin a ning�n conflicto, y solo atiende a una pulsi�n tribal y prejuiciosa que debemos superar si de verdad queremos ser una sociedad m�s justa. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- La cuesti�n de privilegio planteada ser� girada a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales.

 

                                                                                                          - 15 -     

cuesti�n de privilegio

Sr. Presidente (De Marchi).- Para una cuesti�n de privilegio, tiene la palabra el se�or diputado Ram�n, por Mendoza.

 

Sr. Ram�n.- Se�or presidente: planteo una cuesti�n de privilegio en contra del presidente del Banco Central de la Rep�blica Argentina.

��������� Ya en 2019 atraves�bamos un estado de emergencia, y se dict� la ley 27.541, de Solidaridad Social y Reactivaci�n Productiva, en el marco de la emergencia p�blica.� Ese es el nombre completo de la ley, seg�n la cual se dio una instrucci�n muy precisa al Banco Central y cuyo presidente deb�a ejecutar. Me refiero al tema relacionado con los cr�ditos UVA para la adquisici�n de un inmueble, un veh�culo -como planes de ahorro- o para un cr�dito personal.

��������� Hemos visto la convergencia del tremendo proceso inflacionario y tambi�n la baja de los ingresos de las familias que cayeron en la trampa de una publicidad enga�osa generada por el Estado argentino. Sin embargo, los bancos hoy han podido asegurar todas sus ganancias respecto de esos cr�ditos otorgados a personas que en general los hab�an contra�do para comprar su primera casa.

��������� A contramano de los argumentos de los que defienden los intereses de los bancos, esos inmuebles no fueron comprados para hacer un negocio, para mejorar su capacidad econ�mica, sino que fueron destinados a viviendas familiares, es decir, para cumplir el sue�o de vida de sus familias.

��������� Pasado el tiempo, en relaci�n con esto hicimos una propuesta al presidente del Banco Central en dos oportunidades. �l nos atendi� y se comprometi� a tratar el tema. Pero hoy en d�a, lo �nico que ha hecho es llamar a una mesa en la que no participaron ni los consumidores ni los usuarios de los cr�ditos UVA, sino que solamente lo hicieron los bancos.

��������� Planteo esta cuesti�n de privilegio porque creo que por esta imposici�n de la ley el Banco Central de la Rep�blica Argentina debi� tomar intervenci�n y establecer una soluci�n para estas miles de familias que fueron enga�adas por el Estado y con quienes los bancos hicieron un ping�e negocio, mientras que los usuarios de los cr�ditos UVA tuvieron una libertad limitada ante esta situaci�n. Por eso, la soluci�n que hab�amos propuesto era la del esfuerzo compartido.

��������� Hoy en d�a, miles de familias siguen con este problema, no lo pueden solucionar y ya est�n llegando banderas de remate en muchas casas en algunas provincias de nuestro pa�s, por parte del Banco de la Naci�n Argentina.

��������� Por otra parte, el sistema de la convergencia que resolvi� el presidente del Banco Central termina el pr�ximo mes, momento a partir del cual los bancos tendr�n libertad de iniciar las ejecuciones. Cr�anme que son miles las familias que est�n expuestas al rigor de una ejecuci�n hipotecaria de sus casas.

��������� Hay otro tema que tambi�n quiero marcar, que se debe a la inacci�n del presidente del Banco Central y sobre el cual le hemos hecho una denuncia.

��������� Hay una empresa, Mercado Libre, que est� utilizando la captaci�n del ahorro p�blico a trav�s de aplicaciones como Mercado Pago, que no tienen la autorizaci�n del Banco Central.

��������� Hemos hecho la denuncia correspondiente para que el Banco lo investigue, para que termine con esa pr�ctica de una empresa privada, que capta el ahorro p�blico y que no tiene la defensa de la ley de las entidades financieras para los ahorristas. Es un tema grave.

��������� Esta empresa no solo est� captando el ahorro p�blico de manera ilegal, sino que est� ofreciendo Mercado Cr�dito con esos dineros que capta del ahorro p�blico. Y el Banco Central de la Rep�blica Argentina, al d�a de hoy, habiendo sido puesto en conocimiento de esto para que act�e, haga las actuaciones administrativas y efect�e las compulsas penales, no ha hecho absolutamente nada.

��������� Si bien es cierto que tenemos que permitir que un unicornio como Mercado Libre se desarrolle, ya que debemos competir con los grandes mercados del mundo, tambi�n lo es que esto se debe hacer siempre en el marco de la legalidad. Debemos garantizar la protecci�n del inter�s econ�mico de los usuarios incautos que caen en la trampa de una empresa que, a trav�s de la red, est� captando el ahorro p�blico, est� utilizando los dineros de los ciudadanos comunes, lo est� prestando y no hay ni autorizaci�n del Banco Central ni ning�n tipo de control para la imposici�n de las condiciones que establece la empresa Mercado Libre, Mercado Pago y Mercado Cr�dito. Por lo tanto, esta cuesti�n de privilegio tiene que ser sustanciada en la C�mara.

��������� El presidente del Banco Central no solo debe dar las explicaciones del caso, sino que tiene que ejecutar y proteger el inter�s de los usuarios bancarios, que est�n totalmente librados a la suerte del abuso de estas empresas.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- La cuesti�n de privilegio planteada ser� girada a la comisi�n de Asuntos Constitucionales.

 

                                                                                                          - 16 -     

cuesti�n de privilegio

Sr. Presidente (De Marchi).- Para una cuesti�n de privilegio, tiene la palabra el se�or diputado Torres, por Chubut.

 

Sr. Torres.- Se�or presidente: la cuesti�n de privilegio que planteo se refiere a las declaraciones que hizo el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Naci�n hace algunos d�as, en relaci�n con algunos temas que a todos los chubutenses nos sensibilizan mucho, y tambi�n a nuestros vecinos rionegrinos.

��������� Creo que esto nos tiene que hacer tomar conciencia tambi�n a todos los argentinos porque, en definitiva, estamos hablando de una cuesti�n de soberan�a.

��������� Quiero referirme particularmente a la decisi�n ministerial de haber desistido de la querella para elevar a juicio a los responsables de haber tomado las tierras de un parque nacional en Villa Mascardi, supuestamente por consideraci�n del procurador del Tesoro, Zannini, quien le pidi� al ministro que apele a la responsabilidad y a la prudencia pol�tica, haciendo referencia claramente al posible costo pol�tico que esto podr�a implicar en un a�o electoral.

��������� La realidad es que el ministro Cabandi� estuvo hace pocos meses en la provincia de Chubut, y entre tantos anuncios pomposos, hablando de ejecuciones de millones de pesos que finalmente quedaron en la nada, una de esas promesas fue llevar hasta las �ltimas instancias judiciales para dar con los responsables de uno de los incendios m�s importantes que tuvimos en la provincia.

��������� Parad�jicamente, cuando el fiscal dio muestra de que uno de los principales responsables era el propio gobierno de la provincia del Chubut, el ministro Cabandi�, haciendo uso de la memoria selectiva y conveniente, decidi� nuevamente hacerse el distra�do, mirar para otro lado y avalar a esos delincuentes que, de hecho, ni siquiera reconocen al Estado argentino como propio. Y no hablo de los pueblos originarios, sino de algunos vivos que se hacen pasar por pueblos originarios para poder cometer estos delitos.

��������� No obstante, esta no es la cuesti�n que m�s nos ocupa o preocupa en este momento, sino uno de los tantos anuncios mentirosos que hizo el ministro Cabandi�, que tiene que ver con una supuesta reparaci�n hist�rica para m�s de sesenta y cinco mil familias brigadistas que le pusieron el cuerpo a los incendios y que arriesgaron sus vidas. Muchos de ellos, incluso, perdieron sus propias viviendas. Esa reparaci�n hist�rica contemplaba, entre otras cosas, una mejora salarial y un convenio colectivo espec�fico.

��������� Lamentablemente, pocos d�as despu�s de que se extingui� el fuego, de que la agenda nacional comenz� a pasar por otro lado y todos olvidaron que se hab�a producido un incendio en Chubut, esas sesenta y cinco mil familias se encontraron con que sus recibos de sueldo hab�an sufrido un ajuste superior al 30 por ciento. Hoy, solo les queda la angustia y la incertidumbre de no saber por qu� se los castig�.

��������� La �nica nota del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible en relaci�n con este asunto fue una justificaci�n, en la que sostiene que, cuando estaba bajo la �rbita del Ministerio de Seguridad, no ten�a un convenio espec�fico no remunerativo con ACARA, la Asociaci�n de Concesionarios de Automotores de la Rep�blica Argentina. Esto es muy extra�o, y nadie nos explic� qu� tienen que ver las concesionarias con los brigadistas.

��������� Lo cierto es que, hasta hoy, esas familias no recibieron ning�n tipo de respuesta. Por eso, exigimos nuevamente al ministro Cabandi� que d� la cara, que brinde respuestas, que explique a esas familias c�mo van a hacer para solucionar esta situaci�n.

��������� Lo mismo solicitamos al jefe de Gabinete de Ministros, que esperamos venga al Congreso la semana pr�xima para dar explicaciones concretas. Hasta el momento, todas las consultas que le hicimos en relaci�n con lo que ocurre en Chubut, provincia que atraviesa una de las crisis econ�micas e institucionales m�s grandes de su historia, no han sido respondidas. Parte de su trabajo es venir al recinto a dar la cara.

��������� Evidentemente, o no saben lo que est� pasando en Chubut o hay una decisi�n manifiesta del gobierno nacional de dar la espalda a los chubutenses.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- La cuesti�n planteada pasar� a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales.

 

                                                                                                                - 17 -          

cuesti�n de privilegio

Sr. Presidente (De Marchi).- Para una cuesti�n de privilegio, tiene la palabra la se�ora diputada Mart�nez, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sra. Mart�nez (D.).- Se�or presidente: quiero referirme a tres reclamos que est� llevando adelante la Agencia de Acceso a la Informaci�n P�blica ante el Ministerio de Salud, encabezado por la doctora Carla Vizzotti, a fin de que regularice el acceso a la informaci�n de los contratos que celebra la Rep�blica Argentina para la obtenci�n de las vacunas contra el COVID‑19.

��������� La situaci�n es la siguiente. El Ministerio de Salud viene denegando cierta informaci�n vinculada con esos contratos a ciudadanos particulares que han presentado pedidos de acceso. La Agencia, que justamente act�a como �rgano garante en el �mbito de la administraci�n p�blica central, ha decidido intervenir en favor de los solicitantes y pide al Ministerio de Salud que entregue dicha informaci�n.

��������� La Agencia de Acceso a la Informaci�n P�blica entiende que los art�culos 4� y 5� de la Ley de Vacunas Destinadas a Generar Inmunidad Adquirida contra el COVID‑19 ‑la 27.573, que nosotros sancionamos‑ facultan al Poder Ejecutivo nacional, a trav�s del Ministerio de Salud, a incluir cl�usulas o acuerdos de confidencialidad acordes al mercado internacional de vacunas contra esta enfermedad.

��������� No obstante, las prerrogativas de los mencionados art�culos no son absolutas. Por lo tanto, el Ministerio de Salud, ante un pedido de acceso a los contratos, no debe negar totalmente la informaci�n, sino que debe decir cu�l es el motivo que lo llev� a incluir cl�usulas de confidencialidad. En otras palabras, sobre qu� base estas fueron configuradas y de qu� tratan.

��������� Asimismo, debe exponer sus fundamentos respecto del da�o que producir�a entregar esa informaci�n y justificar que ese da�o es superior al inter�s p�blico afectado en la denegatoria al pedido de acceso.

��������� La inclusi�n de cl�usulas de confidencialidad no implica que la totalidad del convenio, contrato, convenio o adenda revista el mismo car�cter. Consecuentemente, el Ministerio de Salud, la Jefatura de Gabinete de Ministros o quien corresponda podr�a habilitar el acceso a esa informaci�n mediante la utilizaci�n del sistema de tachas, que justamente impide la lectura de las cl�usulas confidenciales pero, al mismo tiempo, permite verificar la existencia de dicha documentaci�n y datos tales como fecha, lugar, funcionario firmante, fecha de entrega, precios, etc�tera.

��������� Creo que este reclamo debe hacerse o�r en esta C�mara y llegar al Ministerio de Salud, a fin de que revise su posici�n respecto de estos pedidos de acceso a la informaci�n p�blica que tienen por objeto no solo conocer estos contratos, sino tambi�n otros datos que evidentemente el ministerio no est� brindando. Si observamos el ranking que elabora la propia Agencia de Acceso a la Informaci�n P�blica de las respuestas que brindan los diversos ministerios, veremos que el de Salud no est� entre los primeros puestos.

��������� He querido plantear esta cuesti�n de privilegio porque todos sabemos que estas situaciones acarrean consecuencias no deseadas, que afectan a la opini�n p�blica y a la sociedad toda, y terminan generando escenarios de incertidumbre que claramente podr�an evitarse.

��������� Hoy trascendi� que el gobierno, m�s all� de que en este recinto el oficialismo y sus aliados votaron en contra, modificar� por un decreto de necesidad y urgencia la ley de vacunas para que se puedan cerrar contratos con los laboratorios Pfizer, Moderna y Janssen. De esta manera, finalmente ni�os, ni�as y adolescentes con enfermedades de base podr�n acceder a la vacunaci�n contra el COVID‑19.

��������� Es una excelente noticia, pero debe estar acompa�ada por informaci�n que transparente esta gesti�n porque, en definitiva, eso es lo que genera confianza y previsibilidad.

��������� Por las razones expuestas, es muy importante que el Ministerio de Salud atienda a los reclamos de la Agencia de Acceso a la Informaci�n P�blica respecto de la publicidad de los contratos vinculados con estas vacunas. M�s datos y mayor transparencia es lo que, en definitiva, nos permitir� tener un Estado que funcione mejor.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- La cuesti�n planteada pasar� a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales.

 

                                                                                                                - 18 -          

cuesti�n de privilegio

Sr. Presidente (De Marchi).- Para una cuesti�n de privilegio, tiene la palabra el se�or diputado Giordano, por Buenos Aires.

 

Sr. Giordano.- Se�or presidente: como reci�n fui aludido, quisiera unos minutos...

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Las cuestiones de privilegio no se responden, se�or diputado. Por lo tanto, la Presidencia le pide que avance con la cuesti�n de privilegio que desea plantear.

 

Sr. Giordano.- �Aunque haya sido aludido no se responde? �C�mo no voy a hacerlo, se�or presidente?

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Le reitero que no se responde a las cuestiones de privilegio, se�or diputado. Por favor, conc�ntrese en aquella que quiere plantear.

 

Sr. Giordano.- Contesto de la siguiente manera al se�or diputado preopinante o a quien sea.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Pido nuevamente al se�or diputado que se limite a la cuesti�n de privilegio que quiere plantear. De lo contrario, no estar� actuando conforme al reglamento.

 

Sr. Giordano.- �Al pueblo palestino...!

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Cuando la cuesti�n planteada sea girada a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales, podr� responder. Pero no en esta oportunidad, se�or diputado.

 

Sr. Giordano.- �Al pueblo palestino no lo van a doblegar, pese a los bombardeos criminales del Estado sionista de Israel!

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Una vez m�s le pido que se concentre en la cuesti�n de privilegio, se�or diputado.

 

Sr. Giordano.- �A quienes defendemos fervorosamente la causa palestina, millones en el mundo, no nos har�n callar!

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Si no se limita a la cuesti�n de privilegio, no seguir� en el uso de la palabra.

 

Sr. Giordano.- �Como fui aludido tengo todo el derecho de hablar!

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Las cuestiones de privilegio no se contestan, se�or diputado. Le sugiero que lea el reglamento.

 

Sr. Giordano.- �Contesto con innumerables nombres...

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Le pido que se concentre en la cuesti�n de privilegio, se�or diputado. De lo contrario, no le conceder� el uso de la palabra.

 

Sr. Giordano.- ...prestigiosos que se han pronunciado en favor de una Palestina libre y repudian la campa�a difamatoria en mi contra!

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Si el se�or diputado no se refiere a la cuesti�n de privilegio que desea plantear, continuar� con la lista de oradores.

 

Sr. Giordano.- Claro que hablar� sobre la cuesti�n de privilegio.

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Es tarde, se�or diputado. Le pido que plantee concretamente su cuesti�n de privilegio.

 

Sr. Giordano.- �Claro que es tarde! Esta cuesti�n de privilegio quer�a plantearla en la sesi�n anterior; pero, cuando el Frente de Todos se pone de acuerdo con Juntos por el Cambio, gui�an el ojo y levantan las sesiones cuando quieren.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- En la reuni�n de la Comisi�n de Labor Parlamentaria, usted ‑no alguien por usted‑ consinti�...

 

Sr. Giordano.- No dialogue conmigo, se�or presidente.

��������� Planteo esta cuesti�n de privilegio contra el se�or presidente, Alberto Fern�ndez, y el gobierno nacional. �Quiere que le diga c�mo se titula?

 

Sr. Presidente (De Marchi).- �Quiere que dialoguemos?

 

Sr. Su�rez Lastra.- �Respeten a los que estamos ac� a las 4 de la ma�ana!

 

Sr. Giordano.- Me quedo hasta las 10 de la ma�ana, no tengo problema. Tienen que escuchar un poquito. �En defensa del pueblo palestino, no nos har�n callar!

-   Varios se�ores diputados hablan a la vez.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Pido al se�or diputado que se dirija a la Presidencia para plantear su cuesti�n de privilegio.

 

Sr. Giordano.- Me pregunto c�mo puede ser que, en plena pandemia de hambre y pobreza, la prioridad del gobierno y del se�or presidente, Alberto Fern�ndez, sea el pago de la deuda externa usuraria y fraudulenta.

��������� Como habr� le�do en los diarios, se�or presidente, el gobierno nacional le reconoci� y va a pagar al Club de Par�s 430 millones de d�lares, lo que equivale a 43 millones de vacunas considerando que el valor promedio de una vacuna es de 10 d�lares.

��������� Es decir que van a pagar al Club de Par�s, que lo integran Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania, Israel, Italia y Rusia, una deuda originada en plena dictadura militar, donde Alemania ser�a acreedor porque nos prest� plata para comprar armamento.

��������� Argentina paga al Club de Par�s, a China, a los bonistas, al Fondo Monetario Internacional y, adem�s, reconoce los 50.000 millones de d�lares contra�dos por Macri con el Fondo Monetario Internacional en 2018. Una plata que hasta el propio Fondo Monetario Internacional dice que no vino porque estaba prohibido que fuera para trabajo, salud, educaci�n, vivienda e infraestructura.

��������� Seg�n la Oficina de Presupuesto del Congreso, en enero se pagaron 370 millones de d�lares, en febrero 119 millones de d�lares, en marzo 399 millones de d�lares, en abril 419 millones de d�lares y en mayo 903 millones de d�lares.

��������� El 9 de julio, D�a de la Independencia, recibiremos al jefe de Gabinete y se har� el primer pago a los bonistas de 155 millones de d�lares.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- Le pido que redondee, se�or diputado, porque ya se cumpli� su tiempo.

 

Sr. Giordano.- Repudiamos estos pagos trayendo a colaci�n que diputadas, diputados, pol�ticos ligados al peronismo kirchnerista, V�ctor Hugo Morales, dirigentes sindicales como Hugo Yasky, actual diputado, Pablo Moyano o Daer, firmaron una proclama el 25 de mayo diciendo que la Argentina debe impulsar la suspensi�n de los pagos por capital e intereses con el FMI y el Club de Par�s mientras se extienda la emergencia sanitaria.

��������� Estamos completamente de acuerdo...

 

Sr. Presidente �(De Marchi).- Redondee, se�or diputado.

 

Sr. Giordano.- ...en que, aunque sea por lo que dure la pandemia, habr�a que suspender los pagos de la deuda externa.

��������� Lo que decimos frente a esos pronunciamientos es que hay que hacer algo, si no queda como el acostumbrado doble discurso. Es decir, un sector del gobierno dice una cosa y el otro, sigue haciendo otra.

��������� Si no se deja de pagar la deuda y no se repudia el pacto Macri-FMI no hay salida para el pueblo trabajador.

��������� La deuda es con los trabajadores y el pueblo, nunca es con los usureros.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- La cuesti�n planteada pasar� a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales.

 

                                                                                                          - 19 -     

CUESTI�N DE PRIVILEGIO

Sr. Presidente (De Marchi).- Para una cuesti�n de privilegio tiene la palabra el se�or diputado Buryaile, por Formosa.

 

Sr. Buryaile.- Se�or presidente: en primer lugar debo decir que en las sesiones acordadas lo que normalmente hay que hacer es respetar los acuerdos que se hacen en la Comisi�n de Labor Parlamentaria, y hoy no se han respetado. No los ha respetado el oficialismo ni muchos de nuestro bloque, y es una falta de respeto a los que estamos ac�.

��������� En segundo lugar, cuando se plantean cuestiones de privilegio lo que se expone es la afectaci�n al trabajo del legislador o al trabajo de la C�mara. Las cuestiones pol�ticas se resuelven con proyectos de declaraci�n o proyectos de resoluci�n. (Aplausos.)

��������� Por lo tanto, lo que tenemos que plantear ac� es lo que nos afecta como legisladores, de lo contrario se desvirt�a.

��������� Tampoco se puede tolerar que se hagan a esta hora las cuestiones de privilegio, porque eso quiere decir que no tiene importancia lo que les pasa a los legisladores.

��������� Por lo tanto, ya que usted est� en el uso de la presidencia, pido que se tome nota de esto y que los diputados tengamos la responsabilidad de plantear los temas que afectan a la labor parlamentaria. Si queremos hacer discursos pol�ticos, tenemos todo el tiempo del mundo para esas cuestiones.

��������� A continuaci�n, quiero plantear una cuesti�n de privilegio contra el gobierno de la provincia de Formosa. En mi fuero, como legislador, tengo limitada la posibilidad de trabajar.

��������� La provincia de Formosa no tiene transporte a�reo ni interurbano de pasajeros desde hace 16 meses. Los formose�os estamos aislados de la Argentina y del mundo desde hace 16 meses. Esto afecta severamente mi trabajo por la imposibilidad de concurrir, y tambi�n a 600.000 formose�os que integran la provincia. Nos afecta porque no podemos transitar ni trabajar.

��������� Presentamos un recurso de amparo en la Justicia juntamente con comerciantes y diputados provinciales porque esto afecta la actividad econ�mica ya que los camiones no ingresan, y los costos que produce en Formosa esta ausencia del transporte p�blico son elevados.

��������� El proyecto de declaraci�n que hemos presentado en esta C�mara es para que se interceda ante el ministro del Interior, el jefe de Gabinete de Ministros y el ministro de Transporte para que arbitren los medios necesarios para que los formose�os podamos transitar por la Argentina.

��������� Lamento profundamente que no est�n los diputados por Formosa presentes.

��������� �Sabe lo que le cuesta a un formose�o viajar en colectivo hasta la provincia de Formosa? Le cuesta 30.000 pesos. Tiene que salir de ac� y pagarse un colectivo de 8.000 pesos; luego tiene que tomarse un rem�s desde la ciudad de Resistencia o Corrientes hasta la frontera, que le cuesta 6.000 pesos; en la frontera debe pagar 5.000 por persona para ingresar a la provincia de Formosa. Ya estamos en 19.000 pesos. Despu�s tiene que pagar 6.000 pesos m�s para llegar hasta la ciudad de Formosa. Eso arroja un total de 25.000 pesos, pero a eso hay que sumar el hisopado para ingresar a la provincia de Formosa. El total es de 30.000 pesos.

��������� La Constituci�n Nacional nos cobija a todos los argentinos, diputados o ciudadanos. Por eso, espero que esta C�mara y quienes estamos ac� hagan algo.

��������� Es la �nica provincia en la Argentina que est� en esta situaci�n. No importa de qu� partido sea. Si yo estuviese del otro lado, har�a exactamente lo mismo.

��������� Lo que estamos sufriendo los formose�os por esta situaci�n es aberrante. No lo digo yo solamente, la alta comisionada de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, ha denunciado la flagrante violaci�n a los derechos humanos que afecta a mi provincia.

��������� Por lo tanto, se�or presidente, no me voy a tomar m�s tiempo y simplemente espero que este asunto sea tratado. (Aplausos.)

 

Sr. Presidente (De Marchi).- La cuesti�n planteada ser� girada a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales.

 

                                                                                                          - 20 -     

cuesti�n de privilegio

Sr. Presidente (De Marchi).- Para una cuesti�n de privilegio, tiene la palabra la se�ora diputada Schlotthauer.

 

Sra. Schlotthauer.- Se�or presidente: en primer lugar, como diputada y ferroviaria, vengo a manifestar que los ferroviarios consideramos como un agravio el anuncio del presidente y del ministro de Transporte de reestatizar los trenes de carga, algo que consideramos una verdadera estafa pol�tica y econ�mica.

��������� El colectivo laboral en el que yo trabajo, el cuerpo delegado del ferrocarril Sarmiento, junto con los ferroviarios se ha enfrentado a las privatizaciones del gobierno justicialista en 1994, que significaron la destrucci�n de una herramienta y una palanca de progreso durante d�cadas.

��������� En 2006 ha enfrentado tambi�n a un gobierno peronista que, cuando se venc�an las concesiones de empresas estafadoras, lejos de romper los contratos, la dupla De Vido-Jaime, volvi� a beneficiarlos con los mismos.

��������� Durante a�os estuvimos denunciando y presentando en este Congreso, en la CNRT, en la Justicia y en todos los ministerios las denuncias del vaciamiento que termin� con los muertos y los heridos de la tragedia de Once.

��������� Decir que estamos reestatizando los trenes con la resoluci�n 211 ‑que es parte de la aplicaci�n de la ley Randazzo‑, en realidad significa cargar en el Estado y los ciudadanos el costo de la destrucci�n que hicieron todos los estafadores que tambi�n se quedaron con las v�as, los trenes y el material rodante, y que esa resoluci�n implicar� una deuda de 5.000 millones de d�lares para lograr la puesta en valor de toda esa infraestructura. Mientras tanto, se van a mantener las concesiones de los grupos Techint, Roca y Pescarmona para que sigan con el saqueo, lo cual nos parece un agravio absoluto a la lucha que desde hace a�os estamos haciendo los ferroviarios.

��������� Recuperemos los ferrocarriles argentinos, hagamos una sola empresa de pasajeros y de carga para que el transporte de carga financie al de pasajeros. Dejemos de subsidiar los ferrocarriles, que sean nuevamente una palanca de progreso y dejen de ser hoy la log�stica del saqueo.

��������� De este modo, termino con lo que consideramos un repudio a los anuncios del gobierno y del ministerio.

 

Sr. Presidente (De Marchi).- La cuesti�n de privilegio planteada pasa a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales.

 

                                                                                                          - 21 -     

cuesti�n de privilegio

Sr. Presidente (De Marchi).- Para una cuesti�n de privilegio, tiene la palabra el se�or diputado Iglesias, por la Ciudad Aut�noma de Buenos Aires.

 

Sr. Iglesias.- Se�or presidente: la cuesti�n de privilegio es para un ausente, el presidente de esta C�mara ‑quien h�bilmente elude todas mis cuestiones de privilegio contra �l‑ por sus declaraciones del d�a 22 de junio.

��������� El presidente de esta C�mara dijo: �Me apena ver a la oposici�n pele�ndose por los cargos.� Sus declaraciones fueron antidemocr�ticas y ofensivas no solamente para m�, sino para toda la oposici�n, y son violatorias del rol que el presidente esta C�mara debe tener, que no es el de soldado de una parte, sino de equilibrio e imparcialidad.

��������� Le explico, se�or presidente, por v�a indirecta ‑usted luego le referir� al se�or diputado Massa‑, que las elecciones internas forman parte de las tradiciones pol�ticas de los partidos democr�ticos. Algunos no se acuerdan, porque en cierto partido, desde la �poca de Menem y Cafiero no hay internas, pero estas forman parte de la tradici�n de todos los partidos de todo el mundo. A nadie se le ocurre que, porque Biden y Bernie Sanders, en el Partido Dem�crata, o la SPD alemana sostienen internas, se est�n peleando por los cargos.

-   Ocupa la Presidencia el se�or presidente de la Honorable C�mara, doctor Sergio Tom�s Massa.

 

Sr. Iglesias.- Nosotros no aceptamos el verticalismo, nosotros no tenemos jefes y nosotros no confundimos la unidad con la unanimidad. Por eso, nos unen much�simas cosas y nos separan unas pocas. Vamos a ser nosotros, en la oposici�n, los que decidamos si vamos a tener internas o no, o si vamos a una lista de unidad, sin ninguna interferencia de nadie externo, mucho menos del presidente de la C�mara, quien deber�a preocuparse por otras cosas.

��������� Concretamente, le digo al diputado Massa que se dedique a lo suyo, que se dedique a su propia interna, a la interna entre los que iban a ir presos y los que los iban a meter presos. No se meta en nuestros asuntos ni venga a decirnos lo que tenemos que hacer. No se ponga a vetar a los diputados que le decimos las cosas en la cara, cuando podemos, porque no siempre est� ac�. Bueno, ahora veo que ha vuelto, me alegra que me pueda escuchar.

 

Sr. Presidente (Massa).- La cuesti�n de privilegio planteada pasa a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales.

��������� Se�or diputado Enr�quez: en primer lugar, le pido que le aclare al diputado Iglesias que lo estaba escuchando a usted y que por eso no lo escuch� a �l.

��������� En segundo lugar, la cuesti�n de privilegio que formul� va a ser girada a la Comisi�n de Asuntos Constitucionales. Entiendo que qued� planteada en el momento que usted hizo uso de la palabra.

 

Sr. Enr�quez.- As� es, se�or presidente. La ratifico en este momento y, conforme a lo que dijimos, qued� planteada en el momento que le ped� una interrupci�n al se�or diputado Schlereth.

 

Sr. Presidente (Massa).- Habi�ndose cumplido el objeto de la convocatoria, queda levantada la sesi�n especial.

-   Es la hora 4 y 28 del d�a 2.

 

 

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[1] V�ase el Acta N� 1 de la votaci�n nominal en el Ap�ndice (P�g.� ).0

[2] V�ase el Acta N�2 de votaci�n nominal en el Ap�ndice. (P�g.��� )

[3] V�ase el texto de la sanci�n en el Ap�ndice. (P�g.���� )

[4] V�ase el Acta N�3 de la votaci�n nominal en el Ap�ndice. (P�g.� �).

[5] V�ase el texto de la sanci�n en el Ap�ndice. (P�g.� )

[6] V�ase el Acta N�4 de la votaci�n nominal en el Ap�ndice. (P�g.��� ).

[7] V�ase el texto de la Sanci�n en el Ap�ndice. (P�g.��� )

[8] V�ase el Acta N�5 de la votaci�n nominal en el Ap�ndice (P�g.�� ).

[9] V�ase el Acta N�6 de la votaci�n nominal en el Ap�ndice (P�g.�� ).

[10] V�ase el Acta N�7 de la votaci�n nominal en el Ap�ndice (P�g.�� ).

[11] V�ase el Acta N�8 de la votaci�n nominal en el Ap�ndice (P�g.�� ).

[12] V�ase el Acta N�9 de la votaci�n nominal en el Ap�ndice (P�g.�� ).

[13] V�ase el Acta N�10 de votaci�n nominal en el Ap�ndice (P�g.� ).

[14] V�ase el texto de la sanci�n en el Ap�ndice (P�g.� ).

[15] V�ase el Acta N�11 de votaci�n nominal en el Ap�ndice (P�g.� ).

[16] V�ase el texto de la sanci�n en el Ap�ndice (P�g.� ).